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ensentidofigurado

CONSEJO EDITORIAL
Editores

José Antonio Álvarez Di


Stasio
Contenido
Inmaculada Barranco
Juan Barroso
José Antonio Durand 1.- Especiales 5
Judy García Allende 11.- Introducción – José GUTIÉRREZ-LLAMA (5)
Ángel González González 12.- Bases para participar en el Segundo Premio Literario
José Gutiérrez-Llama Internacional “Letras de Iberoamérica” – ESF (7)
Pedro Herrero 13.- “Púrpura de cristal”, de Ana Isabel Alvea Sánchez – Iván ONIA
Carlos Hidalgo Villalba VALERO (9)
Elisa Luengo 14.- “De nuevas filias y otras fobias”, de José Antonio Durand – José
Emilia Oliva GUTIÉRREZ-LLAMA (13)
Cony Pedraza 15.- “La barca fantasma”, de Gustavo Ponce Maldonado – José
Antonio DURAND (18)
Asistencia Editorial 16.- “Intentos fallidos”, de José Gutiérrez-Llama – José Antonio
DURAND (21)
Juan Pablo Varela
Víctor Cáceres A.

PORTADA 2.- En pocas palabras 27


21.- Raíces palimpsesto – Sylvia MOLINA MURO (27)
22.- Setenta y cinco – Francisco Javier INSA GARCÍA (31)

3.- Entre cuentos 35


31.- Especial José Antonio Álvarez Di Stasio – Cony PEDRAZA (35)
32.- Qué suerte tienes – José Antonio ÁLVAREZ DI STASIO (36)
33.- El guardián del faro – José Antonio ÁLVAREZ DI STASIO (40)
34.- Desde algún lugar del paraíso – José Antonio ÁLVAREZ DI
STASIO (42)

34.
“Caminantes”
Juan Barroso
4.- Entre ensayos y tanteos 44
41.- La memoria, el yo y la inspiración a la luz de la mitología
griega – Carolina Fanny GREKIN GARFUNKEL (44)
EDITADA EN
42.- La poesía como ejercicio filosófico – Ricardo Andrés
Alemania - Andorra CHAVARRIAGA TRÓCHEZ (48)
Argentina - España
EEUU - Francia
México - Puerto Rico -
Uruguay
ensentidofigurado
EN SENTIDO FIGURADO

Año 11 Número 3
Marzo/Abril
2018 5.- Palabra en verso 55
51.- Introducción – Ángel GONZÁLEZ GONZÁLEZ (55)
Es una publicación de: 52.- Benignos… – José Antonio CÁCERES (56)
José Gutiérrez-Llama 53.- Octubre – Jonathan Gerardo CASTILLO ANTÚNEZ (58)
54.- Lloraban tus ojos en mi conciencia – Josep Esteve RICO I
SOGORB (59)
Es una revista literaria de
publicación bimestral de 55.- Por qué no he ido a la re-presentación de tu libro – Ángel
difusión vía red de cómputo. GONZÁLEZ GONZÁLEZ (60)
56.- Los afortunados – Claudio Felipe MARTÍNEZ (62)
Blvd. Adolfo López Mateos
314, Colonia Tlacopac.
C.P. 01049 México, D. F.
MEXICO.
Tel: (52.55) 54.81.55.61. 6.- Academia Literaria de la 63
www.ensentidofigurado.com
Ciudad de México
61.- Tres poemas – Arturo HERNÁNDEZ GONZÁLEZ (63)
Reservas de Derechos al
Uso Exclusivo No. 04–
62.- Tríptico del verde oscuro – José GONZÁLEZ GÁLVEZ (67)
2011–082909412300- 63.- Las referencias bibliográficas – Lilia RAMÍREZ (70)
203. ISSN: 2007-0071. Esta
publicación se terminó de
editar el 9 de abril de 2018.

Las opiniones expresadas 7.- Desde el taller 74


por los autores no 71.- El árbol de los búhos – Soledad ARBÓN (74)
necesariamente reflejan la 72.- El trajecito a cuadros – Norma ESPINO (76)
postura del editor de la 73.- Hay un muerto en el ropero – Rubén “Coco” VIDAL (78)
publicación.
El contenido de los textos es
74.- Angelita – Delia GARCÍA (80)
responsabilidad del autor. 75.- Poesía – Alba SENA (82)
EN SENTIDO FIGURADO los 76.- Cuando me subí a la moto – Miriam ARÉVALO (84)
incluye en apoyo a la
libertad de expresión y el
respeto a la pluralidad.

Queda estrictamente 8.- Entremés 87


prohibida la reproducción 81.- Librería – José GUTIÉRREZ-LLAMA (87)
total o parcial de los 82.- Cine desde el diván – Carlos HIDALGO VILLALBA (89)
contenidos e imágenes de la
publicación sin previa
autorización de EN SENTIDO
FIGURADO.
9.- Galerías 94
Publicación sin fines de 91.- Fotografía – Ángel GONZÁLEZ GONZÁLEZ
lucro que no admite
- Muestra de “Azúcar de vertedero” – Víctor L. SAGUNZ (94)
patrocinios y es sufragada
con recursos propios.
PROHIBIDA SU VENTA.
GRACIAS POR COMPARTIR ESTOS AÑOS

DIRECTORIO
Editor Responsable: José Gutiérrez-Llama Suscripciones:
en-corto@ensentidofigurado.com suscripciones@ensentidofigurado.com

PARA ENVIAR COLABORACIONES


Micros: Pedro Herrero Academia Lit. CDMX: José Antonio Durand
Inmaculada Barranco en-corto@ensentidofigurado.com
micros@ensentidofigurado.com
Traducciones: Elisa Luengo
Cuentos: Cony Pedraza elisa-luengo@ensentidofigurado.com
cuentos@ensentidofigurado.com
Fotografía: Ángel González González.
Ensayos: Judy García Allende fotografia@ensentidofigurado.com
Juan Pablo Varela
ensayos@ensentidofigurado.com Ilustraciones: Ángel González González
angel-gonzalez@ensentidofigurado.com
Poesía: Emilia Oliva
Ángel González. Video: José Gutiérrez-Llama
poesia@ensentidofigurado.com jgllama@ensentidofigurado.com

Letras pequeñas: Judy Garcia Allende Artes plásticas/audio: ESF


ensayos@ensentidofigurado.com jgllama@ensentidofigurado.com

FACEBOOK BLOG
josé gutiérrez-llama

INTRODUCCIÓN «No consigo dormir.


Tengo una mujer atravesada entre los párpados.
Si pudiera, le diría que se vaya;
pero tengo una mujer atravesada en la garganta».

–Eduardo Galeano–

Un nuevo número que por ventura incluye, también, un nuevo y


más que festivo proyecto: la flamante sección, “Desde el taller”.

“Desde el taller” evoca el sitio donde se originan, nacen y se


componen (y no me refiero a que estén destartalados) los textos. El
sitio inolvidable para todo escritor, donde forjó sus buenas (o malas)
dotes, sus habilidades, sus destrezas, a la luz de otros que, como él,
anhelaban probar suerte en el oficio de escritor… ese sitio donde el
sueño parece realidad un instante… porque así son los talleres
literarios, mágicos por naturaleza.

En fin, a partir de este número, “Desde el taller” nos adentrará en las


entrañas de los múltiples talleres literarios de Montevideo (Uruguay),
como una forma de acercarnos a la cuna de grandes escritores de la
talla de Benedetti, Galeano, Onetti, Zitarrosa, Quiroga o el Conde de
Lautréamont, entre muchos otros. Esta sección estará a cargo de
nuestro muy entusiasta y nuevo editor, José Antonio Álvarez Di
Stasio, a quien enviamos nuestro más sincero reconocimiento por la
continua labor que ha llevado a cabo en el campo literario y a quien
hacemos un breve homenaje en nuestra sección de cuentos, cortesía
de mi querida Cony Pedraza.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 5


Esperamos sinceramente que llegue a ser de tu agrado…

Por otra parte, en esta ocasión los especiales tienen un olor marcado
a tinta fresca, a papel recién impreso, a presentación literaria…

Más allá de reiterar nuestra atenta invitación para participar en el 2º.


Premio Literario Internacional “Letras de Iberoamérica 2018” (para
ello incluimos las bases del certamen), iniciamos con el fantástico
texto que Iván Onia Valero escribiera para la presentación del nuevo
libro “Púrpura de cristal”, de nuestra muy querida amiga y colabo-
radora, Ana Isabel Alvea Sanchez.

Seguimos con la participación de la Academia Literaria de la Ciudad


de México en el Programa de Actividades Culturales de la 39 Feria
Internacional del Libro en el Palacio de Minería, la segunda feria más
importante de México (después de la que se realiza en Guadalajara),
y la más antigua del país. En ella se presentaron los libros, “De
nuevas filias y otras fobias” de José Antonio Durand, “La barca
fantasma”, de Gustavo Ponce Maldonado e “Intentos fallidos” del
suscrito. Aquí dejamos los textos introductorios, leídos en cada una
de estas presentaciones.

Por lo demás, un número lleno del excelente sabor que deja la


buena literatura.

José Gutiérrez-Llama
Editor

6 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


La revista literaria, “En sentido figurado”:

CONVOCA
Al 2o. PREMIO LITERARIO INTERNACIONAL “Letras de Iberoamérica”,
EN LOS GÉNEROS DE POESÍA, MICRORRELATO, CUENTO Y ENSAYO LITERARIO.

Bases y Premios
1. La participación al certamen es gratuita.
2. Independientemente de su nacionalidad o lugar de residencia, podrán participar
todos aquellos escritores, mayores de edad, que cumplan con las bases de esta
convocatoria.
3. Las obras presentadas deberán estar escritas en castellano y no haber sido premiadas
en ningún otro concurso literario al momento del fallo (el carácter inédito de las obras
presentadas no es requisito indispensable).
4. La temática de las obras será libre y deberá apegarse en extensión a lo siguiente:
- Poesía: Extensión máxima de 30 versos.
- Microrrelato: Extensión máxima de 20 líneas.
- Cuento: Extensión máxima de 70 líneas.
- Ensayo Literario: Extensión máxima de 150 líneas.
5. Todas las obras deberán estar escritas con letra Times New Roman de 12 puntos e
interlineado de 1.5, y ser enviadas en archivo de WORD bajo un pseudónimo (no se
admitirá ninguna obra en otro tipo de archivo).
6. Cada participante deberá enviar, en otro archivo de WORD, sus datos personales
(nombre, apellidos completos, domicilio, código postal y dirección electrónica (email, es
indispensable) y número telefónico de contacto, este último es optativo), que
correspondan al pseudónimo bajo el cual participa.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 7


7. Los participantes podrán presentar un máximo de 2 obras por género y podrán
concursar en todos los géneros literarios de su elección.
8. El envío antes descrito deberá de ser realizado a través de un solo correo electrónico a
la siguiente dirección:
en-corto@ensentidofigurado.com
9. Por el simple hecho de presentar alguna obra a concurso, el participante afirma que la
obra es original y de su propiedad, y en consecuencia se hace responsable respecto a su
propiedad intelectual y patrimonial por cualquier acción por reivindicación o cualquier
otra reclamación que en ese sentido pudiere sobrevenir.
10. La fecha de recepción de las obras cerrará el lunes 30 de abril de 2018.
11. El jurado será integrado por miembros del Consejo Editorial de la revista “En sentido
figurado” y otras personas relacionadas con el mundo de la literatura y el arte.
12. El jurado actuará con la máxima libertad y discreción y tendrá además de las
facultades normales de discernir el ganador y emitir el fallo otorgándolo o declarándolo
desierto, la de interpretar las presentes bases. El jurado no mantendrá ningún tipo de
comunicación, ni escrita ni verbal con los participantes y su fallo será INAPELABLE.
13. El fallo será comunicado a través de la revista “En sentido figurado” en su edición de
Julio/Agosto de 2018 y difundido a través de su página de Facebook.
14. Se nombrarán 3 ganadores por género (primero, segundo y tercer lugar), cuyo
premio consistirá en la entrega de un Diploma de Reconocimiento por parte del
Consejo Editorial de la revista “En sentido figurado”, y la publicación de la obra premiada
en la edición de Septiembre/Octubre de 2018, en la sección de los Especiales de dicho
número.
15. Las obras que se publiquen conservarán la propiedad intelectual de su autor.
16. El Diploma de Reconocimiento será enviado a cada ganador por correo postal.
17. Todas las obras presentadas quedarán en poder del Consejo Editorial de la revista
“En sentido figurado”, la cual se reserva el derecho a publicarlas en ediciones futuras de
la revista, notificando a su autor por correo electrónico y otorgándole el crédito y
derechos de autor correspondientes.
18. La presentación de obras a este certamen supone por parte de los autores la plena e
íntegra aceptación de las presentes bases, así como la decisión del jurado ante cualquier
imprevisto, no recogido en las mismas.
19. Ni el jurado, ni los organizadores del presente certamen se hacen responsables de
las opiniones vertidas por los autores en sus obras.
20. Ninguno de los organizadores de este evento podrán participar en el mismo.

