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INTRODUCCIÓN

Tanto el arbitraje como la conciliación han sido establecidos, bajo el ámbito de las
contrataciones públicas, como mecanismos alternativos de solución de conflictos. El objetivo
es poder solucionar de manera eficiente las controversias que se generan en la etapa de la
ejecución de los contratos que suscribe el Estado con sus proveedores o contratistas como
resultado de los procesos de selección desarrollados en el marco de la normativa de
contratación pública y otros regímenes especiales de contratación. El reconocimiento de la
jurisdicción arbitral por la Constitución Política de 1993, también reconocida anteriormente
por la Constitución Política de 1979, permite que las controversias entre el Estado y los
privados se sustraigan de la jurisdicción ordinaria, representada por el Poder Judicial, y se
sometan a la jurisdicción arbitral, caracterizada por su celeridad, al tratarse de un mecanismo
de solución de controversias más rápido que el proceso judicial, además de ser simple, flexible
y especializado. En la misma, las partes eligen a los árbitros en función a la especialidad de la
materia que se somete a arbitraje, quienes además no cuentan con una carga procesal que les
impida ejecutar este mecanismo en los plazos establecidos. Además, el arbitraje se caracteriza
por ser confidencial y privado, al mantener en reserva la información que se actúa en el
proceso arbitral en tanto no se emita el laudo arbitral. Por estas razones, desde hace más de
17 años, el sistema peruano de contratación pública incorporó en su normativa al arbitraje por
mandato legal como el mecanismo idóneo para resolver controversias. El arbitraje constituye
un importante procedimiento complementario para la solución de controversias o
discrepancias en diversas etapas del proceso de contratación pública, cuya discusión sería
ineficiente en la vía judicial. Cabe resaltar que a partir de la década de los noventa, el Perú
realiza un importante avance en el uso del arbitraje, facultando a las entidades del Estado, así
como a los privados, a emplear este mecanismo en el ámbito de 14 Departamento de Estudios
La Contraloría General de la República 15 la contratación pública, sin necesidad de
autorización previa y renunciando a la jurisdicción ordinaria. A nivel normativo, el arbitraje ha
sido regulado por primera vez en el año 1992, por el Decreto Ley N° 25935, que aprobó la Ley
General de Arbitraje, con la cual posteriormente, en el año 1995 con la Ley N° 26572, se dicta
la Ley General de Arbitraje y finalmente, con Decreto Legislativo N° 1071 en el año 2008, se
aprueba la Ley de Arbitraje, vigente a la fecha. De esta manera, siendo el arbitraje un
importante mecanismo de solución de controversias, la Contraloría General de la República
elaboró el presente estudio en el cual se analizan 2 796 laudos arbitrales correspondientes al
periodo 20013-2019, los que se encuentran registrados en el portal web del Organismo
Supervisor de las Contrataciones del Estado (OSCE). Si bien, dicha cifra no constituye el
universo de laudos arbitrales emitidos en el ámbito de la contratación pública, principalmente
porque el registro de los laudos arbitrales en el portal web del OSCE no era obligatorio sino
hasta la dación de la Ley de Contrataciones del Estado aprobada por Decreto Legislativo N°
1017 en el año 2008, el análisis que se presenta en este estudio sobre el arbitraje nacional
permite tener un panorama bastante claro de los arbitrajes en el ámbito de la contratación
pública para el periodo 2013-2019.
DEFINICION DE ARBITRAJE

El arbitraje es un procedimiento por el cual se somete una controversia, por acuerdo de las
partes, a un árbitro o a un tribunal de varios árbitros que dicta una decisión sobre la
controversia que es obligatoria para las partes. Al escoger el arbitraje, las partes optan por un
procedimiento privado de solución de controversias en lugar de acudir ante los tribunales.
Entendemos por arbitraje como un mecanismo alternativo de resolución de conflictos
heterocompositivo por el cual la controversia existente entre las partes la decide un árbitro o
un Tribunal Arbitral.

