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Manual de ujieres

Historia del término “Ujier”.

Durante la edad media, la palabra Ujier hacía referencia a la persona encargada

de guardar las puertas en los palacios. Cuidaban de que solamente pasaran al
interior, aquellas personas que tuvieran motivos serios para reunirse con el rey.

En aquellos tiempos, uno de los personajes más importantes del gobierno era
justamente, la persona encargada de guardar las puertas del palacio. En sus
manos se hallaba la llave del mismo. Por ende, debía ser alguien que gozara
de toda la confianza del rey. Si el ujier traicionaba al rey, las llaves del palacio y
con ellas el rey mismo podían caer en manos enemigas. El ujier era el que
concedía o negaba acceso al rey.

En la actualidad es usada con poca frecuencia. No obstante, “en algunos

tribunales y cuerpos del Estado [el Ujier] tiene a su cargo la práctica de
ciertas diligencias en la tramitación de los asuntos, y algunas veces cuida
del orden y mantenimiento de los estrados”.

Podemos decir en síntesis, que la labor del ujier está relacionada con 1) la
recepción de las personas a la entrada del edificio; 2) la custodia de las puertas,
así como el cuidado de que las diferentes actividades que se realizan al
interior, sean hechas sin ningún contratiempo; finalmente, 3) velar por la adecuada
presentación de las instalaciones, en la medida de sus posibilidades.

En la Biblia

Aunque la Palabra “Ujier” no se encuentra en la Biblia, las principales

responsabilidades del mismo pueden ser percibidas a lo largo de sus páginas.
Veamos algunos ejemplos.

En El Antiguo Testamento

En la Biblia no se halla la palabra Ujier, pero sí encontramos en el Antiguo

Testamento una muy parecida, y de igual importancia: sor que quiere
decir: custodio de la puerta o portero. En 2° Crónicas 8: 14 se nombran los
siguientes cargos como los más importantes de la labor del templo:

1 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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1. Los Sacerdotes: Encargados de los sacrificios y de interceder por el pueblo
2. Los levitas: encargados de cantar y ayudar a los sacerdotes
3. Los porteros: encargados de guardar las puertas del templo

En 1° Crónicas 23: 5 se hace un censo de los levitas que da los siguientes

resultados:

1. 38000                   levitas
2. 24000                   encargados de organizar las actividades del templo
3. 6000                     encargados de las actividades de secretaría y legislación
4. 4000                     encargados de custodiar las puertas
5. 4000                     encargados de las alabanzas.

Es decir, los ujieres o encargados de las puertas eran también levitas, y se

hallaban en igual prominencia que los cantores.

2° Crónicas 23:19 dice que los porteros habían sido colocados, para que no
entrase absolutamente nada impuro (Biblia del Peregrino).

Según 2° Crónicas 31:14, el levita Coré, guarda de la puerta oriental, estaba

encargado de:

1. Recibir las ofrendas voluntarias.

2. Administrar las ofrendas voluntarias del Señor.
3. Administrar los dones consagrados.

Al finalizar su labor de reconstrucción de la muralla, Nehemías asigno (7:1):

1. Porteros
2. Cantores
3. Levitas

En El Nuevo Testamento

En el Nuevo Testamento también hallamos las funciones relativas al ujier. Quizás

la más importante sea la referente a la multiplicación de los panes y los peces en
Juan 6:1-15. El relato nos permite ver claramente que los apóstoles debieron
funcionar como ujieres en ciertas ocasiones. Su labor era muy importante, para
que el ministerio de Jesucristo pudiese seguir adelante. De no haber tenido a sus
discípulos cerca, estas hubiesen sido las funciones que Jesús habría tenido que
realizar por su propia cuenta:
2 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES
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1. Buscar entre la multitud a quien tuviese algo de comer. (Captación de
recursos)
2. Organizar a las cinco mil personas. (Administración de Recursos Humanos)
3. Sentarlas en la hierba de aquel lugar. (Organización de eventos)
4. Orar por los alimentos que Dios estaba proveyendo. (Ministerio Sacerdotal)
5. Repartir entre los cinco mil presentes lo que Dios dio.
(Administrador/Contador)
6. Recoger lo restante.
7. Contabilizar, almacenar y transportar el sobrante.

A lo mejor le hubiese tomado todo el día, tan sólo realizar todas estas actividades.
Sin embargo, los doce discípulos estaban allí, para hacer muchas de estas
labores, de modo que se puedan agilizar los procesos, y la gente pueda ser
confrontada con el mensaje de Jesucristo sin interrupciones.

De igual manera vemos que cuando la iglesia de Jerusalén empieza a surgir, los
apóstoles sienten el mismo apremio frente a las responsabilidades administrativas.
Si bien sabían que la labor de ayuda al necesitado era importante, esta los estaba
absorbiendo de tal manera, que no podían dedicarse a lo que era su verdadera
función. En Hechos 6: 2 los doce entonces se dirigen a la congregación diciendo:
“No es justo que nosotros dejemos la palabra de Dios para servir a las
mesas”. La preocupación de los apóstoles no tiene que ver con la indignidad del
servicio, sino con la prioridad de su llamado. Es por esto que, a quienes
comisionan para los asuntos administrativos, son personas seleccionadas en base
a ciertos criterios básicos como son:

1. Buen testimonio
2. Llenos del Espíritu Santo
3. Llenos de sabiduría

Si hubiese sido una función sin mayor importancia, los doce no hubiesen
planteado prerrequisitos tan fuertes. Las funciones relacionadas con la
administración y el orden de la casa del Señor son muy importantes.

