Tiempo de

Cu a re s m a
En clave de Lectio - Ciclo B
TIEMPO DE CUARESMA
En clave de Lectio. Ciclo B

Autor: ©Leopoldo Óscar Falcón G.

Primera edición – Febrero 2021

Coordinación editorial: Víctor Pérez Palacios

Diseño de cubierta y diagramación: Elda Julissa Chau Bérninzon
Fotografía de carátula: Shutterstock
Fotos de interiores: Pixabay, Pexels, Pinterest

Edición a cargo:
Asociación Librería Editorial Salesiana
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el sistema de fotocopiado, sin autorización escrita del autor y de la Aso-
ciación Librería Editorial Salesiana, quedando protegidos los derechos de
propiedad intelectual y de autoría por la legislación peruana.
 Índice
Presentación................................................ 5
I. La Cuaresma
1. El desarrollo histórico de la Cuaresma......... 7
2. El significado actual de la Cuaresma........... 9
3. La relación con la Pascua........................... 11
4. El contenido del Evangelio del Ciclo B......... 11
5. Los signos para vivir la Cuaresma............... 11
1. La ceniza............................................ 12
2. El ayuno y la abstinencia..................... 13
3.Acoger la cruz y el sufrimiento............. 13
4. La oración......................................... 14
5. Práctica la limosna............................. 14
6. Los Ejercicios Espirituales................... 15
7. Mi itinerario cuaresmal........................ 16
Lecturas Dominicales de la Cuaresma........... 18
Lecturas Diarias de la Cuaresma................... 19
Oración del Penitente................................... 21
II. Meditaciones bíblicas diarias.................... 23
◆ Cinco meditaciones que fortalecieron
mi fe en esta Cuaresma....................... 24
◆ Meditaciones de las 5 semanas............ 25
◆ Celebración penitencial........................76
◆ Oración conclusiva............................. 80
◆ Decálogo de la conversión cuaresmal.... 81
Bibliografía................................................. 83
Links......................................................... 84
 Presentación

El presente folleto ha sido elaborado para

que tú puedas vivir una autentica Cuaresma
cristiana como respuesta a la invitación de con-
versión que te propone el Señor Jesús.
Nos acercamos a vivir un “tiempo fuerte” de
40 días de conversión sincera para después vi-
vir el Tiempo Pascual y finalmente transcurrir
siete semanas de gozo para la final recibir los
dones del Espíritu Santo para este Año 2021.
La Cuaresma es un tiempo para escuchar la
Palabra de Dios y asumirla para convertir nues-
tro corazón más a Dios. En este tiempo recor-
daremos nuestro Bautismo por el que afianza-
mos nuestra fe, viviremos el Sacramento de la
Reconciliación para sentir la paz en nuestro co-
razón, ejercitaremos las prácticas de la oración,
el ayuno y la limosna para sentirnos más unidos
como familia y como cristianos.

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 No es un tiempo triste, es una oportunidad
para purificar y renovar nuestra fe que a veces
se adormece y cae en la rutina, el desinterés.
Te invitamos a dejar de lado las actitudes pa-
sivas y distractoras para que tomes con respon-
sabilidad tu camino de conversión y acojamos la
“gracia de Dios”, que es el regalo más precioso
que un cristiano puede recibir en este tiempo
cuaresmal. Deseamos que logres ser feliz con
esa gracia de Dios que te trae felicidad.
En el horizonte de este camino o itinerario
espiritual te espera la Luz pascual de Jesús, que
se presenta victorioso sobre la muerte en la Re-
surrección.
P. Leopoldo Falcón

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 La Cuaresma

1. El desarrollo histórico de la Cuaresma.

La cuaresma tiene una prehistoria y una his-
toria. Desde el siglo II existieron testimonios de
una preparación con un ayuno por la ausencia
del Esposo Cristo que duraba una semana en la
que se ayunaba, pues era una especie de asce-
sis. En Roma a partir del S. III ésta preparación
duraba 3 semanas.
El nacimiento de la historia de la Cuaresma
inicia el siglo IV según el testimonio de Eusebio.
En el año 385 la Cuaresma se alargó en Roma a
6 semanas. En el siglo V los ayunos del miérco-
les y viernes anteriores a ese domingo cobra-
ron gran relieve. En tiempos de San León Magno
(440-461) se añadieron a los lunes. Con Grego-
rio II se completaron los ayunos durante toda la
semana.
La Cuaresma tenía un triple componente: La
preparación pascual de la comunidad cristiana,
el catecumenado y la penitencia.

7
 La preparación era un retiro espíritu colec-
tivo de cuarenta días donde la Iglesia proponía
a sus fieles la vida de Cristo, tratando de imitar
sus virtudes.
El catecumenado comprendía tres años de
preparación donde los oyentes (audientes) re-
cibían una profunda formación doctrinal y se
iniciaba a la vida cristiana. Unos días antes de
la Vigilia Pascual el grupo de elegidos recibía el
Bautismo.
A partir del S.VII desapareció esta práctica
bautismal y se reorganizó. Ya se redujeron los
escrutinios (momento importante para aceptar

8
a los candidatos al bautismo). Y estos se desli-
garon de la liturgia cuaresmal.
La penitencia canónica. Era la reconciliación
de los penitentes sometidos a la pena canónica
que se asoció al Jueves Santo. Es decir, todos se
preparaban a la confesión de sus pecados para
participar al Cena del Señor, el Jueves Santo.
Este periodo era acompañado de un itinera-
rio penitencial con severas prácticas de peni-
tencia corporales y momentos de oración muy
intensos de Conversión” y vivir más cristiana-
mente la Semana Santa. Para darle un inicio
muy significativo se imponía la ceniza en la fren-
te del creyente, que indican su proceso de con-
versión y vivir la misericordia de Dios.
2. El significado actual de la Cuaresma
El Concilio Vaticano II (1965) trajo la Reno-
vación de la Iglesia en el mundo actual. Los Pa-
pas Juan XXIII y Pablo VI impulsaron esta reno-
vación para renovar la fe cristiana de los fieles.
(1962-1965).
El Documento sobre la Liturgia SC. nos pre-
cisa la preparación de la Cuaresma en los núme-
ros 109-110 y nos afirma que:
n. 109. El tiempo cuaresmal prepa-
ra a los fieles, entregados a oír la

9
 palabra de Dios y a la oración, que
celebran el misterio pascual, la pre-
paración del bautismo y mediante la
penitencia, dése particular relieve en
la Liturgia y en la catequesis litúrgica
al doble carácter de dicho tiempo
a) Usando los elementos bautismales pro-
pios de la Liturgia cuaresmal.
b) De igual modo los elementos penitencia-
les.
Y en cuanto a la catequesis, incúlquese a los
fieles, junto con las consecuencias que es ofen-
sa de Dios.
n. 110. La penitencia del tiempo cua-
resmal no debe ser sólo interna e in-
dividual, sino también externa y so-
cial. Foméntese de acuerdo con las
posibilidades de nuestro tiempo y de
los diversos países y condiciones de
los fieles
Téngase como sagrado el ayuno pascual; ha
de celebrarse en todas partes el Viernes de la Pa-
sión y Muerte del Señor y aún extenderse, según
las circunstancias, al Sábado Santo, para que de
este modo se llegue al gozo del Domingo de Re-
surrección con ánimo elevado y entusiasta.

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3. La relación con la Pascua
La celebración de la Pascua es la meta a la
que tiene que llegar la Cuaresma, el núcleo hacia
el cual convergen todas las direcciones e inten-
ciones y así se regula su dinamismo. La iglesia
desea ver a sus fieles más comprometidos con
su fe y hacer de la Pascua su centro de fe y es-
peranza.
En esta participación maduramos nuestro
Bautismo, la Penitencia, o Reconciliación, mu-
riendo al “hombre viejo”, y la Eucaristía, porque
reactualizamos el misterio de la Muerte y Resu-
rrección de Cristo, que nos ayuda a vivir los sa-
cramentos de la fe a plenitud.
4. El contenido del Evangelio del Ciclo B
Una dimensión muy importante es seguir el
itinerario de las lecturas del Evangelio y del AT
y del NT del Ciclo litúrgico B, porque a través de
él se da la catequesis sacramental, sea con los 5
domingos o las lecturas diarias.
5. Los signos para vivir la Cuaresma
La Cuaresma nos ofrece signos y símbolos
que nos hacen vivir con intensidad este tiempo
litúrgico y espiritual.

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1. La ceniza
Ella nos indica nuestra condición humana tan
limitada y corruptible. Nos hace comprender
que la llamada a la existencia no es en nosotros
mismo, sino en Cristo Salvador, que venció la
corrupción del cuerpo y la muerte. Cristo es la
medicina de la inmortalidad.
La ceniza que Dios me propone es:
1. No gloriarme y poner mis cualidades en
favor de otros.
2. Nos creer que soy dueño de muchos bie-
nes, sino un simple administrador.
3. Apreciar el valor de las personas y las rea-
lidades sencillas.
4. No temer a la muerte.

