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Médula espinal
Y meninges

MEDULA ESPINAL Por atrás, a todo lo largo de la médula, se ob-


serva un surco poco profundo, el suzco medio
La médula espinal, con longitud promedio de posterior, por fuera del cual penetran los fila-
45 cm, se extiende del agujero occipital, donde mentos de las raíces posteriores a intervalos
se continúa con el bulbo raquideo, a la parte su- regulares (fig. 50-1). Un número variable de pe-
perior de ja región lumbar. Termina habitual- queñas arterias y venas, derivadas de los vasos
mente al nivel del disco entre L-1 y L-2, pero espinales y medulares posteriores, se en-
varía del disco entre D-12 y L-1 al que hay entre cuentran en la cara posterior de la médula.
L-2 y L-3.! Por debajo de este nivel, el conduc- Por delante, también a todo lo largo, la mé-
to raquideo está ocupado por las meninges y las dula presenta el surco medio anterior, ocupado
raíces de los nervios raquídeos. Un delgado cor- por la arteria y las pequeñas venas espinales an-
dón fibroso y brillante, el fihim terminale, con- teriores. Los filamentos de las ralces anteriores
tinúa de la médula espinal hacia abajo como parten de la cara anteroexterna de la médula a
una prolongación de la plamadre. Se fusiona intervalos regulares. Los surcos de la médula
con la duramadre en el vértice del saco dural y espinal se continúan hacia arriba con los corres-
se continúa con ella como filum de la dura- pondientes del bulbo raquídeo.
madre, El filum terminale mide alrededor de 15 La porción de médula espinal con relación a
a 20 cm de largo. El conducto ependimario o un par de raíces posteriores y uno de raíces an-
central continúa dentro de él en una distancia teriores recibe el nombre de segmento medular
variable. El filum terminale deriva de la por- o mielómera (fig. 50-2). Cada raíz posterior
ción de médula espinal caudal al segundo seg- presenta un abultamiento ovoide, el ganglio
mento coccigeo (3lo, segmento) en el embrión. raquídeo (ganglio espinal), situado en el aguje-
Esta porción involuciona y sólo deja un cordón ro de conjunción o cerca de él. Distal al gan-
fibroso.? Posteriormente, el crecimiento dife- glio, cada raíz posterior se une con la co-
rencial hace que la médula termine a un nivel rrespondiente raíz anterior para formar un
cada vez más alto. El nivel adulto se alcanza nervio raquídeo. El primer par de nervios
unos dos meses después del nacimiento.? raquídeos emerge entre el atlas y el cráneo, y los
La médula espinal es casi cilíndrica, pero está restantes nervios cervicales, excepto el octavo,
ligeramente aplanada en sentido anteroposte- abandonan el conducto raquídeo por arriba de
rior. Presenta un abultamiento cervical y otro las vértebras que les corresponden uumérica-
lumbar al nivel del origen de los nervios para mente. El octavo emerge por abajo de la sépti-
los miembros. El extremo inferior de la médula ma vértebra cervical. De aquí en adelante, los
presenta forma cónica y se llama cono medular, nervios salen por debajo de las vértebras que les
desde cuyo vértice desciende el filum terminale. corresponden en número, y por tanto hay 31
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Cap. 50. MEDULA ESPINAL Y MENINGES 627

Rajz posterior
Las raicillas que se originan en la cara lateral
do C-2 | de la porción superior de la médula cervical (a
la mitad de la distancia entre las raíces ante-
Duramadre