Consejo Editorial
“En sentido figurado”
Febrero, 2018

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“PURPURA
DE CRISTAL”
DE
ANA ISABEL
ALVEA
SÁNCHEZ

Iván ONIA
VALERO
España
2018

UNA MIRADA SOBRE “PÚRPURA DE CRISTAL” DE ANA


ISABEL ALVEA SÁNCHEZ

Desde aquellas tardes, en que la pequeña ciudad conducía sus ocasos


a una apoteosis mediocre, hasta la luz de esta tarde, luz de agua y
más allá, hemos ido fraguando un hijo para la muerte.

– F. Umbral –

He tomado como punto de partida esta cita de Mortal y


Rosa en la que Umbral escribe a su mujer sobre lo terrible
de la pérdida de un hijo, para intentar compendiar en
pocas palabras el libro que tenemos entre las manos.

Muchas veces me ha ocurrido ver en las caras de amigos o

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 9


familiares un gesto extraño al hablar de la poesía, tanto a
la hora de leerla como de practicarla o intentar levantarla.
A mí, en cambio, me resulta muy extraño que haya un
consenso general y muy humano socialmente aceptado en
el que demos por bueno de forma natural el hecho de que
una persona nos sea arrebatada y no volvamos a verla
jamás. Creo que la poesía no sirve para amortiguar dolor
alguno, sino que es un terreno acotado a los hablantes de
un idioma muy concreto. La poesía, si bien no repara, sí
traduce el dolor a la máxima expresión de lo humano, que
es el lenguaje. Y de eso precisamente nos habla Púrpura de
Cristal, de la pérdida que, aunque acordada como ley de
río, ley de agua y de ciclos y corrientes, no deja de ser
absurda en sí misma, como en una amputación corporal el
malogrado sigue notando el miembro huido, los muertos
siguen siendo parte de los lugares donde los dejamos, por
eso nos duele la cocina, y el sillón que ocupaban, nos
duele el reloj que dejaron en el cajón, las gafas pesando
sobre la mesita de noche o nos duele la lluvia compartida y
el paraguas que nos mira como un perro en la puerta.

Para hablar un poco del libro, de sus partes, de sus


aspectos formales, que son aspectos secundarios siempre,
cáscara de lo poético en comparación con la pulpa que
encierran, empezaríamos por señalar que la primera parte:
“Púrpura” sirve como un preámbulo amable de lo que
aguarda.

Volviendo a la cita del principio, podríamos decir que


desde aquellos poemas púrpura de plazoletas, púrpura
con libros y padre púrpura. Desde aquellas tardes
bulliciosas de barrio y de verjas, tardes infantiles, porque lo
infantil es la única raza de lo vespertino, con hermano
grande y madre viva. Desde las siestas lejanas con libros
como abanicos, desde la adolescente a la mujer que

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empieza a crecerle una poeta dentro, que ve el mar en
todas las cosas. Desde aquellos sobrinos como manzanas
iluminadas, desde la maternidad hecha sólo para lo alegre
que son una tía y su sobrino, almirantes del juego simple
del amor. Desde todos esos lugares púrpura, hemos ido
fraguando a una madre para su viaje. Es complicado
darnos cuenta, pero vivir muchas veces se limita a
abrocharnos los botones, uno a otros, del traje con el que
un día seremos enterrados. Nos vamos acicalando,
recíprocos, para la muerte; los nietos, el marido, el hijo en
las afueras, la niña, que nos ha salido poeta, fabricando
poco a poco el traje que llevaremos en nuestra partida, el
vestido de antinovia que recordarán los que aquí se
queden. Un traje a medida con los botones desiguales,
uno por cada mano amorosa que lo fue tejiendo mientras
estábamos y que ahora se ha posado en una fotografía,
para siempre, como una mosca en un gramo de miel.

El cemento fresco de estos primeros poemas se endurece


de pronto en la parte central del libro: “Cristales”. Con un
lenguaje sencillo, de repente se apaga la tarde, y el libro
nos mete por un pasillo azul, seco y fluorescente. Aparecen
el frío, lo duro, lo crustáceo, la limpieza de las salas de
espera, los bisturíes. El poemario se puebla de cangrejos,
arsénicos, agujas, hay una blancura que aterra entre tanta
oscuridad descrita, el libro se vuelve blanco, como una
sangre enferma. El lenguaje sigue siendo claro, como en
los primeros poemas, pero los murmullos se convierten en
gritos, o peor, en silencios, hasta el mar llega un petróleo
dulzón y un dios pintor coge su paleta de grises y
emborrona el domingo palomero de los primeros poemas,
sabemos ahora que aquella primera parte era un prólogo y
que la alegría venía herida de muerte desde el principio. A
medida que avanzamos en la lectura empieza a dolernos la
vieja rodilla, la que anuncia la lluvia, la que espanta al

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sobrino, señor de los domingos, dios de las palomas, y lo
destierra. En realidad queda todo borrado, la literatura, el
padre, el hermano…, la esperanza es una visita de cortesía
que trae bombones y se marcha pronto, se quedan solas la
madre y la hija. Hay una especie de diario o de cuenta
atrás en estos poemas, recuerda por momentos al
poemario “El padre” de Sharon Olds. Pero sin duda, lo que
más endurece la lectura a medida que pasamos las hojas
es el peso que adquiere lo inevitable en esta parte y la
mochila de dolor que trae consigo.

La última parte del libro: “Después de ti” es un recorrido


por la realidad después de la pérdida. Como apuntábamos
al principio, hemos interiorizado tanto la naturalidad de la
muerte de lo que amamos, que apenas nos queda
asombro para notar lo absurdo de que el mundo siga a lo
suyo. A la descripción pura del dolor por la ausencia se
suceden poemas donde esta ridiculez de todo lo vivo
contrasta con el cuajarón de inexistencia que llevamos
dentro, como si nos hubiesen arrancado el hígado y el
vacío pesara más que el órgano. Los recorridos en coche
que se hacían antes como una rutina, se vuelven extraños
por últimos, los mecanismos burocráticos que rigen lo
cotidiano se hacen dolorosos, como cancelar la cuenta en
el banco y ver un nombre con dos apellidos que ya no
pertenecen a su dueño. Son los pequeños cerrojos que
una realidad funcionaria y pragmática nos obliga a ir
cerrando para que la vida siga girando con su locura de
peonza.

Imagen:
Portada del libro “Púrpura de cristal”, de Ana Isabel Alvea Sánchez

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DE NUEVAS
FILIAS Y
OTRAS
FOBIAS, DE
JOSÉ
ANTONIO
DURAND

José Gutiérrez-Llama y José Antonio Durand


José 39 Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería.
GUTIÉRREZ-
LLAMA Título: De nuevas filias y otras fobias
México Autor: José Antonio Durand
2018 Editorial: FES Zaragoza (UNAM).

Ante todo agradezco su compañía esta tarde en que tengo


el inmerecido honor de participar en la presentación del
libro “De nuevas filias y otras fobias”, de mi muy apreciado
amigo y fabuloso escritor, José Antonio Durand, de quien
aprecio la deferencia. Y bueno, si no disponen otra cosa,
vayamos adelante.

En cuanto al autor, debo decir que José Antonio es Psicó-


logo y Maestro en Sociología. Es Profesor de Humanida-
des, UNAM. Diplomado en Creación Literaria por el Centro
de Creación Literaria “Xavier Villaurrutia”, INBA, 2011.
Presidente y Fundador de la Academia Literaria de la
Ciudad de México, A. C. Autor de once libros de poesía y
cuento. Ganador del Concurso “Cuento, Poesía y
Periodismo”, UAM Iztapalapa, 1983; 1er Lugar en el

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Concurso de Cuento UPIICSA, IPN, 1986; 3er Lugar en el
Concurso Nacional de Poesía “Rubén Bonifaz Nuño”,
UNAM, 1995; 1er Lugar en el Concurso de Poesía “La
Pluma del Ganso”, 2009. Reconocimiento por aportación
intelectual de obra escrita, INDAUTOR, 2005. Reconoci-
miento por aportaciones a la difusión de la cultura y el
arte, Unión Estatal Escritores Veracruzanos, 2008. Tradu-
cido al francés en las antologías Poesía México-Quebec,
Tomos I y II, 2008 y 2016. Miembro de Honor de la Casa
del Poeta Peruano, 2009. Coordinador del Taller de
Creación Literaria en la Casa del Adulto Mayor “Las Rosas”,
Delegación Iztacalco.

En cuanto al libro, ya nos adelanta Mario Alberto Patiño en


el Prólogo: “Va de nuevo. Como un ominoso designio. Así
como el buitre que retorna interminablemente a devorar
las entrañas de Prometeo, la pluma de Durand insiste en
lacerar las entrañas de la literatura. Nada ha podido
detener tan inmisericorde tarea, ni la entrañable paciencia
de sus congéneres ni el dulce amor de las mujeres
piadosas ni la temible amenaza de las sectas herméticas
encargadas de custodiar la integridad de la raza humana”,
y entonces el lector se adentra en las páginas con la
máxima cautela, aunque al poco, inevitablemente regrese a
preguntarse si su concepto maximalista está bien definido
y con límites precisos.

Cierto, la necesidad de contar resulta del deseo de hacerlo,


del deseo de divertirse a sí mismo y a los demás, a través
de la invención, la fantasía, el terror y las historias
fascinantes. Es en este deseo donde la literatura tiene su
origen y de acuerdo con Enzensberger, quizás el hombre
primitivo no sabía leer o escribir, pero sabía contar. En
Durand este deseo es claro, sólido, imperturbable, y de
hacerlo al más puro estilo de Boccaccio, olvidándose de

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moralistas, críticos y lectores letrados, para hacerlo con el
leguaje de la gente común, la de la calle, usted o yo, usted
y yo; consciente, tal vez, de que el lenguaje es algo vivo y
las historias que narra tratan de seres humanos, vivientes,
sufrientes, que se hacen con sangre y no con tinta, ya que
con las palabras se mama, se vive, se sufre, se quiere, se
enfurece y se muere, diría Ernesto Sábato.

No hay duda que las historias y los poemas de Durand


reúnen los requisitos fundamentales en cuanto a la
autenticidad del tema, la originalidad del estilo y sobre
todo, la intensidad, una intensidad que sobrepasa la
tensión, el ritmo, la pulsación interna, lo imprevisto dentro
de parámetros previstos, la libertad fatal que no admite
alteración sin acusar la pérdida del cauce primario. Textos,
explica Cortázar, que se incorporan como cicatrices indele-
bles a todo lector que los merezca: criaturas vivientes,
organismos completos, ciclos cerrados, y respiran. Respi-
ran, más allá del narrador, a semejanza de los poemas
perdurables y a diferencia de toda prosa encaminada a
trasmitir la respiración de este. Textos cuyo signo y virtud
radican en haberse desprendido del narrador y el poeta
para erguirse como seres autónomos, objetos de conducta
impensada, y cuyas consecuencias ocasionales en los
lectores no se diferencian de las que tienen para el autor,
primer sorprendido de su creación, lector azorado de sí
mismo.

Textos que no admiten florituras ni palabras de sobra,


textos de trazo definitivo, sin espacio para la enmienda.
Textos, que al más puro estilo de Carver o Bukowsky, se
encuentran plagados de personajes típicos, seres vulgares
y corrientes que llevan vidas convencionales y cuyo prin-
cipal misterio, si no, el único misterio, es qué tanto pueden
hundirse en el barrizal que les ha preparado Durand.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 15


Textos donde la pluma del autor hace gala de efectos y
precisiones en el manejo de un hilo argumental cimentado
en el humor, sabedor, diría Nietzsche, de que el mejor
antídoto y el remedio más eficaz contra el nihilismo, es el
amor apasionado por la vida y el humor como estrategia
para conquistar y soportar la verdad. Después de todo, la
vida es alegría, afirmación, juego; juego que favorece todo
aquello que en nosotros y fuera de nosotros dice sí a lo
mejor, aquello que en nosotros y fuera de nosotros es
sano y quiere vivir, y ama la vida, cerraría Savater.

Textos, que de no ser así, resultarían inquietantes como el


propio Durand señala: “Seguramente a varios lectores mis
textos les moverán a reír, a reír mucho, incluso a carca-
jadas. Pero en una segunda lectura lo que les arrancará del
pecho serán gemidos, expresiones agoreras del llanto: un
mar de lágrimas verterá por el dolor y la tristeza al sentirse
identificado ya con este o con aquel personaje.”

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Porque el artista, y Durand lo es, se convierte en espejo
para hacernos ver las incongruencias y los desaciertos
humanos, por más que la risa sea una respuesta ante estos
infortunios, como argumenta Paulina Rivero Weber.
Después de todo, el absurdo en nosotros también es parte
de esa verdad avinagrada que se conjura al ritmo de una
amplia sonrisa.

En fin, con la anuencia de José Antonio, no quisiera


terminar sin tener el privilegio de leer un par de textos que
con honestidad, me hubiera gustado escribir.

