ESPIRADENOMA

Ana María Diaz Chamorro, Est. MVZ, 1 Camila Vargas Naranjo, Est. MVZ 2 Viviana M. Ramírez Navarro, MSc. 3

Resumen

Palabras clave: Babesia, PCR, caninos, extendidos sanguíneos, análisis retrospectivo.

Abstract
Canine babesiosis is a disease caused by protozoa of the Apicomplexa phylum, called Babesia. The traditional
diagnostic approach is based on the identification of the parasite in extended blood; however, there are reports
of genetic variations that can influence its pathogenic capacity and specificity to vectors; The most used method
for the identification of Babesia canis is the PCR Test. The objective is to determine the frequency of cases of
babesia canis in 3 clinics over a period of time from September 2018 to September 2019, few reports of Babesia
Canis are known in Ibagué-Tolima. By collecting medical records; in order to reach truthful conclusions, a
retrospective analysis and difference in proportions were found, which seeks to determine its frequency and
cause; In two of the veterinary clinics there are three cases of Babesia canis, however, the canines belonging to
the rural area of Ibagué. With the data obtained, it can be concluded that there is a 9.09% frequency of babesia
canis in Ibagué-Tolima.

Key words: Babesia, PCR, canines, extended blood, retrospective analysis.

1
Estudiante de Medicina Veterinaria y Zootecnia,
Universidad Cooperativa de Colombia curso de
2
parasitología 2019. Estudiante de Medicina
Veterinaria y Zootecnia, Universidad Cooperativa de
3
Colombia curso de parasitología 2019. Docente
encargada del curso de parasitología veterinaria. MVZ,
MSc ciencias pecuarias. Universidad cooperativa de
Colombia. 2019.
La babesiosis canina es una enfermedad hemolítica
que afecta a perros al rededor del mundo la cual es
generada por parásitos complexos llamado Babesia,
- Kutler, (19888) “La enfermedad producida por
este hemoparásito se le denomina Babesiosis
canina y se encuentra distribuida mundialmente,
especialmente en las zonas tropicales y
subtropicales, la cual produce destrucción de los
eritrocitos ocasionando una anemia hemolítica”. -
Schoeman, (2008)
La seriedad de la enfermedad varía desde una
infección subclínica hasta la falla orgánica y
muerte; la mayoría de los caninos desarrollan
anemia hemolítica y/o trombocitopenia con grados
variables de anorexia como a fiebre esplenomegalia
e ictericia y hemoglobinuria. En resumen, entre los
factores que influyen en la severidad de los signos
se incluyen: la especie de babesia que esté
involucrada, el estado inmune y la edad del
paciente; así la presencia de coinfecciones con otros
agentes transmitidos por el mismo vector - Kordick,
Bretschwerdt y Hegarty (1999).
Se ha sido identificado en Europa y Asia, B. c.
vogeli transmitida por la garrapata parda del perro o
Rhipicephalus sanguineus en las regiones tropicales
y subtropicales y B. c. rossi reportada en África y
Asia, que usa como vector a la garrapata amarilla
del perro (Haemaphysalis leachii) (Uilenberg,
Fransenn, Perie y Spanjer, 1989).
En Carolina del Norte, Estados Unidos, se reportó
un caso de Babesia en un perro inmuno-suprimido,
que 2 poseía una secuencia única, más cercana a B.
bigemina y B. caballi que a los agentes causantes de
babesiosis comunes del canino. El hemoparásito
detectado tenía una variación filogenética con las
especies reconocidas de B. canis entre 91,2-91,6%,
lo que sugiere que podrían ser diferentes
(Birkenheuer, Neel, Ruslander, Levy, y
Breitschwerdt, 2004).
Según Vargas-Hernández et al. (2012) hay pocos
reportes con respecto a la identificación mediante
técnicas moleculares de Babesia sp. en perros de
Colombia, a excepción de algunos reportes de
identificación de los piroplasmas en extendidos
sanguíneos, como es el caso de Batista (1980)
donde reportaron una prevalencia de B. canis de
0.93% en el Departamento de Córdoba y Piedrahita
(2011) en el piedemonte llanero quien reportó una
frecuencia de positividad del 68% de B. canis en
