Está en la página 1de 9

ACTUALIZACIÓN

PUNTOS CLAVE
Enfermedad bipolar Concepto. La enfermedad bipolar (BP) es un
trastorno del humor crónico que cursa con
o maníaco-depresiva episodios recurrentes de manía, hipomanía y
depresión, que frecuentemente se acompaña de
síntomas psicóticos.
C. Soutullo Esperóna, A. Figueroa Quintanab,c,
E.M. Miranda Vicarioa y P. de Castro Manglanoa Prevalencia. Oscila entre el 1-7%.
a
Unidad de Psiquiatría Infantil y Adolescente. Departamento de Psiquiatría y
Psicología Médica. Clínica Universidad de Navarra. Pamplona. Navarra. España. Etiología. Multifactorial con una fuerte carga
b
Unidad de Psiquiatría Infantil y Adolescente. Hospital Perpetuo Socorro. Las genética.
Palmas de Gran Canaria. Gran Canaria. España. cUnidad de Psiquiatría Infantil y
Adolescente. Hospital General de La Palma. Breña Alta. Tenerife. España. Diagnóstico. El diagnóstico es clínico, no existe
ninguna prueba que confirme o descarte la
enfermedad. Sin embargo, las escalas ayudan al
diagnóstico: para valorar la manía la YMRS
(Young Manía Rating Scale) y el BDI (Beck
Depresión Inventory) para valorar síntomas
Definición depresivos.

Diagnóstico diferencial. Deben descartarse:


La enfermedad bipolar o maníaco-depresiva (BP) es un tras- esquizofrenia, trastorno esquizoafectivo,
torno del humor grave, crónico y recurrente de origen mul- trastorno de personalidad del clúster B, trastorno
tifactorial, con fuerte carga genética. Su prevalencia de vida por uso de sustancias, trastorno orgánico y
varía entre el 1-7%, y suele iniciarse entre los 12 y 25 años. trastorno por déficit de atención e hiperactividad
Se caracteriza por episodios de manía o hipomanía (humor (TDAH).
eufórico o irritable) (tabla 1), y episodios de depresión (hu-
Tratamiento. Depende de la fase en que se
mor triste o irritable) como los de la depresión mayor (des-
encuentre el paciente, aunque los tratamientos
crita en otro capítulo de esta Unidad Temática).
recomendados son fármacos eutimizantes y
La hipomanía tiene criterios parecidos a la manía, pero
antipsicóticos.
menos intensos y más cortos (4 días en vez de 7). Si cursa con
psicosis o necesita hospitalización, automáticamente se con-
sidera manía.
El Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders-IV
(DSM-IV-TR) describe tres tipos de BP (American Psychia-
tric Association, 2000):
1. Tipo I (BP-I). Al menos un episodio maníaco o mixto.
Con frecuencia el paciente presenta también episodios de-
Historia
presivos, pero no son necesarios para el diagnóstico.
2. Tipo II (BP-II). Al menos un episodio de hipomanía y, Los trastornos del humor eran conocidos por los griegos
además, al menos un episodio depresivo mayor. Es la forma (400 a.C.) y los romanos, que definieron la “melancolía” y la
más frecuente de BP. “manía”, atribuyéndolos a causas biológicas y del tempera-
3. BP no especificada (BP-NES). Síntomas de BP que no mento. El francés Falret (1794-1870) hizo el primer diagnós-
cumplen criterios de BP-I o BP-II, es el tipo más frecuente tico de enfermedad maníaco-depresiva y en 1840 Esquirol
en niños y adolescentes. fue el primero en sugerir una alteración del humor como
4. Otros tipos de BP aún no recogidos en el DSM-IV, causa subyacente a los trastornos depresivos; posteriormente
que pueden formar parte del “espectro BP” son: a) BP tipo el británico Maudsley (1835-1918) acuñó el término “tras-
III, en la que el paciente presenta un episodio de (hipo)manía tornos afectivos”. El alemán Emil Kraepelin (1856-1926)
secundaria a un fármaco antidepresivo que con frecuencia se describió la psicosis maníaco-depresiva como entidad dife-
siguen de episodios hipomaníacos sin relación con un trata- rente a la esquizofrenia (que llamó demencia precoz). En
miento farmacológico, la mayoría de las veces el paciente 1978 el español Joaquim Puig Antich (1944-1989) definió en
presenta antecedentes familiares de bipolaridad y b) BP tipo EE. UU. la depresión en niños, y en la década de 1990 el
IV, en la que el paciente presenta episodios recurrentes de norteamericano Joseph Biederman describió el inicio de la
trastorno depresivo mayor y antecedentes familiares de BP. BP en niños y adolescentes.

