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Naciones Unidas A/HRC/22/28

Asamblea General Distr.: General


21 enero 2013

TRADUCCION NO
OFICIAL
(Original: inglés)

Consejo de Derechos Humanos


22a sesión
Puntos de Agenda 2 y 3
Informe Anual del Alto Comisionado de las Naciones
Unidas para los Derechos Humanos e informes de la
Oficina de la Alta Comisionada y el Secretario General

Promoción y protección de todos los derechos humanos,


civiles, políticos, económicos, sociales y culturales, incluido
el derecho al desarrollo

Medidas efectivas y mejores prácticas para asegurar la


promoción y protección de los derechos humanos en el
contexto de las protestas pacíficas
Informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los
Derechos Humanos

Resumen

El presente informe es presentado en seguimiento a la resolución 19/35 del Consejo


de Derechos Humanos que solicitó a la Alta Comisionada para los Derechos Humanos,
preparar y presentar un reporte temático sobre las medidas efectivas y mejores prácticas
para garantizar la promoción y protección de los Derechos Humanos en el contexto de
protestas pacíficas.

Los Estados miembros, organizaciones regionales, instituciones nacionales de


derechos humanos y organizaciones de la sociedad civil dieron insumos para este
informe. De acuerdo con lo establecido por la resolución 19/35, este informe incluye
también información extraída de los órganos de tratados y de los titulares de mandatos
de procedimientos especiales relevantes.
A/HRC/22/28

Con base en los insumos provistos, el informe esboza ejemplos de medidas efectivas
y mejores prácticas para promover y apoyar la promoción y protección de los Derechos
Humanos en el contexto de protestas pacíficas. Concluye que las protestas pacíficas son
un aspecto fundamental de una democracia dinámica. La promoción y protección de
protestas pacíficas requiere no sólo un marco legal adecuado sino también esfuerzos
continuos para su efectiva implementación. El diálogo entre los organizadores de
protestas, las autoridades administrativas y la policía, así como la capacitación a las
fuerzas de policía en derechos humanos, incluyendo el uso de la fuerza en el marco de
protestas, puede contribuir a la promoción y protección de los derechos humanos
vinculados a las protestas pacíficas.

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Contenido

Párrafos Página

I. Introducción.………………………………………………………... 1-2 4
II. Órganos de tratados………………………………………………….. 3-7 4
III. Procedimientos especiales…………………………………………... 8-24 5
IV. Legislación nacional, medidas efectivas y buenas prácticas……… 25-76 9
A. Legislación nacional relevante………………………………... 25-33 9
B. Medidas y mejores prácticas………………………………...... 34-76 11
V. Conclusiones………………………………………………………... 77-78 20

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I. Introducción
1. En su resolución 19/35, el Consejo de Derechos Humanos solicitó a la Alta
Comisionada para los Derechos Humanos, preparar y presentar un reporte temático al
Consejo, previo a su vigésima segunda sesión, sobre las medidas efectivas y mejores
prácticas para garantizar la promoción y protección de los derechos humanos en el
contexto de protestas pacíficas.

2. El Consejo alentó a los titulares de mandatos de procedimientos especiales


relevantes, incluyendo el Relator especial sobre el derecho a la libertad de opinión y
expresión, el Relator especial sobre el derecho a la libertad de reunión y de asociación
pacíficas, el Relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias y
el Relator especial sobre la situación de los defensores de los derechos humanos, a que
contribuyeran a este informe. Solicitó además a la Alta Comisionada para los derechos
humanos, basarse en la experiencia adquirida por los órganos de tratados y recabar las
opiniones de los Estados y socios relevantes, como las agencias de las Naciones
Unidas, organizaciones regionales, instituciones nacionales de derechos humanos y
organizaciones de la sociedad civil en la preparación del informe.1

II . Los órganos de tratados


3. La participación en protestas pacíficas puede ser una forma importante de ejercer
los derechos de libertad de asociación pacífica y libertad de expresión establecidos en
los artículos 19 y 21 respectivamente del Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos.2 De acuerdo a la Observación General No. 34 (2011) del Comité de
Derechos Humanos, la libertad de opinión y la libertad de expresión son condiciones
indispensables para el plenno desarrollo de la persona: tales libertades son esenciales
para cualquier sociedad y constituyen la base de toda sociedad libre y democrática
(para. 2).

4. La jurisprudencia reciente del Comité de Derechos Humanos resalta la íntima


conexión entre los actos protegidos por los artículos 19 y 21 del Pacto.3 Otros
derechos que pueden ser aplicables en caso de protestas pacíficas incluyen, por
ejemplo, el derecho a la libertad de asociación (artículo 22) y a formar parte en

1
Los siguientes Estados presentaron información: Armenia, Australia , Azerbaiyán , Bahréin, Costa Rica , República Democrática del Congo , Estonia,
Guatemala , Madagascar , Moldavia , Mongolia , Montenegro , Marruecos , Omán, Paraguay , Qatar , Rumania, Federación de Rusia, Serbia , Eslovenia,
España y Suiza.
Las organizaciones regionales y las instituciones nacionales de derechos humanos que presentaron información fueron la Secretaría del Commonwealth , la
Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa; Ombudsman de Bulgaria, la Comisión de Derechos Humanos de Malawi , Comisión Nacional
de Derechos Humanos de la India , de la Comisión de Derechos Humanos de Nueva Zelandia, Defensor del Pueblo de Panamá , la Oficina del Defensor de
los Derechos Humanos de Polonia , de la Comisión Nacional de Derechos Humanos de Qatar, la Comisión sudafricana de Derechos Humanos , Defensor del
Pueblo de Venezuela ( República Bolivariana de Venezuela).
Varias organizaciones no gubernamentales presentaron información. En la medida en que se refiere a las medidas eficaces y las mejores prácticas, la
información se ha incluido en el informe. Sin embargo, algunas propuestas contenían denuncias de violaciones de los Estados de los derechos humanos en el
contexto de las manifestaciones pacíficas, como el uso desproporcionado de la fuerza o el hostigamiento de manifestantes. Esta información ha sido
transmitida a la Relatora Especial sobre el derecho a la libertad de reunión pacífica y de asociación para la acción, pero no se ha incluido en este informe.
2
Resolución del Consejo de Derechos Humanos19/35 del 23 de marzo de 2012.
3
Ver por ejemplo, la comunicación No. 1316/2004, Mecheslav Gryb v. Belarús, Dictamen aprobado el 26 de octubre de 2011, para. 9.5.

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asuntos públicos (artículo 25). El Comité de Derechos Humanos, en su Observación


General No. 25 (1996), confirma que el derecho a participar en el desarrollo de
asuntos públicos requiere el pleno disfrute y respeto de los derechos garantizados en
los artículos 19, 21 y 22 del Pacto, incluyendo, entre otros, la libertad de realizar
manifestaciones y reuniones pacíficas (para. 25).

