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Facultad de Arquitectura
Grupo B
25 de enero, 2019
Minos, el rey de Creta, era hijo del dios Zeus y de la princesa Europa, hija del rey fenicio,
Agenor. Para obtener el trono de la isla había pedido ayuda al dios del mar, Poseidón, quien
le había entregado un toro blanco para que sacrificara en su honor. El rey quedó fascinado
por la perfección de aquel toro y decidió engañar a Poseidón, sacrificando a un toro que se
le pareciera para poder conservar al que le gustaba.
Como no podía ser de otra manera, el dios se dio cuenta del engaño y decidió castigar al
rey. Decidió Poseidón que la esposa del rey Minos, Pasifae, se enamorara perdidamente
de aquel toro blanco. La reina desesperada por conseguir las atenciones del toro mandó al
constructor del reino, Dédalo, a que le construyera un muñeco conforma de vaca para que
pudiera esconderse dentro, y de esa forma lograra conquistar al hermoso animal. De ese
amor nació una criatura con cuerpo de hombre y cabeza de toro, “el minotauro”. Era un ser
totalmente salvaje y cruel, que se alimentaba solo de carne humana. Entonces, el rey Minos
decidió ocultarlo a los ojos del pueblo, pidiendo a Dédalo que construyera una prisión de la
cual nunca pudiera salir.
Con mucho miedo, los sacrificados jóvenes atenienses ingresaron al laberinto, Teseo logró
llegar hasta el minotauro y luego de una dura lucha le dio muerte. Salir a salvo del laberinto,
no fue complicado, pues enrolló nuevamente el hilo que Ariadna le entregó. Teseo y Ariadna
escaparon a la isla de Naxos, en las Cícladas, donde el joven ateniense abandonó
cruelmente a la joven.
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Bibliografía: Quispe, J. La leyenda del minotauro, mito Griego., Recuperado de:
http://recursos.clicken1.com/plan_lector/primaria/5to_Grado_Primaria/Mes_1/Leyenda_Minotau
ro/Mes1_Leyenda_Minotauro_estrategias_FINAL.pdf