¡Venga tu Reino!

¡UNA NAVIDAD DIFERENTE!

INTRODUCCIÓN
• Hace un año no pensamos jamás vivir una Navidad así.
o Con muertos.
o Enfermos.
o Solos.
• Pero es una oportunidad para valorar lo que de verdad es la Navidad: el nacimiento de un
redentor.
o Hemos vuelto a sentir lo poca cosa que somos.
o Y por eso lo mucho que necesitamos a Dios.
• La Navidad no es la cena, no son los regalos. ¡La Navidad es el nacimiento de Cristo!
• Hoy quiero proponerles una dinámica para su cena. Que nos recuerde esto.
• Pueden hacerla presencial o en línea con sus seres queridos.

I. COMENCEMOS RECORDANDO EL RELATO DE NAVIDAD

Subió también José desde Galilea, de la ciudad de Nazaret, a Judea, a la ciudad de David, que
se llama Belén, por ser él de la casa y familia de David, para empadronarse con María, su esposa,
que estaba encinta.
Y sucedió que, mientras ellos estaban allí, se le cumplieron los días del alumbramiento, y dio a
luz a su hijo primogénito, le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre, porque no tenían
sitio en el alojamiento. Lc 2,4-7

Cada uno puede responder en voz alta a todas o a alguna de estas preguntas:

• ¿Qué les dice este relato el día de hoy, desde lo que nos ha tocado vivir a todos?
• ¿Qué fibras toca dentro de su corazón?
• ¿Qué le quieren decir al Niño Jesús?

II. QUERIDO FUTURO YO.

A todos nos ha tocado sufrir en este año. ¡Quién más, quién menos!

Pero lo importante es que no sea un año que simplemente pase, como un paréntesis que esperamos
sólo a que termine, sino un año lleno de lecciones.

Por eso les invito a hacer esta dinámica: Querido futuro yo.

Pueden grabarse en video, escribir una carta o simplemente decirlo en voz alta:

• ¿Qué me gustaría decirle a mi yo futuro dentro de 5 años?

• ¿Qué papel te gustaría que jugara el Niño Dios en estos 5 años?
• ¿Por qué cosas estás agradecido(a) hoy que no te gustaría perder?
• ¿Qué has aprendido que no te gustaría olvidar?
• ¿Qué propósitos te puedes hacer?

Terminen con un mensaje de ánimo para su Yo futuro.

III. HAGAN ALGO DIVERTIDO
Finalmente hagan algo divertido en familia. Aquí les doy algunas opciones:
• Hace un concurso de villancicos. Si pueden cantarlos, mejor, si no, simplemente que cada uno
escoja su favorito y lo pongan desde una aplicación.
• Sacar fotografías de otras navidades y recordar anécdotas.
• Hace un concurso de chistes malos. Que los más jóvenes sean los jueces.

CONCLUSIÓN
No permitamos que esta Navidad simplemente se esfume. ¡Démosle un sentido de salvación, de
redención, que es su verdadero sentido!