5684 Medicine. 2011;10(84):5684-92


ENFERMEDAD BIPOLAR O MANÍACO-DEPRESIVA

TABLA 1 tas en estudios de ligamiento: los cromosomas 4p16, 6q16-


Criterios diagnósticos de episodio de manía (Diagnostic and Statistical
Manual of Mental Disorders-IV [DSM-IV-TR]) (American Psychiatric 22, 8q24, 12q24, 13q31-33, 16p12-13, 18p11.2, 18p11.3,
Association, 2000) 18q12, 18q21, 18q23, 21q22, 22q11-13 y el cromosoma X.
Los genes candidatos más replicados en los estudios son: el
Criterio A
del transportador de serotonina 5HTT, el de la monoamino-
Un período de humor anormalmente elevado, expansivo o irritable, de al menos una
semana (o cualquier duración si precisa hospitalización) oxidasa A (MAOA), el de la tirosina hidroxilasa (que intervie-
Criterio B
ne en la síntesis de dopamina [DA] y noradrenalina [NA]), el
En este período de alteración del humor persisten tres o más de estos síntomas
de la catecol-ortometil-transferasa (COMT) (que degrada la
(cuatro si el humor es sólo irritable): DA y NA), los de los receptores de dopamina DRD2 y DRD4,
1. Autoestima elevada o grandiosidad el del factor neurotrófico de crecimiento derivado del cerebro
2. Disminución de la necesidad de dormir BDNF (Brain-derived neurotrophic growth factor), la neuro-re-
3. Está más hablador de lo habitual o verborreico gulina 1 y los de función aún desconocida G72 y G30.
4. Fuga de ideas o experiencia subjetiva de pensamiento acelerado
5. Distraibilidad (la atención se desvía con facilidad por estímulos externos banales)
6. Agitación psicomotriz o aumento de la actividad social, laboral, escolar, o sexual Psicobiología
7. Implicación excesiva en actividades placenteras con riesgo alto de resultados
negativos (hipersexualidad, gastos, etc.)
Existen evidencias sobre las bases moleculares y celulares de
Criterio C
la BP, estas incluyen:
No cumplen criterios de episodio mixto (manía y depresión simultáneamente)
1. Estudios sobre transporte de electrolitos (sodio [Na], po-
Criterio D tasio [K], magnesio [Mg], calcio [Ca]) a través de membranas
La alteración del humor es suficientemente grave y causa una clara disminución del
funcionamiento ocupacional, social, en las relaciones con otros, o para necesitar
celulares y el papel de la ATPasa.
hospitalización (para prevenir el daño del paciente o de las personas a su alrededor), 2. Estudios sobre enzimas relacionadas con los neurotransmi-
o cursa con síntomas psicóticos
sores: monoamino-oxidasa (MAO), catecol-O-metiltransfera-
Criterio E sa (COMT), DA-beta-hidroxilasa (DBH).
Los síntomas no son por el efecto de una sustancia (droga, fármaco u otro 3. Estudios sobre el proceso biológico de la ciclación, de los
tratamiento), ni por otra enfermedad médica (por ejemplo: hipertiroidismo)
ejes hipotálamo-hipofisario-adrenal e hipotálamo-hipofisa-
rio-tiroideo, y los sistemas serotonérgico, dopaminérgico y
noradrenérgico y los neuropéptidos implicados. La teoría del
Epidemiología “kindling” o encendido, propuesta por Post (1981), explica
cómo los episodios afectivos se desencadenan progresiva-
La prevalencia de vida de la BP es aproximadamente del 1%, mente por estresores ambientales cada vez menores, hasta
aunque aumenta si se tienen en cuenta los trastornos del “es- que se producen espontáneamente. Esto explica por qué la
pectro bipolar”. Es igual de frecuente en varones y mujeres, ciclación se va acelerando en un paciente no tratado.
pero los episodios maníacos son más frecuentes en varones,
y los episodios depresivos, mixtos y la ciclación rápida en
mujeres. La media de la edad de inicio de la BP (I y II) es de Imagen cerebral y hallazgos anatómicos
17 años (menor que en la depresión). En más del 50% de los
casos la BP comienza antes de los 20 años. El 10-15% de los Estudios de imagen cerebral estructural (tomografía axial
adultos con depresión mayor desarrollarán BP. La BP de ini- computarizada [TAC], resonancia magnética nuclear [RMN])
cio tardío (en ancianos) es excepcional, y suele ser secundaria y recientemente de imagen por difusión de tensión difussion
a factores médicos y famacológicos. tensor imaging [DTI], la resonancia magnética funcional
(fMRI) y la espectroscopia por resonancia magnética (MRS)
han encontrado alteraciones en pacientes con BP como:
Etiología agrandamiento de los ventrículos laterales, mayor prominen-
cia de los surcos corticales, agrandamiento del tercer ventrí-
culo, hiperintensidades subcorticales en la sustancia blanca,
Genética reducción del volumen frontal, del cerebelo del hipocampo y
cambios en la amígdala.
Estudios de familiares, de gemelos y de adoptados han de- El sentido clínico de estos hallazgos es que los cambios en
mostrado el factor hereditario de todos los trastornos del la corteza prefrontal, implicada en el procesamiento de las emo-
humor, y especialmente de la BP. Los familiares de primer ciones y de la motivación, pueden explicar la impulsividad y
grado de un paciente con BP tienen un riesgo casi del doble labilidad emocional. Los cambios en la amígdala, implicada en
de sufrir BP, trastorno depresivo y trastorno esquizoafectivo. la interpretación de las expresiones faciales y los tonos de voz,
En la BP la concordancia en gemelos homocigóticos (los dos pueden generar irritabilidad, al interpretar un estímulo neutro
gemelos presentan BP) es del 60-70%, lo que demuestra que como agresivo. Los cambios en el hipocampo, centro implicado
otros factores (biológicos, psicológicos, ambientales y socio- en la memoria y en recordar situaciones peligrosas, puede ha-
culturales) influyen en la etiología. cer que el paciente esté siempre en un estado de ansiedad al no
Aunque aún no tiene utilidad diagnóstica, hay regiones saber si la situación es peligrosa o no. Finalmente, los cambios
en varios cromosomas identificadas como regiones candida- en el estriado, zona que procesa las recompensas, pueden hacer

Medicine. 2011;10(84):5684-92 5685


ENFERMEDADES PSIQUIÁTRICAS

al paciente perder el control de impulsos sobre situaciones y esto le conduce a involucrarse en actividades arriesgadas y
placenteras y potencialmente peligrosas. al incumplimiento del tratamiento.