UN WHISKY EN LA FERRETERÍA

Para Mariella con cariño

Mariella, con cierto aire de erudición, pidió al vendedor un


taladro de la marca Johnnie Walker. El vendedor, con
asombro, le aclaró que la marca era Black and Decker.

Todo parecía resuelto hasta que el empleado le preguntó


si le envolvía su taladro, porque la despistada Mariella
pidió que se lo sirvieran en las rocas.

ROMANTICISMO

Me preguntas:
¿de qué color es el mar?
Te respondo
¿cuál mar?

Imágenes:
Presentación en la FIL Minería y Portada del libro.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 17


LA BARCA
FANTASMA, DE
GUSTAVO
PONCE
MALDONADO

José Antonio
DURAND Al centro, Gustavo Ponce Maldonado
México 39 Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería.
2018

Título: La barca fantasma


Autor: Gustavo Ponce Maldonado
Editorial: Academia Literaria de la Ciudad de México

Gustavo Ponce, en su barca fantasma, pincela metáforas en


su viaje a las pirámides de Egipto, nos atrapa en el círculo
de lo fantástico, y no dudamos seguirlo en el desierto. Él
mismo es una gota que se estrella sobre el muro de la
vida; encuentra su camino en un remolino de recuerdos: de
los juegos de rayuela y del burro castigado.

El autor del libro viaja envuelto en el polvo del aro de su


infancia. En medio de retos, ilusiones y fracasos, nos
muestra imágenes atemporales, vuelve el origen al océano
de su vida, sin miedo a navegar con los remeros de
Caronte.

Esta nueva entrega de impecables poemas que nos hace el

18 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


reconocido escritor Gustavo Ponce Maldonado, se inscribe
en su producción poética más íntima y personal: ahí donde
las heridas del dolor aún no dejan cicatrices y quizás jamás
vayan a cerrarse.

En estas páginas se encuentran vertidas emociones del


Autor que reconocemos como sentimientos comunes:
Sensaciones que muchos de nosotros hemos
experimentado, que nos evocan algo sufrido y que son
elementos constitutivos de nuestro espíritu propios de
cada uno de nosotros, como parte de un perenne padecer.

Estremecimientos que dada nuestra naturaleza finita se ha


buscado referir, transmitir a terceros, pero solo la calidad
artística del poeta logra comunicarlos en la justa
dimensión que el hecho reclama como testimonio de vida.

Este libro contiene, además, el recorrido por una veintena


de lugares de los cinco continentes adonde la condición

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 19


nómada, de un poeta irremediablemente inquieto y por
demás sensible, ha llevado a Gustavo para encontrarse a sí
mismo.

GOTEA LA NOCHE

Los perros
ladran a la luna
el maullido en azoteas
araña las estrellas
la rosa despierta
en el jardín
el buró la mira
a través de la cortina
ya callados los minutos
se quedan dormidos
se escucha el sereno
las doce de la noche
su linterna
pinta en el tejado
fantasmas de plata

Imágenes:
Presentación en la FIL Minería y Portada del libro.

20 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


INTENTOS
FALLIDOS, DE
JOSÉ
GUTIÉRREZ-
LLAMA

(fragmento)

José Antonio
DURAND
México José Gutiérrez-Llama y José Antonio Durand
2018 39 Feria Internacional del Libro en el Palacio de Minería.

Título: Intentos fallidos


Autor: José Gutiérrez-Llama
Editorial: Alharaca, 2017.

Quiero iniciar haciendo patente mi agradecimiento por la


deferencia con la que me distingue mi amigo José Gutié-
rrez-Llama, para participar en este significativo evento.
Pero sobre todo, reconocer que su libro enaltece el ámbito
académico, filosófico y literario, pues dicho trabajo, contra-
rio a lo que señala su autor respecto a que pudiera resultar
“prescindible”, constituye un aporte indispensable en el
plano intelectual.

Bajo el título de Intentos fallidos –ensayos y tanteos–, en un


total de 400 páginas, Pepe nos convida una experiencia
por demás novedosa y creativa, con la inmersión al mundo
de las palabras desde la polisemia de los significados. Y es

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 21


en ese no-lugar de la palabra donde estas se dan cita para
anidar con precisión el pensamiento rebelde de un autor
insurrecto: Ensayista y narrador, nacido en la Ciudad de
México, quien es Licenciado en Estomatología y Doctor en
Ciencias Sociales, y cuenta con varias especialidades y
diplomados en diversos campos del conocimiento. En el
terreno científico ha publicado artículos en revistas
nacionales e internacionales. En el espacio académico y
literario cuenta con más de 300 publicaciones y
colaboraciones en revistas, diarios y blogs, posee varias
obras como único autor y ha participado en diversas
antologías publicadas en México y el extranjero. Es
fundador de la revista literaria internacional En sentido
figurado y ha obtenido distintos premios y reconocimien-
tos, nacionales e internacionales.

En Intentos Fallidos Pepe convoca a los más excelsos


personajes del mundo científico, artístico, filosófico y
académico, para caminar con apoyo analítico el trayecto
de sus muy peculiares ensayos.

Teóricos, analistas, intelectuales, humanistas, filósofos,


críticos, científicos… estudiosos instalados en los más
disímiles campos del conocimiento humano, componen la
pléyade del marco conceptual del trabajo comentado.

Basta con mirar la bibliografía en cada uno de los 35


capítulos, para percatarse del consistente y heterogéneo
soporte con que cuentan sus opiniones, en un impecable
conjunto de citas tejidas a su propio discurso que se
deslizan con absoluta propiedad, como si los autores las
hubieran escrito para sostener las tesis de Pepe.

Así, encontramos de manera sintética una miríada de


sumarios y pensamientos en citas y referencias, de Platón,

22 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


Aristóteles, Cicerón, Pascal, Descartes, Tomás de Aquino,
Hegel, Kant, Schopenhauer, Hume, Popper, Durkheim,
Leibniz, Lacan, Bergson, Ortega y Gasset, Heidegger, Freud,
Jung, Cioran, Nietzsche, Heisenberg, Wittgenstein, Locke,
Darwin, Camus, Sartre, Levi-Strauss, Baudrillard, Einstein,
Husserl, Kuhn, Francis Bacon, Comte, Frazer, Dilthey y
Gadamer, entre muchos otros pensadores.

Mientras que en el campo de la literatura en sus diversos


géneros tenemos referidos y citados fragmentos de
Shakespeare, Cervantes, Benedetti, Fonseca, Machado,
Nervo, Proust, Dostoievski, García Lorca, Pacheco, Neruda,
Calderón de la Barca, Sabines, Huidobro, Borges, Gelman,
Dickens, Wilde, Poe, Tolstói, Baudelaire, Lugones, Nabokov,
García Márquez, Paz, Monsiváis y Villoro, entre un gran
conjunto de humanistas y escritores.

Mas no solo es en el campo de las letras, la filosofía y la


ciencia donde siembra y recoge sus textos. Pepe también
encuentra motivos de análisis y reflexión en películas,
canciones, en el estrellato de las principales vedetes
mexicanas de los años setenta del siglo pasado, así como
en la cruenta Nota Roja de algún diario.

No obstante que el autor reflexiona sobre aspectos de la


mayor seriedad y relevancia filosófica, ello lo hace sin
suprimir una de las mayores virtudes de la agudeza de su
pluma: el humor negro; el humor corrosivo que campea a
lo largo de su trabajo, como cuando nos dice, en uno de
sus muchos y selectos epígrafes: «Si pienso, existo, y si no...
¿por qué me pendejeas?...”

Igual asume retador su defensa al tabaco y a los


fumadores, como confiesa con toda seriedad su apetito
por ser estrella de rock, para salir y chirrear enloquecido al

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 23


compás de un requinto mucho más agudo que él mismo.

Pepe nos advierte que: “todo este brevísimo recorrido no


tiene más fin que alertar al lector sobre la probabilidad y el
alto riesgo de que descubra el error y todo esto se
convierta en un intento fallido.”

Nos dice también que “los textos reunidos no apelan a la


demostración lógica ni se sujetan a premisas siempre
confiables; y tanto los hechos descritos como los juicios de
valor, de ningún modo buscan persuadir ni manipular a
nadie. Tales textos pueden contener un lenguaje
pseudocientífico empleado en forma incorrecta o incluir
términos rimbombantes, que estén fuera de contexto o
con un significado opuesto al que realmente tienen. Lo
cierto es que caminan ―sin otra pretensión y con
desparpajo― hacia la construcción de un imaginario
cambiante y contingente como el contexto social y mental
en que se gestaron”…

Y es que entre el cúmulo de concepciones teóricas,


aseveraciones científicas y opiniones académicas se desliza
él mismo como personaje de una narrativa literaria para
entregar historias atinentes, de manera destacada, a sus
encuentros con mujeres ―no siempre afortunados― en
escenarios geográficos de este y otros países.

Agradecemos los consejos y recetas para convocar al amor


y las recomendaciones frente al desamor, respecto al cual
nos dice: “La cama será un excelente complemento
terapéutico; que puede disponerse a demanda”, además
de brindarnos cantidad de lecciones donde va la vida en
prenda en un despliegue de ironía y sarcasmo. Así, ante el
dolor del corazón abandonado: “Administre, dice José, en
dosis única, un supositorio de plomo por vía intracraneal.

24 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


De inmediato sentirá cómo la memoria se desvanece y el
dolor claudica”

El proceso creativo conceptual opera bajo el imperio de la


imaginación, donde la alucinación y el desvarío divagan,
transitan y trasgreden los límites de lo posible. En esta fase
la realidad no es siquiera referente y puede torcerse al
antojo. A pesar de ello el proceso no concluye ahí. Hasta
entonces todo lo que “existe” es abstracto, impalpable,
imaginario, acaso un pensamiento, reflexiona Pepe.

En este sentido la realidad es algo que está asociado a lo


tangible. Es decir, ¿de qué sirve al artista conceptuar una
gran obra literaria o artística si nunca llega a concretarla?
Ciertamente de nada, asegura.

El autor declara que lo seduce la idea del proceso libertario


de inventarse y reinventarse; de conciliarse y reconciliarse

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 25


cada día en los conceptos; de interpretarse y reinterpre-
tarse en las palabras.

Y es justamente su pasión por las palabras lo que


constituye una proclama al señalar que le encanta la
palabra como símbolo máximo de expresión humana y
como testimonio divino; lo fascina cuando la palabra se
manifiesta congruente y cuando se puede ver. Lo apasiona
la palabra cuando es poder y ostenta su virtud para vencer
al balbuceo y trasciende. Lo conmueve la palabra cuando
luce vestimenta de veracidad. Lo embelesa la palabra
cuando sintoniza una mirada y es cadencia. Lo deslumbra
la palabra cuando seduce y se descarna cómplice del
sentimiento. Lo enloquece la palabra cuando transita hacia
parajes de ilusión y se vuelve piel y deseo. Lo entusiasma la
palabra cuando es rebelde. Lo deleita la palabra cuando es
versátil para liberarnos de aquél que la desgasta y corroe.

Hasta aquí mi comentario sobre Intentos fallidos, libro de


mi amigo José Gutiérrez-Llama: ejemplo de creación que
honra no solo el inventario literario en México, sino el del
contexto de habla hispana.

Muchas gracias

Imágenes:
Presentación en la FIL Minería y Portada del libro.

26 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018


pedro herrero
inmaculada barranco

RAÍCES
PALIMPSESTO

Sylvia MOLINA
MURO
España
2018

Carlos vino anoche. Tan sólo llegar para decir que estamos.
Que seguimos peleando por nosotros. Que no
decaeremos. La charla la dejamos delante de un vino para
otro día. Es tarde y hay que aprovechar la noche. Las
caricias.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 27


Me levanto con energía. Lo noto. Carlos se va de nuevo un
par de días. Voy resolviendo antes de pensarlo. Lavavajillas.
Lavadora. Y ahora esto. Por fin adquiere forma. Estaba aquí
dentro.

Volteo la raíz quemada por el incendio. Entierro el origen.


El robo. El quiebro.

El bote ya no cierra. Deja salir. Y lo veo.

—Parece un cuadro tuyo. Esto es para ti -pienso.

Cojo un tisú y limpio con cariño el cristal. Que coja brillo.


Que no enturbie lo que hay dentro. Le hago una foto y
envío al grupo: “De mi serie Paisajes en conserv<a>cción.
Homenaje a Reme Muro”.

Lola contesta inmediatamente. Hoy si está ahí:

—Joerrrrr qué preciosidad. Me encanta. ¿Es para mí? –


escribe acompañada de un emoticono de guiño.

—Es para mamá -contesto sin dudar.

No puedo seguir leyendo los mensajes. Pita la alarma. Me


lavo las lágrimas y al Yoga.

Al llegar me encuentro bien. Parece que el dolor de


espalda ha remitido algo. Algunos ejercicios no puedo
hacerlos y me tumbo.

Entonces te oigo:

—Me encanta. Gracias -me dices, mamá.

