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Autor:
Cesar Madriz Escalona
C.I N° V-11.805.712
INTRODUCCIÓN
TEMA: ANTECEDENTES HISTÓRICOS DEL DERECHO A LA PROPIEDAD
1. Derecho a la Propiedad.
1.1. Características.
1.2. Atributos del Derecho de la Propiedad.
1.3. Referencia al Registro de Propiedad.
1.4. Pérdida del Derecho a la Propiedad.
1.5. Antecedentes Históricos del Derecho a la Propiedad.
2. Propiedad Individual y Colectiva.
3. Declaración Universal de los Derechos Humanos.
4. Pacto de San José.
CONCLUSIÓN.
FUENTE DE INFORMACIÓN.
INTRODUCCIÓN
1.1 Características:
Si bien el derecho a la propiedad es la facultad legítima de gozar y disponer
de una cosa con exclusión del ajeno arbitrio, y de reclamar su devolución cuando
se encuentra indebidamente en poder de otro; o bien como Sánchez Brito (2012)
lo defina como “cosa que es objeto de dominio, especialmente tratándose de
bienes inmuebles”. En Derecho Romano, la propiedad constituía una suma de
derechos, el de usar la cosa (ius utendi), el de percibir frutos (fruendi), el de
abusar (abutendi), el de poseer (posidendi), el de enajenar (alienandi), el de
disponer (disponendi), y el de reivindicar (vindicandi); a partir de estos elementos
se parte de las siguientes características:
1. Es un derecho exclusivo o excluyente: en el sentido de que el propietario
se beneficia él solo de los provechos de la cosa pudiendo impedir a terceros que
concurran al uso, goce y disposición de la cosa. Es decir concede un derecho
exclusivo sólo en favor del propietario y no se concibe que un bien pueda tener
dos propietarios. Así se establece la facultad del propietario de reivindicar la cosa
(artículo 548 del C.C), obligar al vecino al deslinde (artículo 550 del C.C) y el
derecho de cerrar su fundo (artículo 551 C.C). Sin embargo el carácter de
exclusividad no implica que la cosa deba pertenecer a una sola persona ya que
tanto la figura de la copropiedad como la coexistencia del derecho de propiedad
con otros derechos (usufructo, servidumbre, etc.) resulten posibles.
2. Es un derecho pleno o absoluto: esto es que la propiedad otorga un poder
en el cual no resulta procedente establecer límites en ausencia de una disposición
expresa que las establezca. Es el carácter que más se ja debilitado y
menoscabado; mediante él se daba al titular el máximo de poderes de disposición
sobre las cosas; permitía hacer de la cosa el uso que más conviniera a su
propietario, sin limitaciones; pero como hoy la propiedad es considerada en su
función social, este carácter absoluto ha pasado a ser relativo.
3. Es un derecho clásico: aun cuando en su situación normal es un derecho
pleno al coexistir derechos reales en cosa ajena, se reduce el volumen de los
poderes del propietario, pero una vez extinguida, por ejemplo de servidumbre,
recobra el propietario (concedente) la plenitud de sus poderes.
4. Es un derecho perpetuo: esto es, la propiedad no se extingue por el simple
uso. Es un derecho perpetuo en el sentido de que no lleva en sí una causa de
extinción por razón del tiempo. Así mismo, la propiedad no se extingue por la
muerte de su titular, sino que se transmite por sucesión.
5. Es un derecho autónomo: en el sentido de que no presupone la existencia
de un derecho de mayor alcance sobre la cosa.
6. Es un derecho inviolable: es decir invulnerable, como consecuencia de ser
absoluto.
Entre los indígenas existe una tradición comunitaria sobre una forma
comunal de la propiedad colectiva de la tierra, en el sentido de que la
pertenencia de ésta no se centra en un individuo sino en el grupo y su
comunidad. Los indígenas por el hecho de su propia existencia tienen
derecho a vivir libremente en sus propios territorios; la estrecha
relación que los indígenas mantienen con la tierra debe de ser
reconocida y comprendida como la base fundamental de sus culturas,
su vida espiritual, su integridad y su supervivencia económica. Para
las comunidades indígenas la relación con la tierra no es meramente
una cuestión de posesión y producción sino un elemento material y
espiritual del que deben gozar plenamente, inclusive para preservar
su legado cultural y transmitirlo a las generaciones futuras.
FUENTES DE INFORMACIÓN
Código Civil Venezolano. Gaceta Oficial N° 2.990 del 26 de julio de 1982. Caracas.
Eloiza Sánchez Brito. (2012). Derecho Civil Bienes. Segunda edición actualizada y
ampliada. Universidad de Carabobo, Biblioteca Ciencias Jurídicas y Políticas.
Valencia – Venezuela.
Emilio Calvo Baca. (2000). Código Civil Venezolano Comentado. Ediciones Libra.
Caracas – Venezuela.