Ahora bien, lo que hemos venido diciendo se aplica tanto para los diáconos, como
para los ujieres. Los primeros serán los encargados de administrar los recursos
destinados a los necesitados, y de dar a los que menos tienen en la iglesia. Los
segundos se encargan de recibir a los creyentes, y de velar por que el culto se
desarrolle sin contratiempos.

Tanto los unos como los otros, deben ser de buen testimonio y llenos del Espíritu
Santo y de sabiduría. Tanto los unos como los otros, son responsables delante de

3 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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Dios de su función. Tanto los unos como los otros, sirven a Dios por medio de lo
que están haciendo.

Todos los principios que resaltamos en este material, son perfectamente

aplicables a cualquier congregación. Sugerimos que cada iglesia haga los ajustes
necesarios a este manual, añadiendo o quitando algunas partes, según lo
considere pertinente. La inmensa mayoría del contenido de este manual, será útil
para cualquier congregación que quiera desarrollar un ministerio de ujieres de
excelencia.

IMPORTANCIA Y ORÍGENES BÍBLICOS DE LOS UJIERES

La función del ujier es de gran responsabilidad e importancia. Tiene un trasfondo

bíblico en los porteros del Antiguo Testamento (ver 1° Crónicas 16: 38; Nehemías
7: 1; Jeremías 35: 4). No debemos subestimar el significado de esta función en la
Iglesia. El ujier es la cara visible de toda iglesia, y de sus pastores o cabezas de la
congregación, de modo que el solo hecho del semblante que manifieste, genera
una impresión, ya sea agradable o lo contrario. Una buena recepción a una
persona nueva, dejará una sensación agradable en la visita, quién seguramente
tendrá deseos de regresar.

Se trata de una función espiritual, no solamente es un rol organizativo de orden.

Por ello requiere preparación espiritual previa, como cualquier otro ministerio.

La oración amplia y consciente del ujier, antes de llegar al templo:

1. Cada uno debe orar con anticipación, para estar preparado personalmente
antes del servicio.
2. Se debe orar también durante el servicio, como también por el servicio y por
todos los que han de oficiar.
3. La oración (con los ojos abiertos) debe ser algo permanente durante el
servicio, bendiciendo a cada asistente, y a cada parte del programa de la
celebración.
4. El Ujier debe orar por su propio corazón, para que esté bajo la guía y la
influencia del Espíritu Santo, de modo que pueda actuar de manera
amorosa y amable, evitando actitudes y reacciones en la carne, que
pudieran afectar a las personas. Entendiendo que no siempre los hermanos
y personas nuevas, vienen a nuestras reuniones, con actitudes y un espíritu
correcto, por lo tanto se requiere de paciencia y mansedumbre.
5. Tendrá que orar para tener un ánimo de servicio y discernimiento para
darse cuenta de situaciones, donde se requiere de ayuda y atención a
personas en particular. Este acto, dice mucho del amor de la iglesia.
6. Tendrá que orar para tener un corazón perdonador, dado que siempre
ocurre que personas pueden incurrir en actitudes o faltas que pueden
ofender y herir el corazón, y debemos aprender a reaccionar con el perdón,
4 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES
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entregando la causa a DIOS, quién vela por nosotros. No creo que sea
sabio, tener ujieres que se ofenden fácilmente, porque contaminaría el
corazón y el espíritu. Por esta misma razón referida al perdón, el ujier debe
tener la convicción de su propia sanidad interior, habiendo pasado por el
proceso de Sanidad Interior que la iglesia ofrece. Porque no es
recomendable que tener ujieres con espíritu de resentimiento y amargura,
por situaciones pasadas no resueltas, donde no se haya impartido el
perdón.
7. Deberá orar para saber callar oportunamente, evitando discusiones que
pueden generar un ambiente tenso y desagradable con algún hermano o
visita. Es mejor callar a tiempo. Santiago mismo dice en 1: 19-20: “… todo
hombre (ujier) sea pronto para oír, tardo para hablar, y tardo para
airarse, porque en la ira del hombre no obra la justicia de DIOS”.
8. También es importante que el ujier ore a DIOS, para tener un espíritu
humilde y obediente, porque casi siempre estará recibiendo órdenes de sus
líderes y pastores, o le van a requerir ayuda, e incluso le van a demandar; y
sino ha estado en oración, tendrá la guardia baja, y el diablo lo puede
sorprender, tentándolo a reaccionar y rebelarse. 1° Pedro 5: “8Sed
sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león
rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar”.

¿Habrá razón para orar también durante el servicio?

1. Por esa persona que vino de mal humor.

2. Por esa persona que vino enferma.
3. Por la persona que está mal dispuesta, y no participa de la celebración.

Esa función espiritual de los ujieres, es frecuentemente ignorada o subestimada.

Es importante meditar sobre esto, e incluirlo en las consideraciones que atañen a
este importante cargo.

Un ujier podría inclusive tener funciones de consejería en ocasiones, siempre y

cuando esté autorizada por sus líderes y pastores; evitando tomarse atribuciones
que no le fueron delegadas. Habrá momentos que no haya otra persona indicada,
para ministrar en un asunto urgente, y debe estar preparado para dar una palabra
y orar, como una acción de auxilio, pero luego el asunto deberá derivarlo al área
correspondiente, e informar a los líderes o pastores. Aclarando que no le está
permitido imponer las manos, ni atribuirse el derecho a ministrar.

Es importante que el ujier sea observador. A veces llegará gente a la iglesia con
cargas emocionales evidentes, y deberá poner en conocimiento del equipo
pastoral. Esas personas necesitarán de alguien con corazón compasivo y atento,
que les extienda una palabra de amor y ánimo, o que ore con ellos, o que los

5 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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derive a un líder de la iglesia para ministración. Esto se deberá hacer con
extremada delicadeza y discreción.

