El Tahuantinsuyo tenía como gobernante principal a Wayna Qhapaq, el cuál

envió una orden de aumentar la producción de tejidos o producción de “Away”

a los pobladores del sector de Qanchi, las autoridades al ver injusta la orden de
productividad que demandaba el Inka intentaron dar una solución de forma
diplomática con él; al no ser efectiva su diplomacia, las autoridades Qanchi
decidieron nombrar como regente de sus ejércitos a Tito Qosñipa, colocándolo
como general de los ejércitos del sur.

Tito Cosñipa le dio el uso a Waqrapukara como una atalaya, dicho lugar
funcionó perfectamente a favor de los Qanchi, ayudándolos a resistir frente a
los ejércitos del Inka. Los días pasaron y el ejército Inka al ver que el ejército de
Qosñipa estaba muy asentado decidieron cortar el flujo de agua. Los soldados
no pudieron resistir sin el elemento vital y terminaron rindiéndose, dejando su
destino a merced del ejército del Inka Wayna Qapac. Tito Cosñipa temía lo
peor, pero el Inca al pedir su presencia desde la zona que gobernaba (Quito-
Ecuador) convirtió a Tito Qosñipa en uno de los generales que apoyó en las
guerras de conquista a favor del Tahuantisuyo.