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Cuentos Participantes
M
artín, después de ver a su hermana llorado y quejándose de lo poco
no podían ser amigos del alma y cuñados al mismo tiempo, eso era en la escuela
por un 6, cuelga.
inclina hacia atrás y bosteza. Camina por el pasillo que comunica la sala con su
.-¿Aló?
.-¿Gustavo?
.- ¿Aló?
.-¡Aló!
Arturo miro el auricular, como si por el pudiera ver a la otra persona y saber
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cuarto, prende la tele y se duerme casi inmediatamente. Entre sueños primero ve
Una mañana como cualquier otra. ¿Tráfico? Poco, realmente poco. Camino
ventana del carro como montan lo que parece cuerpo tapado y como, lo que
toman café. Esto le parece corriente, hace ya rato que Arturo dejó de pensar como
mañana. Se sienta a almorzar en una mesa cerca del televisor, le gusta ver las
noticias cuando almuerza. Pierde el Dep. Táchira 2 a 0 y el dólar sube a 3600 Bs.
Le sirven una ensalada que no pidió, pero igual esta muy rica y no se queja. Una
las fuertes imágenes del noticiero le puedan causar a la mente de sus hijo de 7
años que no se entera de nada por jugar con su Gameboy, apaga la TV, justo
la noche anterior recibió, un libro que leyó sobre el efecto mariposa y a su novia
4
Busco una ciudad
Por: Octopus
P
or motivos ajenos a mi voluntad, debo salir de mi país. Si alguna
requisitos:
pueda caminar por las aceras y haya que hacerle el quite a los
mercancía.
circular por ellas y menos en las horas pico en donde tarde más de
a descansar.
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Busco una ciudad; que tenga una buena cantidad de indigentes pidiendo
limosna. Madres con sus hijos en salidas de las estaciones del metro,
sucia alzando sus manitas, pidiendo algo para llevar a casa, todos
pidiendo limosna.
comprar sus medicinas, los que van con sus enfermedades a cuestas
del día, que todos sus habitantes tengan que vivir enrejados y que la
delincuencia reine.
de las siete de la noche tenga que correr a casa con miedo de no ser
robado. Una ciudad donde se golpee a la mujer, que esté atiborrada de bares,
y que los niños deambulen por las calles en las noches buscando sus
sustento.
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UN PACTO PARA
EL REINO
Por: Colrami
E
l camino hacia el mercado negro suele estar mal iluminado. Sientes la
Decidí que para darme valor, debía tomar algo, una bebida normal, no ese
las tres caderas, puesto que estaba en una misión de investigación. Así que entré
a la taberna donde los héroes, magos y uno que otro engendro suelen recuperar
barra larga, con taburetes de madera de treant muerto. ¡Vaya ironía! El final de
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Apuré mi trago, y sentí el calor en mis hombros primero y luego en mi
bárbaro, esbozó una sonrisa al ver mi reacción. Para disimular un poco mi falta de
experiencia en estas lides, levanté mi vaso y apuré el resto del verde líquido. Esa
venían, y así pude saber que el joven Cheropyx era, efectivamente, un bárbaro y
plenamente con su situación. Apenas con siete hechizos básicos estudiados, una
montaña que llamaba mi hogar, unas cuantas hectáreas de tierra, un ejército muy
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noche me di cuenta que debía comenzar desde abajo, y labrarme mi destino a
Cheropyx venía del norte de Ank-Durath, la tierra de las dunas eternas. Allí
había vivido con su familia, aprendiendo las artes de la guerra y soñando con ser
padre, Pardomer Wexler, tenía los pies en la tierra y siempre trató de inculcar en
su hijo la dureza que se requería para la batalla, pero también las cualidades que
adquisición para la causa, así que allí mismo le ofrecí contratarlo, por unos
de los despojos de todas las batallas que ganásemos. Sus ojos negros se
adelanto en efectivo para asearse, comer y comprar algo de ropa. Así, cerramos
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Salimos en busca de algunos engendros hacia la tienda de Duras, el
Cheropyx. Sin embargo, cuando nos acercábamos, vimos una gran pelea, casi en
pequeña, y aparentemente vacía, y un libro muy viejo, que apretaba con fuerza
bastón.
garrotazo que lograba llegar a su destino, causaba estragos entre los asaltantes:
que eran pisoteados por las oleadas que seguían llegando de todos los callejones
Compartí una mirada cómplice con Cheropyx, y dando un paso atrás, saqué
con unas estrías diagonales. Cerré los ojos para recordar el hechizo de
activación... La esfera tembló en mi mano y la arrojé con tanta fuerza como pude
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suficiente para alejar al anciano del lugar a marcha forzada, mientras Cheropyx
Miré hacia atrás y vi como los monstruos desaparecían tan pronto como
habían sido formados, pero su presencia inspiró el suficiente temor como para
poco sus ropajes, enderezó la bolsa, limpió el mango de su bastón y revisó el libro.
nombre de este anciano, era un erudito, que había dedicado su vida al estudio de
añadiendo palabras de lealtad al mago que había salvado su vida sin conocerlo.
No obstante, rechazó la oferta del bárbaro para ayudarlo con sus pertenencias.
Así pues, estos tres, hasta entonces, desconocidos, decidimos unir fuerzas
para lograr el control de una porción de Terra, con o sin el favor de los dioses,
Esa noche supe que Oberón era más viejo de lo que podía recordar, y que
habilidades eidéticas, las cuales aprovechó consumiendo todos los libros que
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cuales copió amorosamente en su gran libro, del cual no se desprendía ni de día
cuando tomé posesión de él, y se mostró sumamente sorprendido por los escritos
mucho más antigua que sus propios tiempos, pero cuyo fondo parecían confirmar
esos jeroglíficos. Solamente pude agregar que ya estaban allí cuando había
llegado, aunque, por alguna razón, me eran vagamente familiares, como si ya los
cedí una cama en la biblioteca, mientras que Cheropyx insistió en dormir cerca de
cielos a todas las estrellas y a la luz azul de Epeira, creí ver destellos de batallas
lejanas a los límites de mi reino, luces que pronto brillarían para nosotros.
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DIFERENCIAL
Por: Mago Tim
H
e pasado mucho tiempo provocando a las palabras para que se
zapatillas. En otra ocasión, tras haber leído una reseña de pediatría, escribí acerca
del calostro del derecho y del revés, como objeto y sujeto, hasta descubrir en él la
por aquel entonces las clases de cálculo, terminó revelándose una noche como
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los énfasis en forma de exclamaciones al despejar una variable, y todos mis
dibujando una hipérbole cuya estremecedora analogía con la solución del sistema
mi gozo se redujo a dejar las hojas sobre la mesa boca abajo, reprimiendo una
pulcritud. Nadie pareció apreciar que incluso los encabezados de cada página
cada párrafo escrito, una o dos palabras se definían línea tras línea. A veces
descubría que los ruidos agudos eran sibilinos, otras que ramonear requería una
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escrito, levantando un diccionario propio a medida que las propias palabras se
revelaban, aportando sentidos ocultos que jamás inventé, sino que descubrí.
confunde con la enciclopedia que no tengo más remedio que consultar de vez en
espalda dormida de mi mujer, y soy aún incapaz de ver en la inmanencia otra cosa
despejando incógnitas. Yo, mientras viva, preferiré atesorarlas y dejar a veces que
comprender el mundo más allá del sentido de la sonrisa que me arranca lo que
escribo.
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Don JuanRevisión de un clásico
Por: Calvin
E
l calor seca hasta el alma en un desierto que se presta
indomable y eterno ante los ojos del hombre, sus pisadas, son
camellos hasta llegar al reposado oasis, poco a poco, entretanto caía la tarde, las
dos últimos hombres, Ahbraim, tuareg de sabia edad, ojos oscuros y profundos,
tez tostada y arrugada, sobre la que descansa un impoluto turbante, interroga con
reloj que llevas puede costarte la vida, sin que aquí sirvan de mucho las horas
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que marca, pero sea lo que sea, debe ser muy importante para ti. ¿Quieres
hablar de ello?
el tiempo, junto al fuego y bajo el cielo, parece adquirir otra dimensión, mas
pausada, que el de esa vida que debías llevar...aunque, como dice un viejo
proverbio árabe: si lo que has de decir no es mas bello que el silencio, mejor
no digas nada.
días que al final, solo dejaban sensación de vacío... Llegó un punto en que tuve
transcurrido, mas rápido que yo, entonces, decidí hacer un alto en el camino,
- Si, más o menos... a tu treintena larga, y con tu porte, andar solo, no es normal,
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- Sí, y he estado en varios, pero como entenderás, sustituir un amor por una
pastilla es un poco burdo, ¿No crees? Por muchas que tomes, no te llenan..
- Maaás o menos...
- Uffff, bueno, bueno, vamos a ver, de amores, hay muchos y de muchos tipos,
ellos vienen a ser amores revestidos de una cierta dificultad, lo que los hace
mas amores, mas humanos, mas allá del instinto animal. ¡Ufff! creo que me
estoy liando..
- Sigue, sigue, que de tus ojos brota el color de la esperanza, pero tus palabras
- Pues bien hay un amor de ellos, que es el más auténtico, el más puro, el
primer amor, aquel que aún carece de los instintos primarios, que son para
este caso el sexual y el reproductor, pero que a pesar de ser primarios, a tan
perfección, pero si esta primera piedra se pone mal, luego todo será más difícil
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- Ya veo por donde vas...
- Hombre no del todo. Mas si pensamos que Mariposa, deriva de una palabra
Eres preciosa,
y hay que tratarte
delicadamente,
como una Mariposa.
Ya sé que no es gran cosa, pero debía tener unos 6, 7 años y me pasé una
pero al final pensé que si no me daba vergüenza los líos en que me metía, ni
una torta del director de vez en cuando, tampoco debía temer por esto.
- Lo hiciste.
- Sí, lo recuerdo perfectamente, andaba paseando solo por el patio, solía hacerlo,
la encontré:
- Aún recuerdo la sonrisa que dejo ir, y el brillo de sus ojos tras las gafas.
- Pues como todos los amores, despacito, a poco a poco, es como una semilla
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dulcemente atrapado, si el amor naciese de la vista, “amor a primera vista”
como decimos en mi tierra, todo sería mucho más sencillo, es evidente que
una buena primera impresión ayuda mucho, pero es el día a día, la relación
pude llevarlos al enamoramiento y viceversa. No, no creo que sea tan simple
- Bien, no es fácil recordar, además olvide durante muchos años todo eso, sabes,
- De acuerdo, pero me temo que me harás llorar; bien, en todas las clases, suele
- ¿El raro?
- Sí, bueno, ya te digo que no recuerdo muy bien esa época, y durante años,
despacho del director, cuando no castigado sin patio, haciendo los deberes o
copias, para postre, tenía un problema con la lectura oral, tartamudeaba, así que
cada vez que me tocaba leer se convertía en un suplicio, ya sabes, a esa edad
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somos muy crueles, así que era conocido en la clase, pero tenía pocos
- ¿Y las notas?
- ¡Ja!, Bastante buenas, bien el caso, es que cada vez que me ponían de cara a
decirle nada, hasta que un día, si no recuerdo mal, andaba paseando por el
patio y la encontré sentada, sola, con mala cara, como nadie me veía, me
recuerdo la conversación, el final se que fue algo así, faltaba poco para que
- ¿Por qué?
- ¿Y qué?
- ¿Y qué?
juntos a clase, un tiempo, más tarde, creo o quiero creer, que fue después del
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cambio le prometí portarme bien, condición que me había impuesto ella, así
- Sí. Siempre recordare sus ojos y su boca diciendo aquel: “ Pórtate bien”. Con
de Ana, decidió cambiarme de sitio, cual fue mi sorpresa al ver que Susi, una
organicemos una huelga en clase, le dije a Ana que saliera un momento para
prepararle una sorpresa, cuando entró, empezó la clase, ella sacó sus cosas,
amenazó con darme una torta, a lo que yo repliqué que me resultaba mas
doloroso separarme de Ana que la torta que me pudiera dar...en fin no llegué a
hasta que no hay una ausencia, un día al llegar a clase, Ana no estaba, la
alrededor mientras yo crecía junto a ella, como prueba de ello basta esta
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- ¿Quieres que te explique la teoría de la evolución de las especies?
- Bueno.
- El mono.
- ¿Y después?
- El hombre.
- ¿Y después?
- Ummm. No sé.
- Tú y yo.
También recuerdo aquel último día de clase, Ana me daba su teléfono, pero no
se lo cogí, yo no tenía, ¡Diooos!. Unos días más tarde, la volví a ver, me crucé
colegio, por mi bien, a uno privado, fue el principio del fin, poco a poco entendí la
dimensión de esa frase, que dice así: Cuando ames a alguien, ámala cada día
como si fuese el último día de tu vida que pudieses verla. Fui algunas veces al
antiguo colegio para ver si conseguía verla, pero siempre llegaba tarde, al final
opte por buscar a un ex-compañero de clase para que hablara con ella por mí, al
- Sí.
- ¿Que te ha dicho?
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recuerdo poco, las horas del patio las pasaba con dos amigos, Pedro y Juan –
- ¡Cálmate tú!
- Se como te sientes.
pero con ella. El proceso de socialización se detuvo ahí. Yo achaqué mi ida del
primera asignatura, música, también pegué a alguien por primera vez, ya nadie
novia llegaría a los 14,15 años, fue la que más duró, un mes, el resto fueron
teoría popular del caos, donde el aleteo de una Mariposa en una punta del
océano, produce un vacío, que a su vez produce una corriente de aire, que a
su vez produce una brisa, luego un viento, así reaccionando en cadena hasta
- Sí, una vez creí verla, nos reconocimos, aunque parezca increíble, fue 20 años
mas tarde, ya tenía carrera y estaba casada, su recuerdo aún aparece como la
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aurora boreal en la eterna noche eslava, como ese arco iris que un niño intenta
- ¿Aún la quieres?
- Escritor. Bueno, esto es todo, sabes, voy a estirar las piernas un poco, antes
- De acuerdo, pero cuando vuelvas, procura soñar con los que están, no con los
oasis desaparece tras ella, un extraño impulso que parece salir de su corazón le
orienta o mejor dicho conduce por el mar de arena. El desierto se presta como el
social, son sus libros un mensaje en una botella lanzada al mar, no con la
intención de ser recogidas por cualesquiera, sino por alguien en concreto, lo que
el mar de arena, en el destierro social, sigue así, paso tras paso, absorto en sus
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encrucijada mental, para sorpresa suya se halla en medio de ninguna parte, gira
sobre sí mismo oteando los alrededores, arena y más arena, la brisa alza el vuelo,
y este decide volver tras sus pasos, deshaciendo el camino hecho, que no llevaba
a ninguna parte, como tantas veces hiciera en vida, vuelve sobre si mismo, sobre
sus pasos, tarea fácil piensa, nada más lejos de la realidad, el desierto no gasta
bromas, a medida que aparece la Luna, desaparecen sus huellas, borradas por
una brisa, que ya es viento. Ha caído la noche, Don, totalmente desorientado cae
de rodillas al suelo, recoge arena y la deja escurrir, en un vano intento por escapar
mentalmente, sustrae una pequeña libreta y una pluma del bolsillo y empieza a
escribir:
Solitud
Como el que tiene frío
y se envuelve en un manto de espinas,
me sumerjo yo en el vacío
llenando de recuerdos las retinas,
en la soledad
recuerdo tus ojos apagados
y veo la tempestad
en tus silencios.
Cuantas veces el fuego
de mi angustia
se ha apagado
en el regazo
de tu sonrisa.
Cuantas veces en el desierto
fuiste tú mi brisa.
De rodillas en el suelo,
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contemplo como se derrama,
la arena entre mis dedos.
Igual huyen los días,
escurriéndose la vida.
Miro mi corazón y el alma
me atrapa en tu anhelo.
Enfrenta el torero
la muerte con capa
y no puedo soportar yo
este amor que se me escapa.