y riores y posteriores) forman la raiz medular del
nervio espina]. Estas raicillas ascienden a través
j del agujero occipital y se unen a las que se origi-
ul
nan en el bulbo raguídeo para formar el men-
Pedículo SH
Z cionado nervio.
y Estructura. La médula espinal tiene en esen-
Ligamento dentado cia la misma disposición en toda su extensión.
Disco y La sustancia gris, que presenta la forma de una
intervertebral 2) letra H, se modifica localmente en función de
Al las diferencias en el número y tipo de las neuro-
nas que contiene. Estas son más numerosas en
Norvlo raquideo L-S los abultamientos cervical y lumbar, ya que es-
tas regiones inervan a Jos miembros. De manera
Raíz posterior
de D-1 semejante, la sustancia blanca varía, aunque
poco, en su disposición a lo largo de la médula,
SRL Alalz posterior de D-2 y se encuentra contenida en tres cordones a ca-
da lado (fig. 50-3). El conducto ependimario o
central se continúa hacia arriba con el del bulbo
raquídeo, y por lo tanto con el cuarto ventrículo.
Por abajo se encuentra con frecuencia algo dila-
tado (ventrículo terminal), inmediatamente antes
de terminar en punta en el filum terminale, En
los niños, el conducto ependimario se encuentra
con frecuencia bifurcado en la porción caudal de
Fig. 50-1. A, Raices posteriores de las porciones cervical la médula.* En el adulto, el conducto está a me-
y dorsal superior de la-médula espinal. Los filamentos son nudo obliterado a diversos niveles por la prolife-
más numerosos en las raíces cervicales inferiores que en las ración de las células que lo tapizan.
cervicales superiores O las dorsales superiores. B, Cauda
Riego sanguíneo (figs. 50-2 y 50-4). El dispo-
equina después de quitar los arcos vertebrales. Obsérvese
cómo los nervios lumbares siguen un trayecto cercano a los sitivo para el riego de la médula está formado
pedículos, por arriba de los discos intervertebrales. (Modi- por tres arterias longitudinales que se extienden
ficado de Movelacque.) del buibo raquídeo al cono medular, una en po-
sición media anterior y las otras dos en posición
posterolateral, todas ellas reforzadas por ramas
de las arterias segmentarias,*
pares de nervios raquídeos: 8 cervicales, 12 dor- La anterior se denomina arteria espinal ante-
sales, 5 lumbares sacros, y por lo general no rior, y se forma por la unión de ramas de las
más de un coccígeo. dos arterias vertebrales. En su trayecto por el
Debido a la discrepancia entre los niveles de surco medio anterior es reforzada por las arte-
tos segmentos medulares y los de sus correspon- rias medulares. Esta arteria da ramas centrales
dientes vértebras, los nervios raquídeos infe- que se introducen en el surco y riegan aproxi-
riores se hacen cada vez más inferiores (figs. madamente las dos quintas partes anteriores de
50-5 y 50-7), Por ello, como el segmento medu- la médula.
tar S-1 está frente a la vértebra D-12, las raíces Las dos arterias espinales posteriores, ramas
del nervio S-1 deben descender en trayecto casi de las arterias vertebrales o de las cerebelosas
vertical para que las ramas del mismo puedan posteroinferiores, forman por lo regular con-
salir por los primeros agujeros sacros. ductos plexiformes en la piamadre de ambos la-
El término cauda equina se refiere al conjun- dos.£ Estos conductos son reforzados por las
to de raíces raquídeas que descienden de la por- arterias medulares.
ción inferior de la médula espinal (por debajo El riego segmentario de refuerzo para la mé-
de L-1) y ocupan el conducto raquideo por aba- dula espinal es proporcionado por las arterias
jo de la médula (figs. 50-1, B y 50-7), El término medulares, derivadas principalmente de Jas ra-
se origina en la semejanza de este conjunto de mas espinales de las arterias cervical ascenden-
raices con una cola de caballo. te, cervical profunda vertebral, intercostales
628 DORSO

Raíz posterior-

XI /
Ganglio raquídeo —.
Ramas
anterior
y posterior

Ramas
comunicantes |
Raíz anterior
Arterias espinales
posteriores
Nervio Segmento medular
espinal Ramas
radiculares
Á CN

Ganatio -
y tronco
simpáticas ]
Arteria espinal antarior

Fig. 50-2, Esquerna de un segmento medular con uno de los dos nervios raquídeos relacionados con él.
En 4: A, surco medio anterior; P, surco media posterior. Bilustra el riego arterial de la médula,

