0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
45 vistas6 páginas
El papel del territorio en lo que respecta a identidad y cultura resulta fundamental para los estudios antropológicos, por ello no pueden ser dejados de lado, pues de hacerlo sería olvidar que la observación de un espacio esta bañada por tintes espacio-temporales.
El papel del territorio en lo que respecta a identidad y cultura resulta fundamental para los estudios antropológicos, por ello no pueden ser dejados de lado, pues de hacerlo sería olvidar que la observación de un espacio esta bañada por tintes espacio-temporales.
El papel del territorio en lo que respecta a identidad y cultura resulta fundamental para los estudios antropológicos, por ello no pueden ser dejados de lado, pues de hacerlo sería olvidar que la observación de un espacio esta bañada por tintes espacio-temporales.
Antes de comenzar con la reflexión de la relación entre cultura, territorio e
identidad me gustaría agradecerle por incluir entre los materiales del curso el documental “Promise” que a mi parecer fue el mejor del curso, nunca había tenido un acercamiento a el y este primer acercamiento fue muy emotivo para mí, sinceramente nunca había pensado en el gran impacto que resulta para los niños vivir en un contexto como lo es el de medio oriente en donde lo normal para ellos es la guerra, los conflictos y el “odio” al otro, bueno sin extenderme mucho reitero mis agradecimientos y quería recomendarle una animación que se encuentra en YouTube de Nina Paley “This Land Is Mine” en donde muestran al igual que en el documental que el único ganador en una guerra es la muerte. El papel del territorio en lo que respecta a identidad y cultura resulta fundamental por ello la antropología no puede dejarlo de lado, pues de hacerlo sería olvidar que la observación de un espacio esta bañada por tintes espacio- temporales, las lecturas y videos de estas semanas demuestran esto pues en cada uno de los materiales se entiende que el territorio es un lugar al que se puede estar apegado aun cuando no se este completamente dentro él. Por ejemplo, en el caso de los migrantes, o el caso de los niños del documental “Promise”. El apego a un lugar está dado por las experiencias de cada persona este sentimiento de pertenencia socio territorial permite entender el espacio no solo como un lugar en donde se desenvuelven distintas relaciones de producción en donde interviene la explotación de un recurso para satisfacer necesidades propias y/o de otro, sino que tambien se entiende el territorio como un espacio apropiado en donde un grupo social satisface en primera línea sus necesidades básicas de alimento pero tambien un lugar donde satisface sus necesidades simbólicas. De esta forma los distintos materiales revisados entienden y demuestran cada uno a su manera que el territorio no es tan solo un espacio geográfico sino que termina siendo el que determina la construcción histórica y las prácticas culturales del mismo, en un determinado territorio se terminan construyendo diferentes identidades y diferentes grupos, por ejemplo en el caso del documental Promise pese a que los niños entrevistados vivían a tan solo 15 minutos máximo de diferencia cada uno tenía un pensamientos e identidades diferentes al de los otros, el territorio en donde se desenvolvían había moldeado su cultura y su identidad como individuos y como grupo. El territorio como espacio en donde toma forma la identidad puede ser utilitario y funcional o simbólico-cultural. Gilberto Giménez reconoce tres practicas espaciales a través de las cuales se fabrica un territorio: • División o partición de superficies (“maillages”). • Implantación de nudos (noeuds). • Construcción de redes (réseaux). Se entiende un territorio utilitario y funcional por ejemplo cuando se piensa en el como una mercancía generadora de renta lo que es el valor de cambio de este, un territorio utilitario se piensa a partir de la apropiación de un espacio. Por otro lado, el territorio pensándose como un espacio simbólico-cultural es un lugar en donde se inscribe una historia en donde toman formas distintas tradiciones, por ejemplo, cuando se piensa en el mismo como la tierra de los antepasados o como se vio en el documental “Promise” la tierra prometida, en estos casos se enfatiza el aspecto simbólico-cultural de la apropiación del espacio. Es así que en la mayoría de los casos el establecimiento de fronteras denota una serie de desigualdades se ve al otro como un peligro siempre ha de ponerse en duda su ciudadanía y su identidad por ejemplo como relata en su texto Renato Rosaldo en Estados Unidos la ciudadanía de los chicanos es puesta siempre bajo tela de juicio se les considera como “los ilegales” esta desconfianza hacia el pueblo latino y afroamericano solo sirve como estrategia para dividir a las personas en grupos raciales, grupos que parecen impenetrables para todo aquel que no sea parte del mismo. Como vimos en los materiales revisados para la elaboración de este trabajo el establecimiento de fronterastrae consigo control y jerarquización de distintos puntos lo que da a unos actores privilegios y a otros se los quita, entra aquí una cuestión de quien es miembro y quien no lo es, un factor de pertenencia como explica la lectura de Renato Rosaldo, estos factores son el inicio de la política de ciudadanía. Entonces al hablar de territorio necesariamente hablamos de ciudadanía (al menos en las sociedades modernas) lo bueno de este concepto es que permite identificarte con un territorio, te