Está en la página 1de 4

Como mejorar la actitud de los trabajadores en relación

a la protección auditiva
Un análisis del factor humano en la protección auditiva y como generar cambios
Un análisis basado en un informe del Institute of Occupational Medicine (Instituto de Medicina del Trabajo
del Reino Unido)

Por: Brad Witt, Director para la Conservación de la Capacidad Auditiva


Howard Leight - Honeywell Safety Products

“Da un pescado a un hombre y se alimentará un día, enséñale a pescar y se alimentará toda su vida”

Este antiguo dicho nos habla sobre el valor del conocimiento


para cambiar comportamientos, y una investigación sin
precedentes patrocinada por el Servicio Ejecutivo de Salud y
Seguridad del Reino Unido (UK Health and Safety Executive)
muestra que el proverbio es verdadero tanto en el entorno de
trabajo como en los pueblos.

La exposición a ruidos peligrosos no es un problema reciente en


el entorno de trabajo, y así hay muchas posturas y hábitos que
están arraigados en los trabajadores. En los estudios
preparados en 2002, el Instituto de Medicina del Trabajo del
Reino Unido analizó el factor humano en la protección auditiva-
la postura de los trabajadores, la percepción del riesgo y su
comportamiento.

Lo que descubrieron confirmó mucho de lo que ya se sabía acerca de las prácticas de los trabajadores en
relación a la conservación de la capacidad auditiva, pero también surgieron algunos resultados inesperados.
Sobre todo, el análisis ofrece una serie de recomendaciones para cambiar la postura y el comportamiento
preexistente de los trabajadores expuestos a entornos de trabajo ruidosos.

El informe del Reino Unido encuestó 280 trabajadores en 18 empresas de diferentes sectores industriales.
Diversas empresas grandes, medianas y pequeñas formaron parte de los estudios. Además del sondeo entre
los trabajadores expuestos a ruidos, una encuesta separada fue dirigida a los gestores para una
comparación de resultados con aquellos ofrecidos por los trabajadores. La comparación nos dice si los
trabajadores comprenden el programa de protección auditiva de la misma manera que los gestores. En la
segunda etapa del análisis, en cuatro empresas seleccionadas fueron efectuadas acciones de intervención.
Se presentaron programas de capacitación/entrenamiento para la conservación de la capacidad auditiva
adaptados a las necesidades de los trabajadores en las cuatro empresas, y se analizaron los resultados post-
intervención ocho semanas después para determinar si se podían cuantificar los cambios de
comportamiento. Después de haber implementado muchas de las recomendaciones en las cuatro empresas,
los investigadores observaron un aumento del 70% en el uso de los protectores auditivos.

Los empleados

Los trabajadores de las dieciocho empresas mostraron conocimiento sobre los peligros básicos asociados al
ruido (reconocen que los ruidos altos dañan la audición permanentemente). Pero sólo 10 de los 280
entrevistados consiguieron identificar el límite reglamentar de ruido peligroso (85 dBA); los trabajadores
tampoco sabían que el nivel de ruido a 93 dBA es dos veces más fuerte que a 90 dBA.
Dos tercios de los trabajadores admitieron que sus empresas ya tenían un programa de protección auditiva,
con mayor frecuencia en empresas grandes (85% de los trabajadores de grandes empresas). A pesar del
programa estar en curso, 24% de los trabajadores no sabían de su existencia.

Los empleadores

Uno de los mayores malentendidos entre los empleadores con entornos de trabajo ruidosos era el concepto
del tiempo promedio ponderado de exposición. En lugar de calcular un promedio de 8 ó 10 horas de
exposición en una planta ruidosa, muchos empleadores simplemente determinaron todos los entornos con
picos ocasionales de 85 dBA como peligrosos. De esa forma, algunos de los entornos señalados como
peligrosos no lo eran, pues los niveles de ruido se encontraban abajo del límite de 85 DB. Esta
sobreprotección puede generar desconfianza sobre el programa, cuando los trabajadores son obligados a
utilizar la protección auditiva en ambientes que normalmente no son peligrosos.