posteriores y sacras laterales. Estas arterias me- ascendentes. Además, los distintos niveles de la
dulares se encuentran sobre todo donde la nece- médula tienen funciones diferentes, más o menos
sidad de riego sanguineo es maycr, esto es, en especificas. Por ejemplo, los abultamientos cerv-
los abultamientos, que separan las tres princi- cal y lumbar contienen las neuronas que inervan
pales zonas funcionales: de C-3 a D-1, de D-2 a los miembros.
D-12 y de L-1 a S-5.? Hay en promedio ocho ra- Forman la raíz medular del nervio espinal
mas alimentadoras anteriores y doce poste- fibras nerviosas especiales que se originan en la
riores. Una de las anteriores, particularmente porción cervical de la médula espinal. En esta
grande, la artería radicular anterior magna, se porción de la médula también se localizan las
encuentra con frecuencia en el lado izquierdo, importantes células que inervan al diafragma.
entrando por lo regular por los niveles D-9 y La lesión de esta porción de la médula espinal
D-11 para luego dirigirse hacia abajo hasta el es peligrosa porque interfiere con la respira-
abultamiento lumbar. Otra región importante ción.
es la unión del bulbo raquídeo con la médula es- Los impulsos autónomos se originan en las
pinal, donde también contribuyen ramas de la porciones dorsal y lumbar superior de la médu-
arteria occípital.? la, y también en la porción sacra. En esta últi-
Las raíces anteriores y posteriores son rega- ma se originan los impulsos parasimpáticos, y
das por ramas radiculares que por lo general no por tanto es un centro importante para el con-
Regan a la médula espinal. trol de la micción y la defecación. La lesión del
Las venas que recogen la sangre de la médula cono medular o de la cauda equina produce por
espinal, ? junto con los plexos venosos vertebra- lo general trastornos funcionales de vejiga y
les internos, drenan en las venas intervertebrales recto.
(fig. 50-4), que a su vez lo hacen en las venas Características morfológicas y topográficas.
segmentarias. La forma de la médula espinal varia según el ni-
vel. Presenta un abultamiento cervical y uno
lumbar en los niveles del origen de los nervios
CARACTERISTICAS REGIONALES que van a los miembros. La médula espinal es
casi cilindrica, ya que está ligeramente aplana-
Caracteristicas funcionales. La médula espinal da de adelante hacia atrás, en especial en la re-
contiene haces motores descendentes y sensitivos gión cervical. En promedio, la ancbura máxima
Cop 50. MEDULA ESPINAL Y MENINGES 629

B” nervio
raquídeo
cervical v, C-7

Piamadre alrededor de una


Asta posteriar Cordón posterior raiz raquidea
Aracnoides
racnoi
Espacio subaracnoidas Cardón lateral
IDA SS Raiz posterior
55 ligamento _ Espacio
, dentado subaracnoideo
Raíz -
anterior “au?
0 a1 Asta
SAS 1
Duramadre .
V.C-7 Espacio anterior | Cardón anterior
epidural Surco medio anterior v.D-12
A b C

Fig. 50-3. Tres niveles de la columna vertebral y la médula espinal. A, Corte a través del cuerpo vertebral de C-7; abajo
de Él se ilustra la médula espinal (aproximadamente el segundo segmento dorsál), Obsérvese el borde libre del ligamento
dentado. B, Corte a través del cuerpo de D-7, y abajo de él la representación de la médula espinal (alrededor del décimo
segmento dorsal). Obsérvese que a este nivel (entre la salida de dos raíces vecinas), el ligamento dentado está fijo por sus
dos bordes, C, Corte a través del cuerpo de la vértebra D-12, y abajo la médula espinal (porción sacra superior o lumbar in-
[erior).

Venas longitudinales
Piexo venoso media posterior y

Artorlas espinales vortobra) interno posterolataral


posteriores Arterla medular posterlor posterior a
Arterla radicular
Venas
radiculares

Vena
Plexa intervertebral

Anteria]central Arterla espinal Plexo venoso


Arteria espinal anterior Artería medular anterior A2MAa vertebral Interno
A posterlor anterlor Venas longitudinales
B media amterlor y
antorolateral
Fig. 504, Riego arterial (4) y drenaje venoso (9) de la médula espinal. 1) Territorio del plexo posterior; 2) territorio de
las porciones anterjor y externa del plexo pial; 3) territorio cornún de la arteria central y de las porciones anterior y externa
del plexo pia); 4) territorio común de la arteria central y el plexo posterior, y 5) territorio de la arteria central. (Basado en
Gillian.)
630 DORSO

Segmento medular t

Cisterna

Agujara
occipital

Punción
cisternal

Cono
medular

Punción
fumbar

N.S-1
Espaclo
subaracnoldeo

v.D-9
Punción epidural
Filum terminale
Cócclx

Fig. 50-5. Corte medio de la columna vertebral que muestra los diferentes niveles de los cuerpos vertebrales, los segmen-
tos medulares y las apófisis espinosas. La médula espinal termina en L-1 o L-2 y el espacio subaracnojideo en S-1 o S-2. Se
ilustran las punciones cisternal, lumbar y epidural. Como ejemplo.de un nervio raquídeo, se puede ver e] nervio S-], que se
origina en el segmento medular S-1, frente a la vértebra D-12, desciende (como parte de la cauda equina) y emerge por el
agujero de conjunción entre las vértebras S-1 y S-2,
Cap. 50. MEDULA ESPINAL Y MENINGES 631

