Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tión Pública, Regulación Económica), Ed. Comares & Fundación de Estudios de
Tión Pública, Regulación Económica), Ed. Comares & Fundación de Estudios de
I. Introducción general
Apurando el fin de milenio (si es que este tiene lugar cuando lo marcan los calenda-
rios; que quién sabe ya) aparece un espléndido libro que recoge, por así decirlo, cincuenta
años de desarrollo y conocimiento sobre Derecho público y economía. Presentado en for-
mato de tapas duras y en otra, más económica, de tapas blandas, el profesor Ariño Ortiz
con dos colaboradores nos brindan una recopilación reelaborada, repensada y reestructura-
da de diversos artículos y estudios que habían elaborado desde los años sesenta.
La perspectiva que le dan los años de aguda observación de los cambios de modelos
económicos y políticos sobre los anteriores, así como de fracasos, crisis, crashes y ciclos
económico-bursátiles, también sitúan al profesor Ariño en una atalaya privilegiada para
encarar estas cuestiones. Máxime cuando, como ya se ha dicho, ha seguido a lo largo de su
carrera atento a todas estas cuestiones tanto en el ámbito nacional como en el extranjero
(véase, para ello, sin ir más lejos, toda su bibliografía sobre cuestiones anejas a la que
ahora trata). Por eso a lo largo de toda la obra se aprecia un fino estudio de la situación
actual, así como continuas referencias empíricas que se alejan de los modelos conceptuales
cerrados en sí mismos que son tan perniciosos en el estudio económico, aunque sean idóne-
os en otras ciencias y saberes. La única crítica de carácter global que me atreverá a realizar
es que más que ante “principios” estamos ante “reglas“ o, mejor aún, ante un libro de “fun-
damentos” o, en términos puramente descriptivos de la sistemática que ha seguido, en “lec-
ciones”; pero el más idóneo hubiera sido el de “fundamentos” de Derecho público econó-
mico.
424 BIBLIOGRAFÍA
La obra se divide en veintidós intensos capítulos que comienzan con una prelección muy
interesante en la que los autores plantean al lector los retos y problemas más candentes que
ha tenido que encarar el Derecho en su cara a cara con la economía, la planificación y la
regulación económica, etc. y que ha llevado a los diversos modelos político-económicos que
hemos ido viendo a lo largo de los últimos treinta años. Desde las primeras líneas de esta
lección introductoria se aprecia el riguroso estudio que, sobre ello, hará el autor en los
siguientes capítulos. En todo caso, el autor deja bien claro que lo que a él le interesa es, espe-
cialmente, la regulación jurídico de todo ello (páginas XXXII-XXXIII y XXXVII-XLI, entre
otras).
El libro se divide, como he dicho, en capítulos, echándose en falta una división más
amplia que abarque los anteriores. Por ello y aunque el autor no ha adoptado esta fórmula
de sistematización –lo que, reitero que quizá, hubiera sido útil– el libro se puede dividir en
varias partes:
— Una quinta parte que estudia conceptual y con mayor profundidad el régimen
clásico de la actividad de servicio público y su evolución (que constituye las lecciones 15ª,
16ª y 17ª). Esta parte engarza directamente con la tercera parte, pero entiendo que el lugar
idóneo es este porque es de enorme utilidad al estudio –quizá el más conceptual, por toda
la carga dogmática que trae detrás el concepto service public– de esta parte el haber visto
antes todos los fenómenos y procedimientos puntuales que constituyen lo que he denomi-
nado cuarta parte (actuación administrativa).
III. Epílogo
Estamos, pues, ante una obra que cubre un hueco en los estudios dogmáticos sobre
economía y Derecho desde una perspectiva que trasciende el mero Derecho administrativo
para orientarse desde y hacia la teoría del Derecho, en general, con vinculaciones –por
tanto– con el Derecho constitucional y la teoría política. Los interrogantes que nos plantea
la economía en su relación con el Derecho público están en la obra y tienen una fundada
respuesta. Este libro continúa con una muy sólida y ya tradicional línea de investigación
sobre Derecho administrativo y economía iniciada, según reconocen los propios autores,
por el citado Derecho administrativo especial en cinco tomos de A. Guaita (Librería gene-
ral, Zaragoza, 1965) y por J. A. Manzanedo (Curso de Derecho administrativo económico,
IEAL, Madrid, 1970), continuada por R. Martín Mateo y F. Sosa Wagner (Derecho admi-
nistrativo económico, Pirámide, Madrid, 1977) y, poco más tarde, por la primera edición –a
la que han seguido otras– de la obra dirigida por S. Martín-Retortillo (Derecho administra-
tivo económico, 2 tomos, La Ley, 1998 y 1991, respectivamente). Estas obras magnas han
dado lugar a numerosos y puntuales estudios monográficos de muy diversos autores que,
sin agotar tan extensa cuestión, han asentado al tratamiento jurídico de estas cuestiones. Y
todo ello otorga un mayor realce al la presente obra y la convierte, como aquéllas otras, en
fundamental.
Parece necesario, a decir de los propios autores, animar a los juristas a estudiar
cuestiones económicas y viceversa, a no ignorarse mutuamente, como hasta ahora. Y así se
aprecia bien a las claras desde las primeras páginas del libro. Derecho y economía se nece-
sitan: “Ello quiere decir, no sólo que regulación y derecho se implican mutuamente, sino
también que, en ambos, la normación y la acción, la previsión y la decisión, actúan con-
juntamente al servicio del mismo fin. Este fin, es, a la vez, la eficiencia económica (promo-
vida por las poderosas fuerzas del afán de lucro, la creatividad y la libre iniciativa en sec-
tores estratégicos de la sociedad) y la justicia (el dar a cada uno lo suyo, el asegurar el
servicio universal, a un precio asequible, a todos los ciudadanos, de aquellas prestaciones
que integran el estándar de vida mínimo de un país). El resultado final de esa combinación
será diferente a la suma de las partes: ni la mentalidad jurídica, ni la económica, por sí
solas, servirás para entenderlo”, dicen los autores (vid. especialmente las págs. 5 a 33).
Por ello y pese a los ligerísimos espacios en blanco que quedan por cubrir, sobre
todo en lo que se refiere a lo que he denominado parte especial de este libro (que bien
podría constituir un segundo tomo en posteriores ediciones) y a posibles discrepancias en
cuanto a la sistemática o a alguna de las ideas vertidas, estamos ante un libro necesario. No
interesante, ni curioso, ni instructivo, que también; sino de lectura y consulta necesaria. Es
un libro que conviene tener para manejarlo y estudiarlo con profundidad.
gasto público, y la evolución en el concepto de estado social, etc. La profundidad con que
se atacan estas cuestiones desde todos los frentes y líneas hacen, de este estudio, un trabajo
–reitero– de obligada consulta por propios y ajenos. Además, el libro es ameno, sugerente
y, excepto en puntos muy técnicos, su lectura se hace fácil. Casi podría decirse que, como
esos clásicos de la literatura de gran contenido y continente, pese a ese aparente esfuerzo
que requieren para su lectura, logran “enganchar” al lector. ¿Qué más se le puede pedir a
libro técnico, y además de Derecho administrativo? Sinceramente, no sabría decirlo.