Autoclaves

Las autoclaves funcionan permitiendo la entrada o generación de vapor de

agua pero restringiendo su salida, hasta obtener una presión interna de
103 kPa, lo cual provoca que el vapor alcance una temperatura de 121 grados
centígrados. Un tiempo típico de esterilización a esta temperatura y presión es
de 15-20 minutos. Las autoclaves más modernas permiten realizar procesos a
mayores temperaturas y presiones, con ciclos estándares a 134 °C a 200 kPa
durante 5 min para esterilizar material metálico; llegando incluso a realizar
ciclos de vacío para acelerar el secado del material esterilizado.

El hecho de contener fluido a alta presión implica que las autoclaves deben
ser de manufactura sólida, usualmente en metal, y que se procure
construirlas totalmente herméticas.

El uso de la autoclave consiste en la inyección de vapor generado in situ  o

externamente, el cual deberá desplazar el aire atrapado en el equipo tras su
cierre, es importante eliminar todo el aire antes de cerrar la espita ya que de lo
contrario se corre el riesgo de generar puntos fríos.
Las autoclaves pueden recibir el vapor mediante una alimentación única o
separada.

Actividad 2:

 ¿Qué es la espita?
 ¿Qué es un punto frío?
 ¿Cómo se determinan?
 ¿Qué se debe hacer para corregir los puntos fríos?

El proceso de eliminación del aire contenido en la cámara se puede efectuar

por cualquiera de tres métodos, cómo:

 Remoción por gravedad

 Vacío en pulsos
  Vacío previo

Olla de Presión
De acuerdo a la NOM-054-SCFI-1998, Utensilios domésticos-Ollas a presión-
Seguridad.

Una olla de presión es un recipiente destinado al cocimiento rápido de

alimentos, con tapa ajustable y empaque de hule, que soportan presiones de
vapor en su interior. Deben contar con:

 Válvula de seguridad o tapón fusible,

 Regulador de presión,
 Seguro contra apertura (cuando exista presión en la olla) y
 Partes de sujeción tales como mangos y/o asas.
 Pueden contar con indicador de presión (manómetro) y otros
dispositivos de seguridad.

Debido a su arquitectura, facilita la transmisión del calor por los tres

mecanismos ya conocidos.
La olla de presión tiene un funcionamiento diferente a la autoclave, ya que en
este utensilio una vez colocada la tapa, la cual genera una hermeticidad a
cierta presión interna, y el regulador de presión, el vapor de agua generado
por el calentamiento incrementa la presión interna del sistema lo que produce
desplazamiento del aire encerrado en la olla atreves del regulador de presión.