Transcritas las líneas, Don desvanece en sueños... Han pasado varios días,
arrastra mas que no camina, sobrevive mas que no vive, como hiciera siempre, la
el corazón aún late de esperanza, asciende una duna más, tras ella advierte unas
ruinas, medio enterradas, yacen en el suelo toda una serie de columnas caídas,
y cabeza contempla que las letras están grabadas en su idioma, se arrastra hasta
mujeres que enamoró y dejó, y como la curiosidad mata al hombre, decide leer el
resto de la columna, a medida que avanza descubre las líneas que hablan del
corazón de esta mujer y todo lo que sintiera por él, empezando por amor y
acabando por la palabra odio, durante unos momentos cree estar soñando, pero
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tras un pequeño esfuerzo de voluntad decide recorrer a la otra columna, donde
advierte el nombre de otra mujer de las que conociera, al igual que la otra la
historia inicia con la palabra amor y finaliza con odio, así una columna tras otra
Don Juan va descubriendo su verdad, y la de la mujeres que fingió amar, una tras
si llega a la rodilla, en esta, la historia es breve, pues sólo habla de lo que sintió
como arena entre sus dedos, deja escapar entonces un grito seco, grave y
desolador:
- ¡¡Nooooo!!. ¡¡Murió!!
grande de todas las columnas, Don Juan se arrodilla de nuevo, alzando la mirada
hacia el capitel, donde se van grabando las letras de aquel amor, aquel segundo
amor, que mantuvo en recóndito secreto, aquel amor inconfesable que mantuvo
ahora se daba cuenta. Nunca lo supo, pero la amaba, llegó el final, y esta vez no
se reprodujo la palabra odio, sino amor, el Don Juan se abrazó a la columna, pero
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esta empezó a resquebrajarse, se levanto a gritos de “¡Nooo, nooo!”, Pero el
finalmente cayó de espaldas sobre aquel montículo, intentó llorar, pero era
desvaneciéndose su mente.
lejano “Despierta”, poco a poco sin saber aún si está en el cielo o en la tierra, sus
- ¡Por Alá! Muchacho, vaya con el paseo, nos ha costado mucho encontrarte, de
mismo:
- Bueeeno, ya veo, o has soñado, o has tenido una alucinación, o como dicen por
palmo, contiene grabado un nombre, el de ese amor aún vivo, y ahora, ahora sí,
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puede llorar y llora. Ahbraim se lo mira, sonrie, le pasa la mano sobre la cabeza,
- Hay un viejo proverbio árabe que dice así; Lo pasado ha huido, lo que esperas
28/12/02
La Coromina. Marko.
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EL ESCRITOR
Por: Octágono
A Lelo, mi viejo.
iéntate hijo, que de una vez por todas te voy a contar algo por lo
- ¿Me vas a contar sobre aquel escritor amigo tuyo, del que nunca pude leer
nada?
- Así es, querido Manuel, sobre todo lo que pude saber acerca del gran
a Alberto Sala desde que nací, por que nuestros padres eran compañeros de
la redonda, nos vimos casi obligados a cultivar una amistad, de la que por
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secundario en el internado, con los curas. En una sola valija, pusimos nuestras
debo a Alberto mi amor por la poesía y este aire soñador que me contagió,
de mis áridos estudios. Cierto es que quise yo transmitirle algo de esa lógica a su
como la única verdad posible, y se jactaba de ello. Con respecto a nosotros, decía:
“Hemos roto todas las reglas, no le hemos hecho caso ni a Mendel ni a Rousseau,
pues fíjate, si por la genética nos guiamos, nuestros padres son hombres rudos,
de trabajo, sin más sensibilidad que las de sus manos callosas, y, sin embargo,
misma vida, las mismas escuelas, la misma “orfandad con padres”, el mismo poco
éxito con las mujeres, la misma pieza húmeda de la pensión y tantas otras cosas.
asemejan solo en lo mínimo. Ah! Por cierto que la parte del vinagre es la tuya”,
remataba siempre con una sonrisa. Esto nunca me hizo gracia, probablemente por
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nuestros propios espacios y alquilé un monoambiente en el mismo edificio.
trabajo en los colegios me llevaba toda la mañana y por la tarde atendía algunos
muy creativo y fructífero. En cuanto tenía una idea en la cabeza, se sentaba frente
a la máquina, para escribir aunque sea un esbozo, que luego completaba con
tranquilidad. Más de una vez me dejó hablando solo, gracias a esa necesidad de
solo pasan frente a nosotros de la mano de una musa, y hay que saber atraparlas
excusaba.
disponía a partir, cuando de pronto noté que Alberto tenía algo más para decir.
- Nos conocemos lo suficiente como para darme cuenta que hay algo raro
dando vueltas por esa cabeza hueca, puedo escuchar una idea rebotando de
parietal a parietal.
debo confesar algo -suspiró con resignación, con la cabeza gacha y la vista
clavada en el vaso que masajeaba con sus manos, como tratando de exprimir una
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última gota de alcohol- Lo que decís de la cabeza hueca, no dista mucho de lo que
me está pasando.
- Estoy más que preocupado con algo que me está pasando, así que si
suavemente su rodilla-.
- ¿Te acordás ese cuento que te di la semana pasada para que leyeras?
- ¿Ese en que un tal Oleg contaba como Odín había condenado al destierro
- Por favor...
que me canso cada vez con mayor facilidad, pero mi memoria anda bien. Me
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acuerdo de cualquier cosa que me preguntes, pero de mitología germana nada.
Tuve que leer de nuevo un libro que tengo sobre el tema, por que no sabía quién
era Odín, ni las Walkirias, ni Tor, ni nada de nada. En blanco. Para colmo, cuando
su significado. Inclusive era como un golpe, que minaba mis fuerzas, y me impedía
seguir leyendo, a pesar de eso lo leí entero, y entonces me di cuenta que estaba
- Te digo que es la primera vez que escucho algo así, no te quiero asustar,
a ver a un especialista, y ahora andá a dormir que hay que ir a trabajar temprano.
elucubraciones que hubiéramos ensayado juntos, sobre algo tan alarmante. Esa
- Con todo gusto le leeré, pero ahora me tengo que ir al banco a pagar la
-No!... Por favor, tenés que leerlo ahora –me rogó con gesto suplicante-
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década del treinta en un barrio de la Boca. Un policía se infiltraba entre los
malevos del barrio, para investigar el asesinato de una prostituta de la isla Maciel.
- ¿El qué?
transcurrir de los días cada vez más desmejorado. Innumerable fue la cantidad de
estudios que le hicieron los médicos que vio, y no encontraban ninguna causa. No
existía, decían los facultativos, ninguna patología que coincidiera con los síntomas
podría decirse que la suya era la típica imagen manierista, que contrastaba con su
robustez de siempre.
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En busca de otras opiniones, vimos a distintos médicos de aquí y de la
quería escribir todo lo posible antes de un fin que auguraba cercano. Con cada
nuevo cuento, perdía más conocimientos. Escribió sobre la vida del cantinero a
quien Van Gogh, pagaba el licor con sus cuadros, y olvidó por completo lo que era
sus problemas. Yo por el contrario corría de clínica en clínica con los análisis y
diagnósticos tentativos entre las manos, hasta que por fin desmoralizado,
adivinadores y sanadores que había visto, que resultó no ser uno más. Se hacía
ayudar a los que buscan alcanzar un estado superior. Para mí, lo que contó en
nuestra primera entrevista eran puras patrañas. Me habló del Nirvana, del cordón
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de plata, y de muchos conceptos que no compartía. Al escuchar lo que le conté
había mudado con Alberto para cuidarlo, desde que quedó postrado, y no tenía
Andhra-Raji, estuvo el primer día charlando con Alberto a solas, por más de
siete horas. Esta rutina se repitió por tres semanas, en donde la charla era
humo que desprendían sus sahumerios. Al vigésimo tercer día, me llamó aparte y
me dijo que ya sabía lo que estaba pasando. Que me sería muy difícil de creer,
siguiera con vida. Se sentó en una de las sillas del comedor, me indicó que hiciera
lo mismo, y me dijo:
que se encuentran ocultas, las maduran y las utilizan para dar a luz a un
para que usted pueda interpretar un proceso muy extraño y por demás complejo
que se está desarrollando en Alberto. Cada uno de los personajes que él incluye
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tiene la rara capacidad de poder “recordarlas”, aunque no sea consciente de ello.
peligro mortal, es más, es un peligro existencial, por que él pierde con cada
- Absolutamente.
- Mire, yo no creo en nada de eso, pero si existe en lo que dice una mínima
Gautama. No debe de ningún modo terminar ese cuento, por que si lo hace
- Espero que todo esto sirva para algo. Hace rato que no veo como está, así
que si me permite...
inmediato.
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En el momento que entré a la pieza, me quedé paralizado ¡la cama estaba vacía!,
haber sucedido, corrí a la pequeña biblioteca a ver las carpetas en donde Alberto
guardaba sus cuentos. Todas las hojas estaban en blanco. Las fotos de los
terminado sus diálogos con Sidharta! No pude encontrar a nadie que lo recordara,
ni siquiera sus padres. Extrañamente, éramos solo dos personas las que lo
Ahora, tu también conoces la historia, y debes creerla por que así fue.
40
El Periscopio
P o r: Si re n a Ne g ra
¨ He comprendido. La certeza de que no había nada que comprender, ésa debía ser
mi paz y mi triunfo. Pero estoy aquí, habiéndolo comprendido todo, y Ellos me
buscan, convencidos de que puedo revelarles el objeto de su sórdido deseo. No
basta con haber comprendido, si los otros se niegan a aceptarlo y siguen
interrogando. Me están buscando, deben de haber encontrado mis huellas en París,
saben que ahora estoy aquí, aún quieren el Mapa. Y por mucho que les diga que no
hay mapas, seguirán queriéndolo. Belbo tenía razón: Jodéte, imbécil, ¿qué querés,
matarme? ¿Pero dónde vas? Matáme, pero no te voy a decir que el Mapa no existe,
aprendé a buscarte una vida.¨ Umberto Eco, El péndulo de Foucault, (MALKUT).
T
enía que llamarla de inmediato. Desesperadamente busqué un
Tardó unos cuatro minutos en salir. Cuatro minutos que podrían haber
lugar e introduje mi última ficha salvadora para hablar con Lía y poner en práctica
mi estrategia de pobre víctima: si esa noche no llegaba a salir vivo de ahí, ella
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sería la culpable y tendría que cargar por siempre con la conciencia de conciencia
de ambos.
-Tenés que venir urgente a París. Esta historia es increíble, necesito verte ya. Vení
camino, me extorsionarían con dejarles caer la guillotina sobre sus frágiles cuellos
animado porque sabía que sólo me faltaban un par de pasos para llegar. Entraría,
Plan e iría con Belbo al hotel para buscar a Lía y Giulio y volver los cuatro a Milán.
causas al unísono, lo que nos hizo sonreír (y digo nos hizo y no sonreímos porque
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-Pero no, por favor, no me pasa todos los días esto. Por lo menos no voy a tener
-Bueno, pero no aseguro nada -claro que no pensaba contarle-. ¿Por qué le
por cortar un pan francés y cuando le metí el cuchillo se puso a llorar. Yo estaba
pensar que soy un chiflado entristecido por las lágrimas de un pan onírico.
realidad. Es que es así, no hay nada que hacer. Esa desesperación surge cuando
convencido de que esa bolita de masa no es más que una extensión nuestra o
problema no es ese, sino que es la gran minoría la que puede sentirlo, lo que nos
lleva a enfrentar esa soledad incompleta, eterna, que nos mata porque nos hace
original.
-Sentí lo mismo que usted durante muchos años, hasta que conocí a Belbo, todo
un personaje que me sacó del pozo negro. Pero no duró mucho tiempo. Ahora
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estamos metidos juntos en uno mucho más tétrico que hace peligrar nuestras
vidas.
-Ah! ¿Por eso andás con la cara pálida mirando desconfiado a todo el mundo?
-Es que temo que Ellos nos encuentren, sería una catástrofe. Tengo que estar en
-Claro que existen. No sólo eso sino que nos están buscando para en vano,
sacarnos el secreto.
-Yo creía lo mismo que usted, pero ¿alguna vez se preguntó cuál es la diferencia
manifieste?
-Si, varias veces. Lo que te puedo decir es que si ese algo es lo que dicen real o
hasta el final y te hagas cargo durante todo el camino de esa causa y sus
Además, ¿por qué tantas preocupaciones, si todo es una gran mezcla en esta
-Yo también lo dudo pero en todo caso, yo parezco más real que usted... ¿ cómo
algún indicio nítido que te conduzca a lo que es esta charla, es porque soy de
carne y hueso. De lo contrario... no te puedo asegurar nada... y aún así pienso que
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te estoy mintiendo con esta pueril explicación. Te repito: todo se mezcla. Puedo
ser un sueño o no, pero a esta altura no interesa separar los tantos.
Comenzó hace unos años, una noche que llovía a cántaros. Yo estaba en
mi soledad y unos tragos. Una mujer muy chiquita estaba dando un concierto,
parecida a la rata esa que me golpeaba el vidrio por el tema de los seis minutos,
¿viste? Bueno, este gnomo con anteojos tocaba la trompeta terriblemente mal.
Los borrachos la insultaron sin cesar, con vasos sobre su cabecita, hasta que se
fue corriendo bajo la lluvia. Me dio pena y fui tras ella acompañándola hasta su
casa donde me invitó a seguir tomando un brebaje, horrible también, que ayudó a
suyo que dice llamarse Agliè pero tiene no sé cuántos nombres más. El tipo no
está nada cuerdo, habla continuamente del Ombligo del Mundo, de las corrientes
del Club; les dije todo cuanto había pasado y estuvimos un buen rato encerrados
Cuando todo estuvo arreglado, nos fuimos a buscar a Agliè. Tardamos más o
todo sobre los templarios y el Mapa. Hasta lo llevamos varias veces al Club, donde
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nos leía sus impecables apuntes y algunos libros extraños, muy antiguos. Con sus
contradecirlo. Una noche nos confesó que si alguien le dijera que todo es un gran
desconsoladamente durante horas. Es un tipo que está muy solo, es un pobre tipo
silencio de indignación
-Así que esa es su versión de la historia... -levanté mi vaso para que me trajeran
-Ah, bueno! Viste? Lo casual también existe... Pero créeme, estoy seguro de que
está rogando a sus divinidades imaginarias para que le manden a alguien que le
diga que ese Todo por el que vive es en realidad la nada. Él sabe que es un
libertad su verdad inconsciente. Pero no puedo ser yo ni nadie del Club porque
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nos conoce demasiado, aparte nos divierte tanto el loco... y nuestra vida no está
en peligro. Supongo que tu amigo es el indicado para hablar, pero sus planes son
a ir a buscarlo a la dirección que me dejó. Tal vez, como se están dando las
cosas, no esté tan loco; tal vez él sea el único cuerdo entre nosotros.
últimas consecuencias.
Fui a buscarlo pero no existe el número y nadie conoce a ese tal Oliveira.
siniestro juego, cualquier maldito artificio es válido para intentar ser descalificado.
Pero si se es como Belbo, es uno quien lo elige, quien deja las agujas a la deriva
salir por los propios medios, cuando ya el destino ni siquiera nos empata,
47
ENTONCES
LO SUPE...
Por: Federico Quiróz
...E
ntonces lo ignoraba. Frente a mí estaban 22 años
con los cinco siguientes. Al segundo, después de él, se le ocurrió morirse el día
que no había ataúdes en la ciudad para hacerse sepultar con mis manos. El
tercero, se había suicidado frente a los dos hijos de ambos para ser retratado con
de las jornadas de trabajo, en las réplicas mías que tenía por toda la ciudad. El
último, por fin, mientras me preparaba para ser feliz, porque era perfecto, renunció
a mi gordura del momento y a mi vejez inevitable, por una chica delgada y bella.
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cuándo, en realidad, somos los verdaderos. Una anticipación de 22 años, en este
instante frente al reflejo, me dice que "verdaderos" no somos nunca. Era extraño
que siendo "otros" pudiéramos recordar que en otros tiempos éramos también
las enormes piernas que se tardaban, por su volumen y peso, en su vuelo, más de
lo debido para cruzarse una sobre otra. Si regresara con él --me dije--podría
para su edad. Exactamente las mismas que yo. Miraba, incluso, en mi misma
ventosidades discontinuas. Había, sin embargo, algo opaco en sus pupilas que me
terminaba en "...ella".
