Está en la página 1de 11

Introducción

La tuberculosis es una enfermedad infectocontagiosa granulomatosa crónica producida por


el Mycobacterium Tuberculosis o bacilo de Koch, que se localiza generalmente en el
pulmón,
aunque puede afectar otros órganos.
Se transmite de persona a persona por inhalación de aerosoles contaminados por el bacilo,
que han sido eliminados por los individuos enfermos al toser, hablar o estornudar.
A pesar de que el diagnóstico precoz y el tratamiento adecuado lograría la curación en la
mayoría de los pacientes, con la consiguiente disminución de las fuentes de infección y el
riesgo de contraer la enfermedad en la población, debido a algunos problemas de
funcionamiento del sistema de salud en el manejo de la enfermedad, como la falta de
detección de los casos existentes, los abandonos del tratamiento y, más recientemente la
aparición de resistencia a los fármacos antituberculosos tradicionales, la tuberculosis en la
actualidad sigue siendo un importante problema de salud pública, por el daño que provoca,
principalmente, como causa de enfermedad y, en menor medida, también como causa de
mortalidad.Aún en el caso que se disponga de una adecuada red de diagnóstico de la
enfermedad y de tratamiento y seguimiento de los casos, existen otros factores que
determinan la ocurrencia de enfermedad como las condiciones ambientales, sociales,
sanitarias e individuales que son factores predisponentes de la tuberculosis.

El hacinamiento, la malnutrición, el SIDA, el abuso de alcohol y las malas condiciones de


vida disminuyen la inmunidad posibilitando la aparición de la enfermedad. También ocurre
que otros trastornos que impactan en la inmunidad predisponen a la tuberculosis, como es la
dia- betes y otros trastornos respiratorios crónicos.

Se calcula que en la actualidad hay 10 millones de nuevos casos de enfermos por año en
todo
el mundo y en Argentina, se notifican aproximadamente 11.000 casos nuevos por año de
esta
enfermedad, mientras que alrededor de ochocientas personas mueren al año debido a la
tuberculosis.
¿Qué es la tuberculosis?
La tuberculosis es una enfermedad contagiosa, producida por una bacteria, que afecta
principalmente a los pulmones,pero que también puede afectara otras partesdel cuerpo.
¿Cómo se contagia?
La tuberculosis se contagia cuando una persona sana tiene contacto cercano diario durante
mucho tiempo con otra persona que tiene la enfermedad y no está en tratamiento. Si esa
persona tiene una tuberculosis en sus pulmones, al toser, estornudar o hablar, elimina las
bacterias de la tuberculosis, que quedan suspendidas en el aire y al ser inhaladas por otra
persona, esta puede contagiarse.
La tuberculosis no se contagia a través del contacto con objetos. Las personas enfermas no
contagian mas la Tuberculosis luego de que ha pasado dos semanas

La región de las Américas ha reducido considerablemente los nuevos casos y las muertes por
tuberculosis (TB) en los últimos 25 años. Sin embargo, se estima que casi 270.000
personas contrajeron la enfermedad en 2015 y casi 50.000 no saben que la tienen.

En el marco del Día Mundial contra la Tuberculosis, que tiene lugar el 24 de marzo, la
Organización Panamericana de la Salud/ Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS)
hace un llamado a trabajar unidos para poner fin a la tuberculosis y no dejar a nadie atrás.

"La tuberculosis es un problema de salud asociado a la pobreza y las malas condiciones


de vida que, sumado a las dificultades de acceso a los servicios de salud, requiere ser
abordado por toda la sociedad", afirmó el director del Departamento de Enfermedades
Transmisibles y Análisis de la Salud de la OPS/OMS, Marcos Espinal.

La población en mayor riesgo en las Américas son las personas con VIH, aquellos en
situación de calle, habitantes de barrios marginales de las ciudades, privados de la libertad y
personas con problemas de adicción, poblaciones que generalmente tienen acceso limitado a
la atención de salud y, si la tienen, no siempre son diagnosticadas oportunamente de
tuberculosis cuando la padecen.