Fenomenología de la manía Síntomas biológicos


Los síntomas de la manía y la hipomanía son cualitativamen- La manía se suele asociar a un conjunto de síntomas biológi-
te similares, y se distinguen en la intensidad, la duración y el cos, tales como:
impacto en el funcionamiento del paciente. La depresión bi-
polar cursa con los mismos síntomas que la depresión unipo-
lar. Por esto, en este apartado sólo detallamos la fenomeno- Disminución de la necesidad de sueño
logía de la manía. El paciente con manía presenta alteraciones
en cuatro áreas: humor, actividad psicomotriz, función cog- El paciente, que se siente con mucha energía, necesita dor-
nitiva y síntomas biológicos. mir muchas menos horas de lo normal, y al día siguiente se
siente descansado. Puede incluso pasar varios días seguidos
sin dormir, lo que empeora el curso de la manía.
Humor
En un episodio de manía el humor puede ser eufórico (manía Pérdida de peso
clásica), o irribable. Además, el humor frecuentemente es lá-
bil e inestable, con cambios muy bruscos. El paciente maníaco no siente apetito e ignora sus necesida-
des nutricionales, lo que asociado a un aumento de la activi-
dad motora produce una pérdida de peso.
Actividad psicomotriz
Un paciente maníaco tiene excesiva energía y actividad (cog- Aumento del deseo y comportamiento sexual
nitiva y motora). El pensamiento es acelerado (“me vienen
muchas ideas”) y esto se manifiesta por un lenguaje rápido Se produce un comportamiento sexual desinhibido y excesi-
(taquilalia) y atropellando las palabras (lenguaje presionado). vo, incluso con desconocidos; en los niños la hipersensibili-
Cuando la manía es grave el paciente puede pasar de una idea dad puede ser verbal.
a otra (fuga de ideas) resultando un discurso incomprensible
(ensalada de palabras). Los casos más graves se acompañan
de síntomas psicóticos, como describimos más adelante. Fenomenología en niños y adolescentes
En la manía la actividad motora es excesiva, y el compor-
tamiento es expansivo (risas), dramático (excesivamente ges- La presentación en niños y adolescentes es diferente de las
tual), impulsivo (empieza actividades sin acabarlas) y desinhi- descripciones clásicas en adultos. La manía en niños se carac-
bido (excesiva familiaridad con extraños). Con frecuencia el teriza con más frecuencia por irritabilidad que por euforia,
paciente maníaco también exhibe un aumento de gastos que rabietas muy intensa y prolongadas, irritabilidad extrema,
no se puede permitir y toma decisiones arriesgadas sin pen- explosiones conductuales de ira, un curso más continuo, epi-
sar en las consecuencias (como comenzar un negocio que no sodios más cortos, ciclación rápida y menor eficacia en la
conoce que desemboca en grandes pérdidas económicas). respuesta al tratamiento. Además, la manía y la depresión pe-
Por último, la apariencia con frecuencia refleja el humor diátricas se acompañan más frecuentemente de síntomas psi-
eufórico: facies jovial, prendas de vestir coloridas, exceso de cóticos y estados mixtos.
maquillaje o forma de vestir seductora o provocativa.

Ciclación
Función cognitiva
Según la frecuencia de cambio de episodio se pueden descri-
El paciente maníaco con frecuencia presenta incapacidad bir algunas características:
para centrarse y fallos de memoria. En el 20% de los casos el
pensamiento expansivo adquiere características delirantes:
delirios de grandiosidad, de riqueza (“soy rico y pertenezco a Ciclación rápida
la aristocracia”), de bienestar, de tener poderes sobrenatura-
les o de auto-referencia. También pueden presentar alucina- Se da cuando en un año el paciente presenta cuatro o más
ciones auditivas o (menos frecuente) visuales. Los síntomas episodios afectivos (depresión, hipomanía o manía). Es más
psicóticos en ocasiones son indistinguibles de la esquizofre- frecuente en la BP-II, en población pediátrica y en mujeres,
nia o de la psicosis tóxica. Al aumentar la gravedad de la ma- y más resistente al tratamiento. El hipotiroidismo y el abuso
nía disminuye la conciencia de enfermedad (insight) y la ca- de alcohol u otras drogas (tranquilizantes, estimulantes, ca-
pacidad de juicio. El paciente no es consciente de su estado feína) favorecen su aparición.

5686 Medicine. 2011;10(84):5684-92


ENFERMEDAD BIPOLAR O MANÍACO-DEPRESIVA

TABLA 2
Causas médicas, farmacológicas y tóxicas de manía

Causas médicas Causas farmacológicas y tóxicas


Infecciones virales: influenza, mononucleosis infecciosa Corticoesteroides y esteroides anabólicos, anticonvulsivantes (a niveles altos en sangre,
como carbamacepina)
Endocrinológicas: hipertiroidismo, síndrome de Cushing, hipercalcemia, hiponatremia,
diabetes mellitus, cambios hormonales propios de la pubertad Antidepresivos (tricíclicos, ISRS, IMAO, trazodona y, en menor medida, bupropión),
hipnóticos, isotretinoina, bloqueadores beta, dopaminomiméticos, simpaticomiméticos,
Autoinmunes: lupus eritematoso sistémico estimulantes (metilfenidato), amantadina, baclofeno, benzodiacepinas, bromocriptina,
Neurológicas: hematoma subdural, esclerosis múltiple, tumor cerebral, traumatismo buspirona, captopril, ciclosporina, cimetidina, cloroquina, dapsona, dietiltoluamina, digitalis,
craneoencefálico, epilepsia no controlada, infección del sistema nervioso central, dextrometorfano, antihistamínicos H2, loxapina, metoclopramida, fenilpropanolamina,
enfermedad de Huntington, sida, enfermedad cerebrovascular, corea reumática procarbacina, propafenona, efedrina/pseudoefedrina, selegilina, teofilina, zidovudina
Neoplasias Otras sustancias
Déficit de ácido fólico, pelagra Drogas de uso recreacional (estimulantes, cocaína, alcohol, cannabis, alucinógenos)
Intoxicaciones
Metales pesados (plomo)
IMAO: inhibidores de la monoaminooxidasa; ISRS: inhibidor selectivo de la recaptación de serotonina.

La ciclación “ultradiana” o ultrarrápida Enfermedades médicas

Se da cuando hay ciclación muy rápida entre síntomas de La manía puede también ser secundaria a enfermedades mé-
manía y de depresión muchas veces a lo largo de horas o dicas. Las regiones alteradas con más frecuencia en los cua-
días. dros médicos que cursan con depresión o manía son el lóbu-
lo frontal y el temporal. Las lesiones en el hemisferio cerebral
izquierdo tienden a asociarse con depresión, y en el derecho
Diagnóstico diferencial con manía (tabla 2).

Los síntomas de BP no son patognomónicos. El diagnóstico


diferencial se debe realizar con la normalidad, con otros tras- Comorbilidad
tornos psiquiátricos y con el uso de un fármaco o una droga,
o una enfermedad médica. La comorbilidad psiquiátrica es muy frecuente en la BP.
La comorbilidad psiquiátrica adelanta el inicio, empeora el
curso clínico y el pronóstico, aumenta la refractariedad al
Tristeza y euforia normales tratamiento y eleva el riesgo de suicidio.

