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DOMINGO
FACULTAD DE CIENCIAS JURIDICAS Y
POLITICAS
fecha: 4/6/2020
Indice:
FUENTES DEL DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO
LA NACIONALIDAD
a) Nacionales, son aquellas que podemos localizar en el orden jurídico vigente de un solo
país. Dentro de esta clasificación encontramos dos tipos de leyes, aquellas que se
desprenden de las normas internacionales y las que se desligan del Derecho Internacional.
Dentro de este tipo de fuentes están la ley, la costumbre y la jurisprudencia.
La Ley como fuente del DIPrivado varía según el sistema jurídico de que se trate. En
México, las normas del DIPrivado se encuentran en los diferentes códigos civiles y de
procedimientos civiles de las diversas entidades federativas.
b) Internacionales, estas son fuentes que constituyen maneras de crear normas jurídicas
que obligan a más de un Estado a respetar acuerdos. Dentro de este tipo encontramos a los
tratados internacionales, a la costumbre internacional y a la jurisprudencia internacional.
Tratados y Convenios
Podemos definir al tratado como un acuerdo por escrito imputable a dos o más sujetos del
Derecho Internacional. El tratado es “la fuente por excelencia de derechos y obligaciones
internacionales particulares amén de excelente coadyuvante en la formación de normas
generales”. Los tratados contienen una triple exigencia: 1) Imputabilidad a entes de
subjetividad internacional; 2) Origina derechos y obligaciones y; 3) Su marco regulador es el
Derecho Internacional. Esta triple exigencia lo diferencia de otros acuerdos escritos. El
tratado consta de dos etapas:
Conferencia de La Haya (Países Bajos, 1899) Fue el primer foro internacional en especificar
las condiciones y requisitos para la celebración de tratados entre los diversos sujetos de la
sociedad internacional. De esta conferencia se desprendieron los principales órganos como
tribunales y cortes internacionales y regionales que hoy rigen el sistema jurídico
internacional.
Conferencia Panamericana.-Código Bustamante (La Habana, 1928)Organizada por el
célebre jurista cubano, ésta conferencia fue una de las precursoras en el continente
americano en establecer las condiciones para la celebración de tratados internacionales.
Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional Esta comisión
cumple cuatro funciones principalmente: a) constituye un foro de discusión sobre el
derecho mercantil principalmente; b) de este órgano surgen leyes modelos para el circuito
mercantil internacional; c) ésta comisión emite guías legislativas y; d) también se dictan
contratos tipo y condiciones generales para futuros actos legales en materia mercantil.
La Costumbre Internacional
Podemos definir a la costumbre internacional como la “norma resultante de una práctica
general, constante, uniforme y duradera llevada a cabo por los sujetos del Derecho
Internacional y realizada con la convicción de ser jurídicamente obligatoria” Existen dos
tipos de costumbre internacional:
positiva (acciones)
negativa (omisiones)
De igual forma, podemos identificar dos tipos de elementos que sustentan a la costumbre
internacional como fuente del Derecho Internacional Privado: el primero de ellos es el
elemento material, es decir la práctica consuetudinaria, la cual debe ser general, constante,
uniforme y continuada o sostenible en el tiempo. Por el otro lado tenemos al elemento
psicológico o motivacional, el cual se sustenta en el principio opinio iuris sive necessitatis,
el cual expresa un convencimiento del sujeto para conformar una obligación jurídica.
La Nacionalidad
La nacionalidad es una situación social, cultural y espacial en la que influyen numerosos
elementos que definen el escenario político y organizacional de un grupo determinado de
personas. Por ser la nacionalidad un hecho social, no puede ser estudiado como un concepto
aislado, y no puede entenderse de manera unilateral, por lo que requiere ser entrelazada con
muchos otros conceptos de la materia sociológica, de manera que el tema pueda acercarse
lo más posible a un concepto palpable.Nacionalidad significa también la pertenencia de una
persona a un ordenamiento jurídico concreto. Este vínculo del individuo con un Estado
concreto le genera derechos y deberes recíprocos. Este tipo de nacionalidad se mezcla
conceptual y prácticamente con el concepto de nacionalidad como situación social, y podría
perfectamente analizarse por separado o como una parte de la nacionalidad social, pues las
leyes son inevitablemente un hecho social.
lro. Todos los nacidos en el territorio de la. República, sea fuere la nacionalidad de sus
padres, exceptuando los hijos legítimos de los extranjeros que se encuentran en servicio de
su nación o que no hubieren fijado su residencia en la República.
2do. Los nacidos en el extranjero de padres dominicanos en el vicio de la República.