Me dijo, "tu segundo esposo murió el día que la revolución triunfó y ocupó
todos los féretros para enterrar a sus muertos; el tercero, un día bajó la guardia
ante el principio que la vida es soportable tan sólo con la idea de que podemos
diferencias que ocasionan los conflictos que vienen de evitarse por ellas y en la
saturación de igualdad que ocasiona las diferencias que anula; el quinto, sólo
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continuó la tradición de separar la espiritualidad de los discursos para engañarse a
sido porque, a punto de lograr lo máximo, siempre nos olvidamos del tiempo que
nos derrumba todo y nos hace pararnos sobre unos escombros que somos
Comprendí que él era todos los demás y que yo, al hablar conmigo misma
II
E
ntonces lo ignoraba. 22 años es un instante para decirme desde
intersección, como la de los aros de los juegos olímpicos, entre amargo y dulzón.
traicionar para averiguar cómo era un asesino; la tercera, me hizo viajar hacia la
luz con la naturalidad de quien ignora estar feliz y deshace un adiós en sus
aparecer en él todos los días con la más extraña de las preguntas; la quinta, se
envolvió en una tristeza infinita que transmitió para siempre a una hija que nació
brincando por las aceras; la última, hizo de la ambigüedad el sitio para reclamar
50
Mientras le contaba todo esto, me dije que con la segunda había efectuado
una vulgar venganza. El verdugo narraba frente al verdugo. El daño que hacemos
lo que pasará mañana nadie se movería. Pero queremos siempre regresar atrás o
imaginar que el futuro es construible. Nadie nos ha definido como una bolita de
cómo, a saberlo más rápido que los demás: todo es un secreto que los viejos no
queremos decir.
Ella observaba mi cabeza sin ningún cabello, como un Buda sin sombrero,
mi cintura como tonel de ron a punto de vencer la resistencia de los aros y, sobre
apenas levantando una pierna que permitiera la descarga en sordina. Eran como
ahogos de violines pellizcados. Si regresara con ella le diría a mis amigos, les
acercarse al espejo, agitando las lonjas de sus brazos. Vi unas manos finas que,
con las palmas, deslizó en la superficie del cristal acariciándome y señaló mis ojos
haciendo una horquilla como la que hacen los luchadores para picárselos. Había,
en los suyos, una sombra que me saludaba desde un lugar conocido y que
obligaba a buscar en mis propias fotos. Murmuró incoherencias como que "era
yo".
51
Me dijo "tu segunda esposa la traicionastes porque no pedistes lealtad y
disfrutastes al confesar tus delitos que algún día tendrás que contar a nuestra hija
como cometidos por otros; la tercera, fue la pasión más ardiente y la relación más
felicidad sólo dura un día, como en las moscas, y se te alejó silbando, viendo las
vidrieras, dejándote con las manos extendidas hacia mí; a la cuarta, nunca le
que no pudiste verme repetida por haberme olvidado, decidió un día servirse de
tus ilusiones al anunciar su búsqueda y perderse en sus límites sobre tus propias
ruinas".
Comprendí que siempre estuvo repartida entre todas las demás y que, al
verla desde el otro lado del espejo, jamás dejé de ser ella. Entonces lo supe...
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Existía una casa
de lado...
por: Kairaba
E
xistía una casa de lado en las afueras de un pequeño pueblo.
Una casa de lado quiere decir de lado, o sea que se tiene que
echar uno al suelo para poder pasar por la puerta, ¡jo que rollo!,
En esta casa entraban todos los jefes de estado y gobernantes del mundo
durante una semana al año sin poder salir de ella, vivían de lado, o sea, acostados
empezaron a ver en los noticiarios y los periódicos que las guerras terminaban y la
paz prevalecía sobre todo conflicto político o religioso todo el mundo se mostró a
Ahora debería describir esta casa, ya que al ser la primera casa de lado de
la historia, su diseño interesará al sagaz lector: esta casa era de madera, madera
nueva, recien barnizada, brillante sin luz y con luz aún más, estaba vestida de
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puerta no nos podemos olvidar de su cerradura en bronce, que si bien no tenía
ningún signo o letra se podía apreciar una flecha mirando hacía arriba que vista de
lado parecía apuntar a la derecha. El interior de la casa era práctico para una vida
nombre de Constanza, me recuerda a mi niñez, a las 356 veces que vi los tres
mosqueteros, nos vamos del tema que nos ocupa o más bien que nos desocupa,
sillón viejo con el relleno saliendo de su forro pero a la vez adaptado al cuerpo por
los años de servicio, cuando vi encima de la mesa un libro raído con un papel
dentro a modo de señal, cogí el libro, lo abrí, la señal era una postal de un cuadro,
un cuadro italiano rechazado primero por los monjes y comprado después por un
rey francés, en el cuadro aparecía un ángel apuntando con su dedo hacia una
actitud, el dedo de aquel ángel apuntaba hacia allí, hacia el mismo lugar que la
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Globos Rojos
Por: Mané
D
etesto las multitudes. No entiendo porque la gente dice que
cementerio.
muy largo. Me bajé del autobús y compré varios ramos de claveles y gladiolas a la
a visitar la tumba de mi madre para cuidar la propiedad, más que para platicar con
ella. Además, me gusta mucho el lugar. A pesar de estar frente a la Avenida mas
tumbas con bellos monumentos de principios del siglo pasado que están muy
moho y con dedos o rostros mutilados. De vez en cuando me gusta leer los
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nombres de las personas que ya nadie recuerda, y pienso en todos los planes que
cripta) y se me ocurre que en 50 años, los hijos de mis sobrinos si acaso sabrán
árboles y el gris del cielo. Conforme más me acercaba, vi que los globos estaban
que estaba sentado en una banca con sus codos en sus rodillas y descansando su
El joven se sentó nuevamente. Quité los papeles que envolvían los ramos de las
flores que compré, y con ellos comencé a limpiar las hojas y la tierra de la tumba.
Era de una joven que fue enterrada días después de mi madre, hacía ya 3 años.
“Pues... no sabría decirle... yo solo vengo algunos domingos cuando estoy libre... y
no he visto a nadie.”
“Claro... al menos parece que alguien viene. La tumba esta cuidada. Eso es
bueno.. es bueno venir a ver los gente que se ha muerto. Aunque .... ¿Para qué?..
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‘Nunca visites panteones, ni llenes tumbas de flores’. No lo digo por usted”, -aclaró
al ver que detenía la labor de limpieza sintiéndome un poco ofendida-. “Lo digo por
mí.”
“Eso sí. No sé si usted ha visto la lapida de esta tumba... en la que usted visita
dice “F de C”. En la de Ana solo vienen sus dos apellidos de soltera. Ella murió
siendo “Señorita”. Ella era.. una mujer hermosa a pesar de lo que creía de sí
misma. Y me amó. Hace 5 años. Ella tenía como unos 30 años.. y yo quede
impresionado con su inteligencia, su amor por los libros.. nos hicimos amigos muy
rápido. Ella era muy insegura de sí misma. La lastimaron muy joven, el amor de su
vida la dejó cuando ella pensaba que la felicidad estaba al alcance de su mano... y
creo que nunca lo superó. De vez en cuando veía un dejo de tristeza en sus ojos...
pero no era amargada. Y yo era un chavo maduro, muy avanzado para mi edad..
explicarlo. Era la mejor amiga que había tenido... hasta que cometí un grave error.
“Le decía que su rostro era el más hermoso que había visto en mi vida, cosas
como esas. Era tanta nuestra amistad que le pedí algo arriesgado: Le pedí que
durmiéramos juntos. Nada de sexo, solo eso. Quería no sé.. sentirla a mi lado
dormida. Ahí fue donde todo cambió. Ella aceptó. Esa noche antes de ir al hotel...
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estábamos muy unidos... y... no recuerdo que dije... algo así como si nuestras
asusté. Sabía que no la amaba. Fue una sacudida tremenda. Le dije ‘Preferiría
seguir siendo amigos’. Fue un instante de verdadero pánico que ella disipó con un
‘Claro. No hay problema.’ Todo fue como una nube que paso en un instante.”
“Volvimos a ser los mismos, ella con su hermosa sonrisa, yo con mi plática.
Inclusive fuimos caminando por la Laguna del Carpintero, yo la llevaba del brazo...
y venía hacia nosotros una joven con varios globos y flores. Ella me dijo ‘Cómprele
llegamos al hotel... ella sólo me dijo ‘Sabes... eres un gran chico... te sientes tan
bien que aquel que se ilusiona, siempre sale desilusionado, pero no esperes salir
“Ella me dejó en el lobby del hotel... y yo no supe que decir. Me sentí como un
perfecto idiota por varios días... ella siguió hablándome... hasta que me dijo un ‘No
buena. Cuando pensaba en ella yo decía ‘Ella tiene que ser feliz, porque lo
merecía. Más que nadie... ella lo merecía’ Pero... hoy en la mañana en un brindis
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de Navidad me enteró por un amigo mutuo que murió sola. Con su familia... pero
haberla lastimado sin necesidad como lo hice. Quizás no fui nada en su vida... y
sólo la hice vivir nuevamente lo que sufrió por su gran amor... ¿quién sabe?.”
que era mi novia? Era una mentira, pero ella vio la realidad en mí, que yo sólo era
un mocoso tonto, y cuando la rechacé ella quizás dijo ‘Lo sabía’. Ella aceptaría
eso. Pero si algo conocía de Ana era que soñaba despierta, se ilusionaba al
tiempo que se torturaba fácilmente. Quizás algún día soñó que caminábamos en
esa laguna que tanto amaba y que yo le compraba unos globos y unas flores. A
pesar de todo el dolor que recibió ella, aún tenía ilusiones, quizás sus sueños se
“Y ahora estoy aquí adornando su tumba con todos los globos de corazones rojos
que pude encontrar y las rosas que encontré con las señoras de allá afuera.” -Hizo
una pausa y suspiró- ‘No llenes las tumbas de flores’... ya es muy tarde para mí.
Ella se fue con las manos vacías, porque me ofreció su amor y yo le negué lo poco
saber que decir. Solo pensé, egoístamente, en que tenía razón en darle gracias a
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El joven de pronto se dio cuenta de lo que estaba haciendo y se levanto
componiéndose.
“De nada.“
El joven se retiró caminando entre las tumbas. Yo miré los globos y no sé porqué
dije.
“¿Perdón?”
flores porque no tenía caso y tenía razón. Pero lo hago porque la recuerdo y
también porque me da tristeza ver las tumbas tan solitarias, no de aquellas que
murieron hace muchos años, pero si de los que fallecieron hace poco y ya fueron
olvidados. Además, dicen que cuando la gente muere es cuando nos pertenecen
por completo y podemos hacer con ellos lo que no pudimos cuando ellos vivían.”
madre se ensuciaba con las pisadas de los niños que iban a la de al lado, bajo el
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árbol de mango, a robarse los globos del joven que los dejaba ahí para quien,
61
HADA DE OTOÑO
Por: Niördhr
H
ace frío... quizá sea tan sólo ese sueño perdido, ese velo azul
decepciones que provocan todas las caídas. Y ese suspiro tantas veces
escuchado, no sea más que la voz del viento, que habla mudo, que brama y
tras una ilusión desvaída. ¿Dónde se fueron los años, dónde quedó la infancia que
asomo a la ventana con la confianza de que las veré danzar entre los astros y la
niebla, titilando como luces lejanas y perdidas que únicamente almas inocentes
ánima tan vieja. Cierro los ojos y me pierdo en el laberinto de los recuerdos.
estremece en un suspiro, lo veo tremolar bajo las alas del viento, bajo sus súplicas
y sus llantos, y me pregunto por qué nadie más le oye, por qué nadie más lo siente
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y nadie más comparte su dolor, que es el dolor del mundo, de la soledad infinita y
el abandono. Quizá sin este velo también estaría sorda, como el resto de los
marchito. Pero tú la has visto. Como si hubiese volado hacia tus manos, como si la
vanidosa.
Hace tiempo que no aparecen más que en la niebla de mis sueños, donde
la irrealidad se torna, si cabe, aún más abstracta. Donde el mundo está regido por
normas diferentes y tan dispares que a menudo lo juzgamos una locura. Aunque a
veces quisiera que la locura, el sueño y lo imposible fuese la tragedia de esta vida,
perdí, hace tantos años que no guardo memoria de los días en que jugaba en los
bosques, entre las flores, bajo la hierba fresca y salvaje de algún lugar imposible.
¡Ah, soledad, soledad! Indefinible y certera, como todas las llagas, como
todas las mentiras. Quisiera alzarme sobre la tierra y gritarle al viento que no está
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solo: a él nunca lo abandonan los poetas, las aves que retozan en su seno, las
nubes que se disuelven y lloran o el sol que alumbra el otoño de mis días.
Pero tras este velo azul, escondida del mundo, yo no estoy segura de que
se acuerden de mi los rayos del mundo. Tal vez cayeron, como hojarasca,
memoria.
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LA PIEDRA
BRILLANTE
Por: Agapito Pérez.
¡N
o te vayas todavía , abuelo! ¿ después qué pasó?
cansados?
- Siempre la guardaba Ben Said, que era el más cuidadoso. Cuando queríamos
- Si... después la guardé yo un ratito. Ahora dormite, que si no nos van a retar.
- ¿No te dije que estábamos cansados?, nos fuimos a dormir y abuelo nos contó
un cuento.
contaba al niño era verdad o fantasía. En parte estaba seguro que había sido.
Entre jirones de recuerdos, y entre sombras, entre dolorosas sombras, volvía a ver
el rostro triangular y algo pálido del hermano, el que cuidaba, el ordenado Ben
Said, su hermano más querido, volvía a ver al ágil y fuerte Juan, su hermano
65
mayor -dos años mayor que él-, el de su hermana María y el de Maneco, el amigo
dilecto.
seguir contando las aventuras de la bandita de rapaces, cerca del río Uruguay, en
Hizo lo que podía hacer un viejo con un niño. Le tomó la mano y se la acarició
El viejo se resignó:
- Si, había vuelto sola, después que Juan se la tiró al muñeco que cuidaba las
brillante.
- Unas diez piedritas de agua, pero esas no eran como la piedra brillante, con
viejo.
66
-La consiguió Juan... nosotros...,dale que dale, queríamos que le tirara una piedra
para tirarla, cuando dijo ¡no!, ¡que no iba a matar a un pajarito! Y tiró la piedra al
El niño tomó la mano del viejo con emoción. El lo miró a los ojos y vio su
sonrisa... ¡Qué raro!, nunca me emocioné así con mis hijos. Habrá que ser viejo
pero no le importó. No quiero ser su amigo, quiero que me ame. Además no sabía
- Porque Juan le tiraba a las latitas que encontrábamos y a los carteles y a los
postes. Siempre acertaba. Si cerraba los ojos cuando la tiraba, también acertaba.
Era una piedra mágica. Y...¿sabés? después no había que buscarla, ¡volvía sola a
la bolsita!.
- ¡Claro que si!, pero no muchas veces porque Juan no quería que se gastara. Ben
Said la tiraba en el río y rebotaba que era una delicia. Era una lucecita que saltaba
sobre el agua. Después siempre volvía. El viejo hablaba bajito y dulcemente para
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- Y después, cuando crecieron, ¿perdieron la bolsita, abuelo?
cerró los ojos y una sonrisa apareció en su cara. Su respiración se fue haciendo
Tenía todavía la mano del niño entre las suyas y no sabía cómo dejarla sin
perturbar el sueño. Lo hizo muy suavemente y luego cubrió la manito con la cobija.
Cuando salió era como una sombra silenciosa. En la puerta encontró a su hijo que
ella, dos monedas de cobre, las primaras que tuvo cuando llegó, exiliado después
68
de la aventura de Aparicio Saravia, y un jazmín seco entre las hojas de su librito
de órdenes del Ejército Blanco. Puso todo dentro de una cajita y la bolsita debajo
Están tan ocupados en vivir que se han olvidado de mi. Y con vergüenza
que los unía, él le había hablado por primera vez de la piedra brillante y de sus
poderes mágicos.
generación ,se dijo. ¿Cuál sería la magia que su padre transmitió a su hijo? Esas
magias están siempre ocultas, son secretos entre los viejos y los niños. El, que
niño amado.
donde recogió diez piedritas de agua y las metió en la bolsita. Luego caminó hasta
forma, del tamaño de una piedra chiquita. Lo puso en la bolsita y enterró los restos
en un pozo hondo. No sentía vergüenza por el engaño, mas bien estaba aliviado
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El niño también se despertó temprano. Cuando el viejo entró a verlo se
- ¡Claro que me acordé! , Ben Said dejó la bolsita cuando se fue, ahora voy a
-Ahora mismo voy a buscarla. Lo volvió a cubrir con las cobijas y lo observó
-No, porque teníamos la piedra brillante. El niño cerró los ojos. Se veía que había
-Sirve para tenerla y para mirarla, sólo hay que usarla cuando es justo.