Este año, la campaña de la OPS/OMS, que lleva el lema "No dejar a nadie atrás. Unidos para
poner fin a la tuberculosis", busca promover el acceso a una atención de salud de calidad,
algo de lo que carece más de un tercio de las personas con TB a nivel  mundial.

Asimismo, apunta a fomentar la acción multisectorial para prevenir nuevos casos mediante
el combate a la pobreza –uno de sus determinantes-; mejorar el diagnóstico, el tratamiento y
la curación; impulsar la investigación y la innovación, y poner fin al estigma y a la
discriminación, que pueden ser barreras para el acceso a la atención.
Terminar con la TB es posible

Con el 2,6% del total, las Américas registra el menor porcentaje de nuevos casos de TB del
mundo, frente al 61% de Asia y el 26% de África. La mayor carga de la enfermedad (88%)
se concentra en 10 países de la región. Los casos nuevos de tuberculosis vienen
disminuyendo un 1,8% anualmente y las muertes, un 2,9%, gracias a las medidas adoptadas
por los países de la región alineadas con la estrategia mundial de OMS y el Plan de Acción
de Prevención y Control de la TB de la OPS. Sin embargo, es necesario acelerar el paso para
terminar con la enfermedad para 2030, nueva meta relacionada con la salud incluida en los
Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

"Acabar con la tuberculosis es posible”, sostuvo la asesora regional de la OPS/OMS en


tuberculosis, Mirtha Del Granado, y recomendó enfocar los esfuerzos en los grupos de
mayor riesgo, abordar los factores sociales que influyen sobre la salud de la población, y
ampliar el acceso al diagnóstico y al tratamiento de calidad para todos los que lo necesitan.

Tuberculosis a nivel nacional

Se registran más de 4.800 casos de tuberculosis en el Ecuador

La tuberculosis es una infección bacteriana causada por un gérmen


llamado Mycobacterium tuberculosis.

La bacteria suele atacar los pulmones, pero también puede dañar otras partes del cuerpo.

Según el Ministerio de Salud Pública (MSP), los casos más recurrentes son
respiratorios, sin descartar los casos extrapulmonares.

Tos, fiebre, sudores nocturnos y pérdida de peso son algunos de los síntomas de la
enfermedad.

Según la Organización Mundial del Salud (OMS), desde el año 2000, se han salvado más
de 49 millones de vidas gracias al diagnóstico y a los tratamientos efectivos.

Ecuador combate la tuberculosis

Eliminar la tuberculosis a nivel mundial hasta el año 2035 es el objetivo de la Organización


Mundial de la Salud, OMS.

Ecuador se encuentra en el octavo lugar de los países con mayor incidencia de tuberculosis
en la región de las Américas por debajo de Brasil y Perú, así lo afirmó la representante de la
OMS Aida Soto “Ecuador para la Región de las Américas representa el 3% de la incidencia
de la incidencia, está en la posición 8”.

En este marco, el Ministerio de Salud continúa con las acciones que viene emprendiendo
para contrarrestar esta enfermedad en el país.
En 2016 se notificaron 5.465 casos de tuberculosis en el país. Durante esta semana,
representantes del Ministerio de Salud acudieron al Centro de Rehabilitación Social de
Varones de Guayaquil para dar seguimiento a los 252 privados de libertad  que acoge el
Pabellón Logros, destinado para personas que presenten la enfermedad.

Estas actividades se realizan antes del sábado 24 de marzo, día mundial de la lucha contra la
tuberculosis.

Esta enfermedad se transmite de persona a persona cuando se tose, estornuda o se habla, por
lo que se recomienda cubrirse la boca con la región interna del codo o con un pañuelo al
toser para evitar que las bacterias puedan viajar en el aire y afectar a otras personas. (I)

Tuberculosis en niños y adolescentes en Ecuador

Ecuador presenta un alto porcentaje de subdiagnóstico de TB infantil y una carga menor a la


esperada, principalmente en menores de 5 años. La alta prevalencia de VIH y la falta de
sistematización adecuada de la investigación de contactos en los adolescentes revelan la
necesidad de considerar estrategias centradas en la familia y que involucren la capacitación
del personal de salud en el manejo del paciente pediátrico centrándose en las necesidades
específicas de cada población.

