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BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE PUEBLA

FACULTAD DE PSICOLOGÍA

PSICOBIOLOGÍA

TÁLAMO

LIC. JOSÉ ROBERTO VALDERRAMA

Unidad I

Maria Fernanda Olivares Gonzalez 202072331

Jessica Yael Pérez Cardona 202050954

Karelly Espindola Leal 202066029

Jafet Alejandro Juncos Arenas 202042682

Rueda Sánchez Rodolfo Alejandro

202055885

Primavera 2021

ÍNDICE
● Introducción

● Talamo

● Núcleos del tálamo

● Ubicación

● Neuronas del tálamo

● Cerebro anterior

● Funcion del Talamo

● Conclusión

● Referencias
INTRODUCCIÓN

El cerebro sin duda es el órgano más complejo de nuestro cuerpo, a pesar de que
parezca una simple parte pequeña de nosotros, realmente tiene un impacto grande
en el ser humano, además de que en sus funciones conlleva grandes acciones que
suele hacer el ser humano y que resultan ser vital para su vida. Durante las clases
que pudimos tener en este primer semestre de nuestra carrera, hemos tenido la
capacidad de apreciar a detalle cómo es que funciona dicho órgano, lo que lo
conforma y el cómo trabajan todas las pequeñas partes que lo integran, su relación
y la manera en que convierte al ser humano en lo que es.
Es por esto, que después de una plática entre los integrantes del equipo, se tomó la
decisión de realizar esta investigación sobre el tálamo, a pesar de que todas las
partes del cerebro son destacables, consideramos que este es un componente
esencial del cerebro, que llamó un poco más nuestra atención.

EL TÁLAMO.
El tálamo es un conjunto de sustancia gris, formado por dos estructuras encefálicas,
que se encuentran debajo de la corteza cerebral, una junto de la otra,
comunicándose entre ellas por una especie de puente llamado conexión
intertalámica.

Esta parte del cerebro interviene en una gran parte de los procesos mentales, dando
sentido a la manera en que percibimos las cosas y de cómo reaccionar o actuar
sobre el ambiente que nos rodea.

NÚCLEOS DEL TÁLAMO.

“El tálamo es una acumulación grande de grupos neuronales en el diencéfalo;


participa en las funciones sensitivas, motoras y límbicas” (Barret et al.,2016, p.269).
Aquella información que llega a la corteza se procesa por el tálamo, lo cual dio
comienzo al significado de “compuerta” a la corteza cerebral.

El tálamo se puede fragmentar en núcleos que se proyectan de manera larga en


regiones extensas de la neocorteza y los núcleos que se proyectan en áreas
limitadas específicas de la neocorteza y el sistema límbico.

Los núcleos medial e intralaminar: Son los núcleos proyectados hacia áreas
específicas incluyen los núcleos de relevo sensitivo específicos y núcleos
participantes en mecanismos de control eferente.
Los núcleos de relevo sensitivo específicos: Comprenden los cuerpos
geniculados medial y lateral, que transmiten impulsos auditivos y visuales a la
corteza auditiva y visual. Los núcleos posterior lateral ventral (VPL) y posteromedial
ventral, que transmiten información somatosensitiva al giro postcentral.

Los núcleos ventral anterior y el ventral lateral participan en la función motora;


reciben información de los ganglios basales y el cerebro para proyectarlas a la
corteza motora. Los núcleos anteriores reciben aferentes de los cuerpos mamilares
y envían información a la corteza límbica, donde puede participar en la memoria y
las emociones (O.C). La mayor parte de los núcleos talámicos descritos
corresponden a neuronas excitadoras que liberan glutamato.

El tálamo también contiene neuronas inhibidoras en el núcleo talámico reticular, que


liberan ácido aminobutírico y (GABA), y diferencia de las otras neuronas talámicas
descritas, sus axones no se dirigen a la corteza. Son interneuronas talámicas y
regulan la respuestas de otras neuronas talámicas de la información proveniente de
la corteza.

UBICACIÓN.

El tálamo es parte del diencéfalo, que se encuentra situado entre la corteza cerebral
y la parte superior del tronco del encéfalo, el diencefálo a su vez, se compone por él
por el hipotálamo, tálamo y otras pequeñas estructuras más pequeñas.

NEURONAS DEL TÁLAMO

Está conformado por una variedad de subestructuras especialidad, de las cuales la


mayoría están conformadas por neuronas y células gliales. En la distribución de
estas se nota que están asociadas a muchos otros fajos de neuronas, sin embargo
desde el punto de vista funcional, las clases de neuronas del tálamo son las a
continuación mencionadas:

Interneuronas locales: Células nerviosas encargadas de hacer que la información


que llegue desde otras partes del sistema nervioso se procese en el tálamo, así
convirtiéndolas en una serie de datos. Además, su función principal es enviar
impulsos nerviosos a otras interneuronas del tálamo, se supone que
aproximadamente del 25% de las neuronas del tálamo.

Neuronas de proyección: Células nerviosas encargadas de mandar información


fuera del tálamo, cerca de la corteza cerebral, así que son el 75% de las neuronas
talámicas.