3ro. Los hijos de padres dominicanos nacidos en el extranjero están domiciliados en la
República y no declaren al venir a ella, ante el Presidente del Ayuntamiento de su
domicilio, por sí o por quienes lo representan legalmente, que no tienen una nacionalidad
extranjera
4to. Todos los naturalizados conforme ésta Constitución y leyes.
1ro. - Haber sido autorizado por el Poder Ejecutivo, dos años por lo menos a fijar domicilio
en el país.
2do. Declarar, a partir de este tiempo ante el Presidente del de su domicilio, su propósito de
naturalizarse.
3ro. Presentar certificación de Vida y Costumbre, expedid: el Fiscal y el Gobernador de la
Provincia en que resida.
4to. Tener medios lícitos de subsistencia.
5to. Prestar ante el gobernador de la Provincia el Juramento de fidelidad a la República.
En abril de 1908 entró en vigor la constitución que vino a reformar la de 1907, Y cuyo
texto se mantuvo vigente hasta que aconteció la ocupación militar de los Estados Unidos al
territorio nacional, en noviembre de 1916. En la Sección Ira., consagrada a la Nacionalidad
se dice art. 7mo. Son dominicanos:
“Todas las personas que al presente gozaren de ésta cualidad en virtud de Constituciones
y leyes anteriores.
Todas las personas que nacieren en el territorio de la República, sea cual fuere la
nacionalidad de sus padres, exceptuando los hijos legítimos de los extranjeros que residan
en la República en representación diplomática, o que estén de tránsito en ella.
Los nacidos en el extranjero de padres dominicanos, siempre que, de acuerdo con las leyes
del país de su residencia o domicilio, no hayan adquirido una nacionalidad extraña.”
Los artículos 3 y 4 de la Ley Dominicana Sobre Naturalización, trata sobre los efectos
directos o bien sobre las implicaciones en cuanto concierne a facilidades otorgadas a los
miembros de una familia cuando el extranjero, siendo casado y padre de familia, se
naturaliza dominicano. Veamos:
Art. 3. La mujer casada con un extranjero que se naturaliza dominicano podrá obtener la
naturalización sin ninguna condición de permanencia en el país, siempre que la solicite
conjuntamente con su marido y se encuentre en la República en el momento en que la
solicite. Posteriormente a la naturalización del marido, ella podrá naturalizarse sin estar
sometida a ninguna condición, siempre que resida en el país al hacer la solicitud y esté
debidamente autorizada por él; esta autorización no será necesaria si al solicitar la mujer la
naturalización justifica en su instancia que su ley nacional no exige, para la obtención de
otra nacionalidad la autorización marital. En ambos casos, deberán ser pagados los
derechos correspondientes.
Art. 4. Los hijos menores de dieciocho años, solteros, legítimos, legitimados o naturales
reconocidos, adquieren de pleno derecho por la naturalización de su padre la nacionalidad
dominicana; pero tendrán el derecho, cuando lleguen a la mayor edad, y durante un año, de
renunciar a ella, declarando por acta redactada por un oficial público remitida al Poder
Ejecutivo, que desean tener su nacionalidad de origen. Se publicará un aviso de esta
declaración en la Gaceta Oficial y se hará un asiento del caso en los registros previstos más
adelante. Los mismos efectos produce la naturalización de la madre cuando no exista el
padre, o cuando, existiendo tenga la madre la guarda de sus hijos. Finalmente, en lo relativo
a las condiciones de fondo, establecidas por la comentada Ley 1683, el art 5 plantea una
excepción; dice así: No será necesaria la mayoridad de veintiún años para pedir la
naturalización cuando se estuviere casado, o cuando siendo el impetrante mayor de
dieciocho años, estuviere autorizado por sus padres, y a falta de éstos, por la persona que
tengan su representación legal.
La doctrina, en cambio, sin cuestiona la competencia del Estado para determinar por su
legislación quienes son sus nacionales, admite la existencia de ciertas reglas que los
Estados no deben ignorar en la referida materia. Las mismas son generalmente tomadas en
cuenta por los Estados y han sido acogidas en algunos instrumentos internacionales.
Los diversos autores que tratan esta materia están de acuerdo con la existencia de esas
reglas. Niboyet por ejemplo nos cita tres reglas fundamentales; a saber.
Ciertamente, los Estados al legislar toman generalmente estas reglas dándole una base
ampliamente reconocida. Sin embargo, en la práctica resultan frecuentes los casos de
individuos sin nacionalidad y de individuos poseedores de más de una nacionalidad. Surgen
así los casos de apátridas y de doble nacionalidad, generadores de conflictos de
nacionalidades. Las causas de estos fenómenos se analizarán más adelante cuando veamos
los modos de adquisición, modificación y pérdida de la nacionalidad.