5. Los derechos y libertades establecidos en los artículos 19 y 21 del Pacto, sin


embargo, no son absolutos y pueden estar sujetos a restricciones.4 El artículo 21
establece que no puede haber restricciones al ejercicio del derecho a la asociación
pacífica, distintas de aquellas impuestas de conformidad con el derecho y que sean
necesarias en una sociedad democrática en el interés de la seguridad nacional o la
seguridad pública, el orden público, la protección de la salud o la moral públicas o la
protección de los derechos y libertades de otros. Por ejemplo, el Comité de Derechos
Humanos ha encontrado que la exigencia de notificar a la policía la intención de
manifestarse en un sitio público con seis horas de anticipación, puede ser compatible
con las limitaciones permitidas establecidas en el artículo 21.5

6. De igual manera, bajo el artículo 19 parágrafo 3, el derecho a la libertad de


expresión solo puede estar sujeto a restricciones de acuerdo a lo establecido por la ley
y cuando estas sean necesarias para el respeto de los derechos o la reputación de otros,
o la protección de la seguridad nacional o el orden público o de la salud o la moral
públicas. En su Observación General No. 34 (2011), el Comité de Derechos Humanos
además explica que cualquier restricción en el ejercicio de tales libertades “debe estar
acorde con las pruebas más estrictas de necesidad y proporcionalidad” y “ser aplicados
solo para aquellos fines con que fueron prescritas y deberán estar relacionadas
directamente con la necesidad específica de la que dependen” Para. 22). En el contexto
de una comunicación individual, el Comité señaló que aunque la Observación General
34 se refiere al artículo 19, también brinda orientación en relación con elementos del
artículo 21.6

7. De acuerdo a la jurisprudencia del Comité, le corresponde al Estado parte


demostrar que las restricciones a los derechos de un autor bajo el artículo 19,
parágrafo 3 de la Convención, son necesarias y que incluso si un Estado parte
introduce un sistema orientado a encontrar el equilibrio entre la libertad de un
individuo para difundir información y el interés general en mantener el orden público
en un área determinada, dicho sistema no debe operar de forma tal que sea
incompatible con el artículo 19 del Pacto.7

III. Procedimientos especiales


8. En su reporte inicial al Consejo de Derechos Humanos, el Relator Especial sobre
el derecho a la libertad de reunión y asociación pacíficas definió el término “reunión”

4
Ver la Comunicación No. 1866/2009, Chebotareva V. Federación Rusa, dictamen aprobado el 26 de marzo de 2012, para. 9.2.
5
Comunicación No. 412/1990, Kivenmaa v. Finlandia, dictamen aprobado el 31 de marzo de 1994, para. 9.2.
6
Comunicación No. 1790/2008, Govsha, Syritsa y Mezyak v. Belarús, dictamen aprobado el 27 de julio de 2012, para. 9.4.
7
Comunicación No. 1157/03, Coleman v. Australia, dictamen aprobado el 17 de julio de 2006, para. 7.3.

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como incluyente de los términos demostraciones, paros, procesiones, mítines o incluso


ocupaciones. Él profundizó en el marco legal internacional aplicable al derecho de
libertad de reunión pacífica, incluyendo las restricciones al derecho y la relación entre
el artículo 21 y otros derechos establecidos en el Pacto. El Relator Especial también
recalcó la obligación de los Estados miembros de facilitar y proteger las reuniones
pacíficas, incluso mediante negociación y mediación.8 Señaló además que el derecho a
la libertad de reunión también se refleja en el artículo 8 del Pacto Internacional de
Derechos Económicos, Sociales y Culturales y en otros instrumentos internacionales y
regionales (para. 14).

9. En su contribución conjunta para este reporte, los Relatores Especiales sobre los
derechos de libertad de reunión y asociación pacíficas, sobre el derecho a la libertad de
opinión y expresión, y sobre la situación de los defensores de derechos humanos,
señalaron que los Estados deberían reconocer el rol positivo de las protestas pacíficas
como un medio para fortalecer los derechos humanos y la democracia. Ellos deben
garantizar los derechos a la libertad de reunión pacífica, libertad de asociación y
libertad de opinión y expresión, los cuales son componentes esenciales de la
democracia y son indispensables para el pleno disfrute de todos los derechos humanos.
En demasiadas instancias, éstos derechos han sido indebidamente restringidos, o
simplemente han sido negados en el contexto de las protestas pacíficas.

10. Efectivamente, solo las protestas que son pacíficas son protegidas por el derecho
internacional de los derechos humanos. Una reunión debe ser considerada pacífica si
sus organizadores y participantes tienen intenciones pacíficas y no usan, defienden o
incitan a la violencia; características que deben presumirse. Los organizadores de la
manifestación no deben ser considerados responsables por el comportamiento violento
de otras personas. Por el contrario, la policía tiene el deber de remover a los
individuos violentos del conglomerado con el fin de permitir a los manifestantes
ejercer sus derechos básicos a reunirse y expresarse de forma pacífica.

11. La organización de una protesta no debe estar sujeta a una autorización previa por
parte de las autoridades administrativas del Estado, como máximo, puede someterse a
un proceso de notificación previo, cuya motivación es permitir a las autoridades del
Estado facilitar el ejercicio del derecho a la libertad de reunión pacífica y tomar
medidas adecuadas para proteger la seguridad pública y el orden, así como los
derechos y libertades de los manifestantes y otros individuos afectados por las
protestas. Las reuniones espontáneas y simultáneas a la protesta deben estar reguladas
por los mismos procedimientos y también deben ser protegidas. En cualquier caso, los
organizadores no deben ser penalizados por no solicitar una autorización.

12. Al restringir los derechos a la libertad de reunión pacífica, de opinión y


expresión, y de asociación, siempre deben prevalecer los medios menos invasivos que
permitan alcanzar los objetivos legítimos perseguidos por las autoridades. La libertad
de adelantar y participar en protestas pacíficas debe ser considerada la regla, y las

8
A/HRC/20/27, paras. 24 y 89.

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limitaciones a este derecho deben ser la excepción. En este sentido, la protección de


los derechos y libertades de otros no deben ser usados como una excusa para limitar el
ejercicio de las protestas pacíficas. Prohibiciones absolutas que impliquen
restricciones generales en tiempo y lugar, no son acordes con los derechos humanos en
el contexto de protestas pacíficas, a menos que se trate de medidas de último recurso,
adoptadas para proteger vidas humanas.

13. La dispersión de las reuniones solo debe ser una medida excepcional. Las
autoridades encargadas de hacer cumplir la ley no deben recurrir a la fuerza durante
las manifestaciones pacíficas y deben asegurar que la fuerza solo sea usada en casos
excepcionales.

14. De acuerdo al artículo 4, parágrafo 2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles


y Políticos, el derecho a la vida y la prohibición de la tortura y otras penas o tratos
crueles, inhumanos o degradantes, son derechos inderogables. Como tales, es
imperativo que los Estados aseguren atención médica oportuna y adecuada para
cualquier persona herida durante una protesta pacífica. Igualmente se debe garantizar
que tanto la persona herida como sus familiares, sean protegidos de cualquier amenaza
de represalia.

15. Nadie debe ser penalizado o sujeto a cualquier amenaza o acto de violencia,
acoso, persecución, intimidación o represalias por referirse a temas de derechos
humanos a través de protestas pacíficas o por reportar violaciones a los derechos
humanos y abusos cometidos en el contexto de protestas pacíficas. Debe garantizarse
la protección de las mujeres, especialmente mujeres defensoras de los derechos
humanos. Los casos de violencia de género que ocurran durante las manifestaciones
deben ser investigados y sancionados de manera prioritaria.