ACTITUD Y VESTIMENTA DE LOS UJIERES

La actitud del ujier es absolutamente importante. Algunos elementos importantes

de esa actitud:

1. Actitudes:

a) Que tenga confianza y seguridad de sí mismo.

En el sentido de tomar la autoridad sabia, confiando en la ayuda y la gracia del

Espíritu Santo. Eso implica que no puede estar ejerciendo este ministerio, si lo
domina el miedo o un complejo de inferioridad, por eso Pablo anima a Timoteo a
tener valor y no sentirse intimidado, cuando dice: “Porque no nos ha dado
Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”
2° Timoteo 1: 7. Tampoco debe tener el espíritu contrario, o sea sentirse
superior. “Por la gracia que se me ha dado, les digo a todos ustedes:
Nadie tenga un concepto de sí más alto que el que debe tener, sino
más bien piense de sí mismo con moderación, según la medida de fe
que Dios le haya dado”. Romanos 12: 3.

b) Autoridad espiritual.

El ujier es una autoridad que debe ser valorada y reconocida por toda la iglesia, y
se le debe reconocer aún desde el púlpito. Pero eso no significa que su autoridad
le permita tomarse atribuciones, o creerse más. Tampoco es una autoridad por
poner cara de mala o de malo, tampoco es una autoridad para que le tengan
miedo al imponerse, es una autoridad por su vida llena del Espíritu Santo y por su
sumisión y obediencia.

c) Simpatía.

Por simpatía nos referimos a la actitud manera natural y espontánea, que es

una inclinación afectiva hacia otra persona, y que generalmente se da de
manera recíproca, o sea que si somos simpáticos recibiremos la simpatía de la
otra persona. No obstante, por simpatía también puede referirse al carácter y a
cierto modo de ser en una persona, que la hacen agradable y encantadora. A
nivel social, la simpatía es una característica muy apreciada, pues permite que las
personas se sientan a gusto unas con otras, y manifiesten buena disposición con
los demás. Sinónimos de simpatía son: afinidad, empatía, atracción, inclinación,
encanto, gracia, estima o aprecio. El antónimo de simpatía sería antipatía. Y la
verdad que cae mal que uno sea etiquetado de antipático.

6 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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La simpatía es una gracia que se aprende, pero que sobre todo nace de una
profunda relación con el Espíritu Santo, del cual surge la amabilidad, la gentileza
que Pablo reclamó a la iglesia de Filipos: “vuestra gentileza sea conocida por
todos los hombres… ”. Para obtener esta gracia de la simpatía, requiere de un
trato de DIOS, para ser transformados en personas amorosas, porque para
nosotros la simpatía, nace del amor. Si amamos a las personas, vamos a tener
simpatía.

d) Espíritu de servicio:

El servicio es la disposición e iniciativa de ayudar en situaciones que se requiera.

El ujier no está esperando que le den una orden para realizar un acto de servicio,
debe tomar la iniciativa de manera atenta y con buena voluntad, para acudir en
ayuda a personas con alguna situación especial, ya sea para servir un vaso de
agua a un asistente que lo requiera, o acompañar a una persona hasta su asiento,
incluso buscando a personas indicadas que puedan ayudar en la atención de los
niños, para que los padres estén tranquilos y no se pongan nerviosos. Eso
tenemos que considerarlo con anticipación, teniendo un ambiente donde contener
a los niños, y personal asistente que adecuadamente los atienda. El servicio de un
ujier, también incluye dar información especialmente cuando la visita lo requiere, o
derivar la inquietud a la persona o área indicada, para dar respuesta.

e) Humildad:

“Revertíos de humildad hacia los demás, porque DIOS resiste a los

soberbios y da gracia a los humildes”. 1° Pedro 5: 5. La humildad, desde el
punto de vista divino, es estar a gusto con lo que eres en el Señor, de manera que
te permita poner a otros primero. El sentido de humildad en la Biblia es uno de los
componentes de amar a otros, no siendo débil. “No hagan nada por egoísmo o
vanidad, sino con humildad consideren a los demás como superiores a sí
mismos”  Filipenses 2:3.

Jesús nos dio un buen ejemplo de la humildad en acción. Lavando los pies a sus
discípulos. A pesar de que era humilde, también era fuerte. “Aprended de mí que
soy manso y humilde de corazón…”. Mateo 11:29.

“Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús: Él,
siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa ha que
aferrarse, sino que se despojó a sí mismo, tomó la forma de siervo y se hizo
semejante a los hombres. Más aún, hallándose en la condición de hombre,
se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de
cruz”.  Filipenses 2:5-8.

7 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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Puedes desactivar tus argumentos, cuando eres humilde y no tienes que ganar
cada discusión innecesariamente, porque el tema no es discutir, ni ganar
discusiones con las personas, sino que más bien tendrás que demostrar amor con
una respuesta sensible, considerando a la persona. “La blanda respuesta quita
la ira, más la palabra áspera hace subir el furor” Proverbios 15:1.

