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UNIVERSIDAD NACIONAL

AUTONOMA DE MEXICO

EVOLUCION HISTORICA DEL


PENSAMIENTO CRIMINOLOGICO

Curso Superior de Posgrado en Materia Penal


Materia: Criminología y Criminología

Profesor: Dr. Edward Charles Worrall González

Nombre del alumno: Marco Antonio Hernandez Rendon

Número de cuenta: 41613256-4

Grupo: 9900
TABLA DE CONTENIDOS

EVOLUCION HISTORICA DEL PENSAMIENTO CRIMINOLOGICO

1. Antecedentes de la Criminología………………………………………………..3

2. Etapa Primitiva…….……………………………………………………………….4

2.1. El Hombre Primitivo………………………………………………………….4


2.2. Mesopotamia………………………………………………………………….6
2.3. Egipto………………………………………………………………………….6
2.4. Grecia………………………………………………………………………….6
2.5. Roma…………………………………………………………………………..7

3. Etapa Pseudo-Cientifica..………………………………………………………...7

3.1. Las Ciencias Ocultas………………………………………………………...8


3.2. Santo Tomas de Aquino……………………………………………………..9
3.3. Santo Tomas Moro..………………………………………………………….9

4. Etapa Pre-Científica......…………………………………………………………10

4.1. Escuela Clásica..……………………………………………………………11


4.1.1 Principales Postulados…………………………………………………13

4.2. Escuela Positiva…………………………………………………………….13


4.2.1. Principales Postulados………………………………………………...17

5. Conclusiones……………………………………………………………………..18

BIBLIOGRAFIA

2
EVOLUCION HISTORICA DEL
PENSAMIENTO
CRIMINOLOGICO
1. ANTECEDENTES DE LA CRIMINOLOGIA

Las bases de la disciplina conocida en la actualidad como Criminología se han ido


construyendo conforme al paso del tiempo, no específicamente bajo este nombre,
la definición de esta ciencia, ha ido cambiando y sobre todo evolucionando de
acuerdo a diversos autores y al lugar específico donde estas ideas fueron
concebidas, además de distintos enfoques teóricos con los ha sido analizada, así
como también la era en que surgieron.

El concepto que hoy en día tenemos acerca de la Criminología, tiene su origen en


el latín “criminis” y en el sufijo griego “logos”, el cual se traduce en tratado, estudio
o ciencia del crimen”. La Criminología ha existido desde hace siglos, desde que el
crimen existe, por lo tanto su existencia es tan antigua como la humanidad. De
acuerdo a Bernaldo de Quirós “Criminología la ha habido siempre, desde que ha
habido crímenes…..; una Criminología siquiera insipiente, rudimentaria elemental;
tan elemental y tosca, pedestre como los romances de ciego, que siempre tuvieron
en el delito una de sus favoritas inspiraciones” 1.

En función de lo anterior, se puede deducir que desde el origen de las primeras


civilizaciones podemos encontrar indicios de lo que en la actualidad conocemos
por “Criminología”, en cuanto a sus elementos más básicos, dichos elementos han
existido de manera presencial siempre, desde que el hombre primitivo comenzó a
vivir en sociedad para poder sobrevivir, en todo punto de su historia se rigió por un
conjunto de reglas (de diversa índole), que pretendieron la convivencia armoniosa
en dicha sociedad; sin embargo, debido a la naturaleza del hombre, esta se
encargó de ir quebrantando dichas reglas a lo largo del tiempo, dando surgimiento
al crimen, y si hubo un crimen, por ende existió un criminal y si existió un criminal,
también hubo lugar para el surgimiento del fenómeno de la criminalidad.

Al respecto, Rodríguez Manzanera opina lo siguiente: “La historia de la


Criminología es el resultado cronológico de las ideas que pretenden explicar el
crimen, al criminal y a la criminalidad, y no la descripción o relato de estas a través
de la tiempo”2. Por consiguiente, resulta de suma importancia entender como fue
evolucionando el pensamiento que tuvieron nuestros antepasados respecto al
crimen, al criminal y a la criminalidad, cuál era su reacción, como abordaban dicho
fenómeno y a quienes, a que o cuales cosas atribuían dicho comportamiento.

3
(1) De Quirós, Bernaldo Constancio, Criminología. Puebla, México, 1957, Pág. 8
(2) Rodríguez Manzanera, Luis, Criminología. México, 1996 Pág. 146

A lo largo de la historia de la humanidad, podemos observar como la Criminología


fue evolucionando en el intento por prevenir las conductas antisociales que
amenazaban cierta época, y es por medio de la misma que podemos darnos
cuenta de los actos que desde hace tiempo se realizan para explicar el fenómeno
antisocial, para poder evitarlo o controlarlo; como tal, logro convertirse en una
disciplina científica, la cual ha desarrollado múltiples recursos derivadas de otras
disciplinas, hasta convertirse en una integración de diversas teorías e
instrumentos variados.

Dichas teorías, reflejan la preocupación del hombre por controlar el fenómeno


criminal, creando leyes, castigando a quien cometiesen una conducta prohibida,
estableciendo medidas para prevenir este tipo de conductas indebidas, etcétera.
Es así que, además surgió la necesidad de encontrar una forma de explicar este
fenómeno, dando respuesta a las interrogantes: ¿Qué es el crimen? ¿Por qué
delinque una persona?, ¿Cuáles son los factores que influyen en este tipo de
conducta?, ¿Por qué unas personas resultan ser criminales y otras no?, entre
otras; por lo tanto, en la búsqueda de dar una respuesta solida a estos
cuestionamientos es que se va construyendo la disciplina conocida como
“Criminología”.

