Está en la página 1de 10

1). Chalchitecos.

Quetzales, volcanes, flores y venados adornan el traje


chalchiteco.
En la actualidad, esta comunidad la integran alrededor de 30
mil personas. En su mayoría, se dedican al cultivo de cebolla
y ajo para la exportación, así como a la elaboración de
tejidos.

2). Xinca.
Los pocos xincas que hablan su idioma son
personas de la tercera edad.
Los Xincas se dedican al cultivo de la tierra y
producir artículos de jarcia.

La tribu xinca se encuentra


localizada en Centroamérica en
lo que hoy es Guatemala y El
Salvador, su principal
característica era que hablaban
su propio idioma xinca, se tiene
muy poca información de la
misma debido a que no se
consideraba como parte de la
diversidad cultural de Guatemala
hasta el año de 1996.

3). Los Garífuna


son un grupo étnico zambo
descendiente de africanos, caribes y
arahuacos originario de varias
regiones de Centroamérica y el
Caribe. También se les conoce
como garinagu o caribes negros. Se
estima que son más de 600.000 los
residentes en Honduras,
Belice,Guatemala, Nicaragua, y
Estados Unidos. En realidad, el
término "garífuna" se refiere al
individuo y a su idioma, mientras que garinagu es el término usado para la
colectividad de personas.
4). Los sakapultecos.

Las sacapultecas usan un elegante traje en


ocasiones especiales.
Los sacapultecos son los únicos quichelenses
que elaboran artesanías en morro. Son
famosas sus jícaras y guacales, utilizadas para
tomar agua, guardar productos y lavar.
Algunos han mantenido la tradición de trabajar
el oro, al que dan forma de pulseras y collares.
No pasan inadvertidos los caramelos elaborados con caña de azúcar y “los
alborotos”, así como sus dulces sandías, papayas son hábiles orfebres.
5). Sipakapenses.
El traje de las sipacapenses no es tan colorido
como el de otras regiones.
Su comercio es corto en siembras de maíz y
manufacturas de lana.
En la actualidad, los sipacapenses se dedican
a la agricultura y la cerería. Elaboran
veladoras, palmatorias (utilizadas en primeras
comuniones) y cirios, entre otros. Artesanos
de la cera.
6). Tektiteko.
Fabrican productos de cestería,
jarcia y mini agrícola.
Aunque austero, el traje tektiteko
irradia la vitalidad de ese grupo
étnico.
Con el paso de los años, las
mayas mopanes e itzaes
dejaron de usar su traje
característico.
Maya mopán e itzá.
Se basan en el cultivo de maíz,
fríjol y achote.
7). Uspanteko.
Los adornos en la cabeza hacen resaltar a las
uspantecas.
En la actualidad, los uspantecos, cuya gran
mayoría es pobre, se dedican a labrar la tierra
y a labores artesanales en barro y madera.
Los tejidos de algodón que crean sus mujeres
son reconocidos por su belleza, al igual que los
artefactos de barro cocido que elaboran al aire
libre.
Además, los uspantecos se caracterizan por la producción en núcleos
familiares, de cohetes, ametralladoras y bombas voladoras.

8). Achi’es.
El traje de las indígenas achi’ está lleno de colorido.
Ese lugar tiene fama de producir las
naranjas más dulces del país,
viñedos, hortalizas como el tomate y
otros, artesanías en morro, ollas de
barro, maguey y mimbre.

9). Los Awakatecos.


En la actualidad, los aguacatecos se dedican a diversas actividades.
Resalta el cultivo de ajo y la cebolla, así como el pastoreo de ovejas,
de cuya lana elaboran vistosos tejidos.
Buena parte del desarrollo de este municipio se debe a las remesas
que envían los aguacatecos que trabajar como agricultores en EE.UU .

