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Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa

Facultad de Derecho

Escuela Profesional de Derecho

DERECHO DE LA COMPETENCIA Y DE LA REGULACIÓN

Análisis del objetivo Dotar al país de infraestructura económica y social de


calidad

Docente: Dr. Juan Jose Romero Anguerry

Integrantes:

Huarsocca Juchatuma, Gleny Luz


Machacca Catari, Candy Alicia
Sanchez Moncca, Luz Angela
Quispe Choque, Teobaldo Adriano

Año y Grupo:

6to - A
DOTAR AL PAÍS DE INFRAESTRUCTURA ECONÓMICA Y
SOCIAL DE CALIDAD
La infraestructura es un elemento fundamental
para que la economía logre mayores tasas de
crecimiento, ya que mejora la competitividad,
conectando personas y reduciendo el impacto de la
distancia y tiempo, en relación al funcionamiento
de empresas y trabajadores, aumentar el flujo de
información y permitir que el mercado interno se
integre en la cadena.

La infraestructura abre el acceso a nuevos


mercados y los diversifica, contar con
infraestructura acorde a las necesidades de la
población puede reducir la desigualdad de
ingresos y la pobreza porque puede incrementar los activos.

El desarrollo de la infraestructura de un país siempre ha sido la base de su crecimiento


económico, y este crecimiento traerá un mayor nivel de bienestar a los residentes del país.
Este es uno de los requisitos del desarrollo del mundo entero, especialmente de América
Latina

Acercarnos a la competitividad global requiere conectar a cada país y cada territorio con una
infraestructura adecuada y eficiente, aumentando así el nivel de competitividad y mejorando
la calidad de vida de sus habitantes. Este desafío requiere enormes recursos financieros,
tecnología avanzada y excelentes habilidades de gestión. Cada vez nos damos cuenta de que
es muy importante impulsar un nuevo tipo de plan de cooperación entre el Estado y las
empresas privadas para incrementar significativamente la construcción de infraestructura en
cada país.

En Perú, la infraestructura tiene defectos de cobertura y calidad que limitan su productividad.


Estas carencias son más significativas en sectores como el transporte, la energía y las
telecomunicaciones, que representan alrededor del 70% de las necesidades de inversión que
el Perú necesita para tener infraestructura en países como Japón, Singapur y Tailandia.

Perú necesita una estimación de 160 mil millones, de 2016 a 2025 para acomodar la
infraestructura de países como China, quien se ha visto reflejado a su vez en contribuciones al
desarrollo global, pues este país se reconoce por sus productos y soluciones en infraestructura
de alta complejidad tecnológica.

Un ejemplo de ello es su modelo de infraestructura energética, el cual fue transformado a


finales del siglo pasado y había sido inicialmente a partir de postes de concreto, común y
corriente, los cuales soportaban las redes de energía.

En estos últimos años este sistema ha evolucionado por completo para satisfacer la demanda
de energía, por lo que el Gobierno chino ha venido realizando grandes inversiones, entre
ellas, la creación de una completa red eléctrica subterránea.
Analizando otro ejemplo de infraestructura, podemos mencionar el Aeropuerto Internacional
de Beijing. Infraestructura que desde su inauguración ha sufrido grandes transformaciones,
pero sin duda la más importante de ellas fue su transformación para atender la demanda que
generaría la realización de los Juegos Olímpicos. Hoy en día es reconocido por su diseño,
( Arq Norman Foster ), y tamaño, considerado el aeropuerto más grande del mundo.

Las economías más importantes en el mundo, no han abandonado la idea de cómo atender las
necesidades de infraestructura y los retos que traerá consigo integrar nuevas urbes con una
población más globalizada y que crece día a día.

La estrategia que determina las inversiones en la próxima década ubica al transporte, la


energía, las telecomunicaciones y el agua, como los sectores donde se destinarán los recursos
de las naciones líderes económicamente.

La infraestructura de nuestro Perú como ya se ha mencionado ,tiene diversos deficiencias más


aún la gran desigualdad de infraestructura que se encuentra en la diversas regiones del Perú
en particular las zonas rurales, y zonas amazónicas, que tenemos un obstáculo muy presente
en estas regiones que es los desastres naturales, el cual se debe hacer un proyecto de
contención y la manera en que se actuará posteriormente al desastre, ya que todo ello
conlleva , a un gran aumento de costos logísticos.

Si bien la infraestructura en el país necesita de una inversión económica mucho mayor, para
que esta realmente pueda tener un impacto positivo en la misma sociedad, esta tiene un
retraso debido a los malos procedimientos que se llevan a cabo al momento de la elección de
las empresas para dichas obras, esto sumado a los actos de corrupción que generan un retardo
considerable en la entrega de la infraestructura haciendo que los costos que se dieron en un
inicio incluso se dupliquen.

Consideramos que la provisión de infraestructura es altamente desigual y heterogénea entre


las regiones, lo cual impide una mayor conectividad del territorio nacional y la
diversificación de su estructura económica, con efectos perjudiciales para la productividad de
todo el país. Por ejemplo, la inadecuada infraestructura de transportes impone elevados costos
logísticos para el comercio de bienes y servicios, la falta de infraestructura de irrigación
limita la expansión de la frontera agrícola, y la ausencia de servicios de desagüe expone a los
hogares a enfermedades que afectan la formación del talento humano.

Sumado a esto, un análisis de los riesgos a los que se encuentra expuesta la infraestructura del
país coloca a los desastres naturales como un potencial factor que podría poner en detrimento
sus niveles de cobertura y calidad. De acuerdo con el Banco Mundial, las características
geográficas del territorio nacional ubican al Perú entre los 20 países en el mundo con mayor
riesgo económico por amenazas de catástrofes naturales, tales como sismos, inundaciones,
deslizamientos, heladas, entre otros. Ante dicha situación, se requiere plantear de manera
adecuada acciones preventivas, que permitan una recuperación rápida y efectiva posterior a la
ocurrencia de desastres naturales. Sin embargo, según el Índice de Gestión de Riesgos ante
Desastres elaborado por el Banco Interamericano de Desarrollo, el Perú ocupa el último lugar
de la región en el subcomponente asociado a la protección financiera y gobernabilidad en el
manejo de desastres naturales.

La débil y heterogénea provisión de servicios de infraestructura a lo largo del país responde


en gran medida a deficiencias institucionales, vinculadas a la ausencia de planificación en la
formulación y ejecución de proyectos, la falta de coordinación entre diferentes niveles de
gobiernos y unidades ejecutoras, y al poco aprovechamiento de todas las modalidades de
desarrollo de inversiones (por ejemplo, Asociaciones Público-Privadas y Obras por
Impuestos). Esta situación se agrava si se considera que una gran proporción de las obras
realizadas no cuenta con medidas que aseguren su óptimo mantenimiento.

Es importante que este tipo de inversiones se hagan en todo el país porque genera no solo
empleo sino, aumento económico al país, y porque debido a nuestra geografía que es muy
difícil, la mayor parte de nuestro país solo pueden comunicarse por vía terrestre lo cual es
muy difícil porque estas se encuentran en mal estado e incluso abandonadas y sólo transitan
por esas vías las personas que viven por allí, limitando su acceso a otros servicios, aun
cuando esos lugares sirven para otras inversiones, acortando la brecha que existe entre las
poblaciones rurales con la ciudad.

En este sentido, la planificación y construcción de proyectos de infraestructura en las


regiones del país debe pasar por una evaluación de sostenibilidad fiscal, financiera y, sobre
todo, ambiental para que se pueda decir finalmente que contamos con una infraestructura de
calidad y competitiva.

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