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1.-si los socios no se proponen realizar personalmente el fin común u objeto social, si no
encomendarlo a un a un tercer financiero, controlado y vigilado, administrado por ellos mismos
2.- si, en el mismo orden de ideas, se hace necesaria la creación de un patrimonio autónomo, solo
destinado a la realización del objeto social
2. CONSECUENCIAS DE LA PERSONALIDAD
Para personas jurídicas de carácter privado, se rigen por sus respectivas leyes domésticas
de constitución (art. 2º.).
Las personas jurídicas constituidas en un Estado Parte, serán reconocidas en los demás
estados. (art. 3º.).
La capacidad de personas jurídicas será exclusivamente, la que reconozca la Ley del
Estado Parte donde se realicen tales actos. (art. 4.).
“Las personas morales pueden ejercitar todos los derechos que sean necesarios para realizar el
objeto de su institución” (art. 26, C. Civ.). Obviamente tales derechos comprenden los de índole
procesal. No pueden tener, en cambio, los derechos de ciudadanía ni derechos y deberes políticos.
1º A falta de un concepto legal, no queda sino echar la mano del parecer doctrinal, que lo
considera como el conjunto de derechos, atributos, obligaciones y cargas de una persona, actual o
potencialmente valuables en dinero.
2º las sociedades solo pueden ter un patrimonio, sin que importe el que sean titulares de varias
empresas.
3º dentro del patrimonio desempeña un papel de primera importancia el patrimonio neto, pues
contablemente determina su situación financiera y, de paso, el valor real de las partes sociales o
acciones, según el tipo social.
4º no pueden confundirse los conceptos de patrimonio y de capital social, por cuanto este es el
último es una mera cifra, formada por las aportaciones de los socios.
Las llamadas sociedades de personas actúan bajo razón social y las llamadas sociedades de
capitales operan bajo denominación social, mientras que las mixtas pueden operar bajo una u otra.
2.4 DOMICILIO SOCIAL
Es el lugar que los socios eligen para que la sociedad ejercite sus derechos y cumpla sus
obligaciones. No deben confundirse los conceptos de domicilio social y oficinas sociales. El primero
se refiere al municipio en que tiene su asiento legal la sociedad; el segundo, al local o locales en
que se encuentran las instalaciones de ella.
A falta de determinación del domicilio social, la ley reputa como domicilio de las personas morales
el lugar donde se halle establecida su administración (art. 33 CCDF). Sin embargo, las personas
morales, al igual que las físicas, pueden señalar domicilios convencionales para el cumplimiento de
determinadas obligaciones (art. 34 CCDF). Así mismo, en cuanto al domicilio de las sucursales o
agencias que establezca la sociedad, a falta de designación expresa, la ley considera que su
domicilio será el del lugar en que operen cuando éstas se encuentren establecidas en lugares
distintos de donde radica la casa matriz (art. 33, párrafo final, CCDF).
La facultad que tienen los socios para elegir el domicilio social puede dar lugar a que se le fije a la
sociedad un domicilio irreal. Este problema es contemplado por el art. 13 de la Ley de Quiebras y
Suspensión de Pagos, que previene que, en caso de irrealidad del domicilio del quebrado se tendrá
como tal el lugar en donde tenga el principal asiento de sus negocios.
Una vez otorgado el contrato social, se crea u amplia trama de relaciones sociedades-socios, que
plantean obligaciones y derechos e igualmente deberes recíprocos.
Las sociedades mercantiles tiene una personalidad jurídica diversa de la de sus socios, los
acreedores sociales carecen de todo derecho y acción en contra de los socios.
Las relaciones sociedad-socio pueden repercutir en las establecidas entre dicho socio y los
terceros, sean acreedores o deudores. Los acreedores pueden hacer efectivos sus derechos sobre
los créditos que el socio tenga en contra de la sociedad, y, como deudores, la sociedad podría
llegar a exigir de ellos las sumas que adeuden al socio.
La principal es efectuar las aportaciones al capital social, a tal punto que, de no efectuarlas en la
forma y términos convenidos, la sociedad tiene acción judicial contra el socio moroso, para
obligarlo al cumplimiento.
8. DOCUMENTO SOCIAL
El documento constitutivo de toda sociedad mercantil, así como sus reformas, deben otorgarse
ante notario o ante corredor público e inscribirse en el Registro Público de Comercio del domicilio
social, previo permiso de la Secretaría de Relaciones Exteriores.
ALUMNO:
MAESTRA:
Yamile Salomé Godoy Atala
MATERIA:
Derecho Mercantil
RESUMEN UNIDAD 7
FECHA:
23/02/2016