Según este sistema, la nacionalidad de los individuos se determina por la filiación. Los
hijos tienen la nacionalidad de sus padres. El fundamento de este sistema descansa, ante
todo, en el factor biológico, haciendo depender la nacionalidad del hijo de la del padre, y
haciendo caso omiso del lugar de nacimiento.
Pertenecen al sistema Jus Sanguinis la mayoría de los Estados europeos. Algunos países de
América han sustentado este sistema en determinado período de su desarrollo
constitucional. Así p. ej. la constitución mejicana de 1857, y la de 1917 establecen que
“Son mexicanos por nacimiento los hijos de padres mexicanos, nacidos dentro o fuera de la
República”, siempre que en este último caso los padres sean mexicanos por nacimiento. A
partir de la reforma de 1933 a la Constitución de 1917 y a partir de la Ley de nacionalidad y
naturalización, el sistema Jus Sanguinis, si bien no fue eliminado en términos absoluto, es
combinado con el sistema Jus Soli.
A diferencia del sistema Jus Sanguinis, cuyo fundamento estriba, ante todo, en la biología,
puede decirse que el sistema Jus Sofí se fundamenta en una ley sociológica que, bajo la
influencia del medio ambiente vincula a los individuos mediante la educación, las ideas y
las costumbres al país donde nació.
Los orígenes del sistema Jus Soli re remontan a la época feudal, sistema que, como dice A.
Weiss “hacía del hombre el esclavo y el accesorio inseparable de Su tierra natal”.22
Entretanto, el sistema Jus So/i no siempre ha respondido a la idea de someter al hombre al
dominio del señor feudal. La motivación o fundamento racional para la escogencia del
mismo ha sido, como veremos, distinta en los Estados americanos. En efecto, la mayor
parte de ellos adoptaron el sistema Jus Soli, constituyéndose en base fundamental de sus
legislaciones sobre nacionalidad, aunque con el transcurso de los años se manifiesta la
tendencia de combinado con el Jus Sanguinis.
Doble Nacionalidad.
Entre estos convenios cuentan los que buscan atenuar algunos efectos que implica el
fenómeno de la doble nacionalidad. Así, hay convenios principalmente de carácter bilateral,
que, basándose en el llamado principio de la nacionalidad efectiva, tratan la cuestión de las
obligaciones militares. Los Estados Unidos y Noruega, por ejemplo, suscribieron en 1933
un convenio, en virtud del cual las personas con nacionalidad de ambos países, pero que
residen por 10 común en uno de ellos y, están más vinculados a él, son eximidas por el otro
Estado del cumplimiento del servicio militar. Entre Bélgica y Holanda se celebró en 1959
un convenio según el cual las personas con nacionalidad de ambos Estados cumplen el
servicio militar en aquel donde viven, pero tiene derecho de hacerlo, si 10 desean, en el
ejército del otro Estado.
En 1963, el Consejo de Europa, en una convención multi1ateral, fijó que el servicio militar
aplicado a personas con doble nacionalidad se ejecutará en el territorio del país donde el
interesado reside y al que está vinculado más efectivamente.
Otros convenios tratan sobre las implicaciones de la doble nacionalidad en materia de
protección diplomática. En la Convención de La Haya del 12 de abril. de 1930
“Concerniente a ciertas cuestiones relativas a conflictos de leyes sobre nacionalidad” se
aprobó, entre otras, que “Un Estado no puede ejercer su protección diplomática en
beneficio de uno de sus nacionales, en contra de un Estado donde aquel es también
nacional.
Hay convenios internacionales que buscan reducir los casos de doble nacionalidad
mediante disposiciones generales. Así, la Convención del Consejo de Europa de 1963,
contempla que, la adquisición voluntaria de una nacionalidad extranjera conlleva la
pérdida de derecho de su nacionalidad anterior. Entre los Estados árabes se celebró en
1954 una convención multilateral, en el marco de la Liga Árabe, tendente a enfrentar los
casos de doble nacionalidad.
b) Los hijos de padres apátridas nacidos en el territorio de un Estado que se rige por el Jus
sanguinis.
Algunas de las causas aquí enumeradas se les ha buscado remedio tanto en las
legislaciones nacionales de algunos Estados como en Convenios Internacionales.
En el Código civil alemán, en su artículo 29 leemos que” A los sin patria se les aplica la
ley del último país a que han pertenecido, y si tal país no puede ser determinado, la del
domicilio, y a falta de éste, la de la residencia. “
El Código japonés, a su vez, dispone en su artículo 8 qué: Los que no tengan nacionalidad
conocida quedan sometidos a la ley del domicilio, y en su defecto, a la ley del lugar en
donde residan”.