A. VENTAJAS DEL INSTITUTO

El arbitraje como sistema de solución de conflictos, ofrece ventajas genéricas tanto para la
solución de diferendos nacionales como internacionales: privacidad, inmediación, y algunas
veces celeridad y economía. Aunque algunas de estas ventajas puedan ser discutidas, lo
importante es que bien regulado y administrado, el arbitraje ofrece una alternativa a la vía
judicial que los justiciables pueden encontrar más expedita.

B. CLASIFICACION DE LOS ARBITRAJES

1. SEGÚN SUS ARBITROS

a. DE DERECHO. Esto significa que el tribunal arbitral se fundamentará en las leyes y


reglamentos que aplican al contrato. Por ejemplo, en las controversias relacionadas con
contratos de arrendamiento de inmuebles, se aplicarían las normas del Código Civil y de la Ley
de Inquilinato y para los contratos comerciales de venta de maquinaria aplicarían el Código de
Comercio y el Código Civil. Sólo pueden ser árbitros los abogados; en los arbitrajes de equidad
cualquier persona capaz. Si en un arbitraje de derecho un no abogado resuelve, esta puede ser
declarada nula. En cualquiera de los dos debes no vulnerarse la Constitución Política.

b. DE CONCIENCIA O EQUIDAD.

En este tipo de arbitraje, el tribunal arbitral no aplica ni leyes ni reglamentos para resolver la
disputa sino su entendimiento de lo que es justo y equitativo. A manera de ejemplo, en una
disputa sobre arrendamiento de inmueble, el tribunal arbitral no tomaría en cuenta ni la Ley
de Inquilinato ni el Código Civil, sino que estudiaría los hechos del caso y la manera cómo han
actuado las partes para encontrar una solución justa.

2. SEGÚN SU JURISDICCION

a. NACIONAL

Es un método alternativo de solución de conflictos mediante el cual las partes aceptan a un


tercero llamado árbitro para que solucione una controversia, quien tiene la capacidad de
administrar justicia y articula una sentencia que se denomina laudo arbitral. El arbitraje
nacional, al igual que los demás tipos de arbitraje, se rige por los principios y reglas de
imparcialidad, idoneidad, celeridad e igualdad. La ley aplicable es la ley nacional, salvo que se
pacte otra. Esta Ley está contemplada en el D.L. N° 1071 donde se resuelven: - Controversias
derivadas de los contratos y convenios celebrados entre entidades (Gobiernos Nacionales,
Gobiernos locales y sus respectivas dependencias, personas jurídicas de derecho público,
empresas estatales de derecho público, de derecho privado o de economía mixta y las
personas jurídicas de derecho privado que ejerzan función estatal por ley, delegación
concesión o autorización del estado) pueden someterse también a Arbitraje nacional.

b. INTERNACIONAL

El arbitraje internacional es similar a la vía judicial interna, pero en lugar de tomar su lugar
ante un tribunal interno que tiene lugar antes de los árbitros privados conocidos como
árbitros. Es un consensual, neutral, obligatoria, privada y ejecutable manera de resolver las
controversias internacionales, y es típicamente más rápida y menos costosa que los
procedimientos judiciales nacionales.

Tipos de arbitraje

Las formas de organización del arbitraje en al ámbito de la contratación pública, están


previstas en el Reglamento de la Ley de Contrataciones del Estado en concordancia con la Ley
de Arbitraje. Aunque la tendencia mundial es la de recurrir al arbitraje institucional, en nuestro
país, de la evaluación de los laudos arbitrales que son objeto de análisis en el presente estudio,
se observa una tendencia a elegir el arbitraje ad hoc. De los 2 796 procesos arbitrales el 62% se
ha realizado bajo el arbitraje ad hoc. Sin embargo, el arbitraje institucional viene cobrando
especial relevancia frente a determinadas condiciones que ofrece respecto al arbitraje ad hoc,
como la confiabilidad, especialidad y celeridad, factores que vienen determinando con mayor
frecuencia su uso.

En el Arbitraje Ad hoc, las partes encargan la solución de las controversias a un tribunal


arbitral (conformado por un único árbitro o por tres árbitros) sin la intervención de una
institución arbitral.

• En el Arbitraje Institucional son las partes las que eligen a una institución arbitral
determinada para la organización, administración y desarrollo del arbitraje de acuerdo a sus
reglamentos y procedimientos.

Composición del Tribunal Arbitral La designación de los árbitros y del número por el que
estará conformado el tribunal arbitral corresponde en general a las partes, respetando los
requisitos mínimos establecidos en la Ley de Contrataciones del Estado y su Reglamento, así
como la Ley del Arbitraje.

SEGÚN LA VOLUNTAD DE LAS PARTES

a. VOLUNTARIA Las partes deciden someterse libremente al método alternativo de resolución


de conflictos arbitraje.

b. OBLIGATORIO O FORZOSO No se puede imponer un contrato. Ejm: la política que el estado


quiere para resolución de conflictos en tal sector o tal entidad será el de ir a arbitraje. Si el
funcionario no incorpora en el contrato formula arbitral se presume que debe irse a arbitraje.
No es obligatorio, es forzoso. Nadie está obligado a contratar con el Estado, por eso es forzoso.
Si no quieres obligarte no contratas con el Estado. Ejm: contrato por adhesión, pueden
incorporar cláusulas arbitrales. No puede negociar no ir a arbitraje, pero si puedo pactar las
condiciones del arbitraje. En el caso peruano el arbitraje es absolutamente libre.

Costos arbitrales asumidos por el Estado.


En todo proceso arbitral existen costos59 que las partes deben asumir obligatoriamente, cuyos
conceptos serán establecidos según se trate de un arbitraje ad hoc o institucional. A diferencia
de los procesos judiciales en los que los costos (tasas judiciales, honorarios de órganos de
auxilio judicial y el del abogado de la parte vencedora y otros gastos procesales), son asumidos
por la parte vencida; en el proceso arbitral, la regla es que cada una de las partes asuma sus
propios costos -salvo pacto distinto en el convenio arbitral-, para cuyo fin los árbitros tendrán
en cuenta el resultado o sentido final del laudo arbitral, el cual se constituye en un punto de
partida para la asignación de los costos del arbitraje, sin perjuicio de considerar otros aspectos
que podrían llevar a la decisión de distribuir el pago de los costos.

 Costos del procedimiento arbitral, que incluyen los honorarios y gastos del o de los
árbitros, los costos administrativos de la institución arbitral que organiza, administra y
desarrolla el arbitraje o los honorarios del secretario arbitral en caso de un arbitraje ad
hoc, los costos de la entidad nominadora de árbitros, si así se hubiera pactado, y de ser
el caso los costos de los peritos y expertos designados de oficio por el tribunal arbitral.
 Costos legales de cada una de las partes, que incluyen los honorarios de los abogados
y peritos esencialmente, entre otros.

- OTROS CONCEPTOS CONTENIDOS

EN EL D.L.N° 1071 LEY QUE NORMA EL ARBITRAJE.

A. ARBITRAJE POPULAR. Es el órgano encargado de promover el arbitraje popular en


todos los sectores sociales a nivel nacional. El arbitraje, es un mecanismo alternativo
de solución de conflictos mediante el cual dos personas enfrentadas por una
controversia deciden recurrir a un tercero llamado árbitro, quien dará la solución
imparcial y definitiva a su conflicto. a la Justicia. Asimismo brinda asesorías sobre
arbitraje, enseña el uso de la cláusula arbitral en contratos y absuelve consultas acerca
a la designación de árbitros. El Arbitraje Popular tiene la finalidad de solucionar los
conflictos especialmente de los emprendedores, micro y pequeños empresarios,
profesionales y público en general. El Arbitraje Popular promueve una cultura de paz,
en la que dos personas enfrentadas por una controversia como: Incumplimientos de
contratos, pago de deudas, desalojos, indemnizaciones, contrato de seguros, contratos
financieros, Contratos de inversión, conflictos laborales y comerciales, entre otros,
pueden llegar a una solución rápida y económica sin necesidad de ir a juicio largo y
costoso. Puede usted someter a Arbitraje los conflictos referidos a:
 Incumplimiento de contratos.
 Indemnizaciones.
 Derechos de propiedad, posesión.
 Responsabilidad contractual y extracontractual.
 Pago de deudas.
 Alquileres.
 Contratos de Compra-Venta de inmuebles.
 Desalojos.
 Contrato de seguros.
 Contratos financieros.
 Conflictos laborales.
 Conflictos comerciales, mercantiles.
 Contratos con el Estado.
B. ARBITRAJE ESTATUTARIO. Se refiere a las personas jurídicas en general, tal como
serían las sociedades, las asociaciones, las organizaciones políticas, etc. Si bien el
segundo párrafo del mencionado artículo, al tratar de los alcances del convenio
arbitral menciona a la sociedad en concordancia con el párrafo anterior debería
entenderse en nuestro concepto como referido a la persona jurídica. En particular en
lo que concierne a las sociedades comerciales y civiles, el arbitraje para estas personas
jurídicas se encuentra normado en la Ley Nº 26887 – Ley General de Sociedades –
(LGS) según lo dispuesto en su artículo 48º modificado por el Decreto Legislativo Nº
1071 . El mencionado artículo al estar ubicado en el Libro I de la LGS, contiene reglas
que son aplicables a todas las sociedades comerciales, que pueden ser de capitales y
de personas, la primera como la sociedad anónima cuyo capital está representado por
acciones siendo sus tenedores denominados accionistas quienes tienen una
responsabilidad limitada, al responder el capital de la sociedad por las deudas y
obligaciones que contraiga y la segunda referida a las sociedades de personas como la
sociedad colectiva donde se conjuga el “affecto societatis” y el “jus fraternitatis”, la
que se constituye en base al aporte de los socios, que pueden ser su trabajo y las
contribuciones económicas, siendo su responsabilidad frente a las deudas y
obligaciones que contraiga la sociedad de carácter solidaria e ilimitado, comprendido
además la mencionada Ley a las sociedades civiles.

C. ARBITRAJE SUCESORIO Mediante estipulación testamentaria puede disponerse el


sometimiento a arbitraje de las controversias que puedan surgir entre sucesores, o de
ellos con los albaceas, incluyendo las relativas al inventario de la masa hereditaria, su
valoración, administración y partición. Si no hubiere testamento o el testamento no
contempla una estipulación arbitral, los sucesores y los albaceas pueden celebrar un
convenio arbitral para resolver las controversias previstas en el párrafo anterior.

MARCO LEGAL DEL ARBITRAJE

La Constitución Política de 1993, al igual que la Constitución Política de 1979 en su momento,


contempla la institución del arbitraje estableciendo que los conflictos derivados de la relación
contractual solo se solucionan en la vía arbitral o en la judicial, según los mecanismos de
protección previstos en el contrato o contemplados en la ley, reconociendo al arbitraje como
jurisdicción independiente. La jurisdicción arbitral tiene también antecedentes de antigua data
y acusa un reconocimiento en la Constitución de 1839, explicitado por la de 1979 y receptado
por la vigente. Sin embargo, es un tema polémico desde que se le niega carácter jurisdiccional
al arbitraje. Pero no se trata, obviamente, de una función ejercida por el Estado sino
dependiente de los particulares que deciden sustraer del conocimiento del Poder Judicial la
solución del conflicto de intereses que los conduce a una controversia. Los Tribunales
Arbitrales, sea que estén constituidos por un árbitro único o por árbitros colegiados, se
constituyen como un órgano jurisdiccional privado, al que, incluso, pueden someterse el
Estado y las entidades públicas cuando la materia puede ser arbitrada al no existir prohibición
legal.