10). Ch’orti’es.
El traje de las ch’orti’es es característico y
se distingue de otros del país.
Estos descendientes de los mayas se
dedican en la actualidad al cultivo de la
tierra y a la elaboración de artesanías.
Son conocidos los objetos en cerámica
tradicional y vidriada de Olopa, Camotán
y Jocotán. También gozan de fama los
artículos en cuero crudo y jarcia, así
como los pirotécnicos conocidos como canchinflines” y ”buscaniguas”.

11). Kaqchikeles.
La construcción de tipo colonial, dulcería y productos en
cuero, como en el caso del poblado Pastores.
En Chimaltenango se destacan los trabajos en mimbre,
y tejidos de fibras duras como canastas, hamacas, redes
para carga y variedad de cuerdas.
En Comalapa y Tecpán Guatemala se elaboran artículos
de plata.
La agricultura de subsistencia es otra característica de la
mayoría de grupos étnicos del país y los kaqchikeles no
son la excepción.

12). Akatecos.
Los akatecos sobresalen como
hábiles forjadores del hierro y el
cobre, así como por sus artísticas
labores en cerámica vidriada y fibra
de maguey.
En San Miguel Acatán se ha
transmitido de generación en
generación el oficio de la herrería.
Faroles, balcones, aldabones y
lámparas elaboradas en este
municipio adornan casas y parques en muchas partes de Guatemala.
En Concepción Huista existen diestros artesanos que se dedican a forjar
campanas y figurillas de animales en cobre, entre
otras artesanías.

13). Poqomames.
El traje poqomam puede ser admirado en Mixco y
Chinautla.
siembras de maíz.
Estos descendientes de los mayas también son hábiles en el manejo del
barro, como lo demuestran las artesanías de Chinautla: pájaros, incensarios,
flores, angeles y misterios navideños. Esa actividad es propia de las mujeres,
pues los hombres se dedican a la agricultura. De especial atractivo son las
piedras de moler que elaboran en San Luis Jilotepeque y San Carlos Alzatate,
así como la cerámica vidriada de ambos municipios jalapanecos. Gozan de
fama sus muebles y juguetes de madera, además de la curtiembre en cuero y
los tejidos.
14). Ixiles.
Los trajes ixiles son de los más vistosos de Guatemala.
Se dedican al cultivo de la tierra y al trabajo artesanal.
De singular reconocimiento gozan los tejidos que
elaboran sus mujeres, así como los famosos sombreros
y bolsas de Nebaj.
También se destacan en el manejo de la pólvora, la cual
comenzaron a trabajar en 1794. Desde esa fecha
elaboran cohetes, ametralladoras y bombas voladoras
que se utilizan en fiestas patronales u ocasiones
especiales.

15). Los Chuj.


Este pueblo goza de merecida fama por el
trabajo artesanal en fibra de maguey, conocida
como jarcia.
Con un machete poco afilado, los vecinos de
San Mateo Ixtatán y San Sebastián Coatán
raspan el maguey y obtienen gruesos hilos
para fabricar bolsas, morrales y redes.
Además del cultivo de la tierra, los chuj
pastorean ovejas, se dedican al arte de la
cerería y a la cerámica vidriada.

16). Tz’utujiles.
Los trajes de las tz’utujiles son elaborados en
telar de cintura.
Este pueblo también cuenta con hábiles artesanos del tul, cera, lana, cuero y
madera. En la época previa a la Navidad, resaltan las artesanías elaboradas
con fibra de trigo.
Esa labor la combinan con el cultivo de maíz, cebolla, tomate, trigo y frijol,
entre otros. En la actualidad, se observa que muchos tz’utujiles pierden
elementos de su identidad, producto del turismo extranjero, en particular de
EEUU y Europa.

17). Los q’anjob’ales.


