ORATORIA

“Año del Bicentenario del Perú: 200 años de Independencia”

UNIVERSIDAD NACIONAL DE HUANCAVELICA

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ESCUELA PROFESIONAL DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

DISCURSO ESCRITO
PRESENTADO POR:

SAMIR ANTONY CAMACLLANQUI ACOSTA

CÁTEDRA:

ORATORIA

DOCENTE:

JUBER AMILCAR GAVIDIA ANTICONA

CICLO Y SECCIÓN:

V-A

HUANCAVELICA-PERÚ

2021

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RETÓRICA Y PODER POLÍTICO EN LA FORMACIÓN DEL

CIUDADANO ATENIENSE DEL SIGLO IV A.C.

APERTURA O INICIO
Saludo:
Con la venia de nuestro divino, estimados concurrentes, en este día tan hermoso y
magnífico les hago llegar mis saludos cordiales a cada uno de ustedes.
Elogio o Galanteo:
Me es grato dirigirme a un honorable y apreciable público como lo son cada uno de
ustedes, en donde están gente dinámica y entusiasta, gente que tienes esas agallas
de seguir adelante y triunfar en la vida.

INTRODUCCIÓN O EXORDIO
Motivación:
Se dice que las nuevas generaciones serán difíciles de gobernar. ¿Será cierto?
¿Porque en la actualidad prefieren las drogas que leer un libro?, ¿Porque prefieren
jugar sus videojuegos favoritos en lugar de estudiar? Estimados jóvenes el
componente ético con el que Isócrates ve la realización de su proyecto político, lo
distancia del relativismo sofista y del idealismo platonismo con su concepción del
filósofo como gobernante de las polis. La retórica se transformaba en manos de
Isócrates era un medio de acción política.
Proposición de Enlace:
Los seres humanos han deseado hacerse con el poder desde antes incluso que
existiera el mismo concepto. Obtener una situación privilegiada dentro de un grupo o
sociedad puede permitirnos vivir de una forma mucho más cómoda y placentera, algo
que como humanos siempre hemos buscado desde el principio de los tiempos.

CUERPO O CENTRO
Objeto:
Primeramente, la retórica nos puede inculcar a penetrar en los principios o códigos del
que se encuentra compuesto un discurso porque conduce a un análisis escrupuloso
que implica la desintegración de una argumentación. Y al mismo tiempo le suministra
al orador el equipo necesario para que éste edifique un discurso propio, destinado a
instruir o persuadir, como lo dijera Isócrates, “de los mismos argumentos que nos
sirven para persuadir a los otros, de ésos nos valemos para reflexionar”.
Metodología:
Por esto, el excelente educativo isocrático es el orador, aquel que posee no sólo la
técnica idónea del discurso sino también, y principalmente, la virtud moral adecuada
para que sus costumbres estén de acuerdo a lo expresado en sus palabras. De
manera que sus discípulos al aprender retórica asimilaron también moral. Esto se

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descubre en un pasaje de la “Carta a Nicocles” donde expresa al joven gobernante de

