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siempre en cuenta el contexto histórico de autor, es importante señalar que
las ideas de José Martí indudablemente van a estar relacionadas con una de las metas
mayores que Martí persiguió que fue revelar, sacudir y fundar una América
autónoma y libre. Dos de sus mayores ambiciones durante su vida fue lograr la
independencia de su país Cuba y de Puerto Rico.
Quizás lo que más ha incidido en el parco tratamiento del ideario pedagógico de
Martí es que de alguna manera el hombre de acción ocultó al hombre de
pensamiento, digo esto porque cuesta no dejarse llevar por el encanto de su perfil
humano y poético para penetrar lo meramente intelectual. Si vos le preguntas a
alguna persona si conoce a Jose Martí probablemente te digan el escritor de la niña
de guatemala o cultivo una rosa blanca pero su faceta intelectual es conocida por
pocos.
Bueno en lo que respecta a su implicancia con la educación lo primero a señalar es
que los temas de carácter pedagógico en sus obras fue una constante porque a su vez
estaban muy ligados con su manera de interpretar y ver el mundo. Contribuye en la
construcción de un cuerpo de principios educativos que conforman una plataforma
pedagógica para latinoamérica que sorprende por su vigencia y cientificidad.Para él
la educación servía para formar a los fuertes, honrados y cultos ciudadanos sin los
cuales no serían posibles y reales las repúblicas nuevas que él proyectaba a futuro en
América. Por ese motivo él reconoce en la educación un importantísimo valor para el
proceso de definición de la identidad latinoamericana
No descubro nada diciendo que José Martí, fue un hombre de vastísima cultura,
ávido lector de los clásicos y que le gustaba mantenerse al día de todo lo que se
debatía y se promovía en el mundo de su época, y este gusto por lo clásico lo llevó
también a sentir una importante admiración por Sócrates, y su método según el cual
la verdad se descubría en conjunto, evitando imponer a priori una conclusión. Para
martí “se debía enseñar conversando como Sócrates”. Dentro de los trabajos
pedagógicos escritos por él, se puede observar una crítica respecto a la enseñanza
memorística y a la metodología de conferencia predominante en las aulas de clase.
Para él ambas era en sí misma una irrespetuosidad para con la inteligencia de los
educandos, porque el mejor sistema de educación siempre habría de ser el que
prepara al niño para aprender por sí
Además de Socrátes, Martí se vio influenciado por otro gran número de personas,
algunos incluso coetáneos a él que establecieron una tradición respecto a sus ideales
en relación al tema de la educación. En primer lugar Félix Varela considerado el
primer ideólogo independentista de Cuba. De él nace la idea de combatir desde su
propia cátedra esa filosofía imperante en la educación Cubana del momento: que era
en sí misma una filosofía dogmática y de verdades indiscutidas provenientes en su
mayoría de la misma iglesia. Además, estableció en sus cátedras esa forma dialogada
de exposición, y también la libertad de discutir los conceptos sin obligarse a
sustentarlos por la autoridad de quien los inventó, animando a sus alumnos a formar
sus propias ideas mediante la observación. Y así siguiendo esa tradición ideológica
por así decirle, surgieron otros maestros como lo fueron José de la Lus Caballero,
luego Rafaél María de Mendive, hasta llegar a Jose Martí. Todos estos maestros
cubanos intentaron forjar en las aulas una generación liberadora. De esta tradición
de maestro, Martí recibe esa ética propuesta la cual tiene como centro mismo la
misión del maestro en el aula
Pero una particularidad de Martí es que él creía la educación había de estar
encaminada a la liberación de todos los seres humano (a diferencia de lo que va a ser
Sarmiento acá en Argentina) ; porque para él la liberación no se daba por medio de la
destrucción ni la exterminación de ciertos grupos sociales sino que habría de
fundamentarse en el conocimiento y en la revalorización de la cultura y propios
valores latinoamericanos, y en manera alguna podrá ser privilegio exclusivo de una
clase. Además él claramente se proclamaba en contra la imitación servil, es decir de
la imitación de paradigmas eurocéntricos por ejemplo, aunque sin rechazar lo que de
positivo pudiera venir del mundo más desarrollado a insertarse en nuestras
repúblicas. Martí, realmente, es un pensador de y para América. No quiere decir que
no se nutra de la cultura acumulada; muy por el contrario, no la desconoce; pero sabe
asimilar lo que considera bueno y aplicable para Nuestra América; desechar lo malo
o ajeno a las particularidades de los pueblos jóvenes de América Latina; y quiere
contribuir de manera destacada a la conformación, a partir de lo autóctono, de
corrientes de pensamiento y modelos de desarrollo propios.
Él era muy consciente de la dimensión social del fenómeno y del proceso educativo.