16. Los Estados también deben asegurar que cualquier persona que esté
monitoreando y evaluando las violaciones y abusos que ocurran durante las protestas
pacíficas, incluyendo periodistas, trabajadores de medios comunitarios, otros
profesionales de medios y “bloggers”, lo hagan sin temor a la intimidación, acoso
legal o físico y violencia. En este sentido, el Estado tiene la obligación de protegerlos.

17. Los Estados tienen la obligación de asegurar que los oficiales encargados de
hacer cumplir la ley estén suficientemente entrenados y equipados, particularmente en
relación con el control de multitudes y el uso de la fuerza. A este respecto, se debe
hacer referencia al exhaustivo trabajo adelantado por la Oficina de Instituciones
Democráticas de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa
(OSCE-ODIHR por sus siglas en inglés) y su Panel de Expertos en Libertad de
Reunión Pacífica.

18. Deben promoverse y fortalecerse las coaliciones de defensores de los derechos


humanos, redes de comunicación de información nacionales, regionales e
internacionales, grupos de monitoreo y grupos de apoyo que pueden proporcionar

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seguridad. Estos grupos pueden proporcionar protección para los manifestantes


pacíficos, así como aquellos que monitorean las protestas pacíficas.

19. Cualquier uso abusivo de la fuerza u otra violación a los derechos humanos en el
contexto de una protesta pacífica debe ser investigado y sancionado de manera
oportuna, imparcial e independiente, con el fin de someter a los perpetradores a la
justicia. Esto no solo implica garantías de que la violación va a ser resuelta, sino que
no se repetirá en el futuro. Cuando se presentan restricciones indebidas a los derechos
humanos en el contexto de protestas pacíficas, las víctimas deben tener el derecho a
obtener reparación y una compensación justa y adecuada. En este proceso se debe
prestar especial atención a las víctimas que pertenezcan a los grupos con mayor riesgo.

20. En su contribución a este reporte, el Relator Especial sobre ejecuciones


extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, se refirió al artículo 6 parágrafo 1 del Pacto
Internacional de Derechos Civiles y Políticos, relativo al derecho a la vida, y recordó
que en su Observación General No. 6 (1982) sobre el derecho a la vida, el Comité de
Derechos Humanos señala que los Estados partes deben tomar medidas para, entre
otras, “evitar que sus propias fuerzas de seguridad maten de forma arbitraria”. En su
opinión, la privación de la vida por las autoridades del Estado es un asunto de la
mayor gravedad, y por lo tanto, las leyes deben controlar y limitar las circunstancias
en las cuales una persona puede ser privada de la vida por dichas autoridades de
manera muy estricta (para. 3). Además, el Relator Especial se refirió a los Principios
Básicos sobre el Uso de la Fuerza y Armas de Fuego por Funcionarios Encargados de
Hacer Cumplir la Ley9, en particular los principios 9, 12, 13 y 14, y el Código de
Conducta para Funcionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley10, que proporciona
una interpretación de los límites en la conducta de las fuerzas encargadas de hacer
cumplir la ley.

21. El Relator Especial también se refirió a su reporte en la décimo séptima sesión


del Consejo de Derechos Humanos, en donde, con base en un estudio de cerca de 76
países, concluyó que muchos sistemas legales nacionales no están acordes con los
estándares internacionales en relación con el uso de la fuerza en las manifestaciones
(A/HRC/17/28, resumen). El Relator Especial también resaltó distintos factores
interrelacionados que configuran la respuesta de los Estados a las protestas y sus
eventuales consecuencias. El reconocimiento por los Estados del derecho a la reunión
pacífica, tanto a nivel político como legal, es un elemento crucial. Cuando el derecho a
la reunión pacífica es suprimido, existe un mayor riesgo de que las manifestaciones
escalen y se tornen violentas. Sin embargo, a través del respeto por parte del Estado
del derecho a la reunión pacífica se ofrece la oportunidad de desactivar las tensiones y
evitar las consecuencias negativas, tales como la potencial pérdida de vidas humanas.

22. En su reporte, el Relator Especial también subraya la necesidad de una mayor


codificación de derecho internacional aplicable a las manifestaciones, recomendando

9
Adoptado por el Octavo Congreso de las Naciones Unidas en la Prevención del Crimen y el Tratamiento del Delincuente, La Habana, 27 de agosto a 7 de
septiembre de 1990.
10
Adoptado por la resolución de la Asamblea General 34/169 del 17 de diciembre de 1979.

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que “los principios básicos de manejo de manifestaciones deben ser elaborados más
claramente, de manera que establezcan los estándares de derecho internacional
aplicables a las manifestaciones (no violentas y violentas; legales e ilegales), con
especial alusión al uso de la fuerza (letal) por parte de la policía durante las
manifestaciones. […] Este proceso es importante, no sólo en términos de proporcionar
claridad en los estándares aplicables, sino también con el fin de generar conciencia y
solicitar la colaboración para un esfuerzo global de reforma legal en relación con los
derechos de asociación” (para. 143).

23. Más allá de los marcos legales, el manejo de las manifestaciones, en la práctica,
también requiere el conocimiento del comportamiento de las masas, un equipo
adecuado –incluyendo un rango de armas no letales- y entrenamiento apropiado de los
oficiales encargados de hacer cumplir la ley, incluyendo un entrenamiento en derechos
humanos. Este último, juega un papel importante en asegurar que las respuestas a las
protestas no generen una escalada de violencia y violaciones a los derechos humanos,
incluyendo la pérdida de vidas humanas.

24. El Relator Especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias,


también hizo referencia al llamado enfoque de “manejo negociado” al proceso de
supervisión de manifestaciones. De acuerdo a este enfoque, el rol de la policía es
proteger los derechos y facilitar, más que frustrar, las manifestaciones; ellos deben
ayudar a disolver la tensión y prevenir una peligrosa escalada de la situación. Varios
países que siguen este enfoque también han formalizado el rol del llamado “triángulo
de seguridad” durante las manifestaciones, con base en la comunicación continua y la
interacción entre los organizadores de la protesta, las autoridades locales o estatales, y
la policía, orientados a evitar los riesgos y asegurar un manejo amable de la
manifestación.

IV. Legislación nacional, medidas efectivas y mejores prácticas


A. Legislación nacional relevante

25. Todos los Estados que aportaron a este informe indicaron que el derecho a la
asociación pacífica, que en algunos casos también hace referencia a las protestas
pacíficas o manifestaciones, está protegido por la Constitución, legislación específica
o por ambas.

26. Costa Rica observó que la protesta pacífica se usa como medio para generar apoyo
de la sociedad civil y el Estado respecto a temas que afectan a aquellos que protestan,
constituyendo además parte del ejercicio de una democracia activa y participativa. De
acuerdo a su Corte Constitucional, las protestas pacíficas son manifestaciones de la
libertad de expresión que son protegidas judicialmente.11

27. La Constitución mongola protege la libertad de manifestación y asociación


pacíficas de los ciudadanos. Mongolia también tiene una Ley sobre Procedimientos
para Organizar Manifestaciones y Reuniones.
11
Costa Rica, Corte Constitucional, sentencia No. 03020 (2000).

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28. Suiza indicó que la libertad de protesta es esencial en un Estado basado en la


libertad de sus ciudadanos, y ese derecho está protegido mediante normas sobre la
libertad de opinión e información, así como la libertad de asociación reconocida en la
Constitución Federal.