Los altibajos del humor proporcionados al ambiente y la in-


clinación natural a presentar humor alegre (temperamento Trastornos de ansiedad
hipertímico) pueden ser normales.
La mayoría de los pacientes con BP tienen síntomas subsin-
drómicos de ansiedad, y hasta el 40% cumplen criterios diag-
Otros trastornos psiquiátricos nósticos de, al menos, un trastorno de ansiedad (y con fre-
cuencia más de uno), especialmente trastorno por ataques de
Deben descartarse otros trastornos psiquiátricos: de ansie- pánico, fobia social y trastorno por estrés postraumático
dad, de personalidad (especialmente el trastorno límite de la (TEPT).
personalidad), trastorno esquizoafectivo y esquizofrenia. En
niños y adolescentes debe hacerse un diagnóstico diferencial
con un TDAH y un trastorno negativista desafiante. Abuso de sustancias
Más del 50% de los pacientes con BP tienen abuso de sus-
Fármacos tancias comórbido, sobre todo los varones jóvenes, con en-
fermedad bipolar-II. Con frecuencia se trata de un policon-
Hay fármacos que pueden causar manía, especialmente los sumo: alcohol y drogas estimulantes.
antidepresivos (tabla 2).

Trastorno por déficit de atención


Drogas e hiperactividad en niños
Las drogas de uso recreacional (estimulantes, cocaína, alcohol, La BP en niños es comórbida con el trastorno por déficit de
cannabis, alucinógenos) e intoxicaciones con metales (como el atención e hiperactividad (TDAH) entre el 25 y 60% de los
plomo) pueden producir manía. También la abstinencia aguda casos, según diferentes estudios. Esta comorbilidad dificulta
de alcohol tras un consumo prolongado (tabla 2). el diagnóstico y complica el tratamiento.

Medicine. 2011;10(84):5684-92 5687


ENFERMEDADES PSIQUIÁTRICAS

Enfermedad médica TABLA 3


Principal acción de los fármacos utilizados en la fase aguda de la manía

La comorbilidad médica es frecuente en la BP y es una causa Antipsicótico atípico Disminuye la dopamina (por bloqueo de los receptores D2)
frecuente de mortalidad. Cerca del 50% de los pacientes BP Estabilizador del humor Aumenta GABA y disminuye el glutamato y segundos
tienen enfermedades médicas como obesidad, artritis, hiper- mensajeros
Benzodiacepina Aumenta GABA
tensión, diabetes mellitus, enfermedades cardiovasculares,
TEC Aumenta permeabilidad barrera hemato-encefálica,
respiratorias, neurológicas o infecciosas. estimulación hipotalámica, aumenta monoaminas
TEC: terapia electroconvulsiva.

Tratamiento
TABLA 4
La BP cursa con síntomas que interfieren en diversas áreas del Esquema del tratamiento indicado según el tipo de enfermedad bipolar
funcionamiento normal de la persona, y presentan una elevada
Episodio maníaco agudo AA + estabilizador del humor (más BDZ)
tasa de comorbilidad psiquiátrica, por lo que su tratamiento
Episodio depresivo agudo Estabilizador del humor (litio o lamotrigina) +
requiere un abordaje multidisciplinar. Debe diseñarse un plan antidepresivo (ISRS o bupropión)
terapéutico para cada paciente, teniendo en cuenta sus caracte- Fase de mantenimiento del trastorno Estabilizador del humor
rísticas individuales, familiares y ambientales. El médico debe bipolar
Trastorno bipolar clásico Litio
implicar al paciente en su tratamiento, y si presenta capacidad
Trastorno bipolar atípico (ciclación Ácido valproico
de juicio, contar con su aprobación. Si el paciente o su familia rápida, síntomas psicóticos, episodios
tienen dificultades para seguirlo puede disminuir el cumpli- mixtos)
miento terapéutico. En el tratamiento es indispensable la psi- AA: antipsicótico atípico; BDZ: benzodiacepina; ISRS: inhibidor selectivo de la recaptación
de serotonina.
coeducación. Consiste en explicar al paciente y a su familia los
síntomas de la enfermedad, las causas, el pronóstico, las distin-
tas opciones terapéuticas y los riesgos de no seguir el trata- los antipsicóticos atípicos son de primera elección porque
miento. Con ello se logra mejorar la adherencia terapéutica. ofrecen las siguientes ventajas: a) menor incidencia de efec-
El tratamiento comprende tres fases: aguda, de continua- tos secundarios, sobre todo de síntomas extrapiramidales; b)
ción y de mantenimiento. Cada fase tiene sus objetivos pro- cierta acción antidepresiva (útil porque con frecuencia un
pios: alcanzar la remisión sintomática en la fase aguda, evitar episodio maníaco se sigue de otro depresivo) y c) inicio de
una recaída en la fase de continuación, restaurar el funciona- acción más rápido.
miento psicosocial y evitar una recurrencia en la fase de La clozapina, aunque es el antipsicótico atípico más efec-
mantenimiento. tivo, por sus efectos secundarios potencialmente graves
(agranulocitosis) y la necesidad de monitorización hematoló-
gica periódica sólo está indicada en pacientes con BP refrac-
Tratamiento de la manía (o hipomanía) aguda tario (tabla 4).

El tratamiento farmacológico es esencial a la hora de tratar Estabilizadores del humor