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2. El ayuno y la Abstinencia
Es un signo de austeridad. Podemos comer lo
suficiente y abstenernos de comer carne. Lo im-
portante es el espíritu y dejar la materialidad de
las cosas. Nos hace más libres y más solidarios.
Superemos los apegos y vicios que circundan el
diario vivir.
El ayuno y la abstinencia quiere decir:
1. No ser esclavo del consumismo, del placer
y del poder.
2. No perder el tiempo en mirar TV o videos,
asistir a reuniones para controlar tus sen-
saciones.
3. Acercarse a personas que son margina-
das, excluidas mostrando tu generosidad.
3. Acoger la cruz y el sufrimiento
La vida tiene sus problemas y situaciones
muy adversas. El cristiano sabe llevar adelante
esas situaciones de dolo y sufrimiento aceptan-
do esa cruz o cruces del camino de nuestra vida.
No todo es dolor y humillación, Jesús ha vencido
el dolor y la muerte, él ha venido para salvarnos,
ser valientes en la vida, no retraerse ante ellos.
La cruz de Cristo nos pide:

13
 1. Conducir bien las dificultades y sinsabores
de cada día
2. Aceptar el dolor, el desencanto y los fra-
casos
3. Compartir la cruz con tus hermanos, no
poner la cruz a otros.
4. Buscar momentos de oración con Dios
4. La oración
La oración es la vida del alma, una necesidad
permanente. En la cuaresma es propicio inten-
sificarla con la escucha de la Palabra de Dios.
El ejemplo nos lo dio Jesús al retirarse a solas a
orar. La oración que Dios nos anima realizar es…
1. hacerla en la intimidad y de modo conti-
nuo.
2. Invocar en Espíritu y verdad.
3. Iniciarla nombrando a Dios como Padre.
4. Aprendiendo a escuchar a Dios en el silen-
cio.
5. Practicar la limosna
Se practica la limosna porque es fruto de la
misericordia. Caminar hacia Cristo implica un
caminar hacia los hermanos, con preferencia a
los más necesitados y excluidos. Cristiano es

14
aquel que abre y da la mano para compartir y
ayudar a otros.
La limosna consiste en:
1. Realizar un verdadero compartir con el
necesitado
2. Demostrar ser humilde con el pobre que
te pide algo.
3. Ayudar al pobre para que satisfaga su ne-
cesidad y él ayude a otros para que supe-
ren sus situaciones y dejen de ser pobres.
4. Que veas en el pobre a Jesucristo, quien
fue solidario con ellos.
5. Participar en unos días de retiro espiritual.
6. Los Ejercicios Espirituales
Durante la Cuaresma muchas casas de Reti-
ro y parroquias ofrecen este servicio espiritual.
Es un modo de imitar la decisión que tomo Jesús
de ir a orar y encontrase a solas con Dios su Pa-
dre.
Los ejercicios espirituales permiten:
1. Lograr días de silencio, oración y paz para
mi vida.
2. Dispongo de tiempo para escuchar la Pa-
labra Dios.

15
 3. Puedo pedir luces para reorientar mi vida
con un sacerdote.
4. Recibir el perdón de Dios y su gran miseri-
cordia.
7. Mi itinerario cuaresmal
Para empezar mi Itinerario Cuaresmal debo
acoger mi condición de discípulo y seguir a Je-
sús, que será mi Maestro.
Este camino no es una autopista sino un ca-
mino de exigencia que me exige claridad en mis
propósitos, valentía en las determinaciones que
asumiré al andarlo.
Se dice que caminando aprendemos a en-
contrar un sendero, si nos quedamos quietos no
logramos nada. Animémonos a cambiar con Je-
sús con todo un corazón generoso.
Que él nos conozca a plenitud, con nuestras
torpezas, errores y debilidades. Él así nos ama
con todo lo que somos. Ayúdanos Jesús en esta
experiencia que traerá luz a mi vida.

16
 05
La entrega de Jesús
como grano de trigo.

04
Nicodemo busca a
Jesús para hablar de
Dios.

03
El templo es lugar de
oración y de alabanza.

02
Jesús es luz para mi
vida y misión.

01
Mi conversión es
Mi signo de superar toda tentación.
Inicio es
disponerme
a caminar
con Dios.
 Domingos Los temas del itinerario dominical
Miércoles de Inicio de la Cuaresma
Ceniza Si quieres seguirme toma tu cruz
17 Feb Joel 2, 12-18; Sal 50;
2° Co 5, 20-6,2.
Mt 6, 1-6. 16-18.
1° Domingo Las tentaciones de Jesús
Cuaresma El desierto
21 Feb Gn 9,8-15; Sal 2; 1° Pe 3, 18-22.
Mc 4, 12-15.
2° Domingo La transfiguración de Jesús
Cuaresma Él se revela como Hijo de Dios
28 Feb Gn 22, 1-2.9-23.15-1 Sal 115.
Rm 8, 31 b-34.
Mc 9, 2-10.
3° Domingo Jesús arroja a los vendedores
Cuaresma El templo es lugar de oración
7 Mar Ex 20, 1-17.; Sal 18; 1° Co ,22-25.
Jn 2, 13-25.
4° Domingo Jesús vino para salvarnos
Cuaresma Nicodemo conversa con Jesús
14 Mar 2° Cro 36, 14-16-19-23;
Sal 136; Ef 2, 4-10.
Jn 3, 14-21.
5° Domingo Jesús va a Jerusalén a la Pascua
Cuaresma Si el grano de trigo no muere
21 Mar no da mucho fruto
Ez 31, 31-34; al 50; Hb 5, 7-9
Jn 12.20-33.

18
 1a Semana 2ª Semana 3ª Semana
Febrero
Febrero Febrero Febrero
Lunes 22 Lunes 1 Lunes 8
1Pe 5,1-4 Dn 9, 4b-10 2R 5,1-15ª
Sal 22 Salmo 78 Salmo 41
Mt 16, 13-19 Lc 6, 36-38 Lc 4, 24-30
Martes 23 Martes 2 Martes 9
Is 5, 10-11 Is 1,10.16-20 Dn 3, 25
Sal 33 Salmo 49 Salmo 24
Mt 6, 7-15 Mt 23, 1-12 Mt 18, 21-35
Miércoles 17 Miércoles 24 Miércoles 3 Miércoles 10
Jl 2,12-18. Jon 3, 1-10 Jr 18,18-20 Dt 4, 1.5-9
Sal 50 Salmo 50 Salmo 30 Salmo 147
2Co 5,20- Mt, 6, 7-15 Mt 20, 17-28 Mt 5, 17-19
6,2
Mt 6,1-6.16-
18
Jueves 18 Jueves 25 Jueves 4 Jueves 11
Dt 30, 15-20 Ester 14, 1. Jr 17, 5-10 Jr 7, 23-28
Sal 1 3-5. 12-14 Salmo 1 Salmo 94
Lc 9,22-25 Salmo 137 Lc 16, 19-31 Lc 11, 14-23
Mt 7, 7-12
Viernes 19 Viernes 26 Viernes 5 Viernes 12
Is 58, 1-9ª Ez 18, 21-28 Gn 37, 3-4. Os 14,2-10
Salmo 50 Salmo 129 12-13ª.17-28 Salmo 80
Mt 9, 14-16 Mt 5,20-26 Salmo 104 Mc 12, 28b-
Mt 21, 33-43 34
Sábado 20 Sábado 27 Sábado 6 Sábado 13
Is 58, 9b.-14 Dt 26, 16-19 Mi 7, 14-15, 18 Os 6, 1b-6
Salmo 85 Salmo 118 Salmo 102 Salmo 50
Lc 5,27-32 Mt 5, 43-48 Lc15, 1-2. Lc 18, 9-14
11-31

19
 4ª Semana 5ª Semana Semana Santa
Marzo Marzo Marzo/Abril
Lunes 15 Lunes 22 Lunes 29
Is 65, 17-21 Dn 13, 1-9.15-17 Is 42, 1-7
Salmo 29 Salmo 101 Salmo 26
Jn 4, 43-54 Jn 8, 1-11 Jn 12, 1-11
Martes 16 Martes 23 Martes 30
Ez 47, 1-9.12 Nm 21, 4-9 Is 49, 1-6
Salmo 29 Salmo 101 Salmo 70
Jn 5, 1-3. 5-16 Jn 8, 21-30 Jn 133, 21-33.
36-38
Miércoles 17 Miércoles24 Miércoles 31
Is 49, 8.15 Dn 3, 14-20. Is 50, 4-9a
Salmo 144 91-92. 95 Salmo 68
Jn 5, 17-30 Sal.Dn 3, 52-56 Mt 26, 14-38
Jn 8, 31-42
Jueves 18 Jueves 25 Triduo Pascual
Ex 32, 7-14 Is 7, 10-14; 8. 10 Jueves Santo
Salmo 105 Salmo 39
Jn 5, 31-47 Hb 10, 4-10
Lc 1, 26-38
Viernes 19 Viernes 26 Viernes Santo
2 Sam 7, 4-5. Jr 20, 10-13
12-14ª. 24ª Salmo 17
Mt 1, 16. 18-21. 24ª Jn 10, 31-42
Sábado 20 Sábado 27 Sábado Santo
Jr 1, 18-20 Ez 37, 21-28
Salmo 7 Salmo Jr 31,
Jn 7, 40-53 Jn 11, 45-57

20
 Oracion del Penitente
¡Señor, no permitas que haga como
hizo San Pedro que te siguió de lejos
sin comprometerse! ¡Hazme enten-
der, Señor, que al igual que él pos-
teriormente solo es posible seguirte
manteniéndome cerca de Ti sin mie-
do a las consecuencias!

¡Ayúdame, Señor, por medio de tu

Espíritu a levantarme cada vez que
caigo, a no aislarme en mi yo cuando
la culpa y la tristeza me embarguen
por mis faltas, a acudir a ti en el sa-
cramento de la reconciliación para

21
 limpiar mis culpas, a creer siempre
en tu Palabra!
¡Señor, por medio de tu Santo Es-
píritu, no permitas que me obstine
en el gozo del pecado, no permitas
que ame más las tinieblas que la luz,
no permitas que me acomode en
mis faltas; que cada vez que falle mi
arrepentimiento vaya unido a la tris-
teza por haberte ofendido! ¡Dame el
firme propósito de no volver a pecar,
de dejar lo malo que hay en mí y tra-
tar siempre de hacer el bien,
¡Ayúdame a cambiar el corazón, a
cambiar mi voluntad, a cambiar mis
sentimientos, a cambiar mi actitud
hacia el pecado me acerquen más a
Ti y a los demás!

