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Fundamentación
Si bien el término epistemologías feministas reúne una panoplia de enfoques, teorías y prácticas
tanto en lo que concierne a la epistemología como al feminismo, hablamos de un cierto common
lands y posicionamiento crítico en relación a los modos en que la ciencia ha construido, no sin
violencia, ciertas versiones del género y lo humano y también, de las formas históricas a través de
la cuales las mujeres han quedado fuera del aparato científico o han sido ubicadas como objeto de
espectáculo de la mirada científica. Estas prácticas de conocimiento y exclusión revelan que ciencia
y sociedad son un continuum y que la ciencia es una práctica performativa de los modos en que
pensamos e imaginamos nuestra realidad así como las relaciones de poder inscritas en ella. Es claro
que no existe orden social sin una determinada forma de organización del conocimiento
especialmente en nuestras sociedades contemporáneas que “han sido posibles por la existencia de
un complejo entramado de conocimientos científicos y tecnológicos. (Shapin y Shaeffer, 16)
Sin lugar a dudas las relaciones entre ciencia y género nos muestran el error profundo que hay
detrás de la difundida idea de “buena ciencia y malas aplicaciones”, pues la ciencia en su estado
actual y en su pasado es un dispositivo de prácticas y discursos con pretensiones de verdad acerca
de lo humano y sus límites pensados como espacios de disputas ontológicas, epistemológicas y
también políticas, y la pregunta acerca de cómo queremos o no ser gobernadas cruza las teorías
científicas especialmente las vinculadas a las ciencias humanas. En ese sentido las epistemologías
feministas ponen acento en la íntima conexión entre el problema de la política y el problema del
conocimiento. Para Shapin y Shaeffer (2005) “así como los estudios sociales ·de la ciencia han
reconocido en esta práctica fenómenos antes atribuidos a la esencia de la política (como la
relevancia central de los intereses particulares), hace mucho tiempo que la política ha manifestado
su vocación por adquirir rasgos propios de las actividades racionales de las cuales la ciencia es su
paradigma” (p.16)
Analizar el lugar del conocimiento científico desde nuestra posicionalidad como habitantes de un
Sur que “también existe” sin lugar a dudas interroga por los mismos procesos históricos vinculados
a la colonización territorial como epistémica, colonización pensada como matriz simbólica, política
y económica de nuestro lugar como mujeres del tercer mundo y de nuestro presente en que los
relatos de la ciencia han jugado un papel ancilar. Se trata con esto de indagar no sólo de qué modo
la ciencia hegemónica desplazó con violencia los conocimientos locales acerca del cuerpo y la
naturaleza o las prácticas de saber ancestrales, sino que también de qué modo la división del mundo
entre los productores de una ciencia avanzada, de grandes inversiones, aliada a la industria de armas
y farmacéuticas y aquel resto del mundo excluido de estos avances, ha contribuido a generar otros
procesos de dependencia que han venido a sedimentar los ya conocidos. También de como el
cuerpo de las mujeres y otros sujetos sub-alternos han sido ubicados como conejillos de indias para
un saber que cada vez más se asocia a los procesos de desposesión, privatización y
mercantilización.
Lo que Evelyn Fox Keller (2003) llamó una perspectiva radical de la crítica feminista de la ciencia,
sitúa el análisis en todos estos componentes y tensiones que articulan el discurso y la práctica
científica, lo que implica también el develamiento de las condiciones de producción de la
racionalidad científica y, especialmente, su concepción de verdad, objetividad y neutralidad. Las
epistemologías feministas ponen en tensión la existencia de una neutralidad y objetividad pensadas
como distancia, desapasionamiento y modestia (Haraway, 2004); para la epistemologías feministas
la ciencia es un aparato situado en términos de quienes son los autorizados para habitar en ella y de
qué manera. Si el relato de lo que Fox Keller llama una ciencia viril ha atravesado la práctica
científica se trata entonces de construir otras alternativas que se dirijan principalmente a re-situar
las dimensiones políticas e históricas en nuestras verdades científicas y también contribuir a crear el
fundamento de una ciencia emancipatoria basada en valores participativos y asumiendo posiciones
como el antirracismo, el anticlasismo y el antisexismo.