El Instituto de Derecho Internacional en su resolución de Bruselas en 1936 sobre “Status
Jurídicos de los Apátridas y de los Refugiados” (Annuare, 1936), señala en su artículo 4
que la ley aplicable a las personas carente s de nacionalidad será la del país ya sea de la
nacionalidad tenida previamente o la de su domicilio o, en ausencia de ambos, la de su
residencia habitual al tiempo que el tribunal considere apropiado o pertinente.
Entre los Convenios internacionales que buscan solucionar los casos de apátridas cabe
mencionar los siguientes:
Convención sobre el estatuto de los apátridas (1954). Fue adoptada por auspicio de las
Nacional Unidas. Está vigente desde junio del 1960. La misma señala, entre otras que el
estatuto personal de todo apátrida se regirá por la ley del país de su domicilio o, a falta de
domicilio, por la ley del país de su residencia.
Los derechos anteriores adquiridos por el apátrida que dependan del estatuto personal,
específicamente los que resultan del matrimonio, serán respetados por todo Estado
contratante… el artículo 12 de la convención de Viena expresa:
Está vigente desde junio de 1960. La misma señala, entre otras, que el estatuto personal de
todo apátrida se regirá por la ley del país de su domicilio o, a falta de domicilio, por la ley
del país de su residencia. Los derechos anteriormente adquiridos por el apátrida que
dependan del estatuto personal, específicamente los que resultan del matrimonio, serán
respetados por todo Estado contratante... (art. 12 de la Convención). Esta convención no se
refiere a mecanismos para eliminar o reducir los casos de apátridas.
Sin duda que, los instrumentos internacionales citados, de ser acogidos por todos los
Estados, significarían a base amplia para reducir o eliminar en el porvenir la apátrida.
Perdida de la nacionalidad
A su vez, el artículo 21 del Código civil dominicano señala "El dominicano que, sin
autorización del gobierno, formara parte de un ejército extranjero o se afiliase a una
corporación militar extranjera, perderá su cualidad de dominicano, no podrá regresar a la
República sino con el permiso del gobierno y sólo recobrará la cualidad de dominicano
llenando las condiciones impuestas a un extranjero para adquirir la nacionalidad".
El párrafo del artículo 12 de la citada Ley 1683 sobre naturalización contempla- que "El
Poder Ejecutivo tendrá capacidad para revocar cualquier naturalización cuando el
favorecido con ella traslade su domicilio al exterior dentro de un año de obtenida, así como
cuando, después de obtenida la naturalización el naturalizado se haya ausentado hacia el
exterior sin regresar al país dentro de los diez años de su partida",
El art 23 se refiere a la facultad discrecional del Ejecutivo para decidir cuando se trate de
una declaración formulada sin estar disuelto el matrimonio; los artículos 24 y 25 están
referidos a cuestiones de procedimiento. Veamos:
Art. 23. Cuando la declaración de la mujer se haga sin estar disuelto el matrimonio, será
referida al Poder Ejecutivo, el cual en este caso podrá decidir que la declaración no tendrá
ningún efecto, conservando la mujer la nacionalidad del marido.
Art. 214. La efectividad de la declaración se comprobará por un aviso publicado en la
Gaceta Oficial.
Art. 25. Se harán los asientos de lugar en los registros previstos en el artículo 70 de esta
ley.
Conclusión
La Carta de las Naciones Unidas, en su Preámbulo, marcó un objetivo: «crear
condiciones bajo las cuales puedan mantenerse la justicia y el respeto a las
obligaciones emanadas de los tratados y de otras fuentes del derecho internacional».
Desde entonces, el desarrollo del derecho internacional y el respeto por el mismo han
sido elementos claves del trabajo de la Organización. Este trabajo se lleva a cabo a
través de cortes, tribunales, tratados multilaterales; así como a través del Consejo de
Seguridad, que puede aprobar misiones de mantenimiento de la paz, imponer
sanciones o, si lo considera necesario, autorizar el uso de la fuerza cuando exista una
amenaza contra la paz y la seguridad internacionales. La Carta de las Naciones
Unidas, considerada un tratado internacional, le otorga estos poderes. Como tal, es un
instrumento de derecho internacional y es vinculante para los Estados Miembros de la
ONU. La Carta de las Naciones Unidas recoge los principios de las relaciones
internacionales, desde la igualdad soberana de los Estados, hasta la prohibición del
uso de la fuerza en las relaciones internacionales.
Bibliografia:
https://www.radoctores.es/doc/07-2018%20V3%20N2-TOMAS%20ORTIZ%20DE%20LA%20TORRE
%20-%20Rep%20dominicana.pdf