“LA HOGUERA DE LAS VANIDADES” EN LAS REDES SOCIALES

Por: Ruben Julio Conor Huertas, octubre de 2020.

De la novela realista de Tom Wolfe, extraemos ciertas pautas, de esa historia de dos mundos
contrapuestos en una misma ciudad, marcado de apariencias, de imaginar de algo solo externamente
que es adverso o asequible a uno mismo sin siquiera haberlo experimentado –estereotipos-; o
simplemente de auto determinarse en algo que le causa un espectáculo más que algo vivido –
esnobismo-. Estas formaciones de dos mundos o más se dan en una persona, de frivolidades, no
desaparecen se agrietan y se esconden en los intersticios del ser para luego emanciparse o mejor
dicho naturalizarse.
De toda la red de contactos que se tiene, en un principio como amistades o afines, ahora como
“seguidores” dentro de las redes sociales, se puede distinguir como contactos reales y los contactos
nominales. Es la red real, aquellas que en algún momento de la vida se las conoció cara a cara, esa
red de amigos se fortalece como se elimina de la vida del yo, por las mismas razones de la vida diaria,
es una extensión de lazos afines. Es la red nominal, aquellos adscritos, que no se ha generado una
pre relación, algunos son tan extraños como los fans, lo último avivaría el fuego de la vanidad.
De ahí que en las Redes sociales hay que preguntarse ¿la dimensión de los amigos, de los conocidos
que se asocia al yo y que debería conformar una red, una entramada tan vasta y compleja relación a
simple vista? No, es un engaño esa dimensión vasta de relaciones. Las relaciones cara a cara o la pre
relación, son el inicio de esa red. La familia será por antonomasia la red principal con todos los niveles
asociados en la estructura del parentesco. Es por eso, que los consanguíneos están descartados en
esta hoguera, sólo para hablar de los afines y desconocidos personajes.
El lugar de la hoguera será los generalizados “redes sociales” Facebook, Instagram o twitter por
nombrar alguno. La primera vanidad, tener los contactos que registra en cientos y en realidad apenas
se contacta o conversa con unos cuantos del total registrado de los contactos.
Un twittero, él periodista, abogado y auto identificado como el analista en su cuenta de twitter, en un
contexto electoralista, pregunta a un panelista que entiende conceptualmente por “descolonización…”,
el panelista no responde a sus expectativas del analista, este arremete con el candidato, siendo el
analista un correligionario del mismo partido político (indica en el twitter que le critique aquel que dio
la cara y que él tiene más de 70 publicaciones a favor del partido). En twitter algunos de sus contactos
de esta asociación partidaria le reclaman inclusive uno de ellos incita a que le dejen de seguir en twitter
al analista político.
Una feminista conocida en el medio por artículos periodísticos de interesante prosa para criticar
incisivamente al Poder. La misma que se declara lesbiana, defensora de las mujeres y reiteradamente
anuncia ser anarquista; estéticamente rompe los cánones comunes de mujeres citadinas: cabellera
media rapada, uñas pintadas y largas, un maquillaje y atuendo histriónicos algo así como “Cruella de
vil” (personaje de la filmación ‘Hollywoodense’ de Disney “Los 101 Dálmatas”), de hecho, dice ser:
bruja, puta y loca. Prácticamente en las redes le critican poco, pero recibe insultos atribuyendo a su
estética como “la Godzilla”. Se asienta, hoy, en medio radial que la difunde también en Youtube, con
buena audiencia, incluso mayor audiencia de ciertos medios televisivos y periodísticos corporativos,
especialmente en aquellas entrevistas de la farándula política y sus respectivos funcionarios,
figurativamente les “trasquila” públicamente, más allá de sus atavíos clasistas de la conductora, les
desnuda a sus entrevistados que poco o nada falta para que ellos o ellas huyan de dicha entrevista.
Ella misma declara que recibe muchos insultos en las redes y le vale “un rábano” (no le interesa), pero
tampoco le interesa los que le interpelan y le hacen críticas, solo le interesa responder e invitar a los
que están en el poder.
Razonando estos dos casos, la definición de clase social en realidad no existe como se daría de alguna
palabra en el diccionario, son conceptos operativos que pueden variar en diferentes contextos
sociales, y se las entienden más por una posición de clase y relaciones. Igual pasa con
descolonización, que es operativo, anclado en sentimientos. Un momento dado en la historia por
recipientes o pequeños tanques fumigadoras de plantas que se cargan en la espalda, que fue la
sutilidad colonizadora inglesa, pero que no recibió ninguna objeción ni antes ni contemporáneamente,
por lo pragmático del hecho en el desarrollo de la siembra y cosecha agrícola.
En la anarquista, está claro, que está en el círculo del poder, entre el crítico versus el legítimo, donde
más temprano que tarde el crítico será legítimo o se hará del poder político y ese legítimo será su
detractor, su oposición por consiguiente será el crítico.
Facebook tiene estas discusiones de interacciones sociales, además sirve para publicidad sean
académicas, comerciales y de primicia. Sin embargo, la publicidad ahora también está en el Instagram
y las discusiones o mejor dicho en un campo político está en el twitter fortalecida con la primicia. El
Whatsapp es más interno, no tiene los contactos nominales, es la red social real ya que deriva de los
contactos telefónicos, pero también está inundada de la primicia y entretenimiento.
Twitter es un campo político y no es raro que en este sistema tecnológico o servidor se haya instaurado
las cuentas falsas, para aumentar los seguidores, mejor, en tiempos electorales, pero una visión más
reducido sirve como satélite, es decir hacer seguimiento de ciertas personas de interés, sea personal
o corporativo.
Para Justin Rosenstein el ingeniero creador del botón “Me gusta” en Facebook, indica estos sistemas
tecnológicos “explotan y manipulan nuestras mentes” (extraído de: https://www.bbc.com/mundo
/noticias-54343473.amp) él propone para cambiar la conducta social: desactivar las notificaciones para
usar menos estos dispositivos tecnológicos; su uso permanente o más presente en las redes, se
convierte en que eres menos rentable; y se necesita no solo del cambio individual sino de un cambio
en el sistema social, para la cual se necesitaría también del apoyo e iniciativas de las instituciones y
de los Estados.
Esta es una visión apocalíptica, la manipulación nace en los medios de comunicación tradicionales
sean televisivos, radiales o periodismo, que hoy se vislumbra mejor esta manipulación por las mismas
redes sociales, una forma de “contrapoder”, y que sólo es una extensión de esta manipulación. Pero
si uno se acerca más a estos estudios entenderá que es más de entretenimiento el consumo de estas
redes.
Una política de consciencia social en las redes sociales, es difundir que “Todos los medios de
comunicación mienten” (lo hagan o no), de esta manera se creará la duda, una vez instaurada la duda
en el medio el consumidor se verá obligado de descartar el medio o investigar algo más de la
información recibida.
Al final a todos nos brillan los ojos cuando tenemos gente que nos mira, nos aprecian, nos odian, nos
enaltecen, nos encubren y hasta nos mienten; nos bañan del fuego de las vanidades, nos estereotipan,
nos conducen al esnobismo social. Nos ponen en la gama del espectáculo.