28 en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3. mar/abr. 2018


—Siempre con elogios. No me fío -te digo.

—No, mira con lo crítico que era tu padre y a él también le


ha gustado -me dices.

Veo a papá. Con esa mueca entre guasa y asombro.


Asintiendo con la cabeza. Entonces te creo.

«Muestras la raíz como árbol. Lo oculto como copa,


presente, intacto» creo escuchar. No sé bien quien lo dice.
Entonces se coloca a la misma altura tuya, mamá. Dando
un paso adelante. Los dos juntos y le digo:

—Se esconde su tronco. Los que siempre pintaba no están.


Nada más que en metáfora. Muestro sin embargo la copa
que nunca mostraba. La que estaba en ella. Desnuda y
altiva. Ella era lo que no pintaba. El resto estaba allí. Eso le
he dicho a Lola.

—No te entiendo, igual que Lola –dice papá sonriendo-


pero al verlo es tu madre. Lo veo.

Cambiamos de postura y regreso. Estoy que no quepo en


mí. Le ha gustado también a papá. Vaya. Esto sí que no me
lo esperaba.

Al llegar el WhatsApp está petado a comentarios al


proyecto. Doy las gracias. Y ahí esta uno de “Marga amiga
mamá”. Anda. Yo quería enviárselo y creía que no lo había
hecho.

—Hola, ¿has escrito algo más?, ¡me encanta la foto de tu


madre, no la borres! -veo en el mensaje de Marga.

—Curioso que me escribas. Hoy he acabado una pieza –le

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 29


respondo y reenvío foto.

Marga no es como mamá, en un par de días contestará. Le


adjunto la última versión de palimpsesto. Escribo y me doy
cuenta de la matrioska en la que estoy inmersa.

Vuelvo a trabajar. Hay tres piezas ya del incendio. “Paisajes


en conserv<a>cción” está viendo poco a poco la luz desde
las tinieblas, desde las cenizas. El horror y la desazón a la
impunidad de las políticas. Al abandono a la tierra. Al
origen. A lo verdadero.

Voy a etiquetar y ver las pruebas. Ale. A currar.

Imagen:
“Raíces Palimpsesto”, de Sylvia Molina Muro.

30 en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3. mar/abr. 2018


SETENTA Y
CINCO

Francisco Javier
INSA GARCÍA
España

Nació el 1 de enero de 2017, lo que significaba que moriría


el 1 de enero de 2092, es decir, setenta y cinco años
después de su primer aliento exhalaría el último. Así
quedaría reflejado en el chip implantado en su brazo para
que no lo olvidara nunca, ni él ni aquellos con los que
coexistiera durante su existencia. Chip que se activaba con
un sensor de proximidad de otra persona, haciendo este
número visible en su frente, como un tatuaje. Para unos
era una macabra carta de presentación: “Hola, me quedan
7602 días de vida y cada minuto que paso contigo se
acorta”. Para otros una oportunidad de exprimir cada
segundo. Todos vivían setenta y cinco años salvo que la
enfermedad o un accidente mortal acortarán este breve o
extenso lapso de tiempo. De este modo había sido desde
siempre y así seguiría siendo mientras que nuestra
impronta genética no evolucionara hacia una longevidad
mayor. Una obsolescencia programada. No había dramas.
Disfrutabas de 27.375 días y punto. No había más. Desde

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 31


el colegio ya se aleccionaba sobre lo natural de la muerte y
su acontecimiento tras un ciclo de setenta y cinco años.
Los niños eran instruidos en habilidades para la gestión
efectiva del tiempo vital de forma que pudieran tener una
vida plena. Una vida en la que hicieran lo que les
permitiera ser seres plenos. Aquellos que dudaran
consumirían vida. La duda es algo inherente al ser humano.
La duda paraliza, colapsa el sistema y es necesario
erradicarla. Aquellos que vacilaban sobre sus inquietudes
vitales seguían un programa especial denominado:
desdudación. Un programa con una tasa de éxito del 85%.
El resto representaba a los indecisos genéticos. Aquellos
que cuestionarían cada paso en su senda vital alejándolos
del aquí y el ahora de sus vidas.

Uno de esos era yo. Mi brújula interior carecía de aguja y


de norte. Estaba ciega. Siempre seguí mis impulsos
creyendo que me llevarían hacia lo que fuera que quería
conseguir. Siempre equivocado. Siempre en la dirección
contraria. Siempre el signo menos de la ecuación. Siempre
yo. Y aquí estaba con un recién nacido en los brazos, el día
de año nuevo, implantándole el maldito chip.

−¿Ha terminado ya, doctor? –preguntó la enfermera.

−Deme un momento para activar el chip. –respondí.

Pasé el escáner para su primera lectura y el chip se activó.


En la frente del bebé apareció la cifra, 27.375. Eran las
23.45 de la noche lo que significaba que en 15 minutos,
cuando el reloj marcara la media noche, el neonato habría
consumido su primer día. Un día completo por tan sólo 15
minutos. Era injusto. Un error a mi juicio. Pero así se había
decidido para que todos muriéramos a la misma hora, sin
alborotos. Las doce era la hora de la transición.

32 en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3. mar/abr. 2018


Salí del paritorio y me dirigí a la taquilla. En mi deambular
taciturno por los pasillos del hospital más cifras salían a mi
encuentro: Mary 15657 días restantes, Peter 4567 días,
David 8454… Pasé por la puerta que daba a la sala de los
derrotados. Aquellos que voluntariamente querían
desactivarse antes de los setenta y cinco años. Los que por
diversos motivos no deseaban seguir existiendo y querían
marcharse de forma ordenada e indolora. Había quien no
superaba la pena por la muerte de un ser querido. Los que
sufrían una enfermedad degenerativa incurable. Los seres
para los que la muerte no era un problema sino la
solución. Rellenabas una solicitud, si era aprobada tenías
derecho a tu particular inyección letal. No había dolor, solo
liberación.

Llegué a casa y me serví un bourbon repantingado en el


sofá. Por un momento recordé al bebé que había
alumbrado. No lo envidiaba en absoluto. Tenía un gran
camino por delante lleno de oportunidades pero también
de batallas, porque ¿qué era la vida sino una lucha
constante, una batalla continua? No una grande y
devastadora, sino pequeñas ofensivas, nimias conquistas
que permiten seguir avanzando hacia una nueva trinchera.
Miré la foto de Sara con nostalgia. Siempre riendo. Feliz
incluso cuando la enfermedad se la llevó. Sus últimas
palabras fueron “te quiero”, antes de pulsar el botón que la
haría trascender en la sala de los derrotados. Por un
momento estuve tentado de acompañarla aunque me
disuadió con un “te estaré esperando”. Si alguna vez había
sido feliz, fue con ella. Enjugué la lágrima que caía por mi
mejilla y apuré el wiski. No hay tiempo para la pena. Hoy
no. Me quedé dormido hasta bien entrada la tarde. Miré el
reloj. Mierda, no puedo llegar tarde. Tomé una ducha y
me enfundé mi mejor traje. No hay nada como una ducha
fría para alentar al espíritu. Cogí la foto de Sara y la metí

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 33


en el macuto. Salí de nuevo hacia el hospital.

No entré por la puerta de servicio, hoy no, me dirigí a la


puerta principal. La recepcionista (9354 días) me miró. Fue
suficiente: “Por favor, tome asiento. En seguida vienen a
por usted.” Pasados dos minutos, un celador (10546 días)
llegó con mi montura en forma de silla de ruedas. Al ver
que me ponía de pie comprendió que no era necesaria.
Tras un interminable peregrinar de pasillos y cifras,
llegamos a nuestro destino. Un joven doctor (13453 días)
escaneó mi chip para comprobar que tenía el derecho de
estar allí. El lector soltó un discreto pitido y se puso en
verde. Todo correcto. Me sonrió y me invitó a entrar. La
enfermera (7835 días) me esperaba en la sala. Éramos unos
cincuenta. La sala de los unos estaba repleta. Todos me
saludaban al pasar. Juan (un día), Alicia (un día), Pedro (un
día). Mi cama estaba preparada. El reloj marcaba las 23.45.
15 minutos para la transición. Me tumbé en la cama y
abracé la foto. Estaba preparado.

Imagen:
www.google.com

34 en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3. mar/abr. 2018


cony pedraza

MINI-ESPECIAL
DE
JOSÉ ANTONIO
ÁLVAREZ DI
STASIO

Cony
PEDRAZA
México A partir de este número, José Antonio Álvarez Di Stasio
2018 (Montevideo, Uruguay, 1946) se integra al equipo de editores de
En sentido figurado, a cargo de la sección “Desde el taller”, donde
nos permitirá conocer algunos de los textos que se producen en
los múltiples talleres literarios existentes en la ciudad de
Montevideo.

Vaya este pequeño mini-homenaje a manera de bienvenida.

Imagen:
Fotografía de José Antonio Álvarez Di Stasio (archivo personal)

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 35


QUÉ SUERTE
TIENES

José Antonio
ÁLVAREZ DI
STASIO
Uruguay
Había pasado una noche terrible.

Acosado por todo tipo de pesadillas, que aun despierto


me atropellaba.
En medio de tanto centelleo de imágenes en mi cabeza,
estallaron como pequeñas chipas de intensas luces que
atormentaban todo mi ser.

Nunca me había pasado algo así. Ni conocía a alguien que


hubiera experimentado algo semejante.

Con las pocas fuerzas que me quedaban, me apronté para


salir a cumplir con mis obligaciones diarias, que hoy me
parecerían una carga muy pesada.

Estaba bajando las escaleras cuando me pareció oír la voz


conocida de una amiga que hacía años no veía, al llegar a
la acera de mi edificio, me tropecé con su hermana.
Sorprendido ni atiné a detenerme y saludarla; ¡Qué extraña
coincidencia!

36 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


No tenía certeza el bus que debería tomar hoy, debido a
unos arreglos en las inmediaciones, varios habían
modificado sus recorridos. Pero un centelleo de luces trajo
a mi mente cual debía tomar.

La imagen que se me presentó fue totalmente clara. Al


llegar a la parada estaba estacionado como esperándome,
(el bus de la imagen). Al acercarme para ascender apareció
en mi mente la presencia de un hombre que me resulto
muy desagradable. Al buscar un asiento en el colectivo,
coincidí con un señor que se mostraba muy incómodo con
mi presencia e intentaba hacérmelo saber.

Entonces me pregunté: “¿Qué me está pasando, que mi


mente se anticipa a lo que me va a suceder?”.

Camino a mí trabajo llegaron a mi mente unas imágenes


muy alarmantes.

Una gran tensión se apoderó de mí e intuí que algo


terrible había ocurrido.

Al llegar al Museo, mi lugar de trabajo, estaba todo el


mundo consternado.

Los primeros en llegar habían constatado la falta de un


Figari, valuado en miles de dólares y, seriamente dañado,
un Torres García y varios bocetos de Blanes.

Veía ya anticipadamente los titulares en la presa del día


siguiente, dando la noticia, y haciendo duros comentarios
sobre la poca seguridad en el Museo.

Me sobresaltó el timbrazo del teléfono, la recepcionista me


anunciaba que un periodista quería entrevistarme en

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 37


relación al acontecimiento.

¿Cómo diablos ya se habían enterado? ─ me preguntaba.


Era cosa de locos.

Estaba en una búsqueda infructuosa, de los documentos


de los seguros, cuando entró en mi despacho el Director,
alarmado porque la Aseguradora le había informado recién
que el seguro cubría solo el cincuenta por ciento del valor
del Figari, y no cubría los daños a lo demás.

Ante tantas malas noticias, necesitaba un poco de aire


fresco. Me paré y fui hasta la ventana, al asomarme como
en una pantalla apareció antes mis ojos la imagen de un
chico atropellado por un auto. Espantado me alejé de la
ventana, cuando oigo el ensordecedor sonido de frenada
en plena calle.

Solo atiné a mirar cuando vi un coche en el medio de la


calzada y junto al coche un niño herido. Todo lo que pude
hacer fue ponerme a llorar sin consuelo, lo que me estaba
pasando, rebasaba todo lo comprensible, y humanamente
aceptado.

Sentía una pesada carga sobre mis espaldas. Quizás estaba


siendo parte de un experimento de una mente satánica,
que se había propuesto volverme loco.

Deseaba fervientemente que terminara la jornada de


trabajo, para tomarme unas copas con el grupo de amigos,
en el club de siempre, y olvidarme de mi angustiante
trance. No tuve más remedio que contarles lo que me
estaba pasando, ya que mi cara, prácticamente todo mi
cuerpo, me delataba.

38 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


Todos me escucharon con suma atención. Uno de ellos, el
más optimista, se interesó mucho, y luego de escucharme,
me dijo: “Qué suerte tienes”

Conmovido por su actitud, solo atiné a apoyar mi mano


fraterna sobre la suya, y le dije “Te la paso”. Sentí un gran
alivio en ese momento, y sin saber qué había pasado, miré
a mí amigo, al que hallé muy extraño.

Fue cuando vinieron a mi mente partes de las pesadillas de


la noche anterior.