22
II. Meditaciones Diarias
de la Cuaresma

23
 Cinco meditaciones que
fortalecieron mi fe en esta Cuaresma

24
Miércoles de Ceniza
Miércoles 17 de febrero
El Profeta Joel 2, 12-18
Joel fue un profeta del Post-Exilio que ac-
tuó en el siglo VIII a.C. nos anuncia que el pue-
blo será invadido por un reino vecino porque el
pueblo se ha mostrado infiel y pecador, se alejó
de Dios. El hace una invitación a la conversión y
penitencia. El profeta invita al pueblo de Israel
a cambiar sus actitudes interiores. Lo expresa
con la frase: no basta rasgarse las vestiduras
sino debe “arrancar el corazón que tiene actitu-
des perversas, se ha alejado de la relación con
Dios”.
La situación de catástrofe que ha vivido
el país con una terrible plaga de langostas ha
arruinado la agricultura del país. Esa plaga se
convirtió en un ejército que asaltó y conquistó la
ciudad. Esta situación pedía una expiación, era
necesario purificar el corazón de creyentes, con
ayuno y oración, que el pueblo inició.
Al iniciar nuestra cuaresma podemos cam-
biar la negatividad, que daña el corazón del cris-
tiano, e iniciar con buen pie este camino de con-
versión.

25
Salmo 50, 3-6. 12-13.14 y 17.
Misericordia Señor hemos pecado contra ti.
2ª Carta a los Corintios 5, 20-6, 2
Timoteo, colaborador de Pablo realizó una
visita a la Comunidad de Corinto. Él ya no ob-
servó la vida cristiana que Pablo había iniciado
muy bien. Pablo que estaba en Éfeso deber ir
regresar a Corinto. Él fue mal recibido, fue insul-
tado y regresó a Éfeso. insiste en la Reconcilia-
ción con Dios. Si hemos tenido reveses, fatiga,
desilusión en nuestra vida, regresemos a Dios
para recuperar la vida y nuestra fe. Es muy ne-
cesario reemprender un camino gozoso con Él.
Evangelio de Mateo 6, 1-6.16-18
Muchas religiones o sectas tienen normas
que regulan el ayuno, la oración y la limosna.
Ellas, cuando se legalizan van perdiendo su fon-
do espiritual que las convierte en rutina
Mateo intentó clarificarlas y exponerlas para
practicarlas con el espíritu evangélico, como
criterios para discernir con mejor acierto la vo-
luntad de Dios en nuestras vidas.
Las 3 principales obligaciones de purificación
de los fariseos eran: dar limosna, hacer oración
y practicar el ayuno. Hoy adquieren un mejor
sentido evangélico porque él lo vivió y nos invita
a hacerlo hoy con tres criterios de vida:
1) La limosna es dada con discreción sin ha-
cer propaganda, o ganar prestigio, o tener
“ranking” de popularidad ante los demás.
2) La oración evita la hipocresía y es realiza-
da en lo secreto y con pocas palabras, en
silencio para que Dios te hable como a un
hijo al corazón. Evitemos la notoriedad al
orar.
3) El ayuno no debe ser dramatizado para
ser visto, desfigurando nuestro cuerpo o
realizando caravanas o exhibicionismo. El
ayuno es una actitud interior y da un olor
fresco a tu vida.
Iniciemos esta cuaresma con actitudes y sig-
nos de conversión que nos indica Joel y Mateo,

27
Jueves 18 de febrero
Deuteronomio 30, 15-20
Estamos ante una exhortación catequética
que invita a reconducir nuestra vida de creyen-
tes. La debemos lograr con una opción de vida.
Se nos presenta dos caminos a seguir ¿Cuál
camino eliges? En los tiempos apostólicos, los
nuevos creyentes debían hacer una opción por
Cristo. Optar sea por el camino de la vida, de la
felicidad, o el de la muerte o la desgracia. Es el
desafío actual de cristiano, es un llamado a ele-
gir uno de los dos caminos.
Salmo 1, 1-2. 2. 4. y 6.
Dichoso el hombre que ha puesto su confian-
za en el Señor
Evangelio de Lucas 9, 22-25
Lucas nos ubica frente al primer Anuncio de
la Pasión de Jesús que es el Cap 9 de su Evan-
gelio. Jesús pasa a exponer el destino que va a
tener su vida en un futuro cercano. Él sufrirá la
pasión, el hijo del Hombre, tendrá sufrimiento,
rechazo, morirá y resucitará. El verdadero dis-
cípulo deberá asumir esta “pasión” para hacer
fructífero su amor

28
Viernes 19 de febrero
El profeta Isaías 58, 1-9
El libro del Profeta Isaías nos propone como
debe vivirse el verdadero ayuno que es un valor
muy positivo en la vida del creyente, existe el
riesgo de ser vivido solo como un rito El verda-
dero ayuno es una privación que puede trans-
formarse en una acción solidaria en favor de
personas necesitadas. Esta actitud conduce a
evitar los egoísmos, las injusticias Tu obra bue-
na sincera, repara y da alimento de fe.
Salmo 50. 3-6. 12-13.14 y 17.
Mi sacrificio Señor es un corazón arrepentido
Evangelio de Mateo 9, 14-15
Mateo nos presenta la pregunta acuciosa de
los discípulos de Juan sobre el ayuno. ¿Tus dis-
cípulos no ayunan? Jesús les responde que son
los invitados a las bodas. Jesús mismo lo practi-
có durante 40 días. Él les deja libertad a sus dis-
cípulos. Cuando ya no esté y morirá el novio los
discípulos podrán ayunar.

29
Sábado20 de febrero
El Profeta Isaías 58, 9b-14
El verdadero ayuno es una respuesta para
eliminar actitudes de opresión, acusaciones
y calumnias y ser capaz de ser solidario. Así tu
vida recobrará luz y testimonio. Tu vida adquiri-
rá frescura como la de un “huerto regado”, lleno
de buenas acciones. Vivir de ese modo es más
gratificante y solidario,
Salmo 85, 1-2. 3-4. 5-6.
Enséñame Señor tus caminos
Evangelio de Lucas 5, 27-32
Jesús llama como discípulo a un recaudador
de impuestos, que pertenece al mundo econó-
mico, considerado por la mentalidad “un peca-
dor”.
La verdadera conversión hoy, de una comu-
nidad cristiana, puede invitar a muchos “peca-
dores” del mundo financiero a poder convertirse
y reproponer una solidaridad.

30
Domingo 21 de febrero
1° Domingo de Cuaresma
Génesis 9, 8-15
Al ser humano le es dado algo que no poseen
otras criaturas de la Creación, es la imagen y se-
mejanza con Dios (1,26) que empieza a perfilar-
se desde el momento que Dios ¿sopló su alien-
to sobre él y plantó un jardín (2,7-8). Si bien fue
creado con inocencia, gracia y de perfección, la
primera pareja perdió el estado original.
Dios tenía un proyecto perfecto, el hombre y
la mujer lo desmontaron con su pecado. La es-
cena muestra a la mujer y la serpiente mirando
el árbol de la ciencia del bien y el mal. La tenta-
dora no es la mujer sino la serpiente y la seduc-
ción proviene del fruto. La mujer hará participe
del fruto al hombre. El árbol de la ciencia ocupa
entonces el lugar central del relato. Ellos son in-
vitados a recorrer el camino del mal y pecaron.
Salmo 24, 4-5. 6-7. 8.9.
Misericordia Señor hemos pecado
1ra Carta de Pedro 3, 18-19.
Pedro compara a Adán con Cristo. Pablo eje-
cuta su método de antítesis y el contraste. La
humanidad pecadora representa el mal y tiene
su origen en Adán con ese primer pecado. Lue-

31
go presenta a Cristo que trae la superabundan-
cia del don y del Jesucristo (v. 15). La gracia rei-
nará con Él.
Evangelio de Marcos 1, 12-15.
Marcos llama a las tentaciones de Jesús, las
“pruebas”. Él expone la confrontación de Jesús
con el enemigo, cuya presencia será continua
que desea obstruir el plan de Dios.
Las tentaciones son lecciones de vida.
1. Jesús se prepara
Antes de su predicación, el Maestro se pre-
para con oración y ayuno. En el desierto pasa
40 días rezando a su Padre, pasando penurias
y hambre. Al inicio de su misión será tentado.
Satanás buscó el momento oportuno. Jesús se
hizo tan semejante a los hombres que también
tuvo que luchar y sufrir para mantenerse fiel a
Dios. El Señor usó dos medios: la oración y la
renuncia a los bienes.
2. Satanás aprovecha nuestra debilidad
Las tentaciones vienen de este ángel caído.
Satanás fue muy listo, y las realizó en el momen-
to justo y del modo más atractivo. Le propone
convertir las piedras en panes justo ahora, des-
pués de 40 días de ayuno, cuando estaría muer-
to de hambre. Satanás es astuto, presenta las

32
cosas de modo atractivo. Jesús ha venido a re-
dimir al mundo, de un modo fácil, con éxito se-
guro.
3. ¿Cómo vencerle?
Jesús nos muestra el camino para superar
la tentación. Tiene clara su misión, la voluntad
del Padre sobre cómo realizar la redención del
mundo, y eso es materia no negociable. Nada le
va a desviar su mirada del fin y del camino que
debe seguir.
Esta voluntad firme y férrea, le ayuda por-
que se apoya firmemente en su Padre. A las tres
tentaciones responde con palabras de la Escri-
tura. Vivimos hoy en el siglo XXI con muchas si-
tuaciones tentadoras que nos alejan de los ver-
daderos objetivos cristianos e ideales humanos.
Seamos fuertes.