perros parasitados asintomáticos; sin embargo, estos
estudios previos no discriminan entre las
subespecies de B. canis.
La enfermedad afecta a una amplia gama de
animales domésticos y silvestres, en los que pueden
encontrarse muchas especies distintas, y
ocasionalmente afecta a personas, por lo que se
considera una zoonosis. El impacto económico
importante de la babesiosis se encuentra en la
industria ganadera, pero pueden afectarse además
animales domésticos, incluyendo caballos, ovejas,
cabras, cerdos y perros, con importancia variable en
distintas zonas del mundo.
El potencial de enfermedades caninas transmitidas
por vectores principalmente por garrapatas
Rhipicephalus sanguineus está asociado a la mayor
evidencia de que las garrapatas expuestas a altas
temperaturas, el riesgo de parasitismo canis por
Rhipicephalus sanguineus podría aumentar en las
zonas con veranos cálidos. - Gammons y Salam
(2002).
El presente estudio busca identificar la frecuencia
del parásito sanguíneo llamado Babesia canis, la
cual utiliza como vector al ectoparásito hematófago,
conocido como garrapata de la especie
Rhipicephalus sanguineus que es un parasito
cosmopolita, mediante la prueba de PCR, por lo que
es posible partir de muy pequeñas cantidades de un
agente infeccioso y realizar una detección fiable del
mismo.
Materiales y Métodos
Recolección de datos.
Recolección y revisión de historias clínicas en 3
veterinarias de la ciudad de Ibagué (Colombia). Los
datos son de septiembre de 2018 a septiembre 2019;
los sitios seleccionados para muestreo fueron los
laboratorios de diagnóstico de clínicas veterinarias
en donde se realizó la técnica de PCR de la cuales
se obtuvo los datos a partir de historias clínicas del
último año, dicha prueba es utilizada con el fin de
obtener una detección directa y precisa de ADN y
ARN por lo que es posible partir de muy pequeñas
cantidades de un agente infeccioso para realizar una
detección fiable del mismo, éste procedimiento
puede dar un falso positivo o falso negativo de
B.canis; de igual modo con el análisis retrospectivo
se llegó a un enfoque descriptivo con el fin de llegar
a conclusiones veraces de la frecuencia.
Los caninos fueron llevados a consulta por aparente
desnutrición, aunque se consideraba que uno de los
caninos tenía signos de una enfermedad transmitida
por garrapatas si tenía antecedentes de infestación
por garrapatas y / o signos clínicos que incluían
fiebre, palidez, tendencias hemorrágicas,
linfadenomegalia y esplenomegalia. Se realizó
conteo de las muestras obtenidas de los perros, el
número de muestras, y el porcentaje de confirmados
y no confirmados con dicha infección.
Animales: Se determinó el tamaño de la muestra 50,
con un valor p de 0.023 y un margen de error del
10% (0,05), (Figura 2) se recolectaron muestras de
una población de perros de edades que oscilan de 2
a 10 años de ambos sexos en 3 de clínicas
veterinarias de Ibagué. Se aplicó la prueba
estadística “Diferencia de proporciones” (Figura 2)
junto a un análisis retrospectivo (Figura 1) y los
datos obtenidos fueron recolectados por el médico
veterinario de turno.
Estos animales pertenecen a fincas situadas en
zonas rurales, los cuales fueron trasladados a las
diferentes clínicas veterinarias. De la clínica (A) se
obtuvo 20 datos y se realizó la técnica de PCR a
partir de ADN extraído de muestras de sangre de
animales con antecedentes de contacto con
garrapatas para saber con exactitud si eran positivo
para Babesia canis. Los datos de laboratorio
arrojaron positivo para B. canis a solo 2 individuos
en el año 2018 en distintos meses con un 10%. En la
clínica (B) de 13 pruebas arrojo positivo a solo un
individuo en año 2019 en el mes de marzo con un
7.7% . Y por último en el laboratorio (C) en donde
se realizaron 17 pruebas no se halló resultado para
Babesia canis.
Estos datos fueron obtenidos a través de una
entrevista a los doctores responsables de turno en