la manía. En muchas ocasiones el paciente precisa el ingreso Los estabilizadores del humor son también de primera elec-
hospitalario para proteger a él y a las personas de su entorno ción (CANMAT y NICE) en la fase aguda del tratamiento de
de las consecuencias de sus actos impulsivos, y poder aplicar la manía. Si el paciente seguía un tratamiento con un estabili-
el tratamiento. zador del humor en el momento en el que empieza el episodio
Los objetivos de la fase aguda del tratamiento de un epi- maniaco, el primer paso sería “optimizar” la dosis de dicho
sodio maníaco son: disminuir la agitación psicomotriz y los tratamiento. Los estabilizadores del humor más utilizados en
síntomas psicóticos, conseguir que el paciente duerma y la BP son el litio (Li) y el valproato (VPA). Se desconoce el
coma y eliminar las conductas de riesgo. mecanismo exacto por el que ejercen su efecto antimaníaco.
A continuación se explican los principales fármacos utili-
zados en un episodio de manía (tabla 3). Litio. Es un catión muy parecido al Na y al K. Su efecto
terapéutico reside en la capacidad de modificar el transporte
Antipsicóticos transmembrana del Na y el K que regula la excitabilidad
Los antipsicóticos atípicos (AA) (olanzapina, risperidona, neuronal y la capacidad de conducción de estímulos en el
quetiapina, aripiprazol o ziprasidona) son el tratamiento de sistema nervioso central.
primera elección en la fase aguda de la manía con o sin sín- El Li es el estabilizador del humor más efectivo en un paciente
tomas psicóticos (tabla 4). con BP clásica (que cursa con un episodio de manía, seguido de
Los antipsicóticos tienen una efectividad antimaníaca pa- uno depresivo y de un periodo de eutimia) con antecedentes
recida, pero difieren en su afinidad por los distintos recepto- familiares de BP. Sin embargo, la efectividad del Li es menor
res (dopaminérgicos, serotoninérgicos, histamínicos, colinér- cuando el episodio de manía cursa con ciclación rápida, sín-
gicos/muscarínicos y adrenérgicos) y por lo tanto en el perfil tomas psicóticos, o depresivos (episodio mixto) y abuso de
de efectos secundarios. sustancias comórbido. Hasta el 80% de los pacientes bipola-
Los antipsicóticos típicos (como haloperidol o clorpro- res en fase maníaca presentan una buena respuesta al Li. Sin
macina) también son efectivos en un episodio maníaco, pero embargo, esta respuesta aparece lentamente (1-3 semanas),

5688 Medicine. 2011;10(84):5684-92


ENFERMEDAD BIPOLAR O MANÍACO-DEPRESIVA

por lo que la mayoría de las veces es necesario asociar un AA CBZ reduce los niveles de lamotrigina y de VPA, mientras
(cuyo inicio de acción es rápido). que el VPA aumenta los niveles de CBZ.
El Li es efectivo para el tratamiento agudo y de mante- Los efectos adversos de CBZ incluyen: sedación, visión bo-
nimiento de la manía, y para el tratamiento de mantenimien- rrosa, mareos, y ataxia. Hay casos descritos de síndrome de Ste-
to (no para el tratamiento agudo) de la depresión. vens-Johnson, hiponatremia, anemia aplásica y agranulocitosis.
La dosis óptima del tratamiento con Li se establece en La efectividad de la lamotrigina en el tratamiento de la
función de la efectividad clínica, que se relaciona con lite- manía aguda es controvertida, aunque puede ayudar en el
mias (nivel de litio en sangre) entre 0,8 y 1,2 mEq/l. El Li tratamiento del episodio depresivo BP.
tiene una “ventana terapéutica” estrecha, porque una litemia Algunos estabilizadores del humor como levetiracetam y
por encima de 1,5 mEq/l puede ser tóxica y por debajo de tiagabina han mostrado cierta efectividad antimaníaca en al-
0,6 mEq/l el Li puede ser inefectiva. gunos estudios, aunque no se emplean en la práctica clínica.
El Li tiene algunos efectos secundarios como náuseas, mo- Otros, como topiramato y gabapentina, no son efectivos en el
lestias abdominales, poliuria, polidipsia, temblor, sedación y tratamiento de la manía aguda.
diarrea. Además puede empeorar el acné, producir hipotiroi-
dismo y aumento de peso. También se asocia en ocasiones a Benzodiacepinas
algunos efectos secundarios graves pero poco frecuentes Las benzodiacepinas son útiles como tratamiento coadyu-
como: diabetes insípida nefrogénica, por intervenir en la ac- vante (asociadas a antipsicóticos atípicos y/o estabilizadores
ción de la hormona antidiurética a nivel del túbulo distal, del humor) para la agitación psicomotriz, síntomas de ansie-
afectar la función cardiaca por bloqueo aurículo-ventricular dad, insomnio, disforia y agresividad. Las benzodiacepinas
y arritmia sinusal. Antes de iniciar el tratamiento se reco- más empleadas en la manía aguda son loracepam y clonace-
mienda obtener un hemograma, especialmente un recuento pam. Se debe utilizar la mínima dosis efectiva y durante el
leucocitario y un ionograma, valorar la función renal (creati- mínimo tiempo necesario para evitar los efectos secundarios,
nina), la función tioridea y, posteriormente, una monitoriza- la dependencia y la tolerancia.
ción con controles cada seis meses.
Terapia electroconvulsiva
Valproato. También es un tratamiento de primera línea. Se aplica la terapia electroconvulsiva (TEC) en la fase aguda
Puede ser más efectivo que el Li en episodios maníacos que de los episodios maníacos refractarios al tratamiento farma-
cursan con ciclación rápida, síntomas psicóticos y episodios cológico, tratados sin éxito con dosis máximas de una combi-
mixtos. También se ha comprobado su efectividad en pacien- nación de fármacos durante un tiempo suficiente. En estos
tes con BP refractarios al tratamiento con Li. Comparado casos, la TEC es efectiva hasta en el 80% de los casos. Tam-
con el Li, el VPA tiene un manejo clínico más fácil (no re- bién es preferible el tratamiento con TEC en mujeres emba-
quiere una monitorización hematológica tan estrecha) y su razadas con manía porque los tratamientos habituales de la
inicio de acción es más rápido, aunque puede producir una manía tienen riesgos teratogénicos.
elevación de las enzimas hepáticas.
El VPA puede estar asociado con efectos adversos como: au-
mento de peso, sedación, náuseas, caída de pelo y temblor. Los Fracaso del tratamiento agudo
efectos secundarios más graves son: trombopenia, toxicidad
hepática, pancreatitis, defectos del tubo neural y discrasias san- Se debe evaluar la efectividad del tratamiento en aproxima-
guíneas. También está asociado con síndrome de ovario poli- damente una semana. En la mayoría de los casos se comienza
quístico, especialmente en adolescentes y mujeres jóvenes, por el tratamiento de la manía aguda con un AA (o haloperidol
lo que debe sospecharse en mujeres tratadas que tengan acné, como alternativa).
hirsutismo y alteraciones menstruales. Si la paciente es una En caso de falta de respuesta se recomienda que el clíni-
mujer en edad fértil debe realizarse un test de embarazo debi- co siga los pasos, hasta conseguir una respuesta clínica: a)
do a los efectos teratogénicos del VPA sobre el embrión. asegurar adherencia terapéutica; b) aumentar progresiva-
Se recomienda una monitorización de VPA, hemograma mente la dosis del fármaco hasta la máxima dosis tolerada; c)
y perfil hepático cada seis meses. asociar una benzodiacepina (si no se asoció desde el princi-
pio); d) añadir un estabilizador del humor; e) añadir un se-
Otros estabilizadores del humor. La carbamacepina (CBZ) gundo estabilizador del humor; f) añadir clozapina; g) añadir
y oxcarbamacepina son estabilizadores del humor de segunda un tercer estabilizador del humor y h) TEC.
elección, indicados en el tratamiento de la manía aguda, so- En cualquier momento del tratamiento de la manía el
bre todo en la BP-II, y en pacientes refractarios al tratamien- clínico debe monitorizar cuidadosamente la aparición de sín-
to con Li y VPA. La CBZ es un potente inductor enzimático, tomas depresivos.
por lo que interacciona con numerosos fármacos, mientras
que la oxcarbamacepina puede producir hiponatremia.
La CBZ se utiliza poco debido a sus interacciones con Tratamiento del episodio depresivo en la
otros medicamentos, porque bloquea el citocromo P450 y enfermedad bipolar
eleva los niveles de otros fármacos metabolizados por el
P450. Al usar CBZ combinada con otros estabilizadores del La depresión bipolar supone un auténtico reto para el clínico,
humor el médico debe tener cuidado por las interacciones: la ya que suele ser refractaria. El tratamiento fundamental en la