Es de suma importancia, que cada ujier pueda manejar el tratamiento injusto

pacíficamente, que para ello será importante ser humilde, de modo que pueda
responder al tratamiento injusto, sin ser vencido por la amargura. La humildad
piadosa significa que no tendrá necesidad de venganza, porque activará de
inmediato el principio del perdón. “Deshágase de toda amargura, ira y enojo,
gritos y calumnias, y toda forma de malicia. Sea amable y compasivos unos
con otros, perdonándoos unos a otros, al igual que en Cristo Dios los
perdonó a ustedes” Efesios 4:31-32.

f) Paciencia:

Con seguridad que siempre habrá personas difíciles e intolerantes, a las cuales no
lo podemos evitar. Pero ese tipo de personas, pueden ser un medio para probar
nuestro grado paciencia, ya para hacer crecer esa virtud. Por eso es importante,
que antes de cumplir con este ministerio, haya un tiempo suficiente de oración y
preparación, para ser llenos del Espíritu Santo, así luego podrá actuar con mayor
grado de paciencia. Gálatas 5: 22.

g) Diligencia y dinamismo:

En este aspecto hacemos referencia tomar la iniciativa de actuar con cuidado,

prontitud, agilidad y eficiencia en todo lo que hace; no trabajando con descuido,
indiferencia, o pachorra, sino más bien con dinámica y entusiasmo, poniéndole las
mejores ganas y pasión a su trabajo. En Jeremías 48: 10 dice: “¡Maldito sea el que
de mala gana haga lo que yo le ordene!...”

h) Mentalidad de excelencia:

Si queremos dejar una huella y ser de bendición, tenemos que hacer las cosas
con excelencia. Cualquier pensamiento de hacer las cosas con mediocridad, no
proviene de la mentalidad del reino de Dios. Entonces, ¿Qué es la excelencia? Es
la capacidad de hacer algo que merezca elogio y admiración, es producir cosas de
calidad superior. La excelencia no es solo lo que hacemos en nuestro trabajo,
abarca más que eso, es una mentalidad de vida, es nuestra forma de pensar,
sentir, creer, planificar y hablar. Dentro de nuestras posibilidades tenemos que dar
lo mejor, esto es mentalidad de excelencia. Cuando puedes hacer algo mucho
mejor y no lo haces, eso es mediocridad. Alguien irónicamente decía: “¿Para que

8 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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vamos a hacer las cosas bien, si las podemos hacer mal?”. Así parece ser el
pensamiento mediocre. Pablo aconseja que sirvamos a DIOS de la mejor manera,
en Colosenses 3: “23Hagan lo que hagan, trabajen de buena gana, como para
el Señor y no como para nadie en este mundo,  24conscientes de que el Señor
los recompensará con la herencia. Ustedes sirven a Cristo el Señor”.

i) Espíritu Corporativo:

Nos referimos a funcionar en equipo, evitando al máximo trabajar de modo

independiente. Primero que nada, somos un cuerpo y miembros los unos de los
otros, segundo que dependemos de una visión y forma de trabajo como iglesia,
por lo cual nadie funciona con su propia idea o metodología, y tercero que en cada
celebración en el templo tenemos muchos roles funcionando, tales como los
músicos, finanzas, coordinación de culto, predicador, etc. Entonces habrá
requerimientos de una u otra área, solicitándose ayuda o cooperación mutua; por
lo tanto será necesario brindarse sin quejas ni reacciones negativas. El espíritu
corporativo, implica siempre buena predisposición para ofrecer servicio de
urgencia. Jesús lavó los pies a sus discípulos, Juan 13: 4-5. Y en Juan 21 relata
otro acto de Jesús: “12  —Vengan a desayunar —les dijo Jesús. Ninguno de los
discípulos se atrevía a preguntarle: «¿Quién eres tú?», porque sabían que
era el Señor.  13Jesús se acercó, tomó el pan y se lo dio a ellos, e hizo lo
mismo con el pescado”.

j) Puntualidad:

Los ujieres deben ser puntuales, y estar en la iglesia con mucho tiempo de
anticipación (45´ o 30´). Este tiempo es muy importante, porque tiene la
responsabilidad de abrir el templo, los baños, activar la iluminación y además
verificar que todo esté en orden, para que a la hora del inicio de la celebración o
actividad que se desarrolle, no haya en lo posible situaciones que distraigan o
generen contratiempos. Ejemplo: Condición de los baños; agua para los que
coordinan el culto y la alabanza y para el predicador; tener preparados los
ofrenderos; verificar que las sillas estén limpias y en orden; Birome y anotador
para registrar los nombres de las visitas; Asegurarse que haya sobres para
diezmos y ofrendas especiales, etc.

2. Vestimenta:

Un ujier es un representante de la iglesia, por lo tanto debe vestirse

adecuadamente para ministrar en la presencia de DIOS, mostrando reverencia y
respeto por la presencia de DIOS, así como en el AT los sacerdotes y levitas
debían hacerlo, al desempeñar su servicio en el templo.

9 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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Idóneamente, los equipos de ujieres deberían usar vestimenta uniforme, o vestirse
coordinadamente. Esto no siempre será posible o práctico, pero es muy útil.

Deben vestirse con modestia, tanto hombres como mujeres; pantalones no

demasiado apretados, camisas abotonadas apropiadamente, escotes no
provocativos para las damas.

Deben usar de higiene apropiada. Si es posible con un perfume agradable, estar

bien peinados, usar de un enjuague bucal si es posible, tener uñas limpias.

EL UJIER COMO EMBAJADOR

La recepción de las personas que asisten a la iglesia, debe hacerse con

amabilidad y cortesía, teniendo un balance adecuado. No debe ser demasiado
simpático, ni tampoco demasiado serio. Se debe evitar roce afectivo con el sexo
opuesto. Algunos se sienten incómodos con este tipo de trato, particularmente las
mujeres.

Una sonrisa agradable, un tono afable al saludar, una palabra de bienvenida, una
mirada directamente a los ojos, todo esto es absolutamente importante.

El ujier es la primera cara de la congregación, la fuente de la primera impresión

que recibe la gente, cuando llega por primera vez a la iglesia. Se trata de una gran
responsabilidad. Hay que estar siempre consciente de este hecho, para mantener
la actitud correcta en todo tiempo.