Se observó algo muy inquietante en relación al tamaño de las empresas con altos niveles de ruido. La
acertada tendencia en las grandes empresas era primero utilizar el control técnico y administrativo para la
reducción de la exposición al ruido, y después utilizar los EPP. Por otra parte, las empresas menores
presentaron una confianza excesiva en los EPP, tal vez porque no comprendiesen la reglamentación o la
jerarquía de control y no tuviesen funcionarios capacitados para sugerir las herramientas para el control
técnico. En comparación con las grandes empresas, las empresas más pequeñas dependían del boca a boca
para el conocimiento de la reglamentación.

También hubo una evidente diferencia entre las respuestas de los gestores y aquellas ofrecidas por los
trabajadores expuestos a ruidos. En muchos de los lugares en los cuales los empleadores habían
suministrado entrenamientos/cursos de capacitación para la conservación de la capacidad auditiva, los
trabajadores no se acordaban de ellos o negaban haberlos recibido:

 Cuando la orientación sobre la conservación de la capacidad auditiva era ofrecida a los empleados
recién contratados, sólo el 27% de ellos reconocían haberla tenido.
 Cuando la capacitación sobre la conservación de la capacidad auditiva era proporcionada a través de
pósters, solamente un 46% de los trabajadores recordaban haberla recibido. Cuando la orientación fue
ofrecida utilizando folletos, sólo el 39% se acordaban del entrenamiento.
 En líneas generales, en las empresas cuyos gestores declararon que la capacitación había sido ofrecida,
alrededor de dos tercios de los trabajadores no se acordaban o no reconocían haberla recibido. Sólo
uno de cada cinco trabajadores recordaba las orientaciones sobre los factores que limitan la eficacia de
los protectores auditivos, aún cuando todos los gestores habían reportado que tal orientación había
sido dada.

Dentro de la conservación de la capacidad auditiva lo que se destacó como un aspecto memorable para los
trabajadores fue el examen audiométrico. El 83% de los trabajadores de las empresas en las que se realiza la
prueba de audiometría informaron que habían hecho el test. Muchos empleadores piensan que el momento
más eficiente para ofrecer capacitación sobre la conservación auditiva es durante la prueba de audiometría
anual, cuando el trabajador está sintonizado con su salud y seguridad.

Protectores Auditivos

El uso de la protección auditiva, en los dieciocho lugares sondeados, presentó una variable previsible que iba
desde el 10% hasta el 100%. Al igual que en otros estudios, las razones para no usar los protectores auditivos
que más se mencionaron fueron el confort y la comunicación. Los índices de utilización eran más bajos en
aquellos lugares donde los gestores habían determinado de forma arbitraria las áreas de riesgo (áreas de
riesgo mal delimitadas, o que integraban todas las áreas, lo que exigía el uso innecesario de protectores
auditivos). En esas condiciones, los trabajadores se creían en el derecho de “hacer trampa” aún cuando el
uso de los protectores auditivos fuese ocasionalmente necesario.

Mas el análisis también encontró algunos factores que se correlacionan con el uso intensivo de los
protectores auditivos. El uso de los protectores auditivos entre los trabajadores de forma frecuente era más
probable en las siguientes condiciones:

 Si entendían los efectos psicológicos de la exposición al ruido


 Donde existían los mayores niveles de ruido
 Donde el nivel de ruido era constante
 Cuando existía una rutina de trabajo
 Donde los administradores demostraron compromiso con la conservación de la capacidad auditiva
 Donde existía el apoyo de los compañeros

Los trabajadores con más conocimiento sobre los niveles de ruido y la conservación de la capacidad auditiva
también mostraron una mejor percepción sobre los riesgos (reconocer que los entornos de trabajo con alto
nivel de ruido dañan la audición de forma permanente). Lo que a su vez se relaciona con los índices de
utilización más altos de los protectores auditivos. Entre los trabajadores con mayor percepción de riesgos, el
60% usaban los protectores auditivos de forma asidua y sólo 3% nunca los utilizaban. El conocimiento
significa poder, dirían algunos, y de acuerdo con los resultados de estos estudios, el conocimiento significa
protección.