En un momento preciso me había cruzado con un mago, al


que le envidié sus dones para adivinar los acontecimientos
futuros. Todo había sucedido cuando yo me acerqué a su
lado y le dije “Qué suerte tienes”.

Imagen:
Pedro Figari, “Candombe”.
www.museofigari.gub.uy/innovaportal/v/12412/20/mecweb/pedro-
figari:-candombe?contid=10752

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 39


EL GUARDIÁN
DEL FARO

José Antonio
ÁLVAREZ DI
STASIO
Uruguay

Hubieron varias noches de luna llena, que por reflejarse en


el océano, nadie dio cuenta que el faro estaba apagado.

Pero si anoche, al desatarse una fuerte tormenta que


atemorizaba a los más valientes.

Se hicieron varias conjeturas, llegar al faro cruzando los


médanos, o aproximarse por mar. Pero con la tormenta
azotando, de esa forma, era una aventura suicida.

Al día siguiente, mucho más calmo, se creó una comitiva


de vecinos para averiguar la causa misteriosa, del faro
apagado.

Se encontraron con un macabro espectáculo, el viejo


guardián colgando de una soga, con claros signos de

40 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


putrefacción.

Todos pensaron lo mismo, se suicidó. Tantos años viviendo


en esa inmensa soledad, rodeado día y noche solo de
viento y agua, que terminó enloqueciendo.

Nadie observó, que entre las rocas había los restos de una
embarcación, y la fuerza de las olas hubiera destrozado.

La pregunta que todos se hacían, donde buscar alguien


para hacerse cargo del faro.

Se corrió la noticia de la muerte del viejo guardián, que


escucharon lugareños y forasteros.

Un recién llegado al pueblo se ofreció para el puesto.


Como no había más candidatos, fue desde esa noche el
nuevo guardián.

Alguien muy perspicaz, notó que llevaba puesta la gorra


gris del viejo guardián, pero tenía sobradas razones para
callar.

Imagen:
José Cuneo, "Cerco de tunas".
http://acervo.mnav.gub.uy/obras.php?q=ni:1672

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 41


DESDE
ALGÚN
LUGAR DEL
PARAÍSO

José Antonio
ÁLVAREZ DI
STASIO
Uruguay
Amor mío, mí único amor:

Solo dios que es mi cómplice, sabe cuál grande es mi


amor, y lo que eres para mí. ¿Cómo hacer ahora para
llegar hasta ti? me pregunto.

¿Qué magia es necesario convocar para ser capaz de


transmitirte los sentimientos más guardados en lo
profundo de mi alma? ¿A qué sortilegio debo recurrir en
procura de ayuda para poder llegar a tu corazón para que
sepas cuanto te amo? ¿Cómo saber que aún me amas?

Cuántas veces me enamoré, y volví, a enamorarme, pero


temo no haber sido lo sumamente demostrativo para que
lo notaras.

Cuántas veces quise decirte que te amaba intensamente, y


no te lo dije con la intensidad que debería haberlo hecho.

42 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


Cuántas veces quise hacerte mimos y caricias, y en vez
simplemente te hice o mimos o caricias, no ambas cosas.

Cuántas veces olvidé que estabas a mi lado, cuando tú


estando a mi lado te esforzabas porque yo lo supiera.
Pedir perdón hoy no basta, se debe reparar la falta.

Solo me queda confiar que el amor demostrado sea un


grato recuerdo que colme de felicidad el corazón de mi
amada.

Entonces así aguardaré el feliz momento del encuentro,


para expresarte, una vez más mi confesión de enamorado.

Yo tu amor de siempre.

Imagen:
Juan Storm, “Un atardecer”.
http://mnav.gub.uy/cms.php?o=4000

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 43


judy garcía allende
juan pablo varela

LA MEMORIA,
EL YO Y LA
INSPIRACIÓN
A LA LUZ DE
LA MITOLOGÍA
GRIEGA

Carolina Fanny
GREKIN
GARFUNKEL
Valparaíso
Chile
2017

El ser humano que no cuenta con memoria pierde su


condición humana, en el más alto sentido. En todo orden
de cosas debe recurrir a ella, que es la expresión anímico-
terrenal del elemento constitutivo de la individualidad de
cada persona, su Yo. Quien no cuenta con su memoria deja
de ser un individuo perteneciente al reino humano, pues
pierde su potencial creador y su condición de miembro

44 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


distinguible -por sus diferencias- del resto de sus
congéneres, y, por ende, su capacidad de contrastarse y en
ese ejercicio, buscar su perfeccionamiento interior y
realizar su rol como agente activo de la evolución humana.

Quien dispone de una memoria personal, propia e


intransferible no es tan esperable en sus conductas como
ocurre con un animal, cuyos actos ejecutará y serán
comprendidos en el marco de las características propias de
la especie a la que pertenece. Un ser humano que ha
perdido la memoria se ha alejado de su condición humana
y se ha acercado a la parte animal que vive en él, sus
pulsiones y apetitos que no podrán ser morigerados por la
influencia de su yo propio.

Al nacer no recordamos las vidas pasadas; sólo contamos


con los recuerdos de la presente encarnación. El individuo
que ostenta una memoria personal biográfica limitada a la
existencia actual puede crear, puede ser un artista. Si su
arte será mayor o menor va a depender de su fuente de
inspiración. Si ésta es la propia biografía, reelaborada y
actualizada como manifestación artística y aplicada sobre
un soporte perceptible por los sentidos, entonces
estaremos frente al Arte menor, ya sean las artes plásticas
que captan nuestros ojos, la música, recibida gracias a
nuestros oídos, la literatura o el teatro, que comprometen
más de un sentido físico; todas ellas expresiones artísticas
que involucran, por supuesto, nuestra afectividad. Se trata
de arte que puede ser bello, impactante, complejo o no,
inteligente o ingenioso, divertido, dramático o trágico,
horripilante o armonioso pero siempre funcional –de algún
modo-, al contenido y significación de la cultura
imperante, con sus códigos aprendidos y grabados a fuego
en el subconsciente e inconsciente del artista y su público.
En un cierto sentido –suena quizás duro y hasta injusto

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 45


expresarlo así-, me atrevería a afirmar que es un arte
intrascendente porque no invita al espíritu humano a
trascender los límites de la experiencia sensible, lo
anecdótico, lo casuístico, los dogmas y los prejuicios de su
cultura, su raza, su etnia o su religión. Se trata de un arte
que sí puede despertar en el alma el goce o la repulsión,
que puede motivar o no al ejercicio intelectual de captar,
interpretar o proyectar su sentido o significación acorde
con las convenciones normalmente aceptadas, pero que,
en modo alguno, invita a abrirse a las preguntas candentes
que queman el alma e incitan a la búsqueda de la Verdad
o el Bien eternos.

Si la fuente inspirativa resulta ser la memoria cósmica,


estaremos ante una muestra de Arte mayor. ¿Y cuál es esta
memoria cósmica y cómo es que una persona la alcanza y
obtiene, por su influjo la inspiración? Es la que se comparte
con los humanos gracias a la generosidad de las Musas o
el actuar de Morfeo, el dios de los sueños, cuando
alcanzamos un estadio de conciencia distinto al de vigilia.
Puede ser durante el dormir, en la etapa de ensueño,
cuando nos visita Morfeo y se nos presenta con formas
humanas diversas, o bien cuando meditamos y alcanzamos
aquellos otros niveles de conciencia en los que se logra
percibir las Musas que, por gracia, nos ofrecerán su soplo
inspirativo. Musas éstas que son las hijas de Mnemósine, a
su vez hija de Urano (el Cielo) y Gea (la Tierra) y quien es la
diosa de la memoria, la personificación de la memoria, de
la victoria del espíritu sobre la materia y de la instauración
de la inteligencia en un mundo brutal. En la Teogonía de
Hesíodo leemos que los reyes y los poetas recibían el
poder de hablar con autoridad debido a su cercanía a
Mnemósine y su especial relación con las Musas, sus hijas.
El poder para dirigir los destinos de un pueblo o para
realizar arte mayor le es otorgado al ser humano por los

46 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


espíritus superiores, aquellos que se sitúan más allá del
tiempo espacial y la historia particular del hombre y de las
naciones, pero que los contienen.

Por lo expresado en los párrafos anteriores es que nos


hemos permitido relevar este concepto de un arte mayor
que trasciende lo perecedero de nuestra biografía terrenal
inmediata y nos permite recoger de los mundos superiores
las imágenes, los sonidos o el lenguaje que dibujan lo
eterno, de lo cual abreva el yo de cada ser humano en su
camino evolutivo. En otras palabras, entendemos que se
nos concede en gracia la revelación –sólo si nos hacemos
merecedores de ello-, es decir, que recibimos atisbos de la
Verdad Eterna que no nos es posible percibir por medio de
nuestros sentidos ordinarios y en nuestro estado normal
de conciencia de vigilia.

Imagen:
www.google.com

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 47


LA POESÍA
COMO
EJERCICIO
FILOSÓFICO

Ricardo
Andrés
CHAVARRIAGA
TRÓCHEZ
Bucaramanga
Colombia
2017 Este escrito se plantea la manera cómo la poesía o la
literatura se convierte en un ejercicio del pensar, aunque
no del pensar en cuanto a raciocinio inmediato sino como
un autodescubrimiento, tanto del escritor que plantea la
obra literaria como del lector que se identifica con la
misma, siendo el último aquel que suele dejarse llevar por
la cadencia rítmica de lo poético y por el goce literario de
las metáforas, tropos y demás figuras simbólicas.

En consecuencia, éste escrito va a tratar del problema de la


poesía como ejercicio filosófico, entendiendo la poesía
como una práctica que se emparenta con el conocimiento
interior y la interpretación de la realidad circundante, mas
también como un ejercicio de superación y transformación
de los sentimientos de dependencia por medio del uso de
la catarsis.

48 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


En primer lugar para tratar el primer ítem se debe aclarar
que la poesía tiende al uso de los elementos que nos dan
las metáforas, los tropos y demás figuras retóricas, no para
encubrir un deseo o una situación, sino para elaborar un
ejercicio que deje ver los símbolos profundos que la
escritura literal no permite.

De hecho las figuras retóricas pretenden puntualizar de


mejor manera los temas, las intenciones y los sentimientos
del poeta, y en no pocas ocasiones ayudan al espectador o
al lector a comprender igualmente la realidad planteada
alrededor del escrito; en efecto Aristóteles habla de la
poesía como de una mímesis que intenta imitar caracteres
y situaciones con base en un juego de probabilidades
artísticas, acudiendo a su vez a la credibilidad del relato; la
metáfora en éste caso deja que las acciones que se narran
no sean triviales y el lenguaje sea purificado de tal manera
que al usar en una imagen un símbolo distinto al que
normalmente se usa, el escritor lleve al lector a descubrir
realidades que en el lenguaje llano parecen triviales
(Aristóteles: 1457 b). No por nada Gadamer cuando analiza
el estilo poético no ve más que un recuerdo de la verdad,
siendo la poesía y la sabiduría la misma cosa.

En éste punto me permito dar un ejemplo de cómo el uso


de la metáfora en lugar de ayudar a encubrir busca el
descubrimiento más profundo del fenómeno: Así
Heidegger al interpretar la poesía de Hölderling y sus
imágenes, intuye en el uso del lenguaje un nombramiento
del ser, del cosmos, de la humanidad y de todo lo
existente en cuanto es algo para alguien, por eso compara
al viajero con el poeta, porque son quienes más nombran
las cosas y quienes en el nombrar llenan de significado lo
nombrado. Para Heidegger los poetas y los viajeros
descubren el mundo, pero ese descubrir no es mera

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 49


interpretación sino también fundación, porque cada cosa,
sentimiento, intención o tema implican una construcción
del mundo, así donde hay lenguaje hay realidad y el
lenguaje termina siendo uno con el ser (Heidegger: p.p. 49
– 51). No obstante, también Heidegger al interpretar a
Hölderling ve en la naturaleza la materia prima del poeta y
a la vez del viajante, pues la naturaleza le permite a su vez
al trovador y al viajero, rodar los caminos de lo fundado, es
la materia prima para la creación de los mundos y las
realidades, porque de su espacio abierto sólo puede
emerger lo real, y lo real depende de que la naturaleza se
abra a los poetas y a los viajantes (Ib. p. 66).

Como se puede ver, de la interpretación de una metáfora


Heidegger ha sido capaz de vislumbrar la importancia del
entorno natural para con la esencia del humano, porque a
su vez el filósofo alemán hace una crítica muy certera a la
sociedad moderna, la cual desprecia a la naturaleza y la
considera como un ente llamado a ser dominado y
utilizado por los humanos en su afán de poder y lucro. De
ahí que Heidegger considere que sólo mediante el actuar
poético, o mejor el actuar del caminante, se permita al ser
humano responder (ser responsable para con) “lo
sagrado”, es decir lo que permite el existir en el mundo;
incluso Hölderling por boca de Heidegger intuye que la
naturaleza es primero y más sagrada que los dioses, pues
es ella la que entrega lo divino a todos, lo que conlleva a
que sea más importante que el poder establecido y
humanizado, porque sin ella (la naturaleza) no existe dicho
poder (político, económico, moral, etc.), el poder por tanto
debe rendirle respeto a “lo sagrado” porque lo “sagrado”
preexiste al dominus.