Para él la educación, como lo va a ser para la democracia liberal de América Latina
en la segunda mitad del siglo XX, la educación debía necesariamente ser un
fenómeno popular. En la educación popular estaba a su juicio la clave del progreso
de los pueblos americanos. Ahora bien, la educación popular no quiere decir
exclusivamente educación de la clase pobre, sino que todas las clases de la Nación. A
groso modo esa educación popular era, el único medio para llegar a la democracia,
porque tal y como él dice y cito “un hombre ignorante está en camino de ser bestia y
un hombre instruido en la ciencia y la conciencia está en camino de ser Dios, y no
hay que dudar entre un pueblo de dioses y un pueblo de bestias”
Es más, Él esbozó toda una política educativa para mejorar su país, pero esa política
no pasó de ser un pensamiento o ideal soñado por un desterrado que no alcanzó a
integrar nunca el gobierno de su país. En su concepción de la política educativa, daba
preponderancia a los principios de “educación nacional”, “libertad de enseñanza” y
“enseñanza obligatoria”.
Por otra parte, al igual que Simón Rodríguez para hacer una relación con temas
anteriores, Martí fija sus ojos en la masa humilde y marginada. El va a cuestionar
duramente la escala social basada en la riqueza y llegará a considerar que la felicidad
del pueblo estaría en relación directa con los valores propios de una justicia social
sumado al desarrollo de un pensamiento científico. Al igual que Rodrígues abogó por
la extensión de la noble tarea de enseñar y educar, exaltando el papel fundamental de
los maestros.
Va distinguir entre educación e instrucción refiriendo la primera al sentimiento, y la
segunda al pensamiento, reconociendo que no hay buena educación sin instrucción,
puesto que en palabras de Martí “las cualidades morales suben de precio cuando
están realizadas por cualidades inteligentes” (I, 853). Y por esta razón otra conexión
entre las ideas pedagógicas de Rodríguez y Martí, a mi entender muy importante, es
en lo relativo al papel del trabajo en la educación de los niños y como mencionaba
antes el papel fundamental del maestro formado.
Martí concebía la educación como un acto de amor. Para él, el acto pedagógico era
una relación concreta de seres humanos alimentada por el amor. Más concretamente
todavía, la educación es una constante creación y el agente principal de esa creación
es, para Martí, el maestro..
Algunas definiciones de educación de Martí fueron las siguientes:
“ La educación tiene un deber ineludible para con el hombre (...) conformarle a su
tiempo sin desviarle de la grande y final tendencia humana”
“Educar es depositar en el hombre toda la obra humana que le ha antecedido; es
hacer a cada hombre resumen del mundo viviente (...) ponerlo al nivel de su tiempo
(...) prepararlo para la vida”.
En estas definiciones se encuentran dos ideas centrales de la concepción pedagógica
de Martí: la educación es “preparación del hombre para la vida”, sin descuidar su
espiritualidad y es la “conformación del hombre a su tiempo”, pudiendo interpretarse
que la educación representa para el individuo la conquista de su autonomía, su
naturalidad y su espiritualidad. La conciencia histórica siempre está proyectada
sobre toda su concepción pedagógica porque él entiende que cada tiempo exige
instituciones y formas educativas que le sean adecuadas, y esto ha de escribirlo claro
con respecto a la educación superior: “Al mundo nuevo, corresponde la universidad
nueva”
Por otra parte en cuanto a la Educación relacionada al desarrollo infantil el sostenía
que la educación no debía perturbar el desarrollo del niño y que las escuelas debían
ser “casas de razón” donde con una guía juiciosa se habituara al niño a desplegar su
propio pensamiento. Acá aparece el principio de la individualidad como factor
esencial de la educación y de su pensamiento pedagógico ya que él consideraba que
“el estudio es el carril, pero el carácter, la individualidad del niño es la máquina”.
Por ello formula un concepto de autoeducación. educación como crecimiento desde
el interior del ser humano que inicia con la vida y acaba con la muerte
.Por útlimo me gustaría mencionar la importancia que martí como hombre de letras
va a otorgarle a la educación científica. Según su opinión la educación científica era
la Vía para el desarrollo de la inteligencia, y un instrumento de autonomía individual
y pilar del progreso de los pueblos. Abogaba por una educación Distinta a la
educación “clásica” (es decir una educación que no es meramente en lo formal o
retórica) sino que se apoya en el estudio de la naturaleza y la ecperimentación. Y esto
porque según Marí al estudiar las fuerzas de la naturaleza y aprender a manejarlas se
podían resolver los problemas sociales. Para acceder a la naturaleza el camino era la
ciencia.
Esto no quiere decir que Martí renegara del “humanismo clásico”, pero sí es cierto
que no quería para américa solo retóricos, sino hombres capaces de sacarle a la tierra
la felicidad de sus pueblos, hombres útiles. Incluso se empecinaba en que se
establezcan Escuelas de Agricultura directamente en los campos; o que cada escuela
tuviera como anexo un taller. Sostiene firmemente el valor educativo del trabajo
manual así como también el de laeducación física. Y un dato no menor y con esto
cierro el aspiró tambien a elevar el rango de la mujer en la sociedad por medio de la
educación