29. España mencionó que su Constitución reconoce el derecho de asociación y reunión


pacíficas y sin armas. Añadió que las protestas pacíficas se caracterizan legalmente
como una manifestación colectiva de la libertad de expresión por medio de una
asociación temporal de personas cuyo propósito es intercambiar o exponer ciertas
ideas, defender intereses específicos o publicar problemas o demandas. España
también subrayó la estrecha relación legal entre el derecho a la reunión pacífica y el
derecho a la libertad de expresión.12

30. De la misma manera, las constituciones de Bulgaria, Guatemala, Panamá,


Paraguay y Venezuela (República Bolivariana de) protegen el derecho a la reunión
pacífica y manifestación, señalando expresamente que este derecho debe ser ejercido
sin recurrir a las armas. Las constituciones de Qatar y Bahréin protegen el derecho a la
reunión pacífica, y ambos Estados también han adoptado legislación nacional
prohibiendo el uso de armas durante las manifestaciones.

31. Serbia indicó que el derecho a la reunión pacífica se encuentra recogido en su


Constitución y que durante las protestas pacíficas los derechos de los ciudadanos a la
libertad de pensamiento y expresión están protegidos. Mauricio afirmó que las
protestas pacíficas están protegidas por dos normas constitucionales diferentes: el
derecho a la libertad de expresión y el derecho de libertad de reunión y asociación.

32. La Constitución de Estonia afirma que todos tienen el derecho, sin necesidad de
autorización previa, a reunirse pacíficamente y realizar reuniones. No obstante,
también contiene restricciones a este derecho de conformidad con el procedimiento
legalmente establecido para preservar la seguridad nacional, el orden público, la
moral, la seguridad en el tránsito y la seguridad de los participantes en la reunión, o
para prevenir la propagación de una enfermedad infecciosa.13

33. Guatemala reporta que el derecho de reunión y manifestación pacífica puede ser
restringido en ciertos casos establecidos en la Ley de orden público, tomando en
cuenta los requerimientos establecidos por el artículo 21 del Pacto Internacional de
Derechos Civiles y Políticos. Con el objetivo de asegurar la paz, seguridad y la
efectiva implementación de los derechos humanos, la Ley de apoyo a las fuerzas de
seguridad civil regula el apoyo provisto por el Ejército de Guatemala a las fuerzas de
seguridad civil para la prevención y combate del crimen organizado y crímenes
menores.14 En noviembre de 2012, se aprobó un Protocolo de Actuación
Interinstitucional: Apoyo del Ejército a las Fuerzas de Seguridad Civil especificando
el marco legal de la asistencia, cooperación y coordinación entre las fuerzas armadas y
civiles de Guatemala.15

12
España, Corte Constitucional, sentencia 96/2010 (2010), FJ 3.
13
Estonia, Constitución (1992), art. 47.
14
Guatemala, Ley de Apoyo a las Fuerzas de Seguridad Civil, Decreto No. 40-2000 de 16 junio 2000
15
Guatemala, Protocolo sobre Acción Inter-agencial: Apoyo Militar a las Fuerzas de Seguridad Civil, Orden Gubernamental No. 285-2012 del 6 noviembre
2012

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B. Medidas y mejores prácticas

Previa notificación y autorización

34. Mientras algunos Estados no requieren notificación previa o previa autorización


para realizar manifestaciones pacíficas, otros requieren lo uno o lo otro. En ciertas
situaciones, la previa notificación o autorización se requiere solamente si los
organizadores pretenden usar la vía pública o áreas públicas, o cuando realizan
instalaciones especiales para la manifestación como barreras.

35. Igualmente, los Estados difieren en el acercamiento a protestas pacíficas


espontáneas. Algunos Estados que requieren notificación o autorización previa pueden
prohibir tales protestas, otros las permiten, y otros las permiten incluso si la protesta
contraviene los requisitos legales de notificación o autorización previa.

36. En Azerbaiyán, la notificación debe incluir el nombre, propósito, lugar y fecha del
evento, el número aproximado de participantes, y en caso de marcha callejera, la ruta
propuesta, incluyendo el lugar de salida, distancia y destino, así como el nombre e
información de contacto de los organizadores. No obstante, manifestaciones o
protestas espontáneas no requieren notificación escrita, pero pueden ser restringidas o
detenidas.16

37. En Estonia, la Ley de Reuniones Públicas declara que una reunión pública
organizada tiene que estar registrada con al menos cuatro días laborables de antelación
a la reunión en una municipalidad rural o gobierno local, cuando sea necesario
redirigir el tráfico, erigir un toldo, escenario, gradas o cualquier otra construcción de
gran escala, o se use sonido o equipo de luces. Las reuniones públicas no pueden
realizarse en ciertos lugares, incluyendo, inter alia, puntos de control de frontera o a
menos de 300 metros de la frontera, en territorio de las fuerzas de defensa de Estonia,
en la vía del tren, en minas, bajo líneas de alto voltaje, en un área donde se está
propagando una enfermedad infeccionas o que sea peligrosa para las personas.

38. La República Democrática del Congo indicó que todas las manifestaciones
públicas requieren autorización previa de las autoridades administrativas competentes,
que como autoridades estatales tienen la obligación de brindar seguridad a los
manifestantes y mantener el orden público. La República Democrática del Congo
indicó además que aunque las manifestaciones espontáneas son ilegales, están no
obstante sujetas a la protección de las autoridades estatales con el fin de mantener el
orden público.

39. La República de Moldavia indicó que luego de las enmiendas legislativas de 2008,
ahora cuenta con un proceso de notificación para reuniones, en lugar de un sistema de
autorización. De acuerdo a la Ley de Reunión, cualquier reunión con menos de 50
participantes puede tener lugar sin notificación previa. En el caso que la reunión
involucre a más de 50 personas, los organizadores tienen que notificarlo a las
autoridades locales cinco días antes de su celebración con el fin de asegurar que no se
celebrarán otras reuniones en el mismo lugar al mismo tiempo. La República de
Moldavia indicó que el cambio de un sistema de autorización a notificación conllevó a

16
Azerbaiyán, Ley de Libertad de Asamblea del 22 febrero 2008, arts. 3 y 12.

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un incremento del número de reuniones celebradas, así como del número de


individuos ejerciendo el derecho de reunión pacífica.

40. En Catar, la Ley número 18/2004 sobre reuniones públicas y manifestaciones


estipula que los organizadores de las reuniones o manifestaciones pacíficas tienen que
obtener una licencia del Director General de Seguridad Pública remitiendo una
solicitud siete días antes de la propuesta fecha del evento. La solicitud se considerará
rechazada si la aprobación no se otorga tres días antes de la propuesta fecha del
evento. Los organizadores pueden solicitar una revisión del rechazo al Ministerio del
Interior en un plazo de 24 horas. Si el Ministerio no responde a la solicitud de
revisión, debe considerarse un rechazo. La Comisión Nacional de Derechos Humanos
de Catar afirma, no obstante, que ha observado protestas pacíficas espontáneas de
trabajadores protestando contra los retrasos en el pago de sus salarios por empresas. El
Ministerio del Interior no puso restricciones a los protestantes, y sólo puso oficiales en
el lugar de las protestas para asegurar que fueran pacíficas. En Omán, una unidad de
coordinación administrativa entre autoridades públicas relevantes tiene el mandato de
recibir las solicitudes de autorización para realizar protestas pacíficas, y provee
asistencia técnica en estas solicitudes al jefe de la unidad.