-Justo es lo bueno
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-¿Entonces vos sos justo? El viejo no contestó.
-Mirá, ves que te la traje...El niño quedó atónito y luego se colgó de su cuello
cama. Suavemente acarició la piedra blanca, la tomó con dos dedos y la acercó a
recuerde cuando me muera? Quizá renazca un poco cada vez que piense en mí.
¿Por qué deseo no ser olvidado del todo? y sentía que a lo mejor, todo su amor no
era más que engaño y egoísmo. El viejo se echó a llorar por haberlo pensado y el
El viejo se mantuvo callado un ratito, no sabía qué decirle al niño, que lo miraba
-Lloro porque como soy muy grande, antes que crezcas me voy a morir y no podré
verte más.
-Es irse, lo vienen a buscar a uno cuando ya ha vivido mucho y es muy viejo.
-Entonces no tengas miedo abuelo, yo la echaré cuando venga ¿no ves que tengo
la piedra brillante?
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La Princesa y
el Vagabundo
Por: Kran
abrió, dejando paso a la portentosa caballería real, los guardianes montados sobre
caballos albinos de piel y ojos, vestían pitreras y casquetes dorados, cubiertos por
una túnica rojiblanca, tras ellos apareció la carroza real, caballos azabache y
bridas doradas, a la altura del mendigo, esta se detuvo, desde la ventanilla una
niña le señalaba con el dedo, mientras reía, acto seguido el chofer bajó de la
hacerse Bufón de la corte, el vagabundo no podía por menos que alegrarse, por
continuar con sus escritos... pasó el tiempo y el vagabundo a base de hacer reír se
había ganado una preciada amistad con el Rey, parte de los caballeros y
sobretodo de la hija del rey, la Princesita con quién, con el paso de los años fraguó
una relación que iba mas allá de la gracia pasajera, el bufón, como tal, con pocos
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podía entablar una relación revestida de seriedad, y la niña, en la corte, no tenía a
nadie de su edad, así que poco a poco aquella relación fue fraguando, de manera
niña a superar sus problemas por medio de cuentos, que este escribía para ella, y
animándola con sus gracias, la otra, aportaba cariño y un oído para sus historias,
con las joyas y los halagos de los no pocos caballeros que la pretendían, poco a
convirtió en un saludo entre conocidos olvidados, para este punto el Bufón había
perdido toda su gracia y el rey tuvo que sustituirlo, en los meses siguientes el
Bufón vagaba en pena por la corte, de vez en cuando estallaba en ira por
decidieron reunirse, tras una larga charla, llegaron a la conclusión que debían
separarlos, por el bien de los dos, así pues, y pensando en el futuro del Bufón, su
con la Princesa, primero debería demostrar que era mejor que los demás, así el
entretenido en su tarea, por otra parte imposible, pues, siempre habrá alguien
73
Llegó la propuesta, y como no, el Bufón, aceptó el reto de buen grado, la
propuesta era la siguiente, sería formado para intervenir como intermediario en los
Pasaron dos años, en los que el Bufón fue formado, con éxito, en una
claro está, que esta denegó por medio del Mayordomo, con un: No es suficiente.
Así que el Pacificador se volvió a deprimir. Ante la situación la corte decidió actuar
del mismo modo, así que aprovechando los nuevos y exitosos conocimientos del
buen grado.
Días mas tarde, una comitiva de Caballeros, seguidos del Pacificador, que
con su nuevo sueldo se había comprado una bicicleta, pues no le llegaba para el
caballo, se dirigía al castillo enemigo. La reunión fue un éxito y por primera vez en
muchos años reinó la paz en la Isla. El pacificador y su acto voló por todas partes,
Pacificador volvió a pedir audiencia, que evidentemente, fue denegada, así que de
nuevo volvió a entristecerse, pero su fama ya había corrido, y poco a poco otros
que este se contagiaba en sus reuniones, y poco a poco, fue pacificando país tras
74
país, en espera de que su amor, por fin fuese correspondido, así tras cada misión,
volvía a pedir audiencia y la respuesta, siempre era la misma, una vez tras otra:
¡No es suficiente!, y así, año tras año, el Pacificador, fue solventando un conflicto
tras otro, hasta llegado un día en que consiguió la paz en el mundo entero, y de
cogió su bicicleta, vagó por la costa, a orillas del mar, donde se sentó junto al
abriera los ojos y darse cuenta así que la princesa no era nadie especial, explico a
este todos los devaneos y escarceos de la princesa con los Caballeros de la corte,
cuando al apreciar que el punto común de todos aquellos caballeros, no era más
menospreciado, sintióse defraudado, sintióse menos que nada y, pensar que todo
había sido una treta para mantenerle alejado de la princesa, mientras él arreglaba
el mundo, ella abría sus encantos a los caballeros de la corte, sintióse enloquecer,
cogió su bicicleta y se alejó a las montañas, allí con el dinero ganado, se compró
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objetivo, apagar una por una todas las estrellas que había creado y dejar sólo,
oscuridad.
reabriéndose antiguos, los Reyes acudían al Pacificador, pero este siempre les
contestaba.
preocupados, más por el Loco de la Colina que por los conflictos, decidieron hacer
algo al respecto.
la Colina abrió con cara de pocos amigos, uno de ellos dio un paso adelante y
habló:
y contesto:
- Decidle que si quiere verme, me demuestre que es mejor que las demás.
mientras se alejaban:
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Aquella misma noche alguien vio al Loco de la Colina alejarse con un
hatillo, horas mas tarde, una dama, encapotada y encapuchada de negro, de finos
modales, preguntó en algunas casas del pueblo por el Loco, alguien le explicó que
se había ido, y le indicó la dirección, acto seguido la dama hizo girar el caballo en
esa dirección, al galopar, el alza vuelo de la capa dejó entrever el destello dorado
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LAS ÚLTIMAS
HORAS DE
WINSTON
GONZÁLEZ
Por: Elquiroco
madre sangre, sudor y lágrimas; de allí su nombre. Estaba peleado con la gente y
con la vida, desde aquel día en que era tan sólo un infante y tuvo su primer sueño
premonitorio.
-Mamita... ¿Por qué hoy papito se va a morir a la vuelta del trabajo? –le había
dicho a su madre.
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Esa tarde, el micro en que Rubén González volvía del trabajo, chocó contra
Vilma culpó al primogénito, no entendió que lo del niño fue una premonición
con su corazón charrúa lleno de amor. A tal punto lo amaba Winston, que él
mismo terminó por darle la derecha a su madre y también se culpó por haber
busca de nuevos horizontes decidió llevar a sus cinco hijos a la Argentina, porque
tomaron, más por terror que por un razonamiento coherente. Winston había
soñado que el buque zozobraba en las fauces dulces del león del Plata. Y así
sucedió, sin sobrevivientes. La familia González salvó esta vez su vida gracias al
sobre el fin de su adolescencia, quedó solo en aquella humilde casa. Soledad que
Su vida era opaca. Pasaba sus días entra la oficina pública en que
79
fervientemente. Pero claro, debía como primer paso, rebelarse a su falta de
ese sueño sería realidad y él lo sabía. El holocausto estaba tan cerca... Sismos,
tierra vomitando lava y los polos derritiéndose al unísono. El fin del mundo en
pocas horas. Esa gigantesca piedra estelar no daría tiempo ni para desatar el
pánico. Winston estaba tan seguro de que no sería capaz de convencer a nadie de
lo que sucedería, como de que esta vez no podría pasar por alto lo que había
soñado.
Entendió que nada sería igual a partir de ahí. Se había producido un punto de
inflexión que su vida necesitaba. Las próximas horas serían distintas a todas, un
Sin más trámite, dar un vuelco de ciento ochenta grados a sus pobres y
denigrantes actitudes... Por vez primera en su triste existencia tenía todo para
ganar, porque ya no había nada que perder. Qué le importaba ya lo que pudieran
80
en un extraño ser indestructible. Era una paradoja. Debía atreverse a vivir sus
debía saber que él la amaba con desesperación. Todas las lágrimas que había
derramado en soledad, cada vez que veía a Dora besar a su novio, serían dagas
poderosas. A esa hora, Dora que era enfermera estaba de guardia, así que se
atrevería a dejarle un mensaje escrito. Escribir, esa era otra deuda pendiente. La
vena poética estaba inflamada por la sangre de Temuco, sentía que Neruda había
puerta de su vecina. ¡Había escrito algo y lo había firmado! Sin sentir vergüenza,
todo el dinero que tenía escondido. Sin esperar el micro, se tomó un taxi y partió
rumbo a su trabajo ¿a trabajar? No. A gritar todo que tenía guardado. Llegaron,
pero Winston no hizo detener el taxi hasta haberse pasado dos cuadras de su
destino. Se bajó del coche sin pagar. El chofer reclamó a los gritos y Winston se
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despachó con un gesto obsceno, otrora impensable en él, y echó a correr en
trabajaba.
su jefe. Mirta era una mujer madura, con un rostro poco agraciado, pero con un
físico que se notaba cuidado, seguramente para no traspasar la puerta que separa
carnoso, lo compensaba con una terrible estupidez. Ella le decía que era un
como era la secretaria de su jefe no tenía el valor como para intentar sacarse la
duda. Dado que el resto del personal entraba media hora más tarde que ellos,
Mirta, como todos los días, luego de darle un sonoro beso en la mejilla (muy cerca
ni tan húmedo ni tan oscuro como los planes de Winston. Mirta se inclinó sobre un
archivo y él como una pantera, saltó desde la profunda y cerrada selva del deseo.
La tomó por detrás apretándole los senos con sus garras y apoyó la bragueta, con
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La sorprendida mujer no perdió un instante y presionó con sus manos sobre
cabeza a un lado ofreciendo su cuello a los mordiscos del sátiro. Este la hizo girar,
una escritorio desvencijado. Tiró al piso los papeles que se apilaban entre el polvo
y las telarañas. Extendió a Mirta boca arriba y le descorrió sus polleras, y una
bombacha negra que limitaba con una panza que le resultó excesivamente
sensual. La montó entre gemidos. Era la primera vez que Winston se sentía
frustración. Placer. Por fin sabía que era eso. No les bastó y lo hicieron
demostrado que había alguien que se interesaba por él, se sentía un ganador. Se
estaba parado con las manos en la cintura, los brazos en jarra y el gesto adusto.
-¿Y se puede saber a vos que carajo te importa? –Le gritó con rabia.
-¿Qué? Escuchame bien inútil ¿Te acordás con quién estás hablando? Decime de
dónde venís.
-De bajarle la caña a tu secretaria boludo. Que lástima que seas puto, gordo,
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El jefe miraba atónito como Winston tiraba papeles al aire, mientras se reía
encima de un empellón. Que maravilloso era para Winston sentir las cascadas de
adrenalina que corrían por su cuerpo. En ese momento advirtió que quería más.
Ganó la calle. Se frenó, giró sobre sí mismo como buscando orientarse, señaló en
el aire indicándose su nueva dirección. Trotó varias cuadras hasta llegar a una
armería. El fin del mundo se acercaba, y Winston quería vivir sus últimas horas al
miro por sobre el vidrio. Todas las armas tenían el precio puesto, así que eligió la
para evitar “cierto papelerío” por tratarse una arma de guerra. Una pistola Taurus 9
más antipática. Buscó las cajas y se paró frente a una de ellas, sin reparar en la
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todo el que se cruzara en su camino. Terminó de dar una vuelta sobre sí mismo y
repente. Los vasos sanguíneos del cuello se le hincharon y pensó que la cabeza le
estallaría.
vigilaba en derredor y vio bajar de la garita a un policía. Con una velocidad que
rodilla derecha. El policía cayó sobre ese costado soltando su arma. Winston “El
chacal”, había probado la sangre. Corrió hacia él y alzó el revolver. Sólo entonces
actuaba como un profesional y por dentro se sentía como un niño jugando a los
vaqueros, le asestó una patada en el rostro, partiéndole la nariz. “Knock out”. Saltó
por sobre las personas que se habían tirado al piso, y estirando el brazo tomó el
acción no llevó más de dos minutos. Antes de irse del lugar de los hechos, se
documento de identidad del bolsillo trasero del pantalón, lo puso abierto delante de
la cámara, para que no quedaran dudas de quien era. Huyó sin mirar atrás, pistola
85
en mano. Paró su loca carrera a pocas cuadras del Banco. Entró en una obra en
construcción que estaba vacía. Llenó sus bolsillos con todo el dinero que pudo, sin
contarlo. Bastante más de la mitad quedó en la bolsa. Junto a la obra, una mujer
con un bebé pedía limosna. Winston le dejó la bolsa con el dinero. Más tranquilo
ahora, se alejó caminando, mientras se regocijaba pensando que las últimas horas
una dirección y arrojó el diario en un cesto para basura. Se empezó a alejar, pero
se detuvo y volvió sobre sus pasos. Sacó el diario del cesto y lo tiró a la calle.
Retomó su camino, rumbo a una de esas “Casas de masajes”, que esconden a los
noticieros. En ninguno de ellos se hizo mención del asalto al Banco, mientras duró
el viaje.
86
Lo acompañó hasta un salón en donde una señorita le acercó una carpeta
con fotos. Eligió tres mujeres. El hombre asintió con la cabeza y lo hizo acompañar
hasta una pieza en el primer piso. Unos cinco minutos más tarde, las tres mujeres,
de entre veinticinco y treinta años, cuyo único atuendo consistía en diminutas tiras
-Hola muñeco –Inició el diálogo una de ellas, que parecía la mayor y mascaba
-Quiero una buena encamada con las tres a la vez, quiero que me dejen hacerles
-Bueno pero sin pegar ¿viste? –Le aclaró la misma que había hablado antes y que
-No, no. Sin pegar, pero muy chancho. Quiero que sean muy mimosas conmigo y
-Dos horas con las tres, con todos los chiches, serían unos mil pesos.
-¿Por cinco mil qué son capaces de hacer? –Preguntó de manera pícara.
-Por cinco lucas, soy capaz de casarme y tener un hijo, papito- Aseguró
esta altura, el uruguayo ya no sabía ni quien era, mas recordaba y tenía muy en
claro dos cosas: El fin del mundo se aproximaba y que Dora sería su última
estación.
87
Pensó si la policía lo estaría esperando ya en su casa. Recién entonces se
no divisó ningún movimiento extraño. Suspiró aliviado. Bajó del auto y en ese
momento el novio de Dora salía a la calle, con el perro de su vecina. Ese maldito
cortó el paso.
-Con vos quería hablar antes de que Dora vuelva del trabajo, idiota- Le espetó con
-Así que ahora le dejás cartitas de amor a Dora... Vos estás buscando que te
hizo una burla provocadora. El novio de Dora lo dejó suelto y el can se desbocó,
-Pero... ¿Qué hacés, estás loco? –Se exaltó el novio de Dora y gritando avanzó
segundo contra el rostro. El resto, una vez que el cuerpo cayó inerte y quedó
lado de los cadáveres. Dora lo odiaría, ya nada importaba. Volvía a ser el mismo
88
Winston de siempre, sin ánimo para rebelarse ni contra la soledad. Comprendió
que no había ganado nada, que todo fue una ilusión, y que tan solo durante
algunas horas, incluso esa soledad que lo acompañó la mayor parte de su vida,
II
Las rejas del salón de visitas se cerraron tras su paso. Winston se sentó en
uno de los bancos. En silencio, como siempre. Del otro lado del vidrio, Mirta lo
-Winston... la fecha del parto se acerca, así que esta es la última vez que vengo,
no quiero que mi hijo vea a su padre en la cárcel. Prefiero que lo piense muerto.
Jamás imaginé que a mi edad iba a tener un hijo, y menos aún fruto de un
momento de pasión. Pero ahora lo quiero más que a nada en el mundo. Sé muy
bien que no me amas, por lo tanto no tiene sentido que te espere. Además... son
veinte años Winston, es mucho tiempo. No espero que me digas nada, sólo te pido
desconsolada - adiós...
-Vení lindito –Le susurró con sorna- ¡Qué fea la mina esa! ¿Quién era? No te
preocupes por ella, que acá adentro hay muchos muchachos que te quieren. ¿Así
89
que desde que sos la novia oficial del pabellón te dicen Bambi? Qué lindo ¿No? -
Las rejas del salón de visitas se cerraron nuevamente tras su paso. Los
cumplió totalmente.
90
Nacimiento
Por: Esteban Bosque Mendoza
D
ejo estas líneas y toda la documentación que reuní a través de
los años para aquel ser humano que lo encuentre. Solo espero
mas allá. No podían, o no querían, encontrarse con pruebas o con fuerzas que sus
Por eso me dediqué a indagar las leyendas griegas, celtas, persas, chinas,
movimientos que en sus escritos dejaban traslucir su cercanía con algo más
91
cósmico, más universal, más espiritual que el simple hecho de que somos materia
aprender, investigar, elevarnos más allá de este estado en que vivimos. Al que
tomados como desvaríos de mentes enfermas. Tal vez algunos lo fueran, pero no
todos. Eso es una de las posibilidades que nos brinda tener una inteligencia sin
aumentar el empleo de nuestra mente. Dejar atrás esa barrera de solo utilizar el
accesibles, pude realizar uno de los más viejos anhelos de aquellos seres
donde deseaba ir. Pero no solo con mi mente. Lo hacía inclusive con mi cuerpo.
La gente podía verme, podían conversar conmigo, podían sentirme cerca de ellos.
92
A pesar de que mi cuerpo permanecía en mi habitación, podía desdoblarme en
materia sólida. Podía trasladarme de una habitación a otra sin necesidad de pasar
por las puertas. Mi cuerpo es capaz de fundirse con otros sólidos, combinarse con
Tuve esa mala experiencia cuando intenté demostrar lo que había logrado a
de mucho. Escapé fácilmente y desde entonces tuve que seguir con mis estudios
Durante los primeros tiempos tuve dificultades para evadirlos, hasta que
partir de ese momento pude retomar mis estudios con más tranquilidad y poder
No son poderes. Es ser lo que podemos ser. Lo que Dios nos ofreció al crearnos.
93
Paso a paso pude lograr cosas como sumergirme en el agua sin ahogarme,
Para aquel que encuentre estas notas junto con toda la información que
reuní a lo largo de quince años, le digo que solo es cuestión de creer en nosotros
Somos parte de un todo pero a la vez individuales para madurar. Cada uno
tiene que encontrarlo siguiendo su propio camino. Pero le dejo el comienzo. Solo
principio de otro más maravilloso, ya que al terminar esta nota transformaré esta
94
Relato Infinito
Por: Julio Emilio Soray
D
urante aquel aciago y triste día, habría de invadirme la peor de
simplemente porque esa noche no dormí. Y ésta, tan solo fue la menor de mis
antes de dormir, sucedieron cosas, que no puedo, ni podría explicar –al menos,
sin que piensen que estoy loco-. De todos modos, si quisiera explicar que es lo
que sucedió, no tengo a quien relatarle lo acontecido, salvo a ti, si es que este
Tal vez tu puedas darme una respuesta, o aun mejor... ¡podrías salvarme!.
soy un niño que se pueda asustar por un relato trágico, aunque tristemente
verídico. Es bien sabido, que los estragos producidos durante el siglo XVII, debido
a Holanda e Inglaterra, como las zonas mas afectadas; es algo que a la sociedad
95
de hoy no puede intimidarla, dado los avances de la medicina. A decir verdad, las
sombrías páginas de este conocido relato no hicieron mella en mí. Aunque fueron
las mismas páginas de este libro las que comenzaron a jugar con mis temores,
precisamente cuando llegué a la página 62, donde pude leer la siguiente frase:
-¿Señor Robbins? –dije para mis adentros, siendo consciente que en el relato no
retomé la lectura:
-¿Qué está ocurriendo aquí? –balbucee cuando reconocí que.. ¡El destinatario de
observaba con pavor que una ilustración comenzaba a dibujarse en la página 63.
parecía mucho a mí, lo cual comenzó a inquietarme sobremanera. Sin saber que
miedo que me provocaba seguir leyendo esas páginas. Pero peor fue mi sorpresa
cuando descubrí que la tapa del libro no era la del “Diario del año de la peste”. Si
bien respondía a un titulo perturbador, lo peor era que éste era alusivo a mí:
96
“LA DESAPARICIÓN DEL SEÑOR ROBBINS”
no era ni más ni menos que yo, Edward William Robbins, no pude evitar que el
libro se deslizara de mis manos, golpeando con un estruendo poco común el suelo
de mi habitación. Cayó abierto entre las páginas 80 y 81, permitiéndome ver una
63, sin siquiera detener mi vista en la ilustración, pero lo vano de mis esfuerzos
dos.
Un hombre con un libro en sus manos, en una habitación igual a la mía era la
-Todavía sigo en el libro –dije sin poder ahogar un grito de angustia entremezclado
-Debo leer lo que dice –agregué, al tiempo que me daba cuenta que estaba
gritando. Tal vez pensaba, que elevando mi voz despertaría de esta pesadilla, que
con estupor noté que desaparecían para darle espacio a una breve frase: “Sr.
-¿Quién eres? ¿Qué quieres de mí? –pregunté sin saber a quien o a que.
en el renglón siguiente. Pero antes quisiera que vea algo –respondió un poco mas
97
abajo, al tiempo que unas pocas páginas volvían hacia atrás, para finalmente
la 71 se diferenciaba de esta, solo por algo que estaba escrito en forma aislada, es
decir, fuera del contexto original de la obra. Aunque ahora, no sabía si seguía
–si es que puedo discernir entre realidad e irrealidad- que estaba devastando mi
espíritu. Al volver la vista hacia el libro, pude verificar que el 4 de septiembre, allí
impreso era parte de un mensaje que debía descubrir antes de que fuera
demasiado tarde.
-Sr. Robbins, creo que ya se ha dado cuenta lo que esa fecha significa –se dejó
-No crea que porque esa fecha coincide con la de hoy, está logrando intimidarme
-Nadie quiere intimidarlo. Tan solo debe ser consciente que hoy es el día... -pude
leer al tiempo que escrutaba los contornos de la habitación, para asegurarme tan
espera de una respuesta. Pero no hubo tal respuesta...... o tal vez si, porque las
98
Invadido por una especie de furia e impotencia, desconocida aun por mí;
responder. Tan solo fue la intención, dado que no lo logré, o podría decir que en
cierta manera sí. Descubrir que no podía emitir sonido alguno, no hizo mas que
hundirme cada vez más en la desesperación. Y más aun cuando comprendí que
los agravios que quería propinarle a ese despreciable ente, se plasmaron por toda
página, que había sufrido tales injurias, desapareció de mi vista para ocupar su
lugar la número 87. Solo pude descubrir la palabra “epidemia” un poco antes de la
mitad de página.
que se trataba de algún mensaje. De todos modos, queda muy claro que se
trataba de una palabra extraída del relato de Defoe, dado que el tema central es la
me apresté a dar vuelta la página. Pero antes de que pueda lograrlo, unas cuantas
-¿Pero que demonios significa esta frase?-me pregunté para mí, mientras
99
qué razón las páginas se voltean por sí mismas? Estos y otros interrogantes
las páginas seguían alguna clase de patrón, tal vez para indicarme alguna clave,
señal, pista, o quizás, estaba leyendo algún libro de “Elige tu propia aventura” y
conjeturas, nuevamente las páginas se dieron vuelta, pero esta vez, hacia atrás.
En esta ocasión el destino fue la página 88, donde mis desvaríos se prolongaron
manifestaba.
página 89.
lo cual era más sorprendente aun. Todo lo que había leído hasta entonces, no
en el uso de la pluma; era una señal, una clave, o alguna clase de criptograma del
normalidad.
100
-Esta escritura parece de hace algunos siglos atrás –me decía para mí,
que tan conocida es para mí, dado que es el tipo de fuente que suelo usar en la
computadora.
extraño interlocutor.....al del siglo XVII. Acaso, ¿Tendría algo que ver con la
historia de Daniel Defoe? ¿Se trataría de una victima de la peste? Tal vez, era un
espíritu que no hacia mas que buscar la paz, sin saber cómo y dónde. Con esto en
desplegaron las páginas 106 y 107. Aun sin saber por que había avanzado tantas
característica especial? ¿La clave esta en la numeración? ¿Será que los números
-Sr. Robbins, usted ya cuenta con mis respetos –escribió el enigmático personaje-.
101
-No se apresure, ya habrá tiempo para explicaciones. Pero muchas de esas
Ensimismado por las dudas que me provocaban las palabras de este ser
misterioso, no pude menos que intentar ordenar aquellos elementos que pudieran
para interpretar los textos bíblicos, ya cambiando de lugar la posición de las letras
este libro, el orden particular en que debo leer sus páginas, así como el valor
102
-¿Qué datos tengo? –me pregunté, al tiempo que mi pregunta se vislumbraba en
¿124? No entendía porque de la página 106, pasé a este singular número. Pero lo
numerología:
1 2 3 4 5 6 7 8 9
A B C D E F G H I
J K L M N O P Q R
S T U V W X Y Z
numéricos el primer termino del dato, es decir, “Daniel”, para luego repetir la
El método no implica ningún misterio: Cada letra del alfabeto tiene un valor
numérico que la define. Una vez obtenidos los guarismos, comencé a sumarlos,
para luego obtener la suma total de ambos miembros, la cual me devolvió el valor
“8”.
Estos números no parecían significar nada, pero tal vez había un patrón
lógico que pudiera brindarme alguna pista para entender lo que sucedía. Hasta
valor 53, pertenece a la página, donde mi lectura aun era normal. Por lo tanto, la
103
El 8 en particular, no me dijo mucho en una primera instancia. Así que
repetí la operación, pero esta vez con mi propio nombre: Edward: 5.4.5.1.9.4 = 28
por primera vez me comuniqué con el ente que se manifestó ante mí. A su vez, si
responden a este intrigante numero, sino que los acontecimientos que se relatan
en su libro, tienen cabida en el siglo XVII, desde fines de 1664. De esta manera, el
valor del siglo es 17, es decir, sumando sus dígitos, obtengo el tan aclamado 8,
así como también lo obtendría de la suma de los dígitos del año: 1664: (17) =1+7=
“8”.
Puede parecer que estoy loco, pero sé positivamente que todo esto forma
darme cuenta que mi interlocutor, desde unas cuantas páginas atrás no se hacia
de este ser, podía ser mas grata que la incertidumbre que sentía por sentirme
del 8vo piso de mi departamento que da hacia la ciudad, para descubrir invadido
por el espanto que el único edificio de la ciudad era el mío, mientras que el resto
104
-¿Qué es lo que esta sucediendo? –me pregunté, emitiendo un grito de
sentido del habla mientras no me encontraba leyendo ese maldito libro. Aunque
era grato sentirme un tanto más normal que antes, bien sabía que lo que estaba
experimentando era de una connotación negativa para la escasa salud mental que
producto del miedo. Al posar mi vista en la página 124, donde aun estaban
aquellos guarismos que quien demonios sabe por que extraña razón me empeñe
en descifrar, descubrí que otra vez me faltaba la voz, para darle lugar a mis
pagina 125 estaba en blanco y mis pensamientos no la llenaban. ¿Por qué no?
páginas 142 y 143. Pero aun me preguntaba por que mis pensamientos no
-Sr. Robbins, tal vez yo pueda responderle, o quizás usted ya lo ha notado sin
Ojalá hubiera podido preguntarle que me habría querido decir, pero mi falta
105
espera por una explicación fue en vano. Así que comencé a preguntarme ¿qué
sería lo que habría de notar, aun sin darme cuenta? Me parecía una
incongruencia poder decir que se puede notar algo sin darse cuenta de ello.
atrás entre las páginas 134 y 135. Extrañamente, descubrí una página totalmente
claramente al final de la página. Era la segunda vez que me topaba con esta
palabra, que antes había omitido sin darle mayor importancia. Seguramente
tendría alguna clave por descubrir en ella. De esta manera, creí que lo más
¡Eso es! –me dije a mí mismo, mientras repasaba todas sus apariciones en
los diferentes elementos que analicé – Nuevamente, había observado que el 8 era
nunca lo hizo. Parecía haber adquirido vida propia. Por lo tanto, inicié un paseo
mental por las páginas que había leído, desde la 62 en que mi odisea había
comenzado. Lo cual me hizo notar nuevamente que de la suma de los dígitos que
-¡Eso es! Debo recordar las páginas en las que se contactó conmigo –me animé a
mí mismo. Cada página estaba grabada en mi mente. Una vez reunida dicha
nuevamente entre la página 142 y 143. Si bien, la 142 estaba casi completa, había
106
espacio suficiente para cubrir con aquellos razonamientos hechos en mi mente las
páginas que había recorrido en mi aleatoria lectura: 62, 63, 81, 80,71,79, 87, 97,
Ahora todo lo que debía hacer era ordenar aquellas páginas en las que el
depositarse. De tal manera obtuve el siguiente orden en la página 160: 62, 80, 71,
107 y 143 eran las páginas claves para seguir investigando. Todas ellas me
devolvían el “8”, como era de suponer. Esto era lo que había advertido, sin darme
cuenta que había un patrón lógico. Esto significaba que si estoy en la página 160
conmigo. Pero también pude inferir que este no fue el único patrón lógico presente
en el correlato de las páginas. Así, pronto descubrí que las imágenes que me
representaban se hallaban en las páginas cuyos dígitos sumaban 9, así como mis
respuestas impresas, puesto que no tenía voz. De la misma manera, observé que
arrojaban “7”, como resultado de la suma de sus dígitos. También pude advertir,
que dependiendo de las valencias de cada página, los avances o retrocesos de las
mismas puede variar, según puede verse en este diagrama que pude volcar en la
107
Valencia “6” Valencia “7” Valencia “8” Valencia “9”
i) ii)
62 63
69 70 v) 72
71
78 vi) 79 iv) iii) 81
80
vii) 87 ix, xi) 88 x) 90
89
96 viii) 97 98 99
105 xii,xiv)106 xiii) 107 108
114 115 116 117
123 xv) 125 126
124
132 133 xviii) 134 135
141 xvi,xix)142 xvii)143 144
150 151 152 153
159 xx) xxi) 161 162
160
se suman valencias “8” y “9”, siempre se manifestara este espíritu. Esto me indujo
108
Esta doctrina se ha dado a conocer principalmente, a partir del siglo xv, por
ángeles, entre estos y los astros, y entre los astros y los cuerpos sublunares. Los
caracteres de esta relación se hallan impresos, en los símbolos, en las letras y los
relación existente entre todos los seres reales. Soy plenamente consciente, que
mis divagues cubren mi ser, cual prenda de vestir lo haría con cualquier hombre.
siguiente formula general: x/x es página de valencia =6,7,8 o 9, donde la suma del
posible avance y retroceso de la misma debe ser igual a 17, lo cual indicaría que
el desplazamiento realizado por dicha página seria de valencia “8”. Esto quedaría
mas claro, viendo los casos particulares, que han sido los patrones que he
seguido yo en mi lectura:
109
Página de valencia "9" avanza 7 = "7" Página de valencia "9" retrocede 10= "8"
Página de valencia "8" avanza 8="7" Página de valencia "8" retrocede 9="8"
Página de valencia "7" avanza 8 = "6" Página de valencia "7" retrocede 9=”7”
una valencia igual a “9”, es decir, hay un salto de páginas igual a 18, que se da
porque busca la próxima página de la misma valencia, pero debe contar con la
característica de ser par o impar, según de donde haya partido. Esa es la precisa
razón por la cual el salto es el doble del común. De esta manera, si sumáramos
los dígitos de este guarismo (1+8), obtendríamos “9”. Son casos particulares que
pude percibir, en aquellos momentos en los que los saltos de páginas de una
en aquellas páginas de valencia “7”, así cuando de una ilustración, pasaba a otra
inmediatamente.
Pero por mas que mi intento fue persistente, el resultado fue evidente. Es decir,
-Sr. Robbins, tal como pensé. Usted empieza a entender el mecanismo de nuestra
110
Sin saber como preguntarle, privado de mi voz y encima sin la página
soy mas que un espíritu sin paz. Ni siquiera puedo ser como aquellos espíritus que
deambulan por la tierra, aunque no tengan un paraíso o infierno que los acepte –
manifestó ahogando la angustia que lo torturaba-. No soy mas que un espíritu que
confirmando.
dejarme vivo sin siquiera poder acompañarlos. Viví el resto de mi vida sumergido
espíritu errante, sin destino –las palabras que páginas atrás parecieran tan
-Pero... ¿Por qué puedes comunicarte conmigo y de esta manera? –pregunte sin
-Por alguna extraña razón, me enteré que un afamado escritor relataría los
información. Tal vez para afrontar el amargo recuerdo que vivía en mí. Si bien yo
111
era un viejo para aquella época, no tenía problemas de memoria
desafortunadamente.