Por otra parte, un nuevo ejemplo del uso de la realidad


metafórica como entidad reveladora se encuentra en la

50 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


obra del Filósofo colombiano Fernando González Ochoa, El
Maestro de Escuela, donde incluso la definición de
metáfora de Aristóteles queda corta, ya que el escritor
colombiano no se limita a intercambiar un significado por
otro en el uso de las palabras, no se restringe a intercalar
imágenes (Aristóteles: 1457 b), sino que ofrece una
interposición de cuerpos y personalidades que en realidad
pertenecen al mismo sujeto, el relato que Fernando
González hace es la gran metáfora de un hombre que vive
en dos cuerpos, donde uno de ellos no existe en la
realidad, es decir Fernando González logra hacer una
metáfora de sí mismo y de su existencia.

En dicha obra Fernando González cuenta la vida y obra de


un maestro de escuela de nombre Manjarrez, el cual quiere
forjar una reputación de gran hombre y genio
incomprendido, una persona que desprecia en su vida
todo lo que no sea ego y conocimiento; dicho maestro de
escuela se tiene a sí mismo una especie de genio nacido
en un lugar dónde – considera él - se le menosprecia, pero
en el transcurrir de la vida de Manjarrez, el desengaño de
no ser realmente aquel hombre de gran valía pero
incomprendido lo lleva lentamente a la muerte; momento
donde el lector descubre por qué Fernando González
sentía que el cadáver de Manjarrez era realmente el suyo, y
es que Manjarrez nunca existió, era Fernando González
quien se veía en el personaje ficticio de Manjarrez, una
persona altiva y soberbia que nunca pudo ser ese gran
pensador y filósofo que el mismo esperaba, puesto que el
ego le impedía verse mejor por dentro.

En consecuencia Fernando González permite ver el


momento en que muere y nace nuevamente cuando firma
como Ex – Fernando González, e indica de manera muy
precisa que la filosofía y la poesía no exigen solamente una

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 51


depuración de estilo para escribir y un estudio dedicado,
sino también un cambio profundo en la personalidad, que
implica eliminar el ego, el dogmatismo y la actitud tirana
hacia las otras personas, a tal punto que incluso la filosofía
puede exigir morir y renacer de nuevo, como el ave Fénix
que después de quemarse surge nuevamente de su ceniza
o como Narciso que superando su propia imagen se
convierte en flor.

En segundo lugar, la poesía como ejercicio filosófico


pretende limpiar las emociones a partir del ejercicio de la
catarsis, la cual equivale a los efectos que se producen
mediante la palabra, sea de tristeza, felicidad, dolor, risa,
efectos que permiten descargar a través de la obra artística
los sentimientos que hacen daño al espectador, pero que
en su momento también dañaban al creador (Aristóteles
1456b).

De ahí que el gusto estético se expresa independiente del


deseo, aunque ese deseo tenga a su vez participación
inmediata en el construir de la poesía como belleza, pues
al separarse lo bello de la fuerza del deseo, la materia
sobre lo bello tiende a objetivarse, y a crear entre el lector
y el artista una simbiosis de sentimientos canalizados y
depurados por la catarsis.

En muchos sentidos la nueva canción latinoamericana que


surge como movimiento a partir de los años sesenta
conserva la pretensión purificadora, por ejemplo la canción
Ojala de Silvio Rodríguez (al que también se le puede decir
poema lírico musicalizado) narra las remembranzas tristes
de un amor muy importante que por gracia de las
circunstancias se ha acabado, Silvio Rodríguez expresa su
dolor que nace a causa de la separación del sujeto
deseante frente a su amada deseada y lo expresa en

52 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


términos poéticos. Así cuando el Trovador cubano expresa
que desea no volver a ver a la amada (Ojalá pase algo que
te borre de pronto: una luz cegadora, un disparo de nieve),
no expresa un deseo de no verla -realmente ansía verla
pues sabría que eso calmaría su dolor- sino que encarna el
anhelo de que su remembranza ya no le haga daño;
objetivamente representa a quien está inmerso en las
aguas oscuras de la pasión perdida, pero a su vez expresa
belleza para las personas que se identifican con la canción,
independientemente de si el desamor y la pasión robada
es o no una realidad inmediata. Dicha canción, o mejor
dicho poema lírico musicalizado, permite hacer empleo de
la belleza para superar la dependencia emocional que sale
a la luz por la ruptura de una relación amorosa, además es
exquisita a nivel universal, cumple con los objetivos de un
poema lírico llevado a canción que son: Música elaborada
y atractiva y una lírica refinada pero perfectamente
comprensible.

Ojala en ese sentido busca redimir el dolor a partir de la


experiencia de la creación artística, rompe con la necesidad
inmediata de recuperar un amor perdido y ayuda a
solucionar la dependencia del amante abandonado,
invitando a reflexionar sobre la conveniencia de seguir
deseando: “ojala que el deseo se valla tras de ti, a tu viejo
gobierno de difuntos y flores”. El interés dispuesto se
orienta a eliminar la dependencia y a permitir vivir sin ella.

En conclusión no se puede dejar a un lado que la tarea del


arte poético o sea la literatura implica goce, pues el arte
debe representar de manera bella y eficiente todos los
aspectos del mundo que se funda, pero como trabajo
filosófico la poesía permite descubrir y analizar de mejor
manera las realidades que nos circundan exterior e
interiormente, y además mejorar varios aspectos del

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 53


mundo íntimo, sea por medio de la catarsis o por medio
de la indagación.

Bibliografía
1. Aristóteles. (2004). Poética. Traductor Angel Cappelletti. Barcelona.
España. Monte Ávila Editores.
2. Gadamer, Hans Georg. (2000). Estética y hermenéutica. Traductor
Ángel Gabilondo. Madrid España. Tecnos Editores.
3. Heidegger, Martin (2005) Aclaraciones a la Poesía de Hölderling.
Traductores: Helena Cortés y Arturo Leyte. Madrid. España.
4. Gonzales Ochoa, Fernando (1995). El Maestro de Escuela. Medellín.
Colombia. Universidad de Antioquia.

Imagen:
Fotografía de Fernando González Ochoa.
www.google.com

54 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


emilia oliva
ángel gonzález g.

INTRODUCCIÓN Es cierto. La encrucijada de los días nos va depositando,


levemente, en la cuneta del camino, atornillados y ya sin
posibilidad de retorno. Los días se agitan, verdean, flore-
cen, se agostan y finalmente caen maduros, dejándonos
consternados. De repente quisieras pensar que ha mere-
cido la pena; que el tránsito te ha hecho feliz y todo ha
sido como debiera ser. Quieres creer en ello y pleiteas con
las ruinas de tus ciudades muertas. Quieres creer en ello,
pero por poco no te asfixiaste ayer cuando te diste cuenta
de que estabas enterrado en el barro de unos versos llenos
de acíbar y desengaño. Desde que Platón nos expulsó del
mundo recorremos nuestra ceguera en busca de asilo
íntimo. Y en estos momentos trágicos del hombre por el
hombre, nos preguntamos, oh dioses de la poesía, si
alguna vez podremos escribir bellos poemas con la verdad
necesaria. Y ya por pedir, que esa verdad no nos aplaste y
nos consuele.

Ángel González González


Editor

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 55


BENIGNOS…

José Antonio
CÁCERES
España

BENIGNOS nos seáis, oh dioses,


en la hora de la soledad,
cuando el alma se rompe
y todo es un desierto mudo.

Os ofrezco mis sueños infantiles,


las manos que sintieron palpitar
el cálido plumón de los polluelos.

Cuando animales imprevistos


aparecían en las veredas, la serpiente
con sus míticos horrores, el águila
oteando en el vértigo del vendaval,

56 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


el leve pajarillo y la mariposa leve.
Y el agua discurriendo su eterna conseja.

Por rastrojos de fuego se cernía el milano


sobre los viejos alcornoques
y en libertad me unía
a sus vuelos devoradores.
En la noche, el escalofrío de la lechuza,
cuando el invierno se escabulle entre los troncos
y la hierba se hace alta de anhelos y de brisas.

Ahora, mientras la cúpula azul sobre olivos


y encinas detiene el aire eclipsado,
el ave impaciente me expulsa
de su terreno pues la noche llega
y quiere dormir sin sobresaltos.

Poemas de madurez. Libro 13. Elegías y envíos (1995-1996).

ILUSTRACIÓN:
José Antonio Cáceres

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 57


OCTUBRE

Jonathan
Gerardo
CASTILLO
ANTÚNEZ
Ciudad de
México
2017

A veces

un pétalo de flor resbala
onduladamente

al abismo de recuerdos.

Al llegar al final palidece



por un momento

y cae sobre una sustancia oscura.

La atraviesa,

renace en un color vivo,

primero azul, luego rojo

como lo árboles sangrantes de otoño.

Imagen:
Cortesía de Ángel GONZÁLEZ. España

58 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


LLORABAN
TUS OJOS EN
MI CONCIEN-
CIA

Josep Esteve
RICO I
SOGORB He podido contemplar con asombro, al fin,
España tus expresivos ojos de muchacho,
dándome cuenta de que tu mirada
me hablaba a gritos de los éxodos del alma
y de las hazañas de un héroe valeroso.

Y te pedí respuesta atisbándote


en la solitaria llanura del asolado sufrimiento.

Porque recorrías con tus pies doloridos de tanto andar,


los desérticos arenales del caluroso silencio;
aquellas dunas movedizas tan airadas por el viento de la guerra,
las que fueron en el pasado, campos de carnes sangrientas
descuartizadas por las garras de los buitres
y basureros de olvidados restos metálicos esparcidos y oxidados
junto a los cadáveres de los ejércitos vencidos por la Muerte.

lustración:
Cortesía de Ángel GONZÁLEZ. España.

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POR QUÉ NO
HE IDO A LA
RE-PRESENTA-
CIÓN DE TU
LIBRO

Ángel
GONZÁLEZ
GONZÁLEZ
España

A veces, Andy, encenderse está bien.


Siempre habrá una peluca, unas gafas,
cualquier cachivache y, sobre todo,
palabras
que nos lo pongan fácil.

A veces, Andy, pero no lo asumas,


la fiesta que te montas
con toda la grey boscosa
de gente guay
que te rodea
se convierte en una bacanal ruidosa;
un solo motivo para ni estar.

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A veces, Andy, pero nunca a solas,
me dices que has retuiteado
todas tus epifanías
por la entrepierna de la galaxia.

Y a veces, Andy, no tengo más que ganas de decirte


que la eternidad es un duro trabajo,
y que no asirse demasiado a las cosas
o a las personas
es la única forma de esquivar
el seguro fracaso y la más que posible frustración
de otra de tus evidentes lecciones de arte.

Ilustración:
Ángel GONZÁLEZ GONZÁLEZ.

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LOS
AFORTUNA-
DOS

Claudio Felipe
MARTÍNEZ
Buenos Aires
Argentina
2017

En ningún lugar se está tan opuesto y


expuesto como en un cementerio.
Llevamos bolsillos de sangre
guardando heridas y huesos.
Aún no sabemos si propias o ajenas.
Andamos, aplastando las pérdidas contra el piso.
Apelmazando sus ventanas.
Y ellos, país al ras del suelo.
Nación afortunada.
Un muerto siempre es
una puerta mal cerrada.

Ilustración:
Cortesía de Ángel GONZÁLEZ. España.

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Academia Literaria de
la Ciudad de México
josé antonio durand
TRES
POEMAS

Arturo
HERNÁNDEZ
GONZÁLEZ
EMMA
México
“Siempre hay detrás de la muerte de alguien
como una estupefacción que se desprende,
tan difícil es comprender esta llegada
Inesperada de la nada y resignarse a creerlo”

–Gustave Flaubert–

Desde más allá de los cristales,


se escucha un crepitar de nadas.
La honda y muda noche, vacía
en mí todas sus cóleras amargas.
El camino que ha seguido el pan
para encontrar mi humilde boca
es un secreto suceder de heridas

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 63


y todo me sabe a sangre y a vida.
Tropiezo como con clavos rotos;
como con uñas al filo de la noche,
cada escalón es mi fría voluntad
hecha de duro mineral inexorable.
Velo por los colmillos insaciados
que se derrumban melancólicos
como la inútil salvación del día
bajo el grave auspicio de milenio.
Abrí todas las puertas, los pasajes,
revelé el misterio de mis catacumbas.
Y al alba cobijé con estos parpados
el silencio infame que ahí moría…

Necesité de ella y más tarde del mundo


un paso atrás y me mordí la cola…
Un frasco contenía un poco de polvo,
el leve arsénico de Emma contenía…

Y para cuando quise dormir con ello


Sólo había una cuchara derretida
en medio de naturalezas muertas…

PRÓLOGO

“El llanto enciende los establos”

–Antonio Gamoneda–

A lo lejos canta un ser ajeno


cuya voz puede –para mí–, ser cualquier cosa:
Su llanto inflama de cenizas póstumas la noche,
y reciente de cicatrices el silencio de mi boca:

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Nunca se es más fuerte que cuando se lee –dice–,
Jamás se es más frágil que cuando se escribe…

Otros paisajes rabioso extraña,


su corazón es líquido y el tiempo lo desgarra.
La memoria con su canto desde lo lejos me arrebata
y lo trueca por una triste historia que no me importa
ya nada:

Nunca se es más fuerte que cuando se lee –dice–,


jamás se es más frágil que cuando se vive.