En las últimas tres décadas, el Arbitraje Nacional ha sido regulado por cuatro normas jurídicas:
1. El Código Civil (desde el 14/11/1984 hasta el 4/3/1992);
2. La Ley General de Arbitraje (Decreto Ley N° 25935, desde el 5/3/1992 hasta el 5/1/1996).
3. La Ley General de Arbitraje (Ley N° 26572, desde el 6/1/1996 hasta el 13/11/ 2008).
4. El Decreto Legislativo N° 1071 (desde el 14/11/2008 hasta la actualidad), este último
modificado en algunos artículos por el Decreto Legislativo N° 1231 (del 26/9/2015). Sin
embargo, el marco legal se diversifica según el arbitraje del que se trate.
Asi tenemos:
1. La Ley N° 29571 y el Decreto Supremo N° 046-2011-PCM (arbitraje de consumo).
2. La Ley N° 26842, la Ley N° 27056 y el Decreto Legislativo N° 1158 (arbitraje en salud).
3. La Ley Nº 30225, y el Decreto Supremo Nº 350-2015-EF (arbitraje en contrataciones
públicas). 4. Además del Decreto Ley N° 25593, el Decreto Supremo N° 014-2011-TR y la
Resolución Ministerial N° 284-2011-TR (arbitraje laboral-potestativo).
5. La Ley Nº 29533 y el Decreto Supremo Nº 084-2013-PCM (arbitraje territorial); el Decreto
Supremo Nº 013-93-TCC, el Decreto Supremo Nº 062-94-PCM 6. La Ley Nº 26285 (arbitraje en
telecomunicaciones).

CONCLUSIONES :

1. El Arbitraje es una alternativa para la solución de controversias distintas al Poder


Judicial.
2. Un argumento fundamental a favor del arbitraje institucional es la transparencia.
3. Los laudos recaídos en arbitrajes en los que participa el Estado deben ser publicados,
para de esta forma transparentar las decisiones y que sean de público conocimiento
por parte de la sociedad en general y en particular de los beneficiarios con la
contratación específica, y de esta forma enterarnos quiénes y cómo se están
resolviendo las controversias en las que están de por medio el destino de recursos
públicos.
4. El auge y el desarrollo de la economía en nuestro país que se demuestra
principalmente en el tráfico comercial teniendo en la actualidad una serie de
negociaciones u tratados con diferentes países, en la cual permiten que nuestras
normas, reglamentos e instituciones contengan un mayor grado de seguridad jurídica,
tanto para los inversionistas extranjeros como empresarios peruanos, es así que ante
un conflicto de interés comercial u económico, se busca que la solución sea las más
rápida, eficaz y justa, en la cual ya no se tenga que esperar los latos plazos para la
resolución final, ni esperar la carga del sistema judicial, es así que mediante este
sistema alternativo heterocompositivo de resolución de conflicto se busca que un
tercero (arbitro u tribunal arbitral) con la especialidad en el caso y registrado en una
institución arbitral expida la solución más justa materializado en un laudo, para
satisfacer los intereses de las personas en conflicto.

BIBLIOGRAFIA

 http://www.elperuano.com.pe/noticia-el-arbitraje-consumo-43527.aspx
 http://portal.osce.gob.pe/arbitraje/sites/default/files/Documentos/Legislacion_apli
cable/DL-1071-ley-que-norma-el-arbitraje.pdf
 http://www.osterlingfirm.com/Documentos/articulos/Art%C3%ADculo%20Arbitraj
e.26%20set%2005.pdf

EJEMPLO DE LAUDO ARBITRAL

Ejemplo 1: En el marco del TLC entre Perú y Canadá, la minera Bear Creek Mining Corporation
demandó al Estado por cancelar en junio del 2011 la autorización de la concesión minera para
la realización del proyecto Santa Ana en Puno.

La empresa exige el pago de nada menos que US$1.200 millones. "El Minem pretendía anular
los derechos de Bear Creek sobre las Concesiones de Santa Ana y que las mismas se revirtieran
al Estado, argumentando que los contratos de opción de compra y los contratos de
transferencia entre la Sra. Villavicencio y Bear Creek fueron simulados u obtenidos
ilícitamente", decían en uno de sus alegatos.

Ejemplo 2 : Laudo Arbitral CASO CIADI ARB/12/28 El Tribunal Arbitral decide por unanimidad
que el Consorcio CAMISEA incumplió con las obligaciones de calcular correctamente la regalía
pactada en el Contrato de Licencia para los diez cargamentos de gas natural objeto de la
disputa. Determinó el daño causado al Estado peruano lo que hace que ahora no deba
ocurrirse a dicho “Consorcio” pensar en deducir para efectos de la determinación de la base
imponible de su Impuesto a la Renta estos importes por daños causados al fisco.

TENEMOS Q LEER ESOS CASOS… POR SI PREGUNTA Y EXPLICAMOS ¡!

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