-¿Quiere decir que revivió cada detalle nuevamente? -Pregunté sabiendo que mi
-Sí, por supuesto. Pero lo que no mencioné es que ya estaba muerto para ese
entonces... bueno, era un espíritu sin cuerpo, tal como ahora –expreso con una
-Sé lo que esta pensando Sr. Robbins. –prosiguió en la página 179-. Pude
comunicarme con el Señor Defoe de la misma manera que con usted. En todas
presencia, pero poco a poco nos empezamos a entender, y trabajamos muy bien
en equipo.
-¿El hecho de que nuestros nombres equivalen a 8 hizo posible que nos pudiera
contactar?
nombre he sido signado por este número que no es mas que la representación de
lo “infinito” si lo voltea 90°. Infinito ha sido, y sigue siendo mi sufrimiento, así como
la memoria de aquellos amargos momentos que usted ha leído en las páginas del
señor Defoe.
112
-Si bien conozco la historia, no he leído el libro en su totalidad. Creo que usted
-Entiendo que usted pueda estar un tanto molesto conmigo, Sr. Robbins. Pero
admiración.
desgracia. A medida que avanzaban las páginas, yo sentía cada vez mas que el
en una misma página. Usted bien sabe que mis manifestaciones son en las
páginas cuya valencia es “8”. Esto significa que si me manifiesto en esta clase de
-Por ahora puede decirme H.F. No hace falta saber mas, Sr. Robbins.
al fondo de la cuestión.
-Si usted observa bien la ultima página del libro, se dará cuenta que en esa página
son muchas las valencias 8 que se aglutinan ahí. Pues, ese fue el
113
interrumpió su relato para luego continuarlo en la página 197-.Cuando
sucedido aun.
-Cálmese Sr. Robbins, debo admitir que no fue muy correcta la manera de llamar
he dicho que yo estoy aquí por ayudar a redactar este relato al Sr. Defoe.....
podría ayudar.
-Así es mi estimado Sr. Robbins. Yo he sido absorbido por estas páginas por puño
y letra del Sr. Defoe. Quizás usted, pueda romper este maleficio cuando llegue a la
última página.
traté de apartar mi vista del libro por un instante. Y me asomé por la ventana, no
que veían mis ojos: desde mi edificio pude distinguir claramente, que a su
114
-¿Debo suponer que ya estoy en la otra dimensión que H.F. me había
decidí que lo más conveniente sería analizar todos los elementos de los cuales
disponía, y así dilucidar todos los patrones de esta funesta experiencia. A esta
altura, ya sabía claramente las valencias de las páginas, así como los posibles
saltos de páginas que podría tomar. Pero aun faltaba conocer el significado oculto
modo, aparecieron en la página 196, bajo el impulso de mi mente, tres cosas que
Ya antes había descubierto que “epidemia” tenia valencia “8”. Así que procedí a
supe que lo que H.F. me quería mostrar es que todo lo que responde al valor 8,
dejan de ser identificadas con el infinito cúmulo de malestar y terror que provoco
115
Aún aturdido por la abrumadora cantidad de conjeturas desplegadas en la
tormento atroz provocado por infames bubones prominentes en su cuerpo. Ante tal
ese mensaje que me indujo a mirar por la ventana. Puesto que, H.F solía
comunicarse por medio de las de valencia 8. Por un instante pensé que al tratarse
página 195, donde nuevamente pude vislumbrar un mensaje. En este pude leer lo
siguiente: “peste bubónica”. Por consiguiente, ya sabía lo que debía hacer. Sin
palabras:
116
Peste: 7.5.1.2.5=20; bubónica: 2.3.2.6.5.9.3.1=31 Por lo tanto, de la suma
dígitos (5+1), pude descubrir que su valencia era 6. Si bien no entendía que
podría significar este enigma, supuse que lo más conveniente seria dirigirme hacia
algunas de marcada pobreza, mientras que otras no tanto; eran marcadas por
para luego ser clausuradas. Era angustiante oír los llantos y gritos de aquellas
develó las páginas 188 y 189, mas no ocurrió lo que yo esperaba, es decir, H.F.
seguía sin dar señales. Tan solo pude observar puntos suspensivos en la página
188, pudiendo así, interpretar que H.F. no tenía nada que decir, o que no querría
aunque no supiera por que razón lamentaba su incomunicación. Puesto que esta
117
una imagen bastante perturbadora: yo me encontraba en medio de la aldea que
había visto por la ventana. Esto me llevó a pensar nuevamente en la incógnita del
número seis como portador de algún tipo de mensaje. Ya había entendido que los
como ahora en la página 189. Pero los mensajes de valencia 6 eran mas reales. Y
esto me hizo pensar que se trataba de un numero perfecto, ya que se trataría del
portal que podía unir ambas dimensiones en un punto, en una recta, o tal vez en
del libro, generando así un espacio intemporal para quien dispone de dichas
herramientas, es decir, yo. Pero la verdad de este enigma no puedo brindarla yo,
mas si puedo suponer que estoy atrapado en alguna dimensión, mas me veo
Sabiendo que si quería que esto acabe, debía terminar el libro cuanto
antes. De esta manera, el libro dio vuelta sus páginas, deteniéndose entre la 206
nuevamente. Pero eso no fue lo que ocurrió, sino lo que hacia ya bastante no
sucedía: en la página 207, surgió una imagen mostrando la aldea alrededor del
edificio, que yo había visto por la ventana. Demás está decir, el sobresalto
experimentado por mí. No por la escena en si, sino por sospechar que ya era parte
de ese libro.
118
asomé a la ventana sin poder ocultar mi sorpresa al descubrir en las calles el carro
de la muerte, que debería llevar unos veinte cadáveres; pero lo peor era revivir la
angustia de aquellos aldeanos que debían entregar los cuerpos de sus seres
Una vez más, las páginas del libro giraron rápidamente hasta detenerse
entre la 224 y la 225. Sin embargo, H.F. no daba señales de vida... ¡perdón! Quise
aquejando; pero lo que creí ver en esa ilustración, aun no había ocurrido, o eso
era lo que yo suponía. Ahí estaba yo, de cuerpo entero, luciendo prendas de un
Pero mi sorpresa fue aun mayor cuando descubrí, que mi ventana dejó de
ser la del departamento del octavo piso, en que yo vivía, para convertirse en la de
una casa mas en aquella aldea. Creía que me estaba volviendo loco, no podía
119
no estaba mas en mi domicilio. Al menos las hoscas paredes de barro de la casa,
contrario.
relato a H.F., dado que había dejado de aparecer desde la página 197. Y en su
posible? Ahora puedo hablar sin problemas. Eso quiere decir que indudablemente
palabra era a H.F. Pero este ya se había ido. De esta manera, comencé a analizar
transcripta la ultima página de “Diario del año de la peste” donde al final se podía
leer:
esta manera aquellos elementos de valencia 8. Por lo tanto, pude inferir que de la
120
numerológico vale 8. Así como la sumatoria de las equivalencias obtenidas en los
-Maldito seas, volverás a este condenado lugar. Lugar del que no tendrías que
haber salido.-exclamé a viva voz, al tiempo que tomaba una lapicera y escribía mi
parecía ser la última página de una novela o algo por el estilo. Este, al parecer sin
percatarse de mi presencia ordenó todas las hojas de las que constaba la obra; y
FIN
121
Si querés, voy yo...
Por: Selvático
N
unca hubiera podido imaginar que al ingresar a ese Banco me
un ascensor.
- Lo tomo. -
entendido el camino a seguir. Pero debía llegar a esa oficina. Así que me armé de
clausurada por no se que arreglo. Así que, en ese sitio, un señor muy amable me
122
explicó que podía seguir derecho y en el quinto pasillo, no estoy del todo segura si
- No señorita. Por ese usted va al piso 22 pero del edificio “Juan José Paso”.
“Hernandarias”. En ese sitio toma el ascensor y sube al piso 29. Al bajar debe ir al
pasillo tercero a la derecha del ascensor que la comunica con el piso 27 del
Me debo haber quedado varios segundos con la boca abierta, en algún tipo
de ridícula mueca, pues el hombre se fue protestando entre dientes que para que
Cuando llevaba algo así como media hora subiendo y bajando por distintos
desde hace una hora y media y ya no tengo la mas remota idea de donde me
123
- No seas tan pesimista. Tal vez encontremos a un empleado que tiene que
Decidimos que cada uno tomaría uno de los dos pasillos que comenzaban al
final de ese pequeño descanso. Así lo hicimos y como si fuera una película
En una de esas tantas vueltas me encontré con tres hombres y dos señoras.
tampoco pudimos salir. Suerte que yo traía el equipo de Mate preparado con un
termo de los que se enchufan a la electricidad, no salgo a ningún lado sin el, y
de que en algún momento encontremos a algún mocito de este lugar y nos ayude
- ¡Pero esto es inconcebible! ¿Cómo puede ser que nadie de las personas
que se supone nos deben indicar a donde debemos ir no sepan nada de nada?-
las oficinas del Banco y por lo tanto se quedan cerca de las salidas para poder
124
regresar a sus ranchitos. La segunda es que este inmenso granero puede estar
ubicado en alguna especie de intersección cósmica que hace que diariamente las
Pasados varios minutos llegue a lo que parecía ser un hall muy grande. “Un claro”
- ¡Cómo puedo salir de este lugar! – Mis palabras retumbaron por las cuatro
paredes y se metieron por los pasillos. Como por arte de magia escuché a alguien
Terminado de decir esto salió por la puerta que tenía detrás cerrándola. Corrí
Dentro había otras cinco puertas en abanico y ninguna indicaba cual era la de la
temer que esto no tendría fin y jamás podría salir de ese endemoniado lugar.
puse delante de las cinco puertas y apuntando con el dedo índice elegí de la forma
más clásica.
Cuando el destino eligió una, la abrí y entré. No era la biblioteca, pero al menos, al
final del largo pasillo, pude ver a mis “amigos” los ascensores. Tomaría uno hasta
la planta baja del edificio y seguramente, desde ese lugar, se me haría más fácil
125
encontrar la salida. Ya, a esa altura, comenzaba a sentir síntomas de
claustrofobia. Corrí alegre hacia ellos y al llegar pegué un grito desgarrador. Los
ventanas como para poder salir por ellas e intentar ganar la calle como una
pared. ¡Oh sorpresa! No era una pared. Era una especie de portón disimulado y al
abrirlo había una escalera con un cartel en la pared que especificaba: “Escalera
de servicio”.
recorrer las escaleras cuesta abajo. Según mis cálculos, debía haber bajado entre
De pronto pude observar una puerta. Era la primera que parecía no estar
gran sala en donde había mesas y sillones de estilo antiguo. Pasé, y a pesar de
trabajo, es la primera vez que vengo ya que el empleado que se encarga de estos
126
trámites está enfermo. Entré a las 10 de la mañana y todavía estoy aquí sin poder
- Has tenido mas suerte que yo. La esperanza de completar mi trámite la perdí
dijo que como no tenía casa en donde vivir lo hacía en la cocina de ese piso del
Banco. Por esa razón nunca se preocupó en averiguar como hacer para irse.
Le pedí a Cecilia, así se llamaba, que nos quedáramos juntas para seguir
Mientras caminábamos por los interminables pasillos, estilo laberinto del Rey
para ir en mi lugar:
127
Una inmensa sala circular me regresó a la realidad. Pero lo realmente increíble
- Como no.- Respondió muy amablemente y con una extraña sonrisa en sus
Creo que no respondimos muy rápido. Miré con ojo clínico al sujeto e intenté
averiguar:
- ¿Qué papel? -
estuvieron les entregaron un papel para poder retirarse, firmado por el Jefe de
Sección.-
Cecilia, algo mas calmada, me tomo del brazo para frenarme y en tono
conciliador comentó:
necesitara. -
- Debe ser un empleado nuevo, señorita, y por tal razón no conoce las estrictas
128
Banco sin la debida autorización. – Nos respondió pausadamente y sin quitar de
forma lo mas calmada y amable posible le relaté al señor que tenía delante todo lo
pienso dar un paso al costado y mirar para otro lado. Hay muchos infractores en
este lugar que permiten esquivar las leyes como para que yo me convierta en uno
mas. Lo siento pero sin la debida autorización no se pueden ir. Buenas tardes.-
Terminado de decir esto, borro su sonrisa de la cara, se dio media vuelta, abrió
vociferé:
- De que te va a servir. Insistirá en sus reglamentos. Con las cosas que hemos
realidad.
129
- ¿Qué hacemos ahora? -
- Obvio. -
darnos por vencidas. Seguiremos adelante hasta triunfar.- Exclamé con el brazo
- Faltan dos minutos para las cinco y cuarto. Es la hora de salida de los
empleados. -
En ese momento le pedí silencio a Cecilia. Estaba escuchando algo así como
mejor, observé que un reloj, que estaba en una pared, daba las cinco y cuarto.
Realmente, aún hoy, no sé como sucedió. Por arte de magia comenzaron a salir
llegué a descifrar fue: “Por fin se termino el día”. Sin saber como me sentí
arrastrada por esa marea humana, por esa tromba huracanada que salía en todas
por una puerta o atravesamos una pared. Pero estaba a salvo por fin. Intenté
130
- ¿Estás Bien? -
- Si, gracias. Estamos afuera... ¿No es así? – Y agregó: - ¿No es una ilusión
óptica? -
- No Cecilia, salimos. -
Nos fuimos caminando juntas hasta la parada del colectivo. Antes de doblar en
la esquina. Mire para atrás y observé el frente del edificio, del maligno edificio.
131
SOÑAR CON LA
MUERTE PUEDE
RESULTAR
PELIGROSO
Por: Piricho
M
is fuerzas están llegando a su límite. El filoso borde del
contra una pequeña saliente, pero no puedo. El viento caliente que asciende
desde el río de lava que corre a unos cincuenta metros debajo de mis pies, insiste
hacen más que aflojar sus raíces muertas. Pienso en la horrible posibilidad de
132
una posibilidad y trataré de aprovecharla. Me concentro, debo lograrlo, de ello
depende mi existencia. Cierro los ojos. Dejo de ver aquel paisaje que se extiende
entra grises y rojizos, para focalizar mi atención en un solo objetivo. Creo que lo
lograré...
resulta más difícil conciliar el sueño. Temo por mi vida, pues no sé que sucedería
mis problemas personales, ahora sufro también por estar exhausto. Mi cuerpo ya
como mi esposa duerme con placidez, soñando probablemente con algo que
prefiero no confirmar. Otra vez lo mismo, levantarme, bañarme para que junto a la
levantaba conmigo todos los días, me servía un café con tostadas recién hechas,
saludaba con una sonrisa, ansiando ya mi regreso. Hoy las cosas han cambiado, y
creo que nadie puede comprender el hastío que esta rutina solitaria me produce.
comodidad que le produce a Marisa tener quien la mantenga. Sólo eso. Durante
los primeros tiempos buscamos un hijo que no llegó. Los análisis que nos hicimos
133
dicen que no es por mi culpa, pero ella no pierde la oportunidad de echármelo en
cara, como si no fuera yo quien sufre más esta tristeza. Al manotear el picaporte
que pasa entre ellos, aunque no pueda demostrarlo. Tampoco lo preciso. Sus
cuando Marisa no muestre mayor interés en intimar con Lidia. Es más, no pierde la
oportunidad para criticarla. Yo no sé que hace Walter con una mujer tan insípida,
él es un hombre tan... dice Marisa cada vez que los despedimos, sin completar
jamás la frase ¿Tan qué? ¿Tan qué, más que yo? ¿Pensará Marisa que no la
en mi contra. Pero... ¿Por qué ella no me pide el divorcio? ¿Por qué no nos
separamos? Ella por comodidad. Yo por este humillante amor que aún siento.
induce un trabajo en el que sé que cualquier esfuerzo por avanzar resulta inútil.
indicando que ellos no han vuelto todavía. Entro. El living esta impecable y la
con la que Marisa rocía la casa cuando esperamos invitados. Sobre todo a Walter
que repite hasta el cansancio la misma cursilería: ¿De donde sale el olor a
134
violetas, si en esta casa solo veo una rosa?. Marisa le regala una sonrisa y una
beso. Cierro los ojos y me deslizo hasta su cuello. Mi intención es clara. Ella se
corre y me indica que me bañe. Tenés olor a cigarrillo -me dice- Ah, y apurate por
visitas, solíamos escuchar música. Hoy el único sonido que se oye, es el del
secador de cabello. La veo mirarse al espejo y deduzco que no usa el aire caliente
para secarse el pelo, sino para inflar su vanidad. Está radiante. Se acomoda el
escote y sonríe lujuriosa. Sé que no piensa en mí. Suena el timbre y Marisa corre
chispeante falsedad. El otro, aquel con recibe a Walter, es mudo, oculto, como su
relación.