Las mujeres Q’anjob’ales mantienen sus
tradiciones.
Han prosperado con las remesas que les
envían los q’anjob’ales que viven en Estados
Unidos.
En ese país forman parte de los más de 15 mil
indígenas guatemaltecos que se asentaron en
la Florida a partir de 1980, cuando huyeron de la violencia.
En la actualidad, este pueblo de origen maya se dedica al cultivo de la tierra, a
la elaboración de artesanías y al pastoreo de ovejas, entre otras actividades
productivas.
No menos famosa es la cerámica vidriada de San Pedro Soloma, en donde se
fabrican ollas, jarros y comales.
Tampoco dejan de llamar la atención los diestros marimberos de Santa
Eulalia, cuyos instrumentos musicales tienen merecida fama.
18). Los Mames.
El telar de cintura es utilizado por las mames
para elaborar sus coloridos güipiles.
En términos generales, los actuales mames se
dedican a la fabricación de instrumentos
musicales, como marimbas, contrabajos,
violines y guitarras, además de las labores
agrícolas.
También elaboran diversos artículos de cuero,
como sillas de montar. La cerería es una industria artesanal del área, al igual
que los cohetillos y bombas voladoras.

19). Los poqomchíes.


Dominadores de Guatemala
El traje típico de las mujeres de la etnia poqomchi’ es muy vistoso y colorido.
Los poqomchíes, igual que los poqomames, son descendientes de un mismo
tronco. 

20). Los q’eqchies.


Los q’eqchies conservan sus tradiciones
mágico-religiosas.
Los q’eqchies de Alta Verapaz se distinguen
por sus vistosos tejidos elaborados por mujeres
en telares de madera.
El arte del tejido se manifiesta en los güipiles
de gaza de Cobán, los cuales semejan un
encaje. También confeccionan llamativos brocados.
Destaca, asimismo, la artesanía de plata y productos de hierro forjado, como
los elaborados en Cobán.
Otro producción importante es la de cohetillos, bombas voladoras, toritos y
castillos.
Además de artesanías, producen en menor escala cestería, trabajos en
palma, instrumentos musicales y máscaras de madera.
Sólo los q’eqchies de Chisec, Lanquín y Cahabón trabajan artesanías con la
fruta del morro, del cual elaboran cucharas, guacales productores de
cardamomo, café, achote y hortalizas.
21). K’ichés.
Los trajes de las mujeres k’ichés se
distinguen por su colorido y diseño.
Los k’ichés actuales ocupan casi todo
Quiché, donde gozan de prestigio los
tejidos de algodón y lana ahí
elaborados.
También es atractiva la cerámica de
barro elaborada en tornos de pie y
hornos de leña. Los k’ichés son,
asimismo, artesanos de metales y de la pólvora.
Habitan también en el norte de Sololá. Aquí predominan los cultivos de café,
maíz, frijol, cebada, papa y legumbres. En Nahualá, se han especializado en
piedras de moler y morteros de piedra.
Predominan en la parte norte de Suchitepéquez, donde destaca la imaginería
religiosa y la fabricación de muebles de pino.
También trabajan en esta área cerería y jarcia.
22). Maya mopán e itzá,
En extinción el maya mopán y maya itzá es uno
de los tres idiomas originarios de Petén que aún
se hablan en los municipios de San José,
Melchor de Mencos, San Luis, Poptún y
Dolores.

El maya mopán y el maya itzá se desprenden


del yukateko, con el que en la actualidad
comparten algunos rasgos.
Con el paso de los años, las mayas mopanes e itzaes dejaron de usar su traje
característico.
Los habitantes de algunas regiones de Toledo, en el sur de Belice, también
tiene como lengua materna el mopán.
Este idioma maya está compuesto de treinta y tres signos y es reconocido
como tal en el artículo 143 de la Constitución Política de la República.