33
Lunes 22 de febrero
La Cátedra de San Pedro
1° Carta de Pedro 5, 1-4
Pedro se dirige a los responsables de las co-
munidades (“ancianos”), a quienes considera
como colegas. Les exhorta a realizar su misión
con responsabilidad, con buena gana, generosi-
dad, sin ambición, sin ser autoritario, y ejempla-
res “pastores”.
Salmo 22, 1-6
El Señor es mi pastor nada me falta
Mateo 16, 13-19
Es un texto bien elaborado que lo podemos
llamar “un pensado sondeo de opinión” que rea-
liza Jesús a sus propios discípulos. Fue un inte-
rrogatorio abierto. Jesús deseaba certificar la
verdadera adhesión de sus seguidores princi-
pales. Además, saber la opinión de la gente y la
comprensión y vivencia de su mensaje de salva-
ción. Hoy puedes tú y tu familia hacer el mismo
sondeo, con sentido más actual. ¿Cómo ha cre-
cido tu fe, y la fe de tu familia?’
Martes 23 de febrero
El Profeta Isaías 55, 10-11
Después del 4° Poema de Isaías se nos pre-
senta una invitación a la conversión que en si es
un breve canto a la fecundidad y eficacia de la
Palabra de Dios. en tu vida. Él toma la compara-
ción de la tierra que con la lluvia hace germinar
lo sembrado, que es la Palabra y fructifica.
Salmo 33, 4-5. 6-7. 16-17. 18-19.
El Señor libra de sus angustias a los justos
Evangelio de Mateo 6, 7-15
Nuestra conversión en la cuaresma, es la
oración, la cual debe evitar la “palabrería” con
Dios. Él ya sabe lo que necesitamos. Mateo nos
propone orar el Padre Nuestro que debe con-
vertirse en escuela de oración. No es una ora-
ción que se repite de memoria, por el contrario,
hay que detenerse en cada frase para reflexio-
nar y profundizar el amor de Dios. Ella es una
escuela de oración cada vez que la profundiza-
mos en su contenido.

35
Miércoles 24 de febrero
El Profeta Jonás 3, 1-10
Este pequeño libro fue escrito en el siglo V a.
C. Es una pequeña historia moralizante. Se pa-
rece a las parábolas del Hijo Prodigo y los traba-
jadores de la viña. Jonás representa al creyen-
te que no admite la posibilidad de que Dios sea
bueno con los que no se convierten. Jonás se
rebela a ir a convertir a la ciudad de Nínive con
el anuncio de Dios. El mensaje de Dios triunfa y
es creíble.
Salmo 50, 3-6. 12-13.14 y 17.
Misericordia Señor hemos pecado
Evangelio de Lucas 11, 29-32
El gentío interpela a Jesús. Su respuesta les
deja mal parados porque expone que Nínive se
convirtió con la predicación de Jonás. Esta con-
versión a la Palabra penetra las mentes contra-
rias y los corazones muy cerrados. La petición
de milagros puede alimentar solo curiosidad,
expectativas, y no suscitar la fe. La luz de Jesús
y su Palabra vence las tinieblas.
Jueves 25 de febrero
El libro de Esther 4, 1.3-5.12-14
Los judíos que vivían en Palestina y en el ex-
terior sufrían persecución. En esta situación se
hizo difícil mantener la esperanza. Los perso-
najes de este libro intentan mantener su fe en
la providencia divina. La ofrenda de un oferente
suscita la paz. Mardoqueo (esposo de Esther)
se vistió de luto y cubierto de ceniza salió por la
ciudad gritando: un pueblo inocente va a ser ex-
terminado.
Salmo 137, 1-2ª, 3bc-y 3.7c-8.
Cuando te invoqué, me escuchaste
Evangelio de Mateo 7, 7-12 Señor
Mateo expone la “regla de oro”, que nos dis-
pone a la actitud de oración. Para recibir un don
debe preceder la petición, que debemos en-
tender como una búsqueda comprometida del
Reino de Dios, con actitudes concretas: pidan,
busquen, llamen. Él no es sordo a nuestras pe-
ticiones, nos ha salvado del peligro tantas veces
en nuestra vida.

37
Viernes 26 de febrero
Ezequiel 18, 21-28
El profeta retoma el tema sobre la responsa-
bilidad individual. Si bien el presente mal es con-
secuencia de nuestros antepasados que peca-
ron, servía de excusa para echar la culpa de su
triste situación a sus predecesores. En el cap. 14
Ezequiel les aclara su responsabilidad personal
a los excluidos.
Salmo 129, 1-2. 3-4. 5-7ª.-8.
Si llevas cuentas de los delitos Señor
¿Quién podrá resistir?
Evangelio de Mateo 5, 20-26
La interpretación de la ley había caído en la
trampa del mínimo esfuerzo para cumplir la ley.
Jesús nos propone desde dentro, con una re-
lación más personal con el Padre. Jesús recon-
duce los mandamientos a su raíz buscando el
objetivo propuesto por Dios: servir a la vida, a
la justicia, al amor, a la verdad, con una mayor
toma de conciencia. el respeto sagrado a la per-
sona.

38
Sábado 27 de febrero
Deuteronomio 26, 16-19
Es la “Conclusión” del
2do discurso de Moisés y
se proclama la fórmula de
la Alianza. Esto significa
que Israel se comprome-
te a ser el pueblo de Dios
y el Señor será el Dios de
Israel. Fue un compromiso formal para vivir en
plenitud la mutua fidelidad. Tú estás llamado a
hacer más evidente tu fidelidad al Señor.
Salmo 118, 1-2. 4-5. 7-8.
Dichoso el que camina en la voluntad del Señor
Evangelio de Mateo 5, 43-48
La actitud de enemistad fue compañera de
la vida de todo judío. Jesús la enfrenta en esta
escena Jesús, va directo a señalar lo que pro-
clamaba el Levítico 19, 18 como una actitud de
no imitar y más bien superarla. No te rodees de
enemigos e inicia una paz con ellos. Y serás un
digno hijo de Dios porque amarás a muchas per-
sonas.
La sociedad actual hace una inmensa propa-
ganda al egoísmo. En especial la gente joven se
ve tentada de seguirlo y opta por este camino.

39
2°. Domingo de Cuaresma
Domingo 28 de febrero
Génesis 22, 1–2. 9-13.15-18
En este texto se narra la vocación de Abram.
Dios llama y su llamado pone en acción al elegi-
do. Su vida adquiere otra dimensión. En él nota-
mos:
1) Dios hace una orden, salir de su tierra.
2) Abraham obedece a este mandato.
3) Se desplaza a una nueva tierra.
Este desplazamiento será definitivo y Abra-
ham ira a la cumplir la Promesa de Dios. En
nuestra vida la vocación recibida y acogida, nos
ha impulsado a recorrer las nuevas etapas de
nuestra vida. Nos sentimos comprometidos con
nuestra vocación.
Salmo 115, 10 y 15.16-17. 18-19.
Caminaré en presencia del Señor
Carta a los Romanos 8, 31b-34.
Pablo cierra el c. 8 de su carta con canto
triunfal del amor de Dios a nosotros. Él mismo
lo experimentó. A pesar de sus muchas dificul-
tades el salió siempre victorioso. Dios estuvo de
su lado.

40
 Le dio a Dios todo su ser, ilusiones y sueños,
problemas. Pablo comprendió que Dios también
nos dio todo, a su propio Hijo. Esta actitud es un
reto para las familias y profesionales de hoy.
El evangelio de Marcos 9, 2-10.
Este domingo se presenta la Transfiguración
que resultó una experiencia espiritual para tres
discípulos de Jesús, muy cercanos a Jesús. El
escenario es el monte Tabor.
La presentación de Moisés y Elías:
Se presentan dos personajes que tuvieron
una gran experiencia religiosa. Moisés que ha-
blaba con frecuencia con él, se convirtió en ami-
go de Dios, y recibió las Tablas de la Ley; Elías
un profeta lleno de ardor por ser el mensajero
de Dios.
La presentación luminosa de Jesús:
Jesús aparece luminoso y radiante delante
de ellos. Es la Palabra Revelada de Dios. Quien
me ve a mí, ve al Padre. Los discípulos experi-
mentan la anticipación de la Transfiguración, les
ayudará en su misión a enfrentar el dolor de la
Pasión y comprender el misterio de la Resurrec-
ción.
El asombro de los discípulos es in- descrip-
tible. Jesús les muestra su realidad de Hijo de

41
Dios y sumisión dentro de toda la historia de
Salvación. Ahora conocen su real personalidad
teológica y espiritual. Su muerte va a convertir-
se en un éxodo, una muerte que nos librará del
pecado que culminará en la Resurrección.
La bajada del Monte Tabor
La “bajada de los discípulos” fue silenciosa,
tomando conciencia de su futura misión de ser
los discípulos de Jesús para toda su vida., con
todas sus consecuencias. Seguir a Jesús se con-
vertiría en una “subida” de respuesta y de fideli-
dad y saber dar la vida por él. La Revelación de
Jesús iluminó su descenso, y los preparó para su
hora final después de la Resurrección.
En estos domingos de Cuaresma se propo-
nen diversas oportunidades de asistir a encuen-
tros de oración, retiros espirituales. Aceptemos
esta invitación para podemos experimentar
verdaderas “experiencias de transfiguración”
que nuestra vida necesita para crecer en la fe En
Jesús. ¿por qué no te animas a vivirlos?

42
Lunes 1 de marzo
El Profeta Daniel 9, 4-10
El libro de Daniel nos ubica en el exilio de Ba-
bilonia. Es un tiempo de persecución y cuesta
mantener la fe. Este libro dio aliento y fortaleza
a los judíos perseguidos, infundiendo esperanza
porque Dios es el “Señor de la historia” y su pro-
yecto es misericordioso con su deseo es salvar
a todos los pueblos. Daniel que pronuncia una
oración penitencial y como profeta invita a ser
solidarios unos con otros.
Salmo 7, 8.9.11 y 13
Señor no nos trates como merecen nuestros
pecados
Evangelio de Lucas 6, 36-38
Lucas reflexiona sobre la misericordia de
Dios, la actitud que él mantiene y logra, se lle-
ga por el arrepentimiento y la conversión, amar
como Dios nos ama. Nos alerta contra las acti-
tudes cotidianas que tenemos: el juicio. El ren-
cor, la crítica a otros va generando un mal es-
piritual endémico. Se contagia y creamos una
sociedad violenta.

