Está en la página 1de 16

UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE

MENDOZA

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ASIGNATURA: Derechos Internacional

DOCENTE: Espino Alejandro

INTEGRANTES: Bacalla Cruz Janely


Cubas Rojas Anabely
Cayllahua Dioses Ericka
TEMA: Sistema Interamericano de Derechos Humanos

CICLO: XI

2020
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

ÍNDICE

I. Sistema Interamericano de Derechos Humanos .............................................................. 4

I.1 Qué es el sistema interamericano de DD. HH ......................................................... 4

I.2 La convención americana sobre DD. HH ................................................................ 4

I.3 Los órganos del sistema interamericano de DD. HH ............................................... 7

II. Corte Interamericana de Derechos Humanos .................................................................. 9

II.1 Historia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos .................................. 10

II.2 Composición de la Corte Interamericana de Derechos Humanos ......................... 12

II.3 Estructura de la Corte Interamericana de Derechos Humanos .............................. 12

II.4 Funciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos .............................. 13

II.5 Sesiones.................................................................................................................. 15

2
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

INTRODUCCIÓN

3
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

I. Sistema Interamericano de Derechos Humanos


I.1 Qué es el sistema interamericano de DD. HH
Según el ABC de la Corte Interamericana de los Derechos Humanos hace mención:
Los Estados Americanos, en ejercicio de su soberanía y en el marco de la Organización
de Estados Americanos, adoptaron una serie de instrumentos internacionales que se
han convertido en la base de un sistema regional de promoción y protección de los
derechos humanos, conocido como el Sistema Interamericano de Protección de los
Derechos Humanos. Dicho Sistema reconoce y define los derechos consagrados en
esos instrumentos y establece obligaciones tendientes a su promoción y protección.
Asimismo, a través de este Sistema se crearon dos órganos destinados a velar por su
observancia: La Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte
Interamericana de Derechos Humanos. El Sistema Interamericano se inició
formalmente con la aprobación de la Declaración Americana de Derechos y Deberes
del Hombre en 1948. Adicionalmente, el Sistema cuenta con otros instrumentos como
la Convención Americana sobre Derechos Humanos; Protocolos y Convenciones sobre
temas especializados, como la Convención para Prevenir y Sancionar la Tortura, la
Convención sobre la Desaparición Forzada y la Convención para Prevenir, Sancionar
y Erradicar la Violencia contra la Mujer, entre otros; y los Reglamentos y Estatutos de
sus órganos. (p.7)

I.2 La convención americana sobre DD. HH

La Convención Americana fue adoptada tras la Conferencia Especializada


Interamericana de Derechos Humanos, el 22 de noviembre de 1969 en la ciudad de San
José, Costa Rica, y entró en vigencia el 18 de julio de 1978.

La Convención Americana, también llamada Pacto de San José de Costa Rica es


un tratado internacional que prevé derechos y libertades que tienen que ser respetados
por los Estados Partes. Asimismo, la Convención establece que la Comisión y la Corte
son los órganos competentes para conocer los asuntos relacionados con el

4
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

cumplimiento de los compromisos contraídos por los Estados partes de la Convención


y regula su funcionamiento.

El artículo 1 de la Convención Americana establece dos importantes obligaciones


para los Estados partes: respetar los derechos humanos de todos los individuos sujetos
a su jurisdicción y garantizar su ejercicio y goce. Son éstas obligaciones de exigibilidad
inmediata en el plano internacional. La obligación de respetar exige que el Estado y
sus agentes no violen los derechos humanos establecidos en la Convención. La
obligación de garantizar exige al Estado emprender las acciones necesarias para
asegurar que todas las personas sujetas a su jurisdicción estén en condiciones de
ejercerlos y gozarlos.

La Convención consagra en su artículo 2 la obligación del Estado parte de adoptar


las medidas legislativas o de otro carácter que fueren necesarias para hacer efectivos
los derechos reconocidos en la Convención, si el ejercicio de dichos derechos “no
estuviere ya garantizado en el Estado por disposiciones legislativas o de otro
carácter43. Esta disposición –similar, al artículo 2 del Pacto Internacional sobre
Derecho Civiles y Políticos– fue objeto de una aguda controversia. Un miembro de la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, el Dr. Carlos A. Dunshee de
Arranches, en su “Estudio Comparativo entre los Pactos de las Naciones Unidas sobre
Derechos Civiles, Políticos, Económicos, Sociales y Culturales y los proyectos de
Convención Interamericana sobre Derechos Humanos”44 era partidario de no
incorporarla, porque, en su parecer, podía inducir a los aplicadores de la Convención a
interpretar ésta en el sentido de que los Estados no estarían obligados a respetar y
garantizar los derechos humanos que allí se consagran, a menos que dictaran leyes
especiales al efecto y, además, porque no era necesaria, ya que los tratados se
incorporaban al ordenamiento jurídico de todos los Estados latinoamericanos
miembros de la OEA, adquiriendo así validez interna, lo que permitía que pudieran ser
invocados directamente por los interesados ante los tribunales.

