Motivación para estudiar en casa en la cuarentena social

En los actuales momentos es algo difícil y a nuestros hijos les cuesta

concentrarse, ya que, la situación mundial por la pandemia y el distanciamiento
social, trae consigo muchas distracciones y a nivel académico mucho más,
sobre todo la educación a distancia es la nueva modalidad y que aun no se
acostumbran
Es por ello que les damos estos tips para ayudar a los padres en casa y
hacerles comprender que estudiar o hacer los deberes es una actividad
entretenida, divertida y motivadora.
Dependiendo de la edad que tengan los niños es importante implementar las
estrategias.

Si el niño está en edad preescolar, aprender jugando es una estrategia falible,

realizando actividades que involucre actividades físicas, el canto, el baile,
sentirán entusiasmo, además que son beneficiosos para la salud, son a su vez
una herramienta para mejorar la concentración

Crear rutinas y horarios, al crear una planificación de sus actividades,

ayudamos a que obtenga hábitos y ritmo de estudio, estimula la atención y
organización.

Crear el espacio de estudio. Este debe ser libre de distracciones y con una
buena iluminación, que nada lo perturbe, manteniendo el sitio como espacio
habitual de estudio. Si tiene hermanos, sería magnífico que cada uno estudie
en una habitación distinta para evitar distracción, sino posee otra, construya
horarios distintos de estudio para cada uno.

Las actividades escolares no deben pasar de 45 minutos en niños de 3 a 7

años. Al inicio, lograr la concentración en la actividad no es complejo, no les
lleva más de 5 minutos, el detalle es que su interés va menguando, y no
excederá los 45 minutos. Hay que tomar en cuenta que estar en las mañanas
frente a la pantalla, es una modalidad nuevas para ellos y puede llegar ser
agobiante. A partir de los ocho años, las actividades podrán prolongarse a 1
hora.

Planificar la sesión de estudio Escoger que materia va a estudiar o actividad

realizar, intentar colocar un tiempo límite para hacerlo. Se pueden ordenar
según su prioridad. Conforme vaya adelantando en las tareas te sentirás más
motivado y realizado.

Las necesidades, intereses y formas de aprender de cada niño son diferentes,

y hay que tenerlo en cuenta. “No todos los niños tienen la misma capacidad
de atención ni la ponen en práctica de la misma forma. Hay niños que en
movimiento retienen más, otros lo hacen pintando, a algunos lo que les
funciona es aprender a partir de enseñar a sus peluches o “trabajando” junto
con sus padres.

Premiarlos, una vez acabada la sesión de estudio darle un pequeño incentivo

que lo motive, expresar frases positivas, es también un gran estimulo para que
continúe con sus actividades

Psp MSc. Mariela Arteaga Rietveldt

Doctora Orientación en Conducta