43
Martes 2 de marzo
El Profeta Isaías 1, 10. 16-20
El Profeta compara a Sodoma y Gomorra con
los dirigentes de Jerusalén. Ambas ciudades
fueron destruidas por sus graves pecados. Esta
comparación dolió a sus habitantes, porque vi-
vían una religión y un culto que no se basa en la
justicia con el pobre y no era agradable a Dios.
Él les ofrece una posibilidad para que recibir un
perdón.
Salmo 49, 8-9. 16-17. 21 y 23
Al que sigue buen camino le haré ver la salva-
ción de Dios
El Evangelio de Mateo 23, 1-12
En la comunidad de Mateo surgió la polémica
con las autoridades religiosas, pues los cristia-
nos fueron excluidos de las comunidades judías.
La religión debe ser vivida como cuestión del
corazón, en su dimensión vertical con Dios, y en
su dimensión horizontal, en relación a nuestros
semejantes. Dios nos advierte que debemos su-
perar los vicios, y la ostentación, la hipocresía,
la lucha por ser poderoso. Saber discernir en tu
vida.

44
Miércoles 3 de marzo
El Profeta Jeremías 18, 18-20 4ª Confesión
Las confesiones de Jeremías son las re-
flexiones íntimas del Profeta, que muestran sus
quejas, protestas y lamentos como ser huma-
no, pero con apertura total al Espíritu. En ellas
emerge el hombre de Dios, su humanidad, con
su ignorancia y dudas pero se siente el gran “se-
ducido por Dios” de quien ya no se podrá sepa-
rar. Él ve que el círculo de enemigos se va ce-
rrando en torno a él. Pere no teme, se tiene fe.
Salmo 50. 3-6. 12-13. 14 y 17.
Sálvame Señor por tu misericordia
Evangelio de Mateo 20, 17-18
Es el último anuncio de la pasión de Jesús. El
servicio que realiza a los más necesitados. Los
discípulos y en especial los hijos de Zebedeo se
muestran egoístas. Por ello Jesús insiste que su
actitud debe ser “servir” y así se deberá mos-
trar en el nuevo Reino. Es un anuncio más con-
creto y permite visualizar lo que debe de hacer
un buen seguidor de Cristo. La interrogante de
fondo será ¿He conducido bien mi vida cristiana
o aún falta aminar más cercar de Él, de Dios?

45
Jueves 4 de marzo
El Profeta Jeremías 17, 5-10
Los “oráculos” son los géneros literarios más
usados por el profetismo. Son una declaración
solemne hecha en nombre de Dios. Eran de 2 ti-
pos: oráculos de condena y de salvación que se
refiere siempre al futuro.
El primero se refiere a acciones del pasado
o del presente, se dirige con una fórmula dicha
por el mensajero: “Así dice el Señor”. Es un orá-
culo que invita a la confianza en el Señor.
Salmo 1, 1-2.3-4 y 6
Dichoso el hombre que ha puesto su confian-
za en el Señor
Evangelio de Lucas 16, 19-31
La parábola del hombre rico y Lázaro nos
manifiesta a dos vidas con actitudes paralelas
y contradictorias, uno vive con comodidades y
el otro pide limosna en su puerta. La muerte de
ambos hace que miren su situación definitiva
que no se podrá cambiar. La vida es única, no
hay “repuestos” ni intentos de ulteriores de re-
hacerla porque tu tiempo ya se cumplió.

46
Viernes 5 de marzo
Génesis 37, 3-4.12-13ª.17b-28
El ciclo de José que está dentro del libro del
Génesis es una novela histórica que nos deja en-
señanza para la vida. José sufre la “envidia” de
los hermanos, vendido debe vivir como escla-
vo en Egipto. Allí logra promoverse y tener un
cargo importante, que servirá para salvar a los
hermanos. Es un relato sapiencial que suscita en
muchos corazones la convicción de ser honesto
y conducir tu vida con un buen corazón
Salmo 104, 16-16. 18-19. 20-21
Recuerdo las maravillas que hizo el Señor
Evangelio de Mateo 21, 33-43.45-46
Hoy se nos presenta el rechazo a Jesús. En la
parábola de los viñadores homicidas, se ve cla-
ro ese rechazo. Su formulación original apunta a
la muerte del hijo. Esta parábola se convierte en
una alegoría. La viña es Israel y los viñadores re-
sultan ser los jefes del pueblo con su actitud de
rechazo a Jesús. Muchas veces las personas del
mundo empresarial y político usan intenciones
ilícitas para sus fines, en Ellos no ven ni viven fi-
nes buenos para sus vidas..

47
Sábado 6 de marzo
El Profeta Miqueas 7, 14-15.18.20
Es un oráculo con tinte penitencial. El pueblo
toma conciencia de su pecado. Dios acoge este
de-seo de conversión del pueblo. La respuesta
de Dios será una promesa de Salvación. Quien
se convierte adquiere luz para su camino de Fe y
camina con paz en su corazón. Es bonita y moti-
vadora la frase: “No hay Dios como tú”. La vida
puede abrirse a las intenciones de Dios para
ayudarte en tu vida
Salmo 102 1-2. 3-4. 9-10
El Señor es compasivo y misericordioso
Evangelio de Lucas 15, 1-3.11-32
Este capítulo pone su atención sobre los re-
caudadores de impuestos y otras funciones. Es-
tas personas se creían “justas”. Para solucionar
esta situación, Jesús no discrimina a estas per-
sonas más bien trata de convertirlas para que
formen parte de la sociedad y sean “bien vistos”
y participen de la propuesta de Jesús.

48
3° Domingo de Cuaresma
Domingo 7 de marzo
Éxodo 20, 1-17.
El agua y el alimento son dos elementos
esenciales para vivir en el desierto. El agua es
un elemento imprescindible para la vida, la roca
es el elemento de aridez del desierto. Ante esta
situación el pueblo no produce nada, no puede
subsistir, anhela la vida de Egipto y ya no desea
seguir para ser libre. El bastón de Moisés tiene
un papel importante. Es la mano divina quien
conduce a su pueblo, su Dios les enseña a sa-
lir de situaciones extremas y hay dejarse guiar
para transformar nuestras realidades adversas.
Salmo 18, 8.9.10.11
Señor, tú tienes palabras de vida eterna
1ra Carta a los Corintios 1, 22-25.
Pablo es apóstol de los pueblos “paganos” no
cristianos. Ya Roma es la capital visible de esos
pueblos y del Imperio Romano La carta adquie-
re un sentido ético para saber vivir en un mundo
así.
Antes nos ha hablado de la “justicia divina”,
ahora Pablo prefiere un tema más profundo,
anunciar el amor de Dios dado por el Espíritu
Santo. El 1º paso será la paz que nos hace ami-

49
gos, su amor fue un morir por nosotros. El 2º
fue la esperanza, hermana y compañera de la
paz.
Evangelio de Juan 2,13-25.
Jesús está en el templo, su acto es personal,
desea darle un sentido nuevo como lugar de
Dios. En este acto no intervienen los discípulos.
Jesús cumple la profecía de Malaquías 3, y
los versículos siguientes Él se presenta en la
Casa de Dios con todos sus poderes divinos. El
pueblo ha cambiado su actitud espiritual para
alabar a Dios. Interviene diciendo: el templo ya
no es un lugar de culto se hacen sacrilegios. El
templo es para Jesús la Casa de su Padre.
Hoy Jesús nos ayuda a respetar este lugar
de la presencia de Dios, él siente que la gloria
de su Padre es lo más importante y muestra su
celo ardiente. El pueblo lo convirtió en lugar de
negocio, de culto supersticioso. Adolecemos
de una relación orante personal y continua para
conversar con Él.

50
Lunes 8 de marzo
2° Libro de los Reyes 5, 1-5ª.
Este texto narra el encuentro entre Naamán,
perteneciente al círculo gobernante del Rey si-
rio, y el profeta Eliseo. Una esclava israelita le
dice a Naamán que puede ser curado de la lepra
por Eliseo. Él pidió permiso al Rey y fue a encon-
trar al profeta, que le mandó bañarse y su carne
quedó sana. La corriente “deuteronomista” de
este libro nos ilustra que Dios tiene un amor uni-
versal que abarca israelitas y extranjeros, por
igual.
Salmo 41, 2-3 Salmo 42, 3-4
Mi alma tiene sed del Dios vivo
Evangelio de Lucas 4, 24-30.
Estamos en la sinagoga de Nazaret. Jesús
explica la Palabra. Después de ella se suscitó
un momento de acogida, que luego se tornó en
hostilidad por la duda sobre su persona y su po-
der. Rechazaron su mensaje y misión. Ellos per-
dieron la oportunidad de vivir su Palabra y cre-
cer en la fe.

51
Martes 9 de marzo
El profeta Daniel 3, 25.34-43
El profeta Daniel está reunido con sus tres
amigos fieles a su fe. La Oración de Azarías es
en medio del fuego. Él pide a Dios que no rom-
pa su Alianza con su pueblo y pone un corazón
contrito como un “holocausto”, y finaliza con
una petición de confianza. Estos jóvenes mues-
tran una fe muy grande. Ayudemos a que nues-
tros jóvenes de hoy a que se acerquen más al
Señor y lo conozcan.
Salmo 24, 4-5. 6-7. 8-9
Señor recuerdo tu misericordia
Evangelio de Mateo 18, 21-35
Ante la interrogación de Pedro sobre el per-
dón, Jesús le responde con la parábola del Rey
que ajustó cuentas con su empleado. Hoy la ma-
yoría de creyentes ve la “confesión” como un
ajuste de cuentas por eso la elude. La comuni-
dad de Mateo sufría problemas de convivencia,
No existía el perdón. Convivir, perdonarse es un
reto para hoy.

52
Miércoles 10 de marzo
Deuteronomio 4, 1.5-9
Este capítulo del Deuteronomio hace una ex-
hortación para escuchar la Ley de Dios y prac-
ticar los preceptos. Su práctica nos hará sabios,
sensatos, cualidades que todo creyente podría
activar en su vida. Nos presenta a un Dios cer-
cano a las personas porque ellas estarán con-
tentas de practicar sus leyes. Hoy es necesario
exhortar a las familias a que practiquen su fe,
den un espacio personal para sentir su voz de
ánimo de Dios.
Salmo 147, 12-13. 15-16. 19-20
Glorifica al Señor Jerusalén
Evangelio de Mateo
Mateo ayudó a los judíos convertidos a su-
perar las críticas de los judíos, porque lo acusa-
ban de ser infiel a la Ley de Moisés. Jesús había
dicho que deben ser sal y luz de la tierra. En la
comunidad surgieron varias tendencias: y el in-
tentó un equilibrio de estas posiciones. Muy
importante en este mundo actual es ser “me-
diador” para conciliar, ser sembrador de paz,
buscar la solución mejor.