2. ETAPA PRIMITIVA
Esta etapa abarca desde la Edad Antigua hasta inicios de la Edad Media; durante
esta época, se intentaba dar respuesta a la problemática criminal, a través de
explicaciones de tipo religioso, mágico o sobrenatural y filosófico; es decir, se llegó
a suponer que las causas del crimen tenían orígenes divinos o bien eran producto
de atribuciones mágicas, ocultas e inaccesibles.

2.1. EL HOMBRE PRIMITIVO

En un primer periodo, dentro de esta etapa se da el periodo conocido como “De


Venganza Privada”, en donde los delitos no se encontraban regulados, ya que no
existía alguna autoridad física que velara por la seguridad de las primeras tribus
de hombres. Estas tribus se gestionaban por medio del “tótem” o el “tabú“, reglas
no escritas, pero conocidas por todos ellos, es decir tradiciones o principios
morales que dicha sociedad adoptaba, los cuales eran transmitidos de generación
en generación.

Dentro de este primer periodo, algunos autores consideran que no existen indicios
de la Criminología, debido a que todas las conductas que podrían llamarse
antisociales no pueden mencionarse, ni prevenirse, ni explicarse, pues forman un
“tabú” y son atribuidas a fuerzas sobrenaturales o a una falla en el “tótem”, por lo
tanto, aquel que violaba dicho “tabú” era separado de la tribu o también el mismo

4
se separaba de dicho grupo, ya que uno de los rasgos distintivos del “tabú” era
que el castigo tenía su origen en una fuerza interior que llevaba al culpable a
confesar el mismo su crimen e incluso a autocastigarse, esto debido al temor
sagrado, el cual era un sentimiento estrechamente ligado al “tabú”.

Respecto a lo anterior, Freud señala que “el origen del sistema penal humano se
remonta al tabú; esto es en principio, era el tabú violado el que tomaba venganza;
más tarde fueron los dioses y por último la sociedad quien se encargó del castigo
del ofensor”3. Es por ello que este rasgo en común que distingue a estas tribus
versa sobre un fundamento mágico-religioso, del cual están impugnados todos los
actos de la vida de los individuos, estos vínculos que unen a los miembros de
estas tribus son más afectivos que los de la razón. Por lo tanto, no existen muchos
elementos que sean de utilidad para el estudio del sujeto antisocial, solo existe la
atribución del crimen a fuerzas sobrenaturales, causas misteriosas, a cosas y
personajes al borde de la fantasía y de la comprensión humana.

Posteriormente, tenemos el periodo conocido como “De Venganza Divina”, en


dicho periodo podemos ver que ya existe una autoridad civil, formada por
sacerdotes y soldados, que son los encargados de velar por el cumplimiento de
los mandatos divinos. En general la religión ha sido considerada como la relación
especial que tiene una persona con aquello que está más allá de su entendimiento
y su alcance, ya sea una deidad o varias de ellas.

En este periodo, el delito se consideraba una ofensa divina, por lo que la justicia
se administraba en nombre de los dioses; es a través de la religión que se buscó
dar una explicación a las principales interrogantes del hombre, entre ellas la
respuesta al fenómeno criminológico, además de utilizarla como un poderoso
medio inhibitorio y preventivo de la criminalidad. Por tanto, si una persona cree en
una entidad superior, o varias, dependiendo del tipo de religión que se creía, es a
esta autoridad a quien la persona tendrá que dar cuentas de los actos que realice,
buenos y malos, siendo los últimos los que en general se deben evitar para evitar
un castigo por parte del mismo.

Hernandez Aparicio señala que: “Esta evolución del ser humano se encuentra
ligada, a su vez, con la necesidad de creer en la protección de un dios que
necesita que se castigue, a través del sacerdote supremo o jefe de un clan o tribu,
el actuar de los hombres al despertar la furia de ese dios desconocido
(manifestaciones de la naturaleza)”4

En mi particular punto de vista, considero que la necesidad de creer en una fuerza


trascendental que va más allá de la comprensión, es inherente al ser humano,
debido a que permea en una convicción interna de la persona o grupo de
personas la cual implica la creencia de que todo lo que sucede tiene una razón
ser, aunque no podamos entenderla, otorgando cierta certeza a la persona o
personas de que el universo tiene un sentido y por tanto un propósito.

5
(3) Freud, Segismundo .Tótem y tabú. Madrid, España, 1948, Pág. 419 y sig.
(4) Introducción al Estudio de la Criminología; Editorial Porrúa, México, 2013. Pág. 25.
2.2. MESOPOTAMIA

Es Mesopotamia, la región que se considera el lugar que dio origen a las primeras
grandes civilizaciones como son los: Sumerios, Acadios, Asirios y Babilónicos,
estos últimos fueron los primeros en redactar diversos textos que resultan ser los
antecedentes más antiguos de la Criminología y el Derecho, el de mayor influencia
resulta ser el Código de Hammurabi. Dicho Código, viene a ser el primero en su
género y uno de los más importantes escritos conocidos de la historia, mismo que
es fuente de otras disciplinas; se trataba en parte de una guía de procedimientos
legales, que regulaba conductas ilícitas e imponía un castigo a las mismas,
coadyuvo a proteger a los ciudadanos y a acabar con la anarquía jurídica.