Salamina.
Isócrates. Carta a Nicocles, p10. “Yo apruebo todos los discursos que pueden sernos
útiles hasta en la cosa más mínima; pero en verdad, juzgo que los más excelentes,
más dignos de un rey y más propios de mi condición, son aquellos que aconsejan, ya
sobre las costumbres, ya sobre la administración del Estado. Y todavía más: de éstos,
aquellos que enseñan a los gobernantes cómo conviene tratar con la muchedumbre y,
a los particulares, qué disposición de ánimo deben tener para con los que los
gobiernan. Porque veo que es por esto que las ciudades llegan a ser muy felices y
poderosas."
Contenido:
Como también, es obvio que la educación isocrática tenía que ser obligatoriamente
política. El tema de la retórica debe ser por tanto la política y el empleo del poder por
parte de quienes dirigirán en el futuro las polis, presuntamente sus discípulos. De allí
que Isócrates asocia en su análisis los conceptos de felicidad y poder, al decir que una
ciudad depende de la concordia entre gobernantes y gobernados, es decir de la buena
capacidad de ánimo de unos para con otros. Y es cautivador notar cómo a la vez
entreteje en la rama conceptual de sus discursos la conexión saber y poder. El poder
produce saber y viceversa. Ese poder se ejercita desde un cuerpo político integrado
por hombres cultos, una especie de aristocracia ilustrada. Al definir a aquellos a
quienes considera sabios advierte.
Isócrates. Carta a Nicocles, p39. “Ten por sabios, no a los que disputan
minuciosamente sobre cuestiones pequeñas, sino a los que hablan con acierto de los
grandes temas; no a los que prometen la felicidad a los demás, viviendo ellos en la
mayor miseria, sino a los que hablan moderadamente de sí mismos, y pueden tomar
parte en los asuntos públicos entre los hombres, y no se alteran en las vicisitudes de la
vida, sino que saben llevar con dignidad y mesura tanto la buena como la mala
fortuna."
Sujeto:
Quienes hablan con fortuna sobre los grandes temas, no hacen promesas que no
pueden cumplir y mantienen su equilibrio mientras toman, parte en los temas públicos,
éstos pueden ser calificados de sabios. Aquellos por quienes pasarán los filamentos
del poder serán conductores intelectuales capacitado de un alto nivel ético. Organizar
la felicidad pública y el saber mediante la potestad del discurso, es decir, el poder de la
comunicación.
El gobernante aplicará entonces la oratoria para persuadir y dirigir, como aparato de
saber y de poder. Es por eso que los progresos de la manera y de la forma del
lenguaje no son sencillamente materia técnica. Isócrates persiste constantemente en
que todo depende de la magnitud de los problemas humanos a que se trate de dar
expresión y del empleo de dicha expresión. A través de esta se describe un problema,
se lo explica y se lo avasalla.
Es así que, fragmentando de una visión de tipo evolutiva, Isócrates eleva el valor de la
palabra como la herramienta que admite al hombre independizarse del mundo natural
e ingresar en la historia.

FINALIZACIÓN O CIERRE:

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Epílogo:
Nada nos desemejanza de los otros animales, y aun en la agilidad, en el vigor y en
otras cualidades somos inferiores a muchos de ellos; más porque existe en nosotros la
condición de persuadirnos unos a otros y de manifestarnos lo que anhelamos, no sólo
pudimos separarnos de la vida salvaje, sino que nos hemos agrupado formando
ciudades, establecimos leyes, inventamos técnicas y, en fin, casi todas las cosas que
hemos producido, es la palabra quien nos las ha procurado. Es la que nos ha instituido
normas sobre lo justo y lo injusto, lo bello y lo feo.
Frase de Remate:
No es necesidad, no deseo: no, el amor al poder es el demonio de los hombres.
Déjelos tener todo: salud, comida, un lugar para vivir, entretenimiento; son y siguen
siendo infelices y desanimados: porque el demonio espera y espera y estará
satisfecho. (Friedrich Nietzsche).
Despedida:
Para terminar, estimada concurrencia. Que sepan los jóvenes lo que deben hacer:
cambiar la realidad. Ese es el reto. Hacer que sus sueños se cumplan. La vida es un
lapso de tiempo propicio para ser feliz, triunfar, estudiar y amar, porque el
revolucionario verdadero está guiado por grandes sentimientos de amor.

REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA
-ISOCRATES. Speeches and Letters (ed. George Norlin). Cambridge, MA, Harvard University Press;
London, William Heinemann Ltd. 1980.

-FRABOSCHI, A., STRAMIELLO, C., SÁNCHEZ, M., GARCÍA, C. Isócrates: la formación ética del hombre
político (el gobernante y el ciudadano). Buenos Aires. Instituto de Estudios Grecolatinos, Prof. F. Nóvoa.
1995.

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