53
Jueves 11 de marzo
Jeremías 7, 23-28
La situación que enfrenta el profeta es el cul-
to y los sacrificios que se rinden a otras divini-
dades. El profeta les recuerda que en ningún
momento Dios les ha pedido sacrificios ni holo-
caustos. Por eso se cita en el v.23 el núcleo de la
Alianza que es el compromiso de adhesión que
adquirió Israel en el Sinaí. Somos adherido a la
Alianza íntima con Dios.
Salmo 94, 1-2. 6-7. 8-9
Ojala escuche hoy su voz, no endurezco el
corazón
Lucas 11, 14-23
Nos encontramos en una réplica con los ad-
versarios de Jesús, que se las plantearon repe-
tidas veces. Pero resultaron idóneas para dejar-
los en silencio. En esta discusión sobre Satanás
ellos no tienen argumentos. Como se dice el
silencio otorga. No existe posición neutral. La
verdad de nuestra fe siempre prevalece porque
es sabiduría de Dios para los creyentes.

54
Viernes 12 de marzo
Oseas 14, 2-10
El vive y predica entre el reinado de Jeroboán
II y la destrucción de Samaria. Este Reino que go-
zaba de prosperidad material, donde unos pocos
ricos la aumentaron y los pobres sufrieron más
explotación. La situación política fue desastro-
sa. El dios Baal ganó adeptos. En el plano perso-
nal Oseas sufre la traición de su esposa Gamar. Él
compara su historia personal y describe la con-
ducta de Dios con su pueblo. Surge la imagen es-
piritual de el Dios-esposo que es permanente y
fiel en su amor por su pueblo.
Salmo 80, 6c-8ª. 8b-9. 10-11. 14 y 17
Yo soy el Señor Dios tuyo; escucha mi voz
Evangelio de Marcos 12, 28-34
La vivencia de la fe resultó una gran carga de
leyes y preceptos para el pueblo judío. Esto im-
pedía ver cuáles eran importantes y valían para
fortalecer la fe en Dios. La respuesta de Jesús
es clara: lo único importante es el amor.

55
 Sábado 13 de marzo
El Profeta Oseas 6, 1-6
El profeta Oseas nos exhorta
a convertirnos con sinceridad y
amor, evitando la actitud exter-
na y ritual. Muchas veces el pue-
blo ha mostrado una conversión
superficial, de pura apariencia
sin un verdadero arrepentimien-
to. Las principales ciudades de
Efraím y Judá se han rendido al
pecado y han quedado heridas
y aniquiladas. Estas realidades
que ha sufrido cada israelita de-
ben ser curada, y volver al único
amor de Dios que perdona.
Salmo 50, 3-4. 18-19. 20-21b
Quiero misericordia, y no sa-
crificios
Evangelio de Lucas 18, 9-14
Lucas retoma uno de los sig-
nos de nuestra conversión: el
modo de orar y de profundizar
nuestra relación con el Señor.
Ella requiere confianza y perse-
verancia. Debemos superar la

56
actitud farisaica que piensa lograr la salvación
con su esfuerzo, el dinero que pueda acumular
asegura su futuro. El otro se siente necesitado
de Dios y ora con unción.

57
4° Domingo de Cuaresma
Domingo 14 de mazo
2do Crónicas 36, 14-16. 19-23
Los últimos 4 Reyes de Judá fueron depor-
tados. El cronista dice la causa: su infidelidad a
Dios y a su pueblo. Ellos acabaron juntos en el
destierro en Babilonia. Las causas fueron sus
errores políticos, la falta de conversión a Dios,
que ocasionó la ruina de la nación. Y ahora in-
terpreta diciendo: una especie de descanso de
la Tierra del Señor que había sido profanada.
Salmo 136,1-2. 3.4.5.6
Que se me pegue la lengua la paladar si no
me acuerdo de tí
Efesios 2, 4-10
Pablo expone su experiencia antes de ser
cristiano, ha pasado de una situación de muerte
a una realidad de vida. Es un volver a nacer. Ellos
han sido rescatados de una realidad de muerte.
La “cultura pagana” les presentaba un mundo
permisivo en contraposición a una vida sana, de
servicio a otros, de hermandad en las comuni-
dades.

58
Juan 3, 14-21
Es una escena de diálogo personal. Nicode-
mo, un creyente maduro en edad y vivencia de
su fe va a visitara a Jesús. Le interesa la profun-
didad y coherencia de su mensaje que hace en
nombre Dios.
Jesús se siente cómodo en su diálogo con Ni-
codemo, le habla sobre Dios y le va manifestan-
do “los misterios de Dios” (vv. 10-21). Nicodemo
lo conoce y se los revela porque ha mostrado
deseos y convicciones para ser un hombre de
Espíritu.
El “estandarte” o núcleo central que le pre-
senta Jesús es la “cruz”, porque ella será la
cumbre de la Revelación de fe revelada y será
Cristo que morirá por nosotros en esa cruz.
Jesús da un paso más de profundidad para
Nicodemo comprenda: Ese sacrificio profundiza
el gran amor que tiene Dios por la humanidad.
Jesús en la cruz simboliza y acrecienta la fe de
Dios con su amor misericordioso y Redentor.
El v. 16 presenta el momento cumbre de este
diálogo. Con el sacrificio de la cruz, Jesús ilumi-
nó y continua iluminando el mundo con su ofer-
ta de vida a la humanidad, unos la acogieron y
otros no.

59
Lunes 15 de marzo
Isaías 65 17-21
Estamos en los 2 últimos capítulos del 3er
Isaías. El Señor no recordará nuestras infideli-
dades, la falta de amor y compromiso, o nuestro
alejamiento de Él, porque nos ofrece “un cielo
nuevo y una tierra nueva”. Nos orienta reencon-
trar el camino para vivir en su amor y su paz. Si,
nos exige que perdonemos. No dudaremos de
su amor y perdón.
Salmo 29, 2 y 4. 5.6. 11-12ª. y 13b
Te ensalzaré Señor porque me has librado
Evangelio de Juan 4, 43-54
Juan desarrolla los “signos” de Jesús que
realiza para que nosotros creamos y avancemos
en nuestro camino de fe. Seguir a Jesús es ir al
encuentro de sus 7 signos. Hoy meditamos el
2do signo. Jesús, es la Palabra que da vida. Je-
sús se encuentra en Galilea donde había vivido
convertido el agua en signo (1° signo). Él halla a
un funcionario que tiene un hijo enfermo en Ca-
farnaúm. El insiste en que vaya allá, pero tuvo
fe. Jesús lo curó sin ir a esa ciudad.

60
Martes 16 de marzo
Ezequiel 47, 1-9. 12
Estamos ante una visión de Ezequiel: el río
de vida que brota del costado del templo habi-
tado por la gloria de Dios. Es la misma imagen
que será utilizada en el Apocalipsis 22, 1 ss. Esta
imagen sintetiza el territorio reconquistado al
igual que la ciudad y el templo, animó a los is-
raelitas en el exilio
Salmo 45, 2-3. 5-6. 8-9
El Señor de las multitudes está con nosotros
Evangelio de Juan 5, 1-3. 5-16
Jesús está en la piscina de Betesda que tenía
cinco pórticos. Se produce la curación de un tu-
llido de 38 años. Casi toda una vida inmóvil. Je-
sús le devuelve la salud a este muerto-viviente
en un día “sagrado”. Jesús realiza una obra sa-
nadora en un día que la Creación se renueva con
un nuevo viviente sanado. Las autoridades ju-
días lo ven como una transgresión a Ley. Sepa-
mos ver cada día cuantas vidas salva Dios.

61
Miércoles 17 de marzo
Isaías 49, 8-15.
Estamos en el 2° Cántico de Isaías. Nos reve-
la el tiempo de gracia que trae la salvación del
Señor. Esto quiere decir que trae sanación, bie-
nes repartidos, libertad, alimentación. Ello pro-
duce alegría en el pueblo y lo más deseado: el
consuelo de Dios. Los gobiernos actuales debe-
rían ser solidarios con sus pueblos, generando
estos “tiempos de gracias”.
Salmo 144, 8-9. 13cd-14. 17-18
El Señor es clemente y misericordioso
Evangelio de Juan 5, 17-30
Mientras el pueblo sencillo ha seguido a Je-
sús y ha visto sus obras buenas, las autoridades
se han ido fijando si trasgredía o no las leyes y el
día del sábado. Jesús es el Señor del Sábado y
está en relación con su Padre Dios. El punto cul-
minante de esta escena mostrará a Jesús como
el Hijo que tiene vida eterna.

62
Jueves 18 de marzo
Éxodo 32, 7-14
Moisés luego estar en el monte Sinaí recibe
la orden de Dios de bajar al pueblo. Y encuentra
que este se ha desviado del camino de de Dios,
lo califica de pueblo testarudo. Moisés aboga
por el pueblo. Dios asume un nuevo compromi-
so con el pueblo, no porque sea el mejor de to-
dos, sino porque el pueblo reconoció sus culpas.
Salmo 105, 10-20. 21-22. 22-23
Acuérdate de nosotros, por amor a tu pueblo
Evangelio Juan 5, 31-47
Jesús se presenta como quien es respaldado
por el testimonio de su Padre Dios. Hasta ahora
en su vida han se han presentado los testimo-
nios de Juan Bautista, sus milagros, sus discípu-
los, las Escritura. Pero el testimonio mayor es el
de su Padre.