Muchos visitantes no tendrán ningún otro contacto con gente de la iglesia, excepto
con el ujier cuando entran. Ese momento, es extremadamente importante, y
determinará si las visitas volverán a la iglesia o no. Por ello es necesario que los
ujieres se aseguren de saludar a la gente cuando llegan, sobre todo, si es la
primera vez que una persona asiste, y especialmente si no son cristianos.

VISITANTES ESPECIALES

Si el ujier discierne que algún visitante es un pastor, un predicador invitado, o que

amerita algún reconocimiento especial, es importante que alerte discretamente al
ujier principal, o que notifique a alguno de los pastores inmediatamente, para que
se determine, si se le debe dar una bienvenida especial, o si se debe invitar a la
persona a sentarse en un lugar preferencial por cortesía.

Nuestra iglesia recibe muchos visitantes, por ello se requiere que estemos
especialmente atentos a esos visitantes que ameritan un trato especialmente
cortés, pues en esas ocasiones seremos representantes de toda nuestra
comunidad. El ujier juega un papel extremadamente importante en ese proceso.

10 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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LA UBICACIÓN DE LAS PERSONAS EN SUS ASIENTOS

Es de gran importancia acompañar a la gente a sus asientos en todo lo posible.

Esta es una de las funciones más importantes del ujier. En este aspecto, es de
suma importancia que cada ujier muestre gran dinamismo, iniciativa, energía y
diligencia. El mero hecho de entregar una hoja de anuncios, y saludar a la gente
no es suficiente. Es necesario facilitar lo más posible su ubicación de un asiento.

Esto se hace doblemente necesario en una iglesia, donde hay espacios muy
reducidos, y donde la gente muchas veces tiene dificultad en encontrar asiento,
sobre todo cuando se trata de una familia con varios miembros, o acompañados
de visitantes. Abandonar a la gente a que se defiendan solos, como puedan, para
encontrar asiento, es una falta de responsabilidad de parte del ujier.

Con respecto a visitantes, esto es de urgente importancia. El visitante

generalmente se encontrará desorientado e intimidado cuando entra a la iglesia. Si
se ve obligado a moverse entre un mar de gente desconocida, para tratar de
encontrar espacio, y si recibe un rechazo tras otro al tratar de sentarse, como
puede pasar frecuentemente cuando la iglesia está muy ajustada de espacio,
resulta ser extremadamente desagradable. Ese tipo de experiencia negativa se
debe evitar en todo lo posible. El ujier es la línea de defensa número uno con
respecto a esto.

DÍAS DE MAYOR ASISTENCIA

La función de los ujieres será especialmente útil cuando la iglesia está demasiado
apretada de espacio, como suele pasar con frecuencia. Aquí se requiere estar
muy alerta, anticipar necesidades, moverse continuamente, y ejercer doble
paciencia. Se requiere, también, que los ujieres se comuniquen unos con otros,
que mantengan contacto visual entre sí y con el pastor.

Es de extrema importancia que cuando haya pocos asientos libres, los ujieres se
muevan continuamente a través del templo, para identificar con anticipación dónde
están los espacios todavía disponibles, a fin de que puedan llevar a los asistentes
que ingresan, a esos lugares sin detenimiento o titubeo.

Por razones de seguridad, es importante mantener los pasillos de los balcones

despejados de gente y objetos que puedan obstruir el paso o la libre circulación.
Esto se hace muy importante en caso de un fuego o alguna otra emergencia. Si
hay gente parada sin razón en esos lugares estratégicos, se le debe pedir con
firmeza y cortesía que desalojen esos espacios, informándoles que se trata de
reglamentos establecidos por el departamento de bomberos de la ciudad.

Es de gran importancia, que los ujieres notifiquen a la gente que tiene abrigos o
carteras ocupando asientos libres, que los quiten y ubiquen debajo del piso, o

11 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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sobre la falda. Esto tiene que hacerse con delicadeza y firmeza, con prudencia.
Debe practicarse una frase adecuada previamente, a fin de que salga con
naturalidad al emplearse.

Esto es muy delicado, y puede llevar a una situación de tensión y hasta conflicto,
sobre todo con respecto a gente rebelde y desagradable. Se debe decir las cosas
con una sonrisa en todo lo posible, y empleando un tono agradable, quizás en
forma de pregunta (“Por favor, ¿Podría desocupar esos asientos, para que
podamos sentar a un par de personas? Gracias, hermano”)

A veces, habrá que pedirle a la gente que se desplacen hacia los lados para
consolidar espacios. Esto también puede resultar en tensión, así que hay que
estar alertas al respecto, y emplear la forma más cuidadosa y balanceada. Es aquí
donde la oración previa en la casa y antes del servicio con todo el equipo, puede
ser de gran utilidad para evitar y neutralizar esos momentos desagradables.

Como se puede ver, es de gran importancia que los ujieres sea gente dinámica,
observadora, proactiva, y enérgica, con un alto sentido de responsabilidad, que no
le tema a usar su autoridad para mantener el orden en la iglesia, y facilitar el
mover del Espíritu en las reuniones.

SITUACIONES DE CONFLICTO O TENSIÓN

En ocasiones de tensión o conflicto, mejor buscar ayuda con un superior o un

pastor, si lo amerita la situación. En otros momentos, quizás será mejor
simplemente dar la otra mejilla, evitando así una escena desagradable que afecte
el ambiente, dando un mal ejemplo a otros, especialmente a visitantes, o que
contriste al Espíritu Santo.

El ujier debe evitar en todo lo posible crear la impresión de ser prepotente, o de

estar abusando de su autoridad. En ocasiones, sin embargo, se requerirá de cierta
firmeza, sobre todo cuando la seguridad de las personas pueda verse afectada.