Medicine. 2011;10(84):5684-92 5689


ENFERMEDADES PSIQUIÁTRICAS

TABLA 5
Perfil farmacodinámico según la constante de afinidad a los receptores (Ki) y vida media de los fármaco

T Tiempo Afinidad a receptores (constante Ki)


Antipsicótico Metabolismo
1/2 (horas) máximo (h) D2 5-HT1A 5-HT2A 5-HT2c H M1
1 2

Aripiprazol 50-72 03-may CYP 450 2D6>>3A4 0,66 5,5 8,7 22 26 74 30 6,7
Clozapina 12 1-4 1A2 210 160 2,6 4,8 6,8 158 3,1 1,4
Haloperidol 3-6 24 3A4 2,6 1.800 61 4.700 17 600 260 > 1.000
Risperidona 3 1-2 2D6 3,77 190 0,15 32 2,7 8 5,2 > 10.000,0
Quetiapina 24 2 3A4 770 300 31 3.500 8,1 80 19 120
Olanzapina 30 6 1A2 20 610 1,5 4,1 44 280 0,08 2,5
Ziprasidona 7 5 Aldehido oxidasa 2,6 1,9 0,12 0,9 2,6 154 4,6 300
: alfa adrenérgico; SHT: serotoninérgico; D: dopaminérgico; H: histaminérgico; M: muscarínico; t 1/2: vida media.

depresión bipolar son los estabilizadores del humor. Muchas síntomas depresivos pueden empeorar los maníacos, y vice-
veces también se emplean los antidepresivos (inhibidor selec- versa. El fármaco fundamental en estos episodios es el esta-
tivo de la recaptación de la serotonina [ISRS] o bupropión). bilizador del humor. En ocasiones es necesario asociar hasta
tres estabilizadores del humor diferentes, o incluso un AA.
Estabilizadores del humor Como se ha explicado anteriormente, el litio es menos efec-
En la gran mayoría de los casos el tratamiento de la depresión tivo en este tipo de episodios (tabla 5).
bipolar requiere un estabilizador del humor por varios motivos:
a) previene el viraje a manía sobre todo durante el tratamiento
con un antidepresivo (motivo fundamental); b) tiene efecto an- Fase de continuación y mantenimiento
tidepresivo (el efecto antidepresivo del estabilizador con fre- de la enfermedad bipolar
cuencia es débil) y c) potencia al fármaco antidepresivo.
Entre los estabilizadores del humor destaca la lamotrigi-
El tratamiento de continuación y mantenimiento está in-
na en el tratamiento agudo y de continuación para la depre-
dicado en pacientes con dos episodios (hipo)maníacos, e
sión bipolar en pacientes con predominio de episodios de-
incluso en pacientes con un solo episodio maníaco que
presivos. Hay que iniciarlo en dosis bajas y aumentarlo
tienen antecedentes familiares de bipolaridad. El obje-
lentamente para disminuir el riesgo de rash. Esta estrategia
tivo de estas dos fases es prevenir las recaídas y recu-
de subida muy lenta de la dosis reduce mucho el riesgo de
rrencias.
síndrome de Stevens-Johnson. En adultos la dosis inicial
Para el tratamiento de mantenimiento se utilizan los es-
de tratamiento recomendada es 25 mg/día las primeras
tabilizadores del humor (Li y VPA) y, en ocasiones, los AA.
2 semanas, 50 mg/día las semanas 3 y 4 de tratamiento y
La mayoría de los pacientes con BP requieren tratamiento de
100 mg/día las semanas 5 y 6. A partir de la séptima sema-
mantenimiento a largo plazo, y en muchos casos de por vida.
na de tratamiento se puede ir aumentando la dosis hasta
Sin embargo, en algún momento de una evolución favorable
200 mg/día, según la evolución clínica y la tolerancia.
conviene valorar la necesidad de mantener el tratamiento es-
tabilizador, es decir, intentar disminuir la dosis gradualmente
Antipsicóticos atípicos
hasta suspender, y valorar la evolución clínica. En caso de
Se utilizan por los mismos motivos por los que se indica un
empeoramiento el clínico debe reiniciar el mismo tratamien-
estabilizador del humor en esta fase de la BP. Algunos AA,
to farmacológico.
como especialmente la quetiapina, pueden tener eficacia an-
El tratamiento de mantenimiento con VPA está indicado
tidepresiva.
cuando el litio no es efectivo o es mal tolerado, o como
coadyuvante de éste (en casos de efectividad parcial), en ma-
Antidepresivos (ISRS)
nía atípica (ciclación rápida, episodios mixtos, abuso de sus-
Comparado con la depresión unipolar, en la depresión bipo-
tancias comórbido), o en manía secundaria a una enfermedad
lar los fármacos antidepresivos resultan menos efectivos, y
cerebral (en este caso también es útil la CBZ).
aumentan el riesgo de viraje a manía y de ciclación rápida,
El tratamiento de mantenimiento con lamotrigina pre-
sobre todo si no se asocian a un estabilizador del humor.
viene, sobre todo, los episodios depresivos, aunque también
El tratamiento antidepresivo se debe mantener dos meses (se
los episodios maníacos, especialmente en pacientes bipolares
mantienen durante menos tiempo que en la depresión uni-
con síntomas de ansiedad. Este efecto profiláctico predomi-
polar por el riesgo de viraje a manía). Si el antidepresivo cau-
nantemente hacia episodios depresivos contrasta con el litio
sa viraje a manía o induce ciclación rápida se debe disminuir
y el ácido valproico, que fundamentalmente previenen episo-
la dosis o suspender el fármaco rápidamente.
dios maníacos.
Recientemente el tratamiento de mantenimiento con an-
Tratamiento del episodio mixto tipsicóticos atípicos se está utilizando cada vez más. Su ma-
yor desventaja cuando se usan de modo continuado es el
El episodio mixto del BP es el que peor responde al trata- riesgo de aparición de un síndrome metabólico y de síntomas
miento farmacológico, porque los fármacos que mejoran los extrapiramidales (tabla 5).

