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Darwin Martínez

En la vida comentemos infinidad de errores de diferentes clases, pero incluso el ser humano que
más haya pecado en este mundo no se merece morir sin antes conocer cuál es su verdadero
propósito en la vida. Es verdad, cada ser humano actúa bajo la influencia de algo o de alguien a lo
cual se le conoce como trastorno de identidad según la ciencia, Dios no lo llama de esa manera, él
nos dice que cada uno tiene la capacidad de tomar sus propias decisiones sin necesidad de la
intervención por parte de algún objeto(cosa) o persona.

La desobediencia es el punto en el cual cada uno de nuestros actos no llevan de una u otra manera
a un distanciamiento con Dios, ese distanciamiento genera una controversia: tal vez la misma que
llevo a adán y a Eva al pecado, pero en nuestro caso ocurre algo diferente puesto que las
circunstancias nos obligan a depender de ese ser omnipotente y poderoso, el cual creo al hombre
a su imagen y semejanza pero que con el paso del tiempo, cada ser humano a deteriorado su
identidad creando falsas alusiones de la existencia del ser vivo, sin tener en cuenta que nuestra
historia se describe en dos etapas, la primera etapa es claramente antes de cristo en donde
existían imperios, reyes etc., como lo aclaran libros científicos y el libro que mas dudas en cuanto a
la veracidad de sus palabras y se llama la biblia, por otra parte si es verdad que ubo un ates de
cristo es claro que tiene que haber un después, y esa etapa es la que marca el nacimiento de una
nueva era en la cual imperios junto con sus reyes han caído y la nueva orden según el hombre a
renacido pero sin involucrar esta vez a Dios en la ecuación, puesto que han existido seres que con
su inteligencia y su conocimiento han tratado de evadir la creencia en un Dios todo poderoso para
dar explicación científica a un evento tan trascendente como lo es la creación.

Los sucesos anteriores son totalmente verídicos para alguien que haya establecido y entregado
anteriormente su conocimiento, vida y obra a Dios el todo poderoso, pero la pregunta que surge
es ¿y los que no creen?, se perderán y arderán en los infiernos por toda la eternidad?, esto es lo
que mucha gente piensa, pero la verdadera respuesta es que no ellos tienen otra oportunidad,
como se dijo anteriormente ningún ser humano por mas vil y ruin que haya sido su existencia en
Dios siempre habrá un asegunda oportunidad para reconciliarte, cambiar y crear nuevos lazos de
amistad con el.

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