Hay que pedirle al Señor mucha sabiduría y discernimiento, sobre cuándo ser
firme y cuándo ser flexible. De nuevo, es aquí donde la oración previa es de gran
importancia para evitarnos conflicto, y para proveernos de sana sabiduría, así
como del Fruto del Espíritu, lo cual es tan importante para la función del ujier.

CONTACTO VISUAL CON EL PASTOR A CARGO

Es muy útil que siempre haya un ujier, quizás el ujier principal, que mantenga
contacto visual con el pastor que está a cargo del servicio. Esto no será posible en
todo momento del servicio. Pero es de gran ayuda de vez en cuando mirar hacia el
pastor para ver si necesita algo, o si desea comunicar algo a los ujieres. De vez en

12 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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cuando, inclusive, un ujier se puede acercarse al pastor para preguntar si todo
está bien, o si requiere algo de parte de los ujieres u otra persona.

TIEMPOS DE MINISTRACIÓN

Durante tiempos de ministración regular, cuando el pastor o predicador le pide a la

gente que pase al frente para recibir oración después del sermón, es importante
que algunos ujieres pasen al frente, para estar disponibles en caso que se haga
necesaria su intervención. Su presencia es útil, además, para guiar a la gente a la
ubicación apropiada, y evitar aglomeramiento o mal uso del espacio.

Los pasillos del santuario siempre deben mantenerse despejados durante los
tiempos de ministración. Si alguna persona está obstruyendo la circulación, se le
debe informar cortésmente que es necesario desalojar el espacio, o guiarla
suavemente a la ubicación correcta.

Durante tiempos de ministración, la función de los ujieres adquiere una

importancia extraordinaria. Inmediatamente, que comienza este tiempo, los ujieres
deben entrar en postura de alerta y actividad. Algunos deben desplazarse
inmediatamente hacia el frente, para facilitar la ubicación de la gente al frente.
Como el espacio es tan limitado, y a veces pasa mucha gente, debe haber por lo
menos tres o cuatro ujieres ayudando a la gente a compactarse, y sobre todo, a
dejar los pasillos libres para que otros puedan también pasar al frente.

En ocasiones, será necesario aclarar los asientos de adelante y pedirle a la gente

que esté sentada en esa sección que se mueva a otro lado, para que puedan
caber todos los que acudirán al frente. Aquí es bueno en todo lo posible consultar
antes con el pastor, o con alguien de mayor autoridad, para asegurarse que se
proceda en una forma apropiada.

Durante el tiempo de ministración, es importante que los ujieres se mantengan

muy alertas, y en continuo movimiento. Se deberán parar detrás de la gente, si se
está orando por ellos e imponiéndole manos, por si acaso son tocados por el
Espíritu Santo y caen al suelo. Aquí, mantener la seguridad y el orden será muy
importante.

En el caso de hermanas que lo requieran durante tiempos de ministración, será

importante tener disponibles mantas para cubrirlas y mantener la modestia. Los
ujieres deberán identificar con anterioridad dónde están esas mantas, y
emplearlas inmediatamente si fuere necesario. Es preferible que sean las ujieres
quienes cubran a las hermanas que lo necesitan.

A veces, personas que son tocadas por el Espíritu Santo lloran suavemente, y es
muy útil proveerles discretamente pañuelos descartables para enjugar las
lágrimas. Es bueno siempre tener un ujier encargado de desempeñar esta función,

13 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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recorriendo el área donde está reunida la gente, distribuyendo los pañuelos a
quien los necesite. Esto se debe hacer con mucha delicadeza y discernimiento,
determinando el momento y la manera más apropiados de hacerlo.

FAMILIAS CON NIÑOS

Esto se aplica en iglesias donde hay programas y espacios disponibles para el

cuidado de niños, durante la celebración del culto.

Si vienen familias nuevas con niños, se les debe informar que hay clases para
diferentes edades, y darles direcciones sobre cómo llegar a los salones infantiles.
Además, se les debe dejar saber a qué hora comienzan las clases para niños, que
generalmente ocurre después del tiempo de alabanza. En algunos casos, dados
los múltiples pisos de nuestra planta física, quizás será necesario conseguir a
alguien que acompañe a la mamá hasta el salón infantil.

A veces los padres no quieren llevar a sus niños a los salones infantiles,
particularmente durante su primera visita, prefieren retenerlos en el santuario.
Generalmente, no se debe insistir que los lleven a clase. Sin embargo, si el niño
se pone inquieto y comienza a molestar o a hacer ruido, se le deberá informar
delicadamente al adulto que hay clases disponibles para los niños, y que con
mucho gusto podemos acompañarlos hasta el salón adecuado. En ocasiones, este
trabajo idealmente lo haría una mujer como ujier, ya que es más delicado navegar
ese momento potencialmente difícil de mujer a mujer.

SERVICIO DE DIEZMOS Y OFRENDAS

Cuando se acerca el tiempo de los diezmos y las ofrendas, los ujieres deben
comenzar a prepararse y posicionarse para acudir al frente, inmediatamente que
el coordinador haga el llamado a ofrendar. Los cestos o bolsas de las ofrendas,
deben estar preparados con antelación, de manera que el recogimiento de los
diezmos, se dé con la mayor eficiencia, agilidad y solemnidad posibles. En el caso
de nuevos ujieres, se les debe dar un entrenamiento específico con anterioridad,
sobre cómo se lleva a cabo esta operación, a fin de que no haya titubeos durante
este momento.

Debe determinarse con anterioridad quiénes recogen todos los cestos de las
ofrendas y los llevan al salón de conteo. Nunca debe ir un solo ujier a llevar el
dinero, por razones de seguridad y protocolo.

