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REFLEXIONES SOBRE EL CRECIMIENTO

Numéro 4, septiembre de 2004

Aprendizaje y planificación en las reuniones de reflexión de las


agrupaciones (segunda parte)

La primera parte de los informes sobre las reuniones de reflexión (número 3, agosto de
2004) se concentraba principalmente en las reuniones celebradas en las agrupaciones en donde
se había establecido un vibrante proceso de instituto y cuya atención iba dirigida por lo general
a impulsar la iniciativa personal, las campañas intensivas de instituto, la multiplicación de las
actividades básicas y la promoción de una orientación extrovertida.

En aquellas agrupaciones donde ya se ha experimentado cierto crecimiento y que han


alcanzado el nivel máximo de desarrollo, la atención de las reuniones de reflexión se va
centrando en la puesta en marcha de enfoques intensificadores del crecimiento. De forma
creciente, la atención va enfocándose hacia actividades colectivas de enseñanza y proyectos
destinados a alcanzar a poblaciones receptivas, hecho que exige una mayor preparación y
planificación en las reuniones de reflexión. Sin por ello reducir los esfuerzos dirigidos a
cultivar la iniciativa personal, las instituciones de la Fe con presencia en la agrupación han de
consultar y organizar campañas de programas colectivos de enseñanza orientados a conseguir
un número cada vez mayor de nuevos creyentes. En consecuencia, el batallón de recursos
humanos resultantes, incrementado gracias a las campañas de instituto organizadas en estas
agrupaciones avanzadas, ha conseguido reunir experiencia gracias al establecimiento de
actividades básicas, lo que le permite ahora estar en condiciones de movilizarse para realizar
programas intensivos de crecimiento.

Los tres informes siguientes ilustran la evolución y complejidad en aumento de las


reuniones de reflexión. En Biharsharif, India, las reuniones de reflexión sirven como medio
para que los creyentes aprendan a ser más sistemáticos en sus empresas colectivas. El informe
de la reunión de reflexión del Condado Broward, Florida, en los Estados Unidos, demuestra
cómo estas reuniones pueden emplearse para lanzar una campaña con la que multiplicar las
actuaciones personales de forma significativa, lo que a su vez puede ayudar a incrementar el
crecimiento. Un último ejemplo procedente de Bakú, Azerbaiyán, demuestra cómo las
reuniones de reflexión pueden convertirse en parte del proceso de planificación de las
instituciones, en preparación para la ejecución de programas intensivos de crecimiento.

De la iniciativa personal a la enseñanza en una agrupación rural—Biharsharif, India

La primera reunión de reflexión celebrada en la agrupación de Biharsharif, en el Estado


de Bihar, India, se celebró el 23 de septiembre de 2001. La participación se limitó inicialmente
a unos pocos amigos de tres o cuatro comunidades, mientras que en la actualidad, como
promedio, más de 100 creyentes procedentes de unas dieciséis comunidades participan
regularmente pese a los grandes obstáculos que han de superar, tales como la falta de transporte
y la escasez de infraestructuras. La reunión más reciente, celebrada en agosto de 2004, en la
población de Hargawan, constituyó la 17ª ocasión de este género en que se reunían los
creyentes de todas las zonas de la agrupación.

Hargawan está situada a unos 6 km de los cuarteles generales de Biharsharif. Sin embargo,
para cubrir el trayecto es preciso recorrer unos 23 km de camino a medio asfaltar, o bien seguir
la ruta alternativa, que aun siendo 11 km más corta, requiere vadear dos ríos. Cualquiera que
sea la ruta empleada, de 3 a 10 km de trayecto han de cubrirse a pie. Esta complicación es
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característica de las dificultades que afrontan los habitantes de esta agrupación rural. La Fe se
estableció en la zona hace varios decenios durante un período de enseñanza masiva. Las
actividades bahá’ís revivieron más adelante, durante el Plan de Cuatro Años, y han ido
cobrando impulso durante el Plan de Cinco Años. Las reuniones de reflexión desempeñan un
papel central en el actual crecimiento sostenido y acelerado de la Causa. Un informe sobre el
impacto de estas reuniones de reflexión subraya las siguientes lecciones y experiencias:

• La introducción de una coordinación en el ámbito de la agrupación [un Comité de


Crecimiento de la Agrupación] ha permitido que las actividades, incluyendo las
reuniones de reflexión, resulten mucho más sistemáticas y estén mejor organizadas, lo
que constituye una gran mejora con respecto a lo que ocurría tan sólo meses atrás
cuando el Consejo Bahá’í del Estado o el miembro del Cuerpo Auxiliar debían procurar
de un modo u otro que los amigos se enterasen de la fecha de la siguiente reunión de
reflexión y estuvieran lo bastante motivados como para acudir. Ahora son los creyentes
los que se informan entre sí sobre las reuniones, garantizándose así un alto porcentaje de
participación. No han faltado ejemplos de ocasiones en que los creyentes vienen
acompañados de buscadores a las reuniones de reflexión, las cuales se convierten así en
ocasiones especiales que generan gran entusiasmo y buen espíritu. Por lo general, estos
buscadores participan activamente en las actividades básicas y luego aceptan la Fe y se
suman a una familia bahá’í en continua expansión.

• Es ahora una práctica establecida que a fin de consultar sobre el programa y otros
detalles relacionados el Comité de Crecimiento de la Agrupación se reúna una semana
antes del acontecimiento con la Asamblea Espiritual Local y con otros amigos de la
localidad que se ofrecen para acoger la reunión de reflexión. Por lo general, las
decisiones relativas al programa, la disposición física, las presentaciones especiales,
etcétera, se realizan en estas reuniones conjuntas.

• El coordinador de la agrupación explica: «Las reuniones han sido las responsables de


una gran transformación. Las actividades se han vuelto más sistemáticas y están mejor
organizadas… Hemos notado un hecho muy interesante: las reuniones de reflexión
regulares y efectivas en un principio dieron lugar a un incremento continuo en el nivel
de las iniciativas personales. Pero más adelante, pese a continuar y aun aumentar las
iniciativas personales, la participación en las reuniones de reflexión aportaba a los
creyentes una mayor “orientación comunitaria”, lo que les motivaba a trabajar más
efectivamente en grupos. Estos acontecimientos han potenciado en gran medida la
calidad de las actividades de enseñanza que en la actualidad atraen la participación
entusiasta y confiada de un creciente número de creyentes. Tal espíritu comunitario
contribuye igualmente al refuerzo de las Asambleas Espirituales Locales.»

• Un creyente que aceptó la Fe hace más de veinte años afirma: «Las reuniones de
reflexión han llenado de emoción a la comunidad entera haciéndonos comprender lo
que es preciso hacer y cómo hemos de conseguirlo. La interacción regular en estas
reuniones asegura que nuestros esfuerzos se basen en recursos humanos existentes, un
enfoque que ha allanado el camino del éxito. Lo más emocionante es que cuando nos
tropezamos con dificultades, en la siguiente reunión de reflexión siempre descubrimos
el modo de afrontarlas; con anterioridad, empero, solíamos depender de otras personas
para su superación.»

Concentrar las energías en el aumento de ingresos—Condado Broward, Florida, EE. UU.

El siguiente relato sobre una reunión de reflexión celebrada en el Condado Broward,


Florida, Estados Unidos, ilustra cómo las reuniones de reflexión pueden servir para centrar las
energías de las personas e instituciones de la agrupación a fin de intensificar su crecimiento. El
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informe apareció publicado en Learning About Growth [Aprendiendo sobre el crecimiento],


(volumen 1, número 2, mayo/junio de 2004), boletín que, editado por el Consejo Regional
Bahá’í de los Estados Sureños, sirve para compartir las experiencias constructivas que se
registran en las agrupaciones avanzadas. Su contenido demuestra el espíritu alegre y el
entusiasmo tanto de personas como de instituciones cuya confianza en su capacidad de enseñar
la Fe de manera efectiva ha incrementado. Gracias a un análisis de las actividades que se han
demostrado viables en la agrupación, las instituciones han logrado organizar e introducir un
nuevo plan con que intensificar aún más las labores de expansión y consolidación.

