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Son muchos los métodos, para los distintos grados de protección que se
pretenden; los cuales en grado de importancia están: el diseño evitando puntos
sensibles de ataque en la estructura, utilizando recubrimientos protectores
metálicos y no metálicos, especificando materiales resistentes a la corrosión,
usando protección catódica, y alterando los medios por medio de inhibidores.
La protección catódica es conocida por ser la más eficiente en la protección de
superficies metálicas que se encuentran en permanente contacto con el agua, es
el caso de tuberías de todo tipo y muy especialmente en el tratamiento
anticorrosión de cascos de barcos.
Ánodos de sacrificio
Los sistemas de ánodos de sacrificio, utilizan ánodos galvánicos, los cuales están
hechos de magnesio ó zinc en forma de barras, se instalan los ánodos enterrados
directamente en el suelo rodeados de una mezcla química y empacados en sacos
especiales.
Corriente impresa
Los ánodos de corriente impresa deben ser de materiales como el grafito; el hierro
fundido con alto contenido de silicio; metales platinizados; la magnetita y mezcla
de óxidos metálicos, entre otros. Estos ánodos se instalan desnudos con material
de relleno especial (como el grafito pulverizado, con alto contenido de carbón).
Están conectados, individualmente ó en grupos, a una terminal positiva o a una
fuente de corriente directa, mediante conductores aislados. La estructura se
conecta a la terminal negativa, desde una fuente de corriente directa.
Inhibidores de Corrosión de Base Agua Los inhibidores de corrosión de base agua funcionan
modificando las características de las superficies del metal para disminuir su susceptibilidad a la
formación de la oxidación y la corrosión. Normalmente se venden concentrados y requieren ser
diluidos con agua, haciéndolos menos costosos que la mayoría de los productos de base
aceite/solvente.
Los inhibidores de corrosión de base agua generalmente tienen características muy deseables. Las
películas químicas formadas son delgadas y son transparentes cuando se secan. Los métodos de
aplicación para estos recubrimientos incluyen aspersión, cepillado o inmersión. Muy pocas veces
se requiere remover las películas antes de las operaciones subsecuentes, pero si la remoción es
necesaria, esto se hace fácilmente con limpiadores suaves de base agua. Los inhibidores de base
agua pueden prevenir efectivamente la corrosión para largos periodos de tiempo (desde semanas
hasta meses) bajo condiciones razonables de almacenaje en planta y embarque protegido. Debido
a que los productos de base agua trabajan mediante la disminución de la susceptibilidad del metal
a la oxidación, y no mediante la eliminación completa del agua y el aire, éstos inhibidores
frecuentemente no son tan efectivos como los recubrimientos de base aceite/solvente durante el
embarque y el almacenaje al aire libre de las piezas.
"La protección por recubrimiento consiste en crear una capa superficial o barrera
que aísle el metal del entorno."
En principio es el método más evidente, cubrimos el material por una capa de otra
sustancia que no se oxida y que impide que el material sensible entre en contacto
con el oxígeno y la humedad.
Recubrimiento No Métálicos
RECUBRIMIENTOS METÁLICOS
Se distinguen varíos métodos según el modo en que se deposita la capa
protectora:
Protección por capa química, se provoca la reacción de las piezas con un agente
químico que forme compuestos de un pequeño espesor en su superficie, dando
lugar a una película protectora por ejemplo: