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Alumnos: Sebastián Brizuela (Y09601), Gustavo Noguera (Y09108), Renato Rojas (Y08543),

Lucas Valdez (Y09213).

Tratamiento de la ciberadicción con una terapia Cognitivo Conductual


En 1995 Goldberg parodió los trastornos mentales con el uso excesivo
del internet, lo que fue una broma paso a ser un aviso premonitor ya que en
1996 Kimberly Young presentó su artículo, Adicción a Internet: la
emergencia de un nuevo trastorno, esto marcó el nacimiento de la adicción
moderna (Carbonell, 2012).
Este trastorno consta de patrones conductuales impulsivos, puede
deberse a diferentes elementos del internet, ya sean redes sociales,
videojuegos online, pornografía, apuestas, etc... La ciberadicción acarrea
síntomas cognitivos y comportamentales, aislamiento social y
deterioramiento de relaciones (Young, 1996).
Las personas se suelen volver adictas para compensar algún tipo de
déficit en su personalidad, la internet permite cubrir 2 tipos de necesidades
básicas, estimulación solitaria y la búsqueda de interacción social, la
facilidad del acceso al estímulo es un factor muy grande en el desarrollo de
la adicción, y el hecho del anonimato permite una facilidad en la
interacción para las personas con dificultades de relación social
(Basile, 2006)
La ciberadicción no es un trastorno relacionado al consumo de
sustancias pero posee las mismas características de una, Griffiths (1995)
fue el primero de hablar de las adicciones no relacionadas a consumo de
sustancias y las definió como adicciones no-químicas, en todo caso
implicaban una relación excesiva entre el ser humano y la máquina
(tecnologías), según la OMS (2019) en la décima revisión de la CIE-10, las
adicciones a drogas son caracterizadas por deseos intensos al consumo de
las mismas, falta de control en la cantidad de consumo, tolerancia a la
misma, y un abandono a otro tipo de fuentes de placer pasadas, todas ellas
son síntomas de la ciberadicción.
En el caso de la ciberadicción se indicó que la mejor forma de tratar este
tipo de trastorno sería la terapia cognitivo conductual (Griffiths y Meredith,
2009).
La terapia Cognitivo Conductual, como su nombre lo indica, puede
ayudar a los individuos a que cambien su forma de pensar y también su
conducta, la terapia se ha mostrado útil en el tratamiento de adicciones
(RCP, 2015).
Esta terapia puede ayudar a dar sentido a los problemas, al analizarlos y
dividirlos en pequeñas partes. Esto hace que sea más fácil ver como se
Alumnos: Sebastián Brizuela (Y09601), Gustavo Noguera (Y09108), Renato Rojas (Y08543),
Lucas Valdez (Y09213).

relacionan entre si y de qué forma afectan al individuo, las Partes son: La


situación, los pensamientos, sentimientos, emociones, acciones (RCP,
2015).
Estudios previos utilizaron este tipo de terapia para tratar la adicción al
internet, aunque aportaban pocos detalles sobre la eficacia de la
intervención (Alario, 2006; Griffiths, 2000; Luengo, 2006; Sanz Rodríguez,
Young, 1996).
Método
El diseño a utilizarse en la presente investigación es experimental. La VI
es la Terapia Cognitivo Conductual y la VD son los puntajes de los
participantes en un test de adicción al internet (TAI) elaborado por
Kimberly Young (1996). Se asignarán a los participantes en tres grupos
distintos.
Los participantes fueron previamente diagnosticados con un trastorno de
adicción al internet y fueron elegidos 15 mujeres y 15 varones. El primer
grupo será un grupo de control que no recibirá ningún tipo de tratamiento,
el segundo grupo recibirá el tratamiento cognitivo conductual y sus
resultados en el test de adicción al internet serán medidos luego de 1 mes
de terapia, el tercer grupo también recibirá el tratamiento cognitivo
conductual y sus resultados en el test de adicción al internet serán medidos
luego de 3 meses de terapia. Los grupos son independientes, debido a que
están compuestos por distintos participantes.
Hipótesis de Investigación: La media para los puntajes en el TAI serán
menores para los dos grupos que recibieron el tratamiento cognitivo
conductual, en comparación a los que no recibieron ningún tipo de terapia.
Hipótesis Nula: No habrán diferencias significativas entre el grupo que
no recibió tratamiento y los grupos que recibieron el tratamiento de la
terapia cognitivo conductual en cuanto a la media de los puntajes en el
TAI.
Plan de Análisis
El análisis de datos se llevará a cabo en el software PSPP. Primero se
obtendrán las frecuencias y proporciones según el sexo de los participantes
y sus grupos. Luego, se analizará las medidas de centralización y de
dispersión para los puntajes del test de adicción al internet (TAI) (Young,
1996) para todos los participantes según su grupo. Además, se realizará una
prueba de bondad de ajuste con los puntajes de depresión, para determinar
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si los mismos tienen una distribución normal. Por último, la prueba


utilizada para comparar las medidas del (TAI) de los grupos será la
ANOVA; en caso de que se cumplan los criterios para pruebas
paramétricas.