Desde el mismo comienzo de la reunión de reflexión celebrada en el Condado de


Broward, Florida, el 17 de mayo, era evidente que se había puesto enorme cuidado en
aprovechar al máximo el tiempo de los amigos. El Equipo de Apoyo al Crecimiento de
la Agrupación, gracias a una estrecha colaboración con el miembro del Cuerpo Auxiliar
y con el coordinador de la zona (asimismo miembro del equipo), elaboró un programa
de tres horas de duración cuya finalidad era que los amigos concentrasen al máximo su
atención en aprender de los éxitos recientes de la agrupación, así como en estudiar una
estrategia para la consecución de un aumento de 100 nuevos bahá’ís como objetivo
hasta el Riḍván de 2005.

¿Dónde estaba nuestra agrupación y dónde estamos ahora? Los amigos escucharon y
participaron atentamente en la presentación interactiva ofrecida por el miembro del
Cuerpo Auxiliar: El progreso de la agrupación en los tres años del Plan de Cinco Años
ha sido notable. Desde 2001 hasta 2002 hubo siete ingresos. En 2002–2003 tuvimos 14
ingresos. En la actualidad, este último año 2003–2004, la agrupación ha experimentado
46 ingresos. Ello indica que los amigos de la agrupación están aprendiendo cómo
conseguir ingresos continuos y crecientes de nuevos creyentes. También demuestra que
va en aumento el número de amigos que reciben formación y desarrollan sus destrezas
para ser capaces de atraer nuevas declaraciones. Este progreso es importante en dos
sentidos: el crecimiento y la diversidad de los nuevos creyentes.

Hasta la fecha, los logros de la agrupación incluyen 20 reuniones devocionales con 60


buscadores; 40 círculos de estudio con 22 buscadores; 4 clases de desarrollo del
carácter, con 50 buscadores; 6 clases de niños, con 25 buscadores; varias reuniones
hogareñas, con 40 a 80 buscadores; y más de 200 buscadores participantes en las
actividades básicas. Lo que ocurre es que al tiempo que los amigos recorren la
secuencia de cursos, aprenden cómo invitar a los buscadores a las actividades básicas.
También aprenden el modo de integrar las líneas de actuación. Por ejemplo, los padres
de los niños que participan en los programas de desarrollo del carácter comienzan a
participar en los círculos de estudio. Otro ejemplo se produce cuando a los buscadores
que acuden a las reuniones hogareñas se les invita a las reuniones devocionales y
círculos de estudio. Todo ello ha dado como resultado 46 nuevos creyentes.

MCA: ¿Creen que esta agrupación está lista para un programa de crecimiento
intensivo?
Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Cómo saben que están listos?
Amigos: ¡Hemos cumplido las seis condiciones propicias!
MCA: Veamos el documento Cobrando impulso: «Una pregunta planteada
frecuentemente por los amigos es cómo sabrán que su agrupación está lista para un
programa de crecimiento intensivo. Un indicador que no puede pasarse por alto es el
propio crecimiento...» Hemos tenido 46 ingresos este año, así que hemos cumplido con
el primer indicador. Si están de acuerdo, alcen la mano y exclamen «¡SÍ!»
Amigos: ¡SÍ!
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MCA: ¿Tienen un proceso vigoroso de instituto?


Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Están multiplicando las actividades básicas?
Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Están aprendiendo a integrar a los buscadores de una actividad a otra?
Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Cuentan con programas de extensión que funcionan?
Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Están comprometidos en ampliar su aprendizaje?
Amigos: ¡SÍ!
MCA: ¿Están dispuestos a doblar el número hasta llegar a 100? Pónganse en pie y
exclamen «¡Alláh’u’Abhá!».
Amigos: ¡Alláh’u’Abhá!
MCA: Para pasar de 46 a 100 ingresos este año es preciso recurrir a la orientación. En
el documento Cobrando impulso se afirma: «Un programa de crecimiento intensivo
sugiere precisamente eso mismo—intensificación—una intensificación de la actividad
que contribuya al crecimiento sistemático.» ¿Qué actividad creen ustedes que ha atraído
la mayor cantidad de buscadores en Broward?
Amigos: Los círculos de estudio.
MCA: Efectivamente, han sido los círculos de estudio. En primer lugar, establecimos
el contacto. ¿Con quién establecimos contacto?
Amigos: Con amigos, vecinos, compañeros de trabajo, parientes.
MCA: ¿Y luego qué? ¿Cuál es el segundo paso? Les invitamos a las reuniones
devocionales y reuniones hogareñas para luego invitarles a los círculos de estudio.
¿Cuál es el tercer paso?
Amigos: Les invitamos a hacerse bahá’ís.
MCA: Hemos tenido en torno a un 70 a 80% de declaraciones cuando invitamos a los
buscadores mientras realizan los círculos de estudio. Para el programa de crecimiento
intensivo de Broward, simplemente hemos de intensificar dicho proceso.

¿Qué haremos a continuación?


MCA: El pasado año tuvimos una media de 11 a 12 ingresos cada tres o cuatro meses.
Este año deseamos alcanzar 24 a 25 ingresos cada tres o cuatro meses, y unos 40 a 50
buscadores en los círculos de estudio. Esto representa que necesitamos establecer 400
contactos para invitarles a las actividades básicas. De este modo, si cada uno de cien
amigos realizan cuatro contactos dispondremos de un buen comienzo.

Acto seguido, los amigos se dividieron en grupos pequeños para consultar sobre el
modo de decidir cuáles eran sus buscadores y cómo podrían llegar a ellos.

¿Qué elementos hicieron que funcionara esta reunión de reflexión?


1. Estaba bien planificada y organizada por el Equipo de Apoyo al Crecimiento de
la Agrupación, en colaboración con el miembro del Cuerpo Auxiliar y el
coordinador de la zona.
2. El ambiente de la reunión se planificó cuidadosamente para que los amigos
aprendieran.
3. Los amigos presentes en la reunión tenían la sensación de que se encontraban en
movimiento; verbigracia: ¿Dónde estaban? ¿Dónde se encuentran ahora? ¿Qué
van a hacer a continuación?
4. La consulta, basada en la orientación, facilitó que los amigos hallaran las
respuestas a sus preguntas.
5. Los amigos se comprometieron con un plan de actuación para los siguientes
meses.
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6. Las artes se incorporaron de forma efectiva, pero no excesiva, con canciones y


lecturas de poesía bien situadas para mantener una atmósfera inspiradora y
espiritual.

Planificación de un programa de crecimiento intensivo—Bakú, Azerbaiyán

En la agrupación de Bakú, en Azerbaiyán, se celebró una serie de tres reuniones para


poner en marcha un proyecto de enseñanza sistemática. Una sola Asamblea Espiritual Local
supervisa los asuntos de esta agrupación urbana.

1. Reunión con la Asamblea Espiritual Local y los miembros del Cuerpo Auxiliar que sirven
en Bakú. Las instituciones analizaron detenidamente los recursos humanos disponibles y
el actual nivel de actividades, para determinar cuántas personas más podían incorporarse a
los círculos de estudio, clases de niños y grupos de prejóvenes a tenor del nivel existente
de recursos humanos. También debatieron sobre el lanzamiento de un proyecto de
enseñanza para un período de dos semanas con el objeto de enseñar la Fe directamente e
invitar a las personas a sumarse a la Fe o bien inscribirse en los cursos de instituto.
Llegaron a las siguientes conclusiones:

• La Asamblea Local decidió que podía movilizar en torno a 50 creyentes para un


proyecto de enseñanza de dos semanas de duración que iría destinado a alcanzar a unas
500 personas, con la expectativa de que cerca de 50 de éstas o bien se sumarían a la Fe
o bien pasarían a estudiar el Libro 1 del Instituto Ruhí. Además, se confiaba en que al
enseñar la Fe a tantas personas se lograría atraer a las clases infantiles y de prejóvenes a
unos 80 niños. Además, unas 50 personas requerirían seguimiento que se podría
efectuar por parte de equipos de creyentes que llevarían a cabo visitas a los hogares.