Este Código ayudo en gran medida a terminar con la corrupción de la


administración babilónica, quitando la función judicial a los sacerdotes y dándosela
a los jueces. Además, en este documento se encontraban diversas disposiciones
preventivas, conjuntamente con un plan de Política Criminológica, que versaba en
la protección de los delincuentes pobres, para que no quedasen desamparados,
creando la figura que se conoció como Tribunal Superior de Apelación. Por otra
parte, a través de este código se instituyo lo que se conoce en la actualidad como
la Ley del Talión, “ojo por ojo, diente por diente”. 5

2.3 EGIPTO

En Egipto podemos encontrar los primeros indicios de la aplicación de métodos


para la identificación criminal, así como de la Medicina Forense; una manera de
como los egipcios aplicaban los primeros métodos de identificación criminal
inventados por ellos era, por ejemplo, cuando una persona había sido acusada de
cometer un crimen, esta era despojada de sus dientes incisivos para poder
identificarla. Cabe mencionar que este método a la larga
dejo de funcionar, debido a que los egipcios eran notables médicos y por lo tanto
había algunos que se dedicaban a hacer réplicas de los dientes sustraídos a los
criminales.6

2.4. GRECIA

En gran parte de la cultura griega se puede apreciar como ellos abordaban la


problemática del crimen, a través de la mitología griega, las expresiones artísticas
y la filosofía. De acuerdo a Rodríguez Manzanera, la mitología griega, se
caracteriza por tener un alto contenido criminógeno, que describe un amplio
catálogo de delitos como homicidios, robos, violaciones, en donde “Los hombres
son considerados como simples juguetes de los dioses, que juegan una especie
de macabro ajedrez con la especie humana”7.

6
Resulto complicado en esta época atribuir la responsabilidad criminal ya que
durante este tiempo existió una gran influencia divina, por lo que, de alguna
manera se justificaba este tipo de conductas.

(5) Hikal, Wael, Introducción al Estudio de la Criminología; Editorial Porrúa, México, 2013. Pág.26.
(6) y (7) Rodríguez Manzanera, Luis, Criminología. México, 1996 Pág. 152 y 156.
A pesar de ello, es aquí donde surgen las primeras estructuras del pensamiento
criminológico; de igual manera aparecen los primeros grandes pensadores que
fueron forjando las bases de las distintas corrientes que más tarde darían forma a
la Criminología, entre ellos podemos identificar a Hipócrates, Platón y Aristóteles
como los principales representantes del pensamiento criminológico de la cultura
griega, es debido a sus aportaciones que podemos distinguir las tres corrientes de
pensamiento o tendencias criminológicas básicas: Biológica, Sociológica y
Psicológica, representadas por cada uno de estos personajes respectivamente.

De manera particular, podemos considerar a cada uno de ellos como fundador de


cada una de estas corrientes criminológicas de pensamiento, comenzando con
Hipócrates destacado médico que es considerado el iniciador de la corriente
biológica de la Criminología, pues explicaba que el comportamiento humano va a
depender del humor de cada individuo y por tal sustancia, de las cuatro básicas,
que esté predominado, así, si predomina la sangre será de carácter sanguíneo; si
por el contrario predomina la bilis, colérico; seria flemático si en su caso dominaba
el moco o flema; y resultaría melancólico si se trataba de la bilis negra.

En cuanto a la corriente sociológica, se considera al filósofo Platón su iniciador


debido a que en sus teorías sostenía que el crimen era producto del medio
ambiente, pobreza, miseria, estos factores eran considerados por el como agentes
provocadores fundamentales. De igual manera, se considera a Aristóteles como
iniciador de la corriente psicológica, ya que estableció una relación clara entre
configuración del cuerpo y las facultades mentales, concuerda con Platón en la
influencia de los elementos provocadores; sin embargo añade que los delitos más
graves no se cometen para obtener lo necesario sino lo superfluo.

Otros filósofos importantes de la época como Hesíodo, Pitágoras, Heraclio,


Protágoras, Sócrates dieron su opinión respecto al origen y el problema de la
conducta criminal, además del castigo que se debía aplicar; sin embargo, su
reflexión acerca de la conducta antisocial no estuvo centrada en un
procedimiento científico en la praxis, que es un presupuesto determinante para la
investigación criminología; es debido a la falta de este sentido científico realista,
que las opiniones emitidas sobre este tipo de conductas, solo significan en la
historia meros indicios en la búsqueda de las causas de la conducta antisocial; a
tales efectos, se puede afirmar que todos coincidieron que el delito se debe a
una deficiencias físicas o mentales e incluso a la herencia.

2.5. ROMA

Este periodo abarca desde la Monarquía hasta la caída del Imperio Romano de
Occidente, siendo su rasgo más distintivo el carácter absolutista y de intimidación

7
que predomino durante la dominación romana. Durante su domino la pena tenía
una doble finalidad, por una parte debía ser intimidatoria, atemorizando a la
sociedad de tal forma que éstos no cometiesen ningún delito por la pena que les
pudiese caer, por otra parte, la pena era una forma de que el delincuente expiase
su culpa, retribuyendo el daño social causado con el crimen. 8
(8) López Gobernado, Carlos Investigación criminal en la antigua Roma, Articulo Historia de la Criminología 2011.
Además, la responsabilidad penal podía recaer en los familiares del acusado, ya
que la autoridad gozaba de absoluta arbitrariedad a la hora de aplicar algún
castigo. Un ejemplo de lo anterior lo podríamos encontrar en el relato ficticio de
Ben-Hur, en el cual nos muestra el castigo que se le aplico al protagonista y a su
familia por supuestamente atacar al prefecto Poncio Pilatos, siendo Ben-Hur
condenado a trabajar en las galeras, y su demás familia encerrada en cuevas por
el resto de sus días, sin antes haber un juicio.

Cabe mencionar, que uno de los filósofos más destacados de este periodo vino a
ser Seneca, el cual es considerado como uno de los más grandes criminólogos de
la edad antigua o también es considerado el primer criminólogo pues habla de
factores biológicos, psicológicos y sociales en el crimen, propuestas de políticas
criminológicas, la pena como mecanismo de tratamiento individual y la eficacia de
estudios individualizados en el delincuente, además de determinar la ira como
factor determinante en el delito.