longitud de las raices aumentá de arriba hacia


abajo. Las de la región lumbosacra no son sólo
las más largas, sino también las más gruesas.
Los nervios lumbares aumentan de tamaño de
arriba hacía abajo, mientras que los agujeros de
conjunción Iumbares disminuyen su diámetro.
De esta manera, el quinto nervio lumbar es el
más grueso, y Su agujero es el más estrecho (tig.
50-6).% Esta relación hace que sea mayor el ries-
go de compresión de] nervio em caso de her-
niación del núcleo pulposo.
La herniación de un núcleo pulposo a través
del anillo fibroso puede comprimir las raíces
nerviosas. Así, el disco entre L-4 y L-5 (raíces
del nervio L-5) puede ocasionar dolor y pérdida
de sensibilidad en la cara anteroexterna de la
pierna y el dorso del pie (dermatoma L-5) y de-
bilitamiento de la flexión dorsal del dedo gordo
(extensor largo del dedo gordo). De manera se-
mejante, el disco entre L-$ y S-1 (raices del ner-
vio S-1) puede afectar la sensibilidad de la cara
posterior del talón (dermatoma S-1) y ocasionar
la abolición del reflujo aquiliano (gemelos de la
pierna y sóleo).
En la región cervical, cada nervio raquídeo
pasa por el agujero de conjunción, que es en
realidad un conducto de unos 4 mm de largo,
mientras que los ganglios y los nervios raquí-
deos se encuentran fuera del mismo, en el surco
o canal de la correspondiente apófisis transver-
sa (fig. 50-9), En las demás regiones, los
ganglios y nervios raquídeos se encuentran por
lo general en los agujeros.

Fig. 50-6. Salida de los nervios raquídeos lumbares dere- MENINGES


chos por los agujeros de conjunción. El dibujo muestra las
dimensiones relativas de los agujeros de conjunción lumba- Duramadre raquíidea (figs. 50-1, 50-5 y 50-83)
res y de los nervios raquídeos, (Basado en Danforth y Wilson.)
La médula espinal, al igual que el encéfalo,
está envuelta y protegida por las tres meningés.
La envoltura más externa, la duramadre raquí-
dea, es un tubo resistente de tejido fibroso den-
de la médula espinal es de 14 mm, y el diámetro so que se extiende del agujero occipital al sa-
anteroposterior de 6.5 a 9 rm.' cro y el cóccix. Al nivel del agujero occipital
Son importantes las relaciones de Jos niveles se continúa con la duramadre del encéfalo. Está
de origen de las raíces raquídeas con Jos niveles ligeramente adherida a los bordes del agujero!*
vertebrales, comparadas con los niveles de sali- y alos cuerpos de las vértebras C-2 y C-3. Inme-
da de los nervios raquideos. El nivel de origen diatamente por debajo del agujero occipital, la
de las raíces está más arriba que el de salida del duramadre es gruesa y vascularizada. En-la par-
nervio por un agujero de conjunción (fig. 50-5). te inferior del conducto raquideo sufre un rápi-
La diferencia es mayor en la región lumbo- do estrechamiento y termina en fondo de saco
sacra. Hay grandes variaciones en la correla- más o menos al nivel de la vértebra S-12)% Se ex-
ción entre los niveles de origen y los de salida. '! tiende con el nombre de filum de la duramadre
La manera en que las raíces se unen a la mé- hasta la cara posterior del cóccix, donde se fu-
duja espinal es diferente según la región. La siona con el periostio.
632 DORSO

La duramadre está separada de las paredes Segmento


del conducto raquídeo por el espacio epidural o medular L-3
extradural, que contiene cierta cantidad de gra-
sa semiliquida y muchas venas de paredes del-
gadas que constituyen el plexo venoso vertebral
Y. L-1
interno. La grasa epidural se extiende hacia los
agujeros de conjunción, los ocupa y sobresale a N.L-1
los lados de las vértebras.!* Debido a su estado Cono
semiliquido a la temperatura corporal, la grasa medular
se desplaza con facilidad hacia dentro o hacia
Cauda
fuera del conducto raquídeo con las variaciones
equina
de la presión intratorácica e intraabdominal. El
conducto raquideo, por tanto, no es un tubo rí-
gido y cerrado. Las venas del conducto pueden
conducir más o menos sangre, según las va-
naciones de las presiones intratorácica e intra- Disco entre

