los deberes prácticos de la vida diaria. Mientras aun son jóvenes, la madre debe darles algunas tareas sencillas que hacer cada día”. (E. G. White, Conducción del niño, p. 109). Soñé con un hogar que fuera el taller del artesano. Siempre me han llamado la atención las pinturas que muestran la carpintería de Nazaret con los dos ebanistas más famosos de la historia: José y Jesús. Se nota en la mirada de José el gran interés de que su hijo llegue a ser un buen carpintero. Vuelca todo su amor y experiencia en esta labor. En realidad es un himno al trabajo. El padre, el modelo; el hijo, el aprendiz; el padre el experto; el hijo, el alumno dócil. ¡Qué combinación tan bella e inspiradora! El hogar de los padres responsables es un verdadero taller del artesano. En términos contemporáneos, un verdadero laboratorio de emprendedorismo, una escuela de laboriosidad Uno de los grandes desafíos del hogar contemporáneo es formar hijos con mente útil y productiva. Por lo tanto, necesitamos grabar en la mente algunos conceptos bien claros: 1.-El hogar es una microempresa. Siguiendo el modelo de los carpinteros de Nazaret, muchos padres inspiran a sus hijos a seguir su ocupación o profesión. 2.-El emprendedorismo.
Este es un neologismo que apunta a
estimular la iniciativa para el trabajo útil y productivo. Los expertos que hablan de emprendedorismo son, mayormente, del mundo de las finanzas, pero, por extensión, se aplica también a otras actividades profesionales y laborales. 3.-¿Cómo enseñar a los hijos el amor al trabajo? .
El modelaje es el mejor recuerdo.
“De tal palo, tal asilla”. 4.-Lecciones de valores prácticos
Ligado al emprendedorismo están los valores
prácticos de la utilidad, laboriosidad, la economía, el ahorro, el dinero. 5.-No abusar del trabajo infantil
No debemos sobrecargar a los hijos con tareas
excesivas, que pongan en riesgo su salud. Pero, por otra parte, no hay que criar hijos flojos, ociosos, inútiles e indolentes. Los indolentes por lo general se vuelven insolentes y terminan siendo insolventes. 6.-Los hijos emprendedores son hijos triunfadores
Cuanto más pronto enseñemos los padres a
los hijos a llevar las cargas de la empresa familiar, serán ellos más sensibles y más comprensivos con sus padres. De esta manera serán nobles, útiles y con una mentalidad de gratitud y de triunfo frente a las dificultades de la vida 7.-La diligencia
Ver el ejemplo de las hormigas.
(Salomón, Proverbios 6:6-11) 8.-Otros valores de la vida práctica
La abnegación, la generosidad y la previsión. 9.-Compartir
El bien que no se comparte, se corrompe.
Comparte tu mesa, extiende las estacas de tu tienda, es decir, comparte tu techo y el dinero de tus ganancias Ama el trabajo y te irá bien en la vida. Nunca te va a faltar dinero en el bolsillo, ni alimento en tu casa. Serás cabeza y no cola. Prestarás tú y no que te presten. El acreedor es el amo, el deudor es el esclavo. No debas a nadie nada, es una propuesta de solución efectiva. Preguntas para ahondar la reflexión
•¿Qué me enseña el taller de carpintería de José y Jesús?
•¿Cómo convertir mi casa en un taller de emprendedorismo? •¿Cómo ser un buen espejo para mi hijo? •Jesús, con fidelidad y buen ánimo, llevó su parte de las cargas de la casa. Él consintió en ser un siervo voluntario, un hijo amante y obediente, aprendió un oficio y con sus propias manos trabajó en la carpintería con José. Con el trabajo de sus manos, cuando ya no estaba José en su hogar de Nazaret, sustentó a su madre viuda. ¿En qué forma este noble ejemplo puede dirigir mi vida y la de mis hijos?