3. ETAPA PSEUDO-CIENTIFICA
Respecto a la Edad Media, esta etapa se caracteriza por ser un período de
innovaciones donde hubo todo tipo de hechos y procesos trascendentales, tanto
positivos como negativos para la humanidad, es así que surgieron pseudo-
ciencias para tratar de dar explicación y solución a la conducta anormal criminal y
antisocial.

Durante esta edad, el desarrollo de la civilización fue de manera lenta, donde se


necesitó de varios siglos para el desarrollo del pensamiento humano teniendo
como base, el pensamiento científico, sin el cual no podrían haberse explicado
distintos fenómenos; sin embargo, aquellas inquietudes que no podían encontrar
una respuesta o un razonamiento de carácter científico, se le atribuía una
explicación divina o diabólica.

Es en esta era, que se produce un lento paso hacia una nueva interpretación de la
vida, esta edad fue básica en la creación de los más concretos antecedentes de lo
que fuera después la Criminología, en la búsqueda por determinar las causas que
llevaban al hombre a delinquir.

3.1. Las Ciencias Ocultas

Al no establecerse todavía el estudio científico del ser humano sobre su conducta,


los pensadores científicos encontraban el porqué de este tipo de conductas del
hombre en las llamadas ciencias ocultas. Fue a través de ciencias como la

8
Astrología que se pretendió descifrar la personalidad del hombre o su carácter, de
acuerdo al signo en que este nació, otros métodos que se utilizaban era la
observación de los ojos, de las arrugas de la frente, o las líneas de las manos
(Fisonomía).9

(9) Hikal, Wael, Introducción al Estudio de la Criminología; Editorial Porrúa, México, 2013. Pág.59
Dentro este tipo de disciplinas tenemos a la Demonología, la cual intento atribuir
de singular manera las causas de los excesos de la conducta, a posesiones
diabólicas de algunos hombres, menciona Constancio Bernaldo de Quiroz: “De
todas estas ciencias (hablando de las ciencias ocultas) más que a ninguna, a la
que principalmente se debe reconocer como la madre en línea recta de la
Criminología actual, aún más que la fisionomía, aún más que las otras ciencias
ocultas que trataron de establecer la relación entre cuerpo y alma, entre lo
orgánico y lo psíquico, es la Demonología”10

Esta concepción influyo por generaciones en el pensamiento humano dando lugar


a episodios lamentables en la historia del hombre como la Santa Inquisición, no
fue sino hasta el descubrimiento de la Psiquiatría, que se trabajó en firmes
verdades científicas que fueron siendo adoptadas a medida que se fuesen
produciendo los descubrimientos y así estos cambios de la mentalidad se fueron
adhiriendo a la sociedad.

Santo Tomas de Aquino

Uno de los más destacados pensadores de esta época fue Santo Tomás de
Aquino (canonizado como santo por la iglesia católica), quien se destaca por
sentar las bases de la filosofía del derecho penal en su obra Escolástica, para
investigar los crímenes de la época; sin embargo, en lo que respecta al
pensamiento criminológico, no aporto un conocimiento solido sobre la conducta
desviada ya que defiende la idea de la predisposición, pero también defiende la
idea del libre albedrío; de igual manera sostiene que existe una tendencia al mal
pero también existe una autonomía a la voluntad.

Santo Tomas Moro

Otro destacado pensador de esta época resulto ser Santo Tomás Moro (también
considerado santo por la iglesia católica), quien realizo importantes aportaciones
acerca de la vinculación del crimen con los factores socioeconómicos y con la
estructura social. Para este autor el crimen responde a una diversidad de factores,
pero de todos ellos, los más relevantes resultan ser los socioeconómicos, por
ejemplo: la desigual distribución de la riqueza.

Adopto una férrea postura crítica en contra de la rigurosidad del sistema penal de
su época, respecto a la dureza y la desproporcionalidad al imponer los castigos,
considerando que algunas sanciones no correspondían a la gravedad de los actos
que reprimían. Luchó por la proporcionalidad de las penas; porque para un delito
pequeño debía haber una pena pequeña y para un delito grave de igual manera

9
debía haber una pena grave, ya que consideraba que si el criminal sabe que
igualmente será ejecutado tanto si roba un pan como si se conviertese en
salteador de caminos, este preferirá jugársela siendo salteador de caminos. Abogó
por una política preventiva del Estado y en la creación de un “Derecho Premial”,
donde se premia al ciudadano virtuoso.
(10) Rodríguez Manzanera, Luis cita hecha sobre Constancio Bernaldo de Quirós de su obra “Criminología”. México 1957
Se puede considerar su filosofía referente al castigo como del tipo correccionalista,
ya que la pena debe de estar dirigida para corregir al sujeto, por lo que, el sujeto
debe estar compurgando la misma hasta que se haya corregido.

Así pues, al final de esta edad comienza la era moderna, con una gran intensidad
por explicar los fenómenos reales tanto físicos como psíquicos de las conductas
humanas influyentes en el delito. En este aspecto, la Criminología, como ciencia
empírica y explicativa, se forma de diversas ramas de la investigación humana,
que al final dieron su origen como una disciplina propia, con sus propios métodos
de investigación.

4. ETAPA PRE-CIENTIFICA
En lo que respecta a esta etapa, destacan dos grandes movimientos, por un lado
la Ilustración y por el otro el Positivismo. La Ilustración fue un movimiento
ideológico, científico y cultural europeo que se desarrolló especialmente en
Francia e Inglaterra desde inicios del siglo XVIII, hasta el comienzo de la
Revolución francesa, nace como un movimiento político, filosófico, cultural, de
carácter humanitario.