Finalmente las epistemologías tensionan los modos de representación de las mujeres y otros sujetos
subalternos en el discurso científico, por medios de propuestas estrategias de inclusión frente a la
exclusión histórica de las mujeres en la institución científica. En Chile por ejemplo, las cifras
respecto a las mujeres en la ciencia son dramáticas. De acuerdo al último estudio de Conicyt
(Comisión Nacional de Ciencia e Investigación del gobierno de Chile) titulado “Participación
Femenina en Programas de CONICYT 2001-2015”, se señala que las cifras confirman lo que otros
trabajos nacionales e internacionales sostienen: que a medida que se avanza en la carrera de
investigadores las brechas de género aumentan. Así por ejemplo, se tiene que el Programa de Fondo
Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDECYT) presenta un 73% de proyectos
adjudicados liderados por hombres, frente a un 27% liderado por mujeres, según el acumulado
histórico entre el año 2001 y 2015. Los promedios de participación de género entre el 80%-75% de
participación masculina sobre un 25% - 20% de participación femenina se repiten en otros
programas. En el año 2001 había un 74% del total de proyectos adjudicados liderados por hombres
y un 26% de proyectos liderados por mujeres; mientras al año 2015 existen un 62% de proyectos
adjudicados liderados por hombres y 38% por mujeres, es necesario destacar que el Fondo de
Desarrollo de la Astronomía Nacional y el Programa de Atracción e Inserción de Capital Humano
Avanzado (PAI), reúnen las tasas de participación femenina más bajas de la institución. Cabe
mencionar que el informe no señala que pese a los esfuerzos declarados por el máximo organismo
de la ciencia, el llamado Consejo de la ciencia, de las 8 personas que lo componen, solo una es
mujer.
Con esto se trata de pensar de otro modo, de instalar conocimiento situados y formulados desde una
conciencia opositiva al decir de Chela Sandoval (2004), que apunte a construir mundos posibles
diversos y múltiples, con las experiencias de lo que ha sido, pero fundamentalmente con el vacío y
la indeterminación del futuro. Finalmente y recordando a la Haraway del manifiesto utópico “La
promesa de los monstruos” se trata de realizar una epistemología otra para una ciencia otra:
En primer lugar, realizaremos un proceso de recepción y selección de trabajos. Para participar del
proceso se deberá enviar un título y resumen de hasta 500 palabras. El tema es libre dentro de lo
que cabe en el concepto de epistemologías feministas por lo que se podrán enviar propuestas ligadas
a cuestiones teóricas, metodológicas y también experiencias de investigaciones realizadas desde una
perspectiva feminista o del género. Serán bienvenidos también los trabajos vinculados a
perspectivas interseccionales.
Una vez seleccionado los resúmenes se solicitará el envío del capítulo en los plazos que se definen
más abajo. El capítulo completo será de 10.000 palabras (título, resumen y desarrollo, referencias).
Refencias APA 6ta edición.
Cronograma:
Email editoras
claudia.calquin@ucentral.cl
herminia.gonzalvez@ucentral.cl
Referencias
Fox Keller, Evelyn. (2003). Reflexiones sobre ciencia y género. Madrid: Morata
Haraway, Donna. (1999). La promesa de los monstruos. Una política regeneradora para otros
inapropiados/bles. Disponible en http://dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=154534
Sandoval, Chela. (2004). Nuevas ciencias. Feminismo cyborg y metodología de los oprimidos. En
VVAA. Otras Inapropiables. Feminismos desde las fronteras. Madrid: Traficante de Sueños,
pp.81-106
Shapin, Steven y Shaffer, Simon. (2005). El Leviatán y la bomba de vacío. Hobbes, Boyle y la vida
experimental. Buenos Aires: Universidad Nacional de Quilmes.