LA SANTA CENA

La Santa Cena es uno de los momentos más solemnes del calendario eclesiástico.
Debe llevarse a cabo sin titubeos ni errores marcados o visibles. Por eso, siempre
deberá proveerse entrenamiento específico a los ujieres, sobre cómo desempeñar

14 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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su función con respecto a este importante momento. Los ujieres deben saber con
seguridad dónde posicionarse, y cómo trabajar en equipo de un lado a otro de los
asientos para distribuir la Santa Cena con la mayor efectividad, solemnidad y
rapidez posibles.

Los ujieres asignados para pararse al frente, y tomar los elementos de la Santa
Cena de manos del pastor, deben estar bien preparados para mover la mesa con
los elementos a su lugar apropiado y quitar con cuidado el mantel que la cubre.
Deberán estar informados previamente del rol especial que van a jugar ese
domingo, y vestirse con el mayor cuidado posible. Debe ser gente espiritualmente
madura, y conocida por la congregación.

Al final del tiempo de la Santa Cena, los ujieres deben asegurarse de recoger los
vasitos que queden en los asientos, y desecharlos apropiadamente.

CONTEO DE LA ASISTENCIA

El conteo de la asistencia es de gran importancia, para mantener estadísticas en

lo concerniente al crecimiento y las fluctuaciones de la congregación. Se requiere,
por lo tanto, que se lleve a cabo con la mayor precisión y cuidado posibles. Por
esa razón, lo más aconsejable es que siempre lo haga la misma persona en cada
turno, y que sea alguien detallista y cuidadoso en este tipo de operación.

De vez en cuando, por alguna razón extraordinaria, la asistencia el domingo puede

reducirse dramáticamente. En invierno, por ejemplo, domingos o sábados en los
cuales se dan tormentas de nieve pueden hacer estragos con la asistencia del
domingo. En ese caso, la persona que toma la asistencia deberá proveer algún
comentario o aclaración en el papel del reporte, dejando saber la razón por la cual
hubo una asistencia más baja de lo usual. Esa información se incorporará a los
récords de la iglesia para futura referencia.

SITUACIONES DE EMERGENCIA

Idealmente, los ujieres deberán estar preparados para afrontar cualquier situación
de emergencia que pueda surgir durante un servicio. La directiva de los ujieres
deberá proveer entrenamientos especializados con respecto a situaciones
específicas, tales como fuegos, falsas alarmas de fuego, personas atrapadas en
un elevador, o emergencias médicas.

Idealmente, algunos de los ujieres deberán recibir instrucción sobre primeros

auxilios. Además, todos los ujieres deberán saber dónde se encuentra el maletín
de primeros auxilios, y poder identificar los médicos en la congregación, y dónde
estos se encuentran sentados durante los servicios, en caso de que sea necesario
acudir a ellos durante una emergencia médica.

15 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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EL MINISTERIO DEL PORTERO LEVITA

1° Crónicas 9:22-24  “Todos éstos, escogidos para guardas en las

puertas,  eran doscientos doce cuando fueron contados por el orden de sus
linajes en sus villas,  a los cuales constituyó en su oficio David y Samuel el
vidente. Así ellos y sus hijos eran porteros por sus turnos a las puertas de la
casa de Jehová,    y de la casa del tabernáculo. Y estaban los porteros a los
cuatro lados;    al oriente,    al occidente,    al norte y al sur”.

2° Crónicas  23:4-5 “Ahora haced esto:  la tercera parte de vosotros,  los que

entran el día de reposo,    estarán de porteros con los sacerdotes y los
levitas; Otra tercera parte,  a la casa del rey;  y la otra tercera parte,  a la
puerta del Cimiento:  y todo el pueblo estará en los patios de la casa de
Jehová”.

2° Crónicas 23:19  “Puso también porteros a las puertas de la casa de

Jehová,  para que por ninguna vía entrase ningún inmundo”.

¿Por qué es necesario el ministerio del portero o ujier?

Cuando Dios determina traer su presencia para habitar entre los hombres Éxodo
19:9-11, 20, Éxodo 25:8 no solo demanda de nosotros mayor santidad y estar
vestidos con vestiduras limpias Éxodo 19:10, sino también señala límites para el
pueblo Éxodo 19:12, 21, 24, y determina quienes pueden estar más cerca de su
presencia, teniendo que estar más consagrados y santificados Éxodo 19:22, de no
hacerlo así, las personas que se acercan a la presencia de Dios, corren peligro y
pueden perecer Éxodo 19:24. El portero es un ministerio que Dios levanta para
ubicarlo entre estos límites mencionados y para velar para que se cumplan las
condiciones, restricciones y controles que Dios ha señalado para mantener el
buen orden del culto, y se mantenga la santidad en la presencia de Dios.

El portero es un ministerio que Dios levantó en tiempos de restauración del

tabernáculo caído de David 1° Crónicas 9:22-24, con la finalidad de servir como
guardián de las cosas sagradas. El ministerio del portero a nivel físico o terrenal,
cumple la misma función que cumplen los ángeles querubines a nivel espiritual,
son guardianes de las cosas sagradas de Dios. Estudiaremos primeramente el
ministerio de los querubines para luego asociarlo al ministerio de los porteros.

El Ministerio de los Querubines está asociado al ministerio de los porteros

16 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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·         Entre los ángeles, los querubines y serafines ocupan un lugar privilegiado
en toda la corte celestial, ya que están más cerca de Dios y atienden a su servicio
inmediato.

