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OBJETIVO: identificar los casos o situaciones lingüísticas en las que se debe hacer uso adecuado de la coma.
ASPÉCTO TEÓRICO:
Uno de los grandes desafíos entre los estudiantes está en utilizar, de forma correcta, los signos de puntuación.
Aunque los hemos usado toda la vida, pocos conocen sus funciones exactas. Esto se ve, con mayor frecuencia, entre
los redactores en los medios de comunicación.
No está demás que les demos una repasada, entre todos, para superar cualquier duda que pudiese haber. En este
trabajo, solamente escribiremos acerca de las comas. Del libro Morfosintaxis Hispánica, de Carlisle González Tapia, el
Manual de estilo de la agencia EFE y del Curso de Redacción de Gonzalo Martín Vivaldi extraemos lo siguiente:
La coma.
La coma ( , ) suele indicar una pequeña pausa que se hace al hablar y que exige el sentido. De ahí que, para colocar
las comas correctamente, convenga releer el escrito fijándose en esas pausas breves. Tales pausas suelen coincidir
con el final de entidades gramaticales bien definidas, lo cual permite formular algunas reglas de validez general. He aquí
las principales. Se separan con comas:
a) Los elementos de una serie de palabras o de grupos de palabras, incluso, oraciones de idéntica función gramatical,
cuando no van unidas por conjunción.
b) Los vocativos:
d) Las locuciones y adverbios sin embargo, efectivamente, en realidad, con todo, por ejemplo, en primer lugar, por
último, esto es, es decir, por consiguiente, no obstante, pero, empero, etc.
e) Se escribe coma, igualmente, detrás de una oración subordinada circunstancial cuando precede a la principal:
g) La coma aparece en lugar de un verbo que se omite por ser el mismo de la oración anterior o por sobreentenderse.
Un tren, procedente de Barcelona, chocó con otro que estaba detenido en Sitges.
PRÁCTICA
Ejercicio 1:
El sosiego el lugar apacible la amenidad de los campos la serenidad de los cielos el murmurar de las fuentes la
quietud del espíritu son muy importantes para que las musas se muestren fecundas.
Ejercicio 2:
Tienes que estudiar mucho hijo mío para llevar buenas notas.
Presiento mi querido amigo que vas a llevarte un desengaño.
Sálvanos socorrista que nos ha dado un calambre.
Las señoras lloran las niñas cantan los hombres se van el verdadero calor viene porque es necesario que
llegue el buen tiempo para que crezca el amor.
Ejercicio 3:
Había en Roma en aquella ocasión españoles de todas partes: castellanos gallegos canarios valencianos
mallorquines andaluces...
Los frutos del espíritu son: amor gozo paz riqueza bondad larga espera mansedumbre fe modestia templanza
y limpieza.
El sol baña alegra ilustra fecunda e influye.
Tu hermano sí me hizo caso; tú no.
Año de nieves año de bienes.
Ejercicio 4:
La gallardía de su persona la majestad de sus modales la viveza y prontitud de su ingenio ayudados de una
conversación fácil le ponían a su favor los ánimos de todos.
Dicen de Venecia la reina del Adriático que es la capital del romanticismo.
El ladrón que lo había escuchado todo corrió a darles las noticias.
Y llegando las vísperas de las fiestas toda la ciudad se pone en movimiento.
Yo creo que atareados como estamos todos lo mejor será que cada uno se vaya a su trabajo.
Ejercicio 5:
Es un chico muy reservado estudioso y de buena familia.
Acudió toda la familia: abuelos padres hijos cuñados etc.
¿Quieres café té o un refresco?
Ejercicio 6:
Ejercicio 7:
Ejercicio 8:
En el armario colocó la vajilla; en el cajón los cubiertos; en los estantes los vasos y los alimentos en la
despensa.
Con gran aplomo le dijo a su familia que llegaría a las tres; a sus amigos que lo esperasen a las cinco; y
consiguió ser puntual en los dos casos.
Ejercicio 9:
Ejercicio 10:
Ejercicio 11:
Ejercicio 12:
Los vientos del Sur que en aquellas abrasadas regiones son muy frecuentes incomodan a los viajeros.
Ejercicio 13:
Ejercicio 14:
Ejercicio 15:
Ejercicio 17
Analicemos la siguiente situación para demostrar cómo la puntuación sí cambia el sentido de las expresiones.
Es conocida la historia de las hermanas Soledad, Julia e Irene, que conocieron a un agente viajero que empezó a
frecuentar y enamorar a las tres. Como no sabían quién de ellas era la preferida, le pidieron que declarara sus
intenciones por una de ellas. El hombre envió el siguiente mensaje, en forma de décima
Como el texto no tenía ningún signo, Soledad punteó el mensaje de la siguiente manera, para declararse la elegida:
Como las tres dieron a conocer un texto en la que cada una resultaba favorecida, sin saber quién, le pidieron al
supuesto pretendiente que enviara un nuevo mensaje con los signos de puntuación que aclararan el sentido de su
primer mensaje. Ésta fue la respuesta (en la que las tres hermanas salen trasquiladas):