RESULTADOS

Entre 2015 y 2016 se diagnosticaron 10 991 casos de TB, lo que representa una tasa de
34,92 por 100 000 habitantes. Al analizar la incidencia de TB infantil por coordinación
zonal de salud se encontró que fue mayor en la Zona 8 (7,56 por 100 000), donde también se
concentró la mayor tasa de TB en el país (87,9 por 100 000). Sin embargo, al analizar por
provincia administrativa se encontró que la mayor incidencia de TB infantil se ubica en
Napo, donde alcanza hasta 10,35 casos por 100 000. La proporción de casos en menores de
15 años en el país fue 223 casos (2,03%) pero varió entre 0% y 5,54%.

Tasa de incidencia anual de tuberculosis por 100 000 habitantes y


proporción de TB infantil según distribución de las Coordinaciones
Zonales de Salud. Ecuador, 2015-2016

Fuente: elaboración propia a partir de los resultados presentados

o Zona 1: Provincias de Esmeraldas, Imbabura, Carchi y Sucumbíos.;


o Zona 2: Provincias de Pichincha, Napo Orellana excepto cantón Quito.;
o Zona 3: Provincias de Cotopaxi, Tungurahua, Chimborazo, Pastaza;
o Zona 4: Provincias de Manabí, Santo Domingo de los Tsáchilas.;
o Zona 5: Provincias de Santa Elena Guayas, Los Ríos, Santa Elena y Galápagos
excepto cantón Guayaquil, Samborondón y Durán.;
o Zona 6: Provincias de Cañar, Azuay, Morona Santiago.;
o Zona 7: Provincias de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe.;
o Zona 8: Cantón Guayaquil, Samborondón y Durán.;
o Zona 9: Cantón Quito
Este es el primer estudio realizado en Ecuador que presenta la descripción de las
características clínicas, epidemiológicas y los resultados del tratamiento de niños y
adolescentes con TB sensible. Este estudio mostró un alto porcentaje de subdiagnóstico de
TB infantil, una alta prevalencia de VIH –en especial en los menores de 10 años– y el
cumplimiento de la meta de la OMS de tratamiento exitoso del 90% en la población infantil
diagnosticada.

La afirmación un alto porcentaje de subdiagnóstico de TB infantil se basa en que


aproximadamente el 10% de todos los casos de TB son niños y más de la mitad ocurre en
menores de 5 En este estudio la cantidad de casos reportados de TB infantil (2,03%) fue
inferior a la esperada para la Región (12%) y a la reportada en los 22 países con mayor carga
de la enfermedad a nivel mundial (9,6%) Asimismo, aunque se espera que en los niños más
pequeños entre el 10 y 20% de los casos consistan en tuberculosis pulmonar diseminada en
Ecuador no se registró ninguno, lo cual es consistente con el subregistro y subreporte de
69% estimado por la OMS en este grupo etario . El diagnóstico de la TB infantil continúa
siendo un desafío, y según un estudio realizado en Perú por Chiang y cols. estos resultados
podrían deberse a las barreras que impiden realizar un diagnóstico óptimo . En ese estudio,
las principales barreras encontradas fueron la inadecuada capacitación del personal de salud,
el acceso limitado a las pruebas diagnósticas y la insuficiente investigación de los contactos.
En el presente estudio no fue posible identificar si los casos fueron diagnosticados por
medio de la búsqueda de contactos o de la consulta médica dado que esta información no se
registra rutinariamente en las estrategias de prevención y control de los centros de salud. Es
esperable que muchos de los casos hayan tenido contacto con un adulto con TB y esto se
reportó en el 31% de los casos. No obstante, el alto porcentaje de casos –y, en especial, en
adolescentes en quienes se desconoce esta información probablemente indica que no se está
capturando la detección de contactos más allá de las estrategias de prevención y control de
los centros de salud o que existe una limitación en la investigación de todos los contactos
domiciliarios, aun cuando esto es obligatorio en Ecuador y en el mundo