63
Viernes 19 de marzo
Fiesta de San José. Solemnidad
2° Libro de Samuel 7, 45. 12-14. 16.
El capítulo 7 presenta la profecía de Natán.
La palabra “casa” tuvo un doble significado;
“casa-palacio-templo” y “casa-dinastía”. David
será levantó “casa dinastía”. La promesa hecha
a David se refiere a todos sus descendientes,
reconocidos como hijos. José será el elegido, el
padre de Jesús.
Salmo 88, 2-3. 4-5. 27. 29
Su descendencia permanecerá para siempre
Carta de Pablo a los Romanos 4, 13. 16 18.32
Pablo centra su discurso en la “Promesa de
Dios”. Él rescató la promesa de Abraham del
ámbito nacional de Israel, y llevó a una dimen-
sión universal de ser el “padre de todos los cre-
yentes” porque ahora ya se todos conocen to-
das realidades que ha traído Cristo. Dios realizó
todo lo que prometió.
Los cristianos debemos preguntarnos
¿Cómo esperamos las promesas de Dios en
nuestras vidas?
¿Existen realidades palpables de nuestra
vida donde se pueden reconocer que estamos

64
recorriendo un camino de fe que hace posible
esa Salvación de Dios?
Evangelio de Mateo 1, 16.18-21.24
Mateo propone la genealogía de Jesús que
nos presenta tres series de catorce personajes
que viven y testimonian las grandes etapas de la
historia de salvación precedentes a Jesús. Al fi-
nal llega Jesús que inaugura la nueva y definitiva
etapa de Salvación.
El padre de Jesús, José, tiene un lugar prin-
cipal en esta historia de salvación, fue el padre
y el formador de Jesús. Él ejerció su exquisita
paternidad y presencia como
jefe de familia. Fue el apo-
yo y compañía para Ma-
ría. Enseño su oficio de
carpintero a Jesús.
Acompañó en todo
momento a su hogar
y fomento un exce-
lente clima de fami-
lia, Tenemos en él a
un modelo de pa-
ternidad y esposo
que nos ilumina y
motivar siempre.

65
Sábado 20 de marzo
El Profeta Jeremías 11, 18-20
Este texto es llamado el de Las confesiones
de Jeremías, y él sufre porque sus palabras no
son bien recibidas. Se expone a la muerte. No
se echa atrás y continua su misión de profeta.
Él confía totalmente en Dios y pone su vida a su
servicio. El servicio de “profeta” significó mucha
entrega y sacrificio por el mensaje de Dios.
Salmo 7, 2-3. 9bc-10. 11-12
Señor, Dios mío, a tí me acojo
Evangelio de Juan 7, 40-53
En esta escena vemos la reacción ante el gri-
to de la revelación de Jesús. La gente se divide
ante esta actitud: unos afirman que es el Pro-
feta, otros que es el Mesías. Esto origina más
discusión. A Juan le interesa sabre que ha sido
enviado por Dios y esto fundamenta su origen
divino. No se puede juzgar a Jesús solo con cri-
terios humanos, ni por las apariencias.

66
V Domingo de Cuaresma
Domingo 21 de marzo
Jeremías 31, 31-34,
El texto narra el retorno de los israelitas a su
tierra después del destierro. Pero otra vez de-
ben atravesar el desierto, y evocan su salida de
Egipto.
Esta vez el Oráculo del Señor manifiesta que
Dios desea hacer una Nueva Alianza con Judá.
Jeremías realiza una compra del terreno de
Anatot, que era un rescate legal vigente en Is-
rael. El profeta les hace tener esperanza, Si bien
sean poca ayuda a ir adelantero.
Salmo 50, 3-4, 12-13. 14-15. 18-19
Oh Dios, crea en mí un corazón puro.
Carta de Pablo a los Hebreos 5, 8- 14
La Carta a los Hebreos tiene como fin pre-
sentar a Jesús como el Sumo sacerdote. Es la
mediación entre Dios y los hombres, su función
es ofrecer sacrificios por los pecados del pueblo
de Dios. Esto lo diferencia del sacerdocio judío.
¿Cómo se puede ofrecer este sacrificio? Jesús
inaugura un sacerdocio sin pecado. él es elegido
y nombrado Sumo Sacerdote.

67
Evangelio de Juan 12, 20-33
La presencia de los griegos causará asom-
bro en esta escena evangélica. Ellos se acercan
a Felipe, el de Betsaida y le solicitan ver a Jesús.
Al oír esto Jesús dice: Ha llegado la hora que el
Hijo del hombre sea glorificado. Si el grano de
trigo no muere no da fruto. Los griegos nos ha-
cen comprender que el mensaje de Jesús ha lle-
gado a muchos lugares que ahora buscan y ha-
llan a Jesús.
Su muerte es anunciada e ilustrada con la pa-
rábola del grano de trigo. Así como el trigo muere
y da fruto, también su muerte dará vida al mun-
do. Su vida no quedó infecunda sino que generó
vida de Espíritu de Dios en todo el mundo.
Los versículos 27 ss nos presenta a Jesús en
el Huerto de los Olivos o Getsemaní, En este lu-
gar entra en diálogo con su Padre Dios y acepta
su misión y su entrega una muerte de cruz.
En esa cruz se escuchará la voz del cielo:
Este es mi Hijo muy amado, lo he glorificado y
de nuevo lo glorificaré. Para el evangelista San
Juan, Jesús es va a su “hora” de muerte pero
salvará al mundo.

68
Lunes 22 de marzo
El Profeta Daniel 13, 1-9. 15-17. 19-30. 33-62
El C.13 nos presenta a Susana un relato de
sana y limpia sabiduría. Al leer este relato uno
tiene la convicción de que Dios no abandona
aun inocente a su suerte de una mente que solo
busca el mal y denigrar a la persona. Los inicuos
tarde o temprano serán castigados, sus delitos,
calumnias, crímenes y delitos de corrupción se
pagan.
Salmo 22, 1-3ª. 3b-4. 5-6
Te ensalzaré, Señor, porque me has librado
Evangelio de Juan 8, 1-11
El evangelio de Juan coloca a Jesús frente a
una dura prueba que le ponen sus adversarios.
Ellos buscan acusar a Jesús como enemigo de
la Ley de Moisés. Son insensibles a la lapidación
que sufrirá.
Jesús opta por clarificar a mente de los acu-
sadores como la de los presentes. Es pasar de la
ley que se debe ejecutar a que la acuda interio-
rice su propia responsabilidad de mujer. ¿Sirve
tirar las piedras, o que se arrepienta y cambie de
vida?

69
Martes 23 de marzo
Números 21, 4-9.
Este es evidente que nos es un libro de ma-
temáticas. Se le llama Números por la referencia
a los dos censos que contiene y su relación al
culto. Nos presenta al pueblo en el desierto del
Sinaí y se acerca a la Tierra prometida. El pueblo
sale victorioso del pueblo cananeo y del desier-
to lleno de serpientes. Por ello levanta en alto en
madero la serpiente, su victoria ante la muerte.
Salmo 101, 2-3. 16-18, 19-21
El Señor está con nosotros
Evangelio de Juan 8, 21-30
Este C.8 sigue profundizando ahora sobre su
identidad: Yo soy de lo alto. Así revela que vie-
ne de su Padre Dios. Me conocerán de verdad
cuando hayan levantado al Hijo del Hombre.
Quien me acepta o aceptará tendrá vida, quien
me rechace la perderá, se hallará fuera la comu-
nidad, que cree en mí. Quién me envió está con-
migo siempre

70
Miércoles 24 de marzo
Daniel 3, 14-20. 91-92. 95
El tema de fondo es la construcción de una
estatua de oro ordenada por el Rey para que la
adoren. Sidrac, Misac y Abednego son interro-
gados porque no dan culto a ella. Los versículos
finales los ubican elevando un Cántico que está
en los Salmos 145 y 148 que alaba a la Creación y
al único Señor que es el único que salva.
Salmo de Daniel 3, 52-56.
A tì, gloria y alabanza por los siglos
Evangelio Juan 8. 31-42
La parte final del C. 8 invita a los cristianos a
creer en Jesús y ser fieles. La persona libre por
excelencia es Jesús, él nos comunica esa liber-
tad con su filiación divina. Por el Hijo accedemos
al Padre. En esa libertad somos y nos sentimos
hijos en el Hijo, hijos del Padre. Podemos estar
en la casa del Padre. El esclavo no pertenece a
la casa del Padre. Jesús ha querido liberarnos
de nuestra esclavitud y acercarnos a la casa del
Padre.

71
Jueves 25 de marzo
Anunciación del Señor
El Profeta Isaías 7, 10-14. 8,10
El profeta Isaías describe el retorno del exi-
lio del pueblo a Israel que se consideró un Nue-
vo Éxodo. Lo realizan no solo los deportados
de Babilonia y de otros países hasta de Egipto
(“Senin”). La comparación final es el retorno a la
madre tierra donde nacieron y creyeron en Dios.
“La madre no olvida, nunca olvida a sus hijos”,
cierra este nuevo éxodo. En algunos países se
ha vuelto a repetir este “regreso”.
Salmo 39, 7-8a. 8b -9. 10. 11
Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad
Carta a los Hebreos 10, 4-10.
Los sacrificios de la Alianza eran repetidos,
el único Sacrifico de Cristo reafirma su eficacia
Los cristianos católicos tenemos el único sacri-
ficio de la Cruz que se perenniza en la Eucaristía,
es un “sacramento”, un signo eficaz de la gracia
que hace presente el único sacrificio de la cruz
de Cristo.

72
Evangelio de Lucas 1, 26-38
En la anunciación a María podemos descubrir
un diálogo que nos lleva a admirarla por su aco-
gida a Dios y su Palabra.
1. El anuncio a María ocurre en un contexto
simple y cotidiano, en una aldea de Naza-
ret. Se centra en el contenido de sus pala-
bras y la fe pura de María.
2. El sí que ella va a dar es una respuesta
motivada por el amor a Dios. El ángel le
propone una verdad más alta que la anun-
ciada a Zacarías y de las que recibieron
otras mujeres como Sara, Raquel, Ana.
3. Ella es invitada a una maternidad virginal
de la que el Antiguo Testamento no re-
cuerda ningún precedente. El conocido
oráculo de Isaías» (Is 7,14): «He aquí que
una doncella está encinta y va a dar a luz
un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel
4. A María se le pide que acepte una verdad
jamás enunciada antes. Pero se pregunta:
«¿Cómo será esto?», expresa su fe en el
poder divino.
5. La respuesta del ángel abre el camino a la
cooperación de la Virgen con el Espíritu
Santo en la generación de Jesús.