5
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

Según medina y Nash (2007) La Convención Americana consagra, en principio, sólo


derechos civiles y políticos, que se encuentran enumerados en los artículos 3 a 25. En lo
que se refiere a los derechos económicos, sociales y culturales, el artículo 26 no los
menciona por su nombre, sino que se refiere a los derechos “derivados de las normas
económicas, sociales y sobre educación, ciencia y cultura, contenidas en la Carta de la
Organización de los Estados Americanos, reformada por el Protocolo de Buenos Aires”56.
Después de grandes esfuerzos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para
darle mayor relevancia a estos derechos, la OEA adoptó un Protocolo Adicional a la
Convención sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales, (Protocolo de San
Salvador) que entró en vigor el 16 de noviembre de 1957. La Comisión ha controlado el
cumplimiento de esta norma en sus informes sobre países58, pero puede supervisar
también los derechos de esa naturaleza contenidos en la Declaración Americana sobre
Derechos Humanos. La Corte se refirió a esta norma por primera vez en el caso de 5
Pensionistas Vs. Perú.

El catálogo de derechos de la Convención Americana difiere en algunos aspectos de los


de otros tratados generales de derechos humanos. Es posible que éste sea el efecto de ser
un catálogo de más reciente data. Los redactores de la Convención pudieron no sólo usar
como modelos los textos de los Pactos Internacionales y de la Convención Europea, sino
que también examinar la práctica del sistema europeo, que empezó a funcionar en 1953.
Además, el catálogo contiene formulaciones que responden a las tradiciones e
idiosincrasia de los países miembros de la OEA. (p. 31)

Asimismo, Medina y Nash (2007) La Convención Americana es fruto del progresivo


desarrollo del sistema interamericano de protección de los derechos humanos15 y se
estructura en una parte sustantiva y otra orgánica. En la primera se fija un catálogo de
derechos y libertades fundamentales, además de normas relativas a las obligaciones que
asumen los Estados, la interpretación de la Convención, las restricciones permitidas, la
suspensión de los derechos, cláusulas sobre las obligaciones respecto de los Estados
Federales y deberes de los titulares de derechos. La parte orgánica establece los órganos
encargados de la protección y promoción de los derechos y libertades consagrados en el
mismo cuerpo normativo la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos y
mecanismos de control. (p. 17)

6
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

Además, el estudio de la Convención Americana sobre Derechos Humanos nos lleva a


examinar el procedimiento diseñado para operar, idealmente, frente a Estados en que el
derecho prevalece y cuyo propósito es, por excelencia, reparar violaciones aisladas de
derechos humanos cuando la red protectora nacional ha fallado. (p. 17)

I.3 Los órganos del sistema interamericano de DD. HH


El Sistema Interamericano de Derechos Humanos está compuesto por la Comisión
Interamericano de Derechos Humanos (CIDH) y la Corte Interamericana de Derechos
Humanos (Corte IDH).
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)

Según Donnell (2004) La CIDH, al igual que el Comité de Derechos Humanos del
sistema universal, es un órgano compuesto por expertos independientes. La competencia de
la CIDH para conocer casos de violaciones de los derechos humanos proviene de distintas
fuentes, de las cuales las más relevantes son las siguientes:

 Competencia original para conocer violaciones de derechos humanos en todos los Estados
miembros de la OEA, derivada de su Estatuto.

 Competencia para conocer denuncias de violaciones de los derechos reconocidos por la


Convención Americana por un Estado Parte.

 Competencia para conocer violaciones de la libertad sindical y del derecho a la educación,


reconocida por el Protocolo de San Salvador sobre derechos económicos, con respecto a los
Estados Partes en dicho instrumento (art. 19.6).

