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Trastorno de la ansiedad.

Evelina
Duarte

Este trastorno también


se conoce como
“neurosis de
angustia”.

Concepto:
 Miedo crónico que se mantiene en ausencia de una amenaza directa.
 Funcionamiento anormal en alguna de las áreas de la vida (relaciones con los demás, la escuela, el
trabajo, etc.)
 Sensación de miedo, inquietud, tensión, taquicardia y dificultad respiratoria, que puede no estar
asociada a ningún estímulo aparente.

Causas:
A las mujeres se les diagnostica trastorno de ansiedad generalizada de manera un poco más frecuente
que a los hombres.
Como sucede con muchas enfermedades mentales, la causa del trastorno de ansiedad probablemente
surge de una interacción compleja de factores biológicos y ambientales, que pueden incluir:
 Diferencias en la química y la función del cerebro: disregulación (La disregulación emocional
consiste en un control pobre del niño o del adulto sobre su propia expresión afectiva en distintas
situaciones sociales) de varios neurotransmisores cerebrales (serotonina, noradrenalina, GABA y
CRF).
 Genética
 Diferencias en la forma de percibir las amenazas
 Desarrollo y personalidad

Síntomas:
Los síntomas del trastorno de ansiedad pueden variar. Algunos de ellos son los siguientes:
Adultos
 Preocupación o ansiedad persistentes por determinados asuntos que son desproporcionados en
relación con el impacto de los acontecimientos
 Pensar demasiado los planes y las soluciones a todos los peores resultados posibles
 Percibir situaciones y acontecimientos como amenazantes, incluso cuando no lo son
 Dificultad para lidiar con situaciones de incertidumbre
 Temperamento indeciso y miedo a tomar la decisión equivocada
 Incapacidad para dejar de lado u olvidar una preocupación
 Incapacidad para relajarse, sensación de nerviosismo y sensación de excitación o de estar al límite
 Dificultad para concentrarse, o sensación de que la mente se «pone en blanco»
Los signos y síntomas físicos pueden ser los siguientes:
 Fatiga
 Trastornos del sueño
 Tensión muscular o dolores musculares
 Temblor, agitación
 Nerviosismo o tendencia a los sobresaltos
 Sudoración
 Náuseas, diarrea o síndrome del intestino irritable
 Irritabilidad
Niños y adolescentes
 Desempeño en la escuela o en eventos deportivos
 Seguridad de los familiares
 Llegar a tiempo (puntualidad)
 Terremotos, guerras nucleares y otras situaciones catastróficas
Los signos y síntomas físicos pueden ser los siguientes:
 Sentirse demasiado ansioso por tratar de integrarse
 Ser un perfeccionista
 Volver a hacer algunas tareas porque no salieron perfectas la primera vez
 Pasar demasiado tiempo haciendo las tareas de la escuela
 Carecer de confianza
 Esforzarse para obtener la aprobación
 Exigir demasiada atención sobre su desempeño
 Tener dolores de estómago frecuentes u otros síntomas físicos
 Evitar ir a la escuela o evitar situaciones sociales

Tipos de trastornos ansiedad:


1. Trastorno de ansiedad generalizada
En este tipo de trastorno se dan sobre todo miedos indeterminados (llamados de libre flotación) y
sensación de tensión.
El miedo puede aparecer ante diferentes circunstancias de la vida y diferentes situaciones del día a día.
2. Trastorno fóbico de ansiedad
Existen fobias específicas (miedos intensos, respecto a determinados objetos o situaciones).
Pueden incluir situaciones como encontrarse con determinados animales o volar en avión.
Las fobias sociales incluyen miedo con relación a entornos sociales o lugares públicos.
3. Trastorno de pánico
El trastorno de pánico se caracteriza porque la persona que lo padece tiene sensaciones de que se va a
morir y que le falta al aire.
Son sensaciones que la persona percibe como muy reales, lo que le provoca un miedo intenso, pavor,
terror y, en consecuencia, un gran malestar.
En casos graves incluso hay que hospitalizar al paciente.
4. Trastorno obsesivo compulsivo (TOC)
Se caracteriza por sentimientos o pensamientos persistentes, incontrolables y no deseados (obsesiones) y
rutinas o rituales que realizan las personas para tratar de evitar o para liberarse de estos pensamientos
(compulsiones).
Ejemplos de compulsiones comunes incluyen lavarse las manos o limpiar la casa en exceso por temor a los
gérmenes, o verificar algo una y otra vez para detectar errores.
5. Trastorno por estrés post- traumático (TEPT)
Personas que tienen graves traumas físicos o emocionales como, por ejemplo, los producidos por un
desastre natural o un accidente o delito grave pueden experimentar este trastorno.
Los pensamientos, sentimientos y patrones de conducta se ven seriamente afectados por recuerdos de
estos sucesos, a veces durante meses o incluso años después de la experiencia traumática.

Tratamiento:
Técnicas farmacológicas
Los ansiolíticos son un tipo de fármacos que reducen los síntomas de ansiedad rápidamente, lo cual resulta
muy útil en el tratamiento del ataque de pánico, o las obsesiones (por ejemplo: Benzodecepinas,
Diacepam, Buspirona)
Son útiles en caso de reacciones intensas, no controlables, pero hay que sustituirlos, poco a poco, por el
autocontrol; de lo contrario, suelen degenerar en una adicción a este tipo de fármacos.
El tratamiento farmacológico debe estar prescrito y revisado (cada mes, o dos meses) por un especialista
en farmacología, por ejemplo, un psiquiatra.
Técnicas cognitivas
Son una serie de técnicas psicológicas en las que hay que comenzar por dar información sobre el trastorno,
su curación, etc.
Se basan en el entrenamiento del individuo en técnicas que mejoran su capacidad de auto-observación y
auto-corrección de sus pensamientos, su conducta y sus emociones.
Otras técnicas cognitivas enseñan a identificar pensamientos negativos, errores en la interpretación de la
realidad, tendencias individuales que generan ansiedad, etc, para después enseñar a cambiar estas
tendencias o procesos.
Técnicas de relajación de la actividad fisiológica
Enseñan a las personas a relajarse, disminuir la activación fisiológica, soltar los músculos, respirar
correctamente, imaginar, etc.
Hay que practicarlas todos los días.
Técnicas centradas en la conducta.
Resaltan la necesidad de exponerse a las situaciones temidas, acercándose a los estímulos que provocan la
ansiedad (bajo situación de control), todo ello bajo el principio de aproximaciones sucesivas (poco a poco)
y el principio del refuerzo (es importante premiarse por los éxitos, y corregir ante los fracasos, en lugar de
castigarse).
Además, algunas técnicas enseñan al sujeto habilidades personales o sociales para enfrentarse mejor a las
situaciones ansiógenas.
Rol y función del acompañante terapéutico en los trastornos de ansiedad:
 Brindar contención y apoyo: tener la capacidad de tener una actitud empática y mostrarse
dispuesto a ayudar.
 Ayudar a objetivar las situaciones: ayudar a analizar de forma más objetiva y realista la situación
para animar a la persona a hacer frente a la misma, en lugar de sobreprotegerla y corroborar sus
miedos desproporcionados.
 Generar expectativas realistas de solución: interesa que la persona sepa que a pesar de tener
ansiedad puede llegar a disponer de las estrategias necesarias para que ésta pueda superarse.
 Evitar fuentes de estrés innecesarias. Si es necesario mantener una rutina que lo haga sentir más
seguro.
 Ayudarlo establecer vínculos sociales: haciendo deporte, yoga, cursos de interés, salidas, etc.
 Colaborar con los especialistas en la aplicación del programa terapéutico.

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