41. En Serbia, la Ley de Reunión de Ciudadanos requiere al organizador remitir al


Ministerio del Interior una solicitud para realizar una reunión pública al menos con 48
horas de anticipación a la reunión, y cinco días en caso de movimientos, por ejemplo,
una marcha de participantes.

42. España señaló que de acuerdo a su Constitución, la realización de reuniones


pacíficas no requiere autorización previa.17 La Ley Orgánica 9/1983 regula las
reuniones y manifestaciones realizadas en lugares con tránsito público. Los
organizadores tienen que informar a la autoridad pública competente por escrito con
un mínimo de 10 días de antelación, excepto en casos de urgencia, en cuyo caso la
autoridad pública competente podrá prohibir una manifestación o proponer una
modificación del itinerario o momento de la reunión pública, si considera que el
evento constituiría un riesgo al orden público o pondría en peligro personas o
propiedades. La decisión de las autoridades públicas puede ser recurrida ante una
instancia administrativa dentro de las 48 horas con la presencia de todas las partes y
previa a la fecha del evento planeado. La decisión del tribunal administrativo puede
ser recurrida ante el Tribunal Constitucional.

43. En Suiza, el derecho a manifestarse en lugares públicos deriva de los derechos a


la libertad de expresión y libertad de reunión protegidos por la Constitución
Federal.18 No obstante, las manifestaciones pueden requerir autorización previa para
coordinar el uso de áreas públicas y garantizar la seguridad pública, en los casos
establecidos por ley. La administración de áreas públicas es competencia de las
autoridades cantonales y comunales. En los cantones de Berna, Ginebra y Grisonia,
los organizadores de manifestaciones tienen que obtener autorización previa para
realizar manifestaciones. En la práctica, no obstante, el procedimiento funciona
como un sistema de notificación, en tanto que las manifestaciones casi nunca son
prohibidas. Las manifestaciones espontáneas no están sujetas al procedimiento de
autorización previa en Suiza. La denegación de la autorización para una protesta

17
España, Constitución (1978), art. 21.
18
Suiza, Constitución Federal de la Confederación Suiza (1999), arts. 16 y 22.

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pacífica por autoridades competentes puede ser recurrida ante la primera instancia
jurisdiccional al nivel comunal; el Tribunal Federal es la última instancia nacional de
recurso.

44. El Secretariado de la Commonwealth subrayó que “las autoridades tienen que


ser notificadas de cualquier manifestación o protesta propuesta, salvo que las
circunstancias impidan la notificación previa; las autoridades no tienen competencia
para frenar una manifestación o protesta, pero muchas imponen condiciones para
prevenir la violencia; la prohibición es el último recurso cuando realmente existe una
amenaza real de violencia en el caso de su celebración; la revisión judicial está
disponible contra las decisiones de las autoridades; las autoridades deben
concientizar a los organizadores sobre las condiciones para las manifestaciones o
protestas y su responsabilidad por los daños causados.19

45. El Tribunal Europeo de Derechos Humanos ha limitado la disolución de


manifestaciones pacíficas espontáneas organizadas en respuesta a eventos que
previsiblemente generarían manifestaciones. El Tribunal afirmó que “en
circunstancias especiales en las que se justifique una respuesta inmediata a un evento
político en forma de manifestación, la decisión de disolver una manifestación
pacífica solamente por la ausencia del requisito de autorización previa, cuando no
existan conductas ilegales por parte de los participantes, conlleva una limitación
desproporcionada de la libertad de reunión pacífica”.20 Además, el Tribunal Europeo
de Derechos Humanos ha determinado que la ausencia de un procedimiento efectivo
de recurso contra la decisión que prohíbe una reunión antes de la propuesta fecha de
dicha reunión es una violación de la Convención para la Protección de los Derechos
Humanos y Libertades Fundamentales del Consejo de Europa.21

46. La organización Defending Dissent Foundation, con sede en los Estados Unidos
de América, argumentó que el aviso o permiso no debería ser requerido a los que se
reúnen en casos de reuniones de menos de 50 personas, o cuando la protesta tiene
lugar en aceras públicas o cuando la reunión sea con el propósito de expresar
inmediata y espontáneamente las opiniones en respuesta a un evento público. La
organización Lawyers for Constitutional Rights and Freedoms (JURIX) defiende que
los participantes ordinarios de reuniones públicas no deben ser detenidos incluso en
casos en los que las autoridades reguladoras y los organizadores no llegan a un
acuerdo en cuanto al momento, lugar y modo del evento. Las protestas pacíficas
deberían estás permitidas frente a su audiencia buscada y con un máximo de
publicidad. El procedimiento para obtener el consentimiento de las autoridades
reguladoras, incluido el relativo al momento y lugar de la protesta, no debería ser
usado como medio para frustrar el propósito de tales manifestaciones.

47. En relación a las protestas notificadas a la policía de Copenhague, el Instituto


Danés de Derechos Humanos indicó que la policía inicia un diálogo con los
organizadores previo a la fecha propuesta para asegurar que la protesta se realice
pacíficamente. El foro de derechos humanos de ONG de Zimbabwe apoya los
esfuerzos de reforma legal para transferir el poder de prohibir manifestaciones de la

19
Secretariado de la Commonwealth, Freedom of Expression, Association and Assembly, Best Practice Series (Londres, 2003), pp. 21-22.
20
Corte Europea de Derechos Humanos, Bukta y otros v. Hungría, Petición No. 25691/04, sentencia del 17 julio 2007, para. 36.
21
Ibid., Baczkowski y otros v. Polonia, Petición No. 1543/06, sentencia de 3 mayo 2007. La Oficina del Defensor del Pueblo en Polonia se involucró en el
caso desde el inicio, argumentando que la introducción del requerimiento de un permiso para una asamblea en una vía pública es una violación del derecho
de libertad de asamblea.

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A/HRC/22/28

policía a las cortes, eliminando la obligación de los manifestantes de llevar


documentos de identidad.

48. En su jurisprudencia, los tribunales regionales han tratado la cuestión sobre si las
protestas pacíficas pueden ser restringidas en caso que tengan lugar en lugares
públicos o calles públicas que sean altamente transitadas. El argumento de que cerrar
calles públicas para manifestaciones puede causar molestias a otros fue rechazado
por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. El Tribunal declaró que “cualquier
manifestación en un lugar público inevitablemente causa cierto nivel de afectación
en la vida diaria, incluyendo afectaciones al tránsito, y es importante para las
autoridades públicas demostrar cierto grado de tolerancia hacia encuentros pacíficos,
de otro modo se vaciaría de contenido el artículo 11 de la Convención”.22 El
Tribunal de Justicia de la Unión Europea llegó a una conclusión similar en un caso
donde una protesta en una ruta de alto tránsito en los Alpes resultó en el efectivo
cierre de una autopista por casi 30 horas.23 La Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH) también llegó a una conclusión similar.24

El papel de las autoridades, en particular de la policía, durante protestas pacíficas

49. El Instituto Danés de Derechos Humanos informa que la policía de Copenhague


ha comenzado a utilizar las redes sociales desde el 2012, manteniendo informados a
los protestantes y participantes de eventos públicos por medio de Facebook y Twitter
con información relacionada con la protesta o el evento. Australia informa que las
funciones de la policía en el contexto de protestas pacíficas se realizan de un modo
que respeta los derechos humanos y libertades.