 Competencia para conocer denuncias de violaciones de la Convención Interamericana para


prevenir y sancionar la tortura, la Convención Interamericana sobre la desaparición forzada
de personas y la Convención Interamericana para prevenir, sancionar y erradicar la violencia
contra la mujer. (pp. 46-48)

La Corte Interamericana de Derechos Humanos


Las competencias de la Corte Interamericana son las establecidas en el Capítulo VIII
de la Convención Americana de Derechos Humanos. Las competencias más relevantes son

7
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

la adopción de opiniones consultivas, definida por el artículo 42 de la Convención


Americana, y el examen de casos contenciosos, definido por los artículos 61 y 62 de la misma
Convención. La competencia consultiva de la Corte Interamericana comprende, rationae
materia, consultas relativas a la Convención Americana y a “otros tratados concernientes a
la protección de los derechos humanos en los Estados americanos (art. 64.1).” En su Opinión
Consultiva OC-1/82, la Corte Interamericana determinó que esta última cláusula no se limita
a los tratados interamericanos en la materia, sino a todo tratado vigente en uno o en varios
Estados americanos, y que tampoco se limita a tratados dedicados al tema de los derechos
humanos sino que incluye cualquier tratado “en que esté directamente implicada la
protección de los derechos humanos”.18 La Declaración Americana de los Derechos y
Deberes del Hombre (Declaración Americana), evidentemente, no es un tratado. No obstante,
en su Opinión Consultiva OC-10/89, la Corte Interamericana concluyó que tiene competencia
para interpretarla “(…) en relación con la Carta y la Convención [Americana de Derechos
Humanos] u otros tratados concernientes a la protección de los derechos humanos en los
Estados Americanos”.

La competencia consultiva de la Corte Interamericana se extiende a dos tipos de


consultas: aquellas que solicitan la interpretación de una disposición o disposiciones de la
Convención Americana o de otro tratado sobre derechos humanos, o eventualmente una
cuestión más general sobre la interpretación de la Convención, y las que solicitan la opinión
de la Corte sobre la compatibilidad de una ley con la Convención.20 Las consultas del primer
tipo pueden ser sometidas por cualquier Estado miembro de la OEA, por la CIDH y, en ciertas
circunstancias, por otros órganos de la OEA, mientras que las del segundo tipo sólo pueden
ser presentadas por un Estado miembro, con respecto a su propia legislación. La Corte
Interamericana también tiene competencia sobre casos examinados previamente por la
CIDH. Esta competencia se limita a casos “(…) relativo[s] a la interpretación y aplicación de
las disposiciones de esta Convención”, es decir, la Convención Americana” (art. 62.3).
Dichos casos pueden ser sometidos por el Estado aludido, o por la CIDH siempre que el
Estado haya aceptado la competencia contenciosa de la Corte Interamericana y que la CIDH
haya cumplido con los requisitos procesales correspondientes (arts. 61 y 62).

8
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

Durante más de dos décadas, la CIDH tuvo una amplísima discreción sobre la sumisión
de casos a la Corte Interamericana. En 2001 entró en vigencia un nuevo Reglamento de la
CIDH, que dispone que toda decisión de esta Comisión relativa a un Estado Parte en la
Convención Americana que reconoce la competencia contenciosa de la Corte Interamericana,
debe ser sometida a ésta, a menos que el Estado haya cumplido con las recomendaciones de
la CIDH o que ésta, por decisión fundada, determine lo contrario (art. 44). Cabe presumir
que, en un futuro próximo, esta reforma producirá un aumento importante en la
jurisprudencia de la Corte Interamericana. En el ejercicio de su competencia contenciosa, la
Corte adopta órdenes, fallos y decisiones de distinta índole, entre ellos, medidas cautelares,
excepciones preliminares, reparaciones e interpretaciones de sus sentencias. Para efectos de
la interpretación de la normativa interamericana sobre derechos humanos, las sentencias de
la Corte Interamericana sobre el fondo de los casos son lo más relevante. La presente obra
toma en cuenta todas las sentencias de fondo adoptadas por esta Corte hasta finales del año
2002, además de referencias seleccionadas a otros fallos y sentencias. Para efectos de la
presente obra se utiliza el término “jurisprudencia” para referirse a las sentencias y otras
decisiones adoptadas por la Corte Interamericana en el ejercicio de su competencia
contenciosa y “doctrina” para referirse a las Opiniones Consultivas de la Corte. (pp. 44-46)

II. Corte Interamericana de Derechos Humanos


La Corte Interamericana es uno de los tres tribunales regionales de protección de los
derechos humanos, conjuntamente con la Corte Europea de Derechos Humanos y la Corte
Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos. Es una institución judicial autónoma
cuyo objetivo es aplicar e interpretar la Convención Americana. La Corte Interamericana
ejerce una función contenciosa, dentro de la que se encuentra la resolución de casos
contenciosos y el mecanismo de supervisión de sentencias; una función consultiva; y la
función de dictar medidas provisionales.