73
Viernes 26 de marzo
Jeremías 20, 10-13
Nos hallamos en las Confesiones de Jere-
mías. Él se ha fatigado ha sido portavoz de la voz
de Dios. Se pregunta ahora ¿Cuál es el resulta-
do? ¿Fue fatiga inútil? Tuvo obstinación y odio
de sus oyentes. El sentimiento del profeta ha
sido doloroso. Pero tiene a la vez la certeza que
Dios ha estado con Él. El catequista, el sacerdo-
te, el padre de familia sigue a Dios. Es conscien-
te de su misión.
Salmo 17, 2-3ª. 3b-4. 5-6-7
En el peligro invoqué al Señor, y me escuchó
Juan 10, 31-42
Jesús manifiesta que todas obras fueron en-
cargadas por su Padre y reclama ¿Por eso me
apedrean? Sus enemigos responden: por la
blasfemia porque te crees Dios. Querían apre-
sarlo pero se dirigió a otras zonas de Jordán a
seguir su misión.
El mundo de hoy busca falsos líderes a quien
aplaudir y seguir que los conducen por caminos
falsos y resultan engañados y pierden a Cristo.

74
Sábado 27 de marzo
Ezequiel 37, 21-28
Ezequiel recibe las varas escritas para ense-
ñar al pueblo. Dios desea congregar a su pueblo
de todas las naciones donde están y repatriar-
los a su tierra, Ahora deberán cuidar la pureza y
consistencia de su única fe en su Dios. Les pide
obediencia y cumplimiento de sus mandatos.
Hará con ellos una Alianza y el resto del mundo
conocerá a Dios.
Salmo responsorial Jr 31, 10. 11-1 2ab. 13
El Señor nos guarda como un pastor a su re-
baño
Evangelio según san Juan 11, 45-57
Las autoridades religiosas temen que la acti-
vidad de Jesús propicie un movimiento de la po-
blación de tipo mesiánico y se susciten desór-
denes. Jesús se ha vuelto peligros para el orden
político y religioso. Caifás propone que muera
uno en lugar de todo el pueblo. Se convierte en
el instrumento en las manos del Señor para la
misión de salvación de Jesús. Ya no serán solo
las tribus de Israel que se congregaran con su
sacrifico, sino todos los que creen en Jesús.

75
 Celebración penitencial
Cuaresma
Deseamos realizar una celebración
penitencial, que es una preparación inmediata
a recibir el Sacramento del perdón. Jesús nos
recibe con su misericordia y nos dona su perdón
por nuestras situaciones vividas alejadas del
amor de Dios.
1. Saludo del celebrante
El amor del Padre que en Jesús se manifestó
como perdón, esté con todos Uds. Hermanos:
Estamos aquí porque Dios nos quiere y nos
llama a la conversión. Somos importantes para
Él, a pesar de nuestros pecados. Él nos ha traído
aquí; su mano, su ternura, su misericordia nos
llama al amor.
2. Presentación del símbolo
El barro Evoca nuestra condición débil y
caduca. Aquello que a todos nos iguala como
seres creados. Dios formó al hombre con polvo
de la tierra (Gen 2,7). El polvo es el origen y
el destino del hombre. a la vez, realista. Nos
sugiere nuestra condición pecadora, mancha
nuestro corazón.

76
3. Liturgia de la palabra (Lc 18, 9-14)
En aquel tiempo, dijo Jesús. «Dos hombres
subieron al templo a orar; uno fariseo, otro
publicano. El fariseo, de pie, oraba en su
interior de esta manera: “¡Oh Dios! Te doy
gracias porque no soy como los demás
hombres, rapaces, injustos, adúlteros, ni
tampoco como este publicano. Ayuno dos
veces por semana, doy el diezmo de todas
mis ganancias.” En cambio, el publicano,
manteniéndose a distancia, no se atrevía ni a
alzar los ojos al cielo, sino que se golpeaba el
pecho, diciendo: “¡Oh Dios! ¡Ten compasión de
mí, que soy pecador!” Les digo que éste bajó
a su casa justificado y aquél no. Porque todo
el que se ensalce, será humillado; y el que se
humille, será ensalzado. (Sigue la Homilía)
4. Rito penitencial
Te pedimos que cada uno de nosotros pue-
da, en este momento de tranquilidad, reconocer
su propia realidad y su relación consigo mismo,
con los hermanos y contigo, Dios y Padre bueno.

77
 Examen de conciencia: Papa Francisco

En relación a Dios
1. ¿Solo me dirijo a Dios en caso de necesi-
dad?
2. ¿Participo en la Misa los domingos?
3. ¿Comienzo y termino mi día con la oración?
4. ¿Blasfemo en vano el nombre de Dios?
5. ¿Qué hago para crecer en mi espíritu?
En mi relación con los demás
6. ¿Sé perdonar, soy comprensión, ayudo a
otros?
7. ¿Juzgo a otros de pensamiento y con pa-
labras?
8. ¿He calumniado, robado, despreciado a
pobres?
9. ¿Soy envidioso, colérico, lujurioso, abusivo?
10. ¿Incito a otros a ver pornografía?
En relación con nosotros mismos
11. ¿Como, bebo, fumo o me divierto en ex-
ceso?
12. ¿Me preocupo demasiado de mi físico, mis
bienes?

78
 13. ¿Soy perezoso? ¿Me gusta ser servido?
14. ¿Mantengo puro mi corazón, pensamientos?
15. ¿Nutro venganzas, alimento rencores, in-
trigas?
5. Hago mi dolor de corazón por mis ofensas
El alma se limpia con el perdón, se hidrata
orando, se nutre con la Palabra de Dios, la fe la
protege y se tonifica con el amor
6. Confesiones y absolución individual
Dios desea perdonar a los pecadores. El
perdón ha sido siempre parte de su naturaleza
amorosa. Perdona la transgresión, no nos
inculpa de pecado. Sal 32
7. Satisfacción
Revisa tu vida e intenta darle un sentido a tu
ser de barro, que va unirse al sacrificio de Cristo.

79
 Oración conclusiva
Señor nos has recibido con los brazos
abiertos. Has cambiado nuestra vida de barro
por corazones de carne. Sabemos cuánto nos
quieres. Nos has perdonado todos nuestros
pecados, que nos has limpiado con tu gracia y
que nos animas a ser cada Señor, tú confías en
nosotros. Y no te vamos defraudar. Amén

80
 Decálogo de la conversión
cuaresmal
1. La conversión es recordar que el Señor
nos hizo para sí y que todos los anhelos,
expectativas, búsquedas y hasta frenesíes
de nuestra vida, solo descansarán, solo se
plenificarán, cuando volvamos a Él.
2. La conversión es la llamada insistente a
que asumamos, reconozcamos y purifi-
quemos nuestras debilidades.
3. La conversión es ponernos en el camino,
con la ternura, la humildad y la sinceridad
del hijo pródigo, de rectificar los pequeños
o grandes errores y defectos de nuestra
vida.
4. La conversión es entrar en uno mismo y
tamizar la propia existencia a la luz del Se-
ñor, de su Palabra y de su Iglesia y descu-
brir todo lo que hay en nosotros de vani-
dad innecesaria, de limitación y egoísmo.
5. La conversión es cambiar nuestra menta-
lidad, llena de eslóganes mundanos, lejana
al evangelio, y transformarla por una vi-
sión cristiana y sobrenatural de la vida.

81
 6. La conversión es cortar nuestros caminos
de pecado, de materialismo, paganismo,
consumismo, sensualismo, secularismo
e insolidaridad y emprender el verdade-
ro camino de los hijos de Dios, ligeros de
equipaje.
7. La conversión es examinarnos de amor y
encontrar nuestro corazón y nuestras ma-
nos más o menos vacías.
8. La conversión es renunciar a nuestro viejo
y acendrado egoísmo, que cierra las puer-
tas a Dios y al prójimo.
9. La conversión es mirar a Jesucristo como
hizo Teresa de Jesús a su Cristo muy lla-
gado y contemplar su cuerpo desnudo,
sus manos rotas, sus pies atados, su co-
razón traspasado, sentir la necesidad de
responder con amor al Amor que no es
amado.
10. Y así, de este modo, la conversión, siem-
pre obra de la misericordia y de la gracia
de Dios y del esfuerzo del hombre, será
encuentro gozoso, sanante y transforma-
dor con Jesucristo.

82
 Bibliografía
◆ La Biblia de América en letra grande. La
Casa de la Biblia. Evd. 1999.
◆ Luis Alonso Schökel. La Biblia de nues-
tro pueblo. Biblia del peregrino. Claretia-
nos-Mensajero. Bilbao. 2009.
◆ Catecismo de la Iglesia Católica: Cuares-
ma n. 540, 1095, 1438; Conversión n 594,
979, 986-987.
◆ J.A. Abad Ibañez- M. Garrido Bonaño Ini-
ciación a la Liturgia-Pelicano. 2ª ed. Ma-
drid, 1988.
◆ José L. Martín Descalzo. Vida y misterio
de Jesús de Nazaret. Sígueme. 2000.

83
 Links
◆ corazones.org.biblia y liturgia
◆ www.vaticannews.org
◆ webcatolicadejavier.org.reflexioncuaresma
◆ pastoralliturgica,cpl.es.tiemposliturgicos
◆ revistaecclesia.com. 50frase twiterdelpapa
◆ es.catholic.net.lastentaciones
◆ esgaudiumpress.org.iniciodelcaminocuares
◆ desdelafe.mx.sabíasquelacuaresma
◆ católicosfirmesensufe.signosysímbolos
◆ iglesialmodovardelcampo.org.

84
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