Los pensadores de esta época guiados por un fin práctico, buscaron el progreso
material del individuo y propusieron un conjunto de nuevas ideas, según las cuales
sólo la razón podía perfeccionar a la humanidad y conducirla a una nueva era de
progreso. Bajo su concepción, el hombre es esencialmente racional, y su
racionalidad puede llevarlo a la libertad. También creían en la perfectibilidad del
hombre, ya que con el hecho de ser infinitamente perfectible, a través de la crítica
a las instituciones sociales existentes se podía transformar las mismas, así de esta
manera el hombre podía conquistar un nivel mayor de libertad; sin embargo,
mientras estas instituciones continuaran siendo irracionales, se estaría yendo en
contra de la naturaleza básica del hombre, reprimiendo dichas facultades. 11

Las nuevas corrientes ideológicas, chocan contra los antiguos regímenes


absolutistas y las clases privilegiadas, estimulando el descontento popular y
preparando el ambiente que culminó con el estallido de la Revolución Francesa en
1789. Algunas de las características principales de la Ilustración son: la búsqueda
de la verdad por medios racionales, la negación del poder absoluto del monarca,
la necesidad de igualdad social, la lucha por la libertad religiosa y la libertad de
comercio, entre otras.

10
En este periodo histórico, un grupo importante de autores ilustrados y
enciclopedistas mantuvieron una fuerte actitud crítica frente al antiguo régimen
que someten a la luz de la razón, del derecho natural, destacando entre ellos
Montesquieu y su corriente racionalista, la corriente iusnaturalista de Pufendorf y
la utilitarista de Bentham.12

(11) y (12) Bergalli, Roberto; Juan Bustos; Carlos González; Teresa Miralles; Ángel; Carles Viladas De Sola, A; El Pensamiento
Criminológico; Ed. Temis. Pág. 15 y 30
A pesar de sus diferencias, se oponen al Derecho y la Jurisprudencia vigentes
hasta finales del siglo XVIII, dando cabida al surgimiento a una nueva cultura de
legalidad y humanista que permitiera al hombre salir de la obscuridad, esta nueva
Filosofía de las Luces será el principal legado para la llamada Escuela Clásica de
la que hablare a continuación.

4.1. Escuela Clásica

Esta escuela surge como una reacción a las críticas que versaban sobre el
sistema criminal imperante en la época, esto motivo a realizar un completo
reordenamiento en la conceptualización de las ideas político-filosóficas. Los
positivistas, fueron quienes bautizaron con este nombre, a las doctrinas anteriores
a las suyas que no se adaptaban a su nuevo pensamiento. Esta escuela no existió
como tal, ya que no se erigió en algún lugar, sede o al menos un jefe que llevara la
orientación de la Escuela Clásica; de hecho la mayoría de los representantes de
esta escuela ignoraban que pertenecían a la misma y que se les denominaría de
esa forma.13

Bajo la etiqueta de clásicos se agrupo a estos autores y tendencias divergentes en


muchos puntos de vista, inclusive algunos contradictorios, pero que presentan una
serie de concepciones unitarias acerca de postulados fundamentales, lo que
permitió a la escuela positivista estudiarlos de mejor manera. Defiende ante todo
la idea del hombre como un ser libre, racional e igual, de igual forma defiende la
idea del libre albedrío, ya que el hombre está dotado con capacidad de decisión y
de autodeterminación, por tanto no está sujeto a determinismos, y tampoco a
fuerzas divinas, es así que es el propio hombre quien elige libremente su carrera
criminal.

Esta concepción clásica, tuvo su origen en el principio de que el ser humano es el


centro del universo, dueño absoluto de sí mismo y de sus actos, siendo la libertad
su principal atributo, ya que por medio de ella los hombres son todos iguales, sin
hacer distinción entre el hombre delincuente y el que no lo es; por lo tanto el
comportamiento delictivo solo puede comprenderse como consecuencia del mal
uso de la libertad en una situación concreta, no a impulsos internas o externos. 14

La escuela clásica no busca las causas del delito, ya que el hombre con su
libertad y capacidad de decisión no ha sabido elegir el camino que más le
convenía, por tanto sólo estudiaba el delito como tal y la sanción, pero no estudia
el delincuente. Siempre sancionaba al delincuente, en razón de que existe una

11
irracionalidad en el acto y no ve las causas que llevaron al delincuente a cometer
los mismos, por tanto no le fue posible implementar la aplicación de las medidas
de seguridad. Dentro de los principales representantes de la escuela clásica
destaca la figura de Cesare Becaria, considerado el precursor de las Ciencias
Penales gracias a su libro “De los delitos y de las penas” publicado en 1764 y
donde el pensador propugna el principio de proporcionalidad de las penas, pues
considera que los métodos utilizados los centros penitenciarios son inhumanos y
degradantes así como ineficaces.

(13) y (14) Molina, Arrubia, Carlos; Evolución Histórica de la Criminología; Dialnet.Pag. 125 y 127
La obra de Beccaria muestra una crítica severa a la desigualdad del ciudadano
ante la Ley, a la pena de muerte y la confiscación, al empleo del tormento entre
otros asuntos, pero también ofrece aportaciones respecto a temas vinculados al
proceso penal como serían: la detención preventiva, el sistema de pruebas, acerca
del jurado, la publicidad de los juicios. Respecto a una política criminal, Beccaria
tiene cinco planteamientos: leyes claras y simples, predominio de la libertad y la
razón sobre el oscurantismo, ejemplar funcionamiento de la justicia libre de
corrupciones, recompensas al ciudadano honesto, elevación de los niveles
culturales y educativos del pueblo.
Otro importante representante de esta escuela seria J. Bentham, quien se
desenvolvió en el ámbito penitenciario, siendo el precursor más eminente de los
sistemas carcelarios, su obra más importante sería con su obra “Tratado de las
Penas y las Recompensas, en donde abordara temas fundamentales de la ciencia
penal como delito, delincuente y pena. Este autor implemento la idea del sistema
panóptico en las prisiones, el cual consistía en un edificio circular de varios pisos
con celdas y ventanas grandes, y en medio de este edificio había una torre de
vigilancia que permitirá la observación de todas las celdas de la prisión.
Su concepción penitenciaria se base en tres reglas:
· Regla de la dulzura, eliminación de sufrimientos corporales.
· Regla de la severidad.
· Regla de la economía, tratar de evitar gastos innecesarios.
De esta forma, considera que la finalidad de la prisión es reformar y corregir a los
presos, con el fin de que al salir en libertad no constituyan una desgracia para el
condenado y para la sociedad. Podemos distinguir en su obra las ideas principales
de la Escuela Clásica, respecto al delito, en donde no es el delincuente lo
fundamental, sino el hecho. El autor es secundario cualquiera es capaz de
cometer un delito, no hay diferencias entre el criminal y el que respeta la Ley,
salvo el hecho.
Dentro de los escritores clásicos destacados tenemos a Francisco Carrara, que en
1859 escribió su obra más importante “Programa di Diritto Criminale”, lo cual llevo
a su verdadera esencia jurídica al Derecho Penal y son tan importantes porque