Como hace mención O`Donnell (2004) Las competencias de la Corte Interamericana


son las establecidas en el Capítulo VIII de la Convención Americana de Derechos
Humanos. Las competencias más relevantes son la adopción de opiniones consultivas,
definida por el artículo 42 de la Convención Americana, y el examen de casos
contenciosos, definido por los artículos 61 y 62 de la misma Convención. La competencia

9
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

consultiva de la Corte Interamericana comprende, rationae materia, consultas relativas a


la Convención Americana y a “otros tratados concernientes a la protección de los derechos
humanos en los Estados americanos (art. 64.1).” (p.44)

II.1 Historia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos


En noviembre de 1969 se celebró en San José de Costa Rica la Conferencia
Especializada Interamericana sobre Derechos Humanos. En ella, los delegados de los
Estados Miembros de la Organización de los Estados Americanos redactaron la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, que entró en vigor el 18 de julio de
1978, al haber sido depositado el undécimo instrumento de ratificación por un Estado
Miembro de la OEA.

A la fecha, veinticinco naciones Americanas han ratificado o se han adherido a la


Convención: Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Chile,
Dominica, Ecuador, El Salvador, Granada, Guatemala, Haití, Honduras, Jamaica, México,
Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Suriname, Trinidad y
Tobago, Uruguay y Venezuela. Trinidad y Tobago denunció la Convención Americana
sobre Derechos Humanos, por comunicación dirigida al Secretario General de la OEA, el
26 de mayo de 1998. Venezuela denunció la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, por comunicación dirigida al Secretario General de la OEA, el 10 de septiembre
de 2012.

Este tratado regional es obligatorio para aquellos Estados que lo ratifiquen o se adhieran
a él y representa la culminación de un proceso que se inició a finales de la Segunda Guerra
Mundial, cuando las naciones de América se reunieron en México y decidieron que una
declaración sobre derechos humanos debería ser redactada, para que pudiese ser
eventualmente adoptada como convención. Tal declaración, la Declaración Americana de
los Derechos y Deberes de la persona, fue aprobada por los Estados Miembros de la OEA
en Bogotá, Colombia, en mayo de 1948.

Con el fin de salvaguardar los derechos esenciales del hombre en el continente americano,
la Convención instrumentó dos órganos competentes para conocer de las violaciones a los

10
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

derechos humanos: La Comisión Interamericana de Derechos Humanos y la Corte


Interamericana de Derechos Humanos. La primera había sido creada en 1959 e inició sus
funciones en 1960, cuando el Consejo de la OEA aprobó su Estatuto y eligió sus primeros
miembros.

Sin embargo, el Tribunal no pudo establecerse y organizarse hasta que entró en vigor la
Convención. El 22 de mayo de 1979 los Estados Partes en la Convención Americana
eligieron, durante el Séptimo Período Extraordinario de Sesiones de la Asamblea General
de la OEA, a los juristas que en su capacidad personal, serían los primeros jueces que
compondrían la Corte Interamericana. La primera reunión de la Corte se celebró el 29 y
30 de junio de 1979 en la sede de la OEA en Washington, D.C.

La Asamblea General de la OEA, el 1 de julio de 1978, recomendó aprobar el ofrecimiento


formal del Gobierno de Costa Rica para que la sede de la Corte se estableciera en ese país.
Esta decisión fue ratificada después por los Estados Partes en la Convención durante el
Sexto Período Extraordinario de Sesiones de la Asamblea General, celebrado en
noviembre de 1978. La ceremonia de instalación de la Corte se realizó en San José el 3 de
septiembre de 1979.

Durante el Noveno Período Ordinario de Sesiones de la Asamblea General de la OEA fue


aprobado el Estatuto de la Corte y, en agosto de 1980, la Corte aprobó su Reglamento, el
cual incluye las normas de procedimiento. En noviembre de 2009 durante el LXXXV
Período Ordinario de Sesiones, entró en vigor un nuevo Reglamento de la Corte, el cual
se aplica a todos los casos que se tramitan actualmente ante la Corte.

