EL PEDIATRA: ¿Cómo debe ser?

vacunación, así como velar por su adaptación a la familia,

escuela y sociedad, protegiéndolo contra toda clase de agre-
siones y preparándolos para esa etapa crucial de la vida que
Dra. Sonia Pérez García * es la adolescencia, donde las prácticas comportamientos y
conductas de riesgos, ocasionan morbilidad crítica,
Solo el amor engendra lo que perdura... discapacidades y defunciones inmediatas o como en el caso
del tabaquismo, alcoholismo, etc, conforman enfermedades
El desarrollo tecnológico de la medicina, acelerado e y muerte temprana en los adultos; expresado de otra manera
incontenible; los cambios en la estructura de la sociedad; el es el pediatra el responsable de la salud integral del adoles-
cambio en el enfoque filosófico acerca de la conducta huma- cente como concepto que abarca su condición biosicosocial,
na, la toma de decisiones prácticas y económicas en la apli- de género, enmarcada en el período de ciclo vital y familiar
cación de los recursos para la atención de la salud; la inge- por el que transita y con satisfacción de sus necesidades de
niería genética; el desarrollo de los trasplantes y los cambios salud, desarrollo y bienestar.
ambientales originados por el hombre, son algunos de los Igualmente en el trato con los familiares debe ser para-
factores que han determinado el cambio de la ética tradicio- digma de tolerancia, comprensión, humanismo y respeto. Tal
nal a la bioética actual como ciencia filosófica, que tienen vez para todo esto debe existir una predisposición o voca-
como meta la preservación y mejoría de la vida. ción, pero la mayor parte de estas cualidades pueden ser
El análisis de los dilemas éticos desde diferentes pers- adquiridas con la práctica profesional y el ejemplo de los
pectivas permite comprender la influencia que tiene la forma- profesores, en el contexto de nuestra medicina revoluciona-
ción profesional en el desempeño del médico ante situacio- ria y solidaria con todos los pueblos del mundo.
nes que exigen una estrategia más integral, como los ante-
riormente señalados, por lo que las leyes, valores, valoracio-
nes y sentimientos deben fundirse en el juicio moral que se
emite en el mundo asistencial, como aspectos de un mismo
proceso que expresan diferentes dimensiones humanas ma-
nifestados en un individuo concreto; de ahí la importancia
de reflexionar acerca de cómo debe ser el pediatra, formado
en los principios éticos de nuestra sociedad.
Los pediatras deber ser profesionales, entusiastas, que
cumplan sus misiones de buen grado a pesar de su creciente
complejidad, asumiendo sus tareas como “defensores del
niño” aunque esto suponga enfrentarse con los adultos que
lo rodean, de lo que se desprende deban conservar una bue-
na dosis de tolerancia, paciencia y sencillez.
Lo mismo que un médico no es buen clínico si nunca
estuvo enfermo, tampoco será un buen pediatra quién no
“No es la inteligencia recibida y ca-
siga siendo un poco niño, sin que esto le reste energías o sual lo que da al hombre honor; sino el
autoridad, así conocerá mejor que nadie el mundo de su pe- modo con que la usa y la salva. No hay
queño paciente, aunque de entrada este le pague son su
rechazo, llorando o mirándole con extrañeza o temor, lo que más que un modo de perdurar: y es ser-
difícilmente es superable si no se tienen las cualidades del vir.”
pediatra.
Este es un médico que entiende y ama a los niños, que
se encuentra a gusto con ellos y se hace querer pronto por
ellos. No se trata solo de curar enfermedades numerosas y
repetidas durante la infancia; sino también de evaluar
sistemáticamente su crecimiento y desarrollo, alimentación,

* Especialista de II Grado en Pediatría. Profesora Asistente. Hospital Pediátrico

Universitario “Paquito González Cueto”, Cienfuegos

Correspondencia a: Dra. Sonia Pérez García. Hospital Pediátrico Universitario

“Paquito González Cueto”Cienfuegos. Calle 39 No 3602 Cienfuegos 55100. Cuba
E-mail: vdepid@hosped.cfg.sld.cu