LAS NIEVES DEL POETA

Aquieta su atlas poderoso


contra el pedernal de una espiritual huida
y admira la huella de sus pasos
transformarse en pasto de la melancolía.

Reposa un momento:

Está cansado desde el alba abscóndita


y busca su morada entre la hierba
que fulge como el silabario lento
de una dilatada estrella.

Empuña su carbón luctuoso:

¡Escribo sobre el llanto de algún dios indefectible,


que olvidado entre las lluvias anodinas ve crecer
las aves rotas de la cruel y más honesta poesía!

Abandona su mirar en un astro que titila:

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¡Soy sólo un perro náufrago…
…aullándole a la vida!

Imagen:
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TRÍPTICO DEL
VERDE
OSCURO

José
GONZÁLEZ
GÁLVEZ
México

Es verde la tarde tinta


con su piso de grana
el atajo sabe a piña madura
guanábana recién abierta.

La calandria canta en cien lenguas


vigilada por los apompos,
los guanacastles,
los cuajilotes.

Todo se vuelve más verde


porque una noche
algún Dios soñó un sueño
entintado en verde armonía.

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II

Mis manos bailan sueltas


en medio de un follaje de eucaliptos
son verdes como la savia verde
de los ahuehuetes milenarios.

Mis manos callan mudas


como corteza rugosa craquelada
de secuoyas que miran sin mirar al cielo.

Como viejas plañideras


los sauces lloran inconsolables
mientras mis manos sostienen
el sufrimiento lento de tu mirada.

Las lágrimas son artificios de costura


hilos que hilvanan la piel hecha pedazos
cuando quieres hablar y no hablas.

III

Eres paloma en vuelo


pétalo incendiado
que no genera cenizas ni carbono.
Ceiba enraizada
en el cuerpo desnudo de la selva.

Anochece
el viento teje entre el follaje
una frazada de estrellas titilantes
germinan tus besos en mi piel.

68 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


Se desarrollan los helechos
brotan los palos mulatos
con sus cortezas descarapeladas
las orquídeas proliferan
abrazándose a los troncos que las guardan.

Huyen los guacamayos,


se esconden los loros agitando sus plumas,
alborotan los tucanes
con sus enormes picos de piedra.
La noche cierra sus alas de murciélago
y el ruido verde de la selva norte
se escucha lento hasta que se pierde.

Imagen:
www.google.com

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 69


LAS
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁ-
FICAS

Lilia
RAMÍREZ
México
Por las noches, ciertos ángulos de mi casa me parecen
harto extraños. Es como cuando a la Oficina de Tránsito de
nuestra propia ciudad se le ocurre cambiar el sentido de
avenidas que normalmente transitamos en auto. Nos
parece que los tejados proyectan durante el día una
sombra tan irreconocible y alucinante, como lo es también
cada poste del alumbrado cuando se enciende contra un
cielo que antes solo vimos de espaldas.

Así mi casa, qué digo mi casa, mi propia recámara, me


brinda sensaciones desconocidas cuando me siento, por
ejemplo, en el lado que mi marido la habita. La sombra del
clóset, cayendo sobre mí con toda la altura del cedro,
parece tan imponente como un ataúd egipcio que,
contradictoriamente, guardara las cosas que llevo a cada
nuevo viaje pero que permanecerán en su sitio durante el
último.

El hueco formado entre la espalda de la puerta y el


costado izquierdo del ataúd, deja visible desde este lado
de la habitación su vergonzosa intimidad de paraguas

70 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


viejos y bolsas de mano cuyos colores ya no hacen juego
con mi piel, mezclados con gafetes que evocan el tedio de
innumerables reuniones académicas.

A semejanza de una guacamaya, un vistoso plumero


electrostático amenaza constantemente al polvo que,
grano por grano, va llenando los muebles de una capa gris
silencio que mata el lindo brillo del tocador, de los burós,
de la cómoda llena de textos que en cierto momento me
ilusionaron y que ahora esperan su turno con las páginas
medio abiertas unos, otros, señalados con separadores que
me han obsequiado en las innumerables tiendas a las que
he asistido en busca de libros y sus claves maestras, cosa
que estoy segura de allegarme mediante las notas que
suelo tomar cada vez que escucho una conferencia o tomo
un curso de cómo escribir mejor.

Por cierto, he notado que los conferenciantes, a quienes


siempre escucho solícitamente —y hablo de todos, ya que
no soy de esas personas que se distraen mientras fingen
tomar una clase, o de aquellas otras quienes asisten a una
conferencia por compromiso— recomiendan fuentes
bibliográficas persistentemente diferentes. Es obvio, dirá el
lector, pues se tratará de materias distintas, de áreas del
conocimiento diversas. Esto puede ser verdad, pues siendo
como soy una mujer que tiene formación científica, que ha
tomado cursos de administración, de procesamiento de
alimentos, de fabricación del papel, de cómo tomar
mejores decisiones, de docencia, de ontología, de cómo
escribir mejor, asisto a conferencias de carácter
multidisciplinario. Pero no se debe a la diversidad de
tópicos el que cada expositor con quien interactúo en
silencio —yo sentada, por supuesto, muda entre la
concurrencia, a veces ni siquiera el conferenciante repara
en mí, pero no porque no le esté prestando atención, lo

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 71


cual podría él o ella adivinar en la viveza de mis ojos, sino
porque me gusta pasar desapercibida, callar cualquier
crítica que se me ocurra, reservarme, y consultar después
conmigo misma o con mis libros, algún tema que no
hubiera quedado claro durante la exposición— señale
como indispensable para comprender su plática un texto
diferente cada vez, ya sea de filosofía, de poesía, de la
ciencia matemática, de la ciencia química o de la teoría de
las decisiones. Se debe más bien, esto lo he pensado
mucho, a que cada persona se ha encariñado con un texto
determinado, quizá lo ha leído diez o cuarenta veces hasta
llegar a comprenderlo plenamente y alcanzar un punto en
el que cree conocer sobre el tema más que el propio autor.

Por eso lo cita, pero más que citarlo, lo interpreta y se


atribuye a sí mismo los conocimientos que aprendió del
escrito. Es entonces cuando el instructor, a falta de un libro
propio, pregunta: ¿Ya leyeron a Sutano? No, pues no
pueden pasar la vida sin leerlo, Es obligado hacerlo, es casi
la razón por la que están vivos, lean a Sutano.

Es así, gracias a las notas que tomo sobre las referencias


bibliográficas, como me he provisto de innumerables
ejemplares que colman mi recámara, se desparraman por
las mesillas de noche, por el piso, entre las repisas del
librero que, no dije antes, fue comprado con el ambicioso
fin de soportar las colecciones que llegan cada semana
después de visitar las librerías, acompañada mi tarjeta de
crédito de la libreta de notas que llevo a todas mis clases,
conferencias y talleres a los que asisto durante la semana.

Debo confesar que desde el lado al que mi esposo, de


puntillas para no pisar mis tesoros, entra por las noches, se
contempla una habitación más bien desordenada; no
quiero usar la palabra caótica, pero en una conferencia a la

72 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


que asistí apenas, el doctor que la dictó usó esa palabra —
que también anoté— y supe que la Teoría del Caos puede
representarse con una ecuación matemática, así que creo
que la palabra podría ir bien para describir este desorden
ordenado que es mi habitación, donde el plumaje de la
guacamaya hace su trabajo puntualmente cada sábado,
después de llegar de la librería, cuando es indispensable
lograr un poco de espacio para acomodar las nuevas
adquisiciones. Bien, pues he querido colocarme de este
lado de la cama porque a decir verdad, ya no hay sitio para
mí en el propio.

¿Ustedes han oído hablar de lo malo que es recomendar


remedios para recuperar la salud? Se llena el botiquín con
ungüentos, lociones, hierbas para infusión y otros
remedios caseros, y sabido es que no todo le está a uno,
que a veces llega a ser nociva alguna pócima. Hay quienes
afirman que los remedios aconsejados de persona a
persona, pueden llegar a causar la muerte.

Alguien que recomienda libros sin conocer a su


interlocutor, habla solo de los efectos que el libro ha
producido en él, pero no sabe las consecuencias que
tendrá en otras personas. En mi caso, por ejemplo, queda
claro que tantas notas sobre libros, de tantas eruditas
recomendaciones, me está conduciendo al caos.

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josé álvarez di stasio

EL ÁRBOL DE
LOS BÚHOS

Presentación

Soledad
ARBÓN*
Montevideo
Uruguay
2018

El árbol de los búhos, es un taller Literario que existe


porque sus participantes así lo quieren. Ellos han vencido
las dificultades que se les han presentado con firmeza y
decisión basada en el amor por las letras que los mueve y
los agrupa.

74 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


Es un grupo de “jóvenes” de más de 60 años y una “adulta”
de 24, que se han propuesto vivir todas las instancias que
les parezcan divertidas y desafiantes, incluida la literatura.
No tienen rigor por la lingüística ni respetan estilos ni
movimientos literarios, pero escriben con el corazón a
partir de lo que se les propone, logrando que la emoción
le gane a la ortografía, ante la cual no queda otra que
rendirnos y disfrutar sus trabajos.

Hablamos de un grupo de unos veinte integrantes que


vienen trabajando desde hace 4 años, ellos son: Agustina,
Alba, Coco, Delia, Euge, Gladys Ch., Gladys M., Isa, José,
Lucia, Mari A., Mary B., Mirian, Norma, Pio, Rosa, Rubén,
Sara, Sonia, Susana, Teresa y Washington.

Unidos por un hilo invisible que los mantiene juntos,


trabajando sobre textos de los grandes de la literatura,
creando sus propias obras a puro corazón, observación y
experiencia de vida, logrando relatos inolvidables −por lo
menos para mí−, como los que se publican y que ustedes
podrán disfrutar.

*Licenciada en Letras y Coordinadora del Taller, 2015-2017

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EL TRAJECITO
A CUADROS

Norma
ESPINO
Montevideo
Uruguay
2013

La tienda “El cabezón” abría sus puertas a las nueve. Quería


ser la primera.

Ahí estaba… reflejándose en la vidriera mi donaire. A pesar


del sobrio corte inglés, exhibiría mis insinuantes curvas. La
estrecha falda redondearía mis caderas, el prominente tajo
en la parte trasera sembraría lujurioso deseo. La chaqueta
entallada, con cierre abotonado sobre oscilante busto.

Tantos años pasaron, desde el momento en que un simple


monosílabo, marcará la parte más importante de mi vida…

La mano en alto, descosió la costura. La ira destrozó, a


jirones, cuadro por cuadro la tela.

Agazapada en un oscuro rincón deshilaché mojado ovillo


de hilo. En torrente desolado corría la ilusión, el amor y el
deseo.

76 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


Demoró en entrar por mi ventana el reflejo de colorido
prisma, que con su luz, me ayudó a tramar en el telar de
los sueños…, un nuevo albor.

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HAY UN
MUERTO EN
EL ROPERO

Rubén COCO
VIDAL
Montevideo
Uruguay Montevideo, 18 de agosto del 2013
2013

Señor Gerente de Fábrica de Muebles “La Esperanza”.


De mi mayor consideración:

El que suscribe, Inocencio Ramírez, se presenta a usted,


para exponer lo siguiente:

1.- Con fecha 13 de los corrientes, según boleta No. 1331


adquirí en su local céntrico un ropero de Caoba y Paraná,
de mt. 1,80 por 1,80 por 0,60.

2.-Dicho ropero debía ser entregado cinco días después,


ya que en mi casa quedaba sola mi esposa, pues yo que
soy agente viajero, recién volvería el día 18.

3.- Afortunadamente pude acelerar mi actividad y regresé


dos días antes de lo previsto. Cuando llegué la noche del
16, noté que el sueño de Rosa, mi querida esposa, se
notaba alterado. También pude ver que ubicado en la

78 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


esquina sur-oeste del dormitorio estaba instalado, en
forma muy prolija, el nuevo ropero, no por inesperado
menos bonito. Al abrir sus puertas, con horror constaté
que dentro había un cuerpo semi-desnudo, al parecer
muerto.

4.- La policía técnica, en su informe preliminar puso;


“masculino, blanco, aproximadamente de 30 años,
calzoncillo colorado, calzaba 47, con posible ataque
cardíaco, y agregaba un dato extraño, gran consumidor de
sildenafil masticable.