50. Montenegro afirmó que la policía mantiene comunicación y coopera con los
organizadores de protestas pacíficas durante el evento, así como con otras entidades
involucradas, tales como agencias proveyendo protección física o sanitaria o los
medios de comunicación. Madagascar subrayó el papel del Ministerio de Seguridad
Interna y de la Policía en garantizar el libre ejercicio de las libertades
constitucionalmente garantizadas, incluida la protesta pacífica. Las fuerzas del
cumplimiento de la ley aseguran apego a las normas relativas a las protestas
pacíficas, al tiempo que mantienen el orden público antes, durante y después de las
protestas.

51. El Centro Castan para el Derecho de los Derechos Humanos australiano señala
que la policía debería llevar identificación todo el tiempo para que se pueda recurrir
en caso de uso desproporcionado de la fuerza. Subrayó que la policía debería ser
guiada en cuanto a los mecanismos apropiados para el control de masas. El Centro
además mencionó la cuestión de la respuesta de la policía a la desobediencia civil.
Recordando la importancia de la desobediencia civil como una forma de protesta,
aun cuando no esté protegida por la legislación nacional o internacional de derechos
humanos, el Centro considera que el castigo por tales actos debe ser proporcionado,
además de considerar que los protestantes no deben ser retenidos como ejemplo.

22
Corte Europea de Derechos Humanos, Sergey Kuznetsov v. Rusia, Petición No. 10877/04, sentencia de 23 octubre 2008, para. 44.
23
Tribunal de Justicia de la Unión Europea, Eugen Schmidberger v. República de Austria, Caso C-112/00, sentencia de 12 junio 2003.
24
Organización de Estados Americanos, Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe sobre Seguridad Ciudadana y Derechos Humanos, 31
diciembre 2009 (OEA/Ser.L/V/II), para. 193.

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52. La Fundación española Intervida enfatizó que las personas menores de 18 años
deben recibir protección especial frente a la violencia y el trato inhumano o
degradante en el contexto de las manifestaciones pacíficas.

53. La organización Defending Dissent Foundation considera que el rol de la policía


en las protestas pacíficas debería ser el manejo de las masas y que la comunicación y
el cumplimiento voluntario deberían ser enfatizados. Todo el personal de
cumplimiento de la ley debería llevar o mostrar de manera visible su identificación;
agentes encubiertos o informantes no deberían ser introducidos en la multitud. La
presencia policial no debería ser desproporcionada en relación al tamaño de la
multitud, y la policía no debería estar armada con armas letales. Los caballos no
deberían ser usados para control de masas, la policía no debería fotografiar o grabar
protestantes pacíficos, además debería prohibirse la realización de arrestos
“preventivos” y dispersiones. Además, los oficiales de cumplimiento de la ley
deberían documentar todos los arrestos y procesarlos de manera inmediata; las
personas detenidas deberían ser informadas de sus derechos legales. El Centro
considera que el gas lacrimógeno, el spray de pimienta u otras armas “menos que
letales” no deberían ser usados contra manifestantes pacíficos.

54. El Defensor del Pueblo de Panamá subrayó la importancia del diálogo y la


consulta con todas las partes involucradas, que contribuyen a la protección de los
derechos humanos durante las protestas pacíficas. Omán también enfatizó la
importancia de la comunicación con autoridades públicas durante las protestas.

55. Varias ONG también mostraron preocupación por el mal uso de armas “menos-
que-letales”. Preocupaciones específicas fueron suscitadas por la organización
Médicos por los Derechos Humanos (Physicians for Human Rights) y el Centro
Castan por el Derecho de los Derechos Humanos en relación a ciertas formas de
armas no letales usadas para controlar manifestaciones, incluidas pistolas con balas
de goma, gas lacrimógeno, pistolas de perdigones y pistolas eléctricas o armas de
electrochoque (taser guns). Médicos por los Derechos Humanos recomiendan que los
Estados aseguren el acceso a cuidados médicos a todo protestante o agente de
seguridad, y la protección de la neutralidad médica de los profesionales sanitarios
que tratan a protestantes o agentes de seguridad heridos.

56. La Red de Monitoreo Policial (Network for Police Monitoring, Netpol) se refirió
a las tácticas de contingencia de la policía o “acorralamiento” (“kettling”) de
personas, incluyendo tanto a protestantes como espectadores, por un periodo de
varias horas, como un mecanismo de control de masas. El Tribunal Europeo de
Derechos Humanos consideró que el uso de esas medidas de contingencia no
constituye una violación de la Convención cuando sea necesario para evitar un
“riesgo real de daño o lesión”, y cuando sea el “menos y más efectivo de los medios
que se puedan aplicar”.25 Al tiempo que aceptaba que la táctica de contingencia
policial es legal en situaciones donde existe un riesgo serio de violencia, Netpol
reconoció que la práctica en cuestión es usada frecuentemente como respuesta a
protestas pacíficas espontáneas y no autorizadas, además expresó preocupación
porque la práctica no era usada para los limitados casos por los cuales ésta se prevé.
Netpol alegó que las tácticas policiales tales como la contención y stop-and-search

25
Corte Europea de Derechos Humanos, Austin y otros v. Reino Unido, Peticiones Nos. 39692/09, 40713/09 y 41008/09, sentencia de 15 marzo 2012, paras.
59 y 66.

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son usadas frecuentemente por la policía para recoger información personal sobre los
protestantes. Mencionó que la recolección y procesamiento de tal información no
tiene fundamento legal, teniendo además un efecto que frena la participación en
actividades de protesta.

57. El Instituto Danés para los Derechos Humanos resaltó la cuestión del trato
recibido por las personas detenidas provisionalmente en masa durante actividades de
protesta en Dinamarca, subrayando un caos en el que los detenidos no tuvieron
acceso a sanitarios y fueron dejados sobre el pavimento frío durante varias horas.

58. El Secretariado de la Commonwealth26 considera que la policía que está presente


durante las protestas debe aplicar los principios de proporcionalidad, legalidad,
responsabilidad y necesidad (PLAN por sus siglas en inglés). El Relator Especial
sobre el derecho a la libertad de reunión y de asociación pacíficas opinó que los
organizadores de protestas no deberían incurrir en gastos financieros por la provisión
de servicios públicos durante las reuniones, así como tampoco deberían los
organizadores o participantes deberían incurrir en gastos o ser responsables del
comportamiento ilegal de otros o del mantenimiento del orden público.27

Investigaciones de violencia y rendición de cuentas

59. La Comisión Nacional de Derechos Humanos de la India y la Comisión de


Derechos Humanos sudafricana indicaron que su función es la de investigar y
resolver y realizar recomendaciones cuando las protestas conllevan violencia grave,
incluidas muertes. También indicaron que sus instituciones deberían establecer un
diálogo público sobre las cuestiones que llevan a manifestarse y las cuestiones de
derechos humanos derivadas de las actividades de protesta.

