La solidaridad es una actitud inherente a las personas de buena voluntad.

La esfera giratoria que es el planeta donde vivos y nos desarrollamos como seres

sociales todos los días nos trae nuevos desafíos y retos , la humanidad a su vez esta en

constantes cambios y reacciones que generalmente dependen del ser humano, sin duda

alguna, la convivencia pacífica es la mejor opción para tener una vida saludable y

perdurable, el ayudarse mutuamente sin esperar un estímulo que gratifique la labor que

halla desarrollado y resolver las situaciones que se avecinan unidos, es la alternativa más

viable para que cada individuo pueda concebir un mundo mejor, la solidaridad es una

actitud inherente a las personas de buena voluntad, cuando nos referimos a los valores

presentes en los seres humanos, este juega un papel fundamental en la medida en que ha

sido su voluntad y roles sociales los que han hecho dela solidaridad la mejor expresión

de su cultura.

La expresión de la solidaridad constituye el elemento esencial que muestra los valores

de los seres humanos y su papel en la sociedad, la misma ha sido desde nuestras culturas

lo que ha unido a los pueblos, la creación de lazos elementales entre estos y la creación

de un sustento de base tanto social como política. El hombre como ser social, al establecer

relaciones con el entorno que le rodea incorpora elementos que le permiten jugar un rol

fundamental en la creación de sus intereses que puedan estar relacionados con elementos

económicos, políticos y sociales.

Desde la niñez se inculcan, se aprenden y se adquieren todo un conjunto de valores

acorde a la sociedad en que vivimos, los cuales no son más que la representación en

nuestra personalidad de elementos como la familia, siendo el eslabón fundamental en

nuestra educación y formación, la escuela, donde se fortalecen todas las reglas, normas,

valores y principios de la sociedad en que vivimos y los medios de comunicación, entre

otros. Es la niñez la etapa fundamental donde la solidaridad permite crear un espacio de

concreción de las relaciones sociales entre los individuos, grupos en instituciones. Esta

etapa de la vida es el resultado de un gran sentimiento que genera posteriores cambios en

la conducción de nuestro comportamiento, valores y acciones de buna voluntad social. La

solidaridad es un valor que permite intercambiar criterios, reflexiones y una alternativa a

la integración, ello trae aparejados retos, desafíos desde las edades tempranas

redireccionando nuestros esfuerzos hacia una sociedad donde primen los valores de

justicia social y solidaria.

La solidaridad es valor adquirido por las personas en la medida en que estas son

capaces de reaccionar no solo en favor de sus intereses, ocupando un área importante de

la sociedad, sino también por los demás. Se adquiere por los seres humanos, se inculca a

través de estos en la propia medida en que en el proceso de satisfacción de sus propias

necesidades interactúa con el resto y es capaz de portar y recibir de estos elementos que

hacen de su modo de actuación el más solidario que pueda ejercer una persona hacia el

resto que le rodea. Son los seres humanos los que en su actuar cotidiano suman a su

personalidad elementos como la solidaridad que se convierten en los ejemplos dignos de

seguir por la sociedad toda. La naturaleza humana no nos ha hecho a todos iguales, al

contrario, somos diferente y en nuestros roles sociales aprendemos unos de otros,

intercambiamos criterios y es lo que nos hace grandes de corazón, el ser solidario es el

medio exacto que hacen que las acciones de unos repercutan en otros

La solidaridad es la protagonista de las buenas acciones, tanto para aquella persona

que la ejerce como para el que las recibe, es la herramienta que hace posible vivir en una

sociedad cada vez más justa, más digna con todos y para el bien de todos. Ello nos permite

vivir en una sociedad más unida, vivir la realidad al alcance de todos, sentirnos

acompañados, estar al alcance de las soluciones a nuestros problemas y desarrollarnos

mejor productivamente. Las acciones de buena voluntad están permeadas por el elemento
de la solidaridad que acompaña a un gran conjunto de individuos con los cuales

interactuamos a diario. Detrás de una buena acción resalta dicho elemento como la vía

más efectiva de las buenas relaciones.

Es la solidaridad la promotora de las grandes acciones, significa colaborar de forma

conjunta con el objetivo de conseguir un objetivo, expresa la relación recíproca entre los

individuos en la sociedad, promueve la creación de hábitos en virtud de los cuales se

adquieren los valores humanos que al ponerlos en práctica expresan en que medida y

contexto nos hemos educado. Existen varios actos de solidaridad en nuestra realidad

promovidos por las buenas acciones de cada individuo. Toda sociedad, institución,

comunidad o grupo humano expresa de manera general valores que se declaran como el

potencial humano de la sociedad.

El rescate de la solidaridad humana es el pilar fundamental de los pueblos alrrededor

del mundo, como actitud propia de las buenas acciones de grandes personas en el mundo

es el reflejo de las mismas, la ayuda humanitaria desinteresada y apoyo incondicional en

diversas materias es el ejemplo más grato que han determinado el desarrollo de muchas

sociedades. Ello tiene una determinación social en tanto constituye un producto que en el

proceso de socialización donde toda la sociedad expresa un conjunto de valores

declarados que responde a su organización social y política. El individuo ha mostrado ser

solidario y a la vez realizar diversas proezas extraordinarias, la igualdad y fraternidad han

sido un privilegio fabuloso de cada individuo que hace de su existencia la más consagrada

a la causa justa. La sociedad y las buenas acciones han significado el bienestar de esta

como un organismo vivo y una parte conjunta que evidencia la esencia e importancia de

la unidad a nivel mundial y la solidaridad como edificación de la sociedad pensada por

todos y a la que todos aspiramos.