El 10 de septiembre de 1981 el Gobierno de Costa Rica y la Corte firmaron un Convenio


de Sede, aprobado mediante Ley No. 6889 del 9 de septiembre de 1983, que incluye el
régimen de inmunidades y privilegios de la Corte, de los jueces, del personal y de las
personas que comparezcan ante ella. Este Convenio de Sede está destinado a facilitar el
normal desenvolvimiento de las actividades de la Corte, especialmente por la protección
que da a todas aquellas personas que intervengan en los procesos. Como parte del

11
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

compromiso contraído por el Gobierno de Costa Rica, en noviembre de 1993 éste le donó
a la Corte la casa que hoy ocupa la sede del Tribunal.

El 30 de julio de 1980 la Corte Interamericana y el Gobierno de la República de Costa


Rica firmaron un convenio, aprobado por la Asamblea Legislativa mediante Ley No. 6528
del 28 de octubre de 1980, por la cual se creó el Instituto Interamericano de Derechos
Humanos. Bajo este Convenio se establece el Instituto como una entidad internacional
autónoma, de naturaleza académica, dedicado a la enseñanza, investigación y promoción
de los derechos humanos, con un enfoque multidisciplinario y con énfasis en los
problemas de América. El Instituto, con sede también en San José, Costa Rica, trabaja en
apoyo del Sistema Interamericano de Protección Internacional de los Derechos Humanos.

La Corte vigila el respeto de los derechos humanos de más de 550 millones de


personas que viven en los 20 Estados que actualmente han aceptado su jurisdicción.

II.2 Composición de la Corte Interamericana de Derechos Humanos


Según el Estatuto de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, la Corte se
compone de siete jueces, nacionales de los Estados miembros de la OEA, elegidos a título
personal de entre juristas de la más alta autoridad moral, de reconocida competencia en
materia de derechos humanos, que reúnan las condiciones requeridas para el ejercicio de
las más elevadas funciones judiciales, conforme a la ley del Estado del cual sean
nacionales o del Estado que los postule como candidatos.

La composición actual de la Corte es la siguiente, en orden de precedencia: Eduardo


Ferrer Mac-Gregor Poisot (México), Presidente; Eduardo Vio Grossi (Chile),
Vicepresidente, Humberto Antonio Sierra Porto (Colombia), Elizabeth Odio Benito
(Costa Rica), Eugenio Raúl Zaffaroni (Argentina), Patricio Pazmiño Freire (Ecuador) y
Ricardo Pérez Manrique (Uruguay).

II.3 Estructura de la Corte Interamericana de Derechos Humanos


Según Castañeda M. (2018) La organización de la Corte Interamericana de Derechos
Humanos no ha sido modificada desde su creación. Está conformada por siete jueces de
la más reconocida competencia en materia de derechos humanos, elegidos por la
Asamblea General de la OEA a título personal, es decir, no representan los intereses del
12
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

Estado que los propone como candidatos. No podrá haber dos jueces de la misma
nacionalidad. Los jueces serán elegidos por seis años y sólo podrán ser reelegidos una vez.
La figura del juez ad hoc ha sido utilizada en numerosos casos. Actualmente, conforme al
Reglamento, aprobado en 2009, sólo es aplicable para los casos interestatales, y no así
para las peticiones individuales, como antes ocurría. Si entre los jueces que integran el
tribunal en ese momento ninguno de ellos es de la nacionalidad de los Estados sometidos
a la Corte, se ofrece la facultad de nombrar un juez de su nacionalidad. El juez resuelve a
la luz de las normas aplicables y debe mantener una absoluta neutralidad. La figura del
juez ad hoc en los casos de peticiones individuales fue criticada, porque permitía que se
modificara la composición de la Corte, dando una mayor atención a los intereses del
Estado. Este tipo de antinomia fue combatida ante la posibilidad de que los peticionarios
solicitaran la recusación del juez ad hoc, como sucedió en el Caso Myrna Mack Chang vs.
Guatemala, en el que el Estado sustituyó al juez ad hoc recusado. Asimismo, en el Caso
de la “Panel Blanca” (Paniagua Morales y otros) vs. Guatemala, la Corte decidió “no
admitir la pretendida sustitución del Juez ad hoc”. Actualmente, el numeral 19 del
Reglamento de la Corte dispone que en el caso de peticiones individuales los jueces no
podrán participar en el conocimiento y deliberación cuando sean nacionales del Estado
demandado. La Corte cuenta con una Presidencia y una Vicepresidencia. Los titulares se
eligen de entre los miembros de la Corte por dos años. Pueden ser reelectos. La
Presidencia, entre otras funciones, representa a la Corte; preside las sesiones, y dirige y
promueve los trabajos de la Corte. Asimismo, la Corte cuenta con una Secretaría, cuyo
titular es nombrado por la Corte, por un periodo de cinco años y puede ser reelecto. La
Secretaría contará, además, con una Secretaría Adjunta y personal de la Corte. (Pp.153-
154)

II.4 Funciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos


Dentro de esta función, la Corte determina si un Estado ha incurrido en
responsabilidad internacional por la violación de alguno de los derechos consagrados en
la Convención Americana o en otros tratados de derechos humanos aplicables al Sistema
Interamericano. Asimismo, a través de esta vía, la Corte realiza la supervisión de
cumplimiento de sentencias.