12
cuando se hace referencia a la Escuela Clásica son las doctrinas de Carrara las
que se someten a exámenes. Dichas doctrinas representan el término de la
evolución de la Escuela Clásica. Este autor sostiene que el derecho es connatural
al hombre.15
La ciencia del derecho criminal es un orden de razones emanadas de la ley moral,
preexistente a las leyes humanas. El delito es un ente jurídico que reconoce dos
fuerzas esenciales. Según Carrara delito es: “La infracción de la ley del estado,
promulgada para proteger la seguridad de los ciudadanos, resultante de un acto
externo del hombre, positivo o negativo, moralmente imputable o políticamente
engañoso”. La pena no debe exceder a las necesidades de la tutela jurídica; si
excede, ya no es protección del derecho sino violación del mismo. La
imputabilidad penal se funda en el principio del libre albedrío.
(15) Molina, Arrubia, Carlos; Evolución Histórica de la Criminología; Dialnet Pág. 128
4.1.1. Principales postulados

ALGUNOS POSTULADOS DE LA
ESCUELA CLÁSICA.16
Normalidad del delincuente, no existen diferencias cualitativas entre el
delincuente del que no lo es.

Irracionalidad del crimen, el crimen es un acto irracional e incomprensible


ya que el hombre con su libertad y capacidad de decisión no ha sabido
elegir el camino que más le convenía.

Establecen una prioridad del hecho sobre el autor, el delincuente sólo


aparecerá como el sujeto activo del delito y no se le prestará mayor
atención.

Tienen un enfoque reactivo del problema criminal. La aportación


penológica ha sido su mayor éxito, fundamentan la legitimación y
delimitación del castigo. Sacan conclusiones sobre el cuándo, el cómo y
por qué se castigan los delitos

Explicación situacional del hecho delictivo, el crimen es consecuencia d un


mal uso de la libertad, todos los ciudadanos son criminales en potencia
porque todos son libres.

Aportación en el ámbito de la política criminal, donde la escuela clásica sí


legitima el uso sistemático del castigo como instrumento del control del

13
crimen.

4.2 La Escuela Positivista

La aparición del positivismo fue consecuencia del auge alcanzado por las ciencias
naturales en los estudios filosóficos del siglo XIX, y se hizo sentir en todas las
disciplinas incluyendo al derecho, la psiquiatría, la criminología y la psicología. El
positivismo, es una postura filosófica que tuvo un gran impacto e influencia en el
campo científico y en la búsqueda del conocimiento comprobable y válido. 17

(16) Hikal, Wael, Introducción al Estudio de la Criminología; Editorial Porrúa, México, 2013. Pág.20912)
(17) Bergalli, Roberto; Juan Bustos; Carlos González; Teresa Miralles; Ángel; El Pensamiento Criminológico; Ed. Temis. Pág. 31
También hizo eco, como se señaló anteriormente, en la criminología, el derecho
penal y la política criminal; así lo indica Elbert: “El positivismo está estrechamente
ligado a la búsqueda metódica sustentada en lo experimental, rechazando
nociones religiosas, morales, apriorísticas o conceptos abstractos, universales o
absolutos, Lo que no fuese demostrable materialmente, por vía de
experimentación reproducible, no podía ser científico” 18. El positivismo se expandió
exitosamente, como un pensamiento progresista, revolucionario, capaz de sacar al
mundo del atraso y del oscurantismo religioso o supersticioso de los siglos
precedentes. El hombre y la ciencia serían artífices de todas las explicaciones y
los descubrimientos, capaces de superar todas las enfermedades, los obstáculos
sociales y hasta la propia naturaleza.

La aparición de la Escuela Positiva, fue una gran revolución, hasta ese momento
el delito y el delincuente no había sido estudiado desde el enfoque causal
explicativo, con su aparición se empiezan a aplicar los métodos
experimentales, con la intención de  encontrar las causas profundas de la
delincuencia, en las anomalías corporales y mentales de los individuos, además
de buscar un método para suprimir estas causas. El positivismo, observa al
delincuente como un ser anormal, como un cáncer en la sociedad, postura que
con el transcurso del tiempo resulto errada, en virtud que estudiaron el delito como
un hecho auto referente, identificable por sí mismo, estudiando al delincuente
aislado con independencia total del medio externo y su influencia.

El positivismo criminológico, destronaría al hombre, como centro del universo y su


protagonismo en el mundo natural, en el universo y en la historia. Es Enrico Ferri
quien niega que el hombre sea el dueño absoluto de sí mismo y de sus actos, sino
una combinación transitoria. El comportamiento del individual de la persona se vio
inmerso en la dinámica de causa-efecto, con la que se rige el mundo natural o el
mundo social.

