EL MUNDO DEL ANTIGUO TESTAMENTO

J.I. PACKER, MERRIL C. TENNEY, WILLIAM WHITE JR

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Una Reseña de Lectura

Presentada al

Dr. Dominick Hernández

The Southern Baptist Theological Seminary

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En cumplimiento parcial
de los requisitos para 20200H WW

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Por

Consuelo Torres Jordan

ctorresjordan520@students.sbts.edu
Noviembre 11 de 2020
 INTRODUCCION

Como cristianos, cada uno de nosotros tenemos diferentes testimonios en cuanto a cómo
conocimos a Jesucristo como Salvador personal y, asimismo, cada uno tiene diferentes vivencias

en cuanto al crecimiento en su vida cristiana y el grado de conocimiento Bíblico. En mi caso,

conocí a Jesucristo a la edad de 14 años, y mis primeros años como cristiana fueron marcados

por un gran deseo por conocer la Biblia y crecer espiritualmente. A mis 20 años fui a estudiar a
un Instituto Bíblico, pero por mi inmadurez, decidí a qué materias prestar atención y a cuáles no.

Decidí que no era importante estudiar historia pues no era de mi agrado y el no hacerlo trajo gran
desconocimiento que afectaba mi comprensión del Antiguo Testamento.

Al pasar los años me he dado cuenta de mi ignorancia en cuanto a temas tan importantes como

los que trata el libro: “El mundo del Antiguo Testamento”. Es por esta razón que, al hacer lectura
de él, mi entendimiento acerca de los acontecimientos en esa época, abrieron mis ojos y pude
comprender con mayor claridad el contexto en el cual ocurrieron los diferentes relatos del

Antiguo Testamento. Mi deseo es lograr plasmar en este escrito parte de esta comprensión.

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 EL MUNDO DEL ANTIGUO TESTAMENTO

El libro “El mundo del Antiguo Testamento” comienza hablándonos acerca del mundo antiguo, y
al leerlo, podemos conocer un poco más acerca de los pueblos que influyeron sobre la historia de

Israel justamente durante el periodo del Antiguo Testamento. Si leemos la Biblia,

específicamente, el Antiguo Testamento sin tener esta clase de conocimiento, será difícil

entender o interpretar ciertos pasajes debido a las grandes diferencias al mundo actual en el cual

nacimos y vivimos.

En primer lugar, este libro expone los diferentes periodos de la historia, haciendo mención a la

revolución neolítica o “edad de piedra”, llevándonos a contextualizar la época donde vivieron los

patriarcas. Luego se mencionan los “estados religiosos arcaicos” quienes alcanzaron grandes
logros al por ejemplo inventar la escritura y plasmar registros económicos permanentes llevando

después a la época del “establecimiento de los imperios”, uno de ellos, Egipto. Esta fue la época

de Abraham y sus descendientes. Después se llega a la “época de Amarna” en la cual se produjo

el Éxodo y la conquista de Canaán y durante el cual vivieron Moisés y Josué. Después de esta
surgieron los estados multinacionales donde encontramos a Saúl, David y sus descendientes, y
fue en este periodo de tiempo donde las dos tribus del sur se separaron de las diez tribus del

norte. Luego llegó la era de la supremacía griega, periodo durante el cual los judíos volvieron a

Palestina, sobresaliendo Alejandro Magno quien introdujo el griego, lengua en la cual fue escrito
el Nuevo Testamento. Después de esta era, llegó la “era romana”, periodo en el cual nació
Jesucristo.

La Biblia nos da información acerca de estas épocas; pero también hay fuentes seculares que nos

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hablan acerca de esos tiempos como por ejemplo los textos de Sumeria y Babilonia, Deir el-

Bahari, ciudades helenísticas de Egipto, las cuevas de Qumrán entre otras. Considero que es muy

provechoso conocer estos escritos que abren nuestros ojos acerca de lo que creían los hombres en

diferentes épocas y poder tener, en base a la lectura de estos, fundamentos sólidos para defender

la Biblia.

Es interesante entender que el Antiguo testamento se puede dividir en cuatro secciones: Desde la

creación hasta Abraham, desde Abraham hasta Moisés, desde Moisés hasta Saúl y desde Saúl
hasta Cristo. Esta división hace más sencilla la lectura y comprensión del Antiguo Testamento y

en medio de estos acontecimientos se puede ver una cronología que nos ayuda a comprender lo
que Dios dijo y cómo actuó en cada circunstancia.

Al leer la cronología y diferentes acontecimientos plasmados en ella, la Biblia pasa a tomar un

sentido más palpable, ubicando cada acontecimiento en una línea de tiempo es más fácil de

asimilar, comprender y entender.