hace sentir parte de algo, es lo que ha servido a los Estado-Nación para instaurarse, lo malo y los problemas que trae consigo este concepto son la exclusión al otro, al que no es ciudadano lo que a su vez acarrea racismo, pobreza y violencia en una sociedad y/o grupo. Hay que recordar hasta aquí que el territorio es el espacio apropiado por un grupo, es decir el territorio como espacio físico es un lugar en donde como hemos visto se produce la cultura, y sí bien puede producirse la identidad de un determinado grupo o la una determinada cultura fuera del mismo territorio lo cierto es que el espacio físico, el paisaje, al menos la idea de este, esta ligada a una percepción visual del territorio así como la identidad que este profesa: la vista, la mirada de un territorio determinada evoca un paisaje y este a su vez trae consigo recuerdos un afecto imaginario: un aprendizaje socio cultural es un espacio que sirve para la representación y vivencia de cada actor social por ello Gilberto Giménez hace una recapitulación del paisaje como un espacio metonímico del territorio hay que entender que así como la identidad es construida tambien lo es el paisaje por ello un mismo paisaje no es igual para dos personas. El paisaje a parte de servir como función metonímica del territorio en donde se ven y se entienden ambos como parte de un todo tambien ha de servir como factor que señaliza las diferencias y el contraste entre territorios de diferentes niveles en escala geográfica, en este aspecto resulta que cada grupo tiende a percibir su territorio/ paisaje como algo especial es decir tiende a percibirse con aspectos típicos de si mismo. Por ultimo el paisaje puede ser percibido como un espacio cargado de símbolos y connotaciones valorativas, el paisaje funciona en si mismo como referente privilegiado de la identidad socio-territorial. Hay autores que entienden la cultura como todo aquello que se interpone entre el hombre y su medio ambiente dicho de otro modo lo que se humaniza en el paisaje, puede la cultura significar tambien todos los conjuntos de los artefactos que permiten al hombre actuar de acuerdo con cómo su exterior lo requiere. Aquí entra una cuestión interesante descrita por Gilberto Giménez para quien basándose de lo dicho anteriormente el territorio solo existe cuando es percibido y representando por aquellos que lo habitan, esto me recordó a la cuestión filosófica “Si un árbol cae en un bosque y nadie está para oírlo ¿hace algún sonido?” y debido a que nadie esta para escuchar el árbol caer este no hace ningún sonido es decir no al menos uno que pueda ser percibido y si no es percibido no existe, bueno pues de la misma forma el territorio solo existe cuando algún grupo lo dota de significado, de valores compartidos y de creencias colectivas. Según describe el autor la geografía en lo que respecta a la explicación de la cultura se tambalea en dos polos:
• Objetivismo: Hace referencia a la forma que toman las distintas
instituciones dentro de una cultura aquellas practicas que son directamente observables. • Subjetivismo: O estado internalizado de la cultura hace referencia a las representaciones sociales de cada grupo lo que Bourdieu llama habitus estos igualmente pueden ser identificados y distinguidos entre sí, sirven a cada grupo para normas para entender su realidad y relacionarse con ella. Entonces para Gilberto Giménez la cultura sería el conjunto complejo de signos, símbolos, normas, modelos, actitudes, valores y mentalidades a partir de los cuales los actores sociales le confieren un sentido a su entorno y construyen principalmente una identidad, una identidad como grupo o identidad colectiva. La identidad deriva en un sentido de pertenencia socio regional esta se puede entender como identidad colectiva cuando parte significativa de los habitantes de una región han logrado incorporar a su propio sistema cultural los símbolos, valores y aspiraciones que caracterizan a toda una región. Conocer los elementos de identidad bajo una perspectiva que entiende primero el territorio, luego el paisaje y posteriormente entiende el sentimiento de pertenencia de un individuo o un grupo de individuos es imprescindible para los estudios antropológicos, no debemos caer en el error de pensar la identidad cultural como un proceso acabado y perfecto más bien todo lo contrario pues debemos entenderlo desde la perspectiva histórica en la que nace y por lo mismo es un manojo de proceso imperfectos y en constantes cambios. Al igual que la identidad lo que entendemos como nuestro territorio, nuestro espacio esta en constante cambio, Gilberto Giménez lo describe como la naturaleza multiescalar del territorio, es decir hay territorio local, regional, nacional, plurinacional y mundial; el primer espacio que entendemos como individuos como nuestro espacio es la casa-habitación, el autor lo describe como nuestro rincón del mundo, este lugar es algo así como la mediación entre el “yo” y el resto del mundo. El segundo espacio más próximo que nosotros asociamos como nuestro vendría siendo el pueblo, barrio, municipio o cuidad donde nos desenvolvemos a nivel local en esta escala formamos relaciones mas intimas en lo que respecta a afección y apego, comienza nuestra vida social con vecinos, en la escuela y espacios de entretenimiento. El tercer nivel de espacios es un territorio intermedio entre lo local y el mundo que resulta más vasto, está región resulta difícil de definir puesto que responde a una variedad enorme. Por último, está el territorio Estado-nación, este