Esta nueva visión provocó un cambio de método en el estudio del delincuente, el


medio, el delito y de las posibles soluciones que podían aportar los avances

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científicos del momento, y tenían como base las ideas evolucionistas. En primer
lugar los positivistas se plantearon cómo era posible controlar el fenómeno
criminal y de igual forma prevenirlo; para ello tuvieron que generar nuevos
conocimientos y experiencias que les fueron suministrando datos, comprendiendo
los factores que permitan facilitar la toma de decisiones correcta y oportuna para
tomar acciones pertinentes. De esta forma se pudieron pronosticar ciertas causas
de por qué el hombre delinque, con base en el nuevo conocimiento se pudo
aplicar el tratamiento correctivo y en parte se logró controlar el problema.

De lo anterior, la escuela positivista propone la necesidad de profundizar en el


estudio natural del delito y sus causas, lo que permitirá descubrir las medidas
correctivas para combatir el fenómeno criminal, pretendiendo incluso que un día
se podría llegar a predecir quién y en qué forma delinquirá; más aún, el número de
delitos que se darían en cada época o región.
(18) Elbert, C. A. (2001). Manual básico de criminología. Buenos Aires: Eudeba.
La escuela positiva aplica a la investigación de la criminalidad el método inductivo-
experimental, debido a que el pensamiento científico debe versar sobre la
experiencia y la observación, a través del uso de este método inductivo, ya que de
lo contrario las conclusiones no podrían ser consideradas exactas. Asimismo, el
positivismo surgió como una consecuencia del auge alcanzado por las ciencias
naturales, por lo que es claro que se haya caracterizado por sus métodos
inductivos de indagación científica, a diferencia de los deductivos hasta entonces
empleados.19

El delito, para los positivistas, como hecho actual y real está dentro de los hechos
naturales. La base moral que se requería del ciudadano pasa a un segundo plano
ante la responsabilidad social de los individuos, que serán penados y no
sancionados, por el tiempo que sea necesario, para que el delincuente deje de ser
un peligro, luego de ser tratado con métodos científicos de protección social, que
buscan combatir la criminalidad y sus diferentes tipologías determinadas por los
estudios psico-biológicos.

Entre los más destacados representantes de esta escuela tenemos a: César


Lombroso, Enrique Ferri y Rafael Garófalo, estos últimos tres son considerados
los padres de la Criminología, derivado de todos sus estudios realizados a lo largo
de su tiempo y con base en los estudios que los primeros (Beccaria, Pinel, Darwin,
entre otros) desarrollaron para consolidar lo que en la actualidad se conoce como
Criminología. Este término (Criminología), fue expresado por primera vez por el
antropólogo Francés Pablo Topinnard en el año 1883. Posteriormente, a fines de
1885 es Rafael Garofalo quien la definió como la ciencia general de la criminalidad
y de las penas, por medio de su libro llamado Criminología. 20
La primera vez que la Criminología se lleva a cabo como un conocimiento
sistemático se presenta cuando el precursor de la Antropología Criminal, el médico
Franz Josef Gall, tiene la teoría de que el comportamiento tiene bases en las
funciones del cerebro; dichas teorías, además de los postulados acerca de la
evolución de las especies de Charles Darwin, en las que expresa que el
delincuente resulta ser una entidad no evolucionada,

15
Las ideas antes mencionadas fueron después retomadas años más tarde por el
notable médico César Lombroso, el cual estudió a los criminales en sus
características biológicas interiores (desórdenes congénitos) y exteriores
(características físicas); además de las psicológicas y las sociales. Por medio de la
observación de los cráneos de delincuentes, consideró que la conducta criminal de
una persona se puede atribuir a ciertas deformidades craneales.
Señalo que los criminales no solo presentaban una serie de signos no solo físicos,
sino que también de moralidad, comportamiento y socialización. Además realizo la
primera clasificación del criminal en delincuente nato, delincuente moral,
epiléptico, loco y pasional, esta ha servido como base para posteriores
clasificadores. Lombroso, trabajo en conjunto con Enrico Ferri prominente
sociólogo, y con Rafael Garofalo, destacado jurista y es debido a su trabajo en
unidad que se sentaron las bases de lo que se conoce al día de hoy como
Criminología.
(20) Rodríguez Manzanera, Luis, Criminología. México, 1996 Pág. 209
Las aportaciones de Enrico Ferri fueron en el campo de la Sociología y Psicología
Criminal, mientras que Lombroso realizo investigaciones acerca de los factores
fisiológicos que motivaban a los criminales, Ferri se encargó de investigar los
factores sociales y económicos, considerando que las razones por las cuales el
hombre se convierte en delincuente son ajenas a su voluntad, es debido a ello que
para Ferri el delito no existe, sino lo que existe son enfermedades que le han sido
heredadas al sujeto o las ha adquirido a lo largo de su vida.
Ferri se enfocó en el estudio de las características psicológicas, que creía eran las
responsables del desarrollo de la criminalidad en el individuo; entre ellas estaban
el habla, la escritura, el arte y la literatura, así como la insensibilidad moral y la
falta de repugnancia a la idea y ejecución del hecho delictivo, previo a su
realización, y la ausencia de remordimiento después de cometerlo.
Además argumento que los sentimientos como la religión, el honor y la lealtad no
contribuían al comportamiento criminal, pues estas ideas eran muy complicadas
para tener un impacto definitivo en la moral básica de las personas. Alego que
eran otros sentimientos, como el odio, el amor, la vanidad los que influenciaban
grandemente pues tenían más control sobre la moral de las personas. 21
Por otra parte, Garofalo enfocaba sus estudios hacia los condicionantes
fisiológicos que motivaban a los criminales. Señalo que la criminalidad se debía
abordar de igual manera desde una perspectiva psicológica y antropológica; estas
teorías versaban en torno al concepto de “Delito Natural” que definió como: “La
lesión de aquella parte de los sentimientos altruistas fundamentales de piedad o
probidad, en la medida en que son poseídos por una comunidad, y que son
indispensables para la adaptación del individuo a la sociedad”. 22
Fundamento la responsabilidad penal de acuerdo a la peligrosidad innata del
delincuente, además defendió que la única forma de evitar el delito era eliminando
los factores externos que le dan pie a la persona para delinquir, estableciendo una
relación causa-efecto. Su principal preocupación fue la aplicación de los