5690 Medicine. 2011;10(84):5684-92


ENFERMEDAD BIPOLAR O MANÍACO-DEPRESIVA

Psicoterapia La BP es un trastorno complejo, que requiere el esfuerzo


de todos, desde los investigadores que ayudan a entender
mejor la biología del trastorno, hasta el personal sanitario
La efectividad de la psicoterapia en el BP está menos estudia-
que ayuda continuamente a los pacientes y a las familias, y los
da. En ningún caso se debe plantear como único tratamiento.
pacientes que nos enseñan en la clínica diaria.
El objetivo fundamental es el apoyo y la psicoeducación para
aumentar el conocimiento de la BP (el cuadro clínico, los
desencadenantes, los pródromos) y favorecer la adherencia Bibliografía recomendada
terapéutica.
La psicoeducación incluye informar al paciente y a su r Importante rr Muy importante
familia sobre la importancia del estilo de vida (horario regu-
lar de sueño y rutinas, evitar uso de alcohol y drogas), iden- ✔ Metaanálisis ✔ Artículo de revisión
Ensayo clínico controlado
tificar desencadenantes de episodios para evitarlos (depriva- ✔ ✔ Guía de práctica clínica
Epidemiología
ción de sueño, abuso de sustancias), identificar precozmente ✔
los síntomas y signos de una descompensación para solicitar
ayuda precozmente, y enfatizar la importancia de cumplir rr Ackenheil
✔ cesses M. Neurotransmitters and signal transduction pro-
in bipolar affective disorder: a synopsis. J Affective Disord.
correctamente el tratamiento indicado. 2001;62:101-11.
r American
✔ Action. Academy of Child and Adolescent Psychiatry Official
Practice parameters for the assesment and treatment of
children and adolescents with bipolar disorder. J Am Acad Child
Conclusiones Adolesc Psychiatry. 1997;36Suppl10:S157-76.
American Psychiatric Association. Diagnostic and statistical manual of
mental disorders. 4ª ed. Washington, DC: American Psychiatric Associa-
tion; 2000.
La BP o enfermedad maníaco-depresiva es un trastorno del
humor crónico que cursa con episodios recurrentes de hipo- rr Belmaker RH, Yaroslavsky Y. Perspectives for new pharmacological
interventions. En: Soares JC, Gershon S, editors. Bipolar disorders.
manía, manía y depresión. Su prevalencia es del 1% o supe- Basic mechanisms and therapeutic implications. New York, NY:
Marcel Dekker, Inc; 2000. p. 507-27.
rior, si se tiene en cuenta todo el “espectro bipolar”. Biederman J, Faraone S, Mick E, Wozniak J, Chen L, Ouellette C, et al.
Aún no se conoce totalmente la etiología de la BP, en los Attention-deficit hyperactivity disorder and juvenile mania: an over-
looked comorbidity? J Am Acad Child Adolesc Psychiatry. 1996;35:997-
últimos años se han efectuado avances notables en la genéti- 1008.
ca, neuroquímica y neuroimagen, indicando un origen cere- Biederman J, Klein R, Pine DS, et al. Resolved: mania is mistaken for
ADHD in prepubertal children. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry.
bral y genético del trastorno. 1998a;37:1091-9.
En la actualidad hay disponibles varios fármacos para el Biederman J, Mick E, Bostic JQ, Prince J, Daly J, Wilens TE, et al. The
naturalistic course of pharmacologic treatment of children with manic-
tratamiento de la BP. Durante muchos años el Li era la única like symptoms: a systematic chart review. J Clin Psychiatry. 1998b;59:
opción disponible para el tratamiento a largo plazo de la BP. 628-37.
Calabrese JR. Lamotrigine in bipolar disorder. Paper presented at Ame-
Las guías clínicas recomiendan en caso de manía, como pri- rican Psychiatric Association Annual Meeting, May 30-June 4, 1998, To-
mera opción, el tratamiento con AA (olanzapina, risperido- ronto, Canada.
Calabrese JR, Shelton MD, Rapport DJ, Kimmel SE, Elhaj O. Long term
na, quetiapina, aripiprazol, ziprasidona) o estabilizadores del treatment of bipolar disorder with lamotrigine. J Clin Psychiatry.
humor (Li o VPA) y discontinuar tratamiento con antidepre- 2002a;63(10):18-22.
Campbell M, Kafantaris V, Cueva JE. An update on the use of lithium
sivos y otros factores que puedan perpetuar los síntomas ma- carbonate in aggressive children and adolescents with conduct disorder.
níacos. Psychopharmacol Bull. 1995;31:93-102.
En la práctica clínica, si el caso es muy grave se inicia ✔ rr Correll CU. From receptor pharmacology to improved outco-
mes: individualising the selection, dosing and switching of antipsy-
tratamiento con AA por vía intramuscular en régimen de chotics. European Psychiatry. 2010:25:S12-21.
hospitalización, y cuando la situación clínica lo permita se ✔ DelBello MP, Schwiers ML, Rosenberg HL, Strakowski SM. A double-
blind randomized, placebo-controlled study of quetiapine as adjunctive
inicia el tratamiento con establizador por vía oral. En el caso treatment for adolescent mania. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry.
de una depresión bipolar, se recomienda una actitud expec- 2002;41(10):1216-23.
Geller B, Zimerman B, Williams M, Bolhofner K, Craney JL, DelBello
tante ante síntomas leves, y si no tiene tratamiento previo M, et al. Diagnostic characteristics of 93 cases of a prepubertal and early
estaría recomendado iniciarlo con lamotrigina, o añadir ISRS adolescent bipolar disorder phenitype by gender, puberty, and comorbid
attention deficit hyperactivity disorder. J Child Adolescent Psychophar-
o quetiapina. Para el tratamiento de mantenimiento se pre- macology. 2000b;10:157-64.
fieren los estabilizadores del humor. ✔ rr Goodwin FK, Jamison KR. Manic-depressive illness. 2nd ed.
New York: Oxford University Press; 2007.
Como parte del diagnóstico temprano es importante que Keck PEJr, McElroy SL, Strakowski SM, Soutullo CA. Antipsychotics in
los niños y adolescentes con posible BP sean detectados (ya the treatment of mood disorders and risk of tardive diskynesia. J Clin
Psychiatry. 2000;61(4):33-8.
que la presentación clínica es diferente a la de los adultos)
e iniciar el tratamiento farmacológico adecuado. Frecuente-
✔ Madaan V, Soutullo C, Figueroa Quintana A, Escamilla-Canales I, Chang
K. Enfermedad bipolar. Capítulo 10. En: Soutullo C, Mardomingo MJ,
co-editores. Manual de psiquiatría del niño y del adolescente (AEPNYA).
mente la BP se ve agravada por enfermedades comórbidas. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2010. p. 167-79.
Una vez diagnosticado, es importante que el paciente Pavuluri MN, Gracyk P, Carbray J, Heidenreich J. Child and family focu-
sed cognitive behavioral therapy for bipolar disorder. New Research Pos-
mantenga una buena adherencia terapéutica, cumpla con ho- ter C6. Am Acad Child Adolesc Psychiatry Annual Meeting, Miami Bea-
rarios regulares de ciclo vigilia-sueño y evite el consumo de ch, FL, USA, Oct 14-19 2003, Scientific Proceedings page 132-33.
tóxicos, para una buena evolución del cuadro y evitar posi- Post RM, Weiss SRB. Kindling and stress sensitization. En: Young LT,
Joffe RT, editors. Bipolar disorder: biological models and their clinical
bles intentos de suicidio y secuelas personales, familiares y application. New York: Marcel Dekker; 1997. p. 93-126.
económicas. En este sentido, pueden ayudar los programas Soutullo CA, Sorter MT, Foster KD, McElroy SL, Keck PEJr. Olanzapi-
ne in the treatment of adolescent acute mania: a report of seven cases. J
de psicoeducación. Affective Disorders. 1999c;53:279-83.

