Caso clínico

Pamela es una adolescente de 14 años, la mayor de 2 hermanos, cursa 1ero medio. Vive con su madre (36
años), padre (40 años) y hermano menor (10 años). Ambos padres trabajan hasta tarde todos los días, por
lo que los hijos suelen quedarse solos la mayor parte del tiempo.

Usted la recibe en su turno a las 11 de la mañana, al ser ingresada al servicio de urgencia del Hospital
Exequiel González Cortés, después de ser trasladada desde su colegio, luego de que la niña le comentara a
su profesora jefe que se sentía con náuseas y que había “tomado 2 sorbos de cloro” esa mañana en su casa.
Días antes le había comentado a sus compañeras de curso que “no quería estar aquí” “irse lejos” “dormir
para siempre”.

Madre la lleva a urgencia por insistencia del colegio, ya que ella no quería llevarla al hospital “se van a
demorar mucho en atenderla”.

La persona que ha hecho el ingreso y tomado los signos vitales le indica que no se alarme, “es solo por
llamar la atención”, porque esta adolescente ha venido por intoxicaciones similares (medicamentos,
pesticidas, vitaminas) como 2-3 veces en los últimos meses.

Preguntas

1. Una vez estabilizada desde el punto de vista médico, ¿qué aspectos individuales y contextuales
debiese considerar para determinar el nivel de riesgo global del suicidio?

2. ¿Cuál es el nivel de riesgo global de suicidio que usted determina en este caso?

3. ¿Cuál sería su manejo?

4. Considerando el comentario “no se preocupe, es solo por llamar la atención”, ¿qué intervenciones
realizaría con el personal de salud de su turno?