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Raven Adapatado
Raven Adapatado
47-55
ISSN 0214 - 9915 CODEN PSOTEG
LA INVARIANZA EN LA ESTRUCTURA
FACTORIAL DEL RAVEN EN GRUPOS DE
DELINCUENTES Y NO DELINCUENTES
Eliseo Chico Librán
Universidad de Tarragona
Hay bastante evidencia empírica que Se han propuesto varias teorías para ex-
demuestra una consistente y negativa rela- plicar esta relación. En concreto, se van a
ción entre inteligencia general y conducta revisar dos corrientes teóricas claramente
criminal. Esta relación entre ambas varia- opuestas.
bles se establece entre un rango de -.20 a - La primera corriente asume que el CI
.30 (Eysenck y Gudjonsson, 1989) o una bajo es un factor a tener en cuenta en la
diferencia en CI de 8 puntos entre delin- conducta antisocial (ver p. e. Gordon,
cuentes y población general (Hirschi y 1986). Desde este punto de vista, por lo
Hindelang, 1977). tanto, se espera que en el factor “g” los
grupos de delincuentes tengan un nivel
más bajo que la población no-criminal
Correspondencia: Eliseo Chico Librán (Jensen y Faulstich, 1988).
Universidad «Rovira i Virgili»
Departamento de Psicología La segunda corriente asume que el peor
Carretera de Valls, s/n. 43007 Tarragona (Spain) rendimiento mostrado por los delincuentes
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LA INVARIANZA EN LA ESTRUCTURA FACTORIAL DEL RAVEN EN GRUPOS DE DELINCUENTES Y NO DELINCUENTES
en los tests de inteligencia es, en gran par- test de las Matrices Progresivas de Raven
te, debido a las diferencias socio-cultura- han mostrado que los grupos de delincuen-
les (West y Farrington, 1973) Hay una crí- tes también tienden a conseguir puntuacio-
tica muy extendida que señala que los tests nes más bajas que la población general en
de inteligencia, especialmente, aquellos en estos instrumentos no verbales de baja in-
los que predominan ítems verbales, tienen fluencia cultural (West, 1969). No obstan-
un gran sesgo cultural y perjudican a los te, estos resultados se han atribuido tam-
grupos socialmente menos favorecidos (p. bién a la falta de motivación en la situa-
e. los delincuentes). De hecho, el estudio ción de prueba (West, 1969) o a que el test
del sesgo cultural fue lo que impulsó los de Raven presenta procesos de razona-
estudios sobre el posible sesgo en los tests miento mediatizados por el lenguaje
(Camilli, 1994). Y desde el inicio de estos (Trasler, 1973), e igualmente, en algún
estudios los resultados indican que no sentido, también se puede considerar co-
existe evidencia firme de la influencia del mo un instrumento sesgado.
sesgo cultural en los tests (Jensen, 1980) En esta investigación se pretende deter-
Se han propuesto diferentes perspecti- minar si la interpretación de las puntuacio-
vas para explicar el sesgo que se produce nes en el test de Raven es igualmente váli-
en los tests mentales dentro de la pobla- da para el grupo de delincuentes que para
ción delincuencial. Sin embargo, ninguno el grupo de no-delincuentes. Es decir, si
de ellos se puede considerar completa- existe invarianza en la estructura factorial
mente satisfactorio. Voy a analizar, aunque del test. La no invarianza sugeriría un fun-
sea brevemente, dos posturas que se pue- cionamiento diferencial de dicho test a ni-
den utilizar conjuntamente: a) comparar vel de series. Este objetivo general se in-
las puntuaciones de grupos delincuentes y tenta desarrollar en dos etapas: a) un estu-
no-delincuentes, pertenecientes ambos dio sobre si hay diferencias substanciales
grupos a parecidos niveles socio-cultura- en la puntuación obtenida por un grupo de
les, y b) comparar las puntuaciones de de- delincuentes y otro no-delincuentes. De
lincuentes y no-delincuentes en tests de acuerdo con la evidencia empírica revisa-
baja influencia cultural. da, se espera una puntuación superior en el
En cuanto a la primera perspectiva, la grupo no-delincuente; b) una valoración
evidencia empírica muestra, en general, sobre si la estructura factorial del test, a
que las diferencias en CI entre grupos de- nivel de conjunto de ítems múltiples, es
lincuentes y no-delincuentes se mantienen invariente en ambos grupos. Si la estructu-
dentro de las diferentes categorías de cla- ra factorial es invariante, entonces las di-
se social (Hirschi y Hindelang, 1977; Dí- ferencias grupales en las puntuaciones se
az, Beleña y Báquena, 1994). En este mis- pueden atribuir a diferencias equivalentes
mo sentido, los estudios de McGarvey, en el constructo que el test intenta medir.