En Ecuador el diagnóstico se basa principalmente en la evaluación clínica, una radiografía


sugestiva de TB y, en los casos en que es factible, el diagnóstico bacteriológico El uso de
GeneXpert MTB/RIF (Cepheid, Sunnyvale, CA, Estados Unidos) –recomendado como
prioritario por la OMS para el diagnóstico de la TB en la población infantil– fue
implementado en Ecuador desde el 2015 pero solo desde 2017 la población infantil fue
priorizada por la ENPCTB. Esto puede explicar porque en este estudio se efectuó el
diagnóstico mediante GeneXpert MTB/RIFúnicamente en 4 casos (1,9%). La prueba cutánea
de la tuberculina tampoco se utilizó como método diagnóstico debido a que generalmente no
se encuentra disponible en el sector público en Ecuador Adicionalmente, no se contó con
información sobre el estado de vacunación con el bacilo de Calmette-Guérin (BCG) dado
que programáticamente no se recolecta esta información. La cobertura con BCG en el
Ecuador ha disminuido desde el 2010 hasta una cobertura del 83% en el 2016 un nivel
subóptimo en comparación con el resto del mundo. En Ecuador se requieren estrategias para
mejorar la cobertura de vacunación al nacimiento y estudios que evalúen programáticamente
el diagnóstico y el manejo de la TB infantil en el primer y segundo nivel de atención, donde
se han demostrado oportunidades de prevención .

Otro resultado importante en este estudio fue la prevalencia de VIH en los tres grupos de
edad, similar a la de países con prevalencia moderada de VIH, que según la OMS varía entre
10 y 60%. En la Región, un estudio en Brasil encontró una prevalencia de VIH de 17% en
población infantil con diagnóstico de TB mientras que en otro estudio en Cuba la
prevalencia fue 0% Este último resultado es llamativo en comparación con el del presente
estudio (9,4%) y cuando se analiza la prevalencia de VIH en adultos en Ecuador (0,3%) y
Cuba (0,4%). Una posible explicación de este resultado es el pobre desempeño de Ecuador
en comparación con Cuba respecto de las metas de eliminación de la transmisión materno
infantil y que la terapia preventiva de la TB en población infantil con VIH aunque reduce
sustancialmente el riesgo de TB y está recomendada como parte de la atención integral del
VIH , no se reporta en ninguno de los casos que hicieron parte de otro estudio en Ecuador .

Este es el primer estudio en reportar las características epidemiológicas y el resultado del


tratamiento en adolescentes de 10 a 14 años con diagnóstico de TB. En este grupo la
enfermedad se caracteriza por ser predominantemente pulmonar y esto podría incrementar la
oportunidad de propagación en entornos escolares hasta 21 veces más (OR: 22,5, IC95%:
5,9-191,4) . El éxito en el tratamiento es superior a lo esperado, con bajo porcentaje de
pérdidas en el seguimiento, que podría mejorarse desarrollando servicios de salud para
adolescentes que incluyan apoyo psicosocial y una interrupción mínima de la educación.

Respecto a la confirmación bacteriológica de la TB infantil, en este estudio se encontró el


porcentaje de tratamiento exitoso más alto de la Región, un dato consistente con los
reportados en países con alta carga de tuberculosis . Si bien el porcentaje de tratamiento no
exitoso fue 6,6%, se encontró que de los 5 casos que murieron 4 tenían menos de 5 años. De
ellos, 3 no habían alcanzado el primer año y 1 había ingresado por recaída.

Este estudio tiene varias limitaciones:

1) se utilizaron las tarjetas de tratamiento como principal fuente de información, y estas


tenían datos incompletos;

2) los potenciales confusores –como el tipo de seguro de salud, la presencia de cicatriz de la


vacuna BCG, las comorbilidades y el antecedente de tratamiento preventivo para la TB– no
fueron medidos porque el estudio tuvo un diseño retrospectivo;

3) en el análisis de los resultados del tratamiento se excluyeron los casos que no habían
iniciado tratamiento y esto pudo haber conducido a un sesgo de información para conocer
las características de todos los niños y adolescentes que fueron diagnosticados con TB
sensible.