• La Asamblea Local decidió anunciar este proyecto de enseñanza en la siguiente reunión


de reflexión, formar equipos de enseñanza y emprender el proyecto de inmediato tras la
reunión.

• La Asamblea Local constituyó un grupo de trabajo para coordinar el proyecto de


enseñanza previendo que, a su finalización, se valoraría la conveniencia de convertir el
grupo de trabajo en una estructura más permanente, por ejemplo un comité de
enseñanza local.

2. Reunión con los coordinadores de la Junta Nacional de Instituto y coordinadores de Bakú.


La reunión constituyó una oportunidad para explorar conjuntamente el funcionamiento de
la Junta de Instituto y de sus coordinadores a la luz del programa intensivo de crecimiento
que en seguida habría de lanzarse. El instituto venía realizando una actividad elogiable en
la agrupación de Bakú; ya a principios de junio, existían 19 círculos de estudio, 10 clases
infantiles y 4 grupos prejuveniles.

• Las discusiones se centraron en la idea de formar tres grupos de recursos humanos


dedicados a cada una de las tres líneas de formación—círculos de estudio, clases de
niños y actividades para prejóvenes—, de modo que los creyentes, al completar los
cursos, podían ofrecerse para desarrollar su capacidad en una de estas tres líneas. De
este modo, cada coordinador de agrupación dispondría de un «ejército en alerta» al que
poder recurrir y con el que reaccionar prestamente ante las necesidades que a no dudarlo
iban a surgir como consecuencia del lanzamiento en Bakú del programa intensivo de
crecimiento.

• Los tres coordinadores de agrupación del instituto se pusieron en contacto con


numerosos creyentes a fin de recopilar sus respectivas listas de recursos humanos
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disponibles. Cuando concluyera la fase correspondiente al proyecto de enseñanza, le


tocaba al instituto proporcionar rápidamente los recursos necesarios para la formación
de cuantas personas expresaran su pronta disposición a sumarse a las actividades de
formación y educación.

3. Reunión de reflexión en la agrupación de Bakú. Aproximadamente 60 amigos acudieron


a esta reunión. Los miembros de la Asamblea Local y del Cuerpo Auxiliar ofrecieron la
idea de lanzar un programa de crecimiento intensivo en Bakú. Se identificaron cuatro
grupos receptivos, y se pidió a los amigos que se sumaran a uno de los equipos que
habrían de enseñar a estos grupos.

• Cuarenta y ocho personas se sumaron de forma entusiasta a los equipos. Aunque la


mayoría de estos amigos eran los que estudiaban los libros superiores del instituto,
también los había que solamente habían realizado uno o dos libros, así como unos pocos
que no participaban en el proceso de instituto.

• Se formaron siete equipos que contaron con una persona de cada equipo seleccionada
para actuar de cabecilla. La reunión rápidamente se dividía en pequeños grupos, para
que cada equipo pudiera empezar a consultar sobre su propio plan y enfoque.

• El instituto de formación anunció un curso de refresco sobre el Libro 6 a fin de que los
miembros del equipo refinasen sus enfoques en torno a la enseñanza. Al concluir la
reunión, se había generado un gran entusiasmo y un gran interés por lanzarse al campo
de la enseñanza.

Preparado bajo los auspicios del Centro Internacional de Enseñanza para la institución de los
Consejeros. Pueden publicarse pasajes de estos informes de forma modificada para facilitar su
gramaticalidad, claridad o tamaño. Puede reproducirse el texto en su totalidad o en parte y
distribuirse dentro de la comunidad bahá’í sin el permiso previo del Centro Internacional de
Enseñanza

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