60. La Comisión de Derechos Humanos de Malawi señaló que ha realizado una


investigación sobre las manifestaciones de julio de 2011 que se convirtieron en
violentas y resultaron en la muerte de 19 personas así como en la destrucción de
propiedad. El Defensor del Pueblo de Venezuela (República Bolivariana de) indicó
que intenta mediar en los conflictos que surgen de protestas pacíficas y realiza
recomendaciones a los órganos competentes del Estado para la toma de acción.

61. La organización Médicos por los Derechos Humanos urgió a los Estados a
establecer mecanismos justos y transparentes de responsabilidad para las fuerzas de
seguridad involucradas en el uso excesivo de la fuerza contra protestantes pacíficos,
así como a conducir investigaciones imparciales e independientes sobre cualquier
denuncia de hostigamiento o intimidación contra los protestantes. Turquía informó
que cuando las autoridades tienen conocimiento de un uso excesivo de la fuerza por
fuerzas de seguridad durante protestas pacíficas o cuando se reciben quejas al
respecto, el Ministerio del Interior asigna inspectores para investigar tales
incidentes, de acuerdo con su “política de tolerancia cero frente a la tortura y el
maltrato”.

62. La Federación Rusa se refirió a dos entidades creadas recientemente, que


exitosamente identifican violaciones de derechos humanos, incluyendo las propias

26
Secretariado del Commonwealth, Commonwealth Manual on Human Rights Training for Police (Londres, 2006).
27
Véase A/HRC/20/27, para. 31.

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A/HRC/22/28

en el contexto de las protestas pacíficas. Se han establecido consejos públicos de


control y éstos comunican los casos de graves violaciones de derechos humanos que
son también objeto de la atención de organizaciones de la sociedad civil. El Consejo
Público del Ministerio Ruso de Asuntos Internos está compuesto por representantes
de la comunidad de derechos humanos y lleva casos de abusos de derechos humanos.
Omán informó que su Institución Nacional de Derechos Humanos monitorea y
provee asesoría en todas las cuestiones relacionadas con violaciones de derechos
humanos, incluidas las violaciones de derechos humanos en el contexto de protestas
pacíficas.

63. Greenpeace destacó el tema de la desobediencia civil, que se define como un


incumplimiento deliberado de lo requerido por la ley. Consideró que las protestas
legítimas y constructivas no deberían ser siempre sancionadas, incluso cuando violan
la ley. Se refirió al caso donde 46 activistas de Greenpeace violaron
intencionalmente la ley para demostrar que la seguridad de unas instalaciones
nucleares en Australia era inadecuada; ellos fueron inicialmente condenados por
violación de propiedad privada, aunque luego del recurso, las condenas fueron
retiradas. El juez presidente declaró que “(…) en mi opinión, los objetivos y
propósitos de los demandados no podrían haber sido logrados manifestándose frente
al portón. Como ya se mencionó (…), uno de los mayores objetivos y propósitos de
los apelantes era demostrar gráficamente la lamentable seguridad inherente de las
instalaciones”.28

Buenas prácticas que contribuyen a la imparcialidad del Estado

64. La imparcialidad del Estado se ha identificado como una cuestión de vital


importancia para el ejercicio del derecho a la protesta pacífica por la Comisión
Nacional de Derechos Humanos de la India. La Comisión indicó cómo en una
variedad de situaciones, la falta de imparcialidad podía afectar negativamente el
derecho a la protesta pacífica. Por ejemplo, el gobierno en el poder podría alentar e
incluso apoyar manifestaciones pro-gubernamentales, y prohibir, restringir u
obstaculizar protestas pacíficas de la oposición política e individuos o grupos
insatisfechos con las prácticas y políticas gubernamentales. Un Estado puede incluso
poner en la mira a personas que apoyan cuestiones consideradas controversiales o
incompatibles con los valores o creencias de la mayoría, o imponer elevadas multas
a los organizadores, participantes o líderes de la oposición que participen en tales
protestas, o someterlos a detención o encarcelamiento. En casos extremos, los
gobiernos pueden cometer graves violaciones de derechos humanos tales como
tortura o malos tratos a personas bajo su custodia, o intentar obstaculizar el acceso a
la atención médica a los heridos.

65. Existe una variedad de buenas prácticas que pueden contribuir a tomar acciones
contra la falta de imparcialidad del Estado. Por ejemplo, las instituciones nacionales
de derechos humanos pueden llevar a cabo investigaciones sobre la imparcialidad del
Estado en una determinada instancia e informar públicamente sobre los resultados.
La Comisión de Derechos Humanos sudafricana, la Oficina del Defensor de
Derechos Humanos de Polonia y la Oficina del Ombudsman de Bulgaria informaron
que tenían una función de observación en las protestas y el establecimiento del
diálogo con las contrapartes relevantes.

28
Corte Distrital de New South Wales, Regina v. Kirkwood et al., DCZ EF-C, sentencia del 15 mayo 2002 (sin publicar), p. 5.

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66. Las decisiones adversas de autoridades administrativas que prohíben o restringen


la protesta pacífica deberían ser recurribles frente a órganos independientes e
imparciales, incluyendo cortes. Los medios de comunicación deberían poder llevar a
cabo su labor libremente y poder reportar sobre las manifestaciones sin
restricciones. Las ONG y defensores de derechos humanos tienen una función que
cumplir en la observación de las reuniones pacíficas y su supervisión policiva29, y los
observadores de misiones diplomáticas, organizaciones regionales e internacionales
también podrían cumplir una función de monitoreo de las manifestaciones cuando la
imparcialidad del Estado está en cuestión. A este respecto el Manual sobre
Observación de la Libertad de Reunión Pacífica de la OSCE/ODIHR (2011) podría
ser usado para el desarrollo de capacidades.

El rol de los medios de comunicación

67. Reporteros Sin Fronteras afirmó que los medios de comunicación cumplen una
función vital durante las protestas pacíficas promoviendo el ejercicio pleno y
efectivo del derecho de reunión pacífica. Subrayó que la cobertura mediática de las
manifestaciones y reuniones públicas representaba una de las principales razones de
exacciones contra periodistas, y notó un incrementó de agresiones contra periodistas
en 2011. Detenciones, interrogatorios o convocatorias de autoridades han sido
utilizadas para impedir el libre flujo de información, así como violencia, destrucción
de material, confiscación de grabaciones, asaltos de oficiales de medio, expulsiones
o denegación de visados.

68. Recomendó que la cobertura mediática sea reconocida como un elemento de


protección de los derechos humanos en el contexto de las protestas pacíficas; que el
derecho a la información no sea condicionado a la tenencia de una identificación o
acreditación de prensa; que los Estados respeten el derecho a la información y
reconozcan el derecho de los periodistas a tener acceso a lugares de protesta pública,
a grabar y a entrevistar; que respeten la integridad personal de los periodistas así
como SUS materiales y SUS PRINCIPIOS fundamentales, tales como la
confidencialidad de sus fuentes. Los Estados deberían prohibir la negación de la
emisión de visados o de dar acreditaciones a los periodistas, así como su expulsión;
las fuerzas policiales deberían respetar la neutralidad de los periodistas y deberían
recibir capacitación sobre normas internacionales de libertad de información y
respeto por el trabajo de los medios de comunicación durante las manifestaciones.
Además, el Estado debería combatir efectivamente la impunidad por la acción contra
los periodistas persiguiendo criminalmente de manera sistemática a aquellos
responsables de actos criminales e imponiendo medidas disciplinarias.