Medicine. 2011;10(84):5684-92 5691


ENFERMEDADES PSIQUIÁTRICAS

Soutullo CA, DelBello MP, Ochsner JE, McElroy SL, Taylor SA, West SA, Strakowski SM, Sax KW, Minnery KL, McElroy SL, Keck PE
Strakowski SM, et al. Severity of bipolarity in hospitalized manic adoles- Jr. The comorbidity of attention-deficit hyperactivity disorder in adoles-
cents with and without a history of stimulant or antidepressant treatment. cent mania: potential diagnostic and treatment implications. Psychophar-
J Affective Disorders. 2002;70:323-7. macol Bull. 1995b;31:347-51.
Soutullo CA, Escamilla-Canales I, Wozniak J, Gamazo-Garrán P, Figue- Wilens TE, Biederman J, Wozniak J, Spencer T, Mick E, Carlson G. Bipo-
roa-Quintana A, Biederman J. Pediatric bipolar disorder in a Spanish lar disorder and ADHD: a complex and misunderstood comorbidity. En:
sample: features before and at the time of diagnosis. J Affective Disorders. Symposium 2. Bipolar disorder and ADHD: a complex and misunderstood
2009;118(1-3):39-47. comorbidity. Am Acad Child Adolesc Psychiatry Annual Meeting, Miami
Ulloa RE, Birmaher B, Axelson D, Williamson DE, Brent DA, Ryan ND, Beach, FL, USA, Oct 14-19 2003, Scientific Proceedings. p. 29-30.
et al. Psychosis in a pediatric mood and anxiety disorders clinic: pheno- Winokur G, Coryell W, Endicott J, Akiskal H. Further distinctions bet-
menology and correlates. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry. 2000;39: ween manic-depressive illness (bipolar disorder) and primary depressive
337-45. disorder (unipolar depression). Am J Psychiatry. 1993;150:1176-8148.
Van Os J, Jones P, Lewis G, Wadsworth M, Murray R. Developmental Whittier W, West SA, Galli VB, Raute NJ. Valproate for dysphoric manía
precursors of affective illness in a general population birth cohort. Archi- in mentally retarded adolescent. J Clin Psychiatry. 1995;56:590-1.
ves General Psychiatry. 1997;54:625-31.
Vieta E, Colom F, Martínez-Arán A. Trastorno bipolar. En: Roca M,
✔r Wozniak J, Biederman J, Kiely K, et al. Mania-like symptoms su-
ggestive of childhood-onset bipolar disorder in clinically referred
Cervera-Enguix S, Baca-Baldomero E, Leal C, Vallejo-Ruiloba J, edito- children. J Am Acad Child Adolesc Psychiatry. 1995b;34:867-76.
res. Trastornos del humor. Madrid: Editorial Médica Panamericana S.A.;
1999. p. 492-540.
Waslick B, Greenhill LL, Berger E. Biological factors in bipolar disorders
in children and adolescents. En: Soares JC, Gershon S, editors. Bipolar Páginas web
disorders. Basic mechanisms and therapeutic implications. New York, www.bipolarweb.com
NY: Marcel Dekker, Inc.; 2000 www.bpkids.org/
Weller EB, Weller RA, Fristad MA. Bipolar disorder in children: misdiag- www.dbsalliance.org
nosis, underdiagnosis, and future directions. J Am Acad Child Adolesc www.forumclinic.org
Psychiatry. 1995;34:709-14. www.puedeser.es

5692 Medicine. 2011;10(84):5684-92

También podría gustarte