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Un día arreglando la casa me di cuenta que tenía muchos “recuerditos” que me dieron cuando

visité niños recién nacidos, en bautizos, cuando se casaron mis amigos, en cumpleaños, en
graduaciones, en las escuelas como regalo a las madres, padres o en agradecimiento por algo.

Son múltiples objetos, generalmente de pequeño tamaño, que están hechos de diversos
materiales: papel, cartón, cerámica, porcelana, hilos y tela, parafina, plástico…

Su forma casi siempre está relacionada con un motivo: besitos, cunitas, teteritos, si se trata de
nacimientos; birretes para graduaciones; copitas y pajaritos para matrimonios; artesanías de
lugares visitados en los viajes…

Se espera que sirvan para recordar momentos que han sido compartidos en familia, entre amigos,
entre personas unidas por algún sentimiento especial.

Algunos se compran por costumbre, otros sin motivo, por cumplir, por compromiso, otros por
encargo (“tráeme alguito”), … siempre por haberse acordado de ti.

Algunos son hechos en casa por los familiares y amigos del agasajado, son de bajo costo y
realizado con mucho cariño, copiados de revistas o del ingenio particular, algunos son únicos,
otros son comprados por docena, algunos son simplemente comerciales, otros personalizados con
fotografías, diseños especiales, … son variadísimos.

Todos pretenden que se quede para siempre en un lugar especial de la casa, algunos son
mostrados por un tiempo, se van reuniendo con los que van llegando de cada ocasión especial;
hasta que son tantos, unos más duraderos que otros, que muchos de ellos terminan
cuidadosamente almacenados en cajitas, hasta que algún día se nos olvidan o, simplemente nos
damos cuenta que los niños crecieron, los graduados consolidaron o cambiaron carreras, los
matrimonios ya no son tales en su mayoría, que ya no vamos al cementerio a llevar flores, que ya
tenemos el recuerdito del bautizo, la graduación, cumpleaños, los viajes y el matrimonio de
nuestro hijo menor…

Vaya, esta colección de “recuerditos”… que se renueva con cada nueva ocasión… me ayuda a
recordar los encuentros especiales que tuve con mi gente.

Tienen razón, son “RECUERDITOS” de MOMENTOS DEL AMOR COMPARTIDO

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