·         Los querubines fueron los guardianes del arca de la presencia en el

tabernáculo edificado por Moisés, Éxodo 25:20,22; 37:9, Números 7:89, en el
templo de Dios construido por Salomón 1° Reyes 6:23, 8:6, 2° Crónicas 3:10  y
son los guardianes del trono, de la morada de Dios 1 Samuel 4:4, 2° Samuel 6:2,
2° Reyes 19:15, Salmos 99:1, Isa 37:16, Ezequiel 10:1

·         Los querubines fueron los guardianes del espacio interior (cortinas) del
tabernáculo Éxodo 26:1,31, 36:8 y de las paredes del templo de Salomón 1°
Reyes 6:29, 2° Crónicas 3:7, así mismo lo serán del futuro templo de Dios a ser
restaurado Ezequiel 41:17-20.

·         Los querubines fueron los guardianes de la puerta (del velo) de entrada al

lugar santísimo en el tabernáculo de Moisés Éxodo 26:31, 36:35, y del templo
construido por Salomón, tanto de la puerta de entrada al lugar santísimo (del velo)
2° Crónicas 3:14, 1° Reyes 6:31-32, como de la puerta de entrada al santuario
interior 1| Reyes 6:33-35. Los querubines también serán los guardianes de la
puerta del futuro templo a ser restaurado Ezequiel 41:25.

·         Los querubines fueron los guardianes de la fuente o lavatorio usado en el

templo construido por Salomón 1° Reyes 7:29,36.

·         Son el transporte de la presencia, del trono, de la morada de Dios Salmos

18:10, Ezequiel 10:4, 9,18-19. Es decir, Dios no se mueve, sino lo hace sobre sus
querubines.

·         En todas las partes de su cuerpo tienen ojos que representan la

omnisciencia de Dios Ezequiel 10:12, los ojos de adelante representan la
capacidad de ver el futuro (como sucede con el don de profecía) y los ojos de
detrás, representan la capacidad de ver el pasado (como sucede con el don de
ciencia), revelados a los querubines como protectores de la santidad del Señor.

·         Los querubines tienen la cualidad que todo lo cubren, no dejan brechas

abiertas, espacios por donde el enemigo se pueda infiltrar. Todo lo tienen a la
vista, cubierto y protegido con sus alas. Éxodo 37:9, 1° Reyes 6:27,  Ezequiel 1:9.

·         Los querubines cubren sus cuerpos con dos alas, así mismo velan porque
ningún se presente desnudo en la presencia de Dios Ezequiel 1:11.  

17 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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·         Los querubines los avanzan hacia adelante, con paso firme, nunca
retroceden Ezequiel 1:12.

·         Los querubines se mueven por dirección del Espíritu, guiados por el Espíritu
y no por motivación propia Ezequiel 1:12, 20.   

El Ministerio de los Porteros

Entre las características y funciones que debe cumplir del portero están las
siguientes:

1.    El ministerio del portero es fundamental cuando Dios levanta el tabernáculo

caído de David 2° Crónicas 23:3-8, porque Jezabel debe ser desalojada del
tabernáculo y del palacio del Rey 2° Crónicas 23:13-15,24:7, es decir, porque en
tiempos de cautividad Jezabel gobierna tanto en el tabernáculo (diseñado por
hombres) como en la nación entera.

2.    En tiempos de restauración, lo primero que Dios hace es levantar el nuevo

sacerdocio, los levitas y servidores del tabernáculo (conforme a los diseños de
Dios) que Dios levantará 1° Crónicas 9:2. Este tabernáculo es mencionado
proféticamente como el tabernáculo caído de David Amos 9:11.  Solo los levitas
están autorizados para ministrar en la presencia del Señor como porteros 1°
Crónicas 15:2.

3.    Hay dos tipos de porteros: el portero levita y el portero guerrero. El portero

levita es  un ministro llamado a servir en el tabernáculo del Señor 1° Crónicas
9:19, 21, 26:12  mientras que el portero guerrero es un guardián de las puertas de
las ciudades fortificadas Nehemías 7:1 o de la casa del rey

Tipos de porteros levitas: la función del portero levita dependerá del lugar (la
puerta) o en la función donde el Espíritu Santo lo ubicó en su ministerio, por lo
tanto no es potestad del portero elegir el lugar de su operación o trabajo:

1.    Portero de las puertas externas del tabernáculo del Señor: 1° Crónicas 9:18-
19,21,    2° Crónicas 23:19

2.    Portero dentro del tabernáculo o santuario de Dios

3.    Portero del arca, de la presencia o de la morada de Dios. (Lo que hoy

llamamos el altar, desde donde se ministra).

El Ministerio del Portero Levita

18 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES

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·         El portero levita es un ministerio que servía para la obra de Dios en el
tabernáculo de Moisés 1° Crónicas 9:21, en el tabernáculo de David 1° Crónicas
16:38, 23:32, en el templo de Salomón 2° Crónicas 8:14, en la restauración del
segundo templo Esdras 2:70,  y servirá en el futuro santuario a ser restaurado
Ezequiel 40:45-46.

·         Cuando el Señor desea restaurar su tabernáculo y sus altares, lo primero

que levanta son porteros para restaurar y cuidar de sus cosas sagradas que han
sido contaminadas por el enemigo 1° Samuel 3:15; 2° Crónicas 24:7.

·         El portero levita es uno de los ministerios que Dios levanta en los tiempos,
en que proféticamente va a traer su presencia, su morada, su Shekinah (lo que
para los israelitas significaba el arca del pacto) a una ciudad y nación 1° Crónicas
15:18,23-24.

·         El ministerio del portero es designado por los apóstoles y profetas del
Señor, bajo la dirección del Espíritu Santo 1° Crónicas 9:22.

·         A los porteros les es dada autoridad, porque ellos poseen las llaves para
abrir y cerrar las puertas del santuario 1° Samuel 3:15, 1° Crónicas 9:27.

19 MANUAL PARA CAPACITACIÓN DE UJIERES