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postulados de la teoría criminológica en la práctica, tanto en el ámbito legislativo
como en el judicial, es por ello que realiza el primer esquema de las penas de
acuerdo no al delito que se cometió, sino a la clasificación de los criminales.
De esta manera fue así como se concibió dar explicación a las conductas
antisociales de manera científica, a través de estudios, observaciones,
experimentos, etc. Así, se empezó a dar respuestas científicas a los fenómenos
criminales, los cuales han ido evolucionando en nuevas formas y técnicas de
delincuencia), siendo la Criminología la encargada de dar respuesta a la
problemática criminal que llenan a la sociedad de inseguridad.

(21) Ferri, E. (1933). Principio de Derecho Criminal. Madrid: Editorial Reus.

(22) La criminología: estudio sobre el delito, sobre sus causas y la teoría de la represión (Turín, 1885).

4.2 Principales Postulados

ALGUNOS POSTULADOS DE LA
ESCUELA POSITIVISTA.23
El delito es solo un síntoma revelador de su estado peligroso.

Se rechaza lo abstracto para conceder carácter científico solo a lo que


pueda inducirse de la experiencia y de la observación.

El hombre carece de libertad de elección. El delincuente es un anormal.

Consecuencia natural de la negación del libre albedrío: la conducta


humana está determinada por factores de carácter físico-biológico,
psíquico y social.

Si el delito es resultado necesario de las causas apuntadas, tiene que ser


forzosamente un fenómeno natural y social.

Se sustituye la imputabilidad moral por la responsabilidad social. Si el


hombre se halla fatalmente impedido a delinquir, la sociedad se encuentra
también irremediablemente inclinada a defenderse

La sanción no debe corresponder a la gravedad objetiva de la infracción,


sino a la peligrosidad del autor.

17
La pena es una medida de defensa cuyo objetivo es la reforma de los
delincuentes readaptables y la segregación de los inadaptables por ello
interesa más la prevención que la represión; son más importantes las
medidas de seguridad que las mismas penas

(23) Rodríguez Manzanera, Luis, Criminología. México, 1996 Pág. 241

5. CONCLUSIONES
La Criminología surge como ciencia empírica apenas hace aproximadamente
doscientos años, cuando se empezó a dar respuestas científicas a los fenómenos
criminales, los cuales han ido evolucionando en nuevas formas de delinquir en la
actualidad, un ejemplo serían los ciberdelitos, siendo la Criminología la encargada
de dar respuesta a esos problemas criminales que llenan a la sociedad de
inseguridad.

A lo largo de la historia de la humanidad el pensamiento criminológico ha ido


evolucionando conforme al paso del tiempo, y desde la antigüedad, distintos
elementos la han caracterizado, como el temor sagrado, creencias divinas,
ciencias ocultas, humanismo y racionalidad entre otras. Es imperativo encontrar
una explicación a las conductas antisociales de manera científica, ello a través de
estudios, observaciones, experimentos, entre otros métodos, con el fin de
implementar programas de prevención y a su vez proporcionar un tratamiento
eficaz a las personas que han caído en este tipo de conductas.

Podemos afirmar que el delito denota una conducta antisocial, que se caracteriza
por ser una problema social y por lo tanto está regulado por el Derecho Penal;
esta conducta converge como consecuencia de una interacción de distintos
factores individuales y además sociales, que van construyendo la personalidad del
delincuente, tales como la interacción familiar, el entorno escolar, el grupo de
amigos, la situación laboral, etc. Es por ello que resulta imperativo el investigar
acerca de todos aquellos factores que dan origen a este tipo de conductas, así
como la prevención de las mismas. En la criminología actual abarca un mayor
rango en el objeto de su estudio, englobando no solo las causas internas y
externas por las que una persona delinque, sino además se encarga de estudiar a

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la víctima y el control social, poniendo especial atención en la idea de prevención
con el fin de evitar este tipo de conductas.

BIBLIOGRAFIA
De Quirós, Bernaldo Constancio, Criminología. Puebla, México, 1957.
Elbert, C. A. (2001). Manual básico de criminología. Buenos Aires: Eudeba.
Ferri, E. (1933). Principio de Derecho Criminal. Madrid: Editorial Reus.
Freud, Segismundo .Tótem y tabú. Madrid, España, 1948.
López Gobernado, Carlos Investigación criminal en la antigua Roma, Articulo Historia de la
Criminología 2011
La criminología: estudio sobre el delito, sobre sus causas y la teoría de la represión (Turín, 1885).
Rodríguez Manzanera, Luis, Criminología, Segunda Edición, Ciudad de México, Editorial Porrúa,
1981, Págs. 143-209 y 229 a la 253.
Hikal, Wael, Introducción al Estudio de la Criminología; Editorial Porrúa, México, 2013.
Bergalli, Roberto; Juan Bustos; Carlos González; Teresa Miralles; Ángel; Carles Viladas De Sola,
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Sainz C. J. (1975). La Ciencia del Derecho Penal y su Evolución. Barcelona: Bosch, S.A.
Molina, Arrubia, Carlos; Evolución Histórica de la Criminología;. Dialnet.

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