LAS ESTRUCTURAS DEL TÁLAMO

El tálamo es, básicamente, un amontonamiento de cuerpos de neuronas, es decir,


una estructura de materia gris, al igual que la corteza cerebral. Pero dentro de este
conjunto de grupos neuronales se pueden distinguir una serie de núcleos del
tálamo:

● Núcleos de conexión específica: Estos mandan información sensorial a


zonas concretas de la corteza cerebral que están especializadas en trabajar
con ese tipo concreto de datos provenientes de un sentido específico.
● Núcleos de conexión inespecífica: Mandan información a zonas muy
amplias de la corteza cerebral, sin discriminar por especializaciones.
● Núcleos de asociación: Forman parte de un circuito de información que
comunica la corteza cerebral con estructuras subcorticales.
FUNCION DE TALAMO

Como hemos visto el tálamo está muy bien comunicado, pero el tálamo no solo es
un simple puente de comunicación entre partes diferentes del cerebro. El tálamo es
fundamental para el procesamiento de información que llega desde otras áreas.

1. Integración de los datos sensoriales


Esta es una de las funciones más conocidas y estudiadas, pues es una de las
primeras paradas en el cerebro sobre la información que nos llega a través de los
sentidos, con excepción del olfato. El tálamo se encarga de procesar la información
sensorial, a la vez que descarta cosas que no son relevantemente importantes y
manda este resultado hacia la corteza cerebral, donde todavía sigue siendo
procesado.

2. El ciclo de sueño- vigilia


El tálamo, al igual que su hermano menor, el hipotálamo, se encarga en la hora de
la intervención del sueño, ya que regula el ritmo del sueño, nos referimos a la
regulación con el ritmo del sueño, con lo que la sensación del sueño va y viene.
Esta función además de ser importante para regular la actividad nerviosa en
general, también está relacionada con…

3. La atención y la conciencia
Recientes estudios han demostrado que el tálamo tiene relación con la conciencia,
desde tener pensamientos internos, hasta el uso del lenguaje, hasta en cómo la
mente puede centrar su atención en un solo objetivo. Sin embargo cabe recalcar
que los procesos relacionados con los estados conscientes no son la conciencia en
sí misma, aunque aparecen en paralelo.
No podemos centrar nuestra atención en nada cuando no nos damos cuenta de que
existimos, y tampoco podemos hablar ni reflexionar; pero cuando estamos
conscientes, hay aspectos de la atención y del lenguaje que están más allá de la
consciencia. Además de que el pensamiento no requiere solo de una parte sino de
varias. Esta parte del diencéfalo es un componente necesario pero a la vez es
insuficiente a la hora de hacer el pensamiento.

4. Regulaciones de las emociones


El tálamo no solo se encuentra conectado y conformado por circuitos que transmiten
información sensorial, sino que también interactúa con vías neuronales que a su vez
son quienes activan los estados emocionales. No en vano el tálamo está rodeado
por el sistema límbico.
Así que el tálamo une estas dos vías y trabaja juntando estos dos tipos de
información, haciendo que las emociones afectan en lo percibido o viceversa.
Además de que recibe información del hipotálamo que al igual interviene
directamente en la regulación de las emociones y la segregación de diferentes tipos
de hormonas en el torrente sanguíneo.

5. Funciones del tálamo en el dolor:


El tálamo recibe y procesa toda la información nociceptiva destinada a la corteza,
participa en la percepción del dolor y la fisiopatología del dolor central y otros tipos
de dolor crónico. Las regiones del tálamo que participan en el dolor y en donde se
registran las respuestas a estímulos nocioceptivos incluyen los núcleos VPL, VPM
VPI, centrolateral (CL), parafascicular (PF) y dorsomedial (DM). Casi todos los
núcleos talámicos que reciben aferencias nocioceptivas tienen proyecciones a áreas
corticales relacionadas con el dolor.

CONCLUSIÓN
El tálamo es una de las partes del cerebro más grande e importante, ya que tiene
diferentes funciones que a simple vista no se pueden notar, pero investigando a
fondo son sorprendentes.
Sin embargo, esto es un reflejo del sistema nervioso que está presente todo el
tiempo, desde que estamos dormidos hasta que estamos despiertos una multitud de
procesos se están llevando a cabo simultáneamente.
Juega igualmente un papel importante en la aparición y mantenimiento de los
estados de activación cerebral, que hace dar sentido hacia nuestra existencia y de
lo que ocurre a nuestro alrededor. Esto ha hecho que el tálamo haya llegado a ser
considerado "el interruptor de la consciencia".
También queda claro que el tálamo no es la parte del cerebro donde se encuentra la
conciencia ya que de ser así creeremos que una persona pequeña con mente
propia vive en nuestra cabeza, pero podemos ver que si se tiene una ligera relación
con ella.

REFERENCIAS

● Barrett, K. E. et al.,(2013). Ganong fisiologia medica (25a ed., Vol.

3). McGraw-Hill Education.

● Corr, P. J. (2008). Psicología biológica (Revisado ed., Vol. 2).


McGraw-Hill Education.
● Boutros, N. J. (2008). The thalamus. Clinical EEG and Neuroscience,
Vol.39(1), p.IV
● Percheron, G. (1982). The arterial supply of the thalamus. En
Schaltenbrand; Walker, A. E. (eds.). Stereotaxy of the human brain.
Stuttgart: Thieme. pp. 218 - 232.
● Perea-Bartolomé. M. V. y Ladera-Fernández, V. (2004). El tálamo:
aspectos neurofuncionales. Revista de neurología, 38(7), pp. 697 -
693.

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