5.- Dejo expresa constancia que no deseo instalar ninguna


denuncia que pueda afectar el buen nombre de su
acreditada empresa.

6.- Solo sugiero que revean dentro de la plantilla de su


idóneo personal si no falta un obrero con tales
características, que pudiera haber quedado atrapado en
dicho mueble. Pienso y doy gracias al “Señor” que haya
sido yo y no mi amada esposa quién hallara el cadáver,
pues para ella hubiera sido un terrible golpe.

Quedando a sus gratas órdenes y con las disculpas del


caso, se remite ante usted.

Inocencio Ramírez

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ANGELITA

Delia
GARCÍA
Montevideo
Uruguay
2014
Empieza el día con la perrita llamándola, se levanta para
dejarla salir. Luego termina de vestirse, prepara el
desayuno mientras escucha la radio. Espera a su esposo
para hacerlo juntos.

Cuando va al dormitorio, le brillan los ojos ante las fotos.

Pasan por su mente como relámpagos en una noche


oscura; el ayer y el hoy. Martillea en su cerebro… ¡Otra vez
ese dolor!

Hace un recorrido por su vida con la ayuda de las fotos;


“sin arrepentirse”, “reconociendo tenacidad”, “firmeza en
sus decisiones”.

Menuda, inquietud, como un gorrión; prepara el almuerzo


para ella y su esposo, compartido con diálogos cotidianos.

Cuando lava la loza su esposo duerme la siesta. Los


dolores fuertes la obligan a detener la tarea. Se sienta

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mirando todo detenidamente.

Toma un cuaderno donde anota las proporciones para la


comida de la perrita. Alberto no lo sabe.

Deja los lentes sobre la mesa y se desprende el delantal,


coloca las zapatillas junto al aljibe, descorre la tapa y,
como Alfonsina, se va a dormir en un lecho profundo y
helado, sin retorno.

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POESÍA

Alba SENA
Montevideo
Uruguay
2014

Poesía, es familia reunida al calor de la estufa, es calor que


calienta las manos, enrojece las mejillas y enciende al alma.

Poesía son los recuerdos dulces y alegres, amargos y


tristes, porque también del dolor nace poesía, ese dolor
que se escapa en suspiros, queriendo olvidarse.

Es el invierno gris y frío, envuelto en la cobija mora.

Es una mañana hermosa, un colibrí bebiendo en una corola


roja.

Es el toc, toc monótono de la lluvia, la Santa Rita sin flor y


los grillos cebolleros.

Es música, encuentro de amigos, el fuerte abrazo, la mano


extendida, la sonrisa del niño, el cielo estrellado.

Poesía, es la vida con todos sus matices.

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En todo momento, lugar, gestos y cosas, hay poesía.

¡Porque la poesía está en el alma!

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CUANDO ME
SUBÍ A LA
MOTO

Miriam
ARÉVALO
Montevideo
Uruguay
2013

Querida prima:

Me alegré muchísimo al recibir tus felicitaciones por mi


cumple. Por un momento pensé que te flaquearía el ánimo
hasta para eso.

Te extraño prima. Te he guardado el secreto, a pesar de la


pena que me provocan los abuelos, que no comprenden
por qué has estado tan rara, que ya ni quieres venir a pasar
el verano con ellos, como lo hemos hecho desde que
tengo memoria.

Te cuento que a cambio de la fiesta que no tuve, conseguí


al fin mi tan ansiada moto, bueno, ciclo-motor, que para
moto me falta edad, dicen mis padres. Es roja, rojo cereza
como yo quería. Ahora, por las noches, me reúno con otros
chicos, damos vuelta alrededor de la plaza, haciendo altos

84 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


para tomar un helado o una coca y hacer amigos entre los
veraneantes y lugareños.

Y ¿a qué no sabes quién apareció anoche, a pie, recién


llegado al pueblo? Pues, él mismísimo que te imaginas,
hermoso como siempre, o más, con su andar de pantera
citadina, al acecho de una conquista. Gracias a mi bendita
metamorfosis invernal, el más bello entre los bellos, se fijó
en mí, ¿Puedes creer? De puro miedo a dejar escapar la
oportunidad, agilité el trámite con dos meneos de cadera y
una caída de ojos. Media hora más tarde, nos
encontramos, sin testigos, detrás de la iglesia, para salir a
rodar los dos solitos.

Para no desteñir su hombría, lo dejé conducir. Llegamos al


río, junto al puente del ferrocarril. Estacionamos al pie del
talud. Entonces lo desafié a cruzar a la otra orilla. Brillaba
una espléndida luna creciente y sabes que conozco ese
puente tramo a tramo. Sin esperar respuesta, abrí la
marcha. El pobre infeliz me seguía, titubeante,
manoteándome el culo cuando lograba alcanzarme, no
tanto por lascivia, creo, sino más bien buscando un
contacto para ahuyentar la cobardía. Es cierto que desde
esa altura, el rugido de la correntada, abriéndose y
cerrándose sobre las rocas profundas, arruga del escroto al
más valiente.

¿Recuerdas el trecho de barandilla rota justo en la mitad


del puente? Bueno, ahí me detuve, me desabotoné la blusa
y me volví hacia él, que venía unos cuatro durmientes más
atrás. Surtió el efecto de un imán. El idiota no podía creer
que la niñita estuviera resultando tan fácil, que esta vez no
tendría que ponerse furioso y revelar su bestialidad. Olvidó
precauciones, dio una enorme zancada tendiendo sus
zarpas hacía mi sostén, lo esquivé, tropezó con el riel.

en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018 85


Viendo cómo se caía aullé tu nombre, que se elevó por
sobre el monte, alto, mucho más alto que su grito de
espanto.

Cuando me subí a la moto, ya no quedaba ni el eco de los


aleteos nocturnos, el puente dormía, plácido, echado sobre
sus tripas tumultuosas. Entonces, imploré a Dios que te
regrese intacta, con tu pelo suelto y tu falda más corta,
partida de risa, alocada y sin miedos. Ahora es su turno.
Yo, ya he hecho mi parte.

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josé gutiérrez-llama

espacio diseñado para la exposición de libros


que no tiene fin comercial ni de lucro

1.- Púrpura de cristal 2.- Los días hábiles


Ana Isabel Alvea Sánchez Pedro Herrero
Torremozas Serial Ediciones

3.- De nuevas filias y otras fobias 4.- Intentos fallidos


José Antonio Durand José Gutiérrez-Llama
UNAM. Estudios Superiores Zaragoza Alharaca

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5.- Juan Ramón Jimenez y Zenobia Camprubi 6.- La barca fantasma
Antonio Campoamor González Gustavo Ponce Maldonado
Universidad Internacional de Andalucía Academia Literaria de la Ciudad de México

Editorial Tintanueva

7.- Nacimiento del amor 8.- Descrédito de la certeza


Manuel Gahete Ana García Negrete
Córdoba Ediciones Septentrión Ediciones

9.- Poemas visuales (gracejos y culteces) 10.-El gato rojo


Antonio Blázquez Gustavo Ponce Maldonado
Gráficas Rozalén Academia Literaria de la CDMX

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carlos hidalgo Villalba

YO, TONYA

Carlos
HIDALGO
VILLALBA
España.
2018

- Mis enemigos siempre decían:


“Tonya, di la verdad”.
La verdad no existe,
cada uno tenemos nuestra verdad.

en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3 mar/abr. 2018 89


Era la mejor patinadora del mundo
en aquel momento.
Toda mi vida me habían dicho
que nunca llegaría a nada…
pero saben qué…
a lo mejor sí.

Podríamos denominar Yo, Tonya, como el biopic de la pati-


nadora norteamericana Tonya Harding.

Tonya, interpretada por Margot Robbie, fue dos veces


campeona olímpica y otras dos, campeona en el Skate
America en patinaje artístico sobre hielo.

En el año 1991 logró su primer axel en el campeonato de


Estados Unidos, siendo la segunda mujer en la historia y la
primera americana en hacerlo.

La filigrana es tremenda pues se coge velocidad patinando


hacia atrás para luego dar tres giros completos y en el
comienzo del cuarto giro caer con el pie opuesto al que
uno se ha impulsado, de tal forma que uno termina dando
un giro de 1.260º. ¡De locura!

Existe una idea generalizada que hace casi todos pense-


mos en Tonya Harding como aquella patinadora que rom-
pió la rodilla a su compañera Nancy Kerrigan en el cam-
peonato estadounidense de 1994.

Sin embargo, el director Graig Gillespie, intenta reescribir la


historia de aquel suceso eximiendo a Tonya de tener
responsabilidad alguna sobre el incidente, ya que presun-
tamente fue orquestado por su entonces marido, Jeff
Gillooly, en colaboración con dos amigos.

90 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


El film es sin duda una crítica a la necesidad de encajar en
un sistema hipócrita donde no sólo se valora la ejecución
de las diferentes figuras, movimientos y coreografías, sino
también la procedencia de una “buena” familia americana
y la posición económica y/o social.

De ahí que se pueda decir que la cinta es la historia de una


humilde campesina (ordinaria, basta y maleducada) de
Oregón que, a base de constancia y esfuerzo, se convirtió
en toda una campeona en el mundo del patinaje.

La película realiza un recorrido por la vida (desde los 4 a


los 44 años) de la patinadora, mostrándonos a una niña
maltratada física y psicológicamente por una madre fría e
incapaz de demostrar cualquier tipo de amor,
empeñándose en hacer de ella una campeona olímpica,
explotándola hasta la extenuación y sometiéndola a una
durísima disciplina.

En este punto conviene mencionar el inconmensurable


papel de Allison Janney interpretando a LaVona Golden, la
terrible madre de la protagonista, que le ha valido ganar el
Oscar a la mejor actriz secundaria en la presente edición.

Para Tonya, el amor siempre ha estado unido a la violencia.

Poco femenina, sin modales y con una tremenda facilidad


para perder los nervios ante cualquier crítica u opinión
negativa, Tonya no es otra cosa que el resultado del
desarraigo familiar y de unas carencias afectivas más que
evidentes.

De este modo, se entiende un poco mejor la problemática


personalidad de la protagonista, acostumbrada a convivir
entre insultos y golpes toda su vida, primero a manos de

en sentido figurado. revista literaria. Año 11 num. 3 mar/abr. 2018 91


su madre y, luego, por parte de su irascible marido.

Y es que no existe un maltrato más destructivo que la falta


de amor de unos padres a un hijo.

Lo único que, recibido en la infancia, puede hacer


desgraciado a un adulto para siempre, es la falta de amor y
la carencia afectiva especialmente de la madre.

Necesitamos de otros para poder vivir. Hay numerosos


estudios que demuestran que cuando un recién nacido no
recibe contacto físico puede enfermar hasta morir.

Aprendemos a relacionarnos con el mundo y quienes lo


conforman a partir de esta experiencia primera, donde el
recién nacido no puede distinguir entre su madre y él,
creyendo que son una única entidad, un continuo.

De esta forma se puede asegurar que el apego en la niñez


se torna necesario para que un adulto llegue a ser feliz.

Existen pruebas que demuestran que si un niño no


experimenta una relación cálida con su madre, esto puede
acarrear consecuencias significativas e irreversibles para la
salud mental.

Y es que la ausencia de amor parental crea estructuras


psíquicas desorganizadas que afectan a muchas áreas de la
personalidad. Así, la falta de afecto puede producir un
miedo patológico a ser abandonado, tanto si la privación
de afecto ha sido real o percibida. Y esto suele traducirse
en un estado crónico de búsqueda afectiva que compense
ese vacío que muchas veces se arrastra de por vida. El
amor es tan importante como los alimentos y la educación
para el desarrollo físico, psíquico y emocional de una

92 en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3 mar/abr. 2018


persona.

Por eso, como en el caso de la protagonista, quien en su


infancia ha carecido de calor de hogar y del amor de los
padres podría carecer de afecto y desarrollar patrones de
apego insanos o ser más propenso a conductas
autodestructivas.

En definitiva, un filme más que notable que triunfa tanto


como drama deportivo (mostrando el tesón de los
profesionales del patinaje para alcanzar el triunfo), como
repaso visual de la vida familiar y sentimental de Tonya
Harding.

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ángel gonzález gonzález

GALERIA Muestra fotográfica del Proyecto


FOTOGRAFÍA “Azúcar de vertedero”:
©VÍCTOR L. SAGUNZ
Alcalá de Henares (España)

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en sentido figurado. revista literaria. año 11 num. 3. mar/abr. 2018 95
VÍCTOR L. SAGUNZ
(Alcalá de Henares, España)

De formación autodidacta, este fotógrafo ha centrado su capacidad


creativa en tratar de concretar el lenguaje de lo residual y
herumbroso. En la actualidad, Sagunz se encuentra inmerso en el
proyecto “Azúcar de vertedero”, que espera tener listo a finales de
2018 y para el que ha recorrido más de trescientos basureros de
diferentes países. La muestra que a continuación se presenta
pertenece al citado trabajo.

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