69. La organización ARTÍCULO 19 también subrayó el papel de los medios de


comunicación, afirmando que los ataque a periodistas y “ciudadanos periodistas”
cubriendo manifestaciones deberían ser considerados una violación del derecho a la
libertad de reunión pacífica, así como el derecho a la libertad de expresión. Citó la
resolución de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en relación a un caso
de un ataque contra un periodista (cámara) que estaba intentando filmar una
manifestación. La Corte concluyó que la difusión de información sobre tales
protestas permite a aquellos que lo ven “observar y verificar si durante la

29
Véase A/HRC/20/27, para. 50.

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manifestación los miembros de las fuerzas armadas cumplían con su deber


correctamente, con un uso apropiado de la fuerza”.30

Nuevas tecnologías

70. Las nuevas tecnologías, tales como el Internet, e-mail, mensajes de texto,
Twitter, Facebook, así como los teléfonos celulares, han cambiado la manera en la
que las personas protestan pacíficamente; desafiando las nociones tradicionales sobre
lo que constituye una protesta pacífica.31 ARTICULO 19 señaló que en el 2010, el
Secretario de Estado de los Estados Unidos de América comparó las plataformas
online con una plaza moderna donde la gente se une con el propósito de reunirse y
afirmó que el derecho a la libertad de reunión pacífica aplica a las protestas online o
electrónicas.

71. La Asociación por la Comunicación Progresiva (APC por sus siglas en inglés)
observó que las nuevas formas de protesta online no estaban adecuadamente
cubiertas por la legislación nacional y el derecho de los derechos humanos.
Legalmente permitidas, las protestas online siguen estando sin definición. APC se
refirió a los ataque distribuidos de denegaciones de servicio (distributed denial of
service, DDoS en inglés), una forma frecuentemente utilizada de protestas online.
Los ataques DDoS conllevan el flujo continuo de un sitio web por muchos usuarios
con información inútil, que puede causar la no disponibilidad del sitio web o su
desconexión por sobrecarga del servidor. APC notó que un ataque DDoS
normalmente hace que un sitio web no esté disponible por un período corto de
tiempo hasta que el ataque cesa (similar a los protestantes fuera de un edificio
bloqueando las actividades comerciales por un periodo limitado de tiempo hasta que
la protesta cesa). Tales ataques por sí solos no comprometen la seguridad de una
página o permiten el robo de información, salvo que el objetivo sea hackear y
explotar la página mientras está debilitada. Una corte alemana dictaminó que los
ataques DDoS podrían, ser considerados una forma legítima de protesta, y no un
crimen, dependiendo del propósito del ataque. APC señaló que la ley necesitaba
establecer una distinción entre los ataques DDoS con fines de protesta y los ataques
realizados por “botnets” controlados por hackers que dañan tanto los objetivos como
los dueños involuntarios de las máquinas zombie usadas en los ataques botnet. APC
declaró que las personas que usan herramientas DDoS deberían ser consideradas de
manera diferente a los que usan botnets.

Capacitación y orientación

72. Un número de Estados32 y de instituciones nacionales de Derechos humanos


indicaron que brindan capacitación en Derechos humanos a las autoridades
administrativas y/o a la policía como una medida para promover y proteger los
Derechos humanos en el contexto de protestas pacíficas.

30
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Vélez Restrepo y familia v. Colombia, Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas, sentencia
del 3 septiembre, 2012. Serie C No. 248.
31
Véase A/HRC/20/27, para. 32. El Relator Especial también subrayó que los derechos humanos en el contexto de la protesta pacífica deben aplicar en línea
y fuera de línea, y estuvo de acuerdo con el Relator Especial sobre la promoción y proteccion del derecho a la liberta de opinión y expresión en que todos los
Estados deben asegurar que el acceso al internet se mantenga en todo momento, incluyendo durante periodos de inestabilidad política, (para. 84(k)).
32
Armenia, Azerbaiyán, Bulgaria, Estonia, India, Madagascar, Mauricio, Moldavia, Montenegro, Marruecos, Rumania, Federación Rusa, Eslovenia, España
and Turquía.

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73. Azerbaiyán mencionó que sus programas de capacitación han incluido temas
como el rol de la policía durante manifestaciones, las protestas como manifestación
del principio de la democracia, la cooperación entre los organizadores y la policía,
actividad en cadena de la policía, estrategias para disminuir tensiones, manejo de
varias reuniones, manejo de desorden público masivo, regulación de carreteras y
otros lugares y respeto y protección de la dignidad humana.

74. Paraguay reportó que el Manual sobre Uso de la Fuerza, publicado por la Policía
Nacional en 2011, fue una acción importante para promover y proteger el derecho a
la protesta pacífica. Eslovenia indicó que brinda formación a la policía con el
objetivo de dar a los oficiales encargados del mantenimiento del orden público un
conocimiento avanzado de derecho constitucional y de derechos humanos,
incluyendo la protección de los derechos humanos cuando en el uso de poderes
policiales. También tiene un programa de formación llamado “conciencia sobre
estereotipos, sobrepasando prejuicios y prevención de la discriminación en una
sociedad multicultural”.

75. Turquía planteó que la “Directiva sobre procedimientos y principio relativos a la


conducta del personal a cargo durante marchas de protesta y de reuniones” fue
adoptada en 2011 con el fin de dar uniformidad a nivel nacional, en particular con
respecto al nivel de uso de fuerza para garantizar proporcionalidad.

Actividades de investigación

76. La Oficina del Comisionado para los Derechos Fundamentales de Hungría ha


desarrollado un proyecto sobre la libertad de reunión que incluye una investigación
sobre cómo los agentes del orden manejan los reportes y en qué medida las medidas
tomadas durante la ocurrencia de eventos cumplen con los requerimientos
establecidos por la Constitución y disposiciones legales aplicables. Desde su
lanzamiento, más de 150 eventos han sido investigados. La investigación encontró
que, cada vez más, las manifestaciones cruzan las fronteras nacionales y que las
tácticas de manifestación están cambiando y desarrollándose. Con base en la
conclusión de que la pericia de la policía necesitaba volverse internacional, se inició
un proyecto con 20 organizaciones socias de 11 países, incluyendo órganos de
control de orden, instituciones educativas y de investigación, la policía nacional y el
Comisionado para los Derechos Fundamentales.

V. Conclusiones

77. Las protestas pacíficas son un aspecto fundamental de una democracia


dinámica. Los Estados deben reconocer el rol positivo de cumplen estas
protestas como un medio para fortalecer los derechos humanos y la democracia.
Deben garantizar los derechos a la libertad de reunión pacífica, la libertad de
asociación y a la libertad de opinión y expresión, los cuales son componentes
esenciales de la democracia e indispensables para el goce efectivo de todos los
derechos humanos.

78. La promoción y protección de los derechos humanos en el contexto de


protestas pacíficas requiere no solo un marco legal adecuado, sino también
esfuerzo continuos para su efectiva implementación. El diálogo entre los

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organizadores de protestas, las autoridades administrativas y la policía, así


como los programas de formación para las fuerzas policiales, en particular
sobre el uso de la fuerza durante la ocurrencia de protestas, pueden contribuir
a la promoción y protección de los derechos humanos vinculados a la protesta
pacífica.

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