La cena transcurre entre temas tan banales como aburridos. Lidia se ríe sin
consciente de ello y lo lamento. Walter apura la cena, porque debe llevar a Lidia al
aeroparque. Viaja para ver a su madre y estará fuera dos semanas. Marisa,
diligente, comienza a levantar los platos. Advierto la lascivia de sus miradas que
se cruzan. Saben que son dos semanas para ellos. Marisa busca una excusa para
no perder tiempo. Dice que al otro día a la mañana temprano, se levantará para ir
Marisa y Walter llevan las cosas a la cocina. Entre el ruido de los platos estallan
135
sus carcajadas. Ya están gozando lo que les espera. Los despedimos. Marisa
insiste como siempre: Yo no sé que hace Walter con una mujer tan insípida, él es
un hombre tan... Odio que jamás termine esa frase. Odio la incertidumbre.
importa. Ahora comienza otra lucha. Tengo que dormir, y tratar de descansar.
ha pasado desde que cerré los ojos intentando conciliar el sueño, pero ya empiezo
...Mis pensamientos son ahora más claros. Sin duda, ya estoy viviendo en
pesar de que la rebelión ha sido sofocada. Corren de un lado al otro, entre gente
Las mujeres aprietan contra sus largos vestidos a los niños, que tratan de sacarse
las manos de sus madres de sobre los ojos. Ellas intentan impedir que vean lo que
rostro. A unos quince pasos, se acomodan los seis fusileros. Casacas color verde
oscuro, con doble abotonadura dorada, gorros de piel negros, pantaletas blancas,
botas negras de caña alta. Son Húsares del Tercer Regimiento. Seis justicieros y
136
primer teniente, que se acomoda al costado de la fila, con el sable en la mano.
Como no podía ser de otra forma, yo soy uno de los protagonistas de la historia,
el sable, que queda apuntando al cielo. El silencio gana la plaza. Los hombres y
para ocupar su posición en el escenario, el sudor me brota con abundancia por los
contrayendo los glúteos. Tengo que escapar, mas no sé si esta vez lo deseo. De
alguna vez por todas debo saber qué sucede si el sueño sigue con su argumento
hasta el final. Me dejo llevar. Miro de reojo al primer teniente, esperando que el
incrementando. Otro sacudón. Abrí los ojos y vi como Marisa me sacudía del
-No sabés lo que pasó... –dijo intentando una pausa en el lloriqueo- Es horrible,
horrible, horrible!!!
zarandeo.
137
Se alejó rumbo a la calle repitiendo sus últimas palabras. Yo me recosté,
pensando que nunca hubiera creído que algo así podía suceder, y todo por dejar
que el sueño terminara. Lo que nunca imaginé, por cierto, es que podría serme tan
útil. Esta vez estuve del lado correcto. Para otra oportunidad deberé cuidarme, y
ver bien cual es mi papel, porque soñar con la muerte puede resultar peligroso.
138
UNA EXTRAÑA
PROPUESTA
Por: Hobbes
H
a caído la noche en una urbe cualquiera, suntuoso centro del
hijos del "franquismo" y mayo del 68, esponja de ensoñados inmigrantes, capital
casco antiguo, renovado bajo coste de subvención, hay un pequeño rincón que
parece vivir aislado del mundo, a él no han llegado las olímpicas renovaciones ni
él, una pequeña, casi ridícula fuente, acompaña a este en su llanto, con un
pequeño y suave murmullo que junto a algún gato despistado dan vida a la plaza,
139
estudiantiles en busca de fiesta económica, el resto de la semana se convierte en
busca de alguien con quien compartir esa abrumadora soledad, suelen estos
acabar de madrugada en el bar que cierra el callejón, el que más tarde cierra y
conocido como el bar del olvido, debido esto a que cuando llegan a el los
copas, suelen haber olvidado o mejor dicho, ahogado sus penas, es un bar
sin ningún tipo e estética, adornan las paredes fotos de una peña futbolística de
tras la barra, discute con dos taciturnos el anual partido del siglo entre Barça y
contempla en una copa el subir de las burbujitas, esperando que una de estas
llegue arriba, estalla y salga el genio, pero el genio no sale, por que el genio esta
ahogado frente a ellas, al fondo en las mesas, un cuarto noctámbulo, Don Nadie,
de estética skin, con apenas edad para votar, duerme por fin tranquilo,
botella que ha caído con él, el otro sobre la mesa sujeta una foto, la foto de una
Don cojo para siempre, este entreabre los ojos y contempla la foto, se le presta
140
aparece y desaparece sin más, luego cae dormido, ya no le abruma el
ebrio que desparramo la vida de su novia en una cuneta. Poco a poco, entrando la
madrugada, los hombres grises abandonan el local, el Sevillano con una lánguida
mirada contempla a Don, hijo del barrio, lo conoce de crío, sabe su historia y no
lo coge, es el padre de Don, pregunta por él, cuelga, llena las neveras, recoge y
Don, sin abrir los ojos balbucea un, no puedo, con estima el Sevillano lo
agarra por las axilas y le ayuda a levantarse, sujetándolo por la cintura, con la otra
mano recoge la muleta y le ayuda a salir, no sin antes ofrecerse para llevarlo a
casa, a lo que Don responde con un no, no soy un inútil, una vez en la calle, se
unos metros hasta la plaza y se sienta en un banco, deja caer la odiosa muleta al
corazón con sus iniciales y las de la fallecida chica, por un momento Don sonríe, el
desaparece al llegar a este con la mano, suelta un gruñido, saca un papel del
alcohol, sentado en el banco, doblado sobre sus rodillas, babeando bilis, advierte
141
unos zapatos salpicados de sus restos, se respalda sobre el banco, mientras,
-¿¡y!?
-¿¡?!
- Aunque te dijera quién soy no te lo creerías, pero eso no importa, mira hijo, serás
lo que quieras, pero a cambio deberás demostrar que eres mejor que los demás.
- ¿Umm, dinero?
- Deacuerdo, pero deberás ser mejor que los demás, no lo olvides, nos
hacerse preguntas, ¿mejor que los demás, y qué es ser mejor que los demás?¿Un
142
kilo? Ja, ja, ja en fin, tampoco pierdo nada, se mira la peta con extrañeza, no sé,
no sé, esta maria, lanza el peta, ahora mas despejado, recoge la muleta, se
caminar, durante un largo rato pasea su soledad sin rumbo, desorientado en sus
de casa, empieza a subir las escaleras, las odia, llega al cuarto piso, observa la
hace frío arriba, pero no le importa, nada le importa, deja la muleta y se sienta en
encanta contemplar el amanecer, piensa, piensa que este podría ser el último, con
un pequeño balanceo hacia adelante acabaría para siempre con este eterno dolor,
durante unos segundos lo considera, acabar con todo, de una vez por todas, -
problemas, ante la amargura eterna de ese recuerdo?, Cómo diría Nietsche, " la
espera del eterno retorno de lo idéntico”, sus padres y sus amigos ¿qué
de los que tenía cerca?, Pero, acaso, ¿no morirán todos?. ¿No es la vida el
camino más largo a la muerte? , la vida, ¿qué es la vida?, ¡ Serás lo que quieras!,
¡Ja! , ¡ Él solo quiere morir!, ¡ Dejar el tormento!, ¿ O no?, Su familia, sus amigos
143
¿les haría a ellos lo mismo que se ha echo a él, no, no lo haría, no se tiraría por
hoy, por lo menos hoy no, aunque la vida no sea ese camino de rosas que le
leído tanto que creía que se estaba volviendo "majara", tantas y tantas cosas por
hacer, pero ¿qué hacer?, ¿Ser mejor que los demás?. Es una buena tarea, total,
no tiene nada mejor que hacer se dice así mismo, debería intentarlo, quizá haya
sido la marihuana, quizá no ha habido ninguna visita, pero sí, sí era tan real el
dinero, ¡ ja!, ni se lo cree, pero la propuesta es una buena propuesta, pero, ¿ ser
Estos se forrarán, ¿son estos, acaso, los mejores? No, no puede ser, debe de ser
otra cosa, debe de ser... ¿qué debe ser?....un portazo arranca a Don de sus
fabrica, eso, trabajar, debería empezar hoy, desde arriba contempla el despertar
de la ciudad, poco a poco los hombres grises vuelven a su ajetreo diario, y piensa,
piensa que quizás debería empezar por ser como los demás, debería dejar de ser
un inútil, empezar a trabajar, pero ¿donde?, Quizá empezar por asistir a las
tediosas recuperaciones del hospital, le duele, le duele ser inútil, ser cojo, ¿o quizá
titanio y kevlar, quizás sí, quizás el camino a seguir era empezar a ser como los
demás, empezar por ir a recuperación, bueno, piensa que por hoy ya es suficiente,
144
esfuerzo para quitarse las botas, se tumba en la cama vestido, mira el techo,
apaga la luz, mañana será otro día, afuera ha amanecido ¡que no es poco!.
Son las cuatro de la tarde, hoy podría ser un día cualquiera para la madre
de Dan, pero no, es un día muy especial, está con los ojos llorosos de ilusión, mira
que por necesidad, en silencio recuerda una vieja frase, "un viaje de mil millas se
empieza con un simple paso", y hoy está dando ese paso, ese primer paso de un
largo viaje, hasta ahora restaba los días, ahora empezaba a sumarlos, por la
muleta, se levanta, abre la puerta y se lleva una gran sorpresa, es Chico, un viejo
este quiere le llevará cada día en coche a recuperación a cambio, Don, deberá
levantarse cada día temprano pues Chico trabaja por la tarde y solo podrá llevarlo
por la mañana.
Ha pasado un año desde la extraña visita, Don regenta el Bar del Olvido,
ahora cerrado por vacaciones, lejos de allí reposa en compañía bajo un cielo
sentado, esperando que ocurriera lo que tanto tiempo había deseado. Se levantó
aunque hay que reconocer que en Finlandia, los veranos no son muy severos, no
145
estaba de más. Silgrid volvía con el papel de fumar, se disculpó en un castellano
miraba de reojo y sonreía la par que repetía: Vas a flipar, vas a flipar...
aunque Don no pudo dejar de mirar el cielo, oscuro y nítido, luego reposaron largo
rato, mirando las estrellas, en esperando que sucediese. Entretanto recordó el mal
discoteca, luego unas noches más y todo había cambiado, dejó sus
desenfrenadas vacaciones en Ibiza y se fue con ella a ese rincón del mundo a
exprimir los últimos días de verano más los últimos billetes... creyó dormirse en un
convirtió el cielo en una paleta de pintor con vida propia, así permaneció
desaparece sin más, aurora boreal en la eterna noche eslava, como la enigmática
Silgrid... como aquel hombre y aquella insólita propuesta que le había sacado del
146
El Nuevo Milenio Por: Hada Purpurina
vida. Comienzo a caminar sin rumbo fijo. Mi reloj marca las doce del mediodía. Un
sol abrasador cae como piedras arrojadas desde el cielo, sin barreras que lo
tiempo corre. Ha transcurrido ya media hora, aunque el reloj sólo marca las doce y
posible que el sol esté quemando mi piel?". Algo no está bien en este lugar. Pero
¿qué? ¿Qué fue lo que ocurrió? ¿Dónde estoy? ¿Por qué? Mi corazón se llena de
interrogantes al ver tanta tristeza. Y más aún al no saber siquiera si todavía estoy
parada sobre el planeta Tierra. Lo dudo. En la Tierra habría nieve sobre las
árboles y arroyos. Tal vez hasta una playa, un mar, casas, automóviles, animales.
Personas... Pero no, nada de eso está aquí. Sólo un suelo oscuro y arruinado. No
147
Cae la noche y el cansancio comienza a vencer mis párpados hasta
sueño. Tengo una sensación extraña, como si hubiese dormido durante días
enteros. Y así parece ser, porque cuanto más lo intento menos recuerdo lo que
que luego se torna fina llovizna empapa todo a su paso. Comienzo a tiritar de frío,
vasto paisaje, y me siento más desorientada que nunca, como en una nebulosa de
Busco algo, una señal, no sé con exactitud qué, pero busco un algo. La
monotonía.
el tiempo. Pero me doy cuenta de que no. He llegado otra vez a mi punto de
partida. A esa extraña cúpula con forma de tubo donde desperté ayer. La examino
148
y sólo veo un recipiente plateado, sin textura ni otros colores. Creo que no está
especie de nave. Giro mi cabeza y veo un pequeño papel pegado sobre el tubo.
Fue en ese momento cuando recordé todo. Pero ¿a quién voy a contarle
esto? En el mundo ya no queda vida de ningún tipo. Las guerras han destruido
todo. Tal vez algún extraño cuerpo caído del cielo acabó con lo poco que
quedaba. Es exactamente lo que creí que iba a pasar. Siempre lo supe. Pero
nada?
149
Diario de un
chiflado
Por: Dituquien
Introducción
d´Aro”.
Voy a revelar una historia que unas veces es mentira y otras es verdad.
- ¿Yo?
- ¡Sí, tú!
150
- No sé que me hablas
- Si, el día de la fiesta de topo, era colega mío, José. ¿Qué paso con José?
autobús...
- Y por que esperar a que pare. Dije yo, mientras me quitaba la cazadora.
- ¿Eh?
- Es una broma
- No jodas.
Solo había sido una broma y yo pensaba que me tenia que pegar con aquel
Todo esto entre insulto e insulto mientras él decía: “pero chorbo que te voy a
matar”
Una vez nos bajamos del bus, le ofrecí mis apuntes de cartografía, pues me
había dicho que la tenia suspensa, y le deje bien claro que no quería ningún
problema con él ni con nadie de la facultad, todo esto tras saber su nombre y que
todo había sido una broma. Y ahí quedo la cosa con Luis.
Varios días después me dijo que a ver si tenia huevos a contarle la historia
Internet, para hablar con él y contar la historia sin que supiese quien era.
151
Luis me dijo que se la iba a dejar con una nota en la puerta de su casa,
La conversación
con chistes que me mandaban mis colegas, cuando de pronto entró alguien con la
dirección josinguarida@hotmail.com
-Hola
-Hola
-Coño, Joselito. ¿Eres tú?, ¿Que tal por Mora? Pensaba que era mi amigo
Joselito, el de Toledo, al cual hacia mucho tiempo que no veía. ¿Quién te dio mi
un perro.
-¿Quién eres?
- Adivínalo
- Eres Danas
- No soy Jose
- Ah
152
- ¿Que José, el del Antiguo?
- Sí
- Salúdala de mi parte
- Hola
- Danas
- No
- Jotijoti
- No
- Chirily
- No
- Jajja
- No eres danas
- No soy joti
153
- Que mi madre me mando apagar la comida y se me quemo
- No eres jota
- No mira soy una chica de Canarias, que me he confundido, pero cuéntame algo
- Alguna historia
- Una vez monte una yegua brava que nadie había montado nunca
- Jajaj
- Sigue contando
- Jajaj
Fue una broma muy buena, todavía me rió cada vez que la pienso. Como la
de la oveja.
- No sé
- Piensa un poco
- Ah
- Sí
154
- Pos mira no te vas a quedar sin saber como fue la cosa: Yo iba con Fer por la
calle y tropecé con una copa por mirar pa una rubia, entonces tu colega rompió un
vaso y me quería rajar. Pero dijo que había roto por mal sitio y que no podía. Le
iba a pagar la copa, pero no tenia dinero, así que se lo pedí a Fer. Y me dijo que ni
de coña le daba al faltoso ese dinero y que yo tampoco, mientras el tío nos
insultaba. Así que entre insulto e insulto me lo lleve de allí. Fer estaba muy
por allí, para no volver a cruzarme con el tío ese, pero Fer insistió tanto que al final
cedí, me decía que si le tenia miedo que no me preocupase, que le pegaba él.
