La incidencia de la familia en los actos de violación sexuales y
homicidios en los niños.
Son considerados abusos sexuales infantiles todas aquellas actividades sexuales forzadas que invaden la intimidad y la integridad del menor por parte de un adulto. Cualquier comportamiento sexual ya sea con contacto físico o sin él, está penado por la ley, la cual considera que un menor de edad no cuenta con la suficiente maduración psíquica para consentir las distintas formas de acercamiento sexual que pueden ocurrir. Los contextos en los que puede darse un caso de abuso sexual infantil son, o bien extra familiares , es decir, aquellas agresiones sexuales cometidas por personas ajenas al entorno familiar de la víctima tanto si son conocidos como desconocidos; o bien intrafamiliares, en donde las agresiones sexuales son realizadas por algún miembro de la familia. A pesar del tiempo hemos visto que la mayoría de abusos sexuales y homicidios en los niños ha ido muy ligado a la familia, o la confianza que goza el abusador por una conexión de amistad o familiaridad con el menor. En estas situaciones siempre ha habido una complicidad del silencio tanto por los abusos de intrafamiliar o extrafamiliar. Uno de los tantos casos sonoros de asesinatos de infantes es el del niño jose Rafael Llenas Aybar en el cual el 4 de mayo del 1996, el niño fue asesinado con 34 puñaladas por su primo y un amigo. Es claro aquí los lazos directos que tenía el asesino con la victima ya que eran un familiar cercano de la familia gozando de tal modo de una mayor ventaja, para poder raptar y llevar a cabo su plan macabro. Otro caso muy reciente es el de Liz Maria, una niña de 9 años, la cual vivía en el sector Isabelita de la ciudad de Santo Domingo, la misma era abusada por un señor conocido como el panadero, y al parecer era una situación que conocían con anterioridad los moradores del lugar pero nunca nadie hizo nada; el desenlace de la situación termino en tragedia. A mi entender la mayor culpabilidad la tienen los padres por permitir semejante descuido y si sabían de la situación aún peor por ni siquiera tener el mínimo interés en actuar y en protección y cuidado de la niña. Los niños deben protegerse en todo momento y circunstancia por la inocencia que trae consigo la niñez, hay tantos factores que ayudan al desarrollo y la continuidad de dichos actos que a simple vista puede verse hasta imposible la lucha contra dicho flagelo. Lo principal es el tabo que aún existe sobre comunicarle a los niños y dejarle saber cuándo tienen que hablar y que es un abuso sexual porque muchas veces los infantes desconocen que de lo que están siendo víctima es inapropiado y también implica que el abusador es alguien respetado por el entorno, sacerdotes, entrenadores, amigos muy cercanos de la familia o hasta papa. Hay que concientizar y educar en este aspecto a nuestros niños y niñas, manteniéndolos protegidos en todo momento.