es un espacio en el cual predomina la dimensión político-jurídica del territorio aquí sucede que el territorio se instaura como un soporte de las naciones. Si bien la distinción que realiza Giménez con respecto al nivel de los espacios y territorio me ha parecido importante y muy acertada no me parece que este completa, es decir requiere ser complementada pues esta dejando muy de lado las relaciones que tienen lugar en cada espacio o bien solo las retoma por encima, por ejemplo hay que mencionar el folclore y las culturas populares que muchas veces son plasmadas en por el Estado en espacios como museos etnológicos y antropológicos así como el patrimonio, son elementos que reconocen y enriquecen lo que se conoce como identidad nacional, sin caer en el error de creer que únicamente lo que se encuentra dentro de museos o instituciones representa la identidad nacional, pues esta es aún más compleja que eso. Es decir, hay que tener cuidado con el concepto de identidad nacional pues como menciona George Yúdice toda colectividad crea sus propios sistemas de símbolos y valores mediante los que se reproducen de manera colectiva el autor lo describe como la pertenencia social, con ello se refiere a que todos los grupos crean su propia cultura e identidad. Lo que se entiende como pertenencia cultural no es únicamente el conjunto de practicas en el que participan ciertos actores o grupos, sino que tambien es el cómo estos grupos interactúan con los otros, así como el papel que juegan las instituciones en este entramado de relaciones. Bajo la luz de estas afirmaciones es que George Yúdice entiende a la cultura como un conjunto distintivo de creencias y practicas y debido esto cada cultura puede exigir su empoderamiento. El empoderamiento del que habla Yúdice tambien puede ser descrito como la toma de conciencia por el grupo o toma de conciencia de la clase y esta se constituye a si misma gracias a las subjetividades étnicas y a la movilización étnica. Por ejemplo, en el caso de los latinos estadounidenses quienes gracias a esta movilización y toma de conciencia han reconocido sus identidades reprimidas provenientes de su país de origen; la cuestión de la identidad en territorio estadounidense esta marcada principalmente por el consumismo por eso mismo resulta más complicado para los diferentes grupos de latinos estadounidenses adquirir una sola identidad, por ello se hablan de multiculturalidad. La cosa con la cultura o tras las diversas culturas es que tras de ella(s)se esconden relaciones y jerarquías de poder que a primera vista no logran ser vistas debido a que tiende a enaltecerse la cultura a la pertenecemos, es así como la cultura se percibe como un espacio de identidad compartida, pero tambien como un espacio de delimitación; esta delimitación es lo que otorga a la cultura sus distintos tintes constitutivos: identidad, conciencia, imagen, sentido de comunidad, entre otros factores. La cultura no es solo como un conducto de trascendencia o identidad nacional pues atraviesa todas las facetas de una vida social o de las vidas sociales de distintos individuos por ello es necesario que se tome más en consideración a la cultura por ejemplo la implementación de políticas publicas que permitan la sostenibilidad de los recursos culturales. El concepto de cultura puede tambien ser empleado en el sentido de mediatización de la conducta humana, la cultura contendrá las percepciones de cada individuo de lo que es su realidad social. Esto se ve ampliamente desarrollado con el concepto de ciudadanía pues cuando se habla de ciudadanía cultural hemos primeramente de reconocer y conocer las aspiraciones legitimas de los grupos subordinados; sin embargo, hay que tener cuidado pues la “ciudanía cultural” no es “cultura ciudadana”. Como decíamos anteriormente la ciudadanía es un concepto que ensimismo encierra desigualdad, para acceder a esta ciudadanía se ha de dejar de lado quién eres para convertirte en lo que es aceptado en el grupo al que se pretende pertenecer, solo de esa forma se puede acceder. Esto se ve ejemplificado en el documental: “La vida de los judíos ultraortodoxos” donde las mujeres para ser aceptadas en el grupo han de cumplir una serie de normas y abusos que son estrictos a lo sumo por ejemplo que nadie pueda ver su verdadero cabello y debido a esta norma deban cubrirlo con un paño o con alguna peluca que es igual para todas las mujeres, cuando a una mujer no acepta estas normas es expulsada del grupo como la chica que fue entrevistada en el documental, quien noto estas normas, no las acepto y salió del grupo en parte porque ella no quería estar ahí y en parte tambien porque si no cumplía con esta serie de normas no se le permitiría mantenerse en la comunidad. Esta desigualdad que encierran los diversos grupos usualmente es interiorizada y cuando las personas de un grupo interiorizan ciertas normas dadas desde su nacimiento y posteriormente son reforzadas en el caso de los judíos ultraortodoxos por la religión es difícil para una comunidad y tambien para un individuo dar cuenta de ello, es aquí donde nace la importancia (como menciona Renato Rosaldo) de que la cultura ciudadana renegocie sus normas, esto resulta fácil de ver para aquellos miembros y grupos que son obligados a seguir estas normas, pero para los grupos privilegiados no resulta tan fácil de notar y mucho menos de combatir.
VIRNO, Paolo (2003) El Recuerdo Del Presente. Ensayo Sobre El Tiempo Histórico. Buenos Aires: Paidos, 2003 1. El Fenómeno Del Déja Vu y El Fin de La Historia