Entonces cuando pasamos por delante otra vez se oyó el ruido de un vaso roto y
el tu colega vino detrás nuestro con un vaso roto por la mitad mientras decía: “mira
como me dejaste mi copa” Yo se la quería pagar, era un ron con coca-cola. pero
Fer insistía en que esa no esa no era su copa. Y se monto un corro alrededor
nuestro. Fer dijo solo necesito un poco de cacharro mas, así que le dio un trago
un chavalete que estaba por allí, parecía la pócima de Obelix. Y a por él.
mientras oía el móvil, era joti que me llamaba para saber donde estábamos, ya
que me había dado a fer hacia un cuarto de hora diciéndome que tuviese cuidao
Fer intentaba entrarle como podía, pero no encontraba manera, el otro con
seas maricón” le decía Fer al otro, pero este ni pa Dios soltaba el vaso.
Yo le dije que no soltase el vaso y que se fuese que Fer sabia full y le
pegaba unas ostias de la virgen, así que el tío empezó a recular. Había un paisano
155
que llamo a la policía, eso me tranquilizo un poco. Pero lo peor fue cuando Fer
decir que nadie le llamaba hijo de puta y que le daba igual morir pero que las iba a
con el vaso, y yo mientras le sujetaba como podía, incluso caímos una vez y el tío
de mí, y justo cuando aquel tipo cambiaba de mano el vaso, le atizo un puñetazo
En estos momentos llego Joti, sujetando a Fer para que no le pegase mas a
aquel tipo. Luego le miramos la dentadura a ver si tenia todos los dientes y en
efecto solo tenia un poco de sangre por la cara. Mientras sujetábamos a Fer aquel
tipo huyo como viento que llevaba el diablo y nosotros seguimos de copas por ahí
- Pues es la verdad. Lo siento pero tengo que irme ya estuvo bien de tanto rollo
- No te vayas
- Lo siento tengo que irme, que mi hermano necesita el ordenador para hacer las
practicas.
- No te vayas
156
- No déjame en paz. En la facultad no quiero problemas
- No – y cerré la conversación
Luis decirme:
- eh
- a ver que le parece a tus amigos que te rías de ellos de esa manera
- a ver
- Que nos reímos de él, le llamamos “follomucho”, y una vez nos contó que llamo a
su novia por teléfono y esta le dijo que estaba embarazada entonces según cuenta
- no me lo creo
157
Me pase mogollón con Luis según me iba diciendo algo, yo le respondía
fin a la discusión.
mesa, era una nota. “Te voy a matar” Estaba claro que era de Luis y no pude
Luis gritándome que fuésemos al aparcamiento que me iba a dar de ostias, siendo
-Pasa de mi chorbo-dije yo
Por fin llegaron las esperadas fiestas de San Mateo, esperadas con gran
Todo transcurría como todos los años salvo una excepción, cada persona
158
Con ese me mandaron que te lo dijera me tuvieron en ascuas todo San
Mateo.
enrollarme con una gallega impresionante, que había venido a pasar el fin de
semana, entonces se me acercó una rubia, que vino directa hacia a mí casi
- Y eso?¿porqué?
- te conozco
- si es verdad
- por supuesto.
- ¿Que tomas?
- Pero a parte de eso también se me historias tuyas, como por ejemplo que
- Eh
- Jejej
- Noo. Frio frio. También sé que te pitorreabas de todos los chungos en clase,
159
- Bah! ¿que eres amiga de Esther o de alguna de estas?
- También sé que estuvo saliendo con una chica que se llamaba Marina. Y la de la
oveja y la de........
- Mec.
- Jeje
- Pues no
- Lo sé porque hablaste con una amiga mía por Internet. Por que no nos vamos a
- Ok, pero no te mosquees si me piro sin decirte nada. Es que no me puede ver
llego un tipo alto y cuadrado con una pluma por pendiente en la oreja derecha
diciéndome
- Hola
- Hola
- Perdona pero tengo que decirte algo, es sobre la chica que estaba aquí antes
- No peor, mi mujer
160
- Se piro al verme llegar a mí
- Pues mira tío, lo siento yo si hubiese podido me la hubiese pillao, pero si vuelve
te prometo que no
- Pues ya que te has portado bien conmigo, voy a decirte una información muy
valiosa. Te esta buscando uno muy chungo de Otero y van a venir a buscarte en
breves, así que pírate del bar y no digas a nadie que te lo conté, cuando Josín va
- Yo no le hice nada a nadie y a ese que dices tú lo único que hice fue romperle un
- ¿y como lo sé yo ¿
ves que estoy medio pimplao. En ese momento vi a Barragán con su pose para
- Oye tío yo he sido legal contigo te he dicho exactamente lo que había dicho tu
mujer, porque me esta mirando mal aquel tipo, que pasa que no té vastas tu solo
- es colega mío lo que pasa es que como erais dos quiso venir él conmigo, como
161
- ¡Cómo me pase algo a mí o a mi amigo te juro por Dios que te rajo! y me fui del
bar por la parte de atrás, pero por desgracia estaba cerrada, así que salí por la de
adelante todo acojonao por si era verdad lo que me había dicho el maromo aquel
También recuerdo que me dijo que su mujer hacia ese tipo de cosas
cuando estaba borracha la solución era fácil, no dejarla beber y también que era
medio ninfo. En definitiva que se me jodio el rollo con una tía medio ninfo
Yo hasta aquel entonces pensaba que eso era un chollo, pero que va el tío
me dijo que eso te mataba y visto lo que hacia esa tía, se le quitan a cualquiera las
La Factoría
Al día siguiente hice una cena con los colegas y les tuve que explicar lo
sucedió el día anterior ante su incredulidad y me calentaron tanto las pilas que
tuve que contarles todo lo que puse en aquella conversación, menudo telar.
euros por ellas, mientras Chirily daba vueltas por allí como un mono, me hicieron
botellazo a la cabeza.
Luego no me dejaban salir del bar, diciéndome que iban a venir unos muy
162
- no
Hubo un momento en el que Luis se quedo con la cabeza fuera y las manos
una de las personas que más quiero y como vaya alguien a decirle algo de la
broma te rajo.
- si se lo mande yo
-Venga sal-le dije-aquí estoy. Pero no salió nadie. Luego le dijeron algo más a un
amigo mío para que me lo dijese. Decidí partirles las lunas cuando marchase mi
hermano y eso iba a hacer pero gracias a que estaban allí mis amigos
Charlys, mientras chutaba alguna botella por ahí, cosas así, pero la despedida fue
163
El lunes
coleguilla:
-sip
- eh?
- No sé a que te refieres
- Te measte?
- ¿Cómo dices?
Aquello me resultó muy raro pero no esperaba que todo fuese a suceder
como sucedió.
-no
de mí.
-Así que te acuerdas de cosas que sucedieron el año pasado en la fiesta de topo
eh?
-hombre de algo sí
164
-te acuerdas de todas las bromas eh?
- Jejej
- A ver cuéntame bromas que te hayan gastado en San Mateo, les mande a todo
- Si, se lo mande yo
- Eres un cabron
- Que te parece si quedamos este viernes el marido de ella contigo y tu colega del
- Mira tío ya me has tirado abajo con tus bromitas y he quedado mal con mucha
gente.
- Cuéntame mas
- Es mentira
- Si, claro es otra de las guasas de San Mateo. Todo el mundo te avisaba que era
una broma, pero ahora vamos a mandarte bromas sin que nadie te diga si es
- Y que
- No pienso hacerlo
165
- Pos escribe un libro de chistes con todas las guasas que te gastamos hasta que
- Pues estate un mes sin pasar por la facultad, y en la academia tienes que
- O eso o presentar los premios al limón y naranja, contando bromas que te hayan
- Pero que dices. Eso me lo invente yo. Les mande a tus amigos que te lo dijesen.
Así que yo que tu escribiría una historia, una para tu familia, otra para tus amigos y
otra para todo el mundo o un libro, pero tienes que darme la mitad del beneficio
para mí
- Ja
- Si, yo voy a mandar a todo el mundo que se pitorree de ti, para que lo escribas
autobús y la conclusión Luis es un tío de puta madre que ha hecho posible todo
esto.-yo no daba crédito-quieres que digamos algo a algún profesor para que te lo
diga de risas?¿Algo?.
- Pos escribe todo esto, si no tendrás que pagar mil duros a cada uno que te gaste
una broma. ¡Ah! Cada uno que te gaste una broma queda salvado de dar los
premios al limón. Es una norma que no puedes quitar y cada vez que quieras
166
cambiar las normas del juego tienes que hablar con Llamas o con Meli, para que
- Esa es la mayor mentira que se puede decir. Pasa de mí, por Dios te lo pido!
Y entre en la clase.
memorizarla, me creí sin querer todo lo que aquel tipo me había contado y me
enfadaba cada vez que alguien me gastaba alguna guasa pensando que podía ser
obra de Luis. Así que fuese o no fuese bromas mandadas por él, me las empecé a
tomar a mal, tanto que llegue a enloquecer y a apuntar las cosas que veía que me
parecían para contar, como por ejemplo cuando Belar me hizo levantarme en
clase y decir:” caguenros no aguanto mas este pitorreo”, las historias que me
contaban, en fin que todo lo que me sonaba extraño lo apuntaba para luego hacer
una historieta y contarla el día de los premios y como esto no se me daba muy
bien recurrí a viejas historias que había hecho en el colegio por ejemplo el día que
le quemé el pelo a Ángel, cosas de por ahí de juerga, pero aun así no encontraba
la paz y tuve que ir a un psicólogo que me llevaron mis padres por que me veían
Yo para no variar seguía con mi paranoia de que todo era una broma y me
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urgencias, le dije que mis padres me llevaban al psicólogo por que creían que
estaba pasao de meterme pastillas, pero lo único que hice fue comerme una
que todo era una estupidez, por la cual lo estaba pasando fatal, incluso escribí la
historia para mis padres, para que me dejasen de gastar bromas, estuve un mes
Como no soy un buen cómico, decidí hacer este libro para quien lo quiera
tarde salí a tomar algo con Chiri y Coco. Fuimos al Chiri a tomar unas cervas.
Chiri empezó a hablar muy raro y decir frases sueltas como por
-es que venimos de ver una peli, ¿a ver si adivinas cual es?-dijo Chiri.
negro meando, entonces en una de estas se agarro al trozu del negro y este le
empezó a dar de ostias. Y sale del baño y se encuentra con otro y le dice:” ten
cuidao que hay un cable negro pelao que pega unos latigazooosssss”. Estaba
claro, aquel chiste lo había oído antes en la conversación así que dije:”si es
verdad que lo dice Josín el de Otero será verdad”. Ese chiste formaba parte de la
conversación así que me empecé a mosquear y me fui del bar, no me gustaba que
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-¿Vas mañana al concierto? jajaja. Dijo Coco
-No ya sé que es mentira, pero quien hizo la web, vaya como os lo currais.
en la conversación había puesto que Chus siempre me decía que iva a acabar de
ermitaño por ahí perdio, “paya pal monte perdio” con un rebaño de cabras. Jaja
el octavo pasajero, la versión del director (versión del director, estaba claro que
era mentira).Así que me puse a controlar todo lo que pasaba en la calle cada 30
para ver si sacaba otra conversación como la de aquel día, apuntaba todas las
cosas que pasaban pensando que Luis iba a estar ahí haciendo paranoias como
me había dicho, me había mandado escribir todas las cosas para ver si me
acordaba de todo con mis reglas mnemotécnicas y a que me recordaba cada cosa
broma.
Nunca se me olvidará que paso una tía con una garrafa y un embudo por
En ese mismo momento oí el timbre del micro era Carlos venia con una
botella de sidra un tanto peculiar; era verde con una funda blanca y una etiqueta
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-ten cuidado con la sidra que igual te sale disparada.
-ok
Así que cogí la garrafa y la puse en la bañera, por si saltaba, que mejor
Continué escribiendo cosas como que los recatas de telepizza guardan las
la noche en vela hasta que llego mi hermano y me tuve que acostar, pero esa
¿Cómo iba yo a salir delante de todo el mundo a contar una historia para
que se pitorreasen? Yo que soy una persona tímida, introvertida y la verdad con
poca gracia. Era imposible, ni aún poniéndolo todo de mi parte. La única vez que
había hablado en público, fue una vez que hable en misa, leyendo uno de los
evangelios. Buffffffff.
-Rulo, Rulo!
arropaba con la colcha, todo para mí era una pesadilla. Sonó el móvil. Un
Tenía más dinero del que necesitaba, y unas ganas terribles de ver a
Placebo además, luego salir por Santiago, era un fin de semana ideal, pero
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Llego mi hermano y me levantó de la cama.
- No
- Porque es mentira
Por la tarde fui a dar una vuelta con mi hermano en el coche y vi venir un
“alsa” con el nombre mal escrito en el lugar exactamente donde me había dicho
terreno y mi hermano me mando que leyese las matriculas. Ponía ChauCH, como
recordando lo del miércoles cuando no fui a comer con mis amigos porque
pensaba que estaban también en el ajo, fue terrible. Fui a esperarlos al bar y
mientras me tomaba una coca cola y tío se puso a hacerme cortes de manga, me
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sentía abrumado. Antes pensaba que si alguien me hiciese burla de ese modo le
partiría la cara, pero estaba asustadísimo por que ese fijo que era el primo de Luis
que andaba con las manos en los oídos para no oír a la gente, estaba
estaba en mi contra.
-nada
-no, nada
-No
-que nadddaaaaaaaaaa-grite
-no
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Al día siguiente me despertó mi hermano poniéndome un programa de radio
que se llama no somos nadie, presentado por Pablo Motos. Estaban contando
una conversación que tuvo un chico con su jefe por Internet que se llamaba Rubén
estudiante de topografía. Así que metí una cinta virgen y lo grabe haber las cosas
escuchaba la radio por la mañana y luego me gastaba las bromas, de ahí que Luis
me dijera que cada vez que quisiera cambiar las normas del juego tenia que
decírselo a Meli, para que se lo dijese a él y este hablase con su amigo Pablo
Así que por la tarde llame a Meli para que hablase con Luis y que le dijese
que me dejasen de gastar bromas que ya tenia suficiente repertorio para hacer
una historia, pero aún así las bromas cesaron y yo creía que iba a entrar en el libro
Guiness de los Records como el hombre que más guasas le gastaron como me
A las 21:30 sonó el teléfono, era Chus, me llamaba para avisarme de que
Me recordó que Luis me había dicho que tenia que hacer una historieta por
las frases sueltas que me había dicho Chirily en el momento en que Antonio
algo y pensaba que estaba hecho a propósito para escribir esta gran historia.
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Pasados unos días fui a ver a un psiquiatra, allí fue cuando empecé a
sospechar que todo era mentira y hoy todavía confundido, no consigo desvelar
que fue real y que no, así que tenia que escribir esta historieta para intentar
aclararlo, aunque esta claro que fue todo fruto del estrés.
El médico me dio unas pastillas que tuve que tomar a mi pesar, de hecho
de la puerta de mi casa con el fin de impedirme salir, pero no fue suficiente. Entre
historieta, pero no pude pues no estaba nada inspirado lo único que tenia claro era
darme cuenta de que estaba mal así que me levante y me fui del bar a casa. Me
hable con mí ex novia después de mucho tiempo sobre algo que me había dicho
una amiga suya un día en la fiestas de San Mateo, pero sin decírselo y que al día
siguiente pongas una peli, (gente corriente) justo cuando el tío dice:”lo siento
intentarlo”, que casualidad pero hoy en día sé que son todos mentira, incluso
hable con Luis el día de nochevieja y me dijo que no tenía nada que ver, aunque
Hoy en día si le creo, creo que lo que pasó fueron tonterías a las cuales yo
la tele me gastaba bromas, escuchaba los monólogos de cómicos para copiar algo
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y hacer mi propio guión pero hoy en día todavía me acuerdo de esta historia
no? Pos os aseguro que fue verdad en algún momento dentro de mi mente.
Demos gracias a Luis que es un tío de puta madre que ha hecho posible
todo esto.
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