23). Q·anjob·ales.
Q'anjob'al (Kanjobal) es una de los 22 etnias
mayas, o mejor dicho comunidades
linguisticas mayas, oficialmente reconocidas
en el país Centroamericano de Guatemala.
Q'anjob'al es también el nombre del idioma
materno del pueblo maya-q'anjob'al.
7 tips para hablar en público
Hablar en público es una actividad desagradable para muchos y cuanto mayor sea
la importancia del evento, peor el miedo. Sin embargo, como emprendedor, deberás
enfrentarte constantemente a exposiciones y presentaciones, ya sea ante tu equipo,
socios, clientes o posibles inversionistas. Y debes hacerlo de la forma correcta para
conectarte con tu audiencia.

1. Exprésate con sencillez


La gente que te escuche captará una o dos de las principales ideas que expongas. Si
no puedes expresar en un par de enunciados el punto que propones comunicar,
entonces tu alocución no está bien definida. Y si no sabes con previsión lo que
quieres decir, mucho menos lo sabrás decir en público.

 2. Organízate
Sea larga o corta tu disertación, es importante ordenar los elementos de la misma.
Hay que prever la introducción, los puntos principales que se van a exponer y la
conclusión. A veces, una buena forma de comenzar resulta ser la frase final. Una
vez que sabes a dónde te diriges, puedes escoger el camino que más te plazca para
llegar allí. Es decisivo tener un final poderoso y contundente, pues en la mayoría de
los casos es lo que la gente mejor recuerda.

3. Sé breve
La duración de los números en los espectáculos de variedades suele ser, como
máximo, de 12 a 15 minutos. Si una cuadrilla de bailarines y cantantes que ponen
toda el alma en su trabajo no logran entretener al público por más tiempo, ¿qué le
hace pensar que tú sí podrás? Evita los discursos demasiado largos y rolleros. 

4. Sé sincero
Si tratas de ser distinto a como eres (poco natural), probablemente no vas a
convencer a nadie. Si no te parece graciosa una anécdota, no esperes que el público
se ría con ella. Si la información que pretendes transmitir no te despierta un
verdadero interés, tampoco lo despertará en los demás. Si tomas la palabra es
porque has tenido una experiencia que los oyentes desconocen; compártela con
ellos. Trata de que sientan lo mismo que tú sentiste: una profunda emoción, o
indiferencia; miedo, o tristeza; fastidio, o perplejidad.

La primera persona del singular (yo) puede ser un arma eficaz, pero debes ser cauto
y ubicarte correctamente en el espacio, tiempo y tipo de público que te escucha.

5. Aduéñate de la situación
En los primeros momentos de un discurso se establece el vínculo entre el público y
el expositor. Sonríe, agradece a la persona que te presentó y luego espera un
momento. No empieces hasta que hayas captado la atención de todos los presentes.
Cada una de esas personas comprenderá inmediatamente que el orador le está
hablando a ella, y su cerebro se dispondrá a prestarle atención. Eso es precisamente
lo que quieres.Cuando el público se haya puesto atento, establece contacto visual.
Escoge tres caras amigables: una a la derecha, una a la izquierda, y una al centro.
Dirígete entonces a una, luego a otra, y así lograrás abarcar a todo el auditorio.

6. No leas, habla
Leer ante un auditorio no resulta tan eficaz como hablar directamente y con el
corazón; la expresión espontánea quizá no sea tan pulida, pero definitivamente es
mejor.No es recomendable redactar discursos, pero sí lo es llevar notas para
recordar lo que quieres decir, y saber en qué parte va uno. Una buena idea es hacer
bullets con los puntos principales o con datos importantes que quieras dar a
conocer.

7. Relájate
Cuando estamos sometidos a tensión nerviosa, a menudo olvidamos cómo respirar
correctamente. Toda persona que acostumbra presentarse o actuar en público
conoce la importancia de la respiración.No inhales profunda y forzadamente, ni
respires con mayor rapidez que de lo normal; te puedes hiperventilar. Para relajarte,
sólo tienes que mover el diafragma suave y rítmicamente y dar inhalaciones largas
y profundas.

También podría gustarte