Or
abdominal. A L-4 y L-5
La analgesia epidural se puede lograr (p. ej.,
durante el parto) inyectando anestésico entre ON N pasterlor
las láminas lumbares o a través del hiato sacro, de L-5
Cuando cada una de las raíces de un nervio ÍA
raquideo se aproxima a un agujero de conjun-
ción, penetra en una prolongación tubular o en
forma de embudo de la duramadre, la vaina du-
ral." Más o menos al nivel de la posición del
ganglio raquídeo, las vainas de las raices ante-
rior y posterior se fusionan y forman una sola
vaina que se continúa con el epineuro del nervio
raquideo. Algunas raíces (en especial las últi-
mas cervicales y las primeras dorsales) descien-
Filum
den dentro de la duramadre y con frecuencia se torminale
observan anguladas cuando se doblan brusca-
mente hacia arriba para dirigirse a los agujeros v.Co.-1 N.Co.-1 “tica
de conjunción.!!
El espacio subdural es un espacio virtual si-
tuado entre la aracnoides y la cara profunda de Fig: 50-7. Médula espinal y cauda cquina in situ, vista
la duramadre. Contiene sólo una película de lí- posterior después de practicar laminectomía en el lado dere-
cho. Se han omitido las ramas posteriores, y los discos in-
quido de espesor capilar. Este espacio se conti- tervertebrales se ilustran en pantalla. Se puede ver que el
núa dentro de las vainas durales y comunica prolapso del disco entre L-4 y L-5, por ejemplo, podría afec-
con los vasos Iinfáticos de los nervios. tar las raíces del nervio L-5. (Basado parcialmente en Pern-
'Kopf.)
Aracnoldes raquíidea

Es una membrana transparente y delicada .entre la aracnoides y la piamadre. Éstá cruzado


que forma una envoltura laxa y amplia a la mé- por algunas trabéculas de tejido conectivo y por
dula espinal. Hacia arriba continúa con la arac- una condensación fibrosa variable, el tabique
noides cerebral a través del agujero occipital. subaracnoideo, que se extiende hacia atrás en el
Macia abajo termina junto con el saco dural y plano medio, a partir de la médula espinal. El
es perforado por el filum terminale. Se prolon- espacio subaracnoideo está dividido parcial-
ga a cada lado dentro de las vainas durales for- mente por los ligamentos dentados.
mando envolturas tubulares a las raices de los Punción lumbar. Como la médula espinal
nervios raquideos, pero sólo por una corta dis- termina más o menos al nivel de la vértebra L-2
tancia. en tanto que el espacio subaracnoideo continúa
El espacio subaracnoideo, que contiene el hasta el nivel de S-2, se puede introducir una
líquido cefalorraquídeo, es un amplio espacio aguja por debajo de la terminación de la médu-
Cop SO. MEDULA ESPINAL Y MENINGES 633

Duramadro
Plexo vertebral interno Aracnoldes
Perlostio Espacio subaracnoldeo

Ramas
anterlor y
posterior

Raíz
posterior

> Ligamento
JE dentado
Gangllo
raquídeo

Ralz
anterlor

Fig. 50-8. Corte horizontal a través de la médula espinal para mostrar las meninges. Se ilustran las arterias espinales ante-
rior y posteriores. L.C.R., líquido cefalorraquídeo en el espacio subaracnoideo,

