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Pornotopía

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Dario Berrio
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ISSN 2011 - 9347

www.lafulminante.com

Número 13 // 2013
P e r spe c tiva s S oc ia l es de la

P O R N O G R A F Í A

Número 13
Σ
Σ COMITÉ EDITORIAL SIGMA N°13 // ÍNDICE
Revista Sigma Dirección
SIGMA es una publicación editada por Profesor Javier Sáenz Obregón
estudiantes de Sociología de la Universidad Edición
Nacional de Colombia – Sede Bogotá; Edwin Castro Romero//Cristian Salamanca
publicada desde el año 2000. Édison Torres//William Sánchez Perversiones Sexuales e Internet Pág 7
Numero 13 / ISSN 2011-9347 Alejandro Camacho//Jesús Quiroga Monroy Iván Francisco Mendoza Niviayo
Facultad de Ciencias Humanas Carolina Hormaza//Jeison Sáenz//Oscar Gamba Estudiante Sociología
Universidad Nacional de Colombia
revistasigma@gmail.com Corrección de Estilo
facebook.com/groups/revistasigma Albalucia del Pilar Gutiérrez Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, Pág 23
Diagramación y Diseño en Yucatán, México.
issuu.com/gestiondeproyectos Juan Pablo Nieto Una perspectiva de género
Andrés Felipe Barriga (PGP) José Gamboa Cetina
RECTOR UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA Profesor Investigador
Ignacio Mantilla Equipo de Colaboradores Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), México.
VICERRECTOR DE SEDE BOGOTÁ David Alejandro Cruz Página 23
Diego Fernando Hernández Sara Márquez
Poringa!: Tránsitos por el Placer Colectivo Pág 39
DIRECTOR BIENESTAR SEDE BOGOTÁ Universidad Nacional de Colombia Elkin Marin // Leonardo Sarmiento // Jorge Yopasá
Oscar Oliveros Cra 45 No 26-85 Edificio Uriel Gutiérrez Estudiante Sociología // Estudiante Psicología // Estudiante Antropología
COORDINADORA PROGRAMA Sede Bogotá Universidad Nacional de Colombia
GESTIÓN DE PROYECTOS www.unal.edu.co
Elizabeth Moreno Categorías de clasificación del porno Pág 50
DECANO FACULTAD CIENCAS HUMANAS Derechos de Autor y Licencia de distribución: en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía
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DIRECTORA BIENESTAR CIENCIAS HUMANAS puede ser distribuido, copiado y exhibido por Estudiante de Sociología
María Elvia Domínguez terceros si se muestra en los créditos. No se Universidad Nacional de Colombia
DIRECTOR DEPARTAMENTO puede obtener ningún beneficio comercial.
SOCIOLOGÍA El porno no está de-generado Pág 68
William Mauricio Beltrán Celly Impresor: GRACOM Gráficas Comerciales Jaime Enrique Acosta
Egresado de Sociología
La revista de Estudiantes de Sociología SIGMA es una revista de diferentes temáticas y enfoques disci- Universidad Nacional de Colombia
plinarios de las Ciencias Humanas, de la Universidad Nacional de Colombia y de los estudiantes vincu-
lados. Los textos presentados en la siguiente publicación expresan la opinión de sus respectivos auto-
res y la Universidad Nacional no se compromete directamente con la opinión que estos pueden suscitar.
Σigma

PRESENTACIÓN los temas realmente importantes como el fenómeno social es digno de ser estudiado,
conflicto armado, la pobreza, el medio am- incluso aquellos que parecen ser triviales,
biente, etc.; pero esta es una falsa disyun- grotescos, transgresores, excitantes o «de
tiva, porque los objetos de investigación son moda», pero con la rigurosidad que requiere
relevantes en la medida en que los investiga- realizar cualquier investigación científica.
dores los problematicen de forma adecuada. Los artículos que aparecen en este número
Los temas pueden convertirse en superficia- cumplen, a juicio del comité editorial de la
les por la forma en que son tratados pero no revista, con este requisito: la rigurosidad. Se
por su ontología particular. Recordemos que presentan análisis desde diversas perspecti-
a través del estudio de los gustos en materia vas y disciplinas (psicología, sociología, an-
de arte o del consumo de ropa, cosméticos o tropología), algunos centrados en tratar de
comida, Pierre Bourdieu logró realizar uno entender las clasificaciones raciales, sociales
de los análisis más completos sobre las cla- y corporales que se dan en las páginas porno-
ses sociales en occidente. gráficas; otros dan cuenta de las relaciones
Ahora bien, lo que si debe generar pre- de género en el porno impreso o de la forma
La pornografía es un tema pertinente campo en el que emergen nuevas formas de vención y análisis crítico en el mundo aca- en que los públicos acceden a la pornografía,
para las ciencias humanas y sociales por sexualidad, que se caracterizan, para po- démico es la proliferación de trabajos que en a través del estudio de prácticas de consumo
una sencilla razón: la gente la disfruta. Y ner solamente un tema sobre la mesa, por nombre de un pretendido posmodernismo (virtuales o personales); y otros más que ex-
no solo eso, pagan millones de dólares a in- ser completamente asépticas, por convertir alaban el «todo vale» metodológico y teóri- ploran la aparición de prácticas denomina-
numerables páginas que ofrecen variados el contacto de los cuerpos, el correr de los co, creyendo ser innovadores por superar las das como «perversiones» en internet.
servicios: shows en webcams, descarga de fluidos y los gemidos de los amantes en un viejas categorías de la «modernidad», cuan- Finalmente, queremos agradecer de for-
películas, sexo amateur en vivo, estableci- espectáculo destinado al goce de solitarios do en realidad solo están produciendo artí- ma especial a Nadia Granados, la artista
miento de contactos con personas en la ciu- cibernautas. culos y libros de dudosa calidad. Este tipo creadora de la Fulminante (una actriz de
dad de residencia. Que las personas acce- En ciertos sectores del mundo académico de trabajos contribuyen a polarizar el ridí- pornoterrorismo que realiza performance
dan a internet buscando placer sexual es, parece existir reticencia a abordar temas que culo debate «modernidad-posmodernidad» con contenido político), y a Geraldine Casti-
de por sí, un hecho social que merece ser son entendidos como «superficiales», como y a deslegitimar una mayor incursión de la llo Mariño, por permitirnos usar algunas de
analizado. Tratar de entender la relación parte de una realidad subsidiaria y por tanto academia —por lo menos la colombiana— sus imágenes para esta edición de la revista
entre la tecnología y el cuerpo, y más es- irrelevante; entre estos se encuentra la por- en temas como la pornografía. Cualquier de estudiantes de Sociología SIGMA.
pecíficamente el cuerpo que desea, es una nografía. La causa de dicha prevención fren-
labor que ha tenido cierto auge en algunos te tiene que ver en buena medida con un de-
campos disciplinarios, como los Estudios bate inocuo y por demás mal planteado: mo-
Feministas y de Género, pero que requiere dernidad/posmodernismo. Los intentos por
más investigación. La sociología y la antro- estudiar temas actuales como las redes so-
pología de la cultura, a través de metodolo- ciales, la moda o el porno son vistos, en oca-
gías como la etnografía visual, pueden ayu- siones, como muestra de un supuesto «pos-
dar a comprender que la pornografía es un modernismo» que nos desviaría de estudiar

4
Σigma

Resumen

Los debates y discursos sobre la sexualidad se han enfocado en el impacto negati-


vo de la pornografía en las sociedades modernas desde un extremo uso de la politi-
zación del deseo, por ello el presente artículo busca, en primera instancia, realizar
una hermenéutica de la perversión, utilizando conceptos como la «coincidentia oppo-
sitorum» y «deseo», además de sugerir otros como la «apofenia sensual». Asimismo,
busca ofrecer, a través de una sociología compresiva, una reflexión alterna sobre
la construcción social de las perversiones sexuales y su relación de «puissance» con
la internet.
Foto: Angie Ariza Palabras clave: perversiones, potencia, pornografía, internet, carnaval, deseo, subversión.

Abstract

Perversiones
Debates and discourses about sexuality have always been focused on the negative im-
pact of pornography on modern societies from an extrevme use of the politicization of
desire. Thus, this article aims to make a hermeneutics of perversion, using concepts

sexuales
like «coincidentia oppositorum» and «desire», besides to suggest another one as «sensual apo-
phenia». Also, tries to offer, through a comprehensive sociology perspective, an alter-
native consideration about social construction of sexual perversions and its «puissance»

e internet
relation with internet.
Key Words: perversions, power, pornography, internet, carnival, desire, subversion

Iván Francisco Mendoza Niviayo


Introducción
Estudiante de Sociología Unal
En las últimas décadas, la pornografía se determinada, existen cifras aproximadas
hircodeus@gmail.com desprendió de formatos como el video análo- que indican que la pornografía produce 2.6
go y se incorporó al extenso mundo del in- mil millones a 3,9 mil millones de dólares
ternet, su incorporación transformó la for- anualmente1, distribuido en videos (500
ma y los medios de consumo pornográfico millones a $ 1,8 mil millones), Internet (1
en las sociedades contemporáneas, al pun- mil millones), Pay-per-View (128 millones)
to que la industria de la pornografía, sue- y revistas (1 mil millones), el numero de
le considerarse hoy en día como una de las
1  Según informe de Forrester Research citado por
más grandes a nivel mundial. Aunque el ta-
Forbes. (2001). Web. 15 Mar. 2012 <http://www.for-
maño de la industria puede ser difícilmente bes.com/2001/05/25/0524porn.html>

Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 7


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búsqueda de términos relacionados con sexo día agenciamos nuestro deseo, en las fronte- información). Estos son ejemplos de una una amplia tradición de producción cine-
es mayor que la suma de los términos «jue- ras de lo prohibido y lo legitimo. serie de nodos que adquieren valor al ob- matográfica. Bajo este gran capital intelec-
gos, bromas, carros, salud, trabajo» combi- Para lograr entender la relación actual de servar la red de interrelaciones, agenciados tual que se produce en la región, la porno-
nados , su crecimiento entre los años 2001 y
2
las perversiones y la internet, debemos de- por el capital humano. grafía fluye a la par para posicionar a San
2007 fue de un 500% ; 71.9 millones de vi-
3
tenernos en las fuerzas y fenómenos que La pornografía tiene por capital al «San Francisco Valley como epicentro de la por-
sitas a sitios pornográficos oficiales, repre- confluyeron en el crecimiento de la indus- Fernando Valley» apodado también como «San nografía. No por el hecho Per se que resida
sentan el 42.7 de la audiencia de internet en tria pornográfica, luego se realizará un aná- Pornando Valley» o «Porn Valley» en alusión al allí uno de los centros más importantes de
el año 2005 ; según Morality in Media, —una
4
lisis sobre la «potencia de la perversión» y el juego de palabras entre porno, Silicon Va- la industria cinematográfica, sino por la
ONG interreligiosa norteamericana— un «deseo» en lo societal, para terminar con la lley y San Fernando, ubicado en California; importancia estratégica del capital intelec-
76% de los adultos entrevistados desaprue- relación entre perversiones e internet. estado que a nivel demográfico presenta tual que amalgama instituciones, empre-
ban ver pornografía en internet por ser mo- la segunda ciudad más poblada de Estados sas, tecnología, personajes, universidades,
ralmente inaceptable. ¿Qué valor tienen to- La industria pornográfica: unidos, Los Ángeles, la cual tiene 3,792,621 entretenimiento, movimientos sociales,
das estas cifras sociológicamente? ¿En dón- un espacio para Dionisio habitantes y una densidad de 8,091.8 por productoras y una amplia red de comercio
de se entrecruzan? La sexualidad ha sido un La representación erótica o pornográfica milla cuadrada de superficie6. Un informe mundial.
tema constante, pero rara vez central en la lleva una larga tradición en las diferentes de la OTIS (Report on the Creative Economy of the El crecimiento de la industria del entre-
sociología (Guash, 1993) detrás de ella, fenó- sociedades del mundo. Frente al debate de Los Angeles Region ) afirma que esta ciudad es
7
tenimiento se sirvió de la tecnología de
menos como el consumo de la pornografía erotismo y pornografía, se debe decir que actualmente la «Capital creativa del mun- medios masivos de información como la
han recaído en teorías provenientes del psi- tal frontera solo hace referencia al marco do» debido a que por cada residente, existen música, la televisión y el cine que ayuda-
coanálisis, la medicina y la sexología, cuya de legitimidad sobre lo subjetivo, que se re- seis que se dedican a la industria creativa, ron a provocar rápidos cambios sociales y
visión biomédica inscribe a la pornografía sume, en la frase de André Breton «La por- fácil de observar en la diversidad de empre- un crecimiento mediatizado de la infor-
en unas fronteras de lo normal, seguro y nographie, c’est l’érotisme des autres» . La porno-
5
sas con diferentes fines de entretenimiento mación, fenómeno que generó dudas para
político, y confinando prácticas alternas de grafía como industria se cristaliza durante que componen la ciudad. Cerca encontrare- ciertos autores —con una inclinación pesi-
sexualidad a lo nocivo, pervertido o patoló- el siglo XX, en Los Ángeles, California, en mos el famoso Silicon Valley, el centro de alta mista— ante el poder de los medios sobre
gico. De manera indirecta analizar lo que se medio de un ambiente social que contenía tecnología, cuna de la inmensa mayoría de la sociedad, en su mayoría motivados por
denomina «pervertido» nos revela el para- situaciones históricas como las recompo- empresas computacionales y núcleo de de- el malestar que les provocaba el declive de
digma contemporáneo sobre el cuál hoy en siciones sociales (liberación femenina, re- sarrollo de la internet. Los Ángeles es igual- ciertas características sociales de la época.
volución sexual, hippismo, New Age) la satu- mente conocido por ser el epicentro de la El crecimiento del entretenimiento se basó
2  Free Speech Coalition. (2005).White Paper: Re- ración de instituciones sociales y la lucha industria del cine, Hollywood, símbolo por justamente en el desarrollo paralelo de
port on the Adult Entertainment Industry, Docstat.
Web. 15 Mar. 2012.  <http://www.docstoc.com/ política (familia, aborto, procreación, ra- antonomasia del entretenimiento cinema- nuevas tecnologías, tanto de cámaras foto-
docs/6117965/Free-Speech-Coalition-WHITE-PAPER-
cismo, igualdad de derechos), económicas tográfico, en donde se encuentran escuelas gráficas, como de video en los 60 o el Video
A-Report-on-the>
3  Eric Schlosser. The Business of Pornography. US (industria del entretenimiento) y tecnoló- de cine tan reconocidas como la USC School Streaming en la actualidad. Estos se volvie-
News & World Report, 2 February 1997. Web. 17 Mar. gicas, entre otras (televisión, aplicación de of Cinematic Arts, que han repercutido en ron asequibles a un público cada vez ma-
2012. <http://www.usnews.com/usnews/biztech/
articles/970210/archive_006163.htm> redes de comunicación, medios masivos de yor. La televisión se integró a la vida diaria
4  Nielsen/Net Ratings, (2003). Qtd. in Internet 6  Informe de U.S Census Bureau http://factfin- de las sociedades y la sexualidad comenzó
Pornography Statistics, My Kids Browser. Web. 17 5  « la pornografía es el erotismo de los otros» en der2.census.gov/faces/nav/jsf/pages/index.xhtml
Mar. 2012. <http://www.mykidsbrowser.com/inter- http://www.evene.fr/celebre/biographie/andre-
a despegarse de las instituciones sociales,
7  http://www.otis.edu/assets/user/Creative%20
net-pornography-statistics.php> breton-628.php?citations> Economy%202009%20report(1).pdf fragmentándose en nuevas fenómenos

8 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 9


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sociales como la re-composición social en corpus sirvió como fuente en el desarrollado Entre los 60 y los 80, el feminismo se co- En el mundo desarrollado, con su porno-
el hippismo, la liberación femenina o el ho- de arduos debates en la segunda mitad del mienza a cristalizar como ideología fuerte grafía corrosiva, innumerables amantes,
mosexualismo por mencionar solo algu- siglo anterior en torno a la pornografía. De en los movimientos contraculturales que sobre todo jóvenes, «programan» sus re-
nos. Estos fenómenos se contemplaron una manera muy general, se pueden esbo- buscan enfrentarse a las figuras patriar- laciones sexuales, consciente o incons-
desde aquello que se denominó «Revolu- zar tres grandes focos de atención sobre los cales de las instituciones sociales, el apo- cientemente, conforme a líneas semió-
ción sexual», la cual se caracterizó por la cuales se movilizaron dichos debates y de los yo académico y la «Revolución sexual» son ticas prefabricadas. Lo que debería ser
separación de la sexualidad de las institu- cuales se observa la transformación de las el sustento principal de este movimiento. el encuentro humano más espontáneo y
ciones sociales que la regulaban. Los nue- instituciones en las últimas décadas: la fa- Los grupos feministas centran su atención anárquico, más individualmente explo-
vos movimientos buscaban reivindicar po- milia, la mujer y los niños. en la abolición de la pornografía por repre- ratorio e inventivo, sigue un guión en
siciones alternas o contraculturales ante En la veintena del 40 al 60, los debates so- sentar una forma de «violencia legítima una proporción mucho más amplia de lo
las normas sociales, lo que influyó en el bre lo pornográfico son, en gran parte, una contra la mujer», que trae consigo la de- que se piensa. (George Steiner)
capital intelectual de universidades y ciu- herencia de los procesos de censura de obras gradación de esta bajo la estructura sexual
dades de California como centros impor- artísticas del siglo XIX, enfocadas principal- patriarcal. Hoy, los nuevos debates desde Esta idea sobre prácticas sexuales de riesgo
tantes en la gestación de estos movimien- mente en los casos literarios. El punto cen- el feminismo otorgan toda una policromía es casi un leitmotiv en el gobierno de lo sexual
tos, como fue el caso de la Universidad de tral de la censura de aquellas obras es la su- de ideas sobre la relación de las mujeres que permite reafirmar desde lo institucional
Berkerly donde el hippismo cobró vital im- puesta perversión de los valores familiares: con la pornografía (Prada, 2010) En las úl- las fronteras de legalidad y prohibición. El
portancia; ejemplo de ello es el documen- mujeres con múltiples amantes, bacanales, timas décadas y en especial desde del año miedo a no tener control sobre las prácticas
tal «A History of the Blue Movie» (1970)8 donde encuentros extramatrimoniales, relaciones 2000, el foco de debate se ha centrado en sexuales y la subversión de sexualidades al-
una pareja hippie tiene relaciones dentro sexuales antes del matrimonio, homose- la imagen de lo infantil y su relación con ternas o pervertidas es un tema viejo que se
de dicha universidad, la misma en la que xualismo etc. Documentales de propagan- los fenómenos relacionados con la porno- manifiesta con forma nueva.
hoy día se dictan clases como Cine y el acto da como «perversion for Profit» financiado por grafía: orientación sexual, salud sexual,
sexual, donde se exponen filmes pornográ- Charles Keating buscaban defender los valo- prostitución, entre otros. El nuevo debate Transmutación de valores:
ficos, o la universidad de Irvine donde se res familiares, ante la degradación de la por- gira sobre la configuración negativa de la perversión, subversión y deseo
invita actores porno a la clase de Sociología nografía. Este afán por proteger a la figura sexualidad a estereotipos pre-fabricados, Como se mencionó anteriormente, exis-
de la sexualidad. 9
«familiar religiosa» es en medida una res- hipersexuales y distorsionados por la satu- tieron tres focos de atención en los deba-
Las universidades pronto fueron escena- puesta desesperada ante los rápidos cambios ración de material pornográfico, resaltan- tes sobre la pornografía, estos se movilizan
rios donde comenzó a politizarse la sexua- de la institución familiar ante la pos-guerra do el desenfreno de lo mediático, el simu- desde una triada naturaleza – reproducción
lidad, generando una tradición de estudios y las recomposiciones sociales. Estos movi- lacro de lo sexual y la perversión del sexo. – genitales, sobre los cuales se traza la fron-
sobre el impacto de la pornografía desde la mientos reivindicaron la posibilidad de te- (Boyle, 2000) tera de lo que se denomina lo «normal» en
reivindicación de derechos sociales, dicho ner relaciones premaritales o la posibilidad Actualmente, existe multiplicidad e in- la sexualidad moderna. A esta tríada la de-
de otras formas conyugales como la unión terdisciplinaridad de estudios sobre el im- nominaremos lo «Apolíneo», y a su contra-
8  Tim Dirks. History of Sex in Cinema:The Grea- libre. Su reivindicación se inscribió en es- pacto de la pornografía en la sociedad, este rio, lo «Dionisiaco», se le atribuirá lo artifi-
test and Most Influential Sexual Films and Scenes.
tructuras jurídicas y no religiosas. Con este tipo de estudios hacen un énfasis constan- cial – ocio – conjunto.
Web. 17 Mar. 2012. <http://www.filmsite.org/sexin-
films21.html> ambiente político, se inaugura un segundo te en el riesgo de la sexualidad de futuras Es necesario resaltar que la sexualidad es
9  Koga / Laist. Sociology Of Sexuality @ UC Ir-
foco de atención: la reivindicación de la mu- generaciones que consumen pornografía a una elaboración social, en donde confluyen
vine, 11/8/07. Web.   12 Mar. 2012. <http://laist.
com/2007/11/13/sociology_of_sexuality.php> jer y su rol. edad temprana: fenómenos sociales, históricos, políticos.

10 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 11


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Foucault en su Historia de la sexualidad afirma improductivas al no generar descendencia el camino/sentido equivocado, trastornar orden ligando temporalmente dos escena-
que «el sexo, […] es el elemento más espe- y desgastar el semen y, finalmente, pero », en este caso «per» no actúa como prepo- rios opuestos a nivel social y alterándolos
culativo, más ideal y también más interior más importante aun, al no remitirse a los sición sino como intensificativo «per-verter» a nivel institucional. Las fronteras son lí-
en un dispositivo de sexualidad que el poder genitales como centro de atención. «dar vuelta, girar, derrumbar, alterar, des- neas de soberanía donde un territorio aca-
organiza en su apoderamiento de los cuer- Actualmente la «salud sexual» y la «salud ordenar» luego hacia el siglo XVI continua ba y empieza; en nuestro caso las «perver-
pos, su materialidad, sus fuerzas y sus pla- reproductiva» son derechos relacionados con el mismo sentido semántico «quien siones» son líneas de fronteras sociales,
ceres» (p.188). La sexualidad es una cons- pero independientes entre sí; sin embar- abandona una doctrina o sistema consi- donde lo que se considera «normal, natu-
trucción histórica que obedece a poderes go, no todo el tiempo fue así. Durante gran derado como verdad, apostata» 10
aunque ral o autorizado» se funde y se separa de
institucionales que la constriñen y se ins- parte del desarrollo de occidente, las es- con variaciones posteriores «perverso» in- lo que se denomina «anormal, contra na-
cribe en la potencia de una trayectoria bio- tructuras sociales heredadas del judeo-cris- dica «Sumamente malo, que causa daño tura, prohibido» lugar de transición don-
gráfica que asimila, reproduce, reconfigu- tianismo ligaban la reproducción con el po- intencionadamente», «que corrompe las de frecuentemente los sujetos agencian su
ra o subvierte a estas fuerzas. Es importan- der patriarcal del hombre en el ámbito fa- costumbres o el orden y estado habitual de deseo y que se puede expresar en la máxi-
te mencionar que este poder es «abstracto, miliar. La virilidad era una virtud cuantita- las cosas»; luego en 1897, el psiquiatra Ha- ma: «el sabor de lo prohibido es el placer
mecánico, racional y la «puissance» potencia, tiva y no cualitativa, y se imbuía de la idea velock Ellis usa el término «pervertir» para más deseado».
encarnada, orgánica, empática» (Maffesoli, de crecimiento, progreso, trabajo; toda designar «quien tiene una perversión en Es por esto que la perversión es por sí mis-
93). La sexualidad es fluir y fluido; más su- práctica que se desligara de este aspecto era el instinto sexual» (Martins, María; Cec- ma una acción o acto que le permite al su-
perposiciones que estrictas demarcaciones. una perversión ante la normalidad, una carelli, Paulo: 1993) en este último pun- jeto subvertir (sub/per-versión) los escena-
(Friday, 1981) trasgresión ante los valores. Con el desa- to, como se mencionó preliminarmente, rios de poder institucional por la potencia
Es justo en este punto donde una re- rrollo de la Ilustración y la creación del dis- lo religioso ahora concierne a lo biológi- societal, puesto que dentro de la «potencia
flexión de las perversiones bajo la luz de lo curso biomédico, la sexualidad se desliga co, el pecador se transforma en enfermo y de la perversión» se agencia el deseo, ese
societal nos puede develar las estructuras, del enunciado religioso para adentrarse en el desviado en perverso. La perversión deja «fluir y fluido» que contiene la alteración,
potencias y poderes que confluyen en las la definición de lo biológico. El nacimien- de ser entendida en un primer momen- el trastrocamiento, la subversión de lo Apo-
sociedades modernas. La perversión nos to de la clínica inaugura una sexualidad en to como apostasía para inaugurarse como líneo. Esta «potencia de la perversión» radi-
enseña los espacios en oscuro en donde el su plenitud «Apolínea», tan iluminada en u elemento «contra natura» en el paradigma ca en la fusión de dos escenarios diferentes:
ojo todopoderoso de lo racional parece ence- sí que niega la participación «Dionisiaca» biomédico del siglo XIX, para finalmente el ligamiento de las antípodas de sentido
guecerse y hace surgir la potencia de la «doc- dentro de ella; el discurso médico legítima instalarse contemporáneamente en el pa- en una «coincidentia oppositorum». Esta «coin-
ta ignorantia». Se debe anotar que mencio- la perversión como patología y condena las radigma del «riesgo». cidencia de opuestos» es un tema arquetí-
nar un estado «perverso» es asumir de an- prácticas ajenas a la triada institucionali- Las «perversiones» a nivel sociológico de- pico en las diferentes sociedades, en buena
temano su correlato, un estado «normal»; zada a lo enfermo. ben ser entendidas como una frontera de medida, debido a que surge de una estruc-
prácticas como la asfixia, la coprofilia, la En necesario revitalizar la etimología de construcción social en donde se funden y tura cognitiva más que cultural:
zoofilia, la mutilación sexual, el sadismo, esta palabra. La semántica del verbo «per- se fundan la legalidad y la ilegalidad, la La coincidentia oppositorum el misterio de
la necrofilia se inscriben por fuera de las vertir» hacia el año 1300 e.c. hacía referen- autorización y la prohibición, lo sagrado la totalidad puede llegar a compren-
fronteras de la triada de lo Apolíneo, con- cia a «convertir a alguien de una creencia y lo profano, lo Apolíneo y lo Dionisiaco. derse tanto a través de los símbolos, las
denadas a lo oculto, perverso u prohibido. religiosa correcta a una falsa o errónea» Prácticas que trastocan o transmutan el teorías y las creencias concernientes a
Estás prácticas se entienden como contra na- este concepto proveniente del francés an- la realidad última […] explican la crea-
10  http://www.etymonline.com/index.php?
tura al ir en dirección opuesta a lo natural, tiguo «pervetere» designa «corromper, tomar term=pervert ción por la fragmentación de una unidad