Los resultados de este estudio destacan la necesidad de que las autoridades nacionales de
salud de nivel central y descentralizado, así como otros actores que brindan servicios de
salud para el manejo de la TB, implementen estrategias basadas en el ciclo de vida, inclusive
intervenciones integrales centradas en la familia y en la comunidad. Es necesario un enfoque
específico para la prevención y el tratamiento de la TB en los adolescentes, e incorporar
pruebas diagnósticas que permitan un diagnóstico oportuno de la TB en los niños y
adolescentes. Se requiere mayor capacidad instalada para garantizar el conocimiento y la
confianza de los trabajadores de la salud del primer y segundo nivel para la prevención, el
diagnóstico y el manejo de niños y adolescentes expuestos a la TB.
En conclusión, es evidente que existe un bajo diagnóstico de la tuberculosis en la infancia
pues la carga comparada con el total de casos es menor que lo esperado, especialmente en
los menores de 5 años. Aunque no es posible asegurar que esto se deba a una baja búsqueda
de contactos, en la mayoría de los casos del estudio no existe registro del contacto inicial. A
ello se suma una alta prevalencia de VIH, todo lo que implica la necesidad de considerar una
mayor capacitación del personal. El éxito del tratamiento fue muy elevado –inclusive los
casos curados como los tratamientos culminados– lo que posiblemente se debe a la
protección y tutoría paternal hacia el niño.

Se sugiere fortalecer e implementar nuevas estrategias de captación, búsqueda de contactos,


casos presuntivos de TB y manejo de los pacientes pediátricos en los centros de salud del
país; incorporar pruebas diagnósticas (PPD, IGRAS, radiología, tomografía, pruebas
moleculares); aumentar los recursos humanos capacitados en el primer y segundo nivel de
atención para la toma adecuada de muestras y el manejo y el tratamiento de los pacientes
pediátricos.

INTRODUCCIÓN A LAS ESTRATEGIAS PARA EL CONTROL DE


INFECCIONES
Estrategias para el control de infecciones Hay tres niveles de medidas de control de
infecciones: protección administrativa (de gestión), ambiental y respiratoria personal. Las
medidas de control administrativas son los más importantes dado que los controles
ambientales y la protección respiratoria personal no funcionarán ante la falta de medidas de
control administrativas concretas. Cada nivel opera en un punto diferente en el proceso de
transmisión:
• Las medidas de control administrativas reducen la exposición del trabajador sanitario y de
pacientes
• Las medidas de control ambientales reducen la concentración de núcleos de gotitas
infecciosos.
• La protección respiratoria personal protege al personal de salud en áreas donde la
concentración de núcleos de gotitas no puede ser reducida adecuadamente por medidas de
control administrativas y ambientales.
 Primera prioridad Medidas de control administrativas
 Segunda prioridad Medidas de control ambientales
 Tercera prioridad Protección respiratoriapersonal
Medidas de control administrativas (de gestión)
El primer nivel de control y el más importante, es el uso de medidas de control
administrativas para impedir la generación de núcleos de gotitas y por lo tanto reducir la
exposición del personal de salud y los pacientes a M. tuberculosis. En condiciones ideales, si
puede eliminarse el riesgo de exposición, no se necesitan medidas de control adicionales.
Lamentablemente, en términos generales no puede eliminarse el riesgo, pero puede reducirse
significativamente con medidas administrativas adecuadas.
Medidas de control ambientales
Habida cuenta de que generalmente no puede eliminarse la exposición a núcleos de gotitas
infecciosos, diversos métodos de control ambientales pueden usarse en zonas de alto riesgo
para reducir la concentración de núcleos de gotitas en el aire. Tales medidas incluyen
maximizar la ventilación natural y controlar la dirección del flujo de aire. Aunque muchas
medidas de control ambientales requieren recursos que no están disponibles en la mayoría de
las situaciones (por ejemplo, la mayoría de los establecimientos de salud a nivel de distrito),
algunas (por ejemplo, abrir ventanas para aumentar la ventilación natural y usar ventiladores
para controlar la dirección del flujo de aire) pueden ejecutarse en entornos de recursos
limitados.
Protección respiratoria personal
Tanto a nivel distrital como de referencia deben realizarse esfuerzos para restringir las
exposiciones del personal de salud y los pacientes a núcleos de gotitas infecciosos de
tuberculosis mediante el uso de medidas de control administrativas y ambientales. En
ambientes especializados de hospitales de referencia, el personal de salud pueden estar
expuesto a núcleos de gotitas infecciosos durante procedimientos de provocación de la
recolección del esputo, al tiempo que prestan atención a los pacientes en habitaciones de
aislamiento para tuberculosis o en habitaciones ambulatorias con ventilación deficiente, y
mientras realizan autopsias, broncoscopias u otros procedimientos que inducen tos o generan
aerosoles. En estas circunstancias, la medida de control recomendada es la protección del
personal de salud de la inhalación de gotitas infecciosas mediante el uso de los dispositivos
respiratorios protectores personales diseñados para calzar sobre boca y nariz y no permitir el
ingreso de partículas de tuberculosis infecciosa.