Gabrielli, Bentler y Mednick (1981), estu- Por otra parte, si la invarianza de la es-
dios que están en la linea de investigación tructura factorial no se puede probar, en-
de la influencia del sesgo cultural en el po- tonces cabe pensar que el test está sesgado
sible sesgo de los tests, encontraron una respecto a la posible validez diferencial de
constante correlación negativa entre CI y la interpretación de las puntuaciones apor-
delincuencia después de eliminar la in- tadas por el test.
fluencia del status socio-económico. El modelo de medida extendido de Lisrel.
En lo referente a tests de baja influencia La principal finalidad de la investiga-
cultural, algunos estudios que han usado el ción es estudiar la invarianza factorial de
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ELISEO CHICO LIBRÁN
la estructura del test en dos grupos. Tal in- Además, bajo los supuestos habituales
varianza se puede valorar detalladamente en AF, la matriz varianza-covarianza en
usando el modelo de análisis factorial cada población viene dada por:
confirmatorio (AFC) ofrecido por Sörbom
(1974). Conviene hacer un breve comen- (3) ∑(g) = γ ∧σ2 (g)∧’ + ψ2(g) (ψ2(g) diagonal)
tario sobre este modelo de cara a interpre-
tar los resultados de la presente investiga- Si este modelo se cumple, a partir de (2)
ción. y (3) se puede asumir que todas las diferen-
Generalmente, se asume que las 5 serie cias encontradas entre las medias obtenidas
del Raven miden un sólo factor común (g). y las covarianzas en los dos grupos son ex-
Así, el modelo factorial considerado aquí clusivamente debidas al hecho de que las
es el modelo de Spearman con errores no puntuaciones factoriales tienen diferentes
correlacionados. medias (f(g)) y varianzas (σ2(g)) en estos gru-
El grupo total de sujetos, en el que se pos. En otras palabras, todas las diferencias
espera que se cumpla el modelo de Spear- encontradas en las puntuaciones obtenidas
man, se divide en dos grupos (delincuen- en el test se podrían explicar por las diferen-
tes y no-delincuentes); cada grupo se con- cias en el factor que el test pretende medir.
sidera como una muestra procedente de di- Sin embargo, si en una serie en concre-
ferente población, y, para cada población to, se estiman diferentes interceptos y/o
(g), se asume el modelo siguiente: cargas en los dos grupos, esta serie se pue-
de considerar que está sesgada. Un ejem-
(1) χi (g)= µi + λi ƒ + ei, i= 1,2,3,4,5 (series) plo, consideremos dos grupos g1 y g2 con
interceptos estimado µ1 y µ2 y un sujeto
Es decir, la puntuación observada en por cada grupo con la misma puntuación
cada serie para un sujeto perteneciente al factorial, pongamos cero. De acuerdo con
grupo “g” se considera que está en parte, la fórmula (2) la puntuación esperada sería
explicada por la puntuación factorial co- µ1 para el sujeto del grupo 1 y µ2 para el
mún de este sujeto, “f”, y en parte, por el sujeto del grupo 2; es decir, se podrían es-
error de medida “e”. El término “µi” es el perar puntuaciones diferentes en el test pa-
intercepto (porque el modelo trabaja en ra sujetos con la misma puntuación facto-
puntuaciones directas) y “λi” es la carga rial (p. e. nivel g), pero que pertenecen a
factorial. El modelo no sesgado asume que diferentes grupos. Este es un ejemplo del
tanto “µi” como “λi” son invariantes en llamado “sesgo uniforme de test” (Mellen-
las dos poblaciones comparadas (delin- berg, 1989). Cuando no solamente el inter-
cuentes y no delincuentes). Si esto es así, cepto, sino también la carga factorial es
bajo los supuestos habituales acerca del distinta, las diferencias esperadas en las
error de medición, el vector de las medias puntuaciones obtenidas por los sujetos
en las 5 series, para una población particu- con la misma puntuación factorial, pero
lar, viene expresado por: que pertenecen a diferentes grupos, varían
en diferentes niveles del factor. Esto es lo
-
(2) χ-(g)= µ + λƒ (g) que se llama “sesgo no uniforme del test”
(Mellenberg, 1989). Se debería señalar
Donde f(g) es la media de las puntuacio- que, en ambos casos, las diferencias en las
nes factoriales en la población “g” y µ y λ puntuaciones obtenidas se podrían atribuir
son el intercepto y vectores de cargas fac- a otras causas que no sean las diferencias
toriales, respectivamente. en el constructo que se está midiendo.