13
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

Supervisión de Cumplimiento de Sentencias

La supervisión de cumplimiento de las resoluciones de la Corte implica, en primer


término, que esta solicite información al Estado sobre las actividades desarrolladas para
los efectos de dicho cumplimiento en el plazo otorgado por la Corte, así como recabar las
observaciones de la Comisión y de las víctimas o sus representantes. Una vez que el
Tribunal cuenta con esa información puede apreciar si hubo cumplimiento de lo resuelto,
orientar las acciones del Estado para este fin y cumplir con la obligación de informar a la
Asamblea General sobre el estado de cumplimiento de los casos que se tramitan ante ella.
Asimismo, cuando lo considere pertinente, el Tribunal convoca al Estado y a los
representantes de las víctimas a una audiencia para supervisar el cumplimiento de sus
decisiones y en ésta escuchar el parecer de la Comisión.

La Corte y su Mecanismo de Supervisión

La implementación efectiva de las decisiones de la Corte es la pieza clave de la


verdadera vigencia y eficacia del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, sin la
cual se hace ilusorio el propósito que determinó su establecimiento. Por ello la Corte ha
considerado que el efectivo cumplimiento de sus decisiones es parte integrante del derecho
de acceso a la justicia. En este sentido, resulta necesario que existan mecanismos efectivos
para ejecutar las decisiones de la Corte.

Como dice Castañeda M. (2018) La Corte Interamericana de Derechos Humanos,


como lo ha indicado Sergio García Ramírez, tiene como funciones jurisdiccionales: 1) la
consultiva; 2) la preventiva; 3) la contenciosa, y 4) la de supervisión, las cuales serán
esquematizadas líneas abajo. Además, cuenta con funciones normativas, al poder expedir
su propio reglamento, y administrativas, respecto de su personal, designación de su
secretario y administración de su presupuesto. (p. 154)

Función consultiva de la corte

Por este medio la Corte responde consultas que formulan los Estados miembros de la
OEA o los órganos de la misma acerca de: a) la compatibilidad de las normas internas con
la Convención; y b) la interpretación de la Convención o de otros tratados concernientes
a la protección de los derechos humanos en los Estados Americanos.(p.155)

14
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

II.5 Sesiones
Por reglamento, la CIDH tiene un compromiso de reunirse al menos dos veces al año
en sesiones ordinarias (artículo 14). Éstas se llevan a cabo en febrero/marzo y en
septiembre/octubre. La Corte ha establecido reglamentariamente que tendrá sesiones
ordinarias y extraordinarias, pero no ha establecido un número mínimo (cfr. Artículo 11
del Reglamento de la Corte). Las sesiones de la Corte en general se llevan a cabo en
febrero, abril-mayo, julio y noviembre. Durante sus períodos de sesiones, celebra
audiencias sobre casos, medidas cautelares, determinados temas o situaciones. (2006,
p.10)

 La Corte celebrará sesiones ordinarias y extraordinarias.


 Los períodos ordinarios de sesiones serán determinados reglamentariamente por la Corte.
 Los períodos extraordinarios de sesiones serán convocados por el Presidente o a solicitud de
la mayoría de los jueces.

15
UNIVERSIDAD NACIONAL TORIBIO RODRÍGUEZ DE MENDOZA DE AMAZONAS
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLÍTICAS

BIBLIOGRAFÍA
Castañeda M. (2018). “El derecho internacional de los derechos humanos y su recepción
nacional”. CNDH: México

Corte IDH. (2018). “40 aniversario de la entrada en vigor de la convención americana


sobre derechos humanos y de la creación de la corte interamericana de derechos
humanos”. Costa Rica

Estatuto de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. (1979).

Guía para recopilar información que respalde una petición ante el sistema interamericano.
(2006). COMISION EUROPEA

O`Donnell D. (2004). “Derecho internacional de los derechos humanos Normativa,


jurisprudencia y doctrina de los sistemas universal e interamericano”. Bogotá

16

También podría gustarte