Una ciencia que ayuda a entender el mundo del Antiguo Testamento es la Arqueología.

Entendiéndose esta como una fuente de historia que permanecía sin conocerse hasta que las

excavaciones realizadas la traen a la luz. Existe en primer lugar la Arqueología Bíblica que ayuda
a comprender el mensaje espiritual de los escritores bíblicos y ayuda a entender la Biblia.
También encontramos la Arqueología moderna y la prehistórica. Los Arqueólogos organizan sus

descubrimientos en un sistema de tres periodos llamados Edades de Piedra, de Bronce y de

Hierro. Para nuestra fe cristiana es de mucho valor cada uno de estos hallazgos de los
arqueólogos, pues afirma nuestras convicciones de la veracidad de la Biblia. Cada objeto, cada
ruina de ciudad encontrada que se menciona en la Biblia nos lleva a enraizar nuestra fe, y

podemos seguir afirmando que la Palabra de Dios es verdad y los sucesos allí relatados son

reales.

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A través de la lectura Bíblica podemos darnos cuenta cómo Israel imitó a sus vecinos paganos en

cuanto a adorar a dioses falsos. La religión era el corazón de la sociedad y estas religiones

paganas tenían en primer lugar muchos dioses. Junto a este politeísmo, adoraban imágenes

llevando a la idolatría, razón por la cual muchos líderes de Israel cayeron en diferentes

momentos de la historia. Solo el Dios de Israel era el único que no tenía un “imagen” para ser
adorada ni rendirle culto. En cuanto a la literatura en estas religiones paganas encontramos

“cosmogonías” que son respuestas ante preguntas como: ¿Quién soy?, ¿De dónde vengo? ¿Cómo

se pueden explicar el placer y el dolor? Existen cosmogonías egipcias, babilónicas y mitos

acerca del diluvio; estos, a su manera quieren dar respuestas a estas preguntas. También podemos

observar cómo cada religión tenía una creencia del más allá. A través de las preguntas
anteriormente escritas y el tema del más allá podemos ver cómo el hombre siempre se ha

interesado por estos asuntos sin importar la época de la historia en que se encuentren, y estas
preguntas son las que Dios ha usado a través de los tiempos para que el hombre responda ante Su

llamado.

Es sumamente importante conocer las culturas y pueblos que existían en el marco en el cual se

desarrolla el Antiguo Testamento. El conocerlas amplía la comprensión de textos bíblicos y

narraciones que quizás no se entenderían de la misma manera si no conocemos estas culturas.

Es interesante saber que en el Antiguo Testamento se menciona Egipto más de 550 veces. Fue

una nación próspera con desarrollo agrícola importante. Abraham llegó a Egipto durante el

periodo de hambre en Palestina y José fue llevado esclavo a Egipto como esclavo donde se
convirtió en el segundo en jerarquía después de faraón. A Egipto llegaron Jacob y su familia en
periodo también de hambre en Israel. Encontramos también a los babilonios y los asirios que

vivían en la Mesopotamia y fueron las que provocaron la caída de Israel y de Judá. Entre los

primeros Babilonios encontramos a Nimrod quien era nieto de Noé. Al conocer estos datos
podemos ponernos en contexto acerca del periodo histórico que se estaba viviendo mientras

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ocurrían los hechos bíblicos. Las prácticas religiosas de estos dos (babilonios y asirios), eran casi

iguales, en los templos se hacían sacrificios, se quemaba incienso y se celebraban festividades.

Otro pueblo eran los cananeos que vivían en Palestina antes que llegaran los israelitas. A través

de excavaciones y literatura encontrada se puede saber que realizaban rituales y sacrificios en los

templos y que la cultura era muy avanzada. Se puede tomar la Biblia como fuente de datos muy
precisos acerca de este pueblo que han sido confirmados por hallazgos arqueológicos.

Conocer también la cultura de los Persas es muy importante puesto que a este periodo

corresponden las narraciones de los libros de Ester, Nehemías, Daniel y Esdras, siendo un tiempo

de expansión que corresponde al último siglo de la historia del Antiguo Testamento.

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 CONCLUSIÓN

Es de gran ayuda como cristianos conocer en qué época de la historia se desarrollaron los
diferentes acontecimientos Bíblicos. Esto nos abre el entendimiento acerca de lo que los autores

de los diferentes libros escribieron bajo un correcto entendimiento de su cultura en general.

Definitivamente, este libro es uno de aquellos que cada cristiano debe leer por lo menos una vez

en su vida pues le ubicará en el contexto de los escritos del Antiguo Testamento. Después de

haberlo leído, he podido experimentar que, al leer el Antiguo Testamento, lo comprendo de

manera diferente.