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LA INVARIANZA EN LA ESTRUCTURA FACTORIAL DEL RAVEN EN GRUPOS DE DELINCUENTES Y NO DELINCUENTES
Varianza:
El grupo de delincuentes estaba forma-
Total 0.99 5.59 7.21 7.58 8.14
do por 942 internos del Centro Penitencia- Soldados 0.76 3.28 4.01 3.52 7.33
rio de Tarragona. Todos los internos tenían Delincuentes 1.05 5.99 7.54 8.51 7.25
nivel de estudios primarios y buena lectu-
Asimetría:
ra comprensiva. El nivel de estudios del Total –2.03 –1.06 –0.91 –1.33 0.54
grupo se obtuvo por información de los Soldados –2.28 –2.27 –1.65 –2.16 –0.08
profesores de E.G.B. del Centro. Delincuentes –1.95 –0.81 –0.73 –1.11 0.82
Los participantes del grupo de referen-
Kurtosis:
cia fueron 585 soldados que cumplían el Total 5.98 0.42 0.18 1.26 –0.63
servicio militar en Tarragona. De este gru- Soldados 7.75 7.31 4.40 6.91 –0.81
po se seleccionó 400 soldados que tenían Delincuentes 5.51 –0.25 –0.28 0.52 –0.03
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ELISEO CHICO LIBRÁN
Una simple inspección ocular de estos Así, a este nivel, se podría suponer que:
datos sugiere que hay un incremento en a) hay diferencias generales en el rendi-
dificultad en las sucesivas series, excepto miento observado de los grupos delin-
en la 3 y 4 (de hecho, en el grupo delin- cuentes y no delincuentes (efecto intersu-
cuente la serie 4 parece ligeramente más jetos); b) hay una gradación general en la
fácil que la serie 3). A un nivel de diferen- dificultad de las series del Raven para los
cia de grupo, parece existir una diferencia dos grupos (efecto intrasujeto) y c) las di-
general en el rendimiento observado, una ferencias en comportamiento entre los
diferencia que aumenta a medida que va grupos delincuentes y no delincuentes au-
aumentando la dificultad en las series. menta a medida que aumenta la dificultad
A fin de valorar la tendencia señalada de las series (efecto interacción).
más arriba, se llevó a cabo un diseño fac-
torial mixto común usando las cinco series Comparación de estructuras factoriales
como niveles intrasujetos. Se analizó el di-
seño con el procedimiento MANOVA en Consideraciones preliminares
el paquete SPSS. Los resultados se presen-
tan en la Tabla 2. El estudio de las distribuciones de las
series en cada grupo mostró que en ningún
Tabla 2
caso se podían considerar estrictamente
Estadísticos univariados y multivariados normales. Los tests univariados y multiva-
riados de asimetría y curtosis mostraron
Fuentes de variación F Univariada desviaciones significativas respecto al su-
Intersujeto 134.85 (P= .000) puesto de normalidad.
Intrasujeto 2384.06 (P= .000) De acuerdo con estudios similares (e. j.
