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From: "Colegio de Abogados de Puerto Rico" <abogados@capr.

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Subject: Carta del Presidente a la Matricula
Date: February 7, 2011 2:59:59 PM EST
To: "Notificaciones" <abogados@capr.org>
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Colegio de Abogados de Puerto Rico

Lcdo. Osvaldo Toledo Martínez


Presidente

7 de febrero de 2011

Estimad@ colega:

Recibe un fraternal saludo de tu presidente.

Como Presidente del Colegio de Abogados de Puerto Rico, y en cumplimiento de mi obligación fiduciaria de mantenerte
informado de los asuntos del Colegio, procedo a comunicarme contigo sobre información de mucha importancia para ti
como abogado o abogada.

En el pleito de clase de Herbert W. Brown v. Colegio de Abogados de Puerto Rico, el administrador designado por el
Tribunal Federal (Brown v. Colegio de Abogados Administrator, PO BOX 2439 FARIBAULT MN 55021-9139) ya
comenzó a enviar las notificaciones para que aquéllos que decidan salirse de la “clase” lo informen por escrito a la
dirección postal antes indicada.

Si decides salirte de la “clase”, la notificación por correo tiene que ser recibida por el “Administrator” antes del 26 de
febrero de 2011.

Como te he explicado con anterioridad, el Colegio de Abogados no tiene el dinero para pagar la sentencia que se dictó
en su contra en el antes citado caso, lo que significa que perderíamos el edificio, la sede de tu Colegio en Miramar,
Puerto Rico.

En la medida en que los(as) colegas que estaban colegiados durante el período del 2002 al 2006 decidan
voluntariamente salirse de la “clase”, en esa misma medida se reduce el monto de la sentencia.

Dicha sentencia es el producto de la póliza del seguro de vida que el Colegio de Abogados pagó a favor de los
colegiados a las compañías Triple S y American International (AIG Life) y que se pagó con parte de la cuota que cada
colegiado(a) pagaba. El Colegio no se benefició en nada de dicho seguro.

Para el año 2002, en un caso instado por Carlos A. Romero, Hijo, en el Tribunal Federal, caso número 94-2503, se dictó
sentencia resolviendo que la compra del seguro de vida no era una actividad germana a la práctica de la profesión.
Como dicho pleito no era un pleito de clase, el Colegio decidió, para evitar incurrir en mayores gastos, no apelar la
sentencia y devolverle al objetor el importe de la prima.

El Colegio mantuvo el seguro de vida hasta el año 2006 ya que la mayoría de los abogados descansaban, para la
seguridad de sus familias si ellos fallecieran, en dicho seguro.

Te puedo asegurar con certeza matemática que el seguro de vida era una bendición para las familias de los abogados
pobres que fallecían y que las compañías de seguro contratadas pagaron el monto de la póliza a los beneficiarios
designados por los colegas que fallecieron.

Un breve recuento de la actividad del seguro de vida durante el período del 2002 al 2006 es la siguiente:

Año 2002
Colegas que fallecieron 62
Compañía aseguradora Triple S
Prima que se pagó $1,005,273.45
Beneficios pagados a las personas que
el(la) colegiado(a) designó como beneficiarias $930,008.63

Año 2003
Colegas que fallecieron 71
Compañía aseguradora Triple S y American
International
Prima que se pagó $982,168.83
Beneficios pagados a las personas que
el(la) colegiado(a) designó como beneficiarias $1,080,022.18

Año 2004
Colegas que fallecieron 82
Compañía aseguradora American International
Prima que se pagó $951,152.40
Beneficios pagados a las personas que
el(la) colegiado(a) designó como beneficiarias $1,260,000.00

Año 2005
Colegas que fallecieron 85
Compañía aseguradora American International
Prima que se pagó $975,142.70
Beneficios pagados a las personas que
el(la) colegiado(a) designó como beneficiarias $1,183,000.00

Año 2006
Colegas que fallecieron 65
Compañía aseguradora American International
Prima que se pagó $996,196.50
Beneficios pagados a las personas que
el(la) colegiado(a) designó como beneficiarias $845,000.00

Somos concientes de que el caso de Herbert W. Brown v. Colegio de Abogados de Puerto Rico fue autorizado como un
pleito de “clase” a pesar de que, siendo nosotros, los ABOGADOS Y ABOGADAS de Puerto Rico una “clase” claramente
identificable, no nos notificaron de la radicación del pleito a nombre nuestro —es decir, a nombre tuyo, a nombre mío, a
nombre de ninguno de los abogados y abogadas que conoces o son tus colegas y amigos—. Es por eso que ahora, que
te están notificando sobre el pleito, puedes decidir si deseas continuar en esa “clase” o salirte de la misma.

¡Salvemos al Colegio! Confío en tu respuesta pronta y solidaria.

Lic. Osvaldo Toledo Martínez


Presidente
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Lcdo. Osvaldo Toledo Martínez
Presidente

7 de febrero de 2011

Colegas:

Como miembro de un pleito de clase (Herbert Brown v. Colegio de Abogados de Puerto Rico) el cual yo no solicité, ni autoricé que me incluyeran he
procedido a salirme del mismo.

Para que conste acompaño copia de mi notificación al Administrador nombrando por Tribunal Federal, saliéndome de la clase .
Lic. Osvaldo Toledo Martínez
Presidente

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