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POR QUÉ 

ES NECESARIO MANTENER UNA PRESA?


Pues por razones de seguridad, funcionalidad, eficiencia, ambientales,
integración, estética, por razones históricas, etc.
Para una presa es fundamental el mantenimiento de los mecanismos de los
órganos de desagüe para dar una evacuación correcta a una avenida o para
mantener el embalse por debajo de un nivel determinado, y esto exige una
atención especial en la conservación y revisión de los citados mecanismos.
También se deben mantener y conservar adecuadamente los dispositivos de
medición correspondientes (péndulos, aforadores, manómetros, etc.) para que
las observaciones y mediciones que se hacen en una presa sean correctas y se
pueda conocer su estado real.
Figura 1. Ilustración de trabajos de mantenimiento de presas.
El mantenimiento debe contemplar la fase de prevención y la fase de corrección
de las deficiencias observadas.
El mantenimiento preventivo corresponde a intervenciones planificadas
orientadas a prevenir el fallo de un equipo o estructura antes de su ocurrencia.
Para planificar esta actividad resulta de utilidad el seguimiento e interpretación
de las variables auscultadas en la presa (deformaciones, filtraciones, subpresión,
etc.)
El mantenimiento correctivo es consecuencia de las deficiencias observadas en
el preventivo. Se trata de efectuar las reparaciones necesarias para que el
funcionamiento de todos los elementos de la presa sea el adecuado.
El mantenimiento permite prever averías pasando las correspondientes
revisiones y emitiendo las instrucciones adecuadas para el buen funcionamiento
de la presa. Todo ello orientado a garantizar la seguridad de las personas y a
alargar la vida útil de la infraestructura hidráulica.
ATENCIÓN: HACE FALTA INVERSIÓN Y REPERCUTIR COSTES
Las presas que se encuentran en explotación deben cumplir unas exigencias
funcionales y de seguridad para adecuarse a las necesidades y demandas de la
sociedad. Estas exigencias implican labores de conservación, mantenimiento,
rehabilitación, etc. mantenidas en el tiempo. Entonces, dado que el
envejecimiento progresivo de las presas es una realidad ¿de dónde va a salir el
dinero para realizar el mantenimiento de las presas? ¿De los fondos propios de
las Confederaciones Hidrográficas? ¿Del Ministerio de Medio Ambiente?
Es fundamental que las presas tengan unos mantenimientos anuales y que se
asegure la continuidad de los mismos para el futuro. 

Es fundamental que las presas tengan unos


mantenimientos anuales y que se asegure la continuidad de los
mismos para el futuro
Evidentemente los Organismos de cuenca pueden acudir a sus fondos propios y
destinarlos a este fin. Y los costes se pueden repercutir en los cánones de
regulación que anualmente gestionan estos Organismos. Y todo ello en
congruencia con lo que dicta la Directiva Marco del Agua (2000) en cuanto a
recuperación de costes concierne.
El Real Decreto Legislativo 1/2001, de 20 de julio, por el que se aprueba el texto
refundido de la Ley de Aguas, en el artículo 114 canon de regulación y tarifa de
utilización del agua se cita:
“1. Los beneficiados por las obras de regulación de las aguas superficiales o
subterráneas, financiadas total o parcialmente con cargo al Estado, satisfarán
un canon de regulación destinado a compensar los costes de la inversión que
soporte la Administración estatal y atender los gastos de explotación
y conservación de tales obras.
2. Los beneficiados por otras obras hidráulicas específicas financiadas total o
parcialmente a cargo del Estado, incluidas las de corrección del deterioro del
dominio público hidráulico, derivado de su utilización, satisfarán por la
disponibilidad o uso del agua una exacción denominada «tarifa de utilización
del agua», destinada a compensar los costes de inversión que soporte la
Administración estatal y a atender a los gastos de explotación
y conservaciónde tales obras,…”
Por lo tanto, la repercusión de los costes de las inversiones y de los gastos de
explotación y conservación de las obras en los beneficiarios de una presa está
regulada en la Ley de Aguas.
Y el importe de estos cánones es, en término medio, de 0,02 €/m3 para riegos y
de 0,04 €/m3 para abastecimiento.
El volumen económico que se necesita anualmente para implantar un programa
de mantenimiento de las presas de manera sistemática y metodológica en
España es importante. Algunos autores estiman un valor medio de ejecución
material de 150.000 € al año, para cada presa, en concepto de auscultación,
mantenimiento preventivo y pequeñas reparaciones. Teniendo en consideración
las 1.350 grandes presas existentes, la cifra ascendería a algo más de 200
millones de euros anuales, que viene a ser la tercera parte de lo que se
destina al mantenimiento de carreteras. La pregunta es ¿Por qué no se hace?
En el año 2006 se realizó una estimación del valor total del agua embalsada y
gestionada a partir de grandes presas en España, y se obtuvo el siguiente
resultado:

Gráfico 1. Estimación del valor del agua embalsada y gestionada a


partir de grandes presas en España, por usos (2006). Fuente (*)
El uso hidroeléctrico contribuía con 2.312 M€, el abastecimiento con 1.740 M€ y
el riego con 546 M€, es decir, la estimación del valor total del agua embalsada
ascendía a 4.598 M€.
Las aportaciones más importantes son las correspondientes a los usos
hidroeléctricos y de abastecimiento, mientras que la correspondiente a riegos es
menor significativamente.
Comparando el valor obtenido con la anterior cantidad anual de mantenimiento
de 200 M€/año, se concluye que por cada euro invertido en el mantenimiento
de grandes presas se gestiona un producto de un valor casi 25 veces superior, a
precios de mercado de 2006.
Y puesto que está en juego la seguridad de los ciudadanos ¿qué es lo que hace
falta para destinar anualmente ese dinero a la realización del citado
mantenimiento? Pues se necesita presión social por parte de los ciudadanos, lo
cual no es fácil, ya que a diferencia del estado de conservación de las carreteras,
el estado de conservación de una presa no es tan visible para el ciudadano,
porque las presas suelen estar ubicadas en lugares poco accesibles y
transitables, y en raras ocasiones se visitan por parte del ciudadano. Y también
se necesita que desde el Ministerio y desde los Organismos de cuenca se escuche
el clamor de los técnicos que llevamos un tiempo preocupados por este tema.  

¿Qué es lo que hace falta para destinar anualmente


ese dinero a la realización del citado mantenimiento? Pues se
necesita presión social por parte de los ciudadanos
Además de esos 200 millones de euros que habría que destinar anualmente a
auscultación, mantenimiento preventivo y pequeñas reparaciones, los primeros
años se tendrá que hacer una inversión importante debido a la antigüedad de
muchas presas y a la ausencia de mantenimiento y reparaciones a lo largo de sus
años de funcionamiento.
Un programa de mantenimiento de esta entidad retrasará en el tiempo la
necesidad de grandes inversiones en reparaciones, en demoliciones, en obra
nueva, etc.

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