Inter. grupo x series 47.32 (P= .000) Muthen y Kaplan, 1985) esta desviación
Fuentes de variación Estadís. Multivariados
de la normalidad se puede pensar que pro-
duce sesgo en el test de bondad de ajuste
Intrasujeto Pillais: .08486 F aprox. si se usa el método de estimación de máxi-
1814.68 (P= .000) ma verosimilitud de estimación. Para co-
Inter. grupo x series Pillais: .1171 F aprox.
42.93 (P= .000)
rregir este problema, se escogió el estima-
dor “Asymptotic Distribution Free”
Nota: Los tests multivariados en este diseño dan todos las (ADF) para la estimación de este modelo
mismas F aproximadas, por lo que se da solamente el pri- (ver Bollen, 1989).
mero de Pillais.
El modelo AFC de Sörbom solamente
proporciona diferencias en la media y en
la varianza de las puntuaciones factoriales
Aunque las matrices varianza-cova- estimadas en los diferentes grupos que son
rianza en los dos niveles del factor inter- evaluados, pero la métrica para el factor es
sujetos no fueron homogéneas, aún usando indeterminada. Para obtener una solución,
las correcciones más conservadoras,los se tuvo que arbitrar una serie de restriccio-
tres efectos: a) intrasujetos: b)intersujetos; nes para fijar una escala para el factor que
y c) interacción grupos x series, fueron es común para los dos grupos.En este artí-
claramente significativas, tal como se pue- culo se usó la restricción más usual que
de ver en la tabla 2. Se esperaban estos re- consiste en fijar el valor de la primera car-
sultados simplemente de la inspección ga a uno de los dos grupos y fijar la media
ocular de los datos. de las puntuaciones factoriales en cero en
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LA INVARIANZA EN LA ESTRUCTURA FACTORIAL DEL RAVEN EN GRUPOS DE DELINCUENTES Y NO DELINCUENTES
el otro grupo. (ver Jöreskog y Sörbom, por las restricciones antes descritas, en es-
1989 para más detalle). te modelo los interceptos y las cargas fac-
toriales eran libres de variar en los gru-
Ajuste del modelo pos.
Una inspección de los índices de ajuste
La evaluación del ajuste para los dife- en la table 3 muestra que el modelo de Li-
rentes modelos examinados se basaron en nea base es admisible así, por el momento,
los siguientes índices: a) valor mínimo de se puede asumir que, a nivel de series, el
la Función de discrepancia, b) raíz media test se comporta unidimensionalmente en
cuadrática del error de aproximación ambos grupos. En segundo lugar, se ajustó
(RMSEA), c) índice de validación cruzada totalmente un modelo factorial común in-
(ECVI), d) test chi-cuadrado de ajuste variante. Este modelo está anidado en el
exacto y e) test de ajuste aproximado. El modelo de Línea Base porque se podía ob-
procedimiento de investigación basado en tener a partir de aquel restringiendo algu-
estos índices se describe con detalle en nos parámetros del modelo de Línea base,
Browne y Cudeck (1993). de forma que los valores fuesen los mis-
Los resultados del ajuste para los dife- mos en ambos grupos. La hipótesis en este
rentes modelos examinados se resumen en caso fue que, no solamente el test es unidi-
la Tabla 3. mensional en ambos grupos, sino que tam-
bién la estructura factorial es la misma.