Recomendaciones para el uso efectivo de los protectores auditivos:

 Asegúrese que el stock de protectores auditivos adecuados sea suficiente. Utilice dispensadores de
tapones auditivos siempre que sea factible.
 Donde sea posible, se debe vincular el uso de los protectores auditivos a una rutina específica de
tareas (los mayores índices de uso fueron para aquellas actividades que exigían una rutina, y donde el
nivel de ruido era constante e inalterable) Se debe intentar integrar la protección auditiva a los
procedimientos operativos estándar para los equipos ruidosos.
 Asegúrese que los supervisores utilicen los protectores auditivos constantemente, aunque la
exposición al ruido sea por un periodo corto de tiempo que no exigiría el uso con base en el tiempo de
duración. Los empleados considerarán cualquier abandono de la protección exigida, aún si se trata de
los supervisores o visitantes, como una invitación para hacer lo mismo.

Capacitación / Entrenamiento

En la segunda etapa del análisis, los investigadores proporcionaron entrenamiento/capacitación para la


conservación de la capacidad auditiva en cuatro plantas seleccionadas. El contenido y la metodología de la
presentación fueron adaptados a cada empresa. Para determinar si los cambios de comportamiento eran a
largo plazo, se efectuaron evaluaciones post-capacitación después de ocho semanas del cierre de la misma.

La eficacia de la capacitación para la conservación de la capacidad auditiva se midió a través de dos factores:
contenido y método. En materia de contenido, la capacitación más eficaz presentó demostraciones de audio
de pérdida auditiva por ruido, ejemplos reales de ruidos peligrosos en el trabajo, oportunidades para que los
trabajadores se probasen diferentes tipos de protectores auditivos y demostraciones de cómo usarlos
correctamente. El contenido menos eficaz presentó explicaciones sobre la física del sonido y las
explicaciones en detalle de la normativa sobre ruidos.

En materia de metodología, la capacitación más efectiva fue la capacitación formal personal acompañada de
recursos visuales y de audio. En las empresas que dependían en gran medida de la capacitación informal,
material impreso o pósters, el escaso impacto de la capacitación era evidente: los trabajadores
normalmente no recordaban el contenido, y registraron el nivel más bajo en las actitudes para la
protección personal. Entre las empresas que ofrecían folletos como forma de difundir la capacitación, sólo
un tercio de los trabajadores recordaban dicha capacitación.

Recomendaciones para la capacitación eficiente:

 Utilizar demostraciones de audio de deterioro auditivo para mostrarles a los trabajadores los riesgos de
los ruidos peligrosos. La información impresa es útil como complemento pero ineficaz cuando usada por
sí sola.
 Los empleadores no pueden simplemente confiar en las instrucciones impresas de los productos para
una correcta colocación y uso de los mismos. Para que la capacitación sea eficaz, debe ser interesante,
pertinente y significativa para los empleados.
 Presentar testimonios de compañeros con problemas de pérdida auditiva que hablen sobre su pérdida
y como esto afectó su vida personal y social y que fomenten el uso de los protectores auditivos.

Busque comentarios y reacciones y evalúe la eficacia de la capacitación para determinar el contenido y la


metodología que sea más significativa para conseguir los cambios de comportamiento que mejoren la
audición.

¿Se pueden cambiar las actitudes personales en relación a la protección auditiva y el comportamiento en el
trabajo a través del conocimiento y la capacitación? En estos extensos estudios la respuesta es un sí
rotundo. En la mayoría de las empresas, se observó que el uso de los protectores auditivos aumentó
significativamente después de las eficientes intervenciones de capacitación, proporcionando informaciones
útiles de forma interesante.

Para mayor información:

- contáctese con su Distribuidor Honeywell más cercano

- llame a la nuestro Customer Service: Latinoamérica: + 55.11.3309.1021


México: 001.800.446.1495
Argentina: + 54.11.4302.5802

- contáctenos a través de hsp.latino@honeywell.com

También podría gustarte