la para extraer líquido cefalorraquídeo, antes una red de fascículo que contienen los vasos
de lo cual se puede medir su presión. El liquido superficiales de la médula, está interrumpida en
extraído puede examinarse en busca de bacte- los lugares de origen de las raicillas y de algunas
rias u Otras células, someterse a pruebas seroló- bandas colágenas que cruzan el espacio sub-
gicas y químicas, y sustituirse por soluciones de aracnoideo. Los fasciculos más externos se dis-
agentes anestésicos. También puede ser sustitui- ponen longitudinalmente y en el plano medio, por
do por medios de contraste, como gas o aceite delante, forman una banda de aspecto brillante
yodado, para visualizar radiográficamente el que envuelve a la arteria espinal anterior, Estas
espacio subaracnoideo. fibras longitudinales se continúan hacia abajo
para formar el filum terminale.
Piamadre raquídea A cada lado, la capa de fibras colágenas
envia hacia afuera un delgado tabique longitu-
Esta membrana, que junto con la aracnoides dinal, el ligamento dentado (figs. S0-1 y 50-3),
constituye la leptomeninge, está formada por cuyo borde externo es libre, con excepción de
tejido reticular y fibras colágenas. El tejido reti- una serie de prolongaciones a manera de dientes
cular reviste intimamente la médula espinal y se (generalmente 21 a cada lado) que se fusionan
dirige hacia atrás dentro del surco medio ante- con la aracnoides y la duramadre y ayudan a fi-
rior. Forma el tabique medio posterior y otros jar la médula. La más superior se encuentra a
tabiques incompletos. También forma un reves- nivel del agujero occipital. Cada una de las res-
timiento para las raicillas, se prolonga alrede- tantes se inserta entre dos vainas durales vecinas,
dor de ellas y se continúa con el tejido reticular y la más inferior por debajo de la vaina del últi-
de la aracnoides. Las fibras colágenas se en- mo nervio dorsal. Los dos ligamentos dentados
cuentran por fuera del tejido reticular y forman se continúan hacia abajo en el filum terminale.
634 DORSO

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|
Anatomía de
superficie del dorso

Bn la figura $1-1 se ilustran algunas caracte- más notable en el cuello por la prominencia del
risticas de la anatomía de superficie del dorso. complejo mayor de ambos lados, y en la región
La apófisis espinosas de las vértebras son pal- lumbar por la de los músculos de la masa co-
pables en el surco medio del dorso, que se hace mún. La apófisis espinosas de las vértebras C-6,

Acromion
/

Redondo
7 mayor

pa

Angulo
interior

Espina ilíaca”
posterosuperlor

Fig. $1-1. Algunos puntos de referencia superficiales del dorso. (Cortesía de J, Royce. Ph. D., y Davis, Philadel-
phia.)

635
636 DORSO

C-7 y D-1 son por lo general prominentes y pal- de ambos lados. A veces, la apófisis espinosa de
pables, y se hacen más evidentes al flexionar el L-5 está indicada por una depresión, Un plano
cuello y el tronco. horizontal que pase tangente a los puntos más
La protuberancia occipital externa es palpa- altos de las crestas iliacas (plano supracrestíleo)
ble en adultos (pero no en niños) en el plano pasa por la parte inferior de la apófisis espinosa
medio, en el punto en que se unen las partes de L-4, o inmediatamente por debajo de ella, y
posteriores de cabeza y cuello. La depresión ob- por tanto se usa este plano como punto de refe-
servable por debajo de ella se encuentra al nivel rencia durante la punción lumbar. Una aguja
del atlas. La apófisis espinosa del axis es palpa- introducida a este nivel penetra en el espacio
ble a unos 3 cm por debajo de la protuberancia, subaracnoideo a una profundidad de 4 a 6 cm
aunque junto con tas de las vértebras C-3 a C-5 (menos de 2.5 crn en lactantes), y si se continus-
quedan ocultas por el ligamento cervical poste- ra hacia adelante se llegaría al disco situado
rior. entre L-4 y L-5.
Las apófisis espinosas de las vértebras dorsa- Las apófisis espinosas del sacro no se distin-
les por lo general son palpables. La de la déci- guen con facilidad. Habitualmente, cada espina
ma (o de la undécima) suele ser más corta que iliaca posterosupeñor queda indicada por una
las demás, por lo que se observa una ligera de- depresión en la piel. Una fínea trazada entre es-
presión a este nivel. En la región dorsa!, la apó- tas dos espinas cruza la apófisis espinosa de la
fisis espinosa de cada vértebra se extiende hasta vértebra S-2,
el nivel del cuerpo de la vértebra subyacente, y El hiato sacro suele ser palpable, así como el
en la parte media de esta región puede alcanzar cóccix, movíble, por debajo de él.
el nivel del disco situado por abajo de la vér- El cuerpo de cada vértebra situada por arriba
tebra subyacente. Una linea horizontal trazada de la quinta lumbar es ligeramente más alto que
entre los ángulos inferiores de ambas escápulas el de la vértebra suprayacente, Sin embargo, se
cruza la apófisis espinosa de la vértebra D-7. puede estimar de manera aproximada la altura
Las apófisis espinosas lumbares se localizan de una vértebra presacra y su correspondiente
en el surco entre los músculos de la masa común disco en unos 2,5 cm.

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