Como muestra la tabla 3, el ajuste com-
Tabla 3
Resumen de análisis
pleto para este modelo no se puede consi-
derar aceptable. Además, usando la propie-
Modelo d.f. Fs RMSA ECVI dad de que la diferencia en ajuste entre dos
modelos anidados se distribuye asimismo
Línea Base 10 .038 .055 .082
Invar. Plena 18 .130 .082 .170 como un chi-cuadrado con grados de li-
Invar. Parcial 16 .043 .044 .079 bertad igual a la diferencia en los grados de
libertad para los dos modelos, si se compa-
ra el modelo Línea base y el modelo de
Modelo x2 pTEF pTCF Decisión
plena invariancia, la diferencia es: Chi-
Línea Base 50.52 .000 .27 Aceptado cuadrado (8) = 129.01, p =0.000, que indi-
Invar. Plena 179.53 .000 .00 Rechazado ca que las restricciones impuestas son ina-
Invar. Parcial 57.53 .000 .77 Aceptado
ceptables. Finalmente, se examinó un mo-
Nota: D.F. = grados de libertad; Fs= valor mínimo de la delo invariante parcial. Se obtuvo del mo-
función de discrepancia; RMSEA= raíz media cuadrática delo de plena invariancia, relajando las res-
del error de aproximación; ECVI= índice de validación tricciones de igualdad en las cargas facto-
cruzada; X2= test de Chi cuadrado de ajuste exacto;
PTEF= probabilidad en relación al rest de ajuste exacto;
riales para las series 4 y 5. La tabla 3 mues-
pTCF= probabilidad en relación al test de ajuste aproxi- tra, no solamente que el ajuste completo de
mado. este modelo es aceptable, sino también que
su ajuste relativo es mejor que el modelo
de Línea base (como se muestra por el
El primer modelo en ser examinado fue RMSEA, ECVI, y el test de ajuste aproxi-
el modelo de Linea base. Se basó en la hi- mado). Finalmente, la diferencia del test
pótesis de que solamente un factor común no es significativa: Chi-cuadrado (6) =
subyace en el rendimiento en las cinco se- 7.21, p=0.30. Basado en estos resultados,
ries del Raven en ambos grupos. Excepto se decidió que este modelo proporciona un
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0.628 en el grupo de soldados, es decir, las do, estos resultados muestran que: a) hay
puntuaciones en la serie quinta son bastan- diferencias en las puntuaciones observa-
te predecibles a partir del comportamiento das en el Raven entre un grupo delincuen-
en las series anteriores, y esta predicción es te y otro no delincuente, ambos con un ni-
aproximadamente la misma en ambos gru- vel de educación similar, y b) un modelo
pos. La asumpción de las respuestas azaro- de estructura de covarianza con paráme-
sas y negligentes en el caso de los delin- tros parcialmente invariantes y una clara
cuentes parece improbable. diferencia en la media de las puntuaciones
La segunda parte de la tabla 4 está rela- factoriales estimadas entre los dos grupos
cionada con la estimación de las medias y de comparación se ajusta razonablemente
varianzas de las puntuaciones factoriales bien a los datos observados.
en ambos grupos. En primer lugar, cabría Una interpretación más realista de los
señalar que es posible comparar grupos en resultados hace referencia a la cuestión:
cuanto a su nivel factorial aún cuando el cuando se compara el resultado de los de-
modelo de plena invariancia no sea acep- lincuentes y los no delincuentes en el Ra-
tado. La única condición es que algunos ven, ¿Hasta qué punto las diferencias ob-
parámetros no fijados sean invariantes en servadas reflejan diferencias reales en el
ambos grupos. constructo que se pretende medir?. En lo
Atendiendo a las medias, que constitu- que concierne a los dos grupos aquí com-
yen el principal interés de este estudio, la parados, la evidencia sugiere que las dife-
tabla 4 muestra una clara diferencia entre rencias observadas están principalmente
grupos que es estadísticamente significati- determinadas por diferencias correspon-
va, como se puede ver al estudiar los in- dientes a un sólo factor común que subya-
tervalos confidenciales para el grupo no ce en el test (supuestamente g).
delincuente (la media del otro grupo es un Finalmente, aún cuando los resultados
parámetro fijado). Este resultado sugiere sugieren que el grupo delincuente tiene un
que la diferencia de medias intergrupo en- nivel más bajo de g, la hipótesis de que el
contrada en las puntuaciones observadas test no muestra funcionamiento diferencial
tiene una correspondencia con la diferen- en absoluto debe ser rechazada. Es evidente
cia de medias equivalente en las puntua- que se necesita más investigación para po-
ciones factoriales. der interpretar adecuadamente estos resulta-
dos. En primer lugar, sería necesario llevar
Discusión a cabo estudios de validación cruzada a fin
de investigar si los resultados aquí obteni-
Es importante considerar que en cierto dos se repiten en diferentes muestras. Si es
modo se puede hacer una interpretación y así, se necesitaría un estudio para poder exa-
una generalización a partir de los resulta- minar con detalle los contenidos de las se-
dos de este estudio. Estrictamente hablan- ries que se encontraron que no eran inva-
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