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Granadero Baigorria, - de Agosto de 2020

A los señores y señoras del Comité de Evaluación y Selección del programa ALE-ARG,

En conocimiento de la – posibilidad que brinda el DAAD, en convenio con la DNCI, a los


estudiantes de carreras de Ingeniería de participar del Programa ALEARG de Becas tipo “E”, esperanzado
y con gran entusiasmo de poder formar parte del mismo, me dirijo a ustedes, por medio de la presente,
para transmitir, --, mis motivaciones y fundamentaciones para aplicar a la solicitud de la beca ofrecida.

Mi nombre es Gerónimo Castro, nací el 17 de Diciembre de 1996 en la ciudad de Rosario, Santa


Fe. Actualmente, y como casi toda mi vida, vivo en la ciudad de Granadero Baigorria, ciudad en la que
crecí junto a mi madre y mis hermanos.

En aquellos tiempos de mi niñez, en vista de que nuestra casa siempre necesitó de arreglos y
mantenimiento constante, junto con mi hermano mayor nos volvimos hábiles en el manejo de
maquinaria, y fuimos adquiriendo una cierta curiosidad por aprender más sobre el funcionamiento de
aquellas cosas que nos tocaba reparar y cuyos mecanismos de acción eran, a nuestros nóveles ojos de
niño, algo cercano a la magia. Esa curiosidad, años más tarde, fue mutando en mí hacia una más
profunda, a un ímpetu no solo de conocer el funcionamiento de los objetos que usábamos a diario, sino
más bien por conocer la realidad última de ese entramado incierto que es la naturaleza. Mi fascinación
por el estudio de la regularidades (y aún más, por lo irregular) del mundo, y su lenguaje –las
matemáticas-, nunca dejó de acrecentarse, y al descubrir, en mi adolescencia, mi implacable dedicación
al estudio –cualidad por la cual me fue concebido el gran honor de ser Abanderado de la Bandera
Nacional Argentina en la institución a la que asistía- decidí, al terminar mi secundaria técnica, continuar
con mi formación en Ciencias y volcarme, puntualmente, a la Ingeniería Mecánica.

-parrafo adolescencia, deportes.

A mis actuales 23 años de edad, estoy en puertas del último tramo de mi carrera de Grado, la
cual encuentro, en cada inmersión en el aula o en un libro, un poco más fascinante. Durante los cuatro
años cursados en la facultad, gracias a la gran motivación que me genera, la inamovible responsabilidad
con que me desempeño académicamente, y el apoyo incondicional de mis familiares -desde mi infancia
hasta hoy- tuve la posibilidad de aprobar todas las materias con muy buenas calificaciones, en tiempo y
forma según el plan de estudios. Tengo ahora la esperanza y el profundo deseo de poder realizar mi
Proyecto Final de Ingeniería y mi Practica Supervisada en Alemania.

Cuando estaba finalizando mi segundo año en la carrera – a mis 19 años-, tuve la oportunidad
de ofrecer a mi vida un desvarío que me permitiría conocer el mundo y sus rincones más lejanos por casi
dos años. Viajé desde Argentina hasta México y, de allí, llegué hasta Filipinas, recorriendo a mi paso
varios países de Europa, así como Turquía, Tailandia, Vietnam y China. Esta experiencia, si bien me alejó
de las aulas por un tiempo, no hizo más que continuar gestando en mí ese profundo deseo de transitar
el camino del conocimiento, por lo que al poco tiempo nombres como Dirac o Heisenberg engalanaban
los libros que viajaban junto a mí y la contemplación me hacía caer en la cuenta de cuánto faltaba aún
por hacerse en aquellos paises -que no distan mucho del mío en infraestructura- y cuán grande debía ser
el compromiso con el cual afrontar tales desafíos.
Sin embargo, debo remarcar que aquella experiencia no sólo fue esclarecedora sobre cuánto
falta por hacer en mi país, si no que fue altamente estimulante para el desarrollo de mi persona en el
ámbito social. Despojado de las estructuras básicas que uno contruye en su entorno sin siquiera notarlo,
debí adaptarme a vivir por mi cuenta en paises tan lejanos culturalmente al mío propio como puediera
imaginarse, lugares donde rara vez salió de mi boca alguna palabra en mi lengua materna, lo que fue
sumamente beneficioso para mejorar mi nivel de fluidez en el idioma inglés, así como para ganar
oportunidad de aprender algunas lenguas extranjeras en menor medida –aunque debo admitir que mi
nivel de turco o de thai es bastante básico-.

Al retornar a mi país, a fines del año 2018, retomé mis estudios con encarnado ahínco y, al
entrar en conocimiento de las becas ALEARG, vi en ella la posibilidad única de adquirir conocimiento de
industrias de primer nivel –como lo es la Industria Alemana- para aplicarlos directamente en el
desarrollo de mi país. Desafortunadamente desconocí la posibilidad de postularme para esta beca hasta
fines del año pasado, sin embargo, desde ese momento, esta postulación ha ocupado un lugar central
en la organización de mi mente. Recientemente, certifiqué mi nivel en idiomas Inglés y Alemán, y espero
continuar con la formación de este último independiente del resultado de esta postulación, pues me
parece un idioma fascinante y de suma utilidad.

Considero que estudiar y realizar una pasantía en el extranjero son experiencias sumamente
enriquecedoras, dándonos la posibilidad de medir y aplicar nuestros conocimientos adquiridos, de
aprender nuevas costumbres y formas de relacionarse –tanto en el ámbito laboral como en el ámbito
social-, así como de adquirir nuevas formas de desarrollar nuestro potencial académico e industrial.

A mis ojos, sin embargo, el hecho de que el país de destino sea Alemania no resulta un hecho
menor, pues este es un país que, pese a haber sufrido peor que ningún otro los embates del S. XX, ha
sabido convertirse en una potencia industrial de primer nivel – industrias como Siemens, Volkswagen,
Bosch o Mercedes-Benz, son una prueba tangible de ello-. Además, eminencias alemanas han sabido
aportar a innumerables campos del conocimiento, desde científicos como M. Planck, W. Heisenberg, C.
F. Gauss o A. Einstein; músicos estelares como Bach, Schumann, Brahms o Beethoven; o poetas como
J.W. Goethe, por lo que considero que nutrirse de todo el conocimiento que puede brindar Alemania
será para mí, en caso de ser aceptado, una experiencia como ninguna otra y que sabré, sin duda,
capitalizar a favor del desarrollo de mi país.

-parrafo trabajo, experiencia?

-parrafo proyecto.

-cierre

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