12 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 13


Σigma Σigma

primordial, los rituales orgiásticos, que opuestos11, no indica que sepamos de an- No la poseería realmente, sino después y sentidos que potencian el deseo sobre un
persiguen la dislocación de los compor- temano cual es la relación de oposición de de haber atravesado aquellos lugares que objeto simbólico que lo representa.
tamiento humanos y la subversión de los dichos escenarios, puesto que el impacto la rodeaban de recuerdos, velo que mi de- Tomemos a modo de ejemplo el cuento
valores. (Eliade, 81) de la subversión reside en ligar dos esce- seo ansiaba arrancar, velo de esos que la de Guy de Maupassant La cabellera (1884), un
narios que no guarden ninguna relación Naturaleza interpone entre la mujer y al- hombre es internando en un hospital por-
Estructura cognitiva común tanto en para el sujeto. Para que se pueda dar esta gunos seres (con la misma intención con que se ha enamorado de una cabellera que
la sexualidad como en el humor, debido relación, debe producirse la experiencia que coloca el acto de la reproducción entre encontró en un compartimiento oculto de
a que la «coincidentia oppositorum» es la «po- de algo que se denominará «apofenia sen- los humanos y su más vivo placer, y en- un mueble italiano del siglo XVII, sus de-
tencia subterránea» de subversión que sual». En 1958, el neurólogo Klaus Conrad tre los insectos y el néctar el polen que no seos son tan intensos por el manojo de cabe-
tiende a dislocar temporalmente las fuer- proponía el concepto «apofenia» para des- tiene más remedio que llevarse), con ob- llo, que intenta casarse con estos. La histo-
zas de poder de lo Apolíneo con lo Dioni- cribir aquel fenómeno que experimentan, jeto de que, engañados por la ilusión de ria inevitablemente nos recuerda a los casos
siaco. Ejemplo de esta «fractura fundado- tanto las personas con psicosis, como la poseerla así de modo más completo, ten- contemporáneos de sujetos que manifiestan
ra» se puede encontrar en los Kõan de la gente creativa al tener la «percepción es- gan necesidad de apoderarse primero de tener deseos sexuales por autos, máquinas o
tradición Zen, en el proceso de creatividad pontánea de conexiones y el significado los paisajes que rodean a la mujer, pai- robots (mecanofilia), atracción por los ma-
que Arthur Koestler nombra como «biso- de los fenómenos no relacionados». Esta sajes que serán más útiles a su imagina- niquíes o estatuas (agalmatofilia), por zapa-
ciación» (Rubia, 2005), La «enantiodro- experiencia puede hallarse perfectamen- ción que el placer sensual, pero que sin él tos (retifismo); por nombrar solo algunos.
mia» de Jung, el «Paracharáxai tó nómisma» o te en la mayoría de los sujetos —no estric- no habrían tenido fuerza bastante para Cada una de las anteriores prácticas es-
«la transmutación de los valores» de Dió- tamente en lo patológico— y es el sustrato atraer al hombre12. capa de la triada naturaleza – reproducción
genes el Cínico, o en la «risa redentora» de diferentes fenómenos sociales con di- – genitales de lo Apolíneo y se inscribe en lo
de Peter Berger. ¡He ahí a la potencia de ferentes intensidades: epifanías, teorías El desear no es un acto que haga referen- Dionisiaco artificial – ocio – conjunto. Dado
la perversión! de conspiración, creatividad, chistes, sin- cia a la unidad, sino al conjunto. Lo que que representan rasgos en apariencia ajenos
En cada uno de estos ejemplos, la «Coin- cronicidades, revelaciones y, en nuestro realmente se mueve detrás del deseo es un a la naturaleza del sexo (naturaleza / arti-
dentia oppositorum» contenida en la «poten- caso especial, en el deseo. En este último, desear en conjunto que ubica a lo deseado en ficial) se confinan solo al placer sin mayor
cia de la perversión» funciona como una podemos entender la «apofenia sensual» una maraña de significantes y significados transcendencia (reproducción / ocio) y final-
forma de transmutación, alteración o sub- como aquella experiencia que partiendo que se entretejen. Afirma Deleuze segun- mente no responden exclusivamente su pla-
versión de dos escenarios opuestos en uno de sentire opuestos se funda en un sensus dos más tarde «no deseáis nunca a alguien cer a los genitales, desviando su atención al
nuevo. A esta altura debe hacerse la salve- conjunto. o algo, deseáis siempre a un conjunto […] Yo deseo en conjunto (genitales / conjunto). Es
dad de no politizar la perversión; puesto Deleuze explica el deseo citando a Proust no deseo nunca algo y nada más; asimismo, aún más claro en el cuento de Maupassant,
que el deseo que se agencia en la «potencia en el documental de Pierre André El abeceda- tampoco deseo un conjunto, sino que deseo ya que podemos identificar las sensaciones/
de la perversión» no obedece a una lógica rio de Gilles Deleuze: en un conjunto». El deseo no se encuentra sentire separadas entre sí que terminan por
racional; ni mucho menos a las estructu- en los puntos nodales, sino en las diferentes fundirse en la atracción desmesurada por el
ras euclidianas del poder; en este sentido, 11  Con «opuesto» no debe entenderse exclusivamen- interacciones de estos. Este deseo en conjun- objeto, verbi gratia:
te como contrario, sino como lo describe la RAE en la
se asemeja más al concepto de «rizoma» to es lo que le da sentido «al morbo», una se- El hombre tiene por entretenimiento co-
primera de sus acepciones: «opuesto: que se muestra
de Deleuze o a la dístopia de las estructu- completamente diferente». Con esto no se limita la rie de contextos, situaciones, sentimientos leccionar viejos muebles de la época
relación solo a una línea recta de oposición, sino se
ras oníricas. Cuando se dice que la «coin- [primer sentire] «Buscaba muebles an-
amplía en un horizonte de diferencias o escenarios 12  Fragmento de En busca del tiempo perdido: II. A
dentia oppositorum» liga dos escenarios desconocidos entre los escenarios ligados. la sombra de las muchachas en flor tiguos y objetos viejos; y a menudo

14 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 15


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pensaba en las manos desconocidas que en un profundo sentido / sensus para aquel cuando la construcción totalizadora de las secuencial. «Somos nuestra memoria, so-
habían palpado esas cosas, en los ojos hombre. La cabellera ya no es solo elemen- instituciones apolíneas se posesionan como mos ese quimérico museo de formas in-
que las habían admirado, en los corazo- to para el hombre, ahora tiene un profundo paradigma. Verbi gratia la exterminación del constantes, ese montón de espejos rotos».
nes que las habían querido» sentido agenciado por el deseo en conjunto. paganismo por parte del poder cristiano que Borges afirma igualmente que el hombre
Hasta este momento su pasión por la ca- nunca fue completa, la potencia mitológica ha desarrollado instrumentos como formas
En determinado momento, siente una bellera no responde a las estructuras eu- que se expresó en la tradición oral y el fol- de extensión de su cuerpo «El microsco-
atracción profunda por un mueble del si- clidianas del poder, no se soporta comple- clor sirvieron como medio de transmisión pio, el telescopio son extensiones de su vis-
glo VXII menta en una lógica racional, no se en- societal. Los libros durante los siglos XVII ta; el teléfono es extensión de la voz; lue-
[Segundo sentire] « ¿Por qué me persiguió cuentra politizada ni gira exclusivamente hasta el XX fueron medios con doble fun- go tenemos el arado y la espada, extensio-
el recuerdo de ese mueble con tanta fuer- bajo las estructuras patriarcales. El deseo ción al institucionalizar como a su vez de nes del brazo. Pero el libro es otra cosa: el
za, haciéndome volver atrás? Me detuve que ha agenciado el hombre sobre la ca- dispersar, en el silgo XX los medios audiovi- libro es una extensión de la memoria y de
ante la tienda para verlo de nuevo y sentí bellera solo se transforma en perversión, suales se instalan como los medios centra- la imaginación»13. Pues bien, la internet
que me tentaba» cuando su potencia privada se expone al les del crecimiento de la industria del entre- como medio societal es una extensión del
ámbito del poder de lo público. Solo has- tenimiento, junto a la potencialización de deseo: potencia y no poder, atemporal y no
Un día, observando detenidamente el ta que la potencia subterránea de lo se- nuevos fenómenos sociales y el retorno de temporal, fragmentación en vez de unidad,
mueble, encuentra la existencia de una cá- xual se expone en la superficie de lo polí- otros societales. Finalmente, el desarrollo pluralidad en vez de unidad, laberíntico. La
mara oculta que le revela una cabellera de tico se proyecta en los otros la transgresión de la internet en los 90 y su desarrollo en las internet es el escenario de la perversión por
mujer que se encontraba escondida [cuar- institucional. últimas décadas lo inaugura como el medio antonomasia, donde los poderes se subvier-
to sentire] hasta ese momento, la cabellera principal de lo societal. ten y las potencias predominan. Escenario
no representa mayor cosa que una sorpresa La subversión carnavalesca: Esto se debe a que la internet como me- de catarsis del deseo, donde el sujeto se su-
para el hombre, poco a poco, este comienza perversiones e internet dio tiene una característica que está estre- merge en los límites difusos de lo privado y
a imaginar y reconstruir con intriga y pa- Dentro de la configuración de lo público chamente ligada con los procesos societa- lo colectivo.
sión en su cabeza la historia detrás de aque- y lo privado se esconde el patrón mitológi- les: lo hipervinculable. La internet se so- La internet esconde la potencia del mito
lla cabellera co de lo sagrado y lo profano, ordenamien- porta en un conjunto de redes descentrali- carnavalesco, lo privado y lo público no se
[Quinto sentire] «Una extraña emoción se to de las labores humanas en tiempos o lu- zadas e interconectadas que, utilizando un anulan; convergen en una subversión que
apoderó de mí. ¿Qué era aquello? ¿Cuán- gares cualitativamente diferentes. La im- lenguaje en común, conectan a millones de altera espacial y temporalmente el orden
do? ¿Cómo? ¿Por qué habían ocultado portancia del medio que permite el orde- usuarios; este a su vez, funciona a través de de ambos, eso es justamente lo que pode-
esos cabellos en el mueble? ¿Qué aven- namiento es principal aquí. Los rituales de una lógica no-secuencial que permite la hi- mos leer entre líneas en la creación de la in-
tura, qué drama escondía ese recuerdo? las diferentes sociedades permitían ser el pertextualidad entre una colección de frag- dustria pornográfica. Una fragmentación
¿Quién los había cortado?» medio donde se efectuaba el ordenamiento mentos de información por referencias lla- y subversión de los sentidos de lo sexual y
Es en este justo momento donde la expe- del caos y el orden (Eliade, 1999). Las fiestas madas hiperlinks. En el proceso societal, los lo erótico sin la exclusiva intervención de
riencia de la «apofenía sensual» comienza eran medios con límites claramente tempo- sujetos interconectan entre una maraña lo institucional. Los medios, aunque obje-
a conectar aquellos elementos sin conexión rales y espaciales que permitían el funcio- de sentire/sensus, fragmentos de pensamien- tivos, siempre caen en la subjetividad del
[sentire]; lo que no tiene ninguna relación namiento de lo prohibido dentro de lo au- tos descentralizados y dispersos, ideas, re-
13  Borges, J. Sobre el libro web. 15 Mar. 2012.
confluye y los «opuestos coinciden», ha- torizado. El medio como dispositivo socie- cuerdos, códigos, estatus, normas etcétera,
http://bibliotecaignoria.blogspot.com/2010/10/jor-
ciendo surgir la «potencia de la perversión» tal adquiere un valor de subversión negada, sin obedecer necesariamente a una lógica ge-luis-borges-el-libro.html

16 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 17


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mensaje, pueden servir para el discurso ofi- BDSM (práctica consentida de dominación y La visión pesimista sobre la pornografía moderna Sexología reproduce ese esque-
cial de lo Apolíneo o subvertirse en lo Dio- sumisión), Amateur (parejas reales), Urofi- y su impacto en la sociedad nos revela de ma... (Guasch, 1993)
nisiaco; la internet y las perversiones están lia o lluvia dorada (excitación por la orina) manera indirecta el paradigma contempo- En coherencia con este paradigma la Ame-
tan ligados una con la otra, al representar podofilia (atracción por los pies), misofilia ráneo sobre el cual hoy ordenamos lo au- rican Psychiatric Association en el año de 1987
escenarios donde se funde y se funda lo pri- (placer por la ropa sucia), asfixia erótica, torizado, lo prohibido y lo pervertido en decide cambiar el término de «perversión»
vado con lo público. Glory hole (agujero en pared de lugares públi- lo sexual: el énfasis en negar el «riesgo». por «parafilia» en un giro eufemístico. Este
Internet como escenario de la subversión cos donde se puede observar o practicar re- Las sociedades modernas occidentales han nuevo término politizado de seguridad sirve
carnavalesca le permite cambiar fácilmen- laciones a través de este), autofelación, ex- construido, bajo el simulacro del progreso como sustento de orden de lo legitimo en lo
te de «personalidades» a los sujetos; se debe hibicionismo, Footjob (masturbación con los y el bienestar, un discurso politizado que sexual, se instaura en un auto-gobierno del
recordar que «persona» se deriva del griego pies), ducha romana (atracción por el vó- como paradigma niega de manera rotun- sujeto (Foucault, 2009) enfatizando la res-
prospora que significa «máscara» . De igual 14
mito), frottage (contacto de la vagina con el da la participación del «riesgo» dentro del ponsabilidad de una «sexualidad sana» o un
manera, en los carnavales, el sujeto moder- ano del hombre), frotismo (rozamiento con orden de la sociedad: muerte, enfermeda- «sexo seguro». Hoy por hoy, aquella perso-
no usa avatares, seudónimos o perfiles fal- desconocidos), dogging (relaciones en grupo des, violencia, agresión, destrucción son na que no es capaz de gobernarse a sí mis-
sos que le permiten desdibujar las fronteras en lugares públicos), clismafilia (excita- estados que se deben superar o evitar. La ma recae en la categoría creada de «adicto
de lo anónimo y lo público. ción por enemas). Estas prácticas constitu- ecología, el derecho a la vida, la antitauro- al sexo» o «pervertido» al poner en riesgo su
La pornografía no es una industria unila- yen apenas un pequeño grupo de la extensa maquia y el deporte son ejemplos política- salud o la de otros (Irvine, 1995). Sin embar-
teral en la producción de material erótico, constelación de categorías que se encuen- mente correctos que hacen énfasis en ne- go, como se ha intentado mostrar, la sexua-
la popularización de internet junto a dispo- tran en internet. gar la incertidumbre o lo nocivo en el inte- lidad y el deseo son lugares distópicos que
sitivos audiovisuales ha provocado que mi- De manera errónea se usa el concepto de rior de los social, los tres focos de atención no obedecen exclusivamente a politización
llones de personas, parejas o grupos, com- pornografía como un simple género que sobre los debates de la pornografía que se bajo la cual se han interpretado. De forma
partan material en la frontera de lo anóni- engloba todo un universo de prácticas eró- mencionaron en el principio (la familia, la paralela a la jerarquía patriarcal de lo Apo-
mo y lo público, en lo erótico de lo carnava- ticas disímiles, que no estriban en un solo mujer y los niños) son un ejemplo de esto, líneo, lo Dionisíaco se manifiesta potencial-
lesco. La industria de la pornografía no es tipo de consumidor, puesto que existe toda la familia disfuncional, la violencia con- mente. Mujeres que fantasean con una vio-
una sola, es un conglomerado de millones una demografía múltiple de la pornogra- tra la mujer y la amenaza en la infancia lación autorizada u hombres que imaginan
de personas que han decido producir mate- fía: adultos, ancianos, niños, jóvenes, ca- se sostienen en el discurso político de un ser violados vestidos de mujer; mujeres do-
rial según sus deseos, y que no se encuen- sadas, vírgenes, lisiados, discapacitados, estado de seguridad, del cual no se libra la minando y castigando a su pareja o disfru-
tra anclada de manera exclusiva —como al- etcétera que componen un grupo heterogé- sexualidad : tando de la sumisión y las bofetadas; hom-
gunos estudios lo siguieren— a la división neo que no es predeterminadamente pasi- La sexología no libera al sexo. Al contra- bres deseando ser penetrados por una mu-
genital del softcore y hardcore. Contrario a esto vo en el consumo de material pornográfico, rio (como la religión y la medicina) le da jer o disfrutando de ver a su novia con otros.
existe una dispersión del enfoque genital los sujetos tienen la plena capacidad de de- pautas y lo ordena. Con estilo diferente Mujeres que compran dildos con formas de
que centra su atención al deseo en conjunto sarrollar múltiples sentidos móviles y ne- el control permanece […] El cristianis- dragón u hombres soñando con muñecas
y se observa en la especialización de géne- gociables desde el marco biográfico particu- mo, primero, y la Medicina, después, hentai. La «potencia de la perversión» es, en
ros pornográficos, BBW Big Beatifull Womans, lar. La moralidad nunca es tan solida como defienden la pareja y una sexualidad lo cotidiano, un «rito de transito» moderno,
Fisting (inserción del puño en ano o vagina), aparece, siempre existe un tipo de flexibili- coito-centrica, interpretan la sexuali- que todos usamos en nuestra sexualidad.
dad en el escenario Dionisiaco que se pacta dad femenina en términos masculinos, A modo de reflexión, queda observar que
1 4   h t t p : / / w w w. e t m o n l i n e . c o m / i n d e x .
php?term=person&allowed_in_frame=0 en el silencio. y condenan las disidencias sexuales. La existe una variable que se escapa en los

18 Iván Francisco Mendoza Potencia de la perversión: perversiones sexuales en internet 19


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estudios sobre pornografía y tiene una con- mayo comulgó torturado por la curiosi- Referencias Bibliográficas
notación importante: la curiosidad. Mien- dad. Más tarde le hizo la pregunta a Pe- •  Anta Félez, J. (2001). Entre el artificio y el género: el cine pornográfico. En La Ventana.
tras lo Apolíneo busca en la altura la luz, lo tronio, el enfermo sacristán que vivía en Revista de Estudios de Género. Vol.II Nº 14. Guadalajara, diciembre.
Dionisiaco aferra sus raíces en lo profundo la torre y que según decían se alimenta- •  Boutang,P. & Pamart, M. (Realizadores) (1996) L’Abécédaire de Gilles Deleuze. Francia: Femis lla.
del suelo; puesto que la prohibición es la ba de murciélagos, y Petronio le constó: •  Boyle, K. (2000). The Pornography Debates: Beyond Cause and Effect. Women’s Studies In-
mejor incitación. «Es que hay cristianos corrompidos que ternational Forum, 23 (2), pp. 187-195.
El interrogatorio fue para José Arcadio hacen sus cosas con las burras.» José Ar- •  Deleuze, G. & Guattari, F. (1975). El anti Edipo, capitalismo y esquizofrenia. Madrid: Paidós.
Segundo una revelación. No le sorpren- cadio Segundo siguió demostrando tanta •  Eliade, M. (2001). Mefistófeles y el Andrógino. Barcelona: Kairós.
dió que el padre le preguntara si había curiosidad, pidió tantas explicaciones, •  Eliade, M. (1999). Lo sagrado y lo profano. Barcelona: Kairós.
hecho cosas malas con mujer, y contes- que Petronio perdió la paciencia. -Yo voy •  Friday, N. (1981). Men in Love. New York: Dell.
tó honradamente que no, pero se descon- los martes en la noche -confesó-. Si pro- •  Foucault, M. (1984). El nacimiento de la clínica, una arqueología de la mirada médica. México: Siglo XXI.
certó con la pregunta de si las había he- metes no decírselo a nadie, el otro mar- •  (2009). El gobierno de sí y de los otros, curso en el College de France. Mexico: Fondo de cultura económica.
cho con animales. El primer viernes de tes te llevo. (Márquez, 223) •  (2003). Historia de la sexualidad. México: Siglo XXI.
•  Guasch, O. (1993). Para una Sociología de la Sexualidad. En: REIS. Revista Española de Investigacio-
nes Sociológicas, nº 64, octubre-diciembre.
•  Irvine, J. (1995). Reinventing Perversion: Sex Addiction and Cultural Anxieties. En Journal of the
History of Sexuality, Vol. 5, No. 3 pp. 429-450. Web. 14 Marz. 2012 http://www.jstor.org/
stable/4617181
•  Martins, Maria. Ceccarelli, Paulo. (2003). The So-called Deviant Sexualities: perversion or right to
difference? Presented in the 16th World Congress: Sexuality and Human Development: From
Discourse to Action. 10–14 March 2003 Havana, Cuba.
•  Marquez, G. (1996). Cien años de Soledad. Bogotá: Norma.
•  Maffesoli, M. (1992). La transfiguration du politique. París: Grasset & Fasquelle.
•  Nietzche, F. (1973). El nacimiento de la tragedia o Grecia y el pesimismo. Madrid: Alianza Editorial.
•  Prada, Nancy. (2010). ¿Qué decimos las feministas sobre la pornografía? Los orígenes de
un debate. En: Colombia la Manzana de la Discordia ISSN: 1900-7922 ed: Programa Editorial De
La Universidad Del Valle v.5 fasc.N/A p.7 - 26
•  Rubia, F. (2008). Sobre la Creatividad. Consultado 15 de marzo en http://www.tenden-
cias21.net/neurociencias/Sobre-creatividad_a13.html
•  Steiner, G (s/f). Las Lenguas de Eros. Traducción de Alberto Román. Web. 14 Marz. 2012 en
http://www.ddooss.org/articulos/otros/Steiner.htm

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Resumen

Lectoras y lectores
Este trabajo forma parte de los resultados de una investigación más amplia enfo-
cada al estudio y análisis de los discursos sociales que circulan en las historietas1,
para así esclarecer cómo se producen y reproducen las imágenes y los papeles socia-

de la historieta
les de género.
En este artículo se propone un objetivo más acotado: describir la comercialización de la
historieta pornográfica, así como las prácticas de lectura de hombres y mujeres que los

pornográfica
consumen. Los satisfactores que encuentran en su consumo, haciendo énfasis en las di-
ferencias por género.
Palabras clave: historieta, historieta pornográfica, género, socialización, consumidores de la

mexicana, en
historieta.

Yucatán, México.
Introducción

Una de las herramientas que nos permite realizó durante los meses de enero a julio

Una perspectiva
hacer un acercamiento a los elementos de del año 2010.
construcción de la sexualidad es el análisis Una de las técnicas de investigación uti-
de los consumos culturales, en la medida lizadas fue la observación. Realicé un reco-

de género
en que los medios de comunicación masiva rrido por todo el primer cuadro de la ciudad
son un instrumento de ideologización coti- de Mérida, incluyendo los principales mer-
diano al que mujeres y hombres tiene fácil cados de esta zona y las plazas comerciales
acceso (Yehya, 2004). que expenden este tipo de historietas3.
En esta investigación se realizó un aná- Posteriormente elegí nueve para obser-
lisis del discurso y del contenido de las var el consumo de estas publicaciones.4 Mi
José Gamboa Cetina 1

historietas pornográficas2 que se publica- selección se basó en dos criterios: el prime-


Profesor Investigador del Instituto Nacional
ron durante el año 2010, así como un estu- ro fue que estuvieran o fueran representa-
de Antropología e Historia (INAH), México.
dio de audiencias. El trabajo de campo se tivos5 de diferentes zonas de la ciudad de
marcialzetina@hotmail.com
1  En este trabajo se utilizarán como sinónimos có-
mics e historietas. 3  Plaza Oriente, Plaza Dorada y Plaza Fiesta.
2  El único antecedente de una investigación sobre la 4  Previamente establecí una relación de confianza
historieta pornográfica, en Latinoamérica, es el artí- con los voceadores o dueños del establecimiento y les
culo de Vergueiro, (2003), sobre las historietas eróticas pedía permiso para realizar la investigación.
del artista brasileño Carlos Zéfiro, quien publico un 5  La representatividad se estableció en función de
cómic pornográfico durante las décadas de los 50 y 60, la cantidad de ejemplares vendidos de estas publica-
del siglo XX. Sobre el cómic erótico on line, puede con- ciones, y a que fueran los establecimientos más po-
sultarse: Gamboa y Cortés (2007) pulares en sus respectivas zonas.
1  Profesor-investigador titular «C» del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), México.

Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 23
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Mérida. El segundo fue que tuvieran un toda una ideología. Los vínculos entre el Actualmente, se reconocen catorce géne- femeninos, y se utilizan ángulos y en-
amplio surtido de historietas eróticas. La cómic y la sociedad son muy complejos. La ros de historietas8, de los que se despren- cuadres para enfatizarlos, o hacerlos
muestra estuvo integrada de la siguiente historieta es un vehículo de conexión entre den, a su vez, una gran cantidad de subgé- más evidentes9.
manera: tres del primer cuadro de la ciu- el mundo de las ideas y el ámbito de los cam- neros que, para los propósitos de este tra- 2. -La soft-porno se basa, como su nombre
dad, uno del mercado Lucas de Gálvez, uno bios sociales. El cómic puede ser visto como bajo, no vale la pena enumerar. La histo- lo indica, en imágenes y situaciones en
del mercado de Santiago, uno del mercado un producto cultural, que es transformador rieta erótica es uno de los catorce géneros donde el sexo sólo se sugiere, por lo que
de la colonia Alemán, uno de Plaza Fiesta, y/o confirmador de imaginarios , ya que en
7
principales. las imágenes nunca llegan a la represen-
uno de Plaza Dorada y uno de Plaza Orien- las historietas se plasman los imaginarios Aunque considerada por muchos como tación directa. Generalmente son dirigi-
te. En cada uno de estos expendios perma- de los escritores y dibujantes y confluyen una forma más de la historieta de caracte- das a jóvenes y adolescentes.
necí tres días laborales6. con el imaginario de quienes los consumen. res, la historieta de temas sexuales se ha 3.  -La historieta erótica busca represen-
En el aspecto cuantitativo diseñé un for- La historieta es un poderoso canal de educa- hecho de un lugar muy especial dentro del tar la sexualidad desde su perspectiva
mulario-encuesta que diera cuenta de los ción informal (Monsiváis, 2004: 5). medio. Su tratamiento va desde las formas estética, por lo que si bien el dibujo y el
hábitos de consumo del cómic pornográfi- El cómic es una representación de repre- más plásticas, hasta aproximaciones real- guión suelen ser muy reveladores, el tra-
co. Este cuestionario se aplicó a cien hom- sentaciones y esto también repercute en la mente vulgares, abarcando una cierta can- tamiento se hace de forma más pensada,
bres y a cien mujeres. cuestión de los efectos. Por otra parte, el tidad de puntos intermedios que la hacen lográndose trabajos excelentes en el te-
El formulario-encuesta contenía datos cómic contribuye a construir la realidad a una de las formas de historietas con mayor rreno artístico. Es de hecho, lo mejor de
que permitieron elaborar un perfil gene- través de la conformación de imaginarios variedad y popularidad. este género. Uno de sus principales expo-
ral de las y los consumidores. Las pregun- sociales, creando universos de referencia, A pesar de esta amplitud, de acuerdo nentes es el artista italiano Milo Manara.
tas fueron las mismas para ambos géneros, moldeando el sentir social, alimentando con Garza (2004) se pueden reconocer cua- 4.  -La porno cómica o picaresca erótica
con fines de comparación. La aplicación de las representaciones sociales o fomentan- tro subgéneros bien definidos, aunque abarca los aspectos cómicos de la sexuali-
la encuesta-formulario se llevó a cabo de do el morbo, en particular en los temas re- ninguno de ellos cabe cien por ciento en dad. Se encuentra más bien situado den-
marzo a julio del año 2010. ferentes al sexo y a la violencia. Por otra el mismo. tro del género de humor, pero el uso de la
Para completar mi información, llevé a parte, los cómics son un vehículo trans- 1.  -La historieta pornográfica es aqué- sexualidad como elemento cómico per-
cabo entrevistas semiestructuradas con in- misor de estereotipos femeninos y mas- lla cuyo único fin es provocar el mor- mite que se le considere también dentro
formantes claves. En total se realizaron 20 culinos. Los estereotipos de género son bo, despertar la excitación. Por tanto, de este.
entrevistas (10 a hombres y 10 a mujeres). un subtipo de los estereotipos en general, las escenas son crudas y directas. Fre- De acuerdo con el análisis realizado, se
Estas tuvieron como fin profundizar en as- definidos como «creencias consensuadas cuentemente se muestran los genitales puede decir que los cómics distribuidos en
pectos que en el formulario-encuesta que- sobre las diferentes características de los Yucatán se ubican de la siguiente mane-
8  Es conveniente aclarar que la historieta es un produc-
daban a nivel superficial. hombres y las mujeres en nuestra socie- ra: la historieta pornográfica representa el
to cultural que recibe diferentes nombres según el país.
dad» (Los certales, 1999: 21). En España lo llaman tebeo. En Francia se le conoce como 45%; la porno cómica el 30%; y la soft-porno
La historieta pornográfica bande dessineé. En Italia se le denomina fumetto. En los Es-
el 25%.
tados unidos de Norteamérica se le denomina comics. En
La historieta tiene sus propias reglas, está 7  El impacto social de los cómics motivó que im- Japón se le conoce como manga. En Brasil se llama cuadrin-
portantes teóricos e investigadores se hayan dedi- ios. En Cuba, México y otros países de América Latina se 9  Cuando un dibujante selecciona un encuadre y
dotada de un código muy particular donde
cado al estudio del cómic como producto cultural, le denomina historieta. En la ciudad de México se le con- un ángulo para una escena, hace mucho más que
los dibujos y los textos incluidos expresan entre ellos tenemos a Eco, 1973; Gubern, 1972, 1977, oce también como monitos, y en Yucatán, que es donde mostrar al público lo que sucede allí. Se seleccio-
2002; Gubern y Gasca, 1994;Moix, 1968; Monsiváis, se realizó esta investigación se le conoce también como nan determinadas facetas de la escena para atraer la
6  Por un día laboral entiendo el horario completo 1977, 1982, 2004; Dorfman y mattelart, 1980; Aurre- novelitas, cuentos, aunque con la globalización cultural, un atención de los lectores hacia ciertos aspectos de la
de labores del expendio o establecimiento. coechea, 2001; Bartra,2001, entre otros. sector de jóvenes lo conocen también como cómics. acción o de la anatomía de los y las protagonistas.

24 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 25
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La comercialización de la en paradas continuas; Historias en los mercados 7.  -Divorciadas y ninfómanas: El club de Ejea publicó Sexo servidoras, al poco tiempo
historieta pornográfica y tianguis. las divorciadas; Juegos sexuales; Veinticuatro ho- editorial Mango sacó al mercado Las del talón.
en Mérida, Yucatán 2.  -Por enfatizar lo lúdico del sexo: Pa- ras de placer; Historias íntima; Diario de un hotel; Ambas con una temática muy similar.
Cualquier persona que recorra las calles changueras, reventadas y jaladoras; Picaras, infie- El libro del placer; Para llegar al clímax; Calor en- En Mérida, existen dos distribuidores que
del primer cuadro de la ciudad se sorprende les y ponedoras; La loca historia del sexo; Cachon- tre las piernas. tienen el monopolio de estas historietas, y
de que una ciudad como Mérida, que tie- das de lavadero y chismosas; Querubines y diabli- 8.  -Western erótico: La ley del revolver; son los que surten a los cientos de expende-
ne fama de tradicionalista y conservadora, llas; El rey de la seducción Casanova; Todo pasa de Mega vaquera; Praderas sin ley; Pistolero. dores o voceadores del estado de Yucatán. El
tenga tal cantidad de expendios de periódi- viernes a doming;Caliente caliente: historias del 9.  -Policíaca y nota roja: Mega policíaca; 90% de los cómics sale cada semana, orga-
cos y revistas, y que dentro de estas sobre- mete y saca; No más la puntita; ¡Sóbamelas con Nota roja; Novela policíaca; La neta del cholo. nizados de tal manera que diariamente se
salgan las eróticas. Existen cruceros via- ganas!; Bolita por favor; El consolador anónimo; 10.  -Terror erótico: Mega terror; PHX; El ca- ponen a la venta tres o cuatro publicacio-
les en los que exhiben sus productos has- Jacuzzi caliente; Buenas y ponedoras; Sabrosonas rruaje diabólico; Las entrañas de lo oculto. nes; de esta forma se busca que no saturen
ta cuatro voceadores. Es así que revistas de y bien entronas. 11.  -Tipo Manga: Sexy Tatoo; Chicas trabaja- el mercado, y los consumidores puedan ad-
colores brillantes —predominan el rojo y el 3.  -Historias de prostitutas: Las maes- doras; Llamaradas. quirirlas cotidianamente. El otro 10% se pu-
amarillo— muestran fotos y dibujos de mu- tras del colchón; Sexacional de cariñosas, Damas 12. -Homosexualidad femenina: Amor blica quincenalmente.
jeres y hombres desnudos o semidesnudos, de la noche; Sexo servidoras; Bellas y cariñosas; lésbico; Vulvas ardientes; Aventuras de la vagina; De acuerdo con entrevistas realizadas,
protagonistas de historias, chismes, escán- Las chambeadoras; Ardientes confidencias de la La novela de la calentura; Devórame otra vez; El se sabe que si pasado un tiempo no se ven-
dalos o historias ficticias. Dentro de este Madame; Las del talón; Cariñosas; Cama calien- discreto encanto de ser lesbiana. den todas, los expendedores pueden devol-
mundo «editorial» destacan las historietas te; Las ficheras; Mujeres trabajando sexualmen- Es menester señalar que algunas histo- verlas, siempre y cuando se encuentren en
pornográficas, de las cuales los yucatecos te; Ardientes confidencias de la Madame; Bellas rietas combinan dos o tres de estos tipos. buen estado. Los empresarios recurren en-
son ávidos consumidores. de noche. Por ejemplo: Bellas y cariñosas, ubicada como tonces a una estrategia de venta: cuando
En Yucatán se comercializan en la actua- 4.  -El sexo como pecado o depravación: «historias de prostitutas», también podría surge una nueva historieta, las venden al
lidad ochenta y seis cómics eróticos dife- Lujuria mortal, Relatos morbosos; Rela- incluirse en «lo lúdico del sexo», por lo que dos por uno, es decir, regalan una atrasada,
rentes . Los cuales pueden clasificarse de
10
ciones obscenas; Cuentos perversos; La vida de So- podría hablarse de categorías mixtas. con lo que aseguran su consumo.
acuerdo con los siguientes criterios: doma y Gomorra; Almas perversas; Los demonios De acuerdo con el análisis de contenido y Por otra parte, en el mercado «Lucas de
1.  -Por tipo de actividad, oficio o lugar del deseo; Pecados carnales; Vicios ocultos; En- con entrevistas realizadas, los temas de los Gálvez»11, así como en el primer cuadro de
de trabajo. En este rubro tendríamos: cuentros prohibidos; Yo confieso; Hembras y ma- cómics están inspirados en novelas, pelí- la ciudad de Mérida, existen estanquillos
Traileros; Maestros y chalanas; Sensacional de chos en celo; Bajos instintos; Pasiones ocultas. culas, notas rojas de periódicos y revistas, dedicados a la compra-venta o cambio de
mercados; Sexacional de luchadoras; Acá los maes- 5.  -Juventud y desenfreno: Sexacional de así como en cómics internacionales, como historietas, donde los clientes pueden lle-
tros y sus chalanas; Maestras ardientes; Conse- colegialas; La manuela; Calenturas de juventud; el manga hentai y el cómic erótico italiano y var los cómics nuevos que ya leyeron y se los
jera sexual y de otras intimidades; Microbusero Juventud desenfrenada; Fuego de juventud; Ino- español, sobre todo. cambian por otros de «medio uso», o bien se
cencia sexual; Orgasmos de juventud; Conexión Un aspecto interesante es que existe una pueden comprar por la mitad de su precio
swingers; Universitarias calientes; Inicio sexual; competencia muy fuerte entre las principa-
10  Esta cifra se refiere únicamente a los cómics eró-
El sofá del placer. les editoriales, de tal manera que cuando
ticos producidos en México, pues aparte llegan del 11  En el mercado «Lucas de Gálvez», el principal
extranjero más de dos docenas de este tipo de histo- 6.  -Fantasía, brujería: Bruja blanca; Satá- una de estas se pone en circulación un título y más antiguo de Mérida, encontramos que en la
rietas. En nuestro país son tres las empresas edito- zona de los baños, alquilan estas historietas, de tal
nika; Agencia del deseo; Fantasías eróticas; Eró- nuevo, al poco tiempo otra editorial publica
riales que publican el mayor porcentaje. Estas son: manera que el usuario entra con su cómic y al salir
Ejea, Toukan y Mango. tika; Eróticos anónimos. una similar. Por ejemplo: cuando editorial lo devuelve.

26 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 27
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original12. Esto también se práctica en mu- relacionados con la adquisición pública de «...yo las he leído, pero por pura curiosidad y por- puede interpretarse como que ellas no las
chas colonias del sur de Mérida, donde al- estas revistas14. Al mismo tiempo, en rela- que me las prestaron, pero las leí a escondidas por- compran, pero si alguien de su hogar las
gunas tiendas de abarrotes y tendejones ción a entrevistas realizadas a varias muje- que imagínate qué pensaría mi mamá si me viera adquiere, estas pasan de mano, y por su-
realizan esta compra-venta, y en ocasiones res, comentaron que crecieron en un am- leyéndolas, tal vez pensaría que tengo una mente puesto que estas señoras también las leen.
las alquilan por un peso al día. biente donde este tipo de publicaciones era pervertida» (mujer, estudiante, 20 años). El siguiente caso es muy ilustrativo:
Perfil de las y los consumidores de la his- frecuentemente leído por sus padres, her- «…mi papá cada semana compra cuatro o cinco
torieta pornográficaDe acuerdo con los da- manos u otros familiares, como lo revelan Otra entrevistada corroboró lo anterior: de estas novelitas y generalmente las leen todos».
tos obtenidos en los expendios que venden los siguientes testimonios: «Creo que ese tipo de historietas o novelitas están -¿Quiénes son todos?
historietas pornográficas, la mayor parte «...cuando yo era chica, mi papá dejaba estas nove- bien para los albañiles, pues los pobres a veces no -«Yo, mis hermanos y mi mamá» (mujer, obre-
de los consumidores son del género mas- litas bajo su hamaca, y cuando me encontraba fas- tienen ni televisión, y en algo tienen que distraer- ra, 45 años)
culino. Sin embargo, el porcentaje varía tidiada las leía o simplemente las hojeaba, se me se» (mujer, ama de casa, 40 años) . 15

según las zonas o distritos de la ciudad: hacían divertidas» (mujer, obrera, 19 años). Por otra parte, la correlación entre géne-
en los estanquillos del Centro Histórico de Respecto de la edad de los lectores, encon- ro y ocupación proporcionó información
Mérida, el 65% de los consumidores fueron Por otra parte, en las familias de clases tré la siguiente distribución por género: interesante, pues encontramos que el 40%
hombres y el 35% mujeres; en el mercado populares, los padres no prohíben o sancio- En la categoría de edades de 13 a 22 años la de las mujeres se emplean como obreras, el
de Santiago, el 70% de los clientes de es- nan a los menores por leer estas publicacio- participación masculina es el 35%, casi tres 24% como empleadas de comercio, seguidas
tos cómics son hombres y el 30% mujeres; nes. Cito un ejemplo a continuación: veces mayor que la femenina (12%); sin em- por las secretarias y/o recepcionistas con
mientras que en el mercado de la colonia «... que yo recuerde, cuando tenía ocho o nue- bargo, en el grupo de edad de 23 a 32 años, un 16%. El 8% corresponde a empleadas do-
Alemán, el 89% de los compradores fueron ve años me daba curiosidad ver las novelitas que la situación se invierte, ya que los varones mésticas. Las amas de casa representan el
hombres y el 11% mujeres, diferencia que se leían mi papá y mis hermanos, y en ocasiones las tienen un porcentaje de 25%, contra el 52% 4% de las mujeres entrevistadas y otro 8% de
acentuó aún más en Plaza Fiesta, donde el leía, pero no recuerdo nunca que mi mamá me de las mujeres. las mujeres se encontraban estudiando una
95% fueron varones y solo un 5% mujeres13. haya dicho que no las leyera» (mujer, emplea- En el grupo de edades de 33 a 42 años los licenciatura.
Esto se debe a que las mujeres de sectores da de comercio, 18 años). varones registran un 25%, un poco menor En el caso de los hombres, la situación
populares tienen menos prejuicios sociales que el 36% reportado por las mujeres. Sin es similar, puesto que el 44% corresponde a
En los sectores de clase media alta estas embargo, el patrón se invierte en los gru- obreros, artesanos y técnicos de baja califi-
12  Este fenómeno también se da en el interior de
la entidad: Valladolid, Tízimín y Motul son algunos historietas son estigmatizadas y se ven, en pos de edades de 43 años en adelante, pues cación; le siguen en número los estudian-
de los municipios Yucatecos donde el cómic erótico
el mejor de los casos, como literatura de al- los hombres tienen un 15%, mientras que tes con un 30% del total. Esto es revelador,
tiene más éxito. Sin embargo, prácticamente está
extendido en todo el estado de Yucatán. bañiles o de gente pobre, o bien de personas no se encontró ninguna mujer en este ran- ya que representan casi cuatro veces más
13  A diferencia de los expendios ubicados en el cen-
degeneradas o pervertidas. go etario. Cabe aclarar que esto último no que su contraparte femenina, y demues-
tro de la ciudad de Mérida, donde las mujeres com-
pran las historietas pornográficas de una manera significa que las mujeres de 43 años en ade- tra el interés de los jóvenes por el material
desenfadada, en los lugares ubicados al norte de la ci- 14  En 2005 se efectuó una investigación sobre sexu-
lante no lean este tipo de cómics. Más bien pornográfico, en todas sus presentaciones.
udad, donde las familias tienen mayor poder adquis- alidad y prácticas sexuales de riesgo en la ciudad de
itivo y estatus social, las mujeres se sienten apena- Mérida, y se realizaron muestreos en dos colonias, Los taxistas ocupan un tercer lugar con un

das o avergonzadas al momento de adquirirlas. Por una en el sur de la ciudad y otra en el norte, encon- 15 Esta señora negó que las leyera, aunque yo observé
18%, esto es explicable debido a que en Mé-
ejemplo, en Plaza Fiesta, cuando una señora adqui- trándose grandes diferencias entre lo que se consid- cuando las compraba, pero inmediatamente las metió
ere uno de estos cómics eróticos, primero pide varias eraba permitido en cuestiones sexuales. Asimismo, a su bolsa. Sin embargo, su comentario nos revela que rida, la mayor parte de los taxis se encuen-
revistas consideradas femeninas como Cosmopolitan o la manera de concebir el cuerpo y el pudor son radi- para algunas personas laectura de estas publicaciones
tran horas en el «sitio» esperando clientes,
Vanidades y después señala con el dedo (las historietas calmente opuestas (Informe 2005, Foro Nacional de es un placer culposo o que causa vergüenza, al mismo
pornográficas) y dice «me das dos de estas». Mujeres y políticas de población). tiempo revela el doble discurso moral. por lo que disponen de mucho tiempo libre,

28 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 29
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que frecuentemente utilizan leyendo histo- •  Los lectores(as) que compran e únicamente las compraba y se quedaba con comprando cómics que los hombres, sino
rietas pornográficas. intercambian. ellas o en todo caso la vendía como de medio que las mujeres están mejor organizadas
Le siguen en orden de importancia, por •  Los lectores (as) que no compran y úni- uso. Lo que puede explicarse por las mismas en «cadenas» que los hombres, como se
la cantidad de casos, los veladores, que re- camente leen los que les dan prestados. causas que las enumeradas anteriormente. vio anteriormente. Por otra parte obser-
presentan un 8%. Este tipo de empleos tam- Al realizar la correlación entre género y En la modalidad tres, es decir, aquellos vé que las mujeres que leen mayor número
bién permite disfrutar de tiempo libre, lo forma de conseguirlas encontré diferen- que no compran sino que únicamente leen de cómics son las obreras y las empleadas
que es aprovechado para distraerse con la cias significativas. En la modalidad dos, los cómics cuando se los dan en préstamo, de comercio, ya que al estar concentradas
lectura de los cómics, como lo atestigua el es decir, los lectores que compran e inter- encontramos un 4% entre las mujeres, y un en un solo local, se facilita el intercambio
siguiente caso: cambian, el porcentaje de mujeres (96%) es 12% entre los varones. Esto puede explicarse entre ellas18.
«...en este trabajo uno se aburre mucho, y estas dos veces mayor que la de los varones (42%). en el sentido de que estas mujeres y estos
novelitas me divierten y me ayudan a que el tiem- Esto se debe a que las mujeres están más hombres son lectores ocasionales, que las ¿Quiénes leen las historietas
po se vaya más rápido» (hombre, velador, 41 años). socializadas para intercambiar sus perte- leen porque están al alcance de su mano. pornográficas?
nencias, recuérdese que es común que en- Uno de los informantes lo explicó de esta Existe la creencia de que este tipo de his-
Con base en todo lo anterior, puedo plan- tre amigas o hermanas se presten zapatos, manera: torietas es consumido exclusivamente por
tear que la mayor parte de los lectores son ropa, accesorios, maquillaje, revistas, et- «Yo las leo cuando mi hermano, con quien com- albañiles, jornaleros, cargadores, poceros,
personas de sectores socio-económicos de cétera. En el caso de los varones es menos parto el cuarto, las trae, y no es que no me gusten, verduleros, es decir, gente de pocos recursos
clase media baja y popular. La proporción frecuente que se intercambien zapatos o pero yo prefiero utilizar mi gastada en otras co-
17
económicos y con una baja educación for-
de lectores de clases medias altas y altas es ropa. Por otra parte, las mujeres son más sas» (hombre, estudiante, 17 años). mal. Sin embargo, de acuerdo con la inves-
reducida. proclives a formar redes sociales, lo que es tigación realizada, esto tal vez se deba a que
evidente en el caso de los cómics, ya que Por otra parte, indagué el número de his- estas personas las leen sin ningún pudor,
¿Cómo las adquieren y durante el trabajo de campo se encontra- torietas que se leen por quincena. En el pri- sin importarles que otras personas las vean,
cuántas leen por quincena? ron muchas cadenas entre empleadas de mer rango, conformado por los individuos o bien en el caso de los hombres, las exhiben
En el trabajo de campo encontré tres mo- la misma empresa, u obreras de la misma que leen entre uno y cinco ejemplares por en el bolsillo trasero del pantalón. En el tra-
dalidades en la forma de adquirir los có- fábrica. En el caso de los hombres, este fe- quincena, encontré la siguiente distribu- bajo de campo pude constatar que también
mics eróticos: nómeno solo se observó entre los albañiles, ción: el 70% de los hombres y el 24% de mu- son leídas por niños y niñas, mujeres jóve-
•  Los lectores (as) que compran y no las los mecánicos y entre los taxistas. jeres; en el segundo rango, de 6 a 10 ejem- nes, mujeres adultas y hasta por hombres
intercambian . 16
En la modalidad uno, es decir, los lectores plares por quincena, los hombres tuvieron y mujeres de la tercera edad. Si bien es cier-
que compran y no intercambian, encontra- una proporción del 20% y las mujeres del to, que el 78% de su público está conforma-
16  Estas personas suelen ser coleccionistas. En el
mos un 46% en el caso de los hombres y 0% 60%; y en el rango de 11 a 15 ejemplares por do por varones, existe un importante 22% de
trabajo de campo encontré muchos hombres que
tienen más de 1,000 ejemplares en sus casas. En entre las mujeres, es decir, que todas las mu- quincena, encontré un 8% de varones con- mujeres que son clientes habituales de estas
el caso de las mujeres pocas aceptaron que las col-
jeres encuestadas intercambiaban o presta- tra un 6% de mujeres. historietas19. En el caso de los niños y niñas,
eccionaban, sin embargo, dos señoras aceptaron
mostrarme su colección. Una de ellas tenía más ban los cómics, y entre los hombres un 46% Cabe aclarar que estas cifras no impli-
de 5,000 ejemplares, guardados cuidadosamente, 18  Esto significa que el compartir un espacio lab-
can que las mujeres gasten más dinero
en un closet completamente lleno de estas publica- superhéroes o de manga suelen ser coleccionistas oral facilita el intercambio de estas publicaciones, y
ciones. La otra señora tenía aproximadamente 3,000 empedernidos, capaces de pagar grandes sumas de se puedan formar cadenas pues lo mismo sucede con
ejemplares, y los guardaba como un tesoro en cof- dinero por algún ejemplar raro. Incluso algunos im- 17  Así se le llama en Yucatán al dinero que los pa- los taxistas, los albañiles y los mecánicos.
res de madera. Esto es significativo, debido a que portan de la Ciudad de México mangas originales de dres les dan a sus hijos los fines de semana para sus 19  Este porcentaje se refiere a los hombres y mu-
los lectores de otros géneros de cómics, como los de Japón. gastos personales. jeres que compran las historietas. Si nos referimos

30 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 31
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lo más frecuente es que las lean cuando al- identifica con el personaje y entra en la his- espectáculos como Tv y Novelas, Tvnotas, posiciones, no como los de la vida real» (mujer,
guien de su casa las compra y las dejan en toria (Baron-Carvais, 1999: 105). Tvmás, etcétera. obrera, 29 años).
algún lugar del hogar , entonces los infan-
20
Por lo tanto, desde la infancia existe un Para las empleadas de comercio represen-
tes las hojean o leen, sin que esto cause alar- aprendizaje de los códigos utilizados en el ta un 45%, y el 55% está compuesto por el «Me gustan porque me imagino que yo soy la de
ma, sorpresa o temor en sus progenitores. cómic, por lo que para muchas personas mismo tipo de revistas de espectáculos des- la novelita, y me imagino con ese cuerpazo, y que
Sin embargo, existen diferencias en la que no tienen el hábito de la lectura de li- critos anteriormente. todos los hombres me admiran, me desean y me
lectura de estas publicaciones entre hom- bros o novelas de puro texto, es decir, de pá- En el caso de las secretarias y/o recepcio- doy el gusto de escoger con quien quiero» (mu-
bres y mujeres. Para la mayoría de los hom- ginas llenas de letras alineadas unas al lado nistas representa un 25%, y el restante 75% jer, obrera, 31 años).
bres, los cómics han sido parte de su so- de las otras, la lectura de una publicación corresponde a revistas femeninas (Cosmopo-
cialización primaria —difícilmente encon- donde predomina el dibujo le representa un litan, Veintitantos, etcétera), así como a las Un 33% de las mujeres manifestaron que
traremos un adulto que en su infancia no menor esfuerzo de lectura. revistas de espectáculos ya mencionadas. las leían por el erotismo. Es decir, que los
haya leído historietas, desde los clásicos de Los cómics representan hasta el 80% El porcentaje disminuye drásticamente hombres seducen a las mujeres y les hacen
Disney, pasando por los superhéroes—. La de la tasa de lectura. Esto varía según en el grupo de las estudiantes, pues los có- el amor de una manera imaginativa:
lectura de estas historietas desarrolla en el la ocupación: para los obreros, artesa- mics solo representan un 5% de sus lectu- «Yo las leo porque me gusta todo lo que un hom-
niño la atención y la rapidez para observar, nos y técnicos de baja calificación, ésta ras. Un 80% está compuesto por sus lectu- bre hace y cómo se las ingenia para conquistar
fascinado como está por la imagen, ya que representa el 80%, el otro 20% está com- ras obligatorias de la escuela y un 15% por a una mujer. También por la manera en que ha-
vivimos en una época donde ésta requie- puesto por revistas como Órale, Presidio, Tv revistas orientadas a la mujer. cen el amor, con imaginación, utilizando mu-
re sin cesar de nuestra mirada: televisión, y Novelas y/o TvNotas y ocasionalmente el chos recursos. Los hombres de las novelitas dis-
juegos de video, cine, publicidad y, desde periódico. Los cuerpos o las historias frutan besando todo el cuerpo de la mujer, desde
luego, los cómics (Paredes, 2005). El texto Entre los taxistas representa un 55% y Como ya se ha mencionado, los cómics los pies, hasta su cosita. A mí ningún hombre me
no es importante para los muy pequeños el otro 45% corresponde a periódicos loca- pornográficos tienen amplia aceptación en- ha besado los pies, y a mi marido le da asco be-
que, inconscientemente, utilizan los dibu- les (Diario de Yucatán y Por Esto y De Peso, tre hombres y mujeres, sin embargo, las sarme allá abajo» (mujer, empleada de co-
jos como esquema rector sobre el cual de- principalmente). motivaciones son diferentes: mercio, 36 años).
jan libre curso a su imaginación. El niño se En el caso de los estudiantes, el porcen- El 51% de las mujeres señalaron que los
taje que representan los cómics pornográ- leían porque les permitían vivir en su ima- Es interesante ver que las dos motivacio-
a lectores, el porcentaje de mujeres aumenta, ya ficos es, en promedio, del 10%, ya que el ginación cosas que tal vez nunca podrían o nes anteriores, juntas representan el 84%,
que en la investigación encontramos que en centros
otro 90% corresponde a sus lecturas obliga- se atreverían a vivir. Es decir, que las his- es decir, más de tres cuartas partes de las
de trabajo donde laboran muchas mujeres es común
que estas formen «cadenas» para adquirirlas, de tal torias de la escuela. torias estimulaban sus fantasías sexuales, entrevistadas refirió que su principal mo-
manera que si, por ejemplo, existen 30 empleadas,
Esta situación es similar para el caso de lo que tal vez sea un mecanismo de evasión tivación es la evasión mediante las fanta-
cada una tiene la «obligación» de comprar una al
mes, e irla «rolando», de tal manera que cada una las mujeres, ya que las historietas por- y viven en su imaginación historias que les sías. Esto refleja una insatisfacción en su
de ellas puede consumir hasta 30 cómics pornográf-
nográficas representan hasta el 80% de agradaría vivir. Los siguientes casos ejem- vida sexual-amorosa, que compensan a
icos por mes.

20 Esto difiere sustancialmente de lo reportado por la tasa de lectura. Al igual que los hom- plifican lo anterior: través de estas lecturas. Hace treinta años
Lazo (2003) y Yehya (1996). para el caso del Japón,
bres, esta proporción varía de acuerdo con «A mí me gustan porque las mujeres utilizan a los o más, esta función la cumplían las nove-
donde es común que los hombres lean manga hentai,
que es el género pornográfico, durante el trayecto a su la ocupación: hombres a su antojo, son como objetos para sa- las de Caridad Bravo Adams y Corín Tella-
casa en algún transporte público, pero al llegar al fi-
Para las obreras representa el 80%, el otro tisfacer sus deseos sexuales. Además cuando ha- do, sin embargo, las circunstancias cam-
nal de su recorrido dejan la revista en algún rack del
paradero, es decir, no la llevan a sus hogares. 20% corresponde a la lectura de revistas de cen el amor duran horas y lo hacen en muchas bian, y tal vez en la actualidad esos relatos

32 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 33
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se vean sumamente conservadores o faltos imaginar qué se siente o cómo es una rela- «Sirven para relajarse en el descanso, y después «Los diálogos son muy ingeniosos y llenos de ero-
de emoción. ción amorosa con otra mujer. Cito un ejem- del trabajo» (hombre, jardinero, 21 años). tismo» (hombre, estudiante, 19 años).
El 10% de las mujeres respondió que les plo a continuación:
agradaba el cuerpo de los hombres de las «Siempre he tenido mala suerte con los hombres. «La mayoría son muy divertidas y entretenidas» Como se pudo observar, un 84% de las
historietas: Mi marido me dejó por otra. Luego tuve otra pa- (hombre, estudiante, 20 años). mujeres tiene como principal motivación
«A mí me da por leerlas porque me gusta el cuer- reja que se acostó con una de mis amigas. Así que las historias que les permiten fantasear.
po de los hombres que aparecen. Casi todos se ven conocí a una compañera de trabajo que me dice «Cuando llego de la chamba, cansado, lo único En el caso de los varones, sólo el 16% mani-
musculosos, fuertes, sin llantas ni panzas y además que nadie puede comprender mejor a una mujer que quiero es relajarme, pero muchas veces mi festó que las leen por las historias, mien-
son guapos y altos» (mujer, obrera, 38 años). que otra mujer y que nadie puede hacerle mejor mujer está viendo las novelas con mi suegra, y la tras que el 60% señaló los cuerpos como su
el amor a una mujer que otra mujer, así que me otra tele, la ocupan mis hijos con sus jueguitos de principal motivación, contra un 10% de las
El 4% de las entrevistadas manifestó que propuso tener relaciones con ella. Al principio me Nintendo, así que en ocasiones me acuesto en mi mujeres en ese aspecto. Esto nos habla de
las leían porque es algo prohibido. asusté y le dije que no, pero me ha seguido insis- hamaca y me echo dos o tres novelitas» (hom- una gran diferencia en la percepción de es-
«Yo las compro y las leo porque siento que es algo tiendo, así que me entró la curiosidad y he co- bre, 35 años, electricista). tos productos.
prohibido, para mí es excitante leer algo que leen menzado a leer las novelitas donde una mujer se
la mayoría de los hombres. Es como ver una re- acuesta con otra» (mujer, obrera, 24 años). Un 6% señaló que le gustaba el lenguaje Reflexiones finales
vista pornográfica pero mejor» (mujer, estu- que utilizaban: Las imágenes eróticas de las historie-
diante, 17 años). Hombres «Me gusta mucho el lenguaje que usan, tas están dirigidas mayoritariamente a los
La mayoría de los hombres (60%) res- sobre todo los albures» (hombre, estudian- hombres y son consumidas, principalmen-
El 2% señaló que las leía para saber qué se pondió que las leen por los cuerpos de las te, 19 años). te por ellos. Esto se debe, en gran medida,
sentía tener relaciones sexuales con otra mu- mujeres: Un 16% de los hombres manifestó que les a que estas revelan y escenifican justamen-
jer. Esto resulta interesante si tomamos en «Me gusta leerlas porque a las mujeres las ponen agradaban las historias: te ciertos rasgos de la sexualidad masculi-
cuenta que en los últimos años, los medios de muy voluptuosas, como en la mayoría de las fan- «Algunas historias son fascinantes y para aquellas na, sus deseos eróticos, sus fantasías sobre
comunicación masiva han difundido uno de tasías de los hombres» (hombre, estudiante, personas que la puedan hacer realidad sería una ex- el goce sexual, sus anhelos acerca de lo que
los discursos de la mayoría de los sexólogos: 20 años). periencia única» (hombre, estudiante, 17 años). entienden que es el goce de la mujer (Alva-
«Todo está permitido . Hay que eliminar las
21
«Me gustan las historias porque son muy fanta- rez-Gayou, 2009). No debemos considerar
inhibiciones, explorar las diferentes facetas «Me encantan los dibujos de las mujeres que apa- siosas las forma en que te muestran como se pre- como casual el hecho de que la pornografía
de la sexualidad humana» (Lauretis, 1995). recen, porque me recuerdan a las mujeres que sentan los encuentros sexuales» (hombre, es- haya encontrado su mayor expansión justa-
Es así que en la actualidad, muchas jó- aparecían en las películas de las ficheras y las tudiante, 20 años). mente en el momento en que la vida afec-
venes se sienten indecisas ante la posibili- rumberas» (hombre, taxista, 45 años). «Me gustan los personajes, me dan mucha risa tiva de los hombres se problematiza, carac-
dad de tener relaciones sexuales con otras las broncas en que se meten» (hombre, taxis- terizándose por la baja emoción, el aisla-
mujeres, así que leen estos cómics para El 18% de los hombres señaló que las leía ta, 21 años). miento, la indiferencia hacia el amor, y a
porque les relajaba y divertía . Los siguien-
22
la vez una alta intensidad erótica (Seidler,
21  Los antecedentes de esta postura los encontra-
tes ejemplos lo expresan muy bien: 1995, 2000). Un buen ejemplo de este nuevo
mos en la obra de Wilhem Reich (1985), quien plan-
teó, lo que durante mucho tiempo se convirtió en un proporciona un cómic. Más recientemente la pelícu- imaginario sobre el sexo lo encontramos en
slogan, Prohibido prohibir. Es decir, se trataba de supri- 22  Este aspecto es tratado incluso en algunas la Historias fantásticas (La peligrosa vida de los Altar Boys)
la película Nueve semanas y media, en donde
mir la represión sexual para que el deseo aflorara en películas como Amarte duele, donde el protagonista es- tiene al cómic como un elemento central en la vida
su estado puro (Lloyd; 1993: 9). capa de la rutina diaria a través de la fantasía que le de sus protagonistas. se manifiesta claramente el aislamiento y

34 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 35
Σigma Σigma

el desequilibrio emocional del protagonista humanos desean lo que es socialmente in- •  Gubern, Román, (1977). Los cómics en la industria de la imagen. En: Comunicación y cultura de
masculino23 con la búsqueda de la intensi- deseable: la mayoría de las parafilias (Bel- masas. Barcelona, Península, Barcelona.
dad erótica en la mujer. tran, Torres y Gamboa, 2006). Estos deseos •  Gubern, Román, (2002). Máscaras de la ficción. Barcelona, Anagrama.
Por otra parte, las prácticas de lectura son la principal motivación para el consu- •  Gubern, Román y Luis Gasca, (1994). El Discurso del cómic. Madrid, Ediciones Cátedra.
de las historietas pornográficas mexicanas mo de estas historietas ya que a través de sus •  Katz, Blumler y Gurevitch, (1982). Usos y gratificaciones de la comunicación de masas. En:
nos demuestran que más allá de las institu- páginas las personas pueden canalizar estos Moragas Spa, Miguel (comp.) Sociología de la comunicación de masas. Barcelona, Gustavo Gili.
ciones sociales como la religión, la familia deseos y fantasías «prohibidas» por el sector •  Lauretis, Teresa de, (1995). La práctica del amor: deseo perverso y sexualidad lesbiana. En: De-
y la escuela, un gran porcentaje de los seres conservador de la sociedad. bate feminista, año 6, vol. II, abril, México, pp. 34-45.
•  Lazo, Norma. (2003). Karikatura japonesa. En: Origina, año 8, núm.89, julio, pp.32-34.
•  Los certales, Felicitas, (1999). La imagen de la mujer en los medios de comunicación de ma-
23  Interpretado por Michael Rourke y teniendo
como pareja a la actriz Kim Basinger. sas. Un tema de actualidad en un espejo actual. En: Lara (comp.)Psicología evolutiva en la educación,
Burgos, Universidad de Burgos, pp.89-95
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36 José Gamboa Lectoras y lectores de la historieta pornográfica mexicana, en Yucatán, México. Una perspectiva de género 37
Σigma

Resumen

Poringa.net es un sitio de compartición de archivos, imágenes y videos con con-


tenido erótico, cuyo eslogan es placer colectivo. A través de un trabajo de exploración
web, análisis de contenido y trabajo de imagen, el texto presentado a continua-
ción aborda tres ejes de discusión emergentes de la observación: revisión de esté-
ticas, producción de la imagen e incitación a través de la imagen, particularizando el
análisis en la comunidad de poringueras, mujeres que muestran su cuerpo y se-
xualidad haciendo uso de la fotografía. A través de una caracterización del espacio
en red, de la descripción de la comunidad y la elaboración de un texto centrado en
la experiencia de usuario, circularán teorías de género, de relaciones en línea e in-
teracción, que ponen en contexto las tensiones encontradas en los ejes de análisis.
Foto: Angie Ariza Se plantea un tránsito desde el disfrute de la imagen al cuestionamiento de lími-
tes en las relaciones sociales de la comunidad, haciendo un juego entre el placer,

Poringa!:
la motivación principal de los participantes de estas comunidades, y lo colectivo,
como aquellas normas, subjetividades e identidades que se ponen en juego con la
participación en comunidad.

Tránsitos por el
Palabras claves: Imágenes, comunidad online, poringuera, identidad, placer, interacción.

Placer Colectivo
Introducción

Disfruto al pensar en la imagen del cuer- avatares, en donde estar conectados es lo


po, en la manera como se construye y se más importante.
transforma, me excitan las formas, los de- Existen figuras que llaman mi atención,
Elkin Marin1
talles, los pliegues, las poses, los cuerpos han logrado desestabilizar la manera como
Leonardo Sarmiento2 en la interacción sexual. Existe un lugar concibo el cuerpo y su estética, el cuerpo de-
Jorge Yopasá 3 provocador, conozco ese espacio, me invi- seable: son personajes vitales de la comuni-
ta al placer: Un sitio en el cual reside una dad, mujeres que se apropian de sus cuerpos
comunidad heterogénea. No creería usted y los exponen, reciben sugerencias, comen-
lo profundas y penetrantes que pueden lle- tarios y que han abierto para sí estos espa-
gar a ser estas imágenes teniendo en cuen- cios vinculándolos en su cotidianidad, ha-
ta que es un lugar informal, un mundo de ciéndose parte a su vez de la cotidianidad
encuentro de voces detrás de la frialdad de los otros. Publican de manera continua

1  Estudiante de Sociología, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá. efmarino@unal.edu.co


de las pantallas, donde las identidades se imágenes de sus cuerpos, contestan comen-
2  Estudiante de Psicología, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá. lasarmientor@unal.edu.co encuentran ocultas parcialmente tras sus tarios, se comunican por canales de chat
3  Estudiante de Antropología, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá. jdyopasac@unal.edu.co

Poringa!: Tránsitos por el Placer Colectivo 39


Σigma Σigma

públicos o privados. Personas activas que para la publicidad, al contrario de los sitios pueden ser gratuitos, no son de libre uti- 100% Material propio, 100% Amateur,
se reúnen, dinamizan el colectivo y las re- que suelo frecuentar, llenos hasta los bordes lización, sino que están sujetos a un con- 100% Poringueras, 100% Contenido origi-
laciones que se dan en su interior; mujeres de anuncios publicitarios. junto de pautas que regulan su uso […] nal e inédito, 100% Exclusivo para Porin-
que marcan sus cuerpos y son identificadas Tan solo texto y unos sobrios íconos, se ga!!! ¿Qué más podés pedir?
como diosas del placer. Para entender bien enlistan los temas, por título y establecen Me identifico como usuario y ahora soy
esta dinámica hay que conocer sus detalles, su clasificación: junto al título como «A un novato de la comunidad. Hay un post Del fresno (2011) Distingue entre una On-
hacer hincapié en la experiencia de las inte- Lola le pegan una buena cogida» o «Estar inicial con recomendaciones para novatos, line Community, comunidades que se generan
racciones que se dan al interior. Debo obser- bien adentro, bien adentro», se encuentran reglas, consejos y preguntas frecuentes… con un objetivo y organización restringi-
var cuidadosamente las imágenes, seguir su diminutos símbolos de colores que repre- demasiado texto para mi intención pri- das al espacio en red, y una Community Onli-
proceso de producción y leer los comentarios sentan las categorías o temáticas generales migenia. Se aclaran las causas de posibles ne, que es un grupo de personas cuyo centro
que se generan, relatar la historia en deve- de la página: fotografía, video online, des- sanciones, normas legales e incluso reglas de interés está fuera de la red y la utilizan
nir de este espacio, concebir su experiencia cargas, un arcoíris que engloba, en princi- para realizar comentarios de texto. Al pare- como lugar de confluencia. Al parecer en-
y asumirla. Esta es la motivación para reali- pio, toda la presencia de diversidad sexual. cer esta comunidad, dedicada al intercam- contré una muñeca rusa, y no me refiero a
zar este escrito. Hay un icono que tiene una «p» mayúscula bio de los goces y el placer de manera libre las interesantes imágenes en los temas de
y todas las intervenciones que poseen este está fuertemente regulada. Son las normas poringueras conocidas y por conocer: me re-
¿A dónde me he metido? símbolo ocupan un espacio principal, son de la casa a las que, como nuevo miembro, fiero a una Community Online inserta en una
En mis búsquedas por internet, había oído los primeros temas de la página y aparente- debo ajustarme (Goffman, 1972). Online Community: un grupo de usuarios jun-
hablar de una página latinoamericana en la mente la principal atracción que ofrece el si- Ahora tengo acceso al tema que llamó mi tos alrededor de lo amateur, del descubri-
que se comparte información para adultos tio. Intento acceder a un tema con título «de atención. Un saludo, «Muy buenas a esta miento y disfrute de diversas feminidades
llamada Poringa!. Así que ingresé la palabra colegiala y gozando un anal», soy una per- queridísima comunidad», una andanada de dentro de un «sistema colaborativo de inte-
al buscador y accedí al primer link de los re- sona de gustos sencillos. Me sorprende, de buenas imágenes de la colegiala, acompa- racción» para compartir contenidos adultos
sultados. Me recibió una página blanca con nuevo, una página que dice ¡Este post es pri- ñadas de textos como narrando la historia en red.
una advertencia, que establece desde un pri- vado, solo los usuarios registrados de Porin- de un encuentro sexual fantasioso y al final Así pues, picado por la curiosidad, dirijo
mer instante el requisito de ser mayor de ga pueden acceder! Tres obstáculos: la pági- un saludo e invitación a seguir en contac- toda mi atención hacia los temas sobre po-
edad, como es común en sitios para adultos. na de advertencia, la sobriedad de la página to. Se abre espacio a los comentarios de los ringueras, dispuesto ahora, después de tanta
Me sorprende la sobriedad del espacio fren- inicial, y ahora que había encontrado algo usuarios, de los que no puedo hacerme par- lectura y obstáculos, a entregarme al fran-
te a mis ojos: sólo hay letras y un logo, no interesante, me asalta la pertenencia a la tícipe por ser novato: «me gustas mucho, es- co deleite de las imágenes, las formas, las
hay imágenes, no hay incitación a la vista comunidad. De mala gana me registro «ya, tás que te acabo toda». En este grupo de te- fantasías fugazmente compartidas.
más allá del enorme PORINGA! y su slogan, gratis» y un enlace enviado a mi correo elec- mas, en donde los usuarios publican imáge-
la promesa de placer colectivo. A la izquierda trónico me lleva a la lectura del protocolo: nes de mujeres exclusivamente para la co- Placeres y éxtasis visual
se listan, por orden, los mensajes recientes. Las presentes condiciones generales cons- munidad, las autodenominadas poringueras: Unos cuantos clics en el sitio y me en-
En el centro, los posts o temas más activos tituyen las normas y reglas dispuestas por Nosotros consideramos, a priori, que es cuentro con una explosión de estéticas, for-
en torno a comentarios, los usuarios más ac- Poringa!, relativas a todos los servicios uno de nuestros mejores post, por (…) mas, figuras y colores. Los títulos fueron
tivos y los destacados o más votados por el sis- existentes actualmente o que resulten in- la belleza y la sensualidad de las imáge- apenas una vaga idea de lo que encuentro
tema de asignación de puntos que provee el cluidos en el futuro dentro del sitio porin- nes que no pierden el toque amateur y sin en las fotografías, en los comentarios, en
sitio. A la derecha hay un diminuto espacio ga.net (el Sitio). Dichos servicios si bien Photoshop que caracteriza a las Poringueras. las intervenciones de las poringueras y sus

40 Elkin Marin // Leonardo Sarmiento // Jorge Yopasá Poringa!: Tránsitos por el Placer Colectivo 41
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parejas. Por ejemplo, el tema ¿cómo se hace proveen la oportunidad de confluir en la puta interminable (…), maravillosa». La Desarrollo de la praxis sensual
una poringuera? muestra el proceso a través de vida diaria, y desde allí no hay una separa- actitud y seguir religiosamente las normas Tras ir de curioso en varios post de porin-
las publicaciones que el usuario kike2424 y la ción tajante o específica en el intercambio de comunidad son los dos elementos que gueras, observo con detenimiento las publi-
joven Camy han sostenido. Las fotografías social que, por tanto, no necesariamente aseguran vigencia, reconocimiento y éxito caciones y me asaltan dudas sobre la ma-
que al principio, tímidas y oscuras, mues- ingresa en las lógicas de presentación de la como poringuera. nera cómo estas imágenes son producidas.
tran solo espaldas y torsos fragmentados, identidad (Miller, 1997). Así, los cuerpos se materializan, sus for- No parecen ser tan casuales, más bien ela-
se transforman progresivamente en imá- No esperaba una supermodelo o una mas y sus estéticas cambian en la medida boradas de una manera muy particular. En
genes de atrevimiento y desinhibición, de pornstar en una comunidad dedicada a lo en que se hacen identidad, cotidianidad y casi todas las fotografías aparece el símbo-
inclusión de la pareja y usuarios en la pre- amateur, pero me sorprendió la amplitud realidad para los que observamos, modifi- lo «p!», que es, al parecer, un requisito in-
sentación propia. «El anonimato en la red de posibilidades halladas. En estos espacios can las maneras de presentarse y actuar a faltable para poder publicar, ser certifi-
es equiparable al anonimato transgresor no son exigidas estéticas específicas. Las través del tiempo y participación constante. cadas como poringueras y, según varios co-
de los carnavales, que propicia todos los li- formas, colores y edades se muestran para Como un efecto sedimentado de una prác- mentarios, esta práctica hace parte de las
bertinajes» (Gubern, 2000: 145). Adicional- todos, restándole importancia a lo que es o tica reiterativa o ritual, el sexo adquiere reglas oficiales de la comunidad (que no
mente, la identidad representada por me- no normativamente estético: su efecto naturalizado y, sin embargo, en leí con detenimiento). Sería imposible que
dio de avatares e imágenes que los usuarios Hay algo que siempre digo, lo gordita no virtud de esta misma reiteración se abren esa «p!», generalmente en color rojo, pase
establecen como símbolos personales, les quita lo bonita, ni lo rica. De ahí que hi- brechas y fisuras que representan inesta- desapercibida. Además, existe la práctica
proveen de una sensación de completud, ciera este post, mostrándome así gordita bilidades constitutivas de tales construc- de realizar fotografías con los nombres de
percibiéndose seres multidimensionales, como soy y con un culo gigante, porque ciones, como aquello que escapa a la nor- otros usuarios en un pequeño avisito sobre
seres abiertos, orgánicos, digitales y comu- así me gusta, yo me siento bien, linda y ma o que la rebasa, como aquello que no sus cuerpos, denominados dedicatorias.
nicantes (Haraway, 1991). sexy. El que no me vea así, pues lo único puede definirse ni fijarse completamente Los miembros activos tienen sus venta-
La poringuera Camy elabora progresivamen- que les digo es que para gustos, colores y mediante la labor repetitiva de esa nor- jas dentro del dispositivo comunitario y sus
te una nueva presentación y marcas de su lo bonito de esta comunidad es que para ma. (Butler, 2002: 29) acciones se dirigen a la consolidación de su
identidad: un antifaz con los colores de la todos los gustos hay y aunque sea peque- permanencia en el sitio o generación de es-
bandera de México que ocultan la identidad ño, tengo un grupo de amigos y seguido- El cuerpo de las mujeres en Poringa! es en tatus. Los usuarios que no son novatos tie-
personal, exaltando la pertenencia a una res que les encanta verme (goditicahot). gran parte el cuerpo de las feminidades la- nen la oportunidad de asignar una cantidad
región. Sin embargo, es común encontrar tinoamericanas. Lo que sucede alrededor de de puntos a aquellas publicaciones que más
mujeres que no ocultan sus rostros a las cá- Más allá de ubicarse dentro de una estéti- estos cuerpos, sus transformaciones, me han les llaman la atención. También pueden
maras y que constantemente dan a conocer ca específica, lo que hace de una mujer una compelido ahora a involucrarme de manera apoyar con sus comentarios a las y los crea-
sus actividades cotidianas, relaciones afec- «princesa poringuera» es lo que en los comen- activa en observar los antifaces de un país, la dores de los temas. Las divas esperan que
tivas y eróticas. Me generan agrado estas tarios de la comunidad circula con el nom- corporeidad bajo las leyes de otra; las cami- los usuarios se manifiesten y elogien su tra-
publicaciones, pues muestran eventos sin bre de actitud: presentarse con la seguridad setas de los equipos de fútbol nacionales que bajo: Yo comenté tu post, ¿vos comentaste
llegar a la exageración fantasiosa y por la de ser una figura de deseo para los otros, visten y desvisten los cuerpos del olvido lati- el mío? Compartamos, comentemos, apoye-
oportunidad de conocer la cotidianidad de mostrarse agradecida y complacida por las noamericano, ocultados sistemáticamente mos, ¡hagamos cada vez mejor esta maravi-
una persona que brinda la imagen de su reacciones que genera su exposición, bus- como asuntos menores y blandos por los pen- llosa Comunidad! (angieyruben).
cuerpo para mi satisfacción. Las identida- car nuevas experiencias, probar nuevos sa- sadores, voyeristas y usuarios probables de la Las marcas en los cuerpos son el produc-
des emergentes en medios como Internet bores y ser, en palabras de unionestereo, «una academia suramericana (Pedraza, 2007). to de interacciones bidireccionales: por

42 Elkin Marin // Leonardo Sarmiento // Jorge Yopasá Poringa!: Tránsitos por el Placer Colectivo 43
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una parte, existe el acercamiento de segui- su contenido hay fotografías de alta ca- Un espacio que se desborda poder comentar en los temas oficiales, pue-
dores al trabajo que realizan las poringueras lidad en las cuales se pueden ver de cerca Las cooperaciones entre fotógrafos, mode- dan ser partícipes activos de sus publicacio-
y por otra, ellas disfrutan agradecidas de hasta los detalles mínimos que podría te- los, comentadores y dedicatorias muestran nes. Al proveer las herramientas de acceso
este juego de relaciones mediado por lo vi- ner un cuerpo desnudo o una penetración, cómo los usuarios se encuentran en perma- y participación a cualquier usuario, se pro-
sual. Las dedicatorias a los seguidores son con una elaboración de marcos en las foto- nente comunicación estableciendo relacio- duce una transgresión sucinta de los rígidos
simples, impresas o escritas en la piel. Se grafías, con firmas diseñadas, música y en nes diversas, interacciones complejas revo- límites impuestos por la comunidad online.
transforman en importantes vínculos, e ocasiones hasta vídeos en donde son pro- loteando en las imágenes y los cuerpos se- Existen usuarios se hacen famosos o adquie-
imagino que, más allá del reconocimien- tagonistas estas diosas de infarto. En mu- xuados. Pienso ahora en las fragmentacio- ren un reconocimiento en la comunidad por
to, puede llegar a ser muy placentero ver chas ocasiones tales producciones se reali- nes y rompimientos de límites establecidos realizar entrevistas a las divas. Les peguntan
mi nombre de usuario escrito en una nal- zan junto a usuarios que hacen las veces de que se producen en al menos tres niveles: por sus parejas o sus relaciones, fantasías y
ga o cerca de un pezón. Los elogios no se fotógrafos o diseñadores gráficos, que in- referentes a las interacciones mediadas por actividades fuera del sitio web. En las entre-
hacen esperar: ¡Tienes un hermoso culo vierten su tiempo y energías en la produc- el portal web y sus normativas, en juego con vistas se ponen en tensión los límites rela-
mujer! muy lindas las dedicadas, te felici- ción erótica final, transformándola en un las relaciones sociales de las personas tras y cionales dejando a un lado la idea del inter-
to. ¡Gracias por compartir! (cali_fresh). Tales esfuerzo conjunto. Muchos temas no tie- junto a sus avatares. En un nivel más pro- cambio anónimo por el acercamiento a las
marcas se constituyen en expresión de po- nen ese nivel de esmero en su producción, fundo, la transformación de límites sobre la cotidianidades de personas más allá de ar-
ringueras agradecidas y satisfechas al saber aunque el esfuerzo por aportar a la comu- sexualidad y la feminidad. quetipos, moldeándolos con contenidos que
que muchos usuarios las están mirando, nidad es de gran aprecio. El usuario srshishio nunca se ha tomado llenen el vacío imaginario.
que las transforman en sus objetos de de- Fotografías, escenarios, fantasías pues- una fotografía, pero ha alcanzado el estatus De esta manera, complementando los te-
seo y que han sido inspiración de nuestras tas en escena, son producto de la interac- de celebridad al comentar compulsivamen- mas con fotografías y videos se consolidan
prácticas onanistas. ción entre creativos de la imagen, usuarios te, con constancia y abnegación: al llegar a actividades dentro y fuera de la red. Aunque
La interacción que emerge de estas tradi- ávidos de contenido y mujeres deseosas de 30000 comentarios recibe fotografías de sus los administradores del sitio intentan regu-
ciones, marcas de comunidad y dedicato- producirlo, elaborando contenidos que ha- poringueras favoritas con mensajes dedicados lar las interacciones ocurridas en su sitio,
rias, conduce a reconocimientos, al esta- cen de Poringa! un lugar donde el erotismo a la celebración de su logro participativo. inevitablemente son desbordados por los
blecimiento de símbolos de identificación. y la pornografía existen por el mero disfru- Según las jerarquías de la comunidad, un usuarios, quienes aprovechan para generar
Las personas imbuidas de sentimientos de te de la sexualidad y de sus posibilidades comentador de estas características no ten- otra clase de manifestaciones, de interac-
solidaridad grupal se muestran reveren- trascendiendo lógicas de consumo y de in- dría mayor impacto, pues no produce conte- ciones o relaciones, como asistir a fiestas o
tes con esos símbolos y los defienden de dustria. Bajo este punto de vista se da un nidos. Sin embargo, por medio de sus inter- realizar post conjuntos. Así se presenta el
las faltas de respeto de los gentiles y más cambio en los modos de producción trans- venciones transforma las relaciones emer- segundo nivel de transgresión de los límites
aun de los renegados (Collins, 2009: 73). formando la elaboración de los conteni- gentes de la comunidad, que lo elige como de la interacción, por la creación de organi-
De esta manera, se permiten entablar re- dos, desde la asimetría de una producción un grandioso del comment. zaciones independientes al sitio web con-
laciones más cercanas entre las poringue- de material con el ánimo de generar ga- Si bien existe una fuerte regulación sobre formadas por sus usuarios.
ras y sus seguidores, para así mantenerse nancias para los demás hacia el ponerse a las acciones y los contenidos, se movilizan Radio Poringa, emisora web nacida de las
vigentes. disposición de los integrantes de la comu- los límites por medio de las relaciones en- entrañas de Poringa! modifica incluso el ca-
La manera como son presentados los te- nidad, al goce intersubjetivo sin esperar tre los usuarios. Otra caso, esta vez una po- rácter de erotismo exclusivamente online de
mas difieren unos de otros, siendo algu- un beneficio material a cambio (Martín- ringuera, busca un espacio dentro del sitio la comunidad y sus espacios. En radio Porin-
nos realmente llamativos y excitantes. En barbero, 1991). para que los novatos, privados de voz al no ga no vas a encontrar sexo, sino gente con

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buena onda y sin prejuicios que tienen ga- Las poringueras, en un tercer nivel de tras- que producen placer, pero en sí mismas no los sucesos emergentes de los temas, los co-
nas de pasar un buen momento (sitio oficial gresión de los límites impuestos, realizan logran sentirlo. No son sólo objetos, para mentarios, los senos, vaginas y escenas de
de radio Poringa). Siendo un lugar de inte- sus tránsitos por la comunidad y manifies- ellas sentir es primordial y se asumen como sexo fotografiado se encuentra la huella de
racción independiente, promueve activi- tan su sexualidad y feminidad de maneras empoderadas, conscientes de sus propios un proceso social, de unos rituales de uso
dades alternativas, como shows de webcam divergentes: goces más allá de la atadura de los signifi- de medios convergentes. Las tecnologías de
con las poringueras o encuentros fuera de los Tras recibir mi cuota de sexo anal duro, cados: se asumen y disfrutan como putitas, las comunicaciones y las biotecnologías son
espacios provistos estrictamente por el sitio siento la tensión cada vez mayor de la como zorras, como partes de un cuerpo y las herramientas decisivas para darle nue-
web: Todos los que hacemos Radio Poringa, pija que entra y sale de mi colita, sé que como cuerpos completos, como perras en de- vas utilidades a nuestros cuerpos. Estas he-
somos personas independientes con ganas está a punto de estallar… no puedo per- venir (Ziga, 2009). rramientas encarnan y ponen en vigor nue-
que los oyentes, se entretengan, diviertan, mitir que el divino liquido se desperdicie Las mujeres, parejas y seguidores de las vas relaciones sociales para las mujeres a
se informen y la pasen bien (ibíd.) en un condón, lo retiro de mí y mi boqui- poringueras sostienen el espacio informal, través del mundo (Haraway, 1991: 22)
Se materializan los cuerpos más allá de ta se predispone, golosa y hambrienta a cambiante, veloz. La invitación tácita y ex- Aunque existen marcas que son requisito
avatares y nicknames escapando de la red, recibir la descarga que llega prontamente plícita que ellas realizan es al disfrute de para la publicación de imágenes, se les ha
dependiendo a su vez de la identidad que cubriendo mi cara... Adoro la sensación una sexualidad libre, a regalarse con los go- construido una tradición andamiada en sus
les provee. Las marcas de identificación que incomparable de la leche corriendo por ces que ofrece su espacio y compartir aque- esquinas. Es posible solicitar una fotogra-
existen generan una diáspora de comunida- mi rostro (Lolyta). llas imágenes producto de todo ese placer. fía con dedicación, pidiendo que el nom-
des, que retornan en ocasiones a casa en for- Si la trasgresión del límite de un sistema bre esté en un lugar determinado del cuer-
ma de contenidos apropiados para la pági- Aunque no escapan a los marcos hetero- cultural se define como un exceso, enton- po o simplemente dejándolo al criterio de la
na, evidencia de las escapadas y encuentros normativos, en ocasiones mantienen rela- ces se pueden diferenciar tres de sus ma- poringuera, la diosa, la diva. De esta mane-
entre sus usuarios. Siento un poco de envi- ciones homoeróticas con otras mujeres de nifestaciones cuantitativas en los circui- ra se configuran normatividades alternas,
dia al ver las fotografías y videos de algunos la comunidad. Un objeto especial cobra im- tos tecno-comunicativos: El exceso inscri- en tensión con el reglamento del portal. Se
de aquellos encuentros llenos de erotismo, portancia en estas dinámicas: una próte- to como contenido que, a su vez, represen- construyen categorías y jerarquías refleja-
pues no parece una simple reproducción del sis inorgánica productora de placer llama- ta categorías de valor, morfológicas, éti- das en marcas o símbolos establecidos por
acto sexual: existe una carga de afectos y de da cinturonga, extensión fálica-plástica de cas, tímicas y estéticas; como estructura el colectivo, generando paradigmas entre
exploración del placer abrumadora. Así, Po- las poringueras. No es vista como un pene: no de representación, en las formas y estruc- los miembros de la comunidad dando como
ringa!, las poringueras, los usuarios y las rela- pertenece a los dominios de la relación de turas discursivas; y como cualidad de con- resultado un reconocimiento como grupo,
ciones complejas existentes configuran una pareja o del sexo heterosexual, la cinturonga sumo, en los protocolos rituales obsesivos más allá de los límites de la página, de los
realidad social tangible en la que se encuen- no eyacula, no tiene la textura de la piel y y los comportamientos cultuales. Tal ten- temas y comentarios, de los colectivos y las
tran todos los elementos de análisis necesa- no se endurece o ablanda: es símbolo de las dencia a la desmesura y la excedencia es maneras de percibir la sexualidad, lo feme-
rios para su observación: un grupo consti- relaciones eróticas entre poringueras y su uso también cualitativa (Rivera, 2006). nino, el placer.
tuido con relaciones y estructuras claras, en es descrito como muy placentero, sus imá- Reconocen a sí mismos la posibilidad de
el que hay una serie de jerarquías y se gene- genes son extremas y fuertes, desbordando Invitación al placer colectivo acceder a todas las prácticas significan-
ra estatus, donde están presentes una serie sensualidad y goce. Así, de la intención original de buscar el tes, así como a todas las posiciones de
de lineamientos que pretenden mediar en La construcción de estas múltiples femi- placer sobre la imagen, me he encontrado enunciación, en tanto sujetos, que la his-
la interacción de los usuarios y legitimar su nidades escapan a la visión esencialista de con un tránsito hacia los cuerpos, y luego toria ha determinado como masculinas,
estructura (Wallerstein, 2005). la mujer, desdibujan la imagen de aquellas hacia las relaciones. Oculta a plena vista en femeninas o perversas. Por consiguiente,

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renuncian no sólo a una identidad sexual en ella fue una movilización entre el deseo Referencias Bibliográficas
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sonas que en conjunto disfrutan de las di- p! se encuentra un mundo lleno de relacio- España: Amorrortu.
námicas que han decidido asumir, han nes, he tocado hasta donde se me ha permi- •  Haraway, D. (1991) A Cyborg Manifesto: Science, Technology, and Socialist-Feminism in the Late Twen-
creado un lugar que no imaginaba que se tido, pues aún soy novato, pero podría sen- tieth Century. En Simians, Cyborgs and Women: The Reinvention of Nature. New York;
comportara de esta manera. El proceso que tir más, ver más, conocer más. Aún existen Routledge, 1991
he observado y que he descrito deja mani- orificios a los que no he llegado, no he ma- •  Gubern, R. (2000). El Eros Electrónico. Madrid, España. Taurus
fiesto que usuarios de la web han creado noseado lo suficiente algunas secciones. De- •  Martín-Barbero, J. (1991). De los medios a las mediaciones. Comunicación, Cultura y Hegemonía.
una serie de rituales de interacción, donde searía probar la calidez de los otros usuarios, México: G.Gil.
los participantes se sienten unidos, jugue- saborear las producciones, y derramar mis •  Miller, D. (2001). The Internet. An Ethnographic Approach. New York. Estados Unidos: Berg.
tean entre ellos, se identifican tras un sím- agradecimientos. Pueda que logre ver mi nic- •  Pedraza, Z. (2007). Políticas y estéticas del cuerpo en América Latina. En: Cómo pensamos en el cuerpo.
bolo, lo abrazan y llenos de confianza en su kname algún día escrito en el cuerpo de una Uniandes–Ceso.
membresía (Collins, 2009) se colaboran, se de las poringueras, quizás compartir un en- •  Preciado, B. (2002). Manifiesto Contrasexual. Madrid, Epaña: Opera prima.
miran, se tocan, se hacen colectivo. cuentro… seguir por la vía del hipervínculo •  Rivera, F. (2006). De Jack el Destripador al síndrome de Scarface -Representaciones Sociales, «Real T.V»
Si bien mis motivaciones al entrar a la co- un tránsito del placer al colectivo. y Tele-fisiognómica. Revista Universitas Humanística no.62 julio-diciembre pp: 261-316
munidad eran bastante simples, penetrar •  Wallerstein, I. (2005). Análisis de sistemas-mundo. Una introducción. México, D.F: Alianza Editorial.
•  Ziga, I. (2009). Devenir perra. Madrid, España: Editorial Melusina, S.L.

48 Elkin Marin // Leonardo Sarmiento // Jorge Yopasá Poringa!: Tránsitos por el Placer Colectivo 49
Σigma

www.lafulminante.com
Resumen

La difusión del material denominado pornográfico ha estado mediada por las con-
diciones técnicas de su producción y distribución. Con la llegada de Internet, la di-
fusión ha adquirido nuevas características. Las páginas en que los consumidores de
pornografía pueden acceder de forma gratuita e ilimitada a su contenido, se han
convertido en escenarios de clasificación de la pornografía. El análisis de los pará-
metros empleados en estos sitios, arroja luces para pensar la obra pornografía como

Categorías de
una realidad paralela en donde el cuerpo cobra la mayor importancia.
Palabras Clave: Sexo, pornografía, cuerpo, identidad, internet.

clasificación Habría que desconfiar de quien habla con llane-


za sobre pornografía porque cree no sentirse afec-

del porno en
tado por ella, porque está seguro de contemplarla
con ecuanimidad y distancia. Merece desconfian-
za, en fin, la suposición de que sea posible hablar

páginas gratuitas:
llanamente de pornografía.(Barba y Montes,
2007, p. 14)

una entrada a
Introducción

Definir la pornografía requiere de un especificidad, su variabilidad no salía de

Pornotopía
ejercicio semántico, no puramente etimo- esos dos ejes.
lógico como pareciera ser la tendencia en- El hallazgo de las ruinas de Pompeya y su
tre los estudios que abordan el tema. Efec- peculiar riqueza en objetos obscenos, repre-
tivamente la palabra pornografía tiene raí- sentaciones explicitas de sexo, fue un pri-
ces griegas, pero como termino fue acu- mer paso hacia la consolidación del con-
ñada entre los siglos XVIII y XIX. Por en- cepto de pornografía. Los objetos hallados
Darío Sebastián Berrio Gil tonces las acepciones oficiales del térmi- en la ciudad desenterrada eran valiosas re-

Estudiante de Sociología Universidad Nacional no eran: tratado sobre prostitución (des- liquias, entre las que se encontraron pin-
cripción de las prostitutas en relación con turas, grabados, esculturas y demás repre-
dsberriog@unal.edu.co
la higiene pública) o una catalogación de sentaciones explicitas de sexo. Como des-
objetos obscenos (Kendrick, 1995); si bien echarlos era impensable, e incluirlos en los
las definiciones mencionadas eran bas- catálogos de amplia circulación también,
tante variables, usualmente ganando en la forma en que los primeros catalogadores

Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 51


Σigma Σigma

de estos objetos lidiaron con el problema diferencias diametrales, pero si implica el siglo XIX) permitió concebir el sexo en sí evidente, de actos sexuales no simulados
fue restringir la información al respecto a considerar determinaciones importantes, mismo, independientemente de los contex- con la única intención de excitar a los es-
los círculos de expertos. Pornografía fue el las cuales se matizan en términos de la es- tos moral, legal y religioso (Kendrick, 1995, pectadores. Si bien la definición es funcio-
primer término con que se designó el grue- pacialidad tomada como la ubicación de p. 95). Luego a partir del trabajo de Freud, nal, obedece a un trasfondo histórico cuyo
so de los objetos obscenos encontrados en grupos humanos con parámetros culturales se abrió una ventana para pensarse la rea- recorrido ha sido recogido únicamente en
Pompeya, en particular los consignados en y sociales concretos. lidad como sexualizable, el objeto menos su afluente occidental, en particular Esta-
el Museo Secreto. Definir la pornografía en Decir que la pornografía no es un objeto pensado podría resultar excitante para al- dos Unidos y Europa. La tradición japone-
este sentido deja de lado la intención de la identificable implica que la determinación guien. Dicho fenómeno está estrechamen- sa, por ejemplo, gran productora de porno-
representación y la relación que su audien- de lo pornográfico recae en el espectador. te ligado al individuo y es precisamente por grafía e industria pionera desde hace siglos
cia pueda tener con ella, además de tener De esta manera, una escultura de Príapo ello que ha sido fundamental para relativi- no se recoge.
una notoria pretensión de objetividad. con una erección enorme podría entender- zar lo pornográfico.
La pornografía nunca es un objeto iden- se como un símbolo de fertilidad (para un Es imposible no sentirse profundamente Del Dibujo al Video
tificable, es más bien la relación de un con- habitante de Pompeya) o como un llamado perturbado, en lo más hondo de uno mis- Como lo presenta Jaime Acosta en su tesis
tenido con su contexto y la experiencia in- a la promiscuidad libertina (para los cen- mo, al ver porno. No es cierto, claro, que Teatro de las Obsesiones (2007), la porno-
dividual de un contenido (Barba y Montes, sores de la era Victoriana). Un objeto no es todo el porno resulte para todos igualmen- grafía puede ser vista como etiqueta o como
2007, p.39). En términos de la relación de pornográfico en sí mismo, en primer lugar te turbador y misterioso; pero sí que para producto. El primer caso es el de las repre-
un contenido con su contexto, se debe te- porque la definición de pornografía se ha todo el mundo hay al menos cierto porno sentaciones explicitas de sexo encontradas
ner en cuenta que como lo evidencia Walter mantenido en constante cambio. Y segun- profundamente conmovedor (Barba y Mon- en Pompeya. La pornografía como produc-
Kendrick (1995) a través de las definiciones do, porque históricamente la consolidación tes, 2007, p. 14). Pueda que existan ciertos to parte de la escisión del sexo frente a sus
de pornografía en múltiples diccionarios del concepto se ha hecho desde el punto de objetos que para mí sean muy excitantes componentes morales, religiosos y lega-
europeos, la definición de pornografía ha vista del espectador, como una forma de y que en mi vecino no despierten nada, es les, lo que permite considerar el sexo más
cambiado a lo largo del tiempo. Un aspec- delimitar el material cuyo acceso debe ser más que ni siquiera lleguen a ser conside- como un conjunto de ejercicios de caliste-
to más sutil de este cambio que no se puede restringido a personas lo suficientemente rados pornografía. Bien podría ser el caso nia, cuya representación pretende excitar a
corroborar consultando diccionarios, son formadas como para no desviar su conduc- de un catálogo de zapatos o fotografías de quien la contempla, en las condiciones que
las connotaciones que adquiere la palabra. ta tras exponerse al mismo. Por otra parte, ombligos. Lo pornográfico no es evidente dicha persona requiera para hacerlo.
Por ejemplo, el arte en alguna época estu- la intención opera como una determinante pues depende del espectador; si ver mujeres Si bien la intención de quien produce la
vo englobado dentro del concepto, ahora de la representación, entonces representar masturbándose no me excita, ello implica pornografía dificulta el establecimiento de
arte y pornografía son ámbitos distingui- un cuerpo desnudo en un libro de anatomía que dicha representación en particular (lo- una genealogía, podría decirse que el pri-
bles y mutuamente excluyentes (Barba y no es lo mismo que hacerlo en una pintura cación, características físicas de la mujer, mero en producirla fue Pietro Bacci, mejor
Montes, 2007; D’Orlando, 2011). Entonces, o en la Penthouse. El valor científico o esté- la forma en que lo hace, etc.) no hace parte conocido como el Aretino (1492-1556). Su
el ejercicio semántico al tratar de definir tico que podía encontrarse en representa- de mi pornografía. obra, confirmada, se limita a unos versos
la pornografía se hace patente en esta rela- ciones explicitas de sexo, atribuidas inten- Sin embargo la delimitación del produc- que acompañaban unos grabados de repre-
ción entre contenido y contexto, cada mo- cionalmente no por su autor, las eximía de to pornográfico que conlleva dicha defini- sentaciones sexuales explicitas. Por aquel
mento histórico posterior a la adopción del ser consideradas pornográficas (Kendrick, ción es muy vaga, por eso para el presente entonces las opciones en cuanto al formato
concepto tiene su definición de pornogra- 1995). En cuanto al espectador, la intelec- trabajo se utilizara la siguiente: la repre- del producto pornográfico eran extremada-
fía. La variable de temporalidad no implica tualización del sexo (lograda durante el sentación por cualquier medio, de manera mente limitadas, la representación gráfica

52 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 53
Σigma Σigma

(grabados o dibujo) y la escrita. Las herra- ubicación de la proyección, tener el dinero como se puede ver en la Tabla 1. Según más desviadas y extrañas de actos sexua-
mientas técnicas disponibles en la época no para pagar la entrada y lograr entrar. D’Orlando, quien recoge los argumentos les, pero también puede ser una búsqueda
permitían una amplia producción, de tal Las barreras que limitaban la accesibi- de la psiquiatría sobre los peligros del con- de pornografía en formatos de mayor cali-
forma que eran difícilmente accesibles, ha- lidad a las producciones pornográficas se sumo de pornografía y los reúne con consi- dad. Esto sumado al llamado efecto del mo-
bía que reunir condiciones muy específicas desdibujaban paulatinamente, se debe te- deraciones económicas, la transición hacia tor de la triple A (accesibilidad, asequibili-
no muy comunes para la época: saber leer, ner en cuenta que la entrada de la fotogra- los medios interactivos de difusión se debe dad y anonimato) (D’Orlando, 2011), hacen
efectivamente llegar a encontrar los versos fía o del cine como formatos de pornogra- a que los nuevos medios ofrecen la posibi- de los nuevos medios interactivos un esce-
y tener el dinero para adquirirlos. De hecho fía no desbancó a la literatura sino hasta lidad de satisfacer el proceso de escalada nario difícil de igualar en la difusión de la
es precisamente siglos después, cuando la finales del siglo XX. La experiencia de la (escalation) en el consumo de pornografía pornografía.
audiencia potencial aumenta notablemen- pornografía en cine limitaba en buena me- además de disminuir los costos de adquirir
te gracias al desarrollo de la imprenta y a la dida la intimidad posible, dado que se re- el producto (D’Orlando, 2011). Internet como escenario
disminución del analfabetismo que el efec- querían ciertos aparatos para poder repro- El proceso de escalada se refiere a un pa- Internet se ha convertido en uno de los
to de la obra del Aretino cobra más fuerza. ducir los rollos, cosa que no pasaba con la trón de consumo de pornografía, donde el medios dominantes en la difusión del ma-
La pornografía surgió cuando los medios literatura y que bien podía equilibrar la si- consumidor comenzará a buscar material terial pornográfico, en sus casi treinta años
de imprenta más baratos, la reducción del tuación entre los dos formatos disponibles. de forma más específica yendo de un tipo ha generado grandes cambios en la indus-
analfabetismo y la disolución de un acuer- Con la entrada del video, se une lo mejor de pornografía a otro. Usualmente la ten- tria del entretenimiento para adultos en ge-
do social impidieron determinar con preci- de dos mundos, los reproductores de video dencia es ir de lo suave (soft-core) a lo duro neral. Para comenzar, las barreras para la
sión en qué manos podía caer un libro o una domésticos permitieron ver películas en la (hard-core), en busca de representaciones accesibilidad son muy diferentes de las que
pintura (Kendrick, 1995, p. 246) La difusión intimidad del hogar. En la segunda mitad
del producto pornográfico, paso de los ver- del siglo XX, los formatos dominantes en Tabla 1
sos del Aretino a las novelas. En una conti- la producción de pornografía eran las revis- Subsectores del Entretenimiento para Adultos
nua transición hacia la modificación de las tas (como Hustler o Playboy) y los videos, Ventas al por menor en 2006
Categoría % Crecimiento desde el 2005
(millones de dólares)
barreras frente al acceso al material porno- ambos accesibles en ciertas librerías y sex
gráfico. El siguiente paso fue la fotografía, shops. La oferta de videos fue complemen-
Venta y alquiler de
pero aún más importante fue la presenta- tada con la aparición de canales especiali- $ 3.622,00 -15,40%
videos
ción al mundo de la invención de los herma- zados (por suscripción) como Venus, a me- Internet $ 2.841,00 13,60%
nos Lumìere en 1985. Con la posibilidad de diados de la década del 80(Posada, 2009). Clubes $ 2.000 0,00%
captar los movimientos humanos en cáma- El formato DVD, reemplazó al video casete Cable/pay-per-view $ 1.745 34,20%
ra, el código en que históricamente se ha- y fue a su vez desbancado como formato do- Juguetes/mercancía $ 1.725 15,00%
bía encriptado la pornografía daba un gran minante de difusión de productos porno- Revistas $ 950 -5,00%
salto. Se estaba pasando paulatinamente gráficos con la entrada de Internet en esce- Celular $ 39 11,40%
de la secuencia de letras a la secuencia de na (D’Orlando, 2011). Total $ 12.815 0,00%
fotografías. No haría falta saber leer para Los medios de difusión masivos (videos,
entender que una pareja estaba teniendo revistas, cable) coexisten con los interacti- Industry Stats AVN Media Network 1(2008). Tomado de D’Orlando, 2011.
sexo, sin embargo habría que conocer la vos (internet, celular). Los últimos presen-
tan en términos generales un crecimiento 1  AVN(Adult Video News) Media Network

54 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 55
Σigma Σigma

aislaban a los versos del Aretino. La era in- Muchos de los antiguos proveedores de cierto fetiche. Son páginas especializadas, Las páginas porno gratuitas siguen un
dustrial redujo enormemente las tasas de mercancía pornográfica llevaron su nego- como 8thstreetlatinas.com o pornstars- formato muy similar al de Youtube: sec-
analfabetismo e introdujo paulatinamente cio a internet, esa proyección en el ciberes- likeitbig.com, las que suelen conformar las ción de videos nuevos, de videos mejor ca-
procedimientos (tanto técnicas como tec- pacio puede tener dos formas, puede ser un asociaciones entre páginas que usualmen- lificados, videos seleccionados al azar, los
nologías) cada vez más complejos para el punto de contacto para adquirir mercancía te son propiedad de una única cadena. Por usuarios pueden subir videos una vez que
procesamiento de la información (Castells, que será enviada al comprador o puede ser ejemplo, Brazzers1, una de las grandes pro- han creado su cuenta y hay un buscador. La
2008). En ese sentido, la audiencia potencial el contenedor de la mercancía. En el prime- ductoras de videos porno en Estados Uni- cantidad páginas gratuitas es inimaginable
de internet es muy amplia. Sin embargo, no ro de los casos internet es solo una vía de dos, la afiliación incluye acceso a las pági- (youporn.com, youjizz.com, redtube.com,
se han eliminado las barreras que determi- comunicación entre el proveedor y el com- nas asociadas como Mofos.com (sexo ama- xhamsters.com, cpn.com, drtube.com,
nan la accesibilidad, por ejemplo tener ac- prador. En el segundo de los casos internet teur), Summerteen.com (sexo adolescente) ghetto.com, etc.), sin embargo, en casi to-
ceso a un computador, a internet y el cono- es el espacio en donde se hace la compra y y muchas otras. das las páginas de este tipo se pueden ver
cimiento sobre como buscar en internet. La en donde se recibe la mercancía, las llama- De hecho el acceso a las páginas como ciertos patrones. En cuanto a la manera en
tendencia pareciera mostrar un declive en la das páginas porno se encuentran aquí. Brazzers.com, Realitykings.com, Vivid. que está clasificado el material, cada pági-
incidencia de las primeras dos; entre el 2000 com, y en general las páginas que cobran, na cuenta con un menú llamado categorías
y el 2011 se registró un crecimiento en el nú- Páginas porno es gratuito aunque restringido. En la gran (categories) allí aparece un listado de los ti-
mero de usuarios de internet en el mundo Existen muchos tipos de páginas por- mayoría de los casos, existe una opción de pos de pornografía que contiene la página,
,
del 480.4%( Internet World Stats 2012). no. La primera gran distinción entre ellas tour o preview en la que se puede ojear el ma- en algunas se llega a mencionar la cantidad
Internet permite un consumo muy am- es la gratuidad del acceso a su contenido. terial (actrices y actores, tipo de pornogra- de videos asociados a cada una.
plio de material pornográfico, revistas, vi- Aquellas que cobran ofrecen a sus clientes fía, algunas fotos e incluso videos recorta- Las categorías varían según la página,
deos, fotos, juguetes, aplicaciones de celu- afiliaciones, que oscilan entre 1 y 30 días dos), es después de terminar el tour o in- sin embargo, algunas aparecen casi en
lar, etc., al cual se le aplican los factores de la mayoría (Edelman, 2009). Durante ese tentar ver un video completo que la página todas la paginas: anal, pornstars, teen,
accesibilidad, asequibilidad y anonimato. tiempo usualmente se tiene acceso ilimita- exige la afiliación para continuar. big tits, interracial, fetish, asian, latin,
El consumo de mercancía pornográfica que do al contenido de la página, lo mismo que En las páginas porno de acceso gratuito se ebony, gay, lesbian, MILF (mother i love
se vale de internet como medio de contacto al de las páginas asociadas en caso de que hace patente que comprador y consumidor to fuck)2 (Dictionary.com, 2012), amateur,
esta mediado por la necesidad de tener una haya. Algunas páginas permiten descargas no es lo mismo. Estas páginas ponen a dis- cartoons(caricaturas), webcam, vinta-
tarjeta de crédito inscrita en las bases de mientras otras solo permiten ver el mate- posición de sus usuarios una gran cantidad ge. Estas son herramientas para explorar
datos del sitio. Estos sitios usualmente con- rial. Para distinguirse de sus competidores de material pornográfico que puede ser vis- el material, son criterios de búsqueda. El
tratan los servicios de otras compañías para gratuitos, estas páginas han comenzado a to sin ningún costo; no se necesita tarjeta nombre con que la productoras de videos,
hacer las labores de registro de la informa- implementar material en nuevos formatos de crédito en ningún sentido y de esa ma- como Brazzers o Vivid, bautizan sus videos
ción financiera (Edelman, 2009), en todo como videochat en tiempo real y han au- nera mantienen la sensación de anonimato suele haberse perdido para cuando han lle-
caso la existencia de dicha información im- mentado la calidad en términos de defini- absoluto; el efecto del motor de la triple A gado a la página porno. En algunos casos se
plica una barrera para acceder al material. ción del material (Edelman, 2009). Por otra (accesibilidad, asequibilidad y anonimato) conserva el nombre de los actores y actri-
En primer lugar, porque mina la sensación parte, estas páginas suelen especializarse es absoluto. ces, aunque muy rara vez ocurre en el caso
de anonimato y, en segundo lugar, porque en tipos de pornografía específicos, de tal de los hombres (aparte de nombres como
requiere de dinero. forma que todo su contenido puede estar
1 Ganadora del premio mejor afiliación, AVN 2  2003,  acronym  of  Mother  I’d  Like  to  Fuck  or 
relacionado con una práctica sexual o con AWARDS 2011. something  like  that.

56 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 57
Σigma Σigma

John Holmes, Peter North, Nacho Vidal, MILF (mother i’d love to fuck) son adjetivos del argumento en la pornografía, allí los los casos en que en un video solo se muestra
Mandingo o Lexington Steele). En la mayo- que describen a las mujeres. Asian, latin y personajes son lo que se muestra de ellos. un tipo de interacción sexual.
ría de los casos, en que la o las mujeres que ebony nombran en particular al fenotipo El ejemplo más claro de ello es la categoría La pornografía en formato de video solo
actúan no son celebridades muy conocidas que ha sido tipificado en la industria para MILF, allí mujeres que parezcan haber sido cuenta con dos vías de estímulo, la imagen
y rara vez cuando lo son, el nombre del vi- cada una de las regiones, tanto Latinoamé- madres (mother i’d love to fuck) son las pro- y el sonido. Distintas combinaciones de es-
deo se cambia en algún punto y es reempla- rica como Asia y para la población afrodes- tagonistas de los videos, donde representan tas variables se emplean para reforzar las
zado por uno compuesto por descriptores cendiente de Estados Unidos. Las primeras, el papel de cougar (mujer mayor que bus- representaciones. En los videos Amateur,
muy generales. Sexy Brunet Fucked Hard mujeres pequeñas, curvilíneas, trigueñas o ca relaciones sexuales con hombres mucho la calidad de la imagen y el sonido suele
(sexy castaña follada duro), puede ser el morenas. Mientras las otras son pequeñas, menores ) (Dictionary.com, 2012). La cla-
3
ser inferior a la que se consigue en estudio,
nombre de miles de videos y, no obstante, pálidas, sin curvas, pelo lacio y pubis pelu- sificación en esta categoría opera como en además las condiciones de las locaciones
ser un título apropiado para todos. Es pre- do. Comparten el rasgo de no hablar inglés las demás, de tal forma que las actrices no son muy distintas a las que se consiguen en
cisamente ahí cuando son útiles las cate- fluidamente, si es que efectivamente ha- necesitan hijos ni mucho menos, solo acer- estudios o con la utilización de luces. Estas
gorías, pues son descriptores que agrupan blan en inglés; ebony es menos específica, case un poco al estereotipo de ama de casa tipificaciones son un elemento manipula-
alrededor de una característica importante aunque definitivamente se suele hacer re- estadounidense. En esta categoría se pue- ble si se quiere recrear una escena de porno-
del producto la oferta disponible en el sitio. ferencia a mujeres de piel negra (aunque la den ver casos como el de Monique Fuentes grafía amateur, la cual además se supone
Las categorías que son recurrentes en los gama vaya desde el trigueño hasta lo más nacida en Julio de 1968, colombiana madre está protagonizada por personas que no son
sitios gratuitos se relacionan con las carac- oscuro), caderas y culos voluminosos. Con de dos hijos, que es tan MILF como Mason actores o actrices porno.
terísticas físicas de los involucrados y con el estos parámetros se escapan muchas lati- Moore, estadounidense nacida en febrero Otro caso interesante es el de los gemidos
tipo de relación sexual. Las relacionadas con nas que no corresponden con la descripción del 1985 y que no tiene hijos. de las mujeres, estos agregan determina-
las características físicas de los participan- dada, por ejemplo Gina Lynn famosa es- Las categorías Anal, Fetish, Gay, Lesbian ciones al sexo, mediante gritos o gemidos
tes son: Teen, Bigtits, Interracial, Asian, trella porno nacida en el Caribe, es rubia, y Amateur son descriptores de la interac- se puede enfatizar el dolor o el placer según
Latin, Ebony (negros/as), MILF (mother i’d blanca, curvilínea y habla fluidamente in- ción entre los personajes, por supuesto no lo que se quiera representar. En categorías
love to fuck). Los videos que resultan agru- glés. Por otra parte, Lani Lane nacida en pueden ser absolutos en la medida que en como Big Dick (Verga Grande), Anal, DP
pados bajo estas categorías arrojan elemen- Hawaii, blanca aunque no pálida, inglés un mismo video puede haber sexo anal, lés- (Double Penetration), el uso de gemidos o
tos de análisis sobre la perspectiva del cla- fluido y pubis depilado suele ser clasificada bico y relacionado con fetiches. En algunos gritos para representar el dolor es recurren-
sificador y sobre las dinámicas internas del como asiática. casos estas escenas se presentan como pro- te: ciertos directores enfocan los gestos de
negocio de la producción de material porno- De ahí se sigue que la pornografía no ne- gresiones, por ejemplo para llegar al sexo las actrices para dar más potencia a la re-
gráfico, en particular de videos. Me refiero cesita ser real para ser efectiva, la nacio- anal se pasa primero por el oral y el vagi- presentación. En estos casos donde el pla-
específicamente a los videos agrupados bajo nalidad o la historia de vida de los actores nal. Lo mismo ciertos fetiches, como pasar cer o el dolor se quieren mostrar exacerba-
las categorías Latin, Asian y MILF. es irrelevante mientras que esta no se ma- de los insultos a los golpes o de las bofeta- dos la forma en que se filma a las mujeres
En primer lugar, las categorías descri- nifieste a la vista. Una colombiana que se das al estrangulamiento. Todas estas cate- suele trasciende los genitales mostrando la
tas evidencian el papel preponderante de parezca al fenotipo tipificado de latina será gorías con excepción de amateur, suelen mayor parte del cuerpo. De esta forma, se
la mujer en la pornografía. La clasifica- tan excitante como una alemana que se describir un momento del video, son pocos pueden mostrar la mayor cantidad de ma-
ción suele referirse a la parte femenina del vea de la misma forma, para quien disfru- nifestaciones corporales bien de dolor o de
video, de suerte que Latin, Asian, Teen, te viendo a latinas teniendo sexo. El cuer- placer: violentas sacudidas de las piernas
3 An  older  woman  who  seeks  sexual  relation-
Bigtits, Interracial, Ebony (negros/as) y po como imagen es una parte fundamental ships with  much  younger  men. fruto del placer o el hecho de detener la

58 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 59
Σigma Σigma

penetración por resultarle muy dolorosa a existentes (películas, series, videojuegos) muy precisa porque buena parte de los vi- se encuentre frente a la cámara no esté ha-
la mujer. El POV (Point of View) se refiere los relaciona mediante relaciones sexuales; deos que se conservan en las páginas gra- blando con nadie en el computador, no es
al punto de vista que tendría el hombre du- otras caricaturas sencillamente no son ani- tuitas de internet son protagonizados por necesario que exista dicha persona, el pun-
rante el sexo, de esta manera la perspectiva me o manga, ni toman a personajes ya exis- las grandes estrellas porno de la época. to importante es el sexo explícito en tiem-
es en primera persona, del hombre no se ve tentes, solo recurren a otro tipo de técnicas John Holmes, Ginger Lynn, Linda Lovela- po real o diferido grabado con una cámara
mucho más que su pene. Esta perspectiva de dibujo y a nuevos personajes. En térmi- ce, Georgina Spelvin, Cicciolina y muchas web. Los videos que se encuentran en las
se concentra en la mujer, permitiendo cap- nos generales lo que caracteriza el material otras. Las formas de sexo que se encuen- páginas gratuitas de porno que fueron des-
tar con mayor facilidad la expresividad del que se puede encontrar en las páginas por- tran en el Vintage son en términos genera- critas líneas arriba clasificados como web-
cuerpo de la mujer. no gratuitas (bajo la categoría cartoon), es les las mismas, Anal, Interracial, Lesbian, cam son grabaciones de espectáculos inte-
Las categorías gay y lesbian son tal vez la posibilidad de representar lo imposible y Gay y Fetish, pero no incluyen ningún tipo ractivos o de una sola vía. Por espectáculos
las más vagas en estos sitios, donde la por- en cierta medida la tendencia a hacerlo. En de video que no use actores. La gran dife- interactivos me refiero a aquellos en donde
nografía heterosexual dirigida a hombres una gama donde cabe la posibilidad de que rencia provenga tal vez de las categorías la o las personas que están frente a la cá-
es predominante. Gay es la única catego- la sirenita tenga sexo anal con Zimba has- que se refieren a las características físicas mara, están hablando con otras personas
ría que jamás he visto asociada a sexo he- ta el relato de la invasión de extraterrestres de los involucrados en el sexo, por ejem- en el computador. Estas personas, que es-
terosexual; las escenas lésbicas son comu- dotados de múltiples penes que violan a las plo las categorías Latin o Asian no albergan tán viendo el espectáculo en tiempo real,
nes en los tríos (Groupsex, Threesome, mujeres terrestres. videos vintage. La razón de esto no es cla- pueden interactuar con los actores de tal
Threeway). En todo caso la única clasifica- Una de las acepciones de la definición de ra, mas podría suponerse que se debe a la forma que pueden cambiar el rumbo del
ción que se refiere al sexo homosexual es Vintage que ofrece Diccionario Merriam creación reciente de tales categorías o a la espectáculo: que se desvistan de tal mane-
bien Gay o Lesbian, las cuales se refieren a Webster se refiere a la cualidad de ser de nula disponibilidad de material que involu- ra, que hagan tal posición o que se muestre
un material dentro del cual se encuentran viejo, reconocido y duradero interés, im- cre al estereotipo de asiáticas o latinas. La cierta parte del cuerpo, son solo algunas de
múltiples subdividivisiones potenciales. portancia o calidad: CLÁSICO . Este género
4
situación remite de nuevo a la relación que las muchas posibilidades que existen. Este
Sin embargo, en gay se suelen encontrar está compuesto por las primeras produccio- se establece entre la apariencia del cuerpo tipo de espectáculo requiere de una plata-
predominantemente videos relacionados nes porno en video, abarca un periodo bas- y la identidad al momento de clasificar los forma en internet que conecta a las perso-
con penetraciones anales y masturbación. tante largo. Desde la posguerra de la segun- videos porno: Gina Carrera reconocida es- nas dispuestas a aparecer frente a la cáma-
Las categorías Cartoon y Vintage se refie- da guerra mundial hasta los 90; pubis pe- trella porno de la década del 80 con apari- ra con aquellas que desean verlo y partici-
ren a una representación explicita del sexo ludos (moda felpudo), peinados volumino- ciones en producciones como Stiff Compe- par. Las plataformas pueden ser gratuitas,
que responde a un patrón estético distinto sos y mucho maquillaje son algunas de las tition y Whore of Worlds nació en Bogotá como cam4.com, o pueden cobrar, direct-
al del video contemporáneo que recurre a características típicas entre las actrices. Los (Posada, 2009), sin embargo, blanca, rubia camsex.com. Si bien es un ámbito predo-
actores. Bajo Cartoon (Caricatura o Dibujo), hombres de pecho peludos, frondoso mos- y de inglés fluido no se asemeja al estereo- minantemente amateur, ciertas estrellas
se encuentra el Hentai donde el sexo se pre- tacho (algunos como John Holmes) y cuer- tipo de latina. porno como Selena Spice tienen sus propias
senta con dibujos y donde temas como po- pos, que a diferencia de lo que se suele ver La categoría Webcam, se refiere en el plataformas (las que por supuestos son si-
sibilidades con respecto al sexo y lo sexual en la actualidad no son moles de músculos sentido estricto de la palabra a produccio- tios donde se cobra).
encuentran un espacio ilimitado: sexo en- inflados, delgados; la calidad de la imagen nes amateur que desarrollan la relación de Los espectáculos de una sola vía son gra-
tre monstruos y humanos, cuerpos huma- es inferior a la actual. La palabra clásico es la persona que está frente a la cámara con baciones en las que la o las personas fren-
nos exagerados, etc. Otra tipo de caricatura otra u otras que se encuentran chateando te a la cámara no están interactuando con
4  Of old, recognized, and enduring interest, im-
toma personajes de producciones animadas portance, or quality: CLASSIC. con ella. Bien puede ser que la persona que los espectadores. Si bien estos espectáculos

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Σigma Σigma

también pueden ser vistos en tiempo real, Según la clasificación de la página freeo- a mujeres, cuando hay actores de la indus- Las marcas sobre el cuerpo como tatuajes,
el espectador no tendrá la oportunidad de nes.com, que ha creado categorías para las tria que son hitos. perforaciones, expansiones y cirugías plás-
influir sobre el desarrollo del mismo. Son mujeres muy atractivas (babes ) (Dictio-
5
Actores y actrices porno son estrellas por- ticas (en su mayoría para aumentar la talla
escasas las plataformas que ofrecen este nary.com, 2012) y de cierto reconocimiento, no potenciales hasta antes de serlo. Los ac- del busto) son muy comunes entre los acto-
tipo de espectáculos en tiempo real, lo más las estrellas porno (Pornstars) son una cosa tores y actrices porno son aquellos que par- res y actrices, la mediana o larga duración
común es que los espectáculos interactivos y las modelos para adultos (Adult Models) ticipan activamente en la representación ex- de estas marcas permite constituir una apa-
se vuelvan de una vía porque son vistos en otra. La diferencia no está hecha de manera plicita del sexo. Entonces, si en una escena riencia que pueda mantenerse en el tiempo.
tiempo diferido, como es el caso de los vi- explícita, sin embargo a partir del conteni- dos mujeres tienen sexo frente a un mesero Se crea una apariencia para el personaje. Fi-
deos que se encuentran bajo la categoría de do de cada una se puede inferir el principio impávido e inmóvil que no es involucrado de nalmente, estos personajes estarán asocia-
webcam en las páginas porno. que está detrás de la distinción; las modelos ninguna manera, las mujeres serían actri- dos a formas de sexo específicas. Esta aso-
La categoría webcam, abarca todo lo re- para adultos no tienen sexo más que consigo ces porno, pero el mesero no. Estrellas por- ciación está relacionada en buena medida
gistrado con una cámara web de tal suer- mismas, en su material no interactúan con no serían aquellos actores y actrices que bien con la apariencia del personaje, ella enten-
te que no arroja luces sobre las caracterís- otras personas en otras palabras están solas. por sus numerosas apariciones en material dida como lo que se muestra de este. Enton-
ticas de los involucrados ni sobre el tipo de Las estrellas porno, si bien no todas las de- pornográfico, lo característico de sus apari- ces, casos como el de Mandingo un afroame-
interacción, cosa que no pasa en las pla- signadas bajo esta categoría, si tienen sexo ciones y otras razones se hacen notorios en ricano cuyo pene supera los 25 centímetros
taformas donde se puede acceder a los es- con otras personas en su material. El mate- el contexto de la industria. se relaciona con formas de sexo que giran en
pectáculos. La clasificación varía según el rial fotográfico contenido en la revista Play Para llegar a ser una estrella porno es ne- torno al tamaño de su pene, algo así como
sitio, en aquellos donde hay múltiples sa- Boy muestra modelos para adultos, mien- cesario que se tenga una identidad relati- una prueba de osadía para las mujeres que
lones para los espectáculos se recurre con tras que el contenido en Penthouse muestra vamente estable dentro de las producciones se atrevan a ser penetradas por él; otro tanto
frecuencia al número de participantes fren- estrellas porno en las que se participe. Las determinacio- sucede con las mujeres de grandes senos que
te a la cámara, su características físicas y La distinción es problemática por ser muy nes de esa identidad provienen de la selec- se suelen ver involucradas en Titjobs (Paja
si la interacción será homosexual, hete- difusa la línea divisoria entre ambos gru- ción de un nombre, la apariencia del cuerpo Rusa). En otros casos como en el sexo lésbico
rosexual, bisexual, etc. Los salones son pos, además saltar entre uno y otro grupo y las formas de interacción sexual en las que o anal la incidencia de la apariencia no pa-
usualmente asignados a cuentas de usua- es posible sin que haya una manera de de- se está dispuesto a participar. En cuanto al rece ser relevante, en todo caso la disposi-
rios, por ende la clasificación se aplica al ti- terminar la clasificación de la mujer en ese nombre, hay casos en que el nombre escogi- ción del personaje frente a su participación
tular de la cuenta. caso. Por ejemplo, Esperanza Gómez mo- do se cambia muchas veces de tal forma que en los diferentes tipos de sexo hace parte de
delo nacida en 1980 es modelo desde los 16 es difícil asociar el material producido con su identidad. Por ejemplo, Gianna Michaels
Estrellas Porno años, su carrera en el porno comenzó en los participantes; el nombre suele ser dis- suele aparecer en escenas de Interracial, Ka-
El caso de las estrellas porno recoge las el 2009 y aun así se considera una estrella tinto al que tiene la persona que se desempe- tja Kassins en escenas de sexo anal y Aria
situación de la categorización del material porno y no una modelo. Además no tiene ña como actriz porno. En ese momento co- Giovanni suele aparecer sola.
pornográfico en las páginas porno gratuitas en cuenta el diferencial de notoriedad que mienza la disociación entre la identidad de Al final se tiene un personaje que será re-
en todas las dimensiones que se han men- pueda llegar a ser necesario para sobre sa- la persona y la de la actriz o actor porno. El lativamente continuo entre producciones. A
cionado hasta ahora, con la peculiaridad de lir de entre las actrices del porno y conver- cuerpo como una apariencia determinada se diferencia de lo que puede ocurrir con otro
que dichas clasificaciones se hayan atadas tirse en una estrella. Además solo se aplica constituye en otra vertiente de la para crea- tipo de producciones audiovisuales, en la
a una identidad construida en el universo ción de la identidad de la estrella porno po- pornografía los personajes trascienden a las
5  Sometimes  Disparaging  and  Offensive.  a  girl 
de la producción pornográfica. or  woman,especially  an  attractive  one. tencial, su limitada mutabilidad lo facilita. producciones sin necesidad de que exista

62 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 63
Σigma Σigma

una secuela. El personaje tenderá a mante- dentro de otra realidad que es paralela aun- combinaciones (Kendrick, 1995, p. 110). de los videos clasificados bajo las catego-
ner su identidad en cada aparición, cosa que que no de independiente, pues el cuerpo es Este concepto de Marcus solo es aplicable rías recurrentes en las diferentes páginas
no pasa en Hollywood donde actores y ac- transversal a las dos. La obra pornográfica si la obra pornográfica es entendida como se pueden llegar a identificar lineamientos
trices cambian de personaje de película en constituye otra realidad, una donde en don- la historia que desarrolla cada video o se- generales de la pornografía como producto.
película. La fijación de dicha identidad se de musculosos plomeros tienen sexo casual sión de fotos. Sin embargo, la medida para La pornografía es una de tantas represen-
refuerza gracias a la acción de ciertas insti- con sus despampanantes jefas, amas de el transcurso del tiempo es el cuerpo, el taciones de la acción corporal, una muy ex-
tuciones de la industria del entretenimien- casa, o donde sorprender a alguien mastur- tiempo en ese sentido es la huella que deja plícita en lo relativo al sexo y cuya inten-
to para adultos como la AVN (Adul Video bándose solo puede ser acto previo de sexo sobre los cuerpos. El grado de desarrollo ción es la excitar. Las posibilidades técnicas
News). Esta empresa se dedica a hacer estu- desenfrenado. La relación causa y efecto en de la historia se puede aproximar a par- disponibles para la difusión de obras porno-
dios del mercado de entretenimiento para el porno es totalmente distinta. En el capí- tir de cómo se ven y se oyen los cuerpos de gráficas, solo permite abordar por dos vías
adultos a nivel global que se dedica a entre- tulo número diecisiete de la cuarta tempo- los participantes. Por otra parte, el trans- al espectador el oído y la vista. De tal mane-
gar noticias, análisis expertos, tendencias rada de Friends, Joey Tribbiani y Chandler curso del tiempo para quienes se desem- ra que la pornografía solo se puede ver y oír.
e información relacionada a la industria y Bing llaman la atención al respecto: peñan como actores o actrices porno tam- La poca diversidad en los canales ha contri-
a los consumidores (AVN Media Network, Chandler: I was just at the bank and there was bién puede ser medido por medio del cuer- buido a delimitar la forma en que se repre-
2012). Pero también creo una ceremonia en this really hot teller, and she didn’t ask me to go po, los personajes son tan viejos como sus sentan los cuerpos, son imágenes, son lo
la que se entregan una serie de premios para do it with her in the vault! cuerpos lo aparenten. que se ve de ellos.
actores, productores y empresas del negocio Joey: Same kind of thing happened to me! Wo- La centralidad de la apariencia de los
del entretenimiento para adultos, los pre- man pizza-delivery guy comes over, gives me the Conclusión cuerpos para la pornografía ha permitido la
mios AVN. El premio va dirigido no al actor pizza, takes the money, and leaves! La pornografía como producto tiene múl- creación de personajes del porno, cuyo úni-
sino al personaje; Belladonna ha sido nomi- Chandler: What? No, Nice apartment, bet the tiples fuentes de clasificación, la de quie- co vínculo con los actores que los interpre-
nada a 42 premios AVN, de los cuales ha ga- bedrooms are huge? nes lo producen y la de quienes lo consu- tan son el cuerpo que comparten. Dichos
nado 10 todos dirigidos a Belladonna. Bella- Joey: No! Nothing! men. Las clasificaciones que se emplean personajes habitan una realidad paralela,
dona es el personaje que interpreta Michelle Chandler:You know what? We have to turn off en las páginas porno gratuitas funcionan distinta a la del actor. Los personajes del
Anne Sinclair. the porn.(Kunerth, 1998) como guías para poder explorar el cuantio- porno, estrellas porno en potencia, son ha-
El panorama recuerda al comentario que so material disponible. A partir del análisis bitantes de Pornotopía.
hace Kendrick, sobre la definición de por- La conversación entre Joey y Chandler re-
nografía que hace Steven Marcus en su obre vela el contraste entre las realidades, im-
The Other Victorians. Marcus ha propues- plícitamente le hacen eco a la noción de
to que la detallada representación de la rea- Pornotopía. La pornotopía se refiere al es-
lidad, aunque presente hasta cierto pun- cenario ideal en que se desarrolla la obra
to en las obras pornográficas, es accidental pornográfica, un lugar de nunca jamás
en un género cuya tendencia dominante es donde el tiempo y el espacio no se miden
de hecho la eliminación de la realidad so- sino por encuentros sexuales, donde los
cial externa (Kendrick, 1995, p.110). La crea- cuerpos son reducidos a sus partes sexua-
ción del personaje no representa una elimi- les y donde esas partes son simples fichas
nación de la realidad, sino la participación en un juego de múltiples e inesperadas

64 Darío Sebastián Berrio Categorías de clasificación del porno en páginas gratuitas: una entrada a Pornotopía 65
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lombia. Bogotá: Planeta.