Resultados

Como se puede observar en la Tabla 1, la muestra total es de 30


participantes, hay 5 mujeres y 5 varones por cada grupo, la distribución de
los puntajes del TAI es normal en todas las condiciones. La media de los
puntajes del TAI se redujo en el grupo que realizó el tratamiento cognitivo
conductual por el periodo de tiempo de 1 mes, y se redujo aún más en el
grupo que realizo el tratamiento por tres meses. Además, se ve que estas
diferencias son significativas F (2.27)= 39.61, p < .001.
Debido a estos resultados, se tomó la decisión de realizar contrastes post
hoc para las hipótesis. Los resultados de los mismos se encuentran en la
Tabla 2.
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En las pruebas post hoc se encuentran diferencias significativas entre


todos los contrastes realizados. Cualquier condición en la que se haya
llevado a cabo la terapia cognitivo conductual presentó puntajes
significativamente menores en el TAI (p < .001 en ambos casos), y el
tamaño del efecto fue grande (r= .92 en el caso de la terapia por el periodo
de 1 mes y r= .92 por el de tres meses). Los participantes que llevaron a
cabo la terapia cognitivo conductual por 3 meses no presentaron puntajes
del TAI significativamente más bajos (p < .001) que los que solo recibieron
la terapia por 1 mes, el tamaño del efecto es bajo en comparación a los
contrastes anteriores(r= .32).

Discusión
La presente investigación se enfocó en probar la eficacia del tratamiento
cognitivo conductual en la disminución de la ciberadicción. Los resultados
indican que hay una reducción significativa de los puntajes en el TAI luego
de la terapia cognitivo conductual ((p < .001 para ambas condiciones
experimentales; r= .93 para la condición de 1 mes y r= .93 para la
condición de 3 meses).
Este hallazgo confirma las suposiciones hechas por Griffiths y Meredith
(2009) sobre la efectividad de la terapia cognitivo conductual. Tratamientos
basados en la terapia cognitivo conductual podrían ser implementados en
pacientes con trastornos de ciberadicción.
Una de las explicaciones que justifican la efectividad de la terapia
cognitivo conductual para este tipo de adicción es aquella dada por el RCP
(2015) que resalta las características de potencial de cambio conductual y
cognitivo en los pacientes que toman este tipo de terapia.
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Futuros estudios pueden explorar el tema en una escala mucho más


grande, estudiar diversos factores que generan la adicción, también
posiciones socio-económicas y cómo influye el acceso de internet a la
adicción del mismo, también se podrían llevar a cabo estudios sobre la
influencia del internet a una temprana edad y como esto repercute de forma
positiva o negativa en las vidas de las personas.

Referencias
RCP (2015). Cognitive Behavioural Therapy encontrado en
https://www.rcpsych.ac.uk/mental-health/treatments-and-wellbeing/cognitive-
behavioural-therapy-(cbt)
Alario S (2006). Tratamiento de un caso crónico de adicción a internet. Cuadernos de
Medicina Psicosomática y Psiquiatría de Enlace, 79, 71-88
Griffiths MD (2000). Does Internet and computer “addiction” exists? Some case study
evidence. CyberPsychology and Behavior, 3, 211-218.
Luengo A (2006). Adicción a Internet: conceptualización y propuesta de intervención.
Revista Profesional Española de Terapia Cognitivo-Conductual, 2, 22-52.
Sanz-Rodríguez LJ, Carmona FJ y Marín D (2004). Tratamiento psicológico de la
adicción a Internet: a propósito de un caso clínico. Revista de Psiquiatría de la
Facultad de Medicina de Barcelona, 31, 76-85.
Chóliz M y Marco C (2011). Patrón de Uso y Dependencia de Videojuegos en infancia
y adolescencia. Anales de Psicología, 27, 418-426
Chóliz M y Marco C (2012) Carbonell (2012).. Adicción a Internet y a Redes Sociales.
Tratamiento psicológico. Madrid: Alianza Goldberg (1995) Adicción a internet y
móvil: una revisión de estudios empíricos españoles Papeles del Psicólogo,
2012. Vol. 33(2), pp. 82-89 ISSN: 0214-7823
Basile (2006) Adicción a Internet: Ciberadicción Alcmeon, Revista Argentina de Clínica
Neuropsiquiátrica, vol. 13, Nº 2, septiembre de 2006, págs. 74 a 90. ISSN: 0327-
3954/ ISSN 1514-9862 (Internet)
Young (1996) INTERNET ADDICTION: THE EMERGENCE OF A NEW CLINICAL
DISORDER CyberPsychology and Behavior, Vol. 1 No. 3. Pages 237-244

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