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TETANOS
TETANOS
Concepto
Agente Etiológico
El tétanos es una enfermedad infrecuente en los países desarrollados. Tiene una alta
mortalidad (aún mayor en neonatos) y baja morbilidad. Su incidencia está relacionada con
las condiciones socioculturales e higiénico-sanitarias y con el estado inmunitario de la
población, lo que explica la elevada incidencia en aquellos países, en contraposición a las
bajas cifras observadas en los países industrializados. El reservorio principal es el tracto
intestinal de hombres y algunos animales (flora habitual de herbívoros y algunos no
herbívoros como rata, cobaya, gato, perro e incluso del pollo), es un microorganismo muy
difundido, y es frecuente detectar sus esporas en la tierra y en el polvo doméstico. Se
transmite por contacto directo o indirecto con el suelo y en un 15%-30% la puerta de
entrada pasa inadvertida, aunque son aquellas heridas con mayor necrosis tisular las que
implican mayor riesgo (laceraciones, heridas punzantes, quemaduras, etc.). La presencia de
infecciones y cuerpos extraños favorece la multiplicación del microorganismo. Toda la
población es susceptible de infectarse, y además, el padecimiento no confiere inmunidad.
El tétanos no se transmite de persona a persona, sino por contaminación a través del
ambiente, aunque existe una posible forma de transmisión entre humanos a través de
jeringuillas de adictos a drogas por vía parenteral. El período de incubación es de 3 a 21
días (8 días de promedio). En el tétanos neonatal los síntomas aparecen entre los días 4 y 14
del nacimiento (7 días de promedio) [ CITATION Far17 \l 3082 ].
En Ecuador, las cifras de pacientes con tetanosh han disminuido siendo que en el 2017 se
diagnosticaron 59 casos, en el 2018 se diagnosticaron 68 casos, en el 2019 se
diagnosticaron 14 casos y hasta mayo del 2020 se han presentado solo 3 casos
prevalentemente en las provincias del Guayas, Cotopaxi y Manabí [ CITATION MSP20 \l
3082 ].
Factores de riesgo
Fisiopatologia
Todo empieza por una herida provocada por un objeto que produzca una solución de
continuidad en la cubierta cutánea. Esto hace que se rompan vasos sanguíneos cutáneos
dando asi un entorno anaerobio temporal hasta que ocurra el proceso de coagulación. Si el
objeto que produjo la herida contiene esporas del C. tetani, estas entran por la solución de
continuidad de la herida alojándose así en la zona donde el entorno es anaerobio. En esa
zona las esporas germinan ya que el C. tetani es un anaerobio estricto y se encuentra en un
lugar que si le garantiza su supervivencia. Como ese entorno anaerobio es temporal el C.
tetani al germinar empieza a liberar una toxina denominada tetanolisina la cual es una
hemolisina labial al oxígeno, inhibe la llegada de oxigeno y colesterol a la zona de
infección, en otras palabras elimina a los eritrocitos que están cargados de oxígeno para así
perpetuar el entorno anaerobio y por medio de eso garantizar la supervivencia de la
bacteria. Des pues de ello el C. tetani empieza a secretar su neuroexotoxina denominada
tetanoespasmina la cual viaja atraves de via sanguínea, via linfática y via neuronal por todo
el organismo para por fin llegar al SNC a nivel de los nucleos de los pares craneales y en
las astas anteriores de la medula espinal. Fisiológicamente una contracción muscular se da a
través de los impulsos nerviosos enviados a través de la motoneurona la cual se une al
musculo por medio de la placa motora en donde hay una liberación constante de
acetilcolina la cual es importante para que haya la contracción. Para relajar al musculo
normalmente una interneurona inhibitoria que hace sinapsis con la motoneurona secreta las
vesículas presinápticas las cuales están cargadas de neurotransmisores inhibidores como el
GABA y la glicina. Estos neurotransmisores son liberados de sus vesículas por medio de
una proteína producida por la terminación de la interneurona denominada sinaptobrevina
haciendo que los neurotransmisores inhibitorios sean captados por la membrana posináptica
(motoneurona) y así a nivel de la placa motora se deje de producir acetilcolina dando como
resultado la relajación del musculo. Cuando la tetanoespasmina llega al SNC actúa a nivel
de la sinapsis de la interneurona inhibitoria con la motoneurona. Ahí, la cadena ligera de la
tetanoespasmina, que es una endopeptidasa dependiente de cinc, se desdobla a la proteína 2
relacionada con la vesícula (VAMP2, vesicle-associated membrane protein 2) (también
conocida como sinaptobrevina). Esta molécula es necesaria para la unión presináptica y
liberación del neurotransmisor; en consecuencia, la toxina tetánica impide la liberación de
neurotransmisor y bloquea la descarga de la interneurona inhibidora. El resultado es la
actividad descontrolada del sistema nervioso motor. Una actividad similar en el sistema
autónomo explica las manifestaciones características de espasmo del músculo estriado y el
trastorno del sistema autónomo. El aumento de la concentración de catecolaminas
circulantes en el tétanos grave guarda relación con las complicaciones cardiovasculares
[ CITATION Vas20 \l 3082 ].
Manifestaciones clínicas
• Trismo
• Rigidez muscular
• Mialgia
• Sudoración excesiva
• Disfagia
El espasmo muscular generalizado puede ser muy doloroso. Muchas veces se afectan los
músculos laríngeos en etapas tempranas, incluso en forma aislada. Éste es un fenómeno que
pone en peligro la vida, ya que puede ocasionar obstrucción completa de la vía
respiratoria.En esta fase generalizada se da los siguientes síntomas:
• Opistótonos
• Contracciones paroxísticas grupos musculares del tronco y de los miembros por
estímulos exteriores (ruido, luz, tacto) acompañadas de dolor intenso
Diagnostico diferencial
Métodos diagnósticos
El diagnóstico del tétanos se basa en las manifestaciones clínicas. Como se indicó ya, el
tratamiento no debe retrasarse mientras se realizan los estudios de laboratorio. El cultivo de
C. tetani de una herida proporciona evidencia para el diagnóstico. También se miden las
concentraciones de inmunoglobulina G antitetánica en suero antes de la administración de
la antitoxina ola inmunoglobulina. Las concentraciones séricas >0.1 UI/mL parecen ser
protectoras y no apoyan el diagnóstico de tétanos. Si las concentraciones se encuentran por
debajo de esta cifra, puede ser de utilidad un bioanálisis para toxina tetánica en suero, si
bien un resultado negativo no descarta el diagnóstico. También se han utilizado la reacción
en cadena de la polimerasa para la detección de toxina tetánica, pero se desconoce su
sensibilidad. Los escasos trastornos que simulan el tétanos generalizado son intoxicación
por estricnina y reacciones distónicas a los fármacos antidopaminérgicos. Por lo general, la
rigidez muscular abdominal es continua en el tétanos, pero episódica en los dos últimos
trastornos. El tétanos cefálico puede confundirse con otras causas de trismo, como la
infección bucofaríngea. La hipocalcemia y meningoencealitis se incluyen en el diagnóstico
diferencial del tétanos neonatal [ CITATION Ans17 \l 3082 ].
Tratamiento
Las medidas de prevención del tétanos, una vez ocasionado el traumatismo, consisten en
inducir una inmunidad activa ante la toxina tetánica y proporcionar anticuerpos antitoxina
de forma activa. Todas las heridas, excepto aquellas en un paciente inmunizado, requieren
del uso de inmunoglobulina antitetánica humana (IGT). En cualquier otra circunstancia se
deben administrar 250 U de IGT por vía intramuscular, y aumentarla a 500 U en las heridas
con elevada tendencia a contaminarse con Clostridium tetani [ CITATION Itz15 \l 3082 ].
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