Nivel distrital
Evaluación de los centros asistenciales en riesgo de transmisión de M. tuberculosis
Independientemente del tamaño del establecimiento de asistencia sanitaria, debe realizarse
una evaluación del riesgo del personal de salud, con respecto a la infección por M.
tuberculosis, como primer paso para mejorar el control de infecciones por tuberculosis. Debe
evaluarse el riesgo de transmisión de M. tuberculosis para el establecimiento y las áreas en
el establecimiento donde reciben atención los pacientes tuberculosos (por ejemplo, salas de
examen, laboratorio, farmacia, áreas de espera, etc.). No todas las áreas de un
establecimiento están expuestas al mismo riesgo; un pabellón de medicina con pacientes con
enfermedades respiratorias no diagnosticadas tiene probabilidades de presentar un mayor
riesgo de exposición a la tuberculosis para el personal de salud y otros pacientes que un
pabellón pediátrico o quirúrgico. En algunas situaciones, el riesgo en un pabellón médico
puede ser mayor que en un pabellón de tuberculosis, donde los pacientes que reciben la
terapia adecuada dejan de ser infecciosos rápidamente. Esta evaluación de riesgos debe
considerar:
• el número de pacientes con tuberculosis infecciosa atendidos por año - en todo el
establecimiento - en cada área específica;
• el tiempo que los pacientes con tuberculosis infecciosa se encuentran en el área;
• si se realizan en el área procedimientos especiales (por ejemplo, recolección de esputo) que
aumentan el número de partículas infecciosas.
MEDIDAS DE CONTROLADMINISTRATIVAS
Los resultados de esta evaluación de riesgos orientarán la formulación del plan de control de
infecciones, dado que las intervenciones deben centrarse inicialmente en esas áreas con
mayor riesgo.

Medidas administrativas de control de infecciones para los establecimientos de


asistencia sanitaria del nivel distrital
MEDIDAS DEL NIVEL DISTRITAL
puestos de socorro, dispensarios, centros de salud y hospitales
Evaluación de ambientes con riesgo de infección por M. tuberculosis Plan de control de
infecciones Adiestramiento del personal de salud Identificación y diagnóstico inmediatos
Educación de pacientes Recolección de esputo Triaje y evaluación de los pacientes
presuntamente tuberculosos en el puesto de salud o consultorio Reducción de la exposición
en el laboratorio Evaluación de las intervenciones de controles de infecciones

https://www.paho.org/ecu/index.php?
option=com_content&view=article&id=1882:tuberculosis-ops-oms-llama-a-no-dejar-a-
nadie-atras&Itemid=360
https://www.publicafm.ec/noticias/actualidad/1/ecuador-combate-la-tuberculosi
https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6922074/
file:///C:/Users/COREL%20I3/Downloads/Documents/who_tb_99_269_sp.pdf

También podría gustarte