1. Edith atiende a Camilo y Daniela, quienes acuden por dos pérdidas de
embarazo, el primero por embarazo anembrionado y el segundo a las 8 semanas, por causas no determinadas. No han tenido aún ningún hijo, y ambos son de 37 años de edad. Han intentado muchas veces y acudido a fertilidad desde hace tres años sin soluciones ni diagnóstico de causas por el momento. Al iniciar la intervención, Edith intuye situaciones de la pareja que la llevan a plantearles sesiones por separado. En la sesión por separado con Daniela, ella le confiesa que nunca se había planteado tener hijos, pero que Camilo es de formación religiosa fuerte y desea una familia numerosa. Para ella ha sido muy conflictivo que no han logrado hijos luego de 12 años de casados. Finalmente, le confiesa que le han detectado una lesión maligna en cuello uterino, lo que no ha comentado con nadie más. El ginecólogo le ha sugerido una intervención urgente que le obligaría a aplazar los intentos por lograr una gestación. Ella ha decidido darse un año, a lo que el médico le ha advertido alto riesgo. Ante esta situación, Edith plantea sostener la intervención con Daniela pero remitir a Camilo a otro clínico para que elabore temas relacionados con sus elecciones religiosas, en relación a la indebida presión que intuye genera para su esposa. Lo invitamos a resolver las siguientes ¿Qué implicaciones éticas y morales podría tener Edith para plantearse romper la confidencialidad en defensa de la salud de Daniela? ¿Puede distinguir dilemas éticos o morales, profesionales en este caso?
2. Carlos es un muchacho de 15 años, estudiante de un colegio privado, quien
es descubierto por su madre mientras está desnudo en la cama con un amigo de 22 años. La madre lo lleva a consulta bajo presión. Durante las entrevistas relata que desde los 13 años sostiene amistad y relaciones sexuales con homosexuales mayores que él, quienes le han instruído sobre su derecho de afirmación de elección de género. Ha tenido una cierta atracción por una muchacha, pero sus relaciones más duraderas han sido con dos universitarios varones. La orientación religiosa del psicólogo tratante entra en conflicto con la conducta homosexual. Que implicación moral tendría esta situación y cual ética.