cada clínica veterinaria a lo que hay margen de
error.
CASOS POSITIVOS B. CANIS.
44%
56%
Clinica (A) Clinica (B) Clinica (C)
Figura 1.
Figura 1. Análisis de los casos positivos
encontrados en la clínica A, B y C; con una
muestra de 20, 13 y 17 respetivamente. a Se halló 2
casos 10%. b Un solo caso 7,7%. c No registran
hallazgos.
Figura 2.
Figura 2. Muestra la diferencia de proporciones,
diferencia entre la clínica A y la clínica B.
Discusión.
En el presente estudio se adquirieron datos de la
frecuencia de Babesia canis en tres clínicas de la
ciudad de Ibagué (Colombia) de las cuales se
obtuvo un 6% (3/50 caninos) de casos positivos
para B.canis representando un porcentaje
importante para el estudio de la enfermedad en
nuestra ciudad ya que si es comparado con las
demás enfermedades parasitarias que se dan en la
presente ciudad es un dato realmente bajo.
Al comparar los datos del presente trabajo con los
reportados en otras ciudades con condiciones
climatológicas similares al que se maneja en dicha
ciudad como lo fue el pie de monte llanero, difieren
los resultados ya que se han reportado una
frecuencia de positividad del 68%, en el
Departamento de Córdoba y Piedrahita el reportaron
una prevalencia de B. canis de 0.93% ; estos nos
indica que la Babesiosis canina se presenta mas
diseminada, responde a diferentes factores para su
manifestación entre ellas las condiciones climáticas
y la presencia del vector por lo mismo esto puede
estar dado principalmente porque los casos de
“Babesia spp se presentan comúnmente en zonas
rurales, es decir, puede estar dado por una mayor
presencia de Bovinos, (principal hospedero de la
Babesia)” Fernández, B. (2016). nos lleva que si
hay un contacto directo o indirecto con caninos;
esto explica el porqué de la presencia de B.canis en
tres caninos encontrados en clínica veterinarias (A)
y (B) resaltando que estos no pertenecían a la zona
urbana de Ibagué.
Según Vargas-Hernández et al. (2012) hay pocos
reportes con respecto a la identificación mediante
técnicas moleculares de Babesia sp. en perros de
Colombia, a excepción de algunos reportes de
identificación de los piroplasmas en extendidos
sanguíneos, como es el caso de Batista (1980)
donde reportaron una prevalencia de B. canis de
0.93% en el Departamento de Córdoba y Piedrahita
(2011) en el piedemonte llanero quien reportó una
frecuencia de positividad del 68% de B. canis en
perros parasitados asintomáticos; sin embargo, estos
estudios previos no discriminan entre las
subespecies de B. canis.
Las formas graves de la enfermedad pueden
conducir a los perros a su muerte, pero su severidad
depende de la virulencia del patógeno y del estado
inmune del huésped. Durante los primeros cinco a
seis días de enfermedad, es posible un diagnóstico
de PCR y, a veces, se logra mediante microscopía
de frotis de sangre. Babesia-ELISA DOG es capaz
de detectar anticuerpos entre siete y ocho días
después de la infección y tres días después del
primer síntoma clínico.
El ELISA es especialmente adecuado después de la
habitabilidad de un perro en un área endémica y
para la detección de una Babesiosis crónica
subclínica. – Martin et al.(2005).
El diagnostico se basa en la identificación
microscópica del parasito o frotis de sangre,
detección de anticuerpos (ELISA) o métodos de
diagnóstico molecular (PCR). En algunos animales
infectados y portadores de Babesia canis, no se ha
identificado parasitemias en frotis de sangre, por lo
que se recomienda el diagnóstico molecular como el
método más sensible para su identificación.
-Guerra, M, 2012.
Conclusión
Los resultados demostraron las posibilidades que
tiene la B.canis de frecuentar en Ibagué (Colombia)
con un 6% de frecuencia, la cual se distingue por
presentar un porcentaje sobre la baja frecuencia de
este hemoparásito en la zona rural de Ibagué lo que
permite interrelacionar la aparición de este en
animales con mayor contacto con bovinos.
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