66 Darío Sebastián Berrio


Σigma

Resumen

Según una de las definiciones más extendidas y legitimadas, el porno carece de


contenido y más allá de las escenas de sexo explícito nada hay ahí connotado; es la
denotación llevada al extremo. No obstante, si se mira su versión más popular, la
pornografía heterosexual convencional o mainstream, las ideas dominantes de la
sociedad que la produce están ahí contenidas, como en todo producto cultural. Ade-
más del goce o el asco que pueda experimentarse, puede aprenderse mucho sobre
la naturaleza del orden social en que habitamos mirando porno y, aun más, obser-
vando cómo lo miramos. Mientras se celebra reiteradamente por doquier el debili-
www.lafulminante.com tamiento de las fronteras entre las identidades de género femenina y masculina, es
evidente que hay una gran diferencia de disposición entre la mayoría de hombres y
mujeres frente al consumo de porno. En el artículo se busca identificar algunas de

El porno
las razones más importantes por las cuales se presenta esta asimetría; por qué el
porno no está de-generado. Este recorrido se realiza a través de una revisión de los
aportes teóricos de diferentes autores, indagando cómo en la construcción histórica

no está
de conceptos y representaciones se sedimenta y configura la subjetividad masculi-
na y femenina, y se generan las marcadas diferencias aun vigentes en la dimensión
cuerpo-sexualidad-subjetividad.

de-generado
Palabras Clave: Pornografía Mainstream; identidades de género; sexualidad; relaciones
afectivas; objeto de deseo; virilidad; dominación masculina.

Aún existen los intercambios de revistas cosas con las que uno no sabía que se pu-
porno con los amigos del colegio y del ba- diera tener sexo. Pero con internet y su po-
Jaime Enrique Acosta Gutiérrez
rrio, las que están en las ventanas de las sibilidad de consumo pornográfico a domi-
Egresado de Sociología Universidad Nacional de Colombia
droguerías, el alquiler del porno en la vi- cilio, cada vez más anónimo y personaliza-
kikepaila@gmail.com deotienda escogido en el cuarto separado o do, la ceremonia del porno se guarda cada
en el catalogo apartado del público general, vez más en los hogares y desaparece del ojo
uno que otro teatro porno gigante de los público. Su privatización hace que la oferta
que antes abundaban en el centro de Bogo- pública se aleje cada vez más de la vertien-
tá, vendedores ambulantes con un surtido te convencional; apenas algunos consumi-
impresionante de películas porno y las ca- dores nostálgicos y poco relacionados con
binas separadas que ofrecen videos de una las tecnologías de la información perma-
variedad cada vez más sorprendente de re- necen demandando el material convencio-
laciones entre y con personas, animales y nal, y por supuesto sobreviven las prácticas

El porno no está de-generado 69


Σigma Σigma

del striptease y el sexo en vivo para los que convencional, moldeado de acuerdo a su resolver para continuar: ¿por qué la obse- Es así como, aunque ya desde el siglo XVI
una cámara web distancia más de lo desea- demanda, a sus obsesiones y fantasías. En sión social por el sexo y su censura?, ¿a qué Pietro Bacci, mejor conocido como Aretino
do, y las versiones más bizarras que aún no términos de Bernard Arcand, en tanto pro- obedece la diferencia entre hombres y mu- o Divino, generaba los primeros discursos
se encuentran disponibles en la red, de las ducto cultural, es de esperarse que las ideas jeres frente a las relaciones afectivas y, en con las características de lo que después se-
cuales no se me ocurre ninguna, pero como dominantes de la cultura estén presentes en últimas, frente a la sexualidad?; ¿cómo se ría considerado como pornográfico, no su-
dicen las abuelas acerca de las brujas, de la pornografía como un reflejo distorsiona- da el proceso de construcción del cuerpo fe- frió la censura que otorgó el victorianismo
que las hay las hay. do y caricaturizado de la sociedad. menino como objeto de deseo y pasivo sa- inglés, tres siglos más tarde, a lo que se de-
Aparte de la nostalgia que pueda signifi- Y entonces escojo deliberadamente una cralizado?; ¿por qué es tan mal visto social- nominó como el Museo Secreto, una habita-
car este cambio para muchos -me incluyo, pregunta de las muchas que pueden surgir: mente el porno?, ¿qué buscamos los hom- ción donde se confinaron las esculturas y
dos evidencias quedaron del porno antes de ¿por qué hay una diferencia tan marcada bres en el porno?. Si en este artículo no hay pinturas encontradas de las ruinas de Pom-
ir al anonimato, la predilección de la mayo- entre las disposiciones de hombres y muje- respuestas que le satisfagan al lector, lo que peya, que se constituyen como el produc-
ría de los hombres por su consumo en com- res frente al consumo de pornografía? Pues- si le garantizo es que por lo menos le sus- to cultural que estrena el adjetivo de por-
paración al rechazo o indiferencia de la ma- ta así la pregunta, se dan por sentadas una citaré una buena reflexión y muchas más nográfico a manera de censura, y que para
yoría de las mujeres hacia él, y los aspectos serie de suposiciones sobre las cuales resul- preguntas. sus autores los pompeyanos contaba con
tan comunes y reiterativos en su versión ta muy pertinente hacer las siguientes aco- Con el fin, no tanto agregar otra defini- un alto contenido de valores tradicionales,
más normal, es decir, heterosexual conven- taciones: en cuanto a pornografía, hago re- ción a la infinidad de las que abundan en religiosos y artísticos, pero fueron sus con-
cional, denominada en el glosario del por- ferencia a su versión mainstream; y, en cuan- la literatura, como de contener los aspec- sumidores ingleses quienes los valoraron
no como mainstream. to a hombres y mujeres, más allá de pre- tos principales de la definición de varios de netamente sexuales y licenciosos. En es-
Estos dos hallazgos para los que no se re- tender la canallada de meter a todo el mun- autores , se podría decir que hoy en día se
2
tos dos ejemplos se evidencia la separación
quiere mayor esfuerzo, contradice una de do en el mismo saco, teniendo en cuenta considera pornografía a un discurso sexual de las intenciones de los autores y las con-
las concepciones y definiciones más popu- las infinitas y, afortunadamente, cada vez desprovisto de un valor tradicional, reli- diciones de lectura que pueda tener el con-
lares de pornografía, en la que se dice que más creativas combinaciones posibles en- gioso, médico, científico, político, educa- sumidor, y sobre cuál aspecto de estas re-
se trata de un discurso sexual desprovisto tre las variables de sexo biológico, identi- tivo, informativo, artístico, literario, o lo cae la censura.
de sentido por fuera del sexo mismo, en tér- dad de género y orientación sexual, hago que sea; un discurso sexual que no remite
minos de Barthes, su carencia total de con- referencia a la configuración más normal a nada más que al sexo sin razón, violando Obsesión social
notación lo convierte en un producto abso- desde la perspectiva de tipos ideales1, de deliberadamente tabúes sociales y morales Partiendo de los escritos de Aretino en
lutamente denotativo, del que nada pue- mujer/femenina/heterosexual y hombre/ existentes. Pero como lo evidencia esta de- el siglo XVI, pasando por la primera pelí-
de leerse además de lo presentado. Pero en masculino/heterosexual. finición, más que de tratarse de una carac- cula pornográfica de que se tenga noticia
realidad hay algo de esta escena que se pue- En el intento de dar respuesta a esta pre- terística propia del objeto en sí, su etiqueta en 1907 (El voyeur), la fundación de la revis-
da leer, algo que va más allá de los rostros gunta me encontré en un campo minado, de pornográfico, como cualquier otra, de- ta Playboy en 1953, el estreno de la primera
transfigurados de placer, los flujos, y las en el que al cabo de unos pasos me salta- pende más de la percepción del espectador película pornográfica en teatros públicos
cada vez más creativas contorsiones y pene- ban a la cara nuevas preguntas que debía frente a este; de quién evalúa si la narrativa en los Estados Unidos en 1969 (Mona), y lle-
traciones por doquier. Frente a la pantalla o posee, además del contenido sexual, un va- gando a las producciones caseras disponi-
1  Hago referencia a los tipos ideales de Weber,
papel hay un segundo elenco y es el especta- como un esfuerzo de aprehender las identidades de lor artístico, educativo, religioso, etc, etc. bles actualmente en internet, es eviden-
género en sus características más típicas y esenciales
dor, un público cuyas reacciones han mol- te que la producción pornográfica ha teni-
en su evolución histórica descrita, y que difícilmente 2  Hago referencia a Adorno, Sontag, Arcand, Kend-
deado a lo largo de los años a la pornografía serían encontrados en la realidad. rick, Ogien, Barba y Montes do una aceleración exponencial y ocupa un

70 Jaime Enrique Acosta El porno no está de-generado 71


Σigma Σigma

importante espacio en la sociedad actual; el constringente, es decir, de forma negativa, actuales consumidores en cuanto a autenti- libertades sexuales, que aunque parcial,
dominio de internet registrado en el libro Foucault pasa a considerarlo como una fuer- cidad, capacidad de transgresión de la inti- ha sido un cambio importante; y el diálo-
de los Guiness Records como el más caro de la za movilizadora y positiva, que lejos de re- midad y posibilidades de interacción. go más abierto que se puede tener hoy día
historia, y que ha superado su propio record primir los placeres, los produce por medio Por estas razones no resultaría extraño sobre la sexualidad, y que habría resulta-
en más de una oportunidad es www.sex.com, del poder-saber, por medio de discursos ar- que esta fascinación en develarlo todo sobre do imposible en generaciones anteriores.
10 millones de dólares en el económica- ticulados, múltiples, entrecruzados, sutil- el sexo concluyera en una mayor atracción Mientras Foucault considera los cambios
mente deprimido año 2010, por una direc- mente jerarquizados y todos articulados con por los productos culturales pornográficos; como producto del poder, Giddens conside-
ción sin ningún tipo de contenido. fuerza en torno a un haz de relaciones de po- podría trazarse una línea recta que iría des- ra que son consecuencia de la ausencia del
Más de una transformación de la mo- der (Foucault, 2002: 41). Se pasa de concebir de la pastoral del siglo XVII hasta lo que fue mismo. Considera que la alta importancia
dernidad permite el auge de la producción la sexualidad como un impulso que debe ser su proyección en la literatura, y en la lite- que se otorga a la sexualidad es consecuen-
y el consumo. Por parte de la producción controlado para garantizar el orden social, ratura escandalosa (Foucault, 2002: 30). Es cia de las rupturas radicales con la tradi-
se puede hablar del desarrollo tecnológico a concebirla como un dispositivo producido por esto que para Foucault, el Marqués de ción, y la sexualidad constituye un punto
que permite la producción y divulgación de por el mismo control social, cuyo fin último Sade, a pesar de ser considerado un mons- de contacto con todo aquello a lo que se ha
contenido, que comienza con el poder de la es regular las relaciones de poder. Se gene- truo moral (Foucault, 2000: 82) para su épo- renunciado por la seguridad técnica que la
imprenta y llega a las democratizadas cá- ra entonces desde el poder, una fuerte inci- ca, lejos de ser un trasgresor total, era un vida cotidiana ofrece. (Giddens, 2000: 178).
maras de video y fotografía digital, y el po- tación moderna a la producción de discur- digno representante de su tiempo.
der de divulgación del internet al alcance sos sexuales, por un lado científicos, para Como crítica a esta concepción, se plantea Diferencias afectivas
de un clic. realizar una acumulación de saber sobre el la baja responsabilidad y la pasividad que se En apariencia no hay nada más imperti-
Adicionalmente, se requiere de la auto- sexo, y por otro, a nivel individual, median- asigna a los sujetos frente a la adscripción nente frente al tema del porno que hablar
nomización de los campos, que permiten te la implantación del desvelamiento de los a estos discursos y sus continuas transfor- de amor. Pero cabe resaltar que la forma en
la autonomización de una narrativa sexual deseos personales como condición para ac- maciones. Así, Wendy Hollway, considera que se relacionan las identidades de género
sin relación alguna con los demás campos, ceder al autoconocimiento más profundo y que la explicación de Foucault desconoce el femenina y masculina frente a los modelos
como el religioso, el político, el artístico, genuino de sí, a través de los mecanismos hecho de que adherirse a un discurso entre predominantes de amor dice mucho de su
etc., etc., etc. de la confesión religiosa y posteriormente varios responde a una combinación entre relación y forma de asumir la sexualidad y,
Desde la demanda, se puede decir que la de la disciplina psicoanalítica. un compromiso emocional y un interés en por consiguiente, al porno. Las formas de
compulsión de los individuos por el sexo Un primer aporte, que contribuiría a es- el poder relativo (satisfacción, recompensa, amor que conocemos hoy en día son una in-
no es una tendencia a contracorriente de la clarecer las razones por las que la sociedad pago) que promete esa posición (pero que no vención de la modernidad y determinan en
tendencia social, donde cada vez es más di- se ve impulsada tan fuertemente a prestar necesariamente satisface) (Hollway, citada gran medida la disposición de cada género
vulgado y banalizado el contenido sexual, una importante atención al sexo, que se por Lauretis, 2004: 220). frente a la sexualidad.
y se acepta más el consumo de porno como evidencia por el éxito comercial de la por- Por su parte Giddens, considera que el Como primera forma de amor, casi uni-
una elección individual. Cabría preguntar- nografía y la sexualización generalizada de biopoder de Foucault no explica los cam- versal a todas las culturas, se distingue el
se entonces por el origen de esta compul- los discursos. bios recientes en las relaciones afectivas, amor pasión, en el que se hace una cone-
sión generalizada. En este sentido, podría considerarse a los los cuales concibe como consecuencias xión genérica entre amor y atracción se-
En oposición a las hipótesis represivas sacerdotes como los primeros incitadores de luchas sociales que contienen elemen- xual. Al tener la propiedad de apartar a los
de Reich y Marcuse, en las que se conci- y consumidores asiduos de una pornogra- tos de emancipación involucrados, como sujetos de las rutinas de la vida diaria y de
be al poder como una fuerza coercitiva y fía, que sería envidiada por muchos de los por ejemplo, la conquista femenina de sus obligaciones, resulta potencialmente

72 Jaime Enrique Acosta El porno no está de-generado 73


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subversivo. En el occidente anterior a la tiene implicaciones importantes en la re- privado, le corresponde la tarea de cultivar los sexos en la relación afectiva, en la que
modernidad, los matrimonios nunca tuvie- estructuración de las identidades de géne- este amor, mientras el hombre, excluido de los estilos de vida dejan de estar configu-
ron como condición indispensable este tipo ro masculina y femenina, al ir de la mano la intimidad de las relaciones, se ha espe- rados por modelos preestablecidos y deben
de amor ni ningún otro, ya que las uniones con la aparición de la familia y hogar mo- cializado y limitado a las tareas de seduc- negociarse a la luz de una sociedad donde
se realizaban obedeciendo a intereses socia- derno, y su institucionalización, a través ción y conquista. En cierta medida corres- las mujeres han conquistado amplios nive-
les y económicos, más a la forma de una so- del matrimonio. pondería a un amor feminizado, pero que les de emancipación sexual. La intimidad,
ciedad de negocios. En el caso de las clases La separación de la vivienda y el lugar de funciona bajo la dominación masculina al concebida como la capacidad de comuni-
pobres, este constituyó una forma de orga- trabajo asigna al hombre al centro del sis- excluir a la mujer de la esfera pública. car emociones para el conocimiento mu-
nizar el trabajo agrícola. Como evidencia tema productivo, y a las mujeres al cuidado La tensión que se da entre la pulsión se- tuo, se configura como medio elemental de
del fuerte lazo que une al poder y la sexua- doméstico y de los hijos, es decir, se crea el xual masculina y el amor romántico es fá- establecer relaciones afectivas en la socie-
lidad, se observa cómo en la aristocracia se rol de madre-esposa, que claramente refor- cilmente superada mediante la separación dad contemporánea. Es hora de construir
le permitía, sin inconvenientes, una licen- zó en gran medida el modelo de los dos se- de las mujeres en puras e impuras; en espo- relaciones, no mediante estándares, sino
cia sexual separada de la reproducción y del xos; es la separación entre las esferas priva- sas y putas. Más que significar un rechazo desde la razón, preferencia y conveniencia
matrimonio a las mujeres respetables sin da y pública, y la disposición para funcionar de la feminización del amor respetable por mutua.
ningún tipo de consecuencias negativas. dentro de cada una de estas esferas es in- parte de la dominación masculina, se tra- En esta transformación las mujeres se
A finales del siglo XVIII, y en coinciden- corporada en cada identidad de género. Un ta de su aceptación bajo la incorporación de encuentran paradas sobre un terreno más
cia con el surgimiento de la novela román- proceso de incorporación que se lleva a cabo una doble moral. firme en cuanto son las promotoras del
tica, surge el amor romántico, el cual in- desde el momento mismo de la crianza me- Es evidente que actualmente occidente se cambio, mientras el hombre queda en una
serta al yo y al otro dentro de una narrati- diante el desarrollo y privilegio de ciertas encuentra en una ruptura de paradigma en posición muy insegura, en cuanto garan-
va personal. A este respecto cabe anotar que competencias en detrimento de otras, y me- el que los ideales del amor romántico se pre- tizaba sus relaciones afectivas por medio
etimológicamente la palabra romántico se diante las cuales suele concebirse a las iden- sentan como obsoletos en gran parte. Las de modelos que contenían implícitamente
desprende del término francés para nove- tidades como complementarias. Mientras transformaciones que se han dado sobre el la dominación masculina; las tareas mol-
la, roman, y no al contrario como podría en los niños, se tiende a reprimir es su au- campo de las relaciones afectivas son bas- deadas bajo la forma específica del amor
suponerse. Este amor de novela evidencia tonomía emocional, privilegiando las com- tante profundas y evidencian un mayor pro- romántico, y su consecuente división de
la estrecha relación entre el amor y su in- petencias instrumentales; las niñas tienen tagonismo por parte de las mujeres como las esferas y papeles, permitían al hombre
corporación a una narrativa del ego. A dife- muchas más posibilidades de lograr esta impulsadoras del cambio. Un claro ejemplo mantener una distancia emocional, mien-
rencia del amor pasión, el cual se mantu- autonomía emocional, que más que tratar- de esto es la separación que se ha hecho del tras se le garantizaba la complicidad de la
vo siempre al margen de las instituciones se de una propensión a una simple expre- amor, el sexo y del matrimonio como insti- mujer-esposa, quien se encargaba de suplir
en cuanto su libertad implicaba una rup- sión de emociones, se trata del desarrollo de tución, lo que repercute en una constante esa carencia de afectividad mediante el cul-
tura radical con los deberes y la rutina, en competencias comunicativas y afectivas. revaluación de la relación, al no considerar- tivo del amor romántico. Este atrofiamien-
el amor romántico, la libertad y la realiza- La especialización de los roles sexuales se como un compromiso para toda la vida, to emocional no resulta muy útil en mode-
ción personal resultan compatibles con la en cuanto a la relación amorosa es clara; sino que su duración dependerá del bienes- los afectivos en los que se requiere de mayor
rutina y los deberes de cada uno; los lazos el modelo del amor romántico exige una tar y la satisfacción que la relación procure a participación de los implicados en su crea-
de unión que hacen sostenible una relación relación que más allá de la asociación por cada una de las partes implicadas. ción al no tener una forma preestructura-
en el tiempo prevalecen frente a lo efímero conveniencia, exige enamoramiento, y a Esta ruptura acarrea una necesaria reaco- da, y en medio de una cultura que, en tér-
del deseo sexual. Es un modelo de amor que la mujer, como responsable del hogar y lo modación de los papeles que desempeñan minos de Lipovetsky, cada vez valora más

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lo personal, la autenticidad y la comunica- Aun cuando se experimenta un cambio entre los sexos. Si la mujer se mantiene en hombre en el trono de la estética que lo que
ción intimista en las relaciones afectivas. trascendental en el paradigma afectivo, cierta forma adherida al orden asimétrico lleva la mujer reinando. Más sin embargo,
Como parte constitutiva de las relaciones, una parte significativa de las implicacio- de la seducción, se debe a que así lo desea, a la explosión e implicaciones de la belleza
la seducción experimenta cambios drásti- nes del modelo romántico sobre las iden- que obtiene beneficios de esta diferencia. Su femenina no tiene comparación, si se tie-
cos. Si bien no puede hablar de una igua- tidades de género perduran y modelan al- papel de espera no es evidencia de servidum- ne en cuenta que le corresponden los años
lación seductiva entre los sexos, se observa gunas de las disposiciones de cada género bre, sino por el contrario, una manera de ser de mayor democratización de los medios de
un papel mucho más activo en el caso de las frente a la sexualidad; es marcada la espe- gratificada y de mostrar que lo primordial producción, divulgación y consumo.
mujeres, pero de una forma radicalmente cialización emocional femenina y la ins- para su deseo no es el sexo. Ese papel a la vez En la prehistoria, sin clases ociosas y
diferente a la masculina; las mujeres sedu- trumental masculina. le otorga la ventaja de la dirección del juego donde las mujeres eran productivas y dele-
cen menos frecuentemente, y son mucho Así, aunque ya no se encuentran someti- seductivo, es ella quien toma las decisiones gadas a las tareas más despreciables y mo-
más discretas y selectivas que los hombres, das y silenciosas ante la dominación mas- finales y quien es solicitada con atenciones. nótonas, las imágenes de mujeres fueron
a la vez que dejan a estos una mayor inicia- culina, las exigencias y condiciones feme- Se trata de una divergencia que no se perpe- hechas como tributo a la fecundidad, y es-
tiva. Según Lipovetsky, esta delegación de ninas siguen teniendo una gran fuerza túa por inercia social, sino en razón de su téticamente no había contradicción con la
iniciativa, más que un rezago de los mode- sobre la concepción del amor femenino. compatibilidad con las pasiones modernas relación que tiene lo femenino con todo lo
los anteriores, corresponde a una decisión Como evidencia se observa que es la mujer de la valoración y la libre posesión de uno inferior y negativo.
deliberada por conveniencia, por alimentar la que en la mayoría de los casos pide el di- mismo. (Lipovetsky, 1999: 59). En el siglo V a.c., la estética reinante se
el ego de quien siente sentirse solicitada. vorcio cuando ve que su relación conyugal relaciona directamente con la figura del
La especialización masculina en las acti- se dirige hacia el fracaso, ya que, a diferen- Gener-ación del hombre como se puede observar en las pro-
vidades seductivas del amor romántico re- cia del hombre, la prioridad que conceden objeto de deseo ducciones artísticas. Para Grecia y demás
sulta poco grata cuando la conquista y la se- a sus relaciones y sentimientos, hacen ver La pornografía mainstream es obsesiva so- civilizaciones antiguas la mujer bella, lejos
ducción en sus formas tradicionales se vuel- las malas relaciones como fallas y obstá- bre el cuerpo femenino, tratado como be- de ser valorada, era considerada como un
ven, según Giddens, actividades obsoletas. culos que se interponen para su felicidad y llo, pero sobre todo, como un objeto de de- ser engañoso y nefasto. De manera simi-
Son rutinas que al estar asignadas en un propio bienestar. seo y sagrado, que debe ser conquistado y lar, en el judeocristianismo, la belleza de
modelo cuyos roles se conciben como com- De esta manera, se puede evidenciar una profanado. la mujer generaba desconfianza antes que
plementarios dependen por completo de la dependencia emocional de los hombres ha- La superioridad estética de la mujer es admiración. Y esta concepción se extende-
existencia de este modelo, en la medida que cia las mujeres, encubierta por el modelo considerada en muchos casos como una rá hasta finales de la edad media, donde las
funcionan como partes de un engranaje y del amor romántico y su respectiva com- condición natural y objetiva de la femini- miles de mujeres quemadas en la inquisi-
separadas pierden sentido. Al requerir más plicidad femenina. Dependencia que se dad, en contraste con una masculinidad a ción por su belleza, asociada a diversas ar-
que la voluntad para abandonarse y al re- hace cada vez más evidente, y serán más la que le cuesta un poco más de trabajo ser timañas demoníacas constituyen la prue-
sultar incoherentes con el proyecto reflexi- frecuentes y agudos los trastornos compul- hermosa, a costo de feminizarse, como re- ba reina. En el siglo XII, aunque se inicia
vo del yo, las rutinas masculina vistas a la sivos de la sexualidad masculina clásica, sulta evidente en la androginización de la con el culto a la virgen María, esta apare-
luz de la modernidad tardía se transfiguran cuanto más mengüe esta complicidad. publicidad. ce desprovista de cualquier signo de seduc-
en adicciones sexuales, en la medida en que Según Lipovetsky, algunos de estos ras- Según Lipovetsky, haciendo cuentas en ción que la pudiera relacionar con la caída
obstruyen la libertad de decisión, de la que tros, como es el caso de la diferencia seduc- siglos, las mujeres perderían en cuanto a o con Satán, como en cambio sí sucedió en
el individuo debe ser capaz, con miras a una tiva, no obedecerían a una forma residual temporalidad histórica el concurso del cul- gran parte del arte medieval, que inculcó
colonización del futuro como proyecto. y moribunda de las anteriores relaciones to a la belleza. Mucho más tiempo duró el un miedo singular a la belleza de la mujer.

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Para que pudiera aparecer un culto que desnudos femeninos, y para el siglo XVI dos lejos de tratarse de una sumisión voluntaria feminidad como objeto de deseo, se entra a
consagrara a la mujer como hermosa, ade- terceras partes del arte se dedica exclusiva- y calculada por parte de la mujer, es la vio- una nueva fase que Bourdieu denomina la
más de resultar indispensable la división mente a la figura femenina. lencia simbólica que ejerce la dominación economía de los bienes simbólicos, una eco-
de la sociedad en clases ricas y pobres, don- La pose y postura de la mujer en el arte masculina, la que consigue instrumentali- nomía que refuerza la competencia mascu-
de se configure una clase de mujeres ocio- revelan de un modo particular la sensuali- zar al cuerpo femenino y ganar su compli- lina por el honor y la virilidad. Mientras en
sas que dispongan del tiempo suficiente zación del bello sexo y su disposición como cidad. Una dominación que no requiere de la mujer se incorpora una disposición como
para acicalarse y decorarse en función el objeto. Muestra de esto el arte veneciano, coerción física, sino que el dominado conce- objeto de intercambio, una inclinación a
hombre, resulta necesario que el campo ar- donde la mujer que duerme y reposa se en- de pacíficamente su adhesión al dominador tratarse a sí misma como objeto estético
tístico logre cierta autonomía frente a las trega a la contemplación, se ofrece la mujer al carecer de esquemas de percepción, ac- cuya función consiste en perpetuar y acre-
cuestiones religiosas. Es así como durante que sueña, a los sueños de posesión de los ción y significación diferentes a los de este, centar el capital simbólico de los hombres,
los siglos XV y XVI, en pleno Renacimiento, hombres. (Lipovetsky, 1999: 111). y así, la relación de dominación se concibe en los hombres se incorporan fuertes impul-
se conjugan dos lógicas que hacen posible Se construye así una oposición entre bello como natural; es una relación social soma- sos en tomar en serio este juego de compe-
el reinado cultural del bello sexo. Una es el sexo y dinamismo voluntario, entre femi- tizada. De esta manera, los actos de cono- tencia por el honor, de creencia e inversión
reconocimiento explícito de la superioridad nidad y actividad útil, es la significación de cimiento de la mujer, son en realidad actos de esfuerzos en la carrera por la virilidad.
estética de la mujer, y la otra, una glorifica- la mujer como decoración, como objeto, se de reconocimiento práctico de la sumisión, Si la mujer antes de su reinado como be-
ción de sus atributos físicos y sus virtudes; estiliza su enigma y la tradición de su inac- actos que crean la violencia simbólica de la llo sexo estaba condenada a circular como
una sacralización de su belleza. La belleza cesibilidad; esta identificación de la mujer que es víctima a la vez, que llevan a la auto- mercancía portadora de un estatus liga-
de la mujer pasa de ser una evidencia de la como pasiva, es a nivel sexual, el principio depreciación y a la adhesión a una imagen do al linaje y lo económico, desde este mo-
existencia de Satán y sus nefastas intencio- que crea, organiza y dirige el deseo mascu- desvalorizada de la mujer como objeto. mento se constituye, al margen de sí mis-
nes, a ser concebida como la prueba vivien- lino como deseo de posesión, como domi- Si la consagración de lo femenino como ma, como un objeto/símbolo del poder de
te de la perfección divina de la creación. nación erótica, y el deseo femenino como bello sexo, mediante el cual se le colma de seducción masculina, del poder de su capa-
Las representaciones de Venus, que re- deseo de la dominación masculina, como atributos de admiración, no conmocionó a cidad de conquista del objeto de deseo. En-
emplazan el culto precedente a la virgen, subordinación erotizada, o incluso, en su la dominación masculina, es porque hace tre más deseo despierte la mujer, más dirá
constituyen por tanto el triunfo de la be- límite, reconocimiento erotizado de la do- parte de una transacción en el que la do- acerca del hombre que la posea exclusiva-
lleza y la concepción de la mujer como re- minación. (Bourdieu, 2007: 35). minación masculina gana mucho más de mente para sí, y mucho más si esta pose-
flejo de una perfección moral y espiritual. Para Bataille la mujer se constituye como lo que entrega; nada es gratis en el orden sión se da por el deseo mismo de la mujer
El renacimiento recicla la cultura griega y objeto de deseo, por ella misma así lo decide de la dominación masculina, y lo que se le tan deseada; de la complicidad femenina.
redescubre la gracia y belleza de Venus y intencionalmente; sería injustificado decir ofrece a la mujer por un lado, se le reclama La exhibición controlada del cuerpo po-
demás diosas; se ha invertido el clásico có- de las mujeres que son más bellas, o incluso con creces por otro: por una parte, el este- dría considerarse como una liberación de la
digo griego pederasta y la hermosa mujer más deseables que los hombres. Sin embar- reotipo femenino de fragilidad, pasividad mujer del confinamiento simbólico del que
desnuda invade las representaciones artís- go, con su actitud pasiva, intentan obtener, y dependencia se refuerza, de igual mane- es víctima mediante la disciplina que el ves-
ticas. El cuerpo femenino se vuelve espec- suscitando el deseo, la conjunción a la que ra que la tradicional asociación de la mujer tuario ejerce sobre su cuerpo. No obstante,
tacular, tanto para el narcisismo de mu- los hombres llegan persiguiéndolas. Ellas con la debilidad de mente y el bello cuerpo, también podría indicar una mayor compli-
jeres como para el deseo de los hombres. no son más deseables que ellos, pero ellas se en contraste con la asociación que se hace cidad femenina con su posición de instrumen-
Desde inicios del siglo XV se manifiesta el proponen al deseo. (Bataille 2005: 136). En del hombre a la razón y la fuerza física; por to simbólico en el mercado de los bienes sim-
gusto de los poderosos por las pinturas de contraste con esta hipótesis, para Bourdieu, otra parte, mediante la construcción de la bólicos. En la medida que exhibe y oculta su

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cuerpo simultáneamente a manera de pro- mujer como imagen (espectáculo, objeto obsesión que muestra el porno convencio- naturaliza la desigualdad sexual y que per-
vocación, la mujer utiliza su cuerpo subor- para ser contemplado, visión de belleza y nal por dar muestras del placer femenino mite explicar por qué el mismo sistema de
dinándolo al punto de vista masculino, ma- la concurrente representación del cuerpo nunca tiene como fin entenderlo en sus orí- esquemas clasificatorios reaparece, en su
nifiesta su disponibilidad simbólica, su po- femenino como locus de la sexualidad, sede genes, sino por el contrario, aislarlo y do- parte esencial, más allá de los siglos y de
der de atracción y seducción que la valoran del placer visual o señuelo para la mirada) mesticarlo. El deseo femenino aparece tan las diferencias económicas y sociales, en
como objeto estético, exhibe el poder osten- (Lauretis, 1992: 64). episódico como el masculino y así se com- los dos extremos del espacio de las posibili-
toso que investirá al conquistador. prende lo que quieren las mujeres y como dades antropológicas, en el caso de los cam-
En cuanto esta complicidad femenina Gener-ación del penetrar en su deseo, en los términos pro- pesinos montañeses de la Cabilia y en el de
con la carrera masculina por la virilidad no objeto de deseo pios de una sexualidad masculina. la gran burguesía inglesa de Bloomsburry
es racional ni calculada, cabe preguntarse En la pornografía heterosexual conven- Los aspectos relacionados con la moder- (Bourdieu, 2007: 103).
de qué manera se implanta como constitu- cional, puede distinguirse la evidencia im- nidad, como son los modelos afectivos y el El hecho de que bajo el reinado de la do-
tiva de la identidad de género femenino en plícita de la complicidad de la mujer como encumbramiento de la mujer como el bello minación masculina la feminidad haya sido
la modernidad. Desde los siglos XV y XVI, objeto integrante del mercado de los bie- sexo, no explican la sexualidad episódica construida por defecto, como la negación de
donde se inicia el reinado cultural del bello nes simbólicos. Como principal indicador masculina como un privilegio y hábito que la masculinidad, hace que se tienda a impo-
sexo, la consagración de la belleza femeni- de esto puede servir el lugar tan común de trasciende a los momentos históricos, que nerle estrictos límites centrados en su cuer-
na se confina a los círculos elitistas; mien- la contemplación que casi todas las actri- haría explicable el hecho de que la prostitu- po, límites inscritos en sus disposiciones
tras en las mujeres de la élite su belleza po- ces del porno dirigen hacia el espectador. ción sea el segundo oficio más antiguo de la concretamente corporales, que dictaminan
tencia sus cualidades sociales y morales, en La sexualidad de la mujer se retrata de tal humanidad —después del mago o sacerdo- las formas correctas de conducción del cuer-
las jóvenes del pueblo constituye una vul- forma que es neutralizada y cualquier ame- te— como consecuencia de un evidente des- po y de sus partes, y que definen su cuerpo
garidad. Habrá que esperar hasta entrado naza de intimidad se disuelve por los aires. fase entre la demanda sexual masculina y como algo cerrado y a la vez sagrado. En el
el siglo XX para que se masifique el culto y El poder fálico requiere de muestras tácitas la oferta sexual femenina, en la que se da la caso especíofico de la vagina, al ser conside-
permee a todas las clases sociales, para que de su efectividad y la obsesión por el placer popular asimetría del hombre propone y la rada como la inversión del falo, como algo
entre en la era de las grandes masas y se femenino, su exceso de detalle en la repre- mujer dispone. vacío, se constituye socialmente como obje-
constituya como componente importante sentación audiovisual, así lo delata. La mu- Bourdieu expone como hipótesis una do- to sagrado dentro de un cuerpo a la vez sa-
de la feminidad. jer se retuerce, gime y grita como prueba minación masculina que está presente en grado y se somete de esta manera a normas
Es la aparición de lo que, en términos de de la potencia que recibe, mientras que el o toda la historia de la humanidad, gracias a específicas que dictaminan la forma cómo
Teresa de Lauretis, podrían considerarse los hombres que participan de la escena di- una autonomía de las estructuras sexuales debe ser utilizada, cuándo evitada, su mo-
nuevas y poderosas tecnologías de género (Lau- rigen los actos de una forma parsimoniosa en relación con las estructuras económicas, mento indicado, así como los actores que
retis, 2004), tan evidentemente influyen- como fuentes de una potencia que tiene la de los modelos de reproducción en relación deberían estar implicados; aspectos que de-
tes en el proceso de gener-ación de las muje- capacidad de enloquecer a la mujer que lo con los modos de producción (Bourdieu, terminan, en últimas, la legitimidad o pro-
res y los hombres, como lo son la prensa, desee. El placer masculino es, por una par- 2007: 103). Autonomía que es posible por fanación de su uso. Se trata de una construc-
el cine, la fotografía y la publicidad, que te, disfrute del placer femenino, del poder la producción androcéntrica de lo simbóli- ción social con orígenes claros en los princi-
traen como consecuencia la difusión a gran de hacer disfrutar […] esperan del orgas- co, de todo un esquema perceptivo, valora- pios de visión y división androcéntrica.
escala de las normas ideales y prescripti- mo femenino una prueba de su virilidad y tivo y conductual que permea todo y asig- Para Bourdieu, el hecho de que la va-
vas de lo que debe ser una mujer; tecnolo- el placer asegurado por esta forma supre- na las cosas y los cuerpos a su lugar, a un gina siga siendo un fetiche explica en
gías que masifican la representación de la ma de sumisión. (Bourdieu, 2007: 34). La orden que se evidencia como lógico, que gran medida por qué el sexo permanece

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socialmente tan estigmatizado en la con- profanación que se agudiza al tratarse de Obsesión vs Indiferencia incorporadas frente a la pornografía hete-
ciencia común y en la legalidad; la vagina ofrecimientos ni gratuitos ni privados, sino Algunos aspectos darían a entender que rosexual convencional, pero tal vez resul-
sigue siendo considerada como un tabú, con intereses económicos y realizados bajo los hombres se configuran como objetos ten menos evidentes las causas de la dispo-
algo secreto y sagrado que resulta incon- la humillación que implica la vista pública; del deseo de forma gradual y equivalente a sición de la mujer frente a este tipo de pro-
cebible ofrecer si no es de forma gratuita la pornografía es una doble profanación del las mujeres, como es el caso de los consu- ductos culturales.
bajo las normas establecidas, bajo las re- orden moral sobre el cuerpo femenino: con- mos femeninos de pornografía y striptease. Son diversas las hipótesis que común-
glas específicas del mercado de los bienes juga la prostitución y la exhibición pública Pero visto con detalle, no se trata de una re- mente se plantean respecto a la posición
simbólicos, y por esto la prostitución re- de esta transacción. lación equivalente a la masculina: para el femenina de rechazo o indiferencia frente
sulta absurda como un trabajo que la mu- Ante los esquemas de percepción mascu- caso de la pornografía, más parece indicar a los productos pornográficos convenciona-
jer haga por elección propia, ajena a la po- lina y de inclinaciones incorporadas me- que el grueso de las cifras apunta a un con- les. Por una parte, se atribuye el rechazo al
breza y al hambre. diante la socialización, y que dominan al sumo en pareja a modo de estimulante se- carácter ofensivo que pueda tener la porno-
Vista así, la vagina penetrada represen- dominador, la necesidad de demostracio- xual y de complicidad con ciertas fantasías grafía convencional hacia las mujeres, en
ta una desacralización, una dominación y nes constantes de virilidad explican una masculinas, en donde, como bien apunta la medida que reproduce el estereotipo de
sometimiento de la mujer al poder mascu- cierta implantación en el deseo de partici- Lipovetsky, su consumo compartido resta- la mujer sumisa que erotiza la relación de
lino, un efecto que hace posible concebir la par, o celebrar bajo la mirada, de la sumi- blece la dimensión intersubjetiva-emocio- dominación masculina y quiere ser vejada
relación sexual vaginal como una proeza sión de la mujer frente al poder fálico. Esta nal que la pornografía heterosexual conven- sexualmente; y, por otra parte, se le impu-
masculina que reafirma su virilidad pro- mirada está presente en la pornografía ma- cional anula con tanto ahínco; en el consu- ta a la mujer de lastrar desde tiempos de-
fanadora de lo doblemente sagrado. Este instream que, en últimas, es una represen- mo masivo de los striptease masculinos, al cimonónicos una mojigatería que le hace
hecho evidencia importantes razones por tación audiovisual de la virilidad llevada igual que en el caso anterior, la diferencia concebir cualquier imagen de sexo explíci-
las que la relación sexual, sus prácticas y a su límite extremo. Si la pornografía he- de consumo es evidente frente al caso de los to como inmoral, algo así como si se tratara
representaciones no significan lo mismo terosexual convencional y, en especial su hombres. No son muy publicitadas —aun- de una permanente inhibida sexual.
para los sexos, no es una relación simétri- variante dura, son tan atractivas para los que seguramente deben existir en la mar- Estas hipótesis no resisten mucho al aná-
ca cuando el hombre ve en ella un acto de hombres y resultan tan indiferentes o mo- ginalidad y muy lejos del consumo masi- lisis; en el caso del rechazo por su carácter
dominación, de posesión de la mujer. La lestas para las mujeres, se debe a que por- vo— las cabinas a las que asistan mujeres a ofensivo, pareciese que en la mayor parte
relación sexual significa entonces para los nografía mainstream y virilidad van estre- masturbarse a solas mientras los hombres de los casos hay más indiferencia que in-
hombres un acto sobre todo físico y agre- chamente de la mano. La pornografía he- se desnudan frente a ellas. Más parece ser dignación, por lo que es difícil que tal ofen-
sivo de conquista, un acto que está fuerte- terosexual convencional es la evidencia, en su gran mayoría una actividad recreativa sa exista para la mayor parte de las muje-
mente orientado hacia la penetración y el como producto cultural audiovisual, de la donde grupos de mujeres asisten entusias- res; en el caso de la mojigatería, se puede
orgasmo, un acto en donde el placer mas- dominación que sufre el hombre como do- madas por sentirse sujetos de deseo y trans- observar que, dentro del porno, el conteni-
culino se encuentra muy marcado y de- minador, de la carga que implica la virili- gredir el modelo tradicional de mujeres obje- do sexual es lo que menos incomoda a las
pendiente del placer femenino, de su ca- dad como muestra permanente de poder a tos; juegan el juego de los hombres, con una mujeres, como lo demuestra, entre muchas
pacidad de hacer disfrutar como prueba través del bien simbólico que representa la sensación más de entretenimiento y satis- otras cosas, su desinhibida disposición a
de virilidad. mujer, así como de la incorporación de esta facción cómplice de transgresión controla- consumir artículos culturales eróticos en
Vista desde este punto, la pornografía es necesidad continua de proferir pruebas de da que de estímulo sexual. el cine y la literatura; lo que incomoda, o
la apología de esta conquista del cuerpo sa- dominio en las disposiciones más profun- Resulta muy fácil entonces conectar la por lo menos evita la gran emoción que sí
grado a la vez que bello de la mujer, de una das de los hábitos masculinos. masculinidad y sus fuertes disposiciones demuestran los hombres, es el régimen

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despersonalizado de la pornografía hetero- De-generar el porno En este sentido, Foucault plantea una sumisión pueden invertirse a satisfacción
sexual convencional, su desmembramien- Aunque la pornografía heterosexual con- cuestión que resulta bien interesante, y es de los participantes, o bien, si no se invier-
to corporal y obsesiones falocentristas y gi- vencional es una clara muestra de la vigen- lo que se refiere a cómo reaccionar frente a ten, son convenidos de manera no arbitra-
necológicas tan evidentes y tan ajenas a la cia de la dominación masculina y sus im- la concepción de que nuestra sexualidad no ria mediante una negociación equitativa.
sexualidad femenina; las mismas razones plicaciones personales y sociales, las posi- es un asunto natural sino social, a que una Este es un ejemplo de cómo la fantasía pue-
que alejan a las mujeres de consumir ávida bilidades de producir pornografía son in- emancipación sexual a la manera como de crear escenarios de reflexividad sobre el
y masivamente una prostitución masculi- finitas y pueden superar con creces su va- era contemplada en los años sesenta, don- orden naturalizado de la sociedad.
na. La pornografía heterosexual conven- riante más convencional. En este sentido, de se buscaba liberar el cuerpo de las repre- Lo importante de estos juegos posibles
cional resulta ser demasiado anónima, de- varias mujeres en la actualidad, al encon- siones para encontrar la sexualidad verda- mediante la fantasía sexual y la pornogra-
masiado desligada de la persona considera- trar una oportunidad tan rentable, se es- dera y original, lo único que podía encon- fía, es precisamente que el derrumbe de la
da en su totalidad […] el erotismo femeni- fuerzan por crear pornografía especializada trar era un cuerpo asexuado, un vacío de dominación masculina que reina y truena
no halla su razón de ser en la expresividad para ser consumida por mujeres. Tal es el sexualidad original. Por tanto sugiere que en la sociedad actual, no depende tanto de
emocional y no en la instrumentalidad, en caso de la sueca Erika Lust, la alemana Pe- las relaciones que debemos tener con no- la conciencia de las personas ni de las posi-
el intimismo relacional y no en la operati- tra Joy, las estadounidenses Joanna Ángel y sotros mismos no son relaciones de iden- bilidades de autonomía económica que pue-
vidad libidinal. (Lipovetsky, 1999: 38). Jane Esther Hamilton, o la española Sandra tidad; más bien, han de ser relaciones de dan conquistar los dominados, ya que cuan-
El hecho de que las mujeres están social- Uve, por citar solamente algunos ejemplos. diferenciación, de creación de innovación. do las presiones externas son abolidas y las
mente preparadas para vivir la sexualidad Pero si a la pornografía heterosexual con- (Foucault, 1999: 421). libertades formales se han adquirido, la
como una experiencia íntima y cargada de vencional hecha por y para hombres se le Como bien dice un personaje en una en- auto exclusión y la vocación acuden a tomar
afectividad que no incluye necesariamen- pude considerar como un teatro de las ob- trevista sobre el tema, hay fantasías que el relevo de la exclusión expresa. […] La rup-
te la penetración, sino que puede abarcar sesiones masculinas, quizá los intentos de nos atrapan y otras que nos liberan… Las tura de la relación de complicidad que las
un amplio abanico de actividades (hablar, diseñar una pornografía especializada para fantasías sexuales cuando se emplean cons- víctimas de la dominación simbólica conce-
tocar, acariciar, etc.) (Bourdieu, 2007: 34), la sexualidad femenina —una sexualidad cientemente, pueden crear un contraorden, den a los dominadores sólo puede esperarse
es razón suficiente para considerar que in- igualmente social e implicada de conno- un tipo de subversión, y un espacio hacia el de una transformación radical de las condi-
teriorizan unas disposiciones muy diferen- taciones diferenciadas y relativas de poder que podemos escapar, especialmente cuan- ciones sociales de producción de las inclina-
ciadas a las de los hombres frente al acto dentro del orden de la dominación masculi- do estas fantasías dinamitan todas las dis- ciones que llevan a los dominados a adoptar
sexual, para los que tiene un significado na—, generarían de manera similar un tea- tinciones netas y opresivas entre activo y sobre los dominadores y sobre ellos mismos
agresivo muy cercano al de la dominación tro de las obsesiones femeninas. pasivo, masculino y femenino, dominante un punto de vista idéntico al de los domina-
o posesión. Pero, por constringentes que puedan ser y sumiso. (Citado en Giddens, 2000: 116). dores. (Bourdieu, 2007: 56-58).
Resulta entonces inexplicable la relación las disposiciones, y por tanto, los deseos El sadomasoquismo, para dar tan solo En este sentido, ojalá la pornografía crez-
y disposiciones de los sexos frente a la por- sexuales adquiridos mediante la sociali- un ejemplo, utilizado por Foucault, ofre- ca y se diversifique cada vez más, y mejor
nografía heterosexual convencional, sin zación, la pornografía en sentido genérico ce como juego valiosas reflexiones sobre el aun si lo hace de una forma lo suficiente-
tener en cuenta las implicaciones sobre puede ofrecer oportunidades muy valiosas orden social, ya que mientras en el mun- mente reflexiva que contribuya a resignifi-
las identidades de género de la virilidad, para reevaluar las identidades sexuales, los do social las relaciones de poder se carac- car grandes aspectos de la sexualidad y de
la economía de los bienes simbólicos, las placeres, y toda la producción de significa- terizan por su rigidez, en el sadomasoquis- todo el orden social.
transformaciones de la modernidad y de su dos que ha estado supeditada por milenios mo se distinguen por su fluidez, por la cla-
versión tardía. al punto de vista androcéntrico. ridad de que los papeles de dominación y

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La presente publicación es producto del trabajo
del grupo SIGMA, del departamento de Sociología
de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad
Nacional de Colombia, Sede Bogotá, y se terminó
de imprimir en las instalaciones de GRACOM Gráficas
Comerciales, Ubicada en la Ciudad de Bogotá,
Colombia, en la Carrera 69K N° 70-76,
a los 10 días del mes de Agosto de 2013.

El tiraje es de 500 ejemplares en papel Bond de 90


gramos. Las fuentes utilizadas, Fedra Serif
y Fedra Sans, Ambas Roman